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Rock en directo:
Ei grupo Deep
Purpie en
Madrid. 1985.
ITOLOGÍA,
RITOS Y LEYENDAS
DEL 'ROCK'
DIEGO A. MANRIQUE
A lo largo de 52 capítulos, El País Semanal
se propone seguir la evolución de esa mú-
sica camaleónica que es el rock: Se sabe
que tiene una historia rica y complicada
(ver el cuadro que ocupa nuestras páginas
centrales); que se ha convertido en una
música internacional, señal de identidad
de varias generaciones; que constituye
una de las facetas más potentes de la in-
dustria del entretenimiento; que resulta un
indicador del cambio social, por su capa-
cidad para generar movimientos y marcar
pautas de conducta. Todo ello va a quedar
reflejado en las entregas de esta Historia
del rock. Pero antes de entrar en materia
conviene enfrentarse a algunos mitos que
circulan alrededor suyo: algunas falacias,
verdades a medias y simplificaciones que
distorsionan la comprensión cabal del
apasionante desarrollo del rock. Una cria- vedad- por y para jóvenes: el rock and
tura que no vino de París, sino de Mem- roll.
phis, y que tuvo padres pobres pero hon- Sin embargo, el rock and roll (mecer y
rados. rodar) existía antes de Elvis. Son abun-
dantes los ejemplos de discos anteriores,
ELVIS PRESLEY, INVENTOR DEL ROCK AND destinados al mercado del rhythm and
ROLL. El mito fundacional del rock tiene blues (término comercial que designa en
como piedra angular a Elvis Aaron Pres- los años cincuenta a la música popular ne- o he sido profesor y creo
ley. Es a los 19 años cuando, en compañía gra en todas sus variedades) o del country que no hay ninguna
del bajista Bill Black y el guitarrista and western (la música de la América rural diferencia entre dar
Scotty Moore, se encierra en el diminuto y blanca), que podrían pasar hoy por rock clases y estar encima de
estudio de grabación del sello Sun Re- and roll primitivo. El mismo término mecer un escenario. En ambos
cords, en Memphis (Tennessee, Estados y rodar describe la actividad sexual y apa- casos, se trata de
Unidos). Su propietario, Sam Phillips, rece en grabaciones de los años treinta y entretener a
gusta de proclamar que hay millones espe- posteriores. Su popularización correspon- delincuentes en potencia".
rando al que descubra a un cantante ca- de a Alan Freed, un locutor de Cleveland (Sting, bajista y
paz de combinar el blues negro y el country (EE UU) que descubre, a principios de los cantante).
blanco. Y eso es lo que ocurre en 1954, cincuenta, que esos sonidos de origen ne-
cuando Elvis registra That's alright mama, groide tienen gancho para un público emi-
una pieza del compositor e intérprete de nentemente blanco y juvenil. Su progra-
blues Arthur Crudup. Consigue una ver- ma, Rock'n'roll party (fiesta del Rock and
sión mucho más dinámica que la original, roll), prepara el camino para Elvis, catali-
demostrando una capacidad de síntesis, zador de la explosión de esa música en la
una sensualidad natural y una presencia segunda mitad de la década de los cin-
escénica que lo van a convertir en el rom- cuenta.
pehielos de una música hecha -gran no-
ESTÁ CONTROLADO POR HOMBRES ANÓNI-
MOS QUE DETERMINAN LOS GUSTOS DEL
CONSUMIDOR. El rock and roll se impone
por la fuerza a la industria del entreteni-
miento, que prefiere músicas más civiliza-
das y controlables. Lo que ocurre es que,
en su momento, las grandes compañías
aprenden de los pequeños sellos regiona-
les que impulsan el rock and roll y confec-
cionan un sustitutivo desleído, concebido
LAS NUEVAS TENDENCIAS SE CREAN EN LA CALLE,
Y LUEGO SON COMERCIALIZADAS POR LOS IMPERIOS DISCOGRÁFICOS
A
A. O. R. Iniciales de álbum- Filadelfia. Música soul de los
oriented rock o adult-oriented años setenta, adornada por
rock que definen a los pro- James Taylor (arriba, a la ricas orquestaciones. Sus ar-
ductos estereotipados que i zquierda) es un claro tífices son productores como
nacen para satisfacer las ex- ejemplo de un cantautor Thom Bell y la pareja Kenny
americano. Bob Dylan
pectativas de las radios de Gamble-Leon Huff, basados
(arriba, a la derecha) fue uno
FM más conservadoras. En Cantantes-compositores. Tra- en aquella ciudad norteame-
de los iniciadores de la
círculos puristas, un fuerte ducción del término singer- recuperación de temas ricana.
i nsulto. songwriter (se trata de dife- folclóricos y canciones
renciarlo del cantautor politi- combativas. Los Beatles Folk. A finales de los cin-
zado) que designa al solista (abajo) lograron que el cuenta, muchos universita-
B que canta su propio reperto-
rio, habitualmente en tono
rock and roll fuera admitido
no sólo por la mayoría de
rios que reniegan de la co-
mercialización del rock and
l os jóvenes de su época, sino
i ntimista e instrumentación roll empiezan a recuperar te-
también por capas sociales
Beat. La síntesis de las ramas moderadamente rockera. que consideraron al rock en mas folclóricos y canciones
blanca y negra del rock and Son sus portaestandartes sus inicios como una combativas de otras épocas,
roll realizada por grupos mú- personajes como James Tay- agresión. con la mejor intención y espí-
sico-vocales de cuatro o cin- l or y Carole King; su revela- ritu de cruzada. Punto de
co miembros en el Reino ción coincide con el redescu- partida para numerosos can-
Unido a principios de los se- brimiento de la sencilla -vida tantes-compo-sitores, la bri-
senta. En Liverpool, hogar de en el campo y el deseo de so- gada Dylan.
los Beatles, lo llaman Mersey luciones personalistas.
Beat, en referencia al río Folk-rock. Pasada la fiebre
Mersey. Country-rock. Emparentado del purismo, animados por el
con el anterior movimiento, i mpacto de los Beatles, mu-
Blues-rock. El blues eléctrico busca una coexistencia pací- chosfolkies se pasan a los ins-
interpretado con espectacu- fica entre la música country trumentos electrificados,
l aridad por chicos blancos (alimento espiritual de la combinando felizmente las
que creen tener el alma América rural, proletaria y sensibilidades del folk y el
negra. blanca) y el rock (pelos laros, rock. Dylan marca el ritmo.
"EL `RO CK' HA SIDO LA MÚSICA DEL DIABLO. N O PUEDES
CONVENCERME DE LO CONTRARIO". (David Bowie)
chillones y una estudiada ambigüedad sexual, ejemplarizada por un David Bowie Nuevos románticos. Brotan
en los clubes londinenses a
que se da a conocer como es- La música de baile de los por la irrupción del rock and principios de los ochenta,
trella glam. años 80 ha sido capaz de roll, descubren que pueden con pintas delirantes, mensa-
integrar elementos del rock, asegurarse ricas ventas lan- jes hedonistas y bailables so-
Grupos de chicas. Teledirigi- el tecno, o el soul, y de zando a chicos guapos con nidos sintéticos. Algunos
das por astutos productores lanzar a superestrellas como canciones inofensivas y pega- evolucionan, caso de Span-
Madonna (arriba, a la
y compositores, los girl groups josas. La fórmula se sigue' dau Ballet.
i zquierda). David Bowie (a su
aportan inocencia, frescura y aplicando con notable éxito.
derecha) jugó en sus inicios
romanticismo juvenil al pop
de los sesenta.
con una imagen de glamour
en la que destacaba la
ambigüedad sexual. Miles
Instrumentales. Para aplacar
las ansias de baile de los años
P
H Davis (abajo, a la derecha)
ha sido el jefe de filas del ~-
rock. A su izquierda, Fats
cincuenta, numerosos instru-
mentistas -guitarristas, or-
ganistas, saxofonistas, bate-
Phil Spector. Excéntrico per-
sonaje cuyo nombre es sinó-
Domino, ejemplo del sonido
rías- lanzan discos gracio- nimo de producciones wag-
de Nueva Orleáns.
Heavy. Volumen, desafío, sos e impactantes con gran nerianas, melodramas juve-
guitarreos heroicos, ritmos fortuna. Con excepción de niles en su más alta expre-
pesados, voces torturadas, los Ventures o los Shadows, sión. Domina las listas de
luces cegadoras, explosiones. son flores de temporada: venta durante los primeros
Inmortal en cuanto a popula- aparte de la new age music o sesenta y se retira; ha traba-
ridad. la fusión, el rock no prescinde jado luego con ex miembros
de las gargantas. de los Beatles o Leonard
Cohen.
LA
INSURRECCIÓN
JUVENIL
JAIME GONZALO
No debe extrañar que la aparición del rock
& roll, el primer síntoma de cultura estric-
tamente juvenil, escandalizase al mundo
adulto. Éste intuía que el control se le es-
taba escurriendo de las manos, que esa
"música del diablo" connotaba no sólo un
gigantesco ideograma sexual, sino tam-
bién la toma de conciencia de una capa so-
cial a la que hasta entonces se había veta-
do cualquier asomo de representatividad.
El rock, en Estados Unidos, vino a con-
firmar una generación, a poner orden en la
eclosión del fenómeno teenager (término
inglés que designa al grupo de individuos
comprendidos entre los 14 y los 20 años) y
a descubrir que existía una demanda para
cierta oferta que podía constituir un sucu-
lento mercado. Probablemente fue ésta, y
no otra, la razón de su supervivencia. Era
un negocio que palpitaba a un compás in-
falible, regularmente abastecido por una
clientela fija que se iría renovando hasta el
final de los tiempos y a la que, en todo
caso, siempre se podría satisfacer introdu-
ciendo ligeras modificaciones. El adoles-
cente era reconocido desde el momento en
que se descubría su potencial como consu-
midor.
Hasta 1945, su repercusión como
miembro de la sociedad norteamericana
fue prácticamente nula. Un ciudadano pa-
sivo cuya única función aceptada estriba-
ba en continuar mansamente enfrascado
en las tareas escolares. Terriblemente
aburrido.
Pero, mientras sus hermanos mayores
combatían en ultramar, algunos decidie-
ron desafiar las reglas. La primera grieta
LAS
RAÍCES DIEGO A. MANRIQUE
No pensaba Thomas Alva Edison en alte-
rar la historia de la música cuando consi-
guió la patente número 200.521 para su fo-
nógrafo o máquina parlante. Hombre prác-
tico, consideraba que su invento tendría
aplicaciones en el mundo de los negocios;
todo lo más, como un juguete. Sin embar-
go, su mágico aparato no tardó en hacer
sentir su presencia. Hasta principios de
McKinley Morganfield, este siglo, la música se difundió a través
conocido en el mundo de partituras. No era una simple actividad
del blues como Muddy artesanal: se podían despachar millones
Waters, formó parte del de copias de temas populares en países
grupo de músicos como Estados Unidos, que contaba con
afincado en Chicago un inmenso parque de pianos.
que introdujo en el blues
dosis masivas de un En 1903 ya era posible comprar una
ritmo duro. placa del cantante de ópera Enrico Caru-
so cantando Vesti la giubba, de Leoncava-
llo; dicen que fue la primera grabación que
superó el millón de ejemplares vendidos.
¡ Gran sensación! Los locales públicos,
donde se interpretaban las canciones de
moda, sintieron que se escapaba su exclu-
sividad e hicieron circular unos carteles N
EN EL PERÍODO 1940-1955, EL ARTISTA MÁS POPULAR
DE ESTADOS UNIDOS ES BING CROSBY
LA CUNA DE
LA INDUSTRIA
JOSÉ RAMÓN RUBIO
El término canción popular, que entre no-
sotros es ambiguo y sirve lo mismo -o in-
cluso mejor- para un tema de un cantau-
tor suramericano que para Begin the begui-
ne o una composición de los Rolling Sto-
nes, tiene en los países de habla inglesa, y
sobre todo en Estados Unidos, un signifi-
cado más preciso, que suele venir asocia-
do con la denominación Tin Pan Alley (El
Callejón de la Sartén de Latón).
Es un lenguaje musical típicamente
norteamericano. Aunque sus orígenes se
remontan al siglo pasado, con composito-
res como Stephen Foster, se generalizó en
la década de los veinte, bautizada era del
jazz por el novelista Scott Fitzgerald. La
época había hecho de saltarse las prohibi- fueran también espléndidos intérpretes.
ciones su deporte favorito. Nada tan ade- Pero en la canción popular norteamerica-
cuado para ella como esta música, fruto na no está tan marcada la faceta de expre-
de la incorporación de las innovaciones de sión personal que llegó luego con el rock, y
los negros a la dominante música blanca. no digamos con la canción protesta. Una o me lo paso bien con el
A mediados de los años veinte se cono- canción de Porter o Berlin, sin perder el champaña. / El simple alcohol no
cía como Tin Pan Alley un lugar concreto sello característico de su autor, puede me emociona. / Así que
de la ciudad de Nueva York, el tramo de la aparecer en una película, ser cantada por explícame la razón / de que me lo
Séptima Avenida comprendido entre las Frank Sinatra o Ella Fitzgerald o servir de pase bien contigo. / Algunos se
calles 48 y 52. Allí estaban las principales base para la improvisación de un músico l o pasan bien con la cocaína. /
compañías editoras de música. Éstas en- de jazz de cualquier estilo. Estoy seguro de que si tomara
cargaban o compraban las canciones a sus La aportación principal de los autores una esnifada más / también me
autores, las publicaban y se encargaban de canción popular norteamericana es el aburriría terriblemente. / Sin
de su comercialización. Hoy el género se denominado standard de 32 compases. Su embargo, me lo paso bien
ha difundido de tal forma que Tin Pan fórmula más usual consta de una primera contigo".
Alley es una calle simbólica, que empieza parte A, de ocho compases, que se repite
en Broadway y cruza todo Estados Uni- dos veces; sigue una sección B, también de (1 get a kick out of you, canción
dos, para llegar hasta Hollywood. ocho compases, que es conocida como de Cole Porter.)
El nombre Tin Pan Alley se utiliza con puente, release o parte media, y acaba el es-
frecuencia para identificar creaciones quema de nuevo con la sección A, pero
edulcoradas; sin embargo, el género ha esta vez expuesta una sola vez. Es común
sido lo bastante amplio como para abar- decir que, para que la canción resulte me-
car desde canciones vulgares hasta com- jor, conviene que la parte media esté en
posiciones de autores como Leonard una tonalidad muy diferente de la sección
Bernstein y obras de George Gershwin y principal; la regla admite excepciones, y
Jerome Kern que no hubieran sido desde- un ejemplo preclaro de este tipo de can-
ñadas por todo un Brahms. Gershwin y ción, Over the rainbow, tiene el puente en la
Kern, junto a Irving Berlin, Cole Porter y misma tonalidad que la parte A.
Richard Rodgers constituyen el quinteto Un autor de la importancia de Theodor
de oro de esta música. Pero ha habido y W. Adorno desautorizó este género de
hay otros más, desde Vincent Youmans a canción precisamente por seguir siempre
Stephen Sondheim, pasando por Harold el mismo esquema y tener siempre el mis-
Arlen, Harry Warren, Vernon Duke... mo número de compases. La crítica, ade-
Y es que esta música es, ante todo, una más de no ser exacta, es tan peculiar como
música de compositores, por más que al- decir que los sonetos no valen nada por-
gunos de éstos -el propio Arlen, Hoagy que tienen siempre 14 versos y están siem-
Carmichael, por no decir Fats Waller- pre organizados de la misma forma.
"LAS TROVAS DE LOS NEGROS TIENEN ALGO QUE
VA DIRECTAMENTE AL CORAZÓN" (Henry James)
N
nessee, obtuvo grandes éxitos entre 1920 y
1930. Murió en 1937, desangrada tras ser
o quiero que seas una atropellada por un automóvil y no ser
esclava. / No quiero que trabajes aceptada en ningún hospital por su condi-
todo el día. / No quiero que ción de negra. Su estilo desgarrado y origi-
l aves mi ropa. / No quiero tenerte nal influyó decisivamente en otras grandes
encerrada. / Todo lo que quiero cantantes como Billie Holliday o, más tar-
es hacer el amor contigo". de, Janis Joplin.
En el terreno masculino, los artistas
(1 just want to make love to you, 'E `BLUES', fueron muy numerosos. Los estilos varia-
canción de Willie Dixon, ban según las áreas en que se interpreta-
i nterpretada por Muddy `GOSPEL' Y ban, siendo los Estados más prolíficos en
Waters.) i ntérpretes de blues l os de Misisipí, Tejas,
Alabama y Georgia. Muchos de ellos han
`COUNTRY' sido olvidados y otros no trascendieron,
pero está claro que el blues posee una de
LUIS MARIO QUINTANA las más completas discografias de todas
Los orígenes del rock and roll hay que ras- las músicas folk del mundo (el diccionario
trearlos en el sur de Estados Unidos, la Blues & gospel records (1902-1943), de Di-
cuna del blues y del country. El blues es una xon y Godrich, tiene 900 páginas de apre-
de las expresiones de la minoría negra tado texto).
norteamericana, en la que el artista plan- Entre todos esos pioneros no se puede
tea sus problemas amorosos o se lamenta olvidar a W.'C. Handy (1873-1958), un
de la falta de libertad, el hambre o las en- gran compositor, responsable de St. Louis
fermedades. Los primeros negros que lle- blues; Blind Lemon Jefferson (1883-1930);
garon a Norteamérica conservaban sus Huddie Leadbetter, alias Leadbelly (Panza
ritmos africanos, que, al entrar en contac- de Plomo) (1885-1949); Charley Patton
to con los blancos, dieron paso a nuevas (1887-1934); Bukka White (1909-1977);
"EL `RYTHM & BLUES' TUVO UN HIJO, Y LO
LLAMARON `ROCK AND ROLL" (Muddy Waters)
(1898-1979), y una prima de Sarah llama- Waiting for a train o Peach picking time in
da Maybelle Addington (1909-1978), to- Georgia. Consiguió una masiva populari-
dos procedentes del Estado sureño de Vir- dad, que le podía equiparar perfectamente
ginia. Durante los años veinte fueron un con los músicos que vivían y grababan en
Hubo un tiempo en que yo grupo estrictamente local, pero en agosto el norte del país. Su muerte se produjo en
construía ferrocarriles. / Hacía de 1927 grabaron sus primeras canciones 1933 a causa de la tuberculosis.
que funcionaran los trenes. / para el sello Victor. El papel de Jimmie Rodgers en la músi-
Que compitieran con el tiempo. / En ese momento comenzó su verdade- ca country de los años veinte y treinta lo
Hubo un tiempo en que yo ra carrera, en la que destacaron sus cuida- desempeñó Hank Williams en los años
construía ferrocarriles. / Pero eso dosos arreglos vocales sobre composicio- cuarenta. Nació en Mt. Olive (Alabama)
ya se ha acabado. / Hermano, nes que A. P. había encontrado buceando en 1923, y a los 14 años ya había ganado
¿te sobra una moneda?". entre todo tipo de fuentes. Así surgieron un concurso de músicos aficionados con el
temas como River of Jordan, Wildwood flo seudónimo de The Singing Kid. Tras mu-
(Brother, can you spare a dime", wer, Keep on the sunny side o Will the circle chos avatares, y con su grupo The Drifting
canción de la Depresión be unbroken. El trío se deshizo en 1943. Sa- Cowboys (Los Vaqueros Errantes), co-
compuesta por Jay Gorney.) rah ya se había divorciado en 1932 de A. menzó a grabar en 1947 para la rama dis-
P. y se había casado de nuevo en 1939. cográfica de la Metro Goldwyn-Mayer
Los hijos de Sarah y A. P., Gladys, Janette ( MGM). Creó un repertorio que ha sido la
y Joe, llegaron a grabar algunas canciones, base para prácticamente todos los artistas
mientras que por la parte de Maybelle la posteriores de este género.
actividad fue más intensa; actuó con sus Desde su primer tema, Move it on over
hijas Hellen, June (que se casaría con el (1947), hasta el clásico Jambalaya (1952),
cantante Johnny Cash) y Anita. Gracias al grabó piezas muy populares, como Honky
enorme tirón de su yerno Cash, Maybelle tonkin', I'm a long gone daddy, Hey good
siguió tocando en olor de multitudes. lookin, Your cheatin heart, o Lovesick
Se conoce a Jimmie Rodgers como el blues. Todo acabó para él el día de Año
padre de la moderna música country, y su Nuevo de 1953, cuando fue encontrado
estilo relajado y caliente fue un acicate muerto en su Cadillac, víctima de una so-
para un gran número de cantantes de ese bredosis de alcohol y pastillas. Continua-
estilo, como Ernest Tubb, Hank Snow o dor directo de su música es su hijo, Hank
Merle Haggard. Rodgers había nacido en Williams Jr. a
1897, en Meridian (Misisipí), y durante la
época en que grabó (1927-1933) dejó pie-
zas maestras como Mississippi river blues,
LA DEPRESIÓN DE 1929 DISMINUYÓ LAS VENTAS
DE DISCOS DE 110 MILLONES A 600.000 EJEMPLARES
JOHNNIE RAY
EL CHICO ALTO QUE LLORABA
LUIS MARIO QUINTANA
A caballo entre la época de los crooners
-cantantes clásicos al estilo Sinatra- y
la eclosión del rock and roll, que se pro-
dujo en los primeros cincuenta, Johnnie
Alvin Ray (1927) fue uno de los primeros
solistas que supo utilizar hábilmente al-
gunos trucos para obtener una imagen
que le asegurara éxitos de ventas y un lu-
gar cómodo en la escena norteamerica-
na. Su enorme popularidad se cimentó
en lo histriónico de su espectáculo. Más
que cantar, lloraba las canciones, se re-
torcía en el escenario, daba saltitos o se
abría la camisa. Aveces era patético, y
este aspecto parece ser que no era un
truco; era más una consecuencia de su
enorme facilidad para sentir las palabras
que cantaba. Johnnie Ray no se limitaba
a aprenderse la letra: se identificaba al
máximo con ella. Por todo esto se ganó a
pulso algunos apelativos como El Llorón,
El Príncipe de los Lamentos, El Líder de
las Lágrimas o El Sultán del Sollozo. llón de copias, una cifra importante para perfecto para su voz lastimera, que tam-
Ray era descendiente de los indios la época, y estuvo en lo más alto de las bién quedaba arropada por los coros del
pies negros. Había nacido en Dallas listas durante casi tres meses en 1952. grupo Four Lads (Los Cuatro Mozos).
(Oregón) el 10 de enero de 1927. A causa Johnnie Ray era un cantante bastante Su éxito fue fulminante. Ray fue incluso
de un accidente quedó medio sordo a los corto de facultades vocales, y como com- comprendido y apoyado por el público
nueve años, lo que le obligó a usar un so- positor tampoco destacaba -componía negro, que le incluía constantemente en
notone, aunque este detalle no influyó en poco y sus canciones seguían una línea las listas de rhythm and blues, coto reser-
absoluto en su carrera posterior. A los clásica y poco imaginativa-. Pero nadie vado a los intérpretes de color.
15 años apareció en un programa para cuestionaba la capacidad de entrega en Después del gran éxito de Cry llega-
jóvenes promesas en Portland (Oregón), el escenario del Príncipe de los Lamentos. ron otros muchos. En el año 1953, Here I
y dos años después buscó trabajo por la De hecho, Johnnie Ray fue de los prime- am brokenhearted; en 1955, Ifyou believe,
zona de Los Ángeles, primero como ca- ros intérpretes que consiguió volver lo- Paths of paradise, Hernando's hideaway,
marero y luego como extra en películas. cas a sus fans, que organizaban escanda- Hey there, Song of the dreamer y Who's
Por último, se convirtió en pianista habi- losas escenas en aeropuertos, hoteles y sorry now; en 1956, Ain't misbehavin, Jusi
tual de un night-club. En 1951 viajó a De- locales. walking in the rain y You don t owe me a
troit, y logró ser la atracción del club Sus canciones tenían un acompaña- thing, y en 1957, Yes tonight Josephine y
Flame, un lugar que recogía a los jóvenes miento rítmico muy básico, el soporte Build your love.
talentos en busca de oportunidades. El Algunos incidentes de su vida priva-
pinchadiscos de aquel lugar, Robin Sey- da, muy aireados por la Prensa conser-
mour, convenció a la casa discográfica vadora, lo obligaron a retirarse tempo-
Columbia para que grabase las cancio- ralmente: no era nada cómodo ser califi-
nes de Johnny Ray, que se empezaron a cado como homosexual en aquella épo-
HISTORIA DEL `ROCK' ca. Se alejó de la escena, acosado por los
publicar en su sello Okeh (pionero de la
i ndustria en el terreno del blues y más rumores, después de haber obtenido
tarde del jazz, gospel y pop). PRÓXIMO HÚMERO grandes éxitos internacionales y de ha-
Su segundo disco sencillo lo compo- ber realizado numerosas giras. Desde
nían dos canciones: Cry y The little white entonces, sus apariciones públicas han
cloud that cried (Llora y La pequeña nube sido esporádicas, ante públicos nostálgi-
blanca que lloraba). Fue su despegue defi- LOS 'TEENAGERS' cos que recuerdan la leyenda de aquel
nitivo hacia la fama. Vendió más del mi- chico alto.d e Oregón que lloraba.
ELPAIS
HISTORIA DEL `ROCK'
En el mundo anglosajón, los teenagers son los jóvenes entre
los 13 y los 19 años (números que en inglés terminan en
teen). En los cincuenta, ése fue el sector social cuya pasión
sirvió de combustible para entronizar al actor James Dean
como arquetipo juvenil -a partir sobre todo de su película
Rebelde sin causa- y convertir al rock and roll en el sonido
dominante. El mayor poder adquisitivo de los jóvenes no
pasó inadvertido para algunos astutos managers y otros di-
rectivos de la industria del entretenimiento. Desde fmales de
los sesenta, el rock ha ampliado su público tanto por arriba como por debajo de
esas edades, pero mantiene la fantasía musical hecha por y para adolescentes, que
necesitan el reflejo de unos años cargados de choques emocionales.
EL `ROCK AND ROLL' FUE ADOPTADO COMO MÚSICA PROPIA POR JÓVENES QUE
QUERÍAN DIFERENCIARSE DE LOS ADULTOS
os
TEENAGERS'
El coche, con sus
connotaciones de
i ndependencia, velocidad y
l ugar para el amor, es uno de los
símbolos de la emancipación
económica de los teenegers de
l a década de los cincuenta.
Los automóviles fueron también
i nspiración para numerosas
canciones de rock and roll,
ejemplarizadas por Nadine,
Mabellene o No particular place
to go, de Chuck Berry.
12
"EL 'ROCK AND ROLL' ES UNA ENFERMEDAD CONTAGIOSA",
(Aparecido en `The New York Times', 1956)
os
FELICES AÑOS Alan Freed,
CINCUENTA discjockey
de radio,
hizo suyo
en sus
programas
DIEGO A. MANRIQUE el término
Hablemos de una tierra feliz. La II Guerra rock and
Mundial había concluido con los hongos roll.
atómicos de Hiroshima y Nagasaki, pero
el alivio de la victoria, que dejaba a Esta- dido el favor del público con el cisma del
dos Unidos en una posición hegemónica, be bop. Dominaban los crooners, cantantes
escondió el horror de aquella visión apo- suaves que cincelaban románticas odas al
calíptica de cuerpos desintegrados y calles amor. Podían ser pulcros chicos de origen
aplanadas. Al fervor patriótico de la lucha italiano, como Perry Como o Frank Sina-
antifascista siguió la histeria anticomunis- tra, o negritos refinados como Nat King
ta, azuzada por personajes como el sena- Cole, antiguo pianista de jazz pasado a las
dor McCarthy, cuyos métodos intimidato- baladas. La industria musical estaba con-
rios terminaron siendo reprobados oficial- trolada por grandes compañías, dirigidas
mente. La perfecta sonrisa del presidente por hombres dignos y respetables, que
LaVern Baker. Einsenhower tranquilizaba cualquier te- vendían canciones y artistas libres de toda
mor: América era próspera y podía man- sospecha. Su brazo editorial era la AS-
tener a raya a sus enemigos interiores o CAP (Sociedad Americana de Composi-
exteriores. tores, Autores y Editores), que monopoli-
Sin embargo, no todo era tan radiante zaba a los genios de Tin Pan Alley y sus
Una, dos, las tres, el rock como hacían suponer los reportajes gráfi- i mitadores.
de las cuatro, / cinco, seis, las cos de Life, las películas de Vincente Min- La ASCAP tenía una relación tormen-
nelli o las ilustraciones de Norman Rock- tosa con las emisoras de radio, que tam-
siete, el rock de las ocho, / well. Se apreciaban algunos movimientos
nueve, diez, las once, el rock de bién contaban con su propia asociación
las doce. / ¡Vamos a de descontento, de insatisfacción. Un gru- editorial, BMI (Broadcast Music Incorpo-
rockanrolear sin parar esta po de escritores -la beat generation- rated). Una disputa sobre los derechos de
quería palpar la América oculta. Los ciu- radiación hizo que las emisoras prescin-
noche!". dadanos negros de Montgomery (Alaba- dieran temporalmente de las canciones de
ma) se atrevían en 1955 a boicotear los ASCAP para programar piezas de BMI,
(introducción de Rock around autobuses municipales en protesta contra
the clock, BiII Haley.) que no era tan exclusivista a la hora de
la segregación racial. James Dean y Mar- aceptar afiliados: estaba abierta a músicos
Ion Brando expresaban sin palabras una del campo o de los barrios feos de las ciu-
irritación que atraía a millones de jóvenes. dades. En los últimos cuarenta y primeros
Los teenagers. No tenían todavía una cincuenta, un número creciente de norte-
identidad (modas, bailes, comportamien- americanos descubrió con placer la exis-
tos, sonidos) definida, pero prosperaban tencia de esos sonidos que la industria
gracias a unas circunstancias económicas marginaba, como rhythm and blues o coun-
favorables, una educación liberalizada try and western. Algunos muchachos del
por las enseñanzas del doctor Benjamin Norte se habían aficionado durante la
Spock, el optimismo de unos descubri- guerra a las canciones que interpretaban
mientos científicos que garantizaban una sus compañeros sureños, aunque lo habi-
vida más cómoda o el maravilloso invento tual era que la revelación llegara a través
de esa radio con imágenes que llamaban
televisión.
La música también vivía un período
plácido. La guerra había dado un golpe
mortal a la era de las grandes orquestas: el
reclutamiento diezmó sus filas, murieron
hombres como Glenn Miller y los vocalis-
tas terminaron por eclipsar a los directo-
res de las big bands. El jazz puro había per-
"EL `ROCK' ES UN MEDIO PARA REBAJAR AL HOMBRE BLANCO AL NIVEL
DEL NEGRO" (Consejo de Ciudadanos Blancos de Alabama, 1956)
De los Marion
Brando, James Dean o
Sal Mineo de los
cincuenta sólo queda el
primero, un señor
inmenso que cobra
inmensas fortunas por
escasos minutos de
aparición en pantalla.
Dean y Mineo, cada uno
en su estilo,
consiguieron aunar la
vida y la muerte real
con las de sus
personajes. Tras ellos
llegaron los Richard
Gere, Mickey Rourke o
Matt Dillon, entre otros.
El mecanismo
comercial sabe que los
jóvenes
-importantísimos
espectadores de
cine- gustan de
reconocerse en la
pantalla, o, cuando
menos, de reconocer
lo que habrían podido ser
si en lugar de hacer
caso a la razón se lo
hubieran hecho al
sentimiento.
HÉROES
DE CELULOIDE
ÁNGEL S. HARGUINDEY
Cine y música fueron complementarios
desde que ambas artes decidieron conver
tirse en industrias, trascender los reduci-
dos círculos elitistas y lanzarse descara-
damente a la conquista de los mercados.
Si en el comienzo de los años cincuenta el
rock se convertía en el emblema musical
de una generación, la cinematografia no le
fue a la zaga y lanzó al estrellato a dos de
sus símbolos más influyentes y carismáti-
cos: el Marlon Brando de ¡Salvaje! (The
wild one), de Laszlo Benedeck, realizada
en 1954, y el James Dean de Rebelde sin
causa (Rebel without a cause), firmada por
Nicholas Ray en 1955.
Los jóvenes del imperio podían escu-
char a sus novísimos ídolos en el pick-up o
irse al cine a contemplar a los nuevos hé- jes estaba el origen de un estilo de vida mi- Natalie Wood y James Dean,
roes del asfalto y la mecánica. Motos, co- noritario pero apasionado y en ocasiones en una escena de Rebeldes sin
ches, blue jeans, zamarras de cuero, la brutal. causa.
nueva iconografia urbana comenzaba su Con el paso de los años aquellos enlo-
despegue hacia las masas mientras en lite- quecidos de las Harley Davidson queda-
ratura, por ejemplo, se publicaba El guar- ron relegados a extras cualificados de vi-
dián entre el centeno, de Salinger. Era la ex- deoclips heavies, pero ésa es otra historia.
plosión de los argumentos iniciáticos. Un En cualquier caso, el que mejor contó la
público juvenil incipientemente consumis- historia de los Ángeles del Infierno fue ames Dean, James
ta comenzaba a pagar por reconocerse, Humther S. Thompson en su libro-repor- Dean. / Yo sé justo lo que tú
por encontrar sus propias raíces o cuando taje editado por Anagrama. quieres decir. / James
menos por admirar a quienes en su nom- James Dean, Natalie Wood y Sal Mí- Dean, lo dijiste tan claro / y sé
bre se convertían en el prototipo del com- neo protagonizaban la otra gran película que mi vida sería perfecta /
portamiento ansiado. Era también, o po- sobre la rebeldía juvenil. Una pequeña lo- si pudiera verla en la pantalla
día ser, una respuesta colectiva e incons- calidad, tres jóvenes incomprendidos por plateada / (...) James Dean,
ciente a unos años en los que la mentali- sus padres o fruto de un matrimonio di- James Dean, / viviste
dad de la victoria guerrera imperante de- vorciado, carreras de coches al borde del demasiado rápido, /
jaba entrever el dogmatismo de la caza de abismo y un planetario fascinante que ex- moriste demasiado joven.
brujas. plicaría, en buena medida, las largas colas ¡ Adiós!"
Marlon Brando y su moto arrasaban del de Madrid. El cuero dejaba paso a los
una pequeña localidad provinciana, arro- blue jeans, pero en los dos filmes existía la (James Dean, canción de
pado por su chaqueta de cuero y, sobre misma solidaridad con una generación Browne-Souther-Henley- Frey,
todo, por sus correligionarios. Años des- que no había participado en la II Guerra grabada por Eagles, 1974.)
pués, superado el traumatismo de Marceli- Mundial y que no sabía nada de la canti-
no, pan y vino, nos enteraríamos por estos dad de guerras que se les avecinaban.
pagos de lo que eran los Ángeles del In-
fierno. En Brando y sus muchachos salva- Desde los cincuenta a hoy la filmografia sobre juventudes rebeldes se convirtió
en uno de los géneros más abundantes.
Musicales tipo West Side story o Calles de
fuego; películas de pandilleros entre las
que sobresalen filmes como Warriors o
The wanderers, sin olvidarse de Outsiders o
La ley de la calle, del tándem Coppola-
Hinton, y un amplísimo etcétera, llena-
ron y llenan las pantallas de todo el
mundo.
"EL `ROCK' ES LA MÚSICA DE LOS FRUSTRADOS Y LOS INSATISFECHOS
QUE BUSCAN UNA PANACEA" (Pete Townshend)
Glenn Ford, en una escena de la zas salariales nunca vistas antes. Pero, si-
película Semilla de maldad (1955), de multáneamente, el número de jóvenes dis-
Richard Brooks. minuía: a consecuencia de las bajas natali-
dades de los treinta, y por primera vez en
la historia, los jóvenes, lejos de sobrar,
como venía siendo la regla, escaseaban.
La combinación de esos factores tuvo
como consecuencia una elevación de los
salarios pagados a los jóvenes, superior a
la elevación salarial media.
La nueva capacidad de compra de los
jóvenes no pasó inadvertida para los téc-
nicos de mercadotecnia. Y toda una ro-
busta oferta de bienes de consumo, espe-
cíficamente dirigida a satisfacer las nue-
vas demandas juveniles, surgió en segui-
da. Dado que la juventud es la edad en
que, por carecerse todavía de responsabi-
lidades familiares, de mayores excedentes
de tiempo libre se dispone, toda una nueva
industria del ocio pudo hacer su aparición:
"Recuerdo el día que fui a ver cine, música, radio, televisión, Prensa,
Semilla de maldad (The ropa, viajes, deporte, etcétera, alcanzaron
blackboard jungle). Cuando auges increíbles.
l os créditos aparecieron en La experimentación, la innovación, la
pantalla, Bill Haley y sus inventiva, las nuevas iniciativas, la asun-
Comets empezaron a cantar
Rock around the clock. Era la
A ción de riesgos y demás características del
espíritu de aventura asociado a la caren-
música más fuerte que los
jóvenes habíamos EMANCIPACIÓN cia de intereses contraídos por los jóve-
nes, proliferaron por doquier, especial-
escuchado. En pequeñas mente en el campo de la industria de la co-
habitaciones de todos los
rincones de Estados Unidos, los
JUVENIL municación: Marilyn Monroe, James
Dean, el rock and roll y toda la nueva cul-
chicos habían estado ENRIQUE GIL CALVO tura juvenil (simbolizada por la adopción
acurrucados al lado de viejas Se puede recordar a la juventud norte- del pantalón vaquero como prenda emble-
radios y tocadiscos baratos americana como protagonista de una épo- máticamente joven), lo representan de
escuchando la música sucia que ca en la que una nueva generación accedió modo inmejorable.
representaba su estilo de al primer plano de la actualidad al prota- La relación de fuerzas vigente hasta
vida: 'Ve a tu cuarto si quieres gonizar el baby boom o explosión de la na- entonces entre adultos y jóvenes, todavía
oír esa porquería... y pon el talidad. Imperaban por entonces, entre heredera del vínculo feudal entre maes-
volumen lo más bajo posible'. 1945 y 1960, unas pautas de conducta que tros y aprendices, se quebró súbitamente.
Pero en el cine, viendo eran herederas de la crisis de los treinta, Gracias a su nueva soberanía económica,
Semilla de maldad, no te podían por las que la gente prefería casarse poco los jóvenes ganaron independencia sufi-
decir que bajaras el volumen. y tarde, negándose a tener más de un hijo ciente para dejar de obedecer como
Estaban tocando el himno apenas. Pero los jóvenes que surgían cam- aprendices las órdenes de los mayores.
nacional de los jóvenes y biaron esto: empezaron a casarse muchos Así surgió lo que se llamó conflicto gene-
sonaba tan alto que yo estaba más y mucho antes, empeñándose en te- racional y rebeldía juvenil. En suma, y por
pegando saltos. Semilla de ner más de tres hijos la mayoría. primera vez en la historia, los jóvenes ad-
maldad, sin considerar el La imagen de la madre feliz rodeada de quirieron presencia social, capacidad de
argumento (que dejaba que bebés volvió a ponerse de moda. Y no era iniciativa, protagonismo ante la opinión
l os viejos ganaran al final), sólo eso: además de redescubrir los place- pública, peso político, voluntad reivindi-
representaba un caso res del matrimonio y la procreación, los cativa...
extraño de apoyo a la causa de jóvenes norteamericanos de los cincuenta ¿Qué queda ahora de aquella época?
los jóvenes: 'Han hecho una inventaron el rock and roll, crearon toda Queda el pantalón vaquero, además de la
película sobre nosotros; por una mitología juvenil e impusieron la dic- memoria fetichista, más o menos fosiliza-
tanto, existimos". tadura de la juventud; ya nada volvió a ser da. El pantalón vaquero, ropa de trabajo
como era. ¿Qué había ocurrido para que que simboliza el enriquecimiento de todo
(Frank Zappa, que tenía 15 cambiase tanto el panorama? orden que, gracias a su salario, pudieron
años en 1955.) Sencillamente, se había elevado mucho lograr los jóvenes de los cincuenta en Es-
la renta juvenil. Hasta entonces la juven- tados Unidos (y de los sesenta en
tud parecía no existir, ya que carecía de Europa).
ingresos suficientes. Pero los jóvenes de
los cincuenta, en EE UU, se hicieron ricos
muy de prisa. Por dos razones. Ante todo,
por la inmejorable coyuntura económica,
que generó un enorme incremento en el
número de empleos disponibles y unas al-
"DICEN QUE MIENTO, PERO PARA MÍ ES MÁS BIEN COLOREAR
LA REALIDAD" (Irving Azoff, 'manager' de los años setenta)
B ILL HALEY
EL PODER DE LA INTUICIÓN
DIEGO A. MANRIQUE
Bill Haley es una de las más fascinantes
anomalías del rock and roll. A diferencia
de la mayor parte de los pioneros, no ve-
nía del Sur (nació, en 1927, cerca de De-
troit), carecía de sez appeal y ya era un
profesional cuando la bola empezó a ro-
dar. Su primer amor fue el country, que
tocó con grupos como The Four Aces o
Sweing y The Saddlemen, con los que
grabó a partir de 1948 sin mucha fortu-
na. Fue en Filadelfia y en 1951 cuando,
influido por los sonidos negros que tanto
gustaban en la ciudad, grabó una exci-
tante versión de Rocket 88, pieza del sa-
xofonista Jackie Brenston.
Su grupo, que en 1953 se rebautizaría
como The Comets, acentuaba los ritmos,
aprovechaba el tono metálico de las gui-
tarras y exploraba las posibilidades per-
cusivas del contrabajo. Haley cantaba lícula, los adolescentes se abalanzaron exilio dorado. En Europa se le recibió
canciones del gueto y usaba alegremente sobre Rock around the clock. El disco es- como a un monarca, provocando altera-
l a jerga negra, pero tenía una voz blanca: tuvo dos meses en el número uno de las ciones del orden público en el Reino
se le entendía todo (y bien se cuidaba listas norteamericanas, y dicen que sus Unido -donde Semilla de maldad llegó
Haley de obviar las letras de contenido ventas mundiales han llegado hoy a los a estar prohibida en algunas ciudades-
escabroso). Posteriormente, el cantante 20 millones de copias. Haley, rechoncho y la República Federal de Alemania.
explicó que no había ningún plan de y maduro, con su eterno ricito sobre la Terminó grabando para el sello mexica-
mezclar diferentes estilos, que todo fue frente, se encontró encabezando giras y no Orfeón y posteriormente con la com-
una concatenación de casualidades. películas, e inspirando escenas de de- pañía sueca Sonet. No le faltaron actua-
Aunque los Comets seguían presentán- lirio. ciones: en los sesenta y setenta, nuevas
dose en público con atuendos vaqueros, Con una nueva versión de los Co- generaciones descubrían el frenesí del
iban incluyendo en su repertorio temas mets, Haley se contorsionaba discreta- rock and roll y allí estaba Haley dispuesto
negroides, comprobando que funciona- mente mientras su saxofonista, Rudy a demostrar que todavía era capaz de
ban perfectamente a caballo de un show Pompolli, se tiraba por los suelos en ple- enardecer a un auditorio.
animado y altamente visual. no éxtasis, al igual que hacía el contraba- William Haley fue el instrumento in-
Discos como Rock the joint y Crazy jista Al Rex con su instrumento. Siguie- consciente de una revolución cultural
man crazy, construidos con gran sentido ron éxitos discográficos menores, can- cuyo alcance nunca pudo imaginar: com-
dramático, les abrieron las puertas de ciones que hablaban de la inocente ale- prendía la forma, la necesidad de crear
una grabadora fuerte, Decca Records. gría de los nuevos ritmos: en 1955, Mam- ritmos que dieran movimiento al cuerpo,
Era la primavera de 1954: Haley y sus bo rock, Rock-a-beatin 'boogie y See you la- pero estaba demasiado alejado de los jó-
Cometas hicieron un tema propio -en ter alligator, en 1956, The saints rock'n'roll venes como para entender el fondo del
realidad, una revisión dinámica de un y Don't knock the rock: Skinny Minnie, en rock and roll. En su descargo, recorde-
viejo blues- llamado (We're gonna) rock 1958. Y la fuente se secó: con Elvis, los mos que su grupo -con excelentes mú-
around the clock. Fue un éxito moderado, jóvenes pudieron ver al rock and roll he- sicos, como Pompilli o el guitarrista
eclipsado rápidamente por una potente cho carne, sin pajarita ni chaqueta a cua- Frank Beecher- desarrolló notables
interpretación de Shake, rattle and roll, dros; Haley no resistía la comparación. fórmulas instrumentales; Haley nunca
grabada anteriormente por Joe Turner. El inventor del rock and roll vivió un abandonó la música que le hizo famoso,
Haley ya era un hombre popular entre aunque se dedicara temporalmente a
los jóvenes cuando su grabación de Rock venderla como twist.
around the clock apareció en el comienzo Su final fue triste: abrumado por des-
de Semilla de maldad (Blackboard jungle, gracias familiares y problemas contrac-
1955), película de Richard Brooks sobre HISTORIA DEL `ROCK' tuales, se retiró a Harlingen (Tejas), des-
la violencia de los nuevos adolescentes; de donde llamaba a viejos conocidos
en una escena clave, los alumnos de un PRÓXIMO CAPÍTULO para soltarles monólogos que oscilaban
esforzado profesor (Glenn Ford) de- entre fantasías nostálgicas y pesadillas
muestran su desprecio destrozando su paranoicas. Arruinado y alcohólico, mu-
colección de valiosas placas de jazz. rió en la cama de la casa donde vivía en
Despreciando la moraleja de la pe- ELVIS soledad en los primeros días de 1981.
HISTORIA DEL `ROCK'
En el principio del rock and roll se sitúan los discos de etique-
ta amarilla que sacaba una pequeña compañía de Memphis
llamada Sun Records. Allí nació el rockabilly, con cantantes
rudos y frenéticos. Muchos de ellos se quedaron en la cuneta
-el caso de Carl Perkins resulta ejemplar-, pero hubo uno
que se convertiría en la estrella principal de la segunda mitad
del siglo XX. Elvis Presley hizo accesible la nueva música a
millones de personas con su naturalidad y una voz excepcio-
nal. También dejó su imagen, sus movimientos y sus cancio
nes en muchas cintas cinematográficas, aunque la mayoría de ellas no reflejaron su
auténtica personalidad. A pesar de que su carrera fue tan irregular como su vida
privada, mantuvo su carisma hasta el final y todavía se venera su recuerdo.
LVIS
"He recorrido mucho
camino / desde los días en que
l avaba coches; / llegué a
donde dije que llegaría, / y
ahora tengo la seguridad / de
que realmente no he llegado del
todo; / así que creó que
comenzaré de nuevo: / me
colgaré la guitarra a la
espalda / y nunca, nunca miraré
atrás, / nunca seré más de lo
que soy, / y tú ya debes
saberlo: / soy simplemente el
hombre de la guitarra".
(Guitar man, compuesta por
Jerry Reed e interpretada por
Elvis Presley en 1968.)
4
"SI BUSCAS PROBLEMAS, HAS VENIDO AL LUGAR ADECUADO; MíRAME
A LA CARA" ('Troubie', grabada por Elvis en 1958)
Elvis Presley
nunca se alejó del
todo de la
LVIS PRESLEY, i magen de
cantante
country, género
EL HOTEL DE LOS que cultivaba
con especial
pasión.
CORAZONES ROTOS
DIEGO A. MANRIQUE música: le gusta todo, desde los cantantes
Es un mito polivalente, plagado de contra- románticos hasta los bluesmen, pasando
dicciones e incongruencias. Elvis Presley por los sonidos que había asimilado desde
fue eficaz símbolo de rebelión, pero nunca pequeño: el gospel de las iglesias y el coun-
se consideró un insurgente ni se planteó try, género predilecto de su gente. Actúa
cambiar el mundo. Sus discos sirven para como aficionado en solitario y con un gru-
recordarnos la maravillosa impetuosidad po vocal. Hijo único, buen hijo. Tras gra-
del primer rock and roll o para lamentar la duarse, se coloca como chófer de una em-
facilidad con que esa música se corrom- presa de instalaciones eléctricas; un día de
pió. Encarna el sueño americano y la pesa- 1953 aparca su camioneta en el estudio de
dilla del triunfo. Lo llamaron el rey del rock grabación de Sun Records, un pequeño
and roll, pero se encontraba más a gusto sello local. Hace un disco -cuatro dóla-
interpretando baladas country o canciones res- como regalo para su madre. La em-
religiosas. Combinaba un interés por la es- pleada que le atiende se fija en él y recuer-
piritualidad con un apetito desenfrenado da que su jefe, Sam Phillips, siempre habla
por todo tipo de placeres. Podía detestar a de que "hay una fortuna esperando a
los hippies y predicar contra las drogas quien descubra a un cantante blanco con
mientras se atiborraba de toda la gama de el sonido y sentimiento de los negros.
estimulantes y tranquilizantes comerciali- No se siente muy impresionado Sam
Elvis adoraba las guitarras, aunque las zados por la industria farmacéutica. Qui- Phillips con este muchacho cortés y volun-
usaba esencialmente por estética. so ser el nuevo James Dean y se conformó tarioso. Sin embargo, le da un margen de
con protagonizar películas en general me- confianza: muchas horas en el estudio y la
diocres. Era un perfeccionista a la hora de ayuda de dos buenos músicos: el contra-
aplicar su prodigiosa voz a cualquier can- bajista Bill Black y el guitarrista Scotty
ción, pero grabó toneladas de temas casi Moore. En julio de 1954, el jefe decide que
i mpresentables. En los documentos gráfi- el trío ha hecho algo nuevo y edita un dis-
En 1976, Bruce Springsteen, cos lo podemos ver bello o grotesco, felino co con un blues (That's all right, mama, de
después de dar un concierto en o torpe, glorioso o vulgar. Se puede anto- Arthur Crudup) y una pieza country (Blue
la ciudad de Memphis, se jar, finalmente, como una cruel metáfora moon of Kentucky, de Bill Monroe); am-
trasladó a Graceland, la de su país. bos, tocados y cantados con el desparpajo
mansión de Elvis. Saltó la De origen humilde, el 8 de enero de y la fiereza de una música híbrida que se
verja y se internó en el dominio 1935, en Tupelo (Misisipí), Gladys Smith conocerá como rockabilly. No es un éxito
privado del rey, hasta que un Presley dio a luz gemelos; sólo sobrevivió arrollador, pero Elvis abandona el volante
guardia le interceptó. Elvis el segundo, bautizado como Elvis Aron para profesionalizarse en el negocio de la
estaba fuera, el tipo no había -posteriormente rectificado legalmente canción.
oído hablar de ningún cantante por Aaron-. El padre, Vernon Presley, Una decisión acertada. Los discos tie-
llamado Springsteen y el trabajaba cuando y donde podía. En el nen ventas aceptables y Phillips tiene con-
i ntruso fue puesto en la calle. Sur, donde todavía impera el sistema de tactos para meterle en el circuito de la mú-
Bruce recuerda: "Debió castas, son white trash (basura blanca). sica vaquera, donde causa cierta perpleji-
pensar que se trataba de otro Cuando el chico tiene 13 años, los Presley dad: no es muy ortodoxo, pero resulta
admirador loco..., y eso es se instalan en Memphis (Tennessee) en convincente en los temas rápidos. A fina-
exactamente lo que yo era". busca de un mejor ambiente para la joya
de la familia. Se puede imaginar el choque:
Elvis, enmadrado y tímido, enfrentado a
los adolescentes de la ciudad. No es un
gran estudiante, pero juega bien al béisbol
V y se gana algunos amigos que le protegen
de las iras de compañeros de colegio que
a no aceptan sus ropas chillonas, sus peina-
dos extravagantes. También le ayuda la
91
"ES DIFICIL EXPLICAR LO QUE ES EL 'ROCK AND ROLL'. ES UN
RITMO QUE TE AGARRA, ES ALGO QUE SIENTES" (Elvis)
pie; / cuando le llega la fiebre phis Recording Service, y en sus dos pri-
rockera, cariño, Dios nos meros años de vida acogió a abundantes
salve; / no para de tocar hasta artistas negros.
que la guitarra se rompe" Phillips descubrió y grabó a músicos
como B. B. King, Howlin' Wolf, Jackie
(King Creole, de Leiber y Brenston, Joe Hill Louis o Willie Nix. En
Stoller, grabada por Elvis en febrero de 1952 nace el sello Sun, dentro
1958). ya de una fuerte competencia. Phillips era
un hombre innovador que buscaba conti-
nuamente algo distinto que ofrecer. El Sur
tenía su idiosincrasia propia y él se dispu-
so a sacar partido de ello.
Los principales estilos musicales a los
que Sam Phillips se dedicó inicialmente
fueron blues y rhythm & blues, y un renova-
do country. Sun Records empezó a tener
algunos éxitos con músicos como Rufus
Thomas, Junior Parker o James Cotton,
pero fue en julio de 1954 cuando surgió la
bomba: un joven llamado Elvis Presley
que combinó esquemas de ciertas formas
del country y el blues en una frenética fu-
sión que pasara a la historia como rock-
abilly. Presley sólo llegó a grabar cinco sin-
gles para Sun, que en octubre de 1955 ven-
dió el contrato y los derechos de repro-
ducción de los discos de Presley a la pode-
rosa RCA. A pesar de esa baja, la Sun se
puso rápidamente a la cabeza de la moda
del rockabilly, con figuras como Carl Per-
kins, Billy Riley, Warren Smith o Sonny
"CRECÍ EN UN HOGAR DECENTE. DIJERA LO QUE DIJERA,
MIS PADRES SIEMPRE ME HICIERON COMPORTARME" (Elvis)
CARL PERKINS
UN CASO DE MALA SUERTE
LUIS MARIO QUINTANA
Cuando Elvis Presley encontró el cami-
no del rockabilly otros muchos músicos
norteamericanos se pusieron en mar-
cha. Algunos incluso ya habían estado
buscando esa salida antes de que Elvis
empezara.
Uno de esos pioneros fue Carl Per-
kins, hijo de granjeros que nació en la
pobreza el 9 de abril de 1932 en el sur
de Estados Unidos (Lake City, Tennes-
see). Creció en una plantación, y fue un
hombre de color el que le enseñó los ru-
dimentos de la guitarra.
Perkins, como la gran mayoría de
músicos del Sur, recibió influencias de
las dos raíces básicas de la zona: del
blues, terreno en el que admiraba a
John Lee Hooker y Muddy Waters, y
del country, con ídolos como Bill Mon-
roe y Hank Williams.
Tras escuchar el That's alright
mama, de Elvis Presley, decidió lanzar-
se a la acción de una manera más pro-
fesional. El naciiento del rock and roll
no le pilló en absoluto desprevenido.
Perkins tenía, por otra parte, una Perkins sufrió una fractura de crá- Roben Gordon o Jimi Hendrix. Sus
serie de cualidades dignas de mención: neo que le puso fuera de circulación du- grabaciones tenían una enorme vitali-
además de cantar, escribía práctica- rante un año. Luego, cuando reapare- dad, rebosaban frescura por todos la-
mente todo lo que interpretaba, y era ció nueve meses después, realizó traba- dos y su posterior influencia ha sido vi-
un guitarrista admirable (desde Bobby jos de una magia y originalidad memo- tal. En los años setenta, incluso grabó
Fuller hasta Los Beatles -con los que rables, pero nunca fue una gran estre- con la banda norteamericana NRBQ.
mantuvo una buena amistad-, fueron lla, entre otras cosas porque su carác- Perkins había comenzado trabajan-
muchos los herederos de su estilo). ter reservado y modesto le hicieron re- do en los bailes country de su pueblo,
En 1955 compuso y grabó una can- chazar anticipadamente las posibles acompañado por sus hermanos Jay
ción llamada Blue suede shoes (Zapatos servidumbres que una gran populari- (guitarra rítmica) y Clayton (bajo). Ter-
de gamuza azul), una de las grandes clá- dad podría traer consigo . minó su carrera de la misma forma. A
sicas del género. Era una canción que Carl Perkins es el responsable de finales de los años sesenta se unió a
hablaba sobre la importancia de la in- excelentes composiciones. Ahí queda- Johnny Cash para recorrer el circuito
dumentaria, y fue quizá el disco más ron para la posteridad canciones como country. También realizó giras con sus
importante del sello Sun. Elvis también Boppin' the blues, Matchbox, Honey hijos, Stan y Greg.
grabó la canción y le robó parte del éxi- don't, Everybody's trying lo be my baby, A finales de 1985 Perkins se reunió
to. De todas formas, Perkins la había Dixie Fried o Restless, temas que han en Memphis con Johnny Cash, Roy Or-
conseguido colocar al mismo tiempo en sido recordados por otros artistas con- bison y Jerry Lee Lewis (todos vetera-
las listas de pop, country y rhythm & tinuamente: Beatles, Ronnie Hawkins, nos del sello Sun), para grabar un disco
blues, toda una proeza. lleno de agridulce nostalgia. Se tituló
El 21 de marzo de 1956 el cantante y Class of 55 (Curso del 55, en referencia
su grupo se dirigían a participar en el al año más glorioso de la Sun). En las
show televisivo de Ed Sullivan, un pro- sesiones de grabación, Carl Perkins de-
grama que en aquel momento 'servía de HISTORIA DEL `ROCK'
mostró una vez más estar en posesión
catapulta a muchos artistas poco cono- PRÓXIMO CAPITULO de todas las habilidades que lo distin-
cidos por el gran público. Sufrieron un guieron como uno de los músicos de
accidente de coche en Wilmington (De- rock and roll más completos de los años
laware) en el que fallecieron su herma- cincuenta. Por algún lugar del Sur esta-
no y compañero de grupo, Jay, y su ma- EL 'ROCK' NEGRO rá tocando ahora mismo, tal vez en so-
nager. litario.
HISTORIA DEL `ROCK'
La aparición del rock and roll consiguió que salieran a la
luz pública músicas y músicos negros que se hallaban
marginados. Entre éstos destacan varios nombres que
triunfaron internacionalmente en los años cincuenta.
Fats Domino (en la foto) fue cabeza de serie del rhythm
and blues de Nueva Orleans, un estilo basado en el piano
que vivió entonces momentos de esplendor comercial.
En esa ciudad, tan propicia al mestizaje de culturas,
también realizó sus primeras grabaciones el frenético Little Richard. A través de
Chess, importante sello discográfico de Chicago, se dieron a conocer otros dos
personajes: Chuck Berry y Bo Diddley, quienes, con sus guitarras, defmieron el
sonido eléctrico y duro del rock que se haría en las décadas siguientes.
EL 'ROCK'
NEGRO
Chuck Berry elaboraba sus
letras acumulando versos
aparentemente inconexos,
ricos en detalles de la vida
cotidiana, que sugerían
magistralmente los
sentimientos del narrador y
l os condicionantes de su
tiempo. Una fórmula que Bob
Dylan y otros muchos
recuperaron con fortuna.
"DICEN QUE BOB DYLAN ES EL FUTURO DEL `ROCK', PERO YO
PREFIERO A CHUCK BERRY CUALQUIER DÍA" (John Lennon, 1963)
El sello
Ace Records
grabó a
numerosos
AMINO DE artistas de
Nueva Orleans.
LITTLE RICHARD ,
LA FRUTA CORRUPTA
IGNACIO JULIÁ
Máximo representante de su faceta más
desvergonzada y extremista, Little Ri-
chard inseminó el primitivo rock and roll
con insolente vehemencia, transformán-
dose él mismo en predicador de sus con-
tradicciones, su velocidad rítmica y exci-
tante lubricidad, su chifladura vital.
Nacido Richard Penniman en Macon,
Estado de Georgia, el 5 de diciembre de
1935, Little Richard puso su cuerpo ligera-
mente deforme y su acelerada sensibilidad
homosexual al servicio de uno de los más
estimulantes y turbadores sonidos produ-
cidos durante los primeros capítulos del
rock. Poseído por una pertinaz y febril
energía expresiva, descubrió nuevos conti-
nentes musicales que, otros explorarían
posteriormente; pero su osadía no fue re-
compensada como merecía. Ahora afirma
arrogante que el color de su piel y su estra-
falaria personalidad le apartaron de la glo- gerald. A los 13 años, su padre, escandali-
ria acaparada por Elvis y otros; asegura zado por los escarceos homosexuales del
que él, y sólo él, inspiró a Jimi Hendrix, los muchacho y por su fuga con una pandilla
Beatles, Tina Turner, los Rolling Stones, de charlatanes y curanderos, le pone en la
James Brown y, podría añadirse, Prince; calle. En libertad, surgen atropelladamen-
declara con orgullo que sus fantásticas te todas las pasiones, musicales o no, que
creaciones sonoras sirvieron de válvula de hasta entonces habían latido en su inte- a primera canción que
escape para toda una generación, fueron rior. La futura reina del rock and roll le gri- yo canté en público fue Long tall
la alegría que difuminó mil y una depresio- ta al mundo, desde tugurios, bares o sim- Sally, de Littie Richard.
nes, el punto de encuentro entre blancos y ples esquinas, su insatisfacción, su frenesí Cuando los Beatles
negros en los racistas Estados sureños. Y juvenil, su diferencia. comenzaban, actuamos con
en parte tiene razón. Afortunadamente, es rescatado y él en Liverpool y Hamburgo.
Hijo de un destilador ilegal de whisky adoptado por un matrimonio blanco, Ann Para mí, es uno de los reyes
criado en el seno de una familia numerosa y Johnny Johnson, quienes le permiten de- del rock and roll. Además es un
de profundas creencias religiosas, Little sarrollar sus aptitudes en el escenario del gran tipo, al que ahora
Richard sintió en su propia piel el escalo- Tick Tock, el club que regentan. En 1951, considero mi amigo".
friante influjo del rock and roll a muy tem- y como consecuencia de haber ganado un
prana edad. Aprendió a tocar el piano y a concurso local, debuta en RCA, marca (Paul McCartney, 1984.)
templar su muy particular alarido vocal en para la que registrará ocho discos senci-
la iglesia, como tantos otros pioneros de llos, que muestran la clara influencia de
esta música; pero su prematura vocación las celebridades del rhythm and blues de la
no fue precisamente fomentada por sus época; nombres como Roy Brown o
progenitores, quienes únicamente admi- Wynonie Harris. Sus primeras grabacio-
tían en el tocadiscos familiar á irreprocha- nes no cuajan a nivel popular, y en 1954
bles tonadilleros como Bing Crosby o vo- pasa a otra discográfica, Peacock, para la
ces tan espirituales como la de Ella Fitz- que realizará algunas canciones más sin
lograr resultados destacables. Durante
esta primera etapa profesional empieza a
sentir la imperiosa necesidad de acelerar
su visión del rhythm and blues, de exagerar
y confundir sus características estéticas,
de convertirse en algo más. Viendo que su
carrera está en punto muerto, decide en-
viar una cinta de demostración a un popu-
lar sello discográfico de Los Ángeles, Spe-
"CONSIGUIÓ LO QUE QUERÍA, PERO PERDIÓ LO QUE TENÍA.
ÉSA ES LA HISTORIA DE MI VIDA" (Little Richard)
DO DIDDLEY
'EL GLADIADOR NEGRO'
IJOS
DE ELVIS
Jerry Lee Lewis (arriba), Gene
Vincent (a la izquierda) y Buddy
Holly (a la derecha), la plana
mayor de la segunda oleada del
rock and roll, directamente
i nfluida por Elvis Presley.
6
"DAME EL DINERO Y DIME DÓNDE ESTÁ EL PIANO. EN QUINCE MINUTOS
TODOS ESTARÁN AULLANDO, BRINCANDO Y TEMBLANDO" (Jerry Lee Lewis)
Me Carl Perkins es un típico norteamericano das las puertas cerradas. Y sin giras, ac-
del Sur sin demasiadas agallas. Por el con- tuaciones ni presentaciones en las grandes
ll amo Jerry Lee trario, Jerry Lee Lewis ha dado durante cadenas de radio y televisión, se vio con-
Lewis, soy de Louisiana, / y años numerosas muestras de desprecio denado al ostracismo y a tener que sobre-
ahora voy a tocar un poco de por las más elementales costumbres so- vivir tocando en pequeños clubes y locales
boogie en este piano que tengo ciales, y si alguien se ha atrevido a decirle de mala muerte.
aquí. / Haciéndolo algo, él siempre ha dejado bien claro que Sin embargo, Jerry Lee Lewis no era un
espléndidamente voy a sigue siendo The Killer (El Asesino). cualquiera. Podía tocar el piano con las
conseguir que esto tiemble, / Jerry Lee Lewis (Ferriday, Luisiana, manos, con los pies, con el culo y subido
l o voy a hacer y lo voy a hacer 1935) era ya un profesional del piano a la encima de él, sin que nadie osara perderle
hasta que os rompáis. / Se edad de' 15 años. Tocaba boogie, rhythm el respeto ni considerarle un gracioso o un
ll ama el boogie de Lewis, en la and blues y country swing para una emisora idiota. En todo caso, un punk, pero con
forma en que Lewis lo toca, / local hasta que decidió presentarse con canciones de talla y una manera de tocar
pienso hacer un poco de mi sus canciones en el estudio de grabación el piano que dejaba boquiabierto a cual-
boogie woogie todos los de Sam Philips, en Memphis. Pero Sam quiera. Y si alguien, por simple ignorancia
días. / Bien, ahora viajemos no estaba ese día allí, así que el primer o desconocimiento de lo que había hecho
hasta la vieja ciudad de contacto lo tuvo con su colaborador, Jack o podía hacer, se atrevía a insultarle, se
Memphis, / allí es donde ese Clement. Jerry le dijo que podía tocar el encontraba con la respuesta de un Lewis
chico, Presley, dice que no piano como Chet Atkins. Clement quedó orgulloso y altivo: "¡Soy el asesino, tío. Y
sois nada más que unos intrigado porque Chet Atkins tocaba la nadie corta al asesino!". Y si era necesario
sabuesos, / pero ahora guitarra, no el piano; pero entendió lo que quemar el piano para demostrarlo, lo que-
tomad mi boogie, os mantendrá quiso decirle cuando oyó sus canciones, y maba, como hizo en una ocasión en que
en movimiento, / hasta que le despachó rápidamente, después de una tuvo que tocar de telonero de Chuck Berry
empecéis a temblar. / Se llama corta audición, con el consejo de que en un show organizado por Alan Freed:
el boogie de Lewis, en la aprendiera un poco de rock and roll, que acostumbrado a cerrar los conciertos
forma en que Lewis lo toca. / era lo que quería lanzar Sun Records. con sus incendiarias canciones, le sentó
Señor, yo hago mi boogie Tras varias visitas y otras tantas grabacio- como un tiro tener que tocar antes de
woogie todos los días. nes, Sam Philips y Jerry Lee Lewis lanza- Chuck Berry, en un momento en el que
ron la bomba: Whole lot of shakin going on
(Lewis Boogie, canción (Sun, 1957).
compuesta e interpretada por Se vendieron más de un millón de co-
Jerry Lee Lewis.) pias de la canción, y Lewis se convirtió en
cuestión de meses en una estrella. A Who-
le lot... le sucedieron canciones tan rotun-
das y apabullantes como Great balls offire
(Sun, 1957), High school confidential (Sun,
1958) y Breathless (Sun, 1958), con las que
"PUEDO HABER CANTADO UNA CANCIÓN DIEZ MIL VECES, PERO SIEMPRE
DE UNA FORMA DIFERENTE, COMO SI FUESE NUEVA" (Jerry Lee Lewis)
A l os adolescentes
blancos, la música del gueto les
reservaba sorpresas tan
que se vendían unos y otros discos, distin-
tas las emisoras que los radiaban, distin-
tas las empresas discográficas encargadas
de grabarlas. Por lo demás, el subsector
de la música blanca que había tenido pri-
deliciosas como el OCES BLANCAS, mordial contribución en el nacimiento del
descubrimiento del grupo rock and roll, el country and western, poseía
Three Tons of Joy (Tres RITMOS NEGROS también vías de difusión y creación autó-
Toneladas de Alegría), un trío nomos, además de una capital geográfica
vocal dirigido por el productor precisa e indiscutible: Nashville, Ten-
Johnny Otis y compuesto por MINGUS B. FORMENTOR nessee.
Marie Adams (en el centro) y las El rock and rollirrumpió como arrasadora A mediados de los cincuenta se produ-
hermanas Sadie y Francine tromba sonora y vital en el mercado norte ce una estimulante intersección de todas
McKinley. Como decía un viejo americano de la música popular, en el que esas corrientes y comienzan a proliferar
blues, "no es la carne lo que estaban claramente diferenciados el Tin los artistas blancos que convierten en éxi-
i mporta, sino cómo la mueves". Pan Alley y la race music, o, lo que es lo tos millonarios temas con algunos años de
mismo, los sonidos para blancos y los so- antigüedad y que hasta entonces no ha-
nidos de y para los negros. Sus respecti- bían logrado traspasar los consolidados
vos canales de distribución eran distintos circuitos de la race music. Por ejemplo,
"OCURRE QUE LOS NEGROS INVENTAN UNA MÚSICA QUE ES ROBADA POR LOS
BLANCOS, QUE SE QUEDAN CON LA GLORIA Y EL DINERO" (Johnny Otis)
uno de los primeros éxitos de Bill Haley Conway Twitty (en la fotografía, segundo
and The Comets (cuarto lugar en las listas por la izquierda): "Todos los cantantes
de ventas) fue un tosco blues de Big Joe country sabemos de blues. Y viceversa".
Turner, el titulado Shake, rattle and roll
(sin olvidar que la técnica del saxofonista
Rudy Pompilli, así como su incorporación
a un grupo originalmente country, tenían
mucho de calco descafeinado de la fórmu-
la impuesta por Louis Jordan unos años
antes).
Elvis Presley hizo una fortuna con su
versión de Hound dog, tema escrito y lleva-
do al éxito entre los suyos por la eximia
blueswoman Big Mama Thorton; su primer
disco para la Sun incluyó un blues com-
puesto por Arthur Crudup, el That's all
right mama. Siempre hubo un negro detrás
antes. Y cuando comienza a hablarse de
rock and roll y cunde la fiebre, los negros
aportan sus propios representantes, que,
de hecho, no son otros que los más gran-
des: Little Richard, Chuck Berry o Bo
Didley.
"Si pudiese encontrar un blanco con el
sonido y el feeling de los negros me haría
rico". Mediada la década de los cincuenta,
éstos eran los clarividentes sueños de Sam
Phillips, quien acababa de poner en mar-
cha Sun Records, el mítico sello discográ- glomerado cultural, artístico, económico y
fico que acogió la flor y nata del naciente sociológico que encubrimos actualmente
rock and roll. Los sueños de Phillips sólo se con el término rock tiene su fuente última
cumplieron parcialmente. Encontró a en la tradición musical afroamericana. El
Presley, pero no los millones. Su error de rock no sólo se inspira en música negra, n los años cincuenta
cálculo fue creer que podían materializar- sino que asimila en buena medida la filo- fueron numerosos los artistas
se sus sueños regentando una compañía sofia que recubre el hecho musical entre blancos que se labraron una
i ndependiente y limitada en su influencia l as gentes de origen africano. Se pasa de la carrera a base de interpretar
al Estado de Tennessee y alrededores. música como cultura o divertimento a la versiones edulcoradas de
Cuando la fama de Presley traspasó las música como forma de vida y fuente de pe- éxitos del mercado de la música
fronteras estatales no tardaron en lanzar- queñas sabidurías. negra. Bill Haley y Elvis
se sobre el apetitoso bocado las compa- La presencia de lo negro, su esenciali- Presley se escaparon de esa
ñías nacionales con cobertura para todo dad en la historia del rock, no queda confi- rutina al transformar los
Estados Unidos. nada a sus años de arranque. Si importan- arreglos y aportar su
Sin embargo, su frase seguía sinteti- te fue el papel desempeñado por los blues- personalidad a las
zando mejor que ninguna otra la clave de men, no menos fructífera se nos muestra la adaptaciones. No puede
la revolución musical que acababa de po- inseminación de música afroamericana de decirse lo mismo de
ner en marcha el rock and roll. Había dos origen religioso (spirituals, gospel) a través depredadores como Pat Boone,
aspectos, artístico y crematístico. Si al- de los primeros grupos vocales y la esplén- Georgia Gibbs, las McGuire
guien tomaba música negra y la ejecutaba dida tradición del soul. Sucesivos desgajes Sisters o los Crew Cuts, que se
con espíritu negro (algo previamente exis- o evoluciones llevarían hasta el funky y la aprovecharon de que las
tente, premisa artística, la esencia musi- disco-music, mientras Jimi Hendrix desa- grabaciones originales habían
cal), podía enriquecerse siempre que fuese rrollaría la guitarra eléctrica hasta sus úl- sido editadas por marcas
blanco y joven. Lo único que quedaba al timas consecuencias. Y los músicos blan- i ndependientes para triunfar
albur eran los caminos concretos, hasta cos nunca dejarían de nutrirse en tan fres- con sus copias oportunistas.
cierto punto imprevisibles en una indus- cos manantiales, reelaborar, mezclar, re- Era un pequeño síntoma de que
tria que apenas despuntaba, la del consu- cuperar una y otra vez, desde Presley has- la segregación racial se
mo juvenil. ta Springsteen, pasando por Cream. Tam- mantenía: en 1956, un cantante
El blues tuvo un hijo y le llamaron rock- bién irían calando en el magmático cos- tan inofensivo como Nat King
'n'roll es el título de una de las primeras mos del rock el toque latino (como mucho Cole fue golpeado por atreverse
composiciones de Muddy Waters. La pa- antes había hecho en el jazz) de origen ca- a cantar en el Estado sureño
ternidad de la criatura (no exclusiva, pero ribeño. Y del Caribe anglohablante llega- de Alabama ante un público
sí predominante) corresponde al blues ría el reggae y sus antecedentes (ska, rock- mayoritariamente blanco.
eléctrico, al gestado en Memphis (su sede, steady). Africa cerraría el círculo al inte-
Beale Street) y Chicago (su condominio, el grarse en el pop de nuestra década, donde
barrio del South Side). Ese enorme con- la amalgama es la ley. Pero casi sin excep-
ción, de forma directa o por corta filogéne-
sis evolutiva, han podido detectarse ne-
gros detrás. Y así seguirá siendo.
"DICEN QUE YO CONTRIBUYO A LA DELINCUENCIA JUVENIL, PERO
CREO QUE EL `ROCK' NADA TIENE QUE VER" (Elvis Presley, 1956)
ELVIS ENTRE EL
AMOR Y EL ODIO
'
En nuestro país, durante los últimos 10
LOQUILLO
El
ría de los ligeros, fueron electricistas de la
Crown Electric Company, trabajaron en
ROLL' las barcazas del Misisipí e intentaron bus-
rock and roll nunca dejó car salidas en California, de donde regre-
de tener detractores. LUIS MARIO QUINTANA saron a su tierra con las manos vacías en
Comentando la actualidad Tras Elvis Presley, Bill Haley, Chuck 1955. Con otro amigo, el guitarrista Paul
mundial de 1958, el musicólogo Berry y Fats Domino llegaron miles de as Burlison, los dos formaron el Johnny Bur-
Sigmund Spaeth expresó su pirantes. Veteranos y novísimos, blancos nette Trio, inspirados por Elvis; aunque la
desaprobación con rotundidad: y negros, pianistas y guitarristas, guapos y casa Sun rechazó una maqueta suya,
"El incubo del rock and roll feos. A continuación se ofrece una pano- triunfaron en Nueva York, en el programa
continúa oprimiendo el mundo rámica de los solistas más destacados. televisivo Amateur hour.
de la música popular: la Richard Berry (1935). Para el sello Decca-Coral grabaron,
mayor parte de los discos del Es uno de los más interesantes composito- entre 1956 y 1957, algunas de las más po-
año se basa en ruidos res y cantantes del rock and roll negro. Na- tentes canciones del género, versiones
salvajes y analfabetos. No es ció en Nueva Orleans (EE UU), aunque como Please don't leave me (de Fats Domi-
extraño que la violencia su carrera se desarrolló en Los Ángeles, no), The train kept a rollin' (de Tiny Brads-
derivada de esta concentración primero en grupos vocales, como Debo- haw) o Honey hush (de Joe Turner), junto a
juvenil en ritmos aborígenes nairs y Flairs, y a partir de 1953 en solita- temas originales, como Tear it up, Lone
haya obligado a que varias rio. Él fue el narrador del dramático Riot in
ciudades prohiban la cell block 9, de los Robins, y grabó su mate-
interpretación de rock and roll rial para diversos sellos. Destacan The big
en directo". break (1954), especie de segunda parte del
tema de los Robins, y Get out of the car
(1955). Louie Louie (1956) es su gran clási-
co, himno de los grupos de garaje a partir
de la versión de 1963 de los Kingsmen.
Todavía hoy recorre el sur de California
con su banda.
EL 'ROCKABILLY' FUE UNA MÚSICA MALDITA, CUYO RENACIMIENTO,
A PARTIR DE 1979, SE DEBE AL TRÍO STRAY CATS
GENE VINCENT
HAMLET DE CUERO NEGRO
DIEGO A. MANRIQUE
Juguemos otra vez con el símil cine-
música. Si Elvis aspiraba al carisma
tierno de un James Dean, Gene Vin-
cent tenía algo del Marlon Brando de
¡Salvaje!, amenaza exterior y tormento
interno. Elvis podía gustar a las chicas,
mientras que Gene era patrimonio de
los rockers militantes. Cara macilenta
enmarcada por una cebellera rizada,
cuerpo rígido, canciones sugerentes,
una incoherente ferocidad: rock and roll
primario e incorrupto.
Los detalles trágicos de su biografia
potencian esa imagen de perdedor. Eu-
gene Vincent Craddock vino al mundo
el 11 de febrero de 1935, en Norfolk
(Virginia). Esa ciudad tiene una impor-
tante base naval y allí se alistó Vincent
cuando tenía 17 años. Tras largos peri-
plos marítimos, el chico regresó a la
base, donde se le encomendó el puesto
de motorista. En 1955 fue embestido
por un coche que pe destrozó la pierna
izquierda; en pos largos meses de hospi-
tal, se dedicó a perfeccionar su dominio
de una guitarra que había comprado en
Nápoles (Italia). Al año siguiente cono-
ció a un grupo local, los Virginians, con
los que realizó la inevitable reconver-
sión: del country al rockabilly. Nuevo metía en borracheras, peleas y orgías. esa pierna que nunca curó totalmente.
nombre: Gene Vincent and The Esa fama y el hecho de que la Capitol Rock dramatizado, histeria total entre
Bluecaps. no fuera generosa con los pinchadiscos el público.
Llegaron en el momento justo. El determinó que la incipiente fama del En los sesenta, vivía de apariciones
sello Capíitol, envidioso del triunfo de antiguo marinero se extinguiera. ante sus fieles europeos mientras gra-
RCA con Elvis, quería algo similar. Y No ocurrió lo mismo en Europa: allí, baba material country en Estados Uni-
se dejaron convencer al escuchar Be- el productor de televisión Jack Good le dos. El Gato Salvaje de Norfolk iba per-
bop-a-lula, unacanción febril de pose- diseñó una nueva imagen y una coreo- diendo su magnetismo, convirtiéndose
sión. En la grabación, bañada en eco al grafia adecuada. Aferrado al micrófo- en un caballero regordete que apestaba
estilo del sello Sun, destacaba la voz no, una estatua revestida de cuero es- a whisky, con tendencia a salir en las
insinuante de Vincent, dominadora de peraba el momento de entrar a cantar crónicas de tribunales por problemas
los trucos -hipos, falsos tartamudeos, con cara de sufrimiento: abría la boca y legales y disputas económicas con sus
suspiros- del rockabilly sureño. Los se movía pesadamente, arrastrando ex esposas.
Bluecaps, un cuarteto sin saxo ni pia- El demonio del alcohol le había he-
no, tenían un sonido nítido y palpitan- cho un tipo irritable e introvertido. Mu-
te, roto por imprevisibles solos del gui- rió de una úlcera el 12 de octubre de
tarrista -primero Cliff Gallup, luego 1971, en Los Ángeles. Dicen sus ínti-
Johnny Meeks- que creaban una ten- mos que tenía una cara sonriente, "an-
sión casi palpable. Resultó un éxito HISTORIA DEL `ROCK' siaba dejar de vivir". Su sino le persi-
considerable y está ahora reconocida guió hasta el final. Fiel a sus orígenes,
como una de las piezas emblemáticas quería ser arrojado al mar, pero las le-
del movimiento: John Lennon la utilizó PRÓXIMO CAPITULO yes norteamericanas exigen para esos
para abrir Rock'n'roll, disco de home- entierros que el cadáver sea pasado an-
naje a sus ídolos. tes por el crematorio, lo que siempre
Luego, la pendiente. Vincent era repugnó a Vincent. Ni siquiera se pudo
erotismo en bruto, un tipo hosco que se LOS ÍDOLOS cumplir su último deseo.
EL PAIS
HISTORIA DEL `ROCK'
El reinado del rock and roll es breve. A partir de 1957 va
cediendo su dominio en emisoras y listas a una música más
melosa, protagonizada por intérpretes bien parecidos, que se
benefician de sus frecuentes apariciones en el programa tele-
visivo American bandstand. Es la era de los ídolos, que cantan
sobre una vida juvenil y sobre unos problemas -general-
mente muy convencionales-, con voz blanda y sentimental.
La mayor parte de estos artistas desarrolla carreras breves y
poco relevantes, aunque entre ellos también destacan figuras
memorables como Ricky Nelson, Fabian (en la foto), los Everly Brothers o Roy
Orbison. Ha nacido una sofisticada industria que fascina a los jóvenes comprado-
res con estrellas y canciones hechas a medida de sus expectativas.
Connie Francis se llamaba en realidad su paso a la mitología del rock. Ocurre así:
Constance Franconero, y arrulló a una tarde de finales de los cincuenta, un
muchos adolescentes. hombre del negocio del disco detiene su
coche ante un muchacho agraciado que
está matando el tiempo frente a su casa de
los suburbios. "Oye, chico, ¿sabes can-
tar?". "Para nada", responde el interpela-
do. "Pero seguro que te gusta bailar".
"Bueno, sí". "Pues no importa que no seas
un cantante nato. Creo que tienes lo que
hay que tener para convertirte en una es-
trella". Dicho y hecho.
A partir de 1958, el rock and roll más
exuberante va siendo reemplazado por
música blanda destinada directamente al
consumo juvenil. Los inquietantes pione-
ros, aquellos rústicos sureños o negros del
lado pobre de la ciudad, se ven arrincona-
dos por guapos muchachos -de origen
italiano con frecuencia- que exhiben una
sonrisa capaz de desarmar a los padres
más desconfiados. Estas bellas criaturas
no componen sus canciones y, de hecho,
tienen escasas cualidades artísticas: son
piezas en una maquinaria industrial que
ha reconocido las posibilidades del merca-
do juvenil y que se dispone sabiamente a
cubrir esa demanda ascendente.
El chico fotogénico -hay que recordar
que el principal sector comprador perte-
nece al sexo femenino- pone su cara y
unas inciertas cuerdas vocales al servicio
de canciones pegajosas sobre los dilemas
del primer amor. Se esfuman las guitarras
salvajes, los saxos gruñones y los pianos
histéricos, sustituidos por coros tiernos y
orquestaciones juguetonas. Es el triunfo
del high school, término que hace referen-
cia a que la mayor parte del repertorio de
estos Apolos de corazón frágil se centra
en la experiencia del colegio: flirteos, ena-
moramientos, fiestas, pandillas inocentes,
problemillas con profesores y padres. No
hay incertidumbres ni protestas: el mundo
es maravilloso, el amor debe ser eterno, es
fabuloso ser joven.
Ese relevo en los gustos musicales sue-
le ser explicado por los fanáticos del rock
and roll como el resultado de un cúmulo de
circunstancias desgraciadas: Elvis se ha
ido al servicio militar, Carl Perkins está en
el hospital, Chuck Berry es encarcelado,
Pat Boone aparece en la foto junto a y se dylaniza con una imagen contracultu-
Shirley Jones, en el filme April Love ral. Igual ocurre con Dion, responsable de
(1957). bombones high school como The wandere,
Runaround Sue, Ruby baby o Donna, the
prima donna, que reaparece en 1969 con el
patriótico lamento Abraham, Martin and
John.
Ricky Nelson, que parece el prototipo
de invento de la industria, deja canciones
(Travellin' man, Hello Mary Lou, Poor little
fool) que sólo son reivindicadas como lo
que son, excelentes muestras de rock lige-
ro, a principios de los sesenta, cuando se
convierte en figura del country rock. Por su
parte, Brenda Lee borda dramas juveniles
con su penetrante voz, que le permite ins-
talarse en el mundo del country a partir de
los setenta. Del Shannon es otro caso de
artista bien dotado: da a conocer su false-
te en 1960 con Runaway y deja constancia
de su sabiduría como compositor, arre-
glista y productor en una serie de discos
que le ganan el respeto de futuras estrellas
del pop de los sesenta y setenta (los Beat-
les, Elton John, Jeff Lynne, Tom Petty,
Dave Edmunds).
Todos ellos son excepciones en un pa-
norama de manipulación y explotación in-
tensiva. Al quedar codificado el estilo de
vida del teenager, sus sentimientos y acti-
vidades son plasmados en canciones fa-
bricadas en serie por profesionales del cli-
sé que presuponen una escasa inteligencia
en el receptor.
En esta época (1957-1962), las poten-
cias discográficas ponen en práctica las
fórmulas para lanzar ídolos de consumo
rápido, destinados a un público escasa-
mente discriminante; son enseñanzas que
serán aplicadas posteriormente en otras
latitudes con igual (breve) fortuna.
El high school representa el pleno esta-
blecimiento de la industria del pop, con to-
das sus consecuencias. Musicalmente, no
puede ofrecer un balance muy aprovecha-
son estrellas fugaces. Sólo se salvan los ble.
que tienen algún tipo de talento musical. La mayor parte de sus grabaciones han
Paul Anka, un canadiense que compone quedado como. fotos retocadas de una
La dedicación de los sus propias canciones, triunfa en 1957 con época lejana: con cierto aire falso, boni-
ídolos a cantar el amor teenager el sublime Diana, relato de su amor imposi- tas y provistas de un ligero encanto mor-
en todos los tonos posibles ble por una chica mayor (¡20 años!), a la boso.
hace que surja un curioso que siguen enternecedoras historias de
subgénero: las death songs, enamoramientos juveniles, como Lonely
donde muere uno de los boy, Puppy love o Put your head on my
amantes y el otro expresa su shoulder. Como Anka, Neil Sedaka tiene
dolor. La más tremendista es una gran habilidad para grabar memora-
Teen Angel (1960). Mark bles odas a las posiciones adolescentes
Dining cuenta la historia de una (Oh Carol!, Happy birthday sweet sixteen) y
pareja cuyo coche se para crear canciones que otros llevan a las
inmoviliza en las vías del listas.
ferrocarril; la chica muere Otros ídolos se reciclan. Bobby Darin,
arrollada por el tren fatídico que es un intérprete muy profesional,
cuando retorna al coche a acumula grandes ventas con Splish splash,
recuperar el anillo que le ha Dream lover, Multiplication o su versión de
entregado su novio. Mack the Knife (¡Bertolt Brecht y Kurt
Weill en el hit parade!), en la segunda mi-
tad de los sesenta, Darin tira su esmoquin
"YA NO QUIERO TU AMOR, / MUERO CADA VEZ QUE ESCUCHO: / `AQUí
LLEGA EL PAYASO DE CATHY" (Everly Brothers, 1960)
L FILTRO
DE HOLLYWOOD
DIEGO A. MANRIQUE
El culpable fue Sam Katzman. Un pro-
ductor de películas de la serie B que olió Bobby Vee,
dinero en la fórmula cine + rock and roll. en una escena
Su Rock around the clock fue uno de los éxi- de la
tos de 1956, un filme que demostró de for- película Play lt
ma contundente que había negocio en pre- cool.
sentar unas cuantas actuaciones con la
disculpa de un guión elemental: chicos en- Corman. Esos largometrajes, con sus
frentados a adultos por el asunto de los guiones absurdos, sus caóticas bandas so-
nuevos ritmos, con desenlace feliz. Poco noras y un inevitable aire de inocente lo-
después, la industria descubriría lo mismo cura, son altamente apreciados en la ac-
con Elvis Presley: sus seguidores no que- tualidad por degustadores del pop art en
rían una obra maestra; bastaba con que el estado bruto.
rey apareciera radiante y cantara unas En los años de su estreno triunfaban
cuantas joyas de su repertorio. por razones más simples. Allí aparecían
Con notable cinismo, Hollywood aten- -¡en movimiento!- las luminarias del
EL ENCANTO DE
UN BUSTO CANTANTE
SANTIAGO ALCANDA
El primer ídolo juvenil que surgió gracias
a la televisión fue Ricky Nelson. Sus pa-
dres, Ozzie y Harriet, habían conseguido
un gran éxito radiofónico a finales de los
años cuarenta, y en 1952 adaptaron su
programa a la televisión, Las aventuras de
Ozzie y Harriet, esta vez con dos protago-
nistas más: sus hijos Eric Hilliard (Ricky)
y su hermano mayor, David.
Despuntaba Ricky, nacido en Teaneck
( Nueva Jersey) el 8 de mayo de 1940, un
chico guapo y encantador que a veces to-
caba la batería ante las cámaras, y que un
buen día interpretó Love me tender, el
tema de Elvis Presley, en el programa. Mi-
les de admiradoras le escribieron cartas
de alabanza. El pequeño narciso se decidió logrado 11 discos de oro, y también le lle-
a grabar. El 24 de abril de 1957 se escuchó garon otras oportunidades. El cine, en el
por primera vez el registro de su voz en un que ya había trabajado como actor infan-
disco. Su versión de I'm walkin', tema de til, le requirió en 1962. Intervino en Río ui al garden party a
Fats Domino, vendió 60.000 copias en recordar con mis viejos
Bravo, de Howard Hawks, junto a John
sólo tres días. Los responsables del sello Wayne. Aunque tuvo papeles en otras pe- amigos. / Una oportunidad
Verve Records, cuyo catálogo era prefe- de compartir viejos recuerdos, /
lículas, no quiso alejarse nunca del rock.
rentemente de jazz, no podían creérselo. de tocar nuestras canciones
"Soy principalmente un cantante", dijo.
El programa televisivo de sus padres le En 1963, Ricky, estrella representativa otra vez... / Todos conocían mi
ayudó a vender millones de discos, cuan- del rockabilly suave, fichó por Decca Re- nombre, nadie me
do su frase adolescente "I don't mess cords y se transformó en Rick Nelson, reconoció. / Yo no parecía el
around, boy" ("Chico, yo no voy haciendo adorador de la música country. Se hizo mismo. / Pero está bien,
el tonto") ya se había extendido por todo amigo de Eric Andersen, un cantautor es- aprendí mi lección. / No puedes
el país estadounidense. "El 23 de agosto tudioso de las raíces del folk, y grabó nue- satisfacer a todo el mundo. /
de 1957", declaró luego, "fue el día en que ve discos que pasaron inadvertidos para Por eso tienes que satisfacerte
mi vida cambió radicalmente". Alrededor un público invadido por los grupos britá- a ti mismo... / Si tienes que
de 15.000 personas asistieron al primero nicos. En el sello MCA creó The Stone tocar en un garden party l te
de los cuatro conciertos que Ricky y The Canyon Band, para confirmar su línea de deseo mucha suerte. / Pero si
Four Preps ofrecieron en Columbus country-rock. Cantó piezas de Dylan (She todo lo que pudiera cantar
(Ohio). belongs lo me o Just like a woman) y compu- fueran viejas canciones, /
Fue su día y fue su año, porque en no- so temas propios, incluso instrumentales, mejor conduciría un camión".
viembre su canción Be bop baby se situaba de bella estructura barroca (Song for
entre las primeras de las listas de pop y de Christie). En 1971 participó en un festival ( Garden party, canción
rhythm and blues, compitiendo con Elvis de viejos rockeros en el Madison Square grabada por Ricky Nelson
Presley y Sam Cooke. Poor little fool fue Garden, en Nueva York. La experiencia le en 1972.)
número uno en 1958, y Hello, Mary Lou, en deprimió, y al año siguiente lo contó en su
1961. A los 18 años, Ricky era una estrella último gran éxito, Garden party.
con estilo propio, lento y sensual en esce- Rick Nelson grabó después en Capitol.
na. Reflejaba la imagen de adolescente vo- Su eclecticismo se aprecia en el último ál-
luble y frágil. bum de su carrera, Playing to win, con te-
Luego firmó contrato con el sello Impe- mas de Ry Cooder, John Fogerty o el bri-
rial y reunió una banda auténtica de rock tánico Graham Parker. Aunque esos dis-
and roll. Con 20 años, Ricky Nelson había cos tardíos pasaron sin pena ni gloria, no
dejó de actuar en pequeños recintos, en
colegios y universidades. Precisamente se
dirigía a Dallas, para actuar en un club en
la fiesta de fin de año de 1985, cuando su
avión privado se estrelló. Murieron Rick y
todos los miembros de su grupo.
"TE HAS IDO, / Y DESDE ESTE MOMENTO / LLORARÉ, LLORARÉ,
LLORARÉ, LLORARÉ POR TI" ('Crying', Roy Orbison, 1961)
Ninguno de los miembros de Danny and escuela dramática. Sus más afamados re-
The Juniors era mayor de edad en presentantes, The Platters, aunque tam-
1957, cuando comenzaron a grabar. noco faltasen segundones de alcurnia
como The Moon-
glows, The Flamin-
gos o The Harpto-
nes. Los Platters fue
un grupo de Los
Ángeles (como
Penguins o Teen
Queens) que no tuvo
demasiada suerte
con el sello Federal,
aunque las cosas
cambiaron al fichar
por Mercury. La dra-
mática flexión de la
voz solista a la hora
de interpretar bala-
das de amor la epito-
mizaba a las mil ma-
ravillas Tony Wi-
lliams, responsable
directo y casi exclu-
sivo de éxitos del
grupo, como Only
you o The great pre-
tender, que han per-
vivido como referen-
te sonoro internacio-
nal de toda una épo-
ca, la del imperio de
los grupos vocales
negros en los años
cincuenta.
Del poder evoca-
tivo de estas gargan-
tas conjuntadas da
cuenta la aparición
de grupos revivalistas
(Sha Na Na, Rocky
Sharpe and The Re-
El
Orioles llegaron a Nueva York en 1948 plays, Flying Pickets, Big Daddy o los
procedentes de Baltimore, y abandonaron eclécticos Manhattan Transfer), aparte de
formar un grupo vocal sus orígenes eclesiásticos para profesiona- la demanda nostálgica de los viejos nom-
entre amigos era lo más natural lizarse con un repertorio para night clubs. bres, que propició la reaparición de los
del mundo. Ensayaban en las Su primer tenor, Sonny Til, actuaba con maravillosos Dion and The Belmonts y
esquinas, en un rincón del patio un distanciamiento más que brechtiano, otros muchos. Las canciones clásicas de
como si la cosa no fuese con él en absolu- la época no han perdido su capacidad de
del colegio o en cualquier
to, y la gran aceptación obtenida por algu- emocionar: el cantautor californiano Jack-
túnel donde hubiese buen eco.
nos de sus primeros temas iba a crear es- son Browne cosecha los mayores aplausos
Además, era un arte
cuela: el cool. The Orioles ofrecían un esti- cuando interpreta Stay, el éxito de Mauri-
accesible a todos los bolsillos:
lo de cantar y presentarse en público com- ce Williams and The Zodiacs de 1960.
no era necesario contar con
pletamente nuevo: sus pasos de baile, sus
i nstrumentos o equipos de
ropas, su forma de trenzar figuras en tor-
amplificación. Incluso,
no a los micrófonos de pie, su fría y ausen-
muchos renunciaron te dicción, todo contribuyó a convertirles
radicalmente al soporte en arquetipos a imitar por la juventud ne-
i nstrumental: en los Estados de gra de la época. Entre 1948 y 1954 no tu-
Nueva York y Nueva Jersey vieron rival en su campo, y su éxito más
florecieron los grupos a capella, sonado fue Crying in the chapel (1953). En
l a expresión más pura de esta
la misma onda cool de Dominoes, también
fiebre de cantantes que afectó llegaron a ocupar lugares de preeminencia
por igual a los guetos negros The Cardinals y The Spaniels.
y a los barrios italianos.
a A modo de antítesis del estilo cool, toda
una serie de grupos vocales de este perío-
do desembocó en lo que podría llamarse
aó
LAS POSIBILIDADES DE LA GUITARRA ELÉCTRICA FUERON EXPLORADAS
POR MÚSICOS COMO DUANE EDDY, LINK WRAY O LONNIE MACK
Hank Marvin, con gafas, acompañado Beach Boys y Jan & Dean, estos grupos
del resto de los Shadows. desaparecieron, aunque muchos puristas
insisten en que la única música surf es la
que no tiene voces.
En Europa, la era de los instrumentales
tiene como héroes principales a los com-
ponentes de un grupo que era habitual
acompañante del cantante Cliff Richard,
los Shadows.
En su formación más famosa estaban
Hank Marvin (guitarra), Bruce Welch
(guitarra rítmica), Terry Jet Harris (bajo)
y Tony Mechan (batería). Gracias a Apa-
che, pieza que les escribió Jerry Lordan,
fueron más populares que el propio Ri-
chard en muchos países. En las fiestas ju-
veniles se bailaba Guitar tango, Foot tap-
per, Atlantis o Dance on... Tras abundan-
tes cambios en su formación, su disolu-
ción se produjo en 1969, aunque en 1973
Marvin y Welch reanimaron el grupo, que
incluso llegó a representar a su país en el
Festival de Eurovisión de 1975. Los dos
primeros músicos que abandonaron los
Shadows fueron Harrys y Meehan, quie-
nes juntos desarrollaron su carrera alter-
nando instrumentales (Diamonds (1961),
Scarlet O Hara (1963) y Applejack (1963),
con temas vocales.
Otro grupo británico que inició una
corta carrera de instrumentales después
como Nutrocker (su adaptación del Casca- de haber acompañado a un cantante fue-
nueces, de Chaikovski). ron los Dakotas. Después de apoyar a
Fue a finales de 1961 cuando nació Billy J. Kramer, editaron temas como The
Los Shadows tienen como otro género que impulsó la creación de cruel sea. Ése también fue el caso de los
estrella indiscutible a Hank cientos de bandas instrumentales. En las Tornados, que se lanzaron a la aventura
Marvin, cuya imagen se playas de California, miles de jóvenes in- después de ser el soporte del cantante
caracteriza por sus gafas de tentaban emular encima de unas tablas las Billy Fury. Con la inestimable colabora-
concha. Hace gala de un hazañas sobre las olas de ídolos como el ción del productor Joe Meek, su primer
estilo muy melódico, en el que hawaiano Dewey Weber. Así aparece el éxito fue Telstar (1962) una canción que
tiene un papel destacado el sonido surf, que buscaba recrear las sensa- celebraba el lanzamiento en ese mismo
uso del brazo de trémolo para ciones de ese deporte. año del primer satélite. Su sonido espacial
sostener las notas. En la Los títulos de las canciones solían alu- se impuso con otros temas como
primera mitad de los sesenta, dir a situaciones del surfista en su aventu- Globetrot er, Robot o Ice cream man. La car era
Marvin es el guitarrista más ra. El pionero fue Dick Dale, con su gru- comercial del grupo finalizó en 1966. En-
i mitado en Europa. La pulcritud po, Del-Tones; era un auténtico maestro tre sus miembros destacaron el batería
sonora de los Shadows les en el manejo de su guitarra Fender Strato- Clem Cattini y el rubio bajista Heinz Burt,
separa de sus equivalentes caster dorada, y dicen que también era un que en 1963 inició una carrera en solitario
norteamericanos e influye as sobre la tabla de surf. Nacido en Beirut imitando a su ídolo Eddie Cochran.
i ncluso en los Beatles: el primer (Líbano), asombró por su destreza para Otros practicantes del sonido más es-
tema propio que graban los tocar con la mano izquierda sin haber rea- pacial fueron los suecos Sputniks, que
de Liverpool se titula Cry for a lizado el cambio de cuerdas lógico cuando crearon un clima sonoro muy particular
shadow y es un instrumental. se cambia de mano; se retiró en 1965, gracias a su guitarrista, Bo Winberg. Lo
cuando los médicos le hallaron tumores suyo eran las versiones (Orange blossom
cancerosos en los intestinos. Reapareció special, Hava naguila o Take five), y su ima-
en los setenta con ilusiones renovadas in- gen se caracterizaba por unos aparatosos
terpretando Misirlou, Surf beat, The wedge trajes de astronautas.
y otros viejos temas.
La fiebre del surf instrumental se man-
tuvo entre 1962 y 1964, y se extendió por
todo Estados Unidos. En lugares remotos
nacieron grupos instrumentales que expri-
mieron con brillantez el género. Los más
recordados son los Surfaris ( Wipe out), los
Chantays (Pipeline), los Astronauts (Baja),
los Pyramids (Penetration) o los Marks-
men (Night run). Con la llegada de los
LA GUITARRA ELÉCTRICA ES EL INSTRUMENTO MÁS POPULAR
DE LA SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XX GRACIAS AL 'ROCK'
LA REINA DEL
`ROCK AND ROLL'
NACHO SÁENZ DE TEJADA
Antes de que el rock and roll tuviese capa-
cidad para cambiar esquemas de compor
tamiento social necesitó transformar las
formas de lenguaje musical vigentes hasta
entonces. Quien definió al rock and roll con
el calificativo, tan peyorativo como real,
de ruidoso no erraba del todo. La energía,
una de las características fundamentales
del rock, necesitaba volumen sonoro para
expresarse, especialmente cuando el naci-
miento de esta música significó el final del
reinado de los cantantes acompañados
por grandes orquestas y la aparición de
formaciones de cuatro o cinco personas
que interpretaban algo nuevo.
Recogiendo la fórmula instrumental
del blues urbano -guitarra, contrabajo,
batería y, ocasionalmente, saxófono o pia-
no-, el rock consiguió elevar la guitarra
eléctrica a la categoría de tótem para mu-
chos jóvenes. Habría que remontarse a los
años veinte para encontrar los primeros
experimentos con guitarras eléctricas. En
1931, la casa Rickembacker (que después
fabricaría las legendarias guitarras del
mismo nombre) ya comercializaba su mo- cincuenta ya estaba totalmente introduci-
delo A-22, una especie de guitarra hawaia- da entre los músicos norteamericanos.
na, de la que vendió 2.700 unidades has- Eran los años triunfantes de Les Paul, pio-
ta 1937. nero de las grabaciones con varias guita- ara explicar la enorme
En enero de 1935 se realizó la primera rras tocadas por la misma persona y de los difusión de la guitarra eléctrica
grabación con guitarra eléctrica, y los mú- efectos sonoros conseguidos alterando la se suele recurrir a buscar
sicos de jazz no tardaron en darse cuenta velocidad de la cinta magnética. connotaciones sexuales o a
de las posibilidades del nuevo instrumen- El rock and roll había encontrado sus divagar técnicamente sobre
to. Charlie Christian, en 1938, popularizó instrumentos, y su aparición impulsó rápi- sus posibilidades sonoras. En
la Gibson ES-150, primer modelo que se damente a la industria. Uno de los mode- realidad, gran parte de su
vendía con pastillas magnéticas incorpo- los clásicos del rock, la Fender Broadcas- atractivo reside en que
radas de fábrica, y muchos tomaron su ter (después Telecaster) (1948), pasó de proporciona una gratificación
ejemplo. El blues pronto siguió los cami- vender 10.000 unidades en el período i nstantánea, incluso al neófito:
nos del jazz, y T-Bone Walker, B. B. King, 1948-1955, a más de 250.000 durante suena con potencia y hace
Arthur Big Boy Crudup, Muddy Waters y 1955-1975. Otros modelos preferidos por mucho ruido. En algún
Elmore James también adoptaron mode- los primeros guitarristas del rock and roll, momento hasta provocó
los eléctricos. y que continúan comercializándose en la sustos: cuando los primeros
En 1947, Paul Bigsgy diseñó una guita- actualidad con pequeñas alteraciones, son grupos de rock and roll
rra eléctrica de madera maciza (solid- la Gibson Les Paul (1952) y la Fender aparecieron en España, había
body), que a principios de la década de los Stratocaster (1953). El clásico, volumino- l ocales en los que no se les
so e incómodo contrabajo también se ha- dejaba enchufar sus guitarras
bía simplificado en 1951, transformándose por temor a posibles
en el bajo eléctrico, que perdura hasta i ncendios.
nuestros días y conformando definitiva-
mente la estructura clásica del grupo de
rock and roll. guitarras y bajo eléctricos
más batería. Los instrumentos estaban en
las tiendas, al alcance de cualquiera que
pudiera comprarlos. Y los jóvenes comen-
zaban a tener dinero.
"SACA LA BASURA, / O NO TENDRÁS PAGA, / SI NO LIMPIAS EL
SUELO, / NO VAS A VOLVER A ROCANROLEAR" (`Yakety yak', 1958)
s COASTER THE
LOS PAYASOS DEL `ROCK'
ACTORÍAS
DEL `ROCK'
Las Ronettes
examinan el contrato
que les ofrece su
descubridor, Phil
Spector, en 1962.
9
"TODAVÍA ME ASOMBRA LA CANTIDAD DE DISCOS DE SPECTOR
QUE HAN MARCADO MI VIDA" (John Lennon, 1972)
Phil Spector (a la izquierda), en 1958, jear nuestros sentidos sin perder su trivia-
junto al resto de los Teddy Bears.
lidad de música de consumo. Tercero, se
Con ellos obtuvo su primer número uno.
dedicó fanáticamente a su arte, creando
un reconocible sonido Spector, i mitado
hasta la saciedad, y enriqueciendo las téc-
nicas de grabación. Cuarto, funcionó con-
tra corriente, llevado por un impulso in-
conformista que le distinguía de la muche-
dumbre de explotadores que cobijaba la
industria del disco. Quinto, y lo más im-
portante, es el responsable de docenas de
canciones que figuran entre lo más me-
morable de los años sesenta.
Puede decir que ha trabajado con los
Beatles y los Rolling Stones, con Leonard
Cohen y los Ramones. Que ha sido imita-
do por Abba y Bruce Springsteen, Meat-
loaf y los Beach Boys. Lo de genio es un
calificativo demasiado utilizado en estos
terrenos, pero nadie se lo discutiría a este
hombre, nacido (25 de diciembre de 1940)
en el Bronx neoyorquino. En 1953, tras la
muerte de su padre, la familia se trasladó
a Hollywood. Fue a la Fairfax Junior High
School, donde coincidió con Jan and
Dean, Herb Alpert, Shel Talmy, Lou
Adler y otros futuros famosos. A todos
ellos, el rock and roll les abrió un mundo de
posibilidades.
Su primer grupo fue The Sleepwalkers,
donde compartía escenario con Sandy
Nelson, Kim Fowley y Bruce Johnston.
Con la siguiente aventura llegó el éxito: los
Teddy Bears no eran nada del otro mun-
do, pero su To know him is to love him (Co-
nocerle es amarle), título inspirado por la
inscripción de la lápida del padre de Spec-
tor, les llevó al número uno a finales de
1958. Un espejismo: al año siguiente, los
Teddy Bears se habían separado, y Spec-
tor dudaba entre trabajar como intérprete
en las Naciones Unidas o dedicarse a la
música. Ganó la segunda opción: con el
patrocinio de Lester Still y Lee Hazle-
wood, se introdujo en el mundo del disco
como chico-para-todo. Ambicioso y esfor-
Desde luego, el sonido zado, pronto acumuló abundantes crédi-
que estoy creando morirá algún tos dorados, alternando entre Nueva
día, me doy perfecta cuenta.
Sí, morirá por la animosidad
natural de la industria del
HIL SPECTOR, EL York y Los Ángeles: compuso, tocó y pro-
dujo con Jerry Leiber y Mike Stoller; reali-
sonal. Convencido de que era víctima de por su cuenta. Leonard Cohen realiza con
Pl
un boicoteo, cerró el negocio y se retiró él Death of a Jadies' man (1977), y explica
durante un par de años a su mansión de que "en el estudio se convierte en míster
Hollywood, donde vivía con su esposa, Hyde, un hombre peligroso al que le gus-
McCartney se enfadó Ronnie Spector, ex cantante de las Ronet- tan demasiado las armas de fuego". Aun-
mucho con lo que yo hice con tes, protegido por numerosas medidas de que regularmente se rumorea que vuelve a
Let it be. Aparentemente le seguridad. Se hacían cábalas sobre su es- la vida activa, no ha firmado un elepé com-
ofendió la orquestación que tado mental -un tipo introvertido al que pleto desde End of the century, su colabo-
puse a El largo y tortuoso la paranoia podía convertir en una figura ración de 1980 con los Ramones.
camino. Pero, mira qué cosas, peligrosa-, y aumentó su aureola enig- Aparte de su idiosincrasia, queda la ma-
l uego fue a recoger el Premio mática con una tenebrosa aparición en la terialidad de una obra que, especialmente
Grammy que le dieron por esa película Easy rider. durante la primera mitad de los sesenta,
canción. ¿En qué quedamos? En 1969, tras algunos discos en el sello define las mejores cualidades del pop: can-
Me parece tonto. Ellos me A & M, le llega una llamada de Londres. ciones emotivas, envueltas en carnosos ro-
habían dado permiso para Le requieren los Beatles para adecentar pajes, prodigiosas combinaciones de arte-
salvar aquel elepé, no querían las cintas del álbum Let it be. Sus adornos sanía y sentimiento. A él se le debe también
saber nada. Además, me no gustan a Paul McCartney, pero sí a la mitificación del productor como artista,
parece que lo de El largo y George Harrison y John Lennon, con los el hombre que, a la manera del realizador
tortuoso camino era la que trabaja en sus primeros discos en soli- cinematográfico, aglutina todos los ele-
canción perfecta para concluir tario. Instant karma, My sweet Lord, Imagi- mentos a su disposición -canciones, mú-
l a era de los Beatles. El título, ne o $angla Desh llevan, en mayor o me- sicos, voces, arregladores, técnica- en un
ya sabes". nor medida, su huella. Posteriormente in- todo deslumbrante y arrebatador. En sus
(Phil Spector, 1971.) tenta reconstruir su imperio con sellos propias palabras: "Yo buscaba un sonido
como Warner-Spector o Spector Interna- tan fuerte que fuera capaz de convertir en
tional, donde graban viejos amigos (Cher, algo potente hasta una composición me-
Darlene Love, Dion, Harry Nilsson) sin diocre. Así que se trataba de aumentar, au-
demasiada repercusión. Por el contrario, mentar, aumentar. Y encajar todas las pie-
sí se venden las recopilaciones de sus gra- zas como si fuera un rompecabezas. Mis
baciones legendarias, ayudadas por la sa- discos tienen comienzos simples, pero ter-
lida de eruditas exegesis que detallan su minan con fuerza dinámica, sentido e in-
extraordinaria carrera. tención. Eso es todo".
Su comportamiento se hace aún más
errático. John Lennon, que se pone a sus
órdenes para grabar un disco de temas de
rock and roll, sufre en sus carnes las ma-
nías del productor y tiene que completarlo
"¿ME AMARÁS MAÑANA? / ¿ES ÉSTE UN TESORO PARA SIEMPRE /
O EL PLACER DE UN MOMENTO?" (Goffin & King, 1960)
FABRICANTES
DE CANCIONES
LUIS MARIO QUINTANA
Para todos aquellos cantantes que han
querido abrirse paso en el mundo de la
música y no cuentan con el don de compo-
ner canciones medianamente decentes,
l os compositores profesionales han juga-
do siempre un papel fundamental en el de-
sarrollo de sus carreras.
Éste fue un elemento clave a partir de
los últimos años cincuenta. Ante la tre-
menda avalancha de cantantes que trata-
ban de introducirse en el mercado, surgió,
sobre todo en Nueva York, una legión de
creadores de éxitos para los demás. En el
edificio Brill, en pleno Broadway, los edi-
tores Al Nevins y Don Kirshner fundaron
una especie de escuela de autores, que
funcionó brillantemente: entre sus pare-
des nació un millar de temas triunfales.
Las grandes estrellas de la casa fueron
la pareja Goffin-King. Ella, Carole King
( Klein es su apellido original), nació en
1942, en Brooklyn (Nueva York), y cono-
ció a Gerry Goffin (1939, Queens, Nueva
York) en 1958, cuando éste buscaba a al-
guien que le escribiera música para sus le-
tras. Se casaron en seguida, con Carole ya
embarazada, y comenzaron a trabajar
para Nevins y Kirshner, logrando su pri-
mer éxito en 1960 con Will you love me to-
morrow?, para las Shirelles. Luego seguiría
una larga serie de composiciones que ha-
rían subir su prestigio de manera vertigi-
nosa. Entre sus deudores figuran los Drif-
ters (Up on the roof, When my little girl is
El
smiling), Bobby Vee (Take good care of my
baby), los Cricketts (Dont't ever change), Sedaka (1934, Brooklyn, Nueva York), un
los Everly Brothers (How can I met her), cantante de gran talento. Llegaron a escri-
Dusty Springfield (Goin' back), los Coo- bir más de 500 canciones, muchas de ellas Brill Building era el reino
kies (Chains), Little Eva -la chica que les éxitos para la carrera en solitario de Seda- de los compositores. En 1962
cuidaba el bebé- (The locomotion), los ka: I go ape, Oh, Carol (dedicada a Carole funcionaban allí 165
Animals (Don't bring me down), los Mon- King), Calendar girl, Little Devil, Happy editoriales y empresas
kees (Pleasant Valley sunday), y los Byrds birthday, sweet sixteen, o Breaking up is relacionadas con la música.
(Wasn't born to follow). Tras su separación, hard lo do. Greenfield y Sedaka, reforza- Muchas oficinas estaban
Carole siguió en solitario y se transformó dos en alguna ocasión por otro miembro partidas en cubículos, donde
en una superestrella. Gerry editó también de la factoría, Jack Keller, compusieron trabajaban los jóvenes autores.
algún disco, al igual que la hija de ambos, también para los Brook Brothers (War- Sin salir del edificio podían
Louise Goffin. paint), Connie Francis (Where the boys encargar un arreglo primario,
Otro tándem prestigioso fue el de are), Jimmy Clanton (Venus in blue jeans), reunir a unos pocos músicos
Greenfield-Sedaka. Howie Greenfield co- Emile Ford & Checkmates (Counting tear- y algún cantante, entrar en un
menzó en 1959 su colaboración con Neil drops). Canciones todas de ambiente y estudio barato y grabar una
problemas muy juveniles, que dejaron de maqueta que se ofrecía a
gustar tras la irrupción de los Beatles, productores, compañías y
aunque Sedaka siguió cantando y logró al- artistas.
gunos éxitos menores.
El tercer dúo estrella de la escuela neo-
"QUIERO DAR LAS GRACIAS AL TIPO QUE ESCRIBIÓ LA CANCIÓN / QUE
HIZO QUE MI CHICA SE ENAMORARA DE MÍ" (Mann & Goffin, 1961)
ROCK', RADIO
Y `PAYOLA'
NACHO SÁENZ DE TEJADA
El rock and roll significó el nacimiento de
un nuevo y boyante negocio. Un pastel a
repartir, del que artistas, empresas disco-
gráficas y medios de comunicación consi-
guieron los trozos más sabrosos, y cuya
elaboración había comenzado años atrás.
En los años 30, algunas emisoras norte-
americanas de radio comenzaron a pro-
gramar las canciones preferidas por el pú-
blico: un pianista y una cantante interpre-
taban en directo las más populares del
momento, iniciándose así las primeras lis-
tas de éxitos radiofónicas (hit parades).
En 1935, el locutor Martin Block varió 75.000 dólares de sueldo anual, una alta
sustancialmente los esquemas al comen- cifra para la época.
tar discos con criterios personales, y dos Apoyadas por la radio surgieron nue-
años más tarde, Al Jarvis, desde la emiso- vas editoras discográficas (ABC, ACE, La aparición del rock and
ra KFWD, en Los Ángeles, contribuyó Cadence, Cameo-Parkway, Liberty, Rou- roll permitió que muchos
desde sus programas al lanzamiento del lette...), que reclamaban un sitio para ar- jóvenes accediesen a un
swing, amparado en la música de Benny tistas como Paul Anka, Huey Smith, Link mercado discográfico que antes
Goodman. Acababa de nacer el disc-joc- Wray, Chubby Checker, Eddie Cochran, no les ofrecía una música
key, un animador radiofónico con capaci- Johnny Burnette y Ronnie Hawkins. Los adecuada. La escalada de cifras
dad y posibilidades para crear éxitos. beneficios generados por el rock and roll, a fue significativa: en 1954, las
A principios de los años cincuenta y obli- pesar del corto camino recorrido, eran ventas de discos en Estados
gadas por la popularidad de la televisión, las muy importantes, y buena parte de estas Unidos fueron de 213
emisoras de radio apostaron por la música, cantidades pasaron a manos de las peque- millones de dólares; en 1956
creándose pequeñas emisoras independien- ñas compañías discográficas. habían ascendido a 377
tes como alternativa a las grandes cadenas. La reacción de la industria conserva- millones, para alcanzar 460
La figura del disc-jockey se había establecido dora no se hizo esperar. La Sociedad millones en 1957.
como algo imprescindible, y Alan Freed era Americana de Compositores, Autores y
el más representativo. Editores (ASCAP), enfrentada a las emi-
Nació el 15 de diciembre de 1922, en soras de radio desde 1939, en colabora-
Johnstown (Pensilvania), y desde muy jo- ción con las grandes compañías, inició en
ven se inició en la música como trombo- 1959 una campaña de acusaciones contra
nista de una banda de jazz llamada Sul- pinchadiscos y emisoras, alegando la pa-
tans of Swing. En 1951, en la WJW, de yola (término que se refiere a distintos ti-
Cleveland (Ohio), comenzó un programa pos de soborno) como factor principal del
que sería clave para la historia de la músi- éxito popular del rock and roll. Ese mismo
ca: Moondog rock and roll party. año, un subcomité del Senado comenzó
El término rock and roll había iniciado l as investigaciones, y en un país acostum-
su difusion a través de la radio, y Alan brado a la caza de brujas, las cabezas más
Freed no limitó su labor a la de simple in- significativas no tardaron en caer, espe-
termediario entre artistas y público. Fue el cialmente tras la promulgación, el 13 de
primero en programar música negra, orga- septiembre de 1960, de una ley que consi-
nizó conciertos, escribió canciones, lanzó deraba delito algo que se había convertido
a grupos y cantantes, asesoró a compañías en habitual: la payola.
discográficas y en 1954 fue contratado por Alan Freed fue sometido a juicio y de-
la emisora WINS, de Nueva York, con clarado culpable en 1962, aunque no llegó
a ingresar en prisión. En 1964 se presenta-
ron nuevos cargos contra él por evasión
de impuestos, y el 20 de enero de 1965 mu-
rió de uremia en un hospital de Palm
Springs. La época de la radio como ro-
mántica impulsora del rock and roll había
desaparecido mucho antes.
"DICES QUE ESTA MÚSICA ES PARA PÁJAROS, / OYE LA LETRA Y
ENLOQUECERÁS, / ESTO ES `ROCK AND ROLL" (Leiber & Stoller)
LEIBER-STOLLER
LA EXTRAÑA PAREJA
DIEGO A. MANRIQUE
Jerry Leiber y Mike Stoller no han apa-
recido -con una excepción- en por
tadas de discos, no son personajes po-
pulares ni tienen aspecto heroico. Sin
embargo, su labor fue decisiva en la
construcción del rock and roll. Centena-
res de artistas, desde Elvis Presley a los
Rolling Stones, han registrado sus
composiciones.
A ellos se debe también la concep-
ción del disco como una obra global, en
la que entran en juego la materia prima
-canción, músicos, cantantes- y la
visión artística de un supervisor -el
productor-, consciente de tener tres o
cuatro minutos para dar vida a una his-
toria.
Antes de Leiber y Stoller reinaba la
burocracia: los hombres de A & R (eje-
cutivos discográficos especializados en
artistas y repertorio) contactaban con
l os editores y seleccionaban algunas
piezas para determinado artista; se lla-
maba a un arreglador para darles for-
ma, y a un contratista que convocaba a
músicos profesionales que coincidían
con el cantante en el estudio de graba-
ción. Leiber y Stoller tenían otras
i deas. dos en los Coasters), Ruth Brown, Joe Mann-Weil), Searchin', Charlie Brown,
Habían nacido en 1933, y se cono- Turner, LaVern Baker, los Isley Brot- Hound dog, I'm a woman, Love potion
cieron a finales de los años cuarenta, en hers, los Drifters, Ben E. King, Jay & number nine, Ruby baby, Riot on cell
Los Ángeles. Mike Stoller venía de un The Americans, los Exciters, las Dixie block number nine, Yakety yak, Spanish
pueblo de Nueva York, y deseaba com- Cups, Bessie Banks y otros muchos. Harlem (de Leiber y Phil Spector) o
poner música seria; Jerry Leiber había Colaboraron con las grandes compa- Stand by me (firmada con el seudónimo
crecido en un barrio pobre de Baltimo- ñías y dirigieron sellos propios, como de Elmo Glick).
re, apreciaba la música negra y domi- Spark, Red Bird o Blue Cat. Eran pro- Trabajaban a destajo, pero con ima-
naba la jerga del gueto. Stoller leyó las veedores de todo terreno: maravillosas ginación. Y versatilidad: las produccio-
letras que escribía su amigo, no pudo sátiras que dramatizaban los Coasters, nes de los Coasters eran rock and roll
evitar la risa ante aquellas historias canciones robustas destinadas a Elvis jugoso, con incendiarios solos del saxo-
disparatadas, y se ofreció a ponerles Presley, material romántico para los fonista King Curtis; las de los Drifters
música; fueron aceptadas por artistas Drifters o Ben E. King. Imposible rese- yuxtaponían voces profundas con violi-
de rhythm and blues. La situación tenía ñar todos sus triunfos: cualquier colec- nes, una vía que la música negra ha de-
gracia: dos adolescentes de origen ju- ción de discos tendrá al menos alguna sarrollado hasta ahora.
dío, componiendo para cantantes de versión de Kansas City, Jailhouse rock, Irónicos y modestos, viven ahora de
color. Love me, On Broadway (compuesta con las regalías de su inmenso catálogo.
Pero no les satisfacía eso de entre- Sus últimos esfuerzos han sido para ar-
gar unas partituras en una oficina; de- tistas británicos (Stealers Wheel, Pro-
seaban controlar el producto final. E col Harum, Elkie Brooks) y veteranos
i mpusieron un proceso orgánico para norteamericanos (los Coasters, Peggy
l a realización de un disco: ellos compo- Lee, T-Bone Walker). De 10 años a
nían, arreglaban, dirigían a los cantan- HISTORIA DEL `ROCK' esta parte se ha empezado a evaluar su
tes y les grababan. Eran responsables aportación en libros y artículos, aparte
totales de la plasmación de sus fanta- PRÓXIMO CAPÍTULO de indispensables reediciones, como el
sías. Eran, gran novedad, productores. doble Only in America o Elvis Presley
Y gente más que prolífica: entre sings Leiber & Stoller (único disco ofi-
1953 y 1969, discos para Big Mama cial del Rey en el que comparte portada
Thornton, los Robins (luego converti- con otras personas).
Desde la implantación del disco, la industria del entreteni-
miento lanza regularmente diferentes tipos de bailes que pre-
tenden sintonizar con el clima social de cada época. Desde
el nacimiento del rock and roll estas danzas van destinadas
casi exclusivamente al inquieto público juvenil. En 1960, con
el descubrimiento del twist -baile frenético en el que los
cuerpos no se tocan, lanzado por un artista negro, Chubby
Checker-, se inicia una vertiginosa fiebre bailarina que da
pie a la creación del concepto de discoteca o local donde la
gente acude a moverse al son de discos concebidos de forma exclusiva para las
pistas de baile. Al mismo tiempo, triunfan solistas femeninos como Brenda Lee
(en la foto) y llamativos grupos vocales de chicas, preferentemente de color.
LOS BAILES
A Chubby Checker se le
ll amaba el rey del twist. Su
compañía discográfica,
Cameo-Parkway, era la
empresa que mas éxitos
acumuló durante 1962. Sólo en
ese año llegó a vender la
cantidad de 25 millones de
discos, de los que más de la
tercera parte llevaban el
nombre de Chubby Checker.
O
n
10 x
w
EL VALS Y OTROS BAILES EUROPEOS QUEDARON ARRINCONADOS POR LA
SENSUALIDAD Y ESPONTANEIDAD DE LAS DANZAS AFROAMERICANAS
aquel entonces, "Si resulta agradable, paródicos: el pimp walk, el walk, el stroll, el
hazlo", algo no demasiado distinto de la strut; unos terceros de sexualidad mucho
actitud postulada por Hemingway. Sólo más directa e incisiva: el hoochie kootchie,
que el prosista norteamericano necesitó el shimmy, el shake, o el hucklebuck; otros, La principal factoría de bailes
varios libros para exponerla, mientras que en fin, de dificil encasillamiento, como el en Norteamérica, en los
a la ciudadanía de a pie le bastó con lan- madison, el popeye, el hully gully, el mashed primeros años sesenta, fue la
zarse a los brazos del rock and roll y sus potato, el slop, el waddle, el frug, el jerk, el compañía Cameo-Parkway. En
secuelas. block, el boogaloo. Decenas y decenas de ella grabaron Chubby
Los nuevos ritmos se multiplicaban sin bailes. Checker, Bobby Rydell, los
cesar. Los hubo cuyo referente directo era En algunos casos fueron flor de un día, Orlons, los Dovells, Don
l a gestualidad de cortejo entre distintos nacimiento y ocaso de un grupo o solista Covay, Dee Dee Sharp y otros
animales, como en los casos del dog, el con la suerte de cara durante un puñado nombres significativos del
bird, el snake, el pony, el monkey y asimila- de semanas, pero la implantación de la movimiento sincopado. Cameo-
bles: jerk, scratch, heebie jeebie; otros eran onda cimentó su fuerza en el hecho de que Parkway tenía su sede en
ceremoniales del más puro narcisismo a no pocas figuras de primera línea se con- Filadelfia, lo que garantizaba a
pesar de sus remotos orígenes satíricos y virtieron en propagadores de la nueva psi- sus artistas un fácil acceso a
cosis gestual. Tal es el caso de Rufus Tho- l as cámaras de American
mas (The dog, Walking the dog, Do thefunky Bandstand, un popularísimo
chicken, The funky penguin, Come do the programa televisivo.
jerk, Can your monkey do the dog?), Lee
Dorsey (Ride your pony), The Meters
(Cissy strut, Chicken strut), los Isley Brot-
hers (The snake, Teach me how to shimmy,
Twist and shout), Little Richárd (Heebie
jeebie), Stevie Wonder (Monkey talk), Ja-
mes Brown (Shout and shimmy), Jackie
EL `ROCK' CONTÓ CON LA REPROBACIÓN DE TODO TIPO DE
AUTORIDADES, QUE LO RELACIONABAN CON LOS BAILES DE LA JUNGLA
Las Ronettes, antes de ser lanzadas por sucedió algo muy similar a lo acaecido con
Phil Spector, eran bailarinas y l a invasión turística. Tanto uno como otro
cantantes ocasionales.
nos permitían soñar con los ojos abiertos,
ver nuestro ámbito his-
tórico y cultural colin-
dante por un feliz aguje-
ro, perder una dura y
cruda sensación de ais-
l amiento posbélico, sen-
tir que entre nosotros y
l a juventud de encima
de los Pirineos y allende
el Atlántico había un
algo en común, y acari-
ciar la ilusión micótica
de que ese algo era mu-
cho, de que nuestros
seiscientos eran Cadi-
Ilacs y nuestros caminos
vecinales relucientes
autopistas.
Entre nosotros cuajó
el twist y se implantaron
l as volteretas, desplan-
tes y giros propios del
rock elementalmente
swingeado o de su va-
riante acrobática.
Poco o nada hubo
sobre los demás bailes
citados. Apenas unos
toques de hully gully, al-
gún ramalazo de jerk y
aceptables dosis de ma-
dison. Ese minué de po-
bre fue lo más ajustado
a nuestros proverbiales
buenos modales.
Pep Salgot ha retra-
tado fielmente la char-
l otada en su emblemáti-
co corto Madison. Pero
algo sustancial había
cambiado a pesar de
nuestras reservas espi-
rituales. También aquí
adquiría carta de natu-
raleza el baile en solita-
Wilson (Shake!, shake!, shake!), Sam Coo- rio, la prosecución del ritmo a través de
ke (Shake), Otis Redding (Hucklebuckle, más o menos hábiles contoneos y acroba-
Shake) o Johnny Otis (Shake it). cias. También en España, a pesar de la
Nadie sabe dónde se ha ido mi ¿Cómo se vivió el fenómeno desde yenka, de la mano del Duo Dinámico y de
Johnny, / pero Judy se marchó nuestras latitudes? Sin la menor duda, un primerizo Mike Rios llegó en su mo-
con él, / ¿por qué él fragmentariamente, como sucede de he- mento el frenesí del baile posatómico.
apretaba su mano, / cuando se cho en las colonias con toda sacudida que
supone que es mi chico? / convulsione los cimientos de la metrópoli.
Poned todos mis discos, seguid España entró en la era del rock and roll con
bailando toda la noche, / l a sobrecarga que implica hallarse en los
pero dejadme sola un rato. confines del imperio, un pie dentro y otro
fuera.
(it's my party, tema de Pero si bien las condiciones de todo
Tener & Gold & Gluck, tipo no eran precisamente favorables a su
grabado por Lesley Gore en i mplantación, la necesidad de respirar al-
1963). gún soplo de frescura aliada avivó los áni-
mos. Con la perspectiva que da el paso de
más de dos décadas, quizá pueda soste-
nerse que con el rock and roll primigenio
EL GUATEQUE FUE ESCENARIO DE LOS PRIMEROS ESCARCEOS
AMOROSOS DE LOS ADOLESCENTES ESPAÑOLES
HOBBY CHECKER
'MISTER TWIST'
MINGOS B. FORMENTOR
El twist, o de cómo un desplumador de
pollos llegó a encandilar a media hu
manidad a caderazos y restregones de
i maginaria toalla sobre los hombros.
Aceptable síntesis para una de las ca-
rreras más fulgurantes de la historia del
pop, la de un ciudadano de Filadelfia
llamado Ernest Evans, a quien la pos-
teridad recordará como Chubby
Checker.
Decir Chubby Checker y decir twist
casi resulta sinonimia. Y sin embargo,
no fue Chubby quien lo inventó. La pa-
tente se debe a Hank Ballard, quien lo
había grabado dos años antes de que
Checker lo lanzase a los acogedores
brazos de la fama a mediados de 1960.
El azar se alió con Chubby Checker de
forma imprevista. En un local próximo
a Times Square, el Pippermint Lounge,
justo en el corazón del Nueva York
más de moda, se desató la locura del
twist en figuras tan codiciadas por la
Prensa como las de Greta Garbo, Noel
Coward, Elsa Maxwell, Judy Garland
o Tennessee Williams. La flor y nata de
la beautiful people de la época agitando
su trasero con fruición, y junto a ella la
ciudadanía rasa o señeras figuras de la
aristocracia y culturas posatómicas ta-
les como Jackie Kennedy, Margot Fon- checkeriano y E! twist de St. Tropez. No trocediendo en alternancia, achuchón y
taine o Jean Cocteau. Total, que en un se libró nadie. Grabaron twist desde la huida complementarios, ejercicio un
solo año Chubby Checker vendió más orquesta afrocubana de Machito y Ma- mucho gimnástico y un algo erótico,
de tres millones de copias de The twist. rio Bauzá a la big band de Count Basie; hubo twist en todos los rincones, pero
El twist pasó casi por ensalmo de el twist se enseñoreó de las fiestas calle- no por mucho tiempo.
moda a industria. Comenzaron a proli- jeras y de los salones elegantes; el twist Tras él, y en imparable cascada, un
ferar mecheros, muñecos, corbatas, ca- llegó incluso a los escenarios teatrales premonitorio esbozo de la tierra de las
misetas o vaqueros con la marca de dedicados a la comedia musical. Luis mil danzas. Las hubo por decenas.
Chubby Checker. Inundó el mercado Mariano y Annie Cordy lograron un Aparecían con tan acuciante regulari-
una procesión de faldas twist, gabardi- tremendo éxito al otro lado de los Piri- dad como la que manifestaron a la hora
nas twist, trajes de noche twist. Era la neos con el twist incorporado a su fa- de desvanecerse en el olvido. El propio
l ocura. La música de baile siempre ha- moso musical Visa pour l'amour. Checker llegó a poner en circulación
bía sido núcleo sustancial del mercado Hombros y caderas avanzando y re- media docena en poco más de un año,
de consumidores negros. Sin embargo, entre ellas el pony, el fly y el limbo rock,
nunca había logrado trascender a la so- antes de ver declinar su estrella. Pero
ciedad blanca de foma masiva, y menos de todos esos jeroglíficos danzantes
todavía con el furor que desató el twist. que asentaron para siempre en la socie-
Ningún artista del momento, en el dad eurocéntrica el baile autónomo, re-
Nuevo y el Viejo Continente, dejó de HISTORIA DEL `ROCK' lajadora y erotizante actividad en soli-
echar su cuarto a espadas en el asunto tario, le cuadran al twist un par de tildes
del twist. El meloso Richard Anthony de gloria decisivos: haber sido el encar-
fue su valedor en Francia; la tigresa PRÓXIMO CAPÍTULO gado de abrir camino y haber logrado
Mina se cuenta entre sus introductores l a más viva y prolongada pervivencia
en la península italiana, y Mike Ríos in- en el recuerdo. Y decir twist, ya se
cluyó en su primer disco, con cuatro apuntó antes, equivale a decir Chubby
canciones, un par de ellos: The twist `ROCK' ALREDEDOR DEL MUNDO Checker.
HISTORIA DEL `ROCK'
Estados Unidos, cuya hegemonía se manifestó claramente
tras la II Guerra Mundial, irradió su estilo de vida a todo el
mundo occidental. El rock and roll, a pesar de su espíritu
poco convencional, también fue un producto exportable, re-
cibido con entusiasmo en todos los rincones. En el Reino
Unido, Francia o Italia se convirtió en una fiebre generacio-
nal. Por lo que respecta a los países de habla hispana, las
reacciones fueron variadas: mientras México contó con una
amplia lista de hábiles grupos que alcanzaron gran populari
dad y que mimetizaban a los de su país vecino, las condiciones ambientales de
España hicieron que el rock and roll naciese de forma insegura. En la foto, Mike
Ríos.
ROCK'
ALREDEDOR
DEL MUNDO
Los Sonor
hacían
i nstru-
mentales
con sabor español;
por sus filas pasaron
muchos personajes
que luego tendrían
papeles importantes
en el pop español.
EN ESPAÑA, EL `ROCK AND ROLL' FUE CONSIDERADO UNA MODA
DE POCO FUTURO; OTRO `RITMO MODERNO' MÁS
Valencia, Milos, Pantalones Azules y Ca- específicos para este tipo de música. En
liope; en Buenos Aires, Billy Cafaro, Pali- este aspecto, la Iglesia católica no se man-
to Ortega, Sandro y Las Bolas de Fuego. tuvo ajena, y prestó sus locales y emiso-
Y muchos otros en distintas ciudades fue- ras, como el colegio Calasancio, de Ma- I acuerdo con Estados Unidos
ron los protagonistas. También en España drid, y Radio Vida, de Sevilla. También de 1953 permitió que se
florecieron los cantantes en solitario a tuvieron cierta resonancia los concursos i nstalaran en España las
i magen de Elvis y de Johnny Hallyday, su nacionales universitarios de música mo- bases de Morón, Rota, Torrejón
copia francesa más cercana, como Chico derna (1960), organizados por el Sindica- y Zaragoza. Las emisoras de
Valento, Mike Ríos, Kurt Savoy, Baby, to Español Universitario (SEU), en los radio de estos centros militares
Ontiveros y Rocky Khan. Como se ve, que se mezclaban tunas con grupos rock y fueron focos diseminadores
abundaban los nombres hispanos. en los que no se necesitaba carné de músi- del rock and roll. Por ellos se
Aquí, al igual que en otros muchos paí- co profesional para actuar. filtraron discos, instrumentos
ses europeos, la cultura estadounidense se Esta última cuestión no era vana; las e ideas que ayudaron a los
extendió fundamentalmente por medio del orquestas profesionales, encuadradas en i ncipientes rockeros
cine, el Plan Marshall y las bases milita- el sindicato vertical, y la Sociedad Gene- españoles, muchos de los
res. También desde 1956 se venían publi- ral de Autores impedían el trabajo en los cuales eran hijos de altos
cando bastantes discos de Bill Haley, El- lugares normales de actuación, que eran mandos del Ejército franquista.
vis Presley y algún otro de los primeros los salones de baile. Acceder a ellos era
rockers. La tentación de imitarlos era de- indispensable para vivir de la música, lo
masiado fuerte. que daba lugar a continuas luchas, que du-
Consecuencia de esto, la semilla estaba raron hasta finales de los setenta, entre los
plantada; incluso se celebraron festivales sectores llamados chupamaros (músicos
profesionales que tocaban todo tipo de
música) y los silbadores, que no sabían leer
partituras pero componían canciones que
conectaban con el público joven. Ningún
grupo con más fortuna que el Dúo Diná-
mico. No eran rockeros duros: se inspira-
ban en Paul Anka, los Cinco Latinos, los
Everly Brothers o Neil Sedaka, y crearon
éxitos memorables que sacudieron a las
adolescentes españolas. Fueron los prime-
LAS FAMOSAS `MATINALES DEL PRICE' MADRILEÑO RESULTARON
UN GRAN REVULSIVO; TRAS 24 CONCIERTOS, FUERON PROHIBIDAS
LOS BESOS
DE ADRIANO
CELENTANO
MINGUS B. FORMENTOR
Mediados los cincuenta, la música popu-
l ar italiana vive años de esplendor, con un
mercado interior perfectamente consoli-
dado y una muy notable proyección más
allá de sus fronteras. El festival de San
Remo, concebido como un certamen dedi-
cado a la canción ligera (una especie de
Tin Pan Alley anual concertado a fecha
fija y bajo la constricción de los concursos
en una pequeña villa costera, turística y
fronteriza), fue convirtiéndose en impres-
cindible e inagotable vivero de cantantes y sobre Italia la fiebre del twist, y entre sus
compositores italianos durante un buen i mpulsores autóctonos cabe censar a Ar-
par de décadas. Y no sólo eso. También mando Sciacia (Tiger twist) y Peppino di Yo soy
cabría contemplar el festival de San Remo rebelde, / no me gusta
Capri (Si. Tropez twist). La canción ligera este mundo que rechaza la
como modelo creador de escuela que echó durante los sesenta, por el que podría lla- fantasía. / Yo soy rebelde, /
retoños en nuestro país. marse rodillo San Remo, daría a la época en el vestir, en el pensar, en el
Aun teniendo en cuenta que ese tipo de una tonalidad predominantemente bala- amar a mi chica; / pero
concursos ya periclitados (sólo sigue en dística. Como mucho de tempo medio, un encuentro un poco de felicidad
pie el de Eurovisión) tenía como misión rock ciertamente escorado hacia sus for- bailando el rock. / Yo soy
descubrir, premiar y promocionar cancio- mas más duduás.
Mina -conocida en sus años mozos rebelde,vivo
nes, y que éstas debían ser del género lla- / no me ocupo del
como la tigresa de Cremona- también dinero,
mado ligero, lo cierto es que también con- como un gran
puso su granito de arena a esos primeros sincero, y no esrebelde,
tribuyeron a proyectar cantantes y, even- señor. / Yo soy / pero
balbuceos, con incunables como Tintarella tenga corazón. / cierto
tualmente, a la penetración de los nuevos que no
patrones del rock and roll entre los gustos y Me gusta la
di luna o Una zebra a puá. A principios de
consumos mayoritarios de los europeos. los sesenta, Paul Anka y Neil Sedaka gra- velocidad, / soy un frenético
Fue en San Remo, en 1961, donde se baron copiosamente en italiano. Media- del jazz. / Quiero bailar porque
destapó para el gran público un nombre dos los sesenta, este idioma cuenta entre siento el rock".
que será decisivo para la implantación del sus cantantes con algunas figuras señeras
rock and roll transalpino: Adriano Celenta- (11 ribelle, de
del soul americano.
no. La canción que le abrió las puertas, Mientras, y junto a los ya citados, van Leoni & Celentano & Tesconi,
Ventiquatromila baci (Veinticuatro mil be- apuntando destellos, desde la diminuta grabada por Adriano
sos) -de la que también haría una versión Rita Pavone al panfilico Edoardo Vianello Celentano en 1958.)
otro de los rockeros italianos de primera (I watassi) o el apócrifo Johnny Dorelli
hora, Little Tony-, era una espléndida (Speedy González). Hacia 1968 surgirá
muestra de ese rock and roll made in Italy Patty Bravo (La bambola). En 1965 puede
que el propio Celentano contribuiría a observarse entre la discografía italiana
gestar con temas como Impazzivo per te, una perla como el Uno dei mods, de Ricky
Nata per me o teatrales versiones de están- Shayne. Pero son simples destellos. Nada
dares como Stand by me (titulada en italia- equiparable a lo que sucede en Francia
no Pregheró). por los mismos años, o incluso en España,
También fue en 1961 cuando descargó donde por lo demás se editó con cierta re-
gularidad toda la cuerda melódica italiana
del momento. No cuajó prácticamente en
Italia el concepto de grupo, no hubo un
rocker histórico a no ser Celentano. Pero
para ser exactos, Celentano adquirió esa
pátina con la madurez del Sabbato sera,
cuando ya estaba más cerca de sus ama-
bles astracanadas cinematográficas que
de los Veinticuatro mil besos.
CON SU SÍNTESIS DE TODOS LOS ESTILOS DEL 'ROCK', LOS TEEN TOPS
FUERON LOS MEJORES REPRESENTANTES DEL GÉNERO EN ESPAÑOL
TEEN TOPS
`ROCANROLEANDO'
MONCHO ALPUENTE
El rock no consiguió echar muchas raí-
ces al sur de Río Grande, aunque un
Elvis rollizo y domesticado acabaría
recalando fatalmente en Acapulco en
una de sus más coloristas películas
para, acompañado de un ruidoso ma-
riachi, repasar los tópicos autóctonos
en una burda parodia de la lengua del
país (Fun en Acapulco, 1963).
México era una nota exótica para
guionistas de Hollywood y autores de
bandas sonoras, pero entre guitarrones
y rancheras, corridos y evocaciones de
Jalisco, iba a surgir en 1959 un legítimo
grupo de rock and roll dispuesto a supe-
rar las barreras idiomáticas con una
falta de escrúpulos notable.
Los Teen Tops, según afirman unas
biografías promocionales tan falsas
como el Acapulco de las películas de
Elvis, se conocieron en 1 959 practican-
do el patinaje artístico (sic), y decidie-
ron formar un grupo musical un día en baila que da pavor; / a mi Popotitos yo sus más aberrantes recreaciones-, y
el que su pista favorita estaba cerrada. le doy mi amor". también cortejaron a la Larguirucha
La decisión de cambiar el patinaje A veces la libre traducción se hace Sally. Presley fue homenajeado con
por el rock and roll iba a marcar profun- tan literal que deviene enigmática: "Yo Rey criollo y El rock de la cárcel. Chuck
damente sus vidas, y aunque este brus- tu confidente soy y yo a secundaria Berry, Fats Domino, Carl Perkins, Neil
co viraje hacia un género musical de es- voy". Pero los inocentes devaneos de Sedaka, los Coasters y Ritchie Valens
casa implantación fue muy criticado l os estudiantes de la escuela secunda- pasaron por sus voces, que llevaron sin
por sus amistades, no tardó en dar sus ria retratados por Jerry Lee Lewis, y no complejos el genuino rock and roll a los
primeros frutos, y tras sus primeras ac- tan inocentes, por tanto, acabarán de- hispanohablantes.
tuaciones en la radio, la CBS les abrió sembocando en la infalible receta: "Soy Los Teen Tops animaron a una ge-
l os brazos para que comenzaran a des- tu confidente, voy a secundaria, vamos neración de pioneros españoles, con
tripar con su peculiar talento los clási- a bailar el rock". Miguel Ríos a la cabeza, y rompieron el
cos del rock and roll blanco y negro de Las de los Teen Tops son canciones tabú del idioma por el lado salvaje.
Estados Unidos. pegadizas, música para bailar, algo di- Hoy sus grabaciones siguen sonando
Cierto es que los expeditivos letris- recto, sin pretensiones literarias ni vir- espontáneas, con un toque naif que a
tas originales de aquellas clásicas can- tuosismos, aunque Enrique Guzmán, veces bordea el superrealismo.
ciones no eran poetas en el sentido vocalista y líder de la formación, pro- Casi 20 años después de su etapa de
convencional del término. Mal habla- l ongará más tarde su carrera con ma- grandes éxitos, Enrique Guzmán visitó
dos, amigos del argot y de los giros lo- yores vuelos como baladista. Madrid como coprotagonista travesti-
cales, acostumbrados a ir al grano y de- Los Teen Tops se atrevieron con do de una versión de la comedia musi-
jarse de florituras, eran endiablada- Little Richard -Tutti Frutti es una de cal Con faldas y a lo loco; su compañero
mente sencillos y difíciles de traducir. de correrías con la orquesta de señori-
Los Teen Tops optaron por la senci- tas era el inefable Manolo Otero, eclip-
llez y salvaron todas las situaciones sado a placer por el polifacético artista
comprometidas con alegría y desparpa mexicano, que grabó una nueva recopi-
jo. Uno de sus felices hallazgos fue el HISTORIA DEL `ROCK' lación de sus antiguos éxitos, todavía
verbo rocanrolear: "Ahí viene la plaga, con facultades, aunque con menos for-
le gusta bailar, / y cuando está rocanro- tuna en los arreglos.
leando / es la reina del lugar". El rock PRÓXIMO CAPÍTULO Los primitivos Teen Tops que
and roll era un culto más que un ritmo: acompañaron a Guzmán eran Jesús
"Me dijeron ya hay un rocanrol esta no- Martínez (primer guitarra), Armando
che". La cualidad más apreciada en Martínez (batería) y Sergio Martell, al
una chica era su capacidad para el bai- piano. Guzmán era el solista y pulsaba
le: "Popotitos no es un primor, pero
BEATLES la guitarra de acompañamiento.
En la historia del rock no hay epopeya tan rica como la de los
Beatles. Musicalmente, recuperaban la mejor tradición del
rock and roll, pero fueron capaces de abrir nuevos caminos.
Desde su aparición, dominaron los años sesenta, tanto por "` '
su capacidad para triunfar en las listas de ventas como por
su habilidad para sintonizar con los sentimientos juveniles .;
en una década de cambios vertiginosos. Con la ayuda de su
manager, Brian Epstein (en la foto), fueron líderes en lo artís-
tico y en lo social, y su biografia es una parábola perfecta que
muestra cómo alcanzar el triunfo, y sus peligros. Tras la ruptura del grupo, los
cuatro miembros no pudieron librarse de la etiqueta de su origen: inevitablemente,
las hazañas de los Beatles han eclipsado sus logros posteriores.
Según amplían sus conocimientos, los En esta pose aparecían los Beatles
Quarrymen derivan hacia el rock and roll y en la edición española de Rock and roll
music.
tocan a veces bajo el nombre de Johnny
and the Moondogs. John y Paul son el co-
razón del asunto: como un entretenimien-
to más, componen juntos y llegan a pre-
sentarse como dúo (The Nurk Twins). En
1 959, grandes decisiones: abandonan los
estudios y se tienen que enfrentar a la ne-
cesidad de ganarse la vida, aunque sólo
Harrison consigue trabajo. Los Quarry-
men desaparecen.
A principios de 1960 renacen como
Long John and the Silver Beatles, prolijo
nombre que se reduce a The Silver Beatles
antes de quedarse en los Beatles. Habi-
tualmente, son John, Paul, George, el ba-
tería Pete Best y el bajista Stu Sutcliffe.
Músicos casi profesionales: van de gira
por Escocia como acompañantes de
Johnny Gentle, un cantante de segunda
fila, y también ponen fondo a los movi-
mientos de una bailarina de strip-tease.
Ese verano aceptan viajar a Hamburgo,
donde animan varios locales del barrio
chino.
Es una buena experiencia. Ejercen de
juke-boxes humanos ante un público rudo
y alcohólico, largas horas de música para
bailar. ¡Desenfreno y gamberrismo! Aban-
donan la República Federal de Alemania
a finales de año: Harrison, menor de edad,
ha sido deportado, y el propietario de un
club les acusa de provocar un incendio.
Retornan en 1961 y graban como respaldo
del vocalista Tony Sheridan; son los Beat
Brothers y les produce el compositor Bert
Kaempfert. Una pandilla amenazadora:
ataviados de negro, con zamarras de cue-
ro, dispuestos a reírse de todo y de todos.
Pero no son el típico grupo cerril que sólo
vive para el rock and roll. Harrison se inte-
resa por el country, Paul no esconde su de-
voción por los standards, John demuestra
una rara curiosidad intelectual. Además,
contactan con inquisitivos universitarios
alemanes que se distinguen entre el públi-
co habitual de prostitutas y marinos ocio-
sos. De hecho, Stu Sutcliffe los deja para
estudiar arte y casarse con Astrid Kir- año, a la tienda de discos Nems llega gente
schner, una estudiante que tiene la idea de solicitando My bonnie, un disco alemán de
cambiar sus tupés por el peinado con fle- un grupo local llamado los Beatles. El res-
ponsable de la tienda, Brian Epstein, se Ninguno de los Beatles
quillo que luego será conocido como mele-
siente intrigado. Investiga y les descubre fue un estudiante ejemplar. A
na beatle. De vuelta a Liverpool, se con-
en The Cavern. Una revelación. Sin nin- los 13 años, John fue descrito
vierten en grupo habitual de The Cavern,
un club subterráneo donde exhiben tablas guna experiencia previa, se ofrece como por sus profesores como "un
y entusiasmo. manager a cambio de un 25% de sus ingre- payaso que hace perder el
Según la leyenda, en octubre de ese sos. Sus buenos modales y sólida posición tiempo a sus compañeros".
les impresionan. Firman. Paul demuestra inteligencia,
Es su golpe de suerte. Por su carácter pero abandona los libros por la
de cliente importante, Epstein tiene acce- guitarra. Harrison mantiene
so a las discográficas londinenses, donde también una actitud desafiante
es recibido con reticencia: % Un grupo que en el colegio. Ringo abandonó
viene de Liverpool? Qué ocurrencia". El las aulas a los 15 años.
hobby ("lo de los Beatles me ocupará un
par de tardes a la semana") se convierte
en una obsesión. El 1 de enero de 1962
"LAS GIRAS DE LOS BEATLES ERAN COMO EL 'SATIRICÓN' DE FELLINI.
S I NO HABÍA `GROUPIES', TENÍAMOS PUTAS" (John Lennon)
en plasmar la música que ronda por sus en blanco y negro oculta una explosión
cabezas. De hecho, resulta extraordinario creativa: les ayudan músicos indios, sec-
que, sometidos a mil zarandeos, nunca ciones de cuerda y viento; usan cintas al
sabe¡ II (a Paul): ¿Cuánto hayan renunciado a un ideal de perfeccio- revés y otros elementos aparentemente
tiempo llevan ustedes juntos? namiento como artistas. Con buen tino, exclusivos de la vanguardia; junto a la
Paul: Oh, muchos años. han añadido novedades instrumentales adaptación de un texto del Libro de los
Ringo: Cuarenta años. como el sitar, las flautas, el piano con soni- muertos tibetano (Tomorrow never knows)
I sabel II (a Ringo): ¿Es do de clavicordio o el insólito cuarteto de puede ir un himno utópico disfrazado
usted el que inició el grupo? cuerdas de Yesterday (pieza que represen- como canción infantil (Yellow submarine);
Ringo: No. Fui el último en ta su aceptación por el establishment musi- la sátira (Taxman, Dr. Robert) no impide
entrar. Soy el pequeñito. cal, y es grabada por solistas de todo pe- detalles superrealistas (esa Eleanor Rigby
I sabel II (a John): ¿Han laje). que "guarda su cara en una jarra al lado
trabajado mucho últimamente? De las letras de amor, expresado con de la puerta").
John: No. Hemos estado rotundidad en un lenguaje cotidiano, se Un disco sencillo con Penny Lane y
de vacaciones. pasa a historias elípticas (Norwegian wood) Stra -wberry Fields forever, viñetas afectuo-
Diálogo entre la reina de o glosas sociales (Nowhere man). El álbum sas de Liverpool envueltas en ricas or-
I nglaterra y los Beatles en el Rubber soul (1965) es el punto de inflexión. questaciones, sirve de puente para el gol-
salón del trono del palacio de Su título (Alma de goma) proclama su ma- pe maestro: Sgt. Pepper's Lonely Hearts
Buckingham, el 26 de octubre leabilidad. En los surcos, 40 minutos don- Club Band (junio de 1967). En los umbra-
de 1965, con ocasión de la de los Beatles se definen personal y musi- les del verano del amor, los Beatles ofrecen
entrega de las medallas que les calmente: a diferencia de anteriores elepés, este colorista disco conceptual, donde una
acreditan como miembros de con sus mezclas de versiones y canciones hipotética banda del Club de los Corazo-
l a Orden del Imperio Británico. propias, aquí se ofrece únicamente mate- nes Solitarios del Sargento Pepper enhe-
Fue un detalle del Gobierno rial del grupo. Gran invención: los Beatles bra enigmáticas piezas (Lucy in the sky with
l aborista de Harold Wilson establecen el disco grande como el nuevo diamonds) con momentos sentimentales
(quien se fotografió meses medio de expresión del rock. (She's leaving home, When I'm sixty four),
antes al lado del cuarteto). También son evidentes los cambios rock restallante y ecos del music-hall, leta-
mentales: de paletos sin complejos pasan nías místicas (Within you, without you) e
a sofisticados monarcas del Londres en
ebullición. Además, está la cuestión de las
drogas. Acostumbrados a las anfetami-
nas, dudan cuando (verano de 1964) Bob
Dylan les introduce a la marihuana. Luego
llega el LSD, consumido con voracidad. A
continuación, la aproximación a las filoso-
fias orientales. Todo queda reflejado obli-
cuamente en Revolver (1966). Su carpeta
"TODOS QUEREMOS CAMBIAR EL MUNDO, / PERO CUANDO HABLAS
DE DESTRUCCIÓN, / NO CUENTES CONMIGO" (`Revolution')
himnos al calor humano (With a little helo trenado en el verano de 1968), aparte del
from my friends). Cerrando, el monumental disco pequeño con Hello goodbye y el in-
A day in the life, un turbulento y opaco via- quietante I am the walrus.
je sonoro. Tiempos febriles. El 27 de agosto de a popularidad de los
Sgt. Pepper's es un terremoto en el cam- 1967 fallece Brian Epstein por sobredosis Beatles fue tal que el mercado
biante panorama del rock. Captura el opti- de barbitúricos, mientras sus protegidos se inundó de grabaciones que
mismo coyuntural, el descubrimiento de se trasladan a retiro con el Maharishi Ma- hacían referencia a ellos, como
un abanico de opciones vitales; un músico hesh Yogi, un sabio hindú que les ha intro- Amo a Ringo (Cher); Quiero
norteamericano, David Crosby, se asom- ducido en la meditación trascendental. ser un Beatle ( Sonny Curtis, ex
bra públicamente de que tal alarde de be- Sin la tutela de su Pigmalión, empiezan Crickets); Ringo beat (Ella
lleza y audacia no sea capaz de detener la l os experimentos. Hacen gala de altruismo Fitzgerald) o Carta a los Beatles
guerra de Vietnam. Sus colegas acusan la con la empresa Apple, editan discos en so- (los Four Preps). También se
sacudida: Frank Zappa parodia Sgt. Pep- litario, ensayan inéditos papeles (Harri- l anzaron discos de todos los
per's en el disco Estamos en esto sólo por el son profundiza en las religiones orienta- relacionados con el grupo,
dinero, l os Rolling Stones se desmelenan les, mientras Lennon genera escándalos desde su productor (George
en Their satanic majesties request, centena- con su nueva acompañante, Yoko Ono). Martin) a su editor musical
res de talentos menores lucubran de mala Tras el empacho psicodélico, les tienta ( Dick James), pasando por su
manera. la simplicidad. Lady Madonna es rock and primer batería (Pete Best) o el
Por si se necesitaba un himno para la roll al estilo de Fats Domino; ese mismo propio Freddie Lennon, padre
era hippy, en julio de ese mismo año llega año (1968) sale el magnificente Hey Jude, de John.
el reluciente All you need is love. El amor en cuya cara B va Revolution, escéptica
como solución, una propuesta que llega reacción al impulso revolucionario de los
entre ráfagas de La marsellesa, Greenslee- sectores radicalizados juveniles. Poco
ves, In the mood y su She loves you. La fase después llega The Beatles, también conoci-
ácida produce igualmente las bandas so- do como el doble blanco en referencia a su
noras para Magical mistery tour (película envoltura, tan diferente a las abigarradas
de televisión dirigida por el propio grupo y portadas anteriores. En sus cuatro caras,
emitida a finales de 1967) y Yellow subma- un calidoscopio de canciones, que cubre
rine (largometraje de dibujos animados es- todos los estilos del rock: el fulgor de sus
mejores momentos oculta el hecho de que
prácticamente ya ha desaparecido el con-
cepto de grupo; cada miembro compone y
graba por separado, a veces con músicos
invitados.
Se multiplican las fisuras: el derrumbe
económico de Apple añade preocupacio-
nes y tensiones, McCartney pretende to-
"LOS STONES NO NOS SEPARAMOS, Y SI LO HICIÉRAMOS, NO HABRÍA
LA MALA LECHE QUE HAY ENTRE LOS BEATLES" (Mick Jagger)
Unido. Su amplia producción abarca des- non, único hijo del matrimonio, desapare-
de discos gloriosos (Band on the run) a des- ce totalmente de la circulación, dedicán-
lices como Give my regards to Broad Street, dose a la vida familiar. Vuelve a grabar en
fallida película y disco. Uno de los hom- 1980, pregonando, con la elemental since- urante los años más
bres más ricos del Reino Unido, podría ridad de siempre, su eterno amor por amargos, yo solía pensar como
ser un pilar de la buena sociedad si no fue- Yoko y su convencimiento de que la felici- John: 'Los Beatles... basura'.
ra por esa tendencia a dejarse detener por dad personal es lo primero. Las balas ase- Pero no era así. Creo que fue
posesión de marihuana. sinas de un adorador desequilibrado le ca- fantástico. Las cosas se
Lennon también tiene años hiperacti- nonizan, antes de que le lluevan las críti- aclararon y se les reconocerá
vos. Por un lado, se convierte en un acti- cas por la trivilización de su música y su una cierta grandeza. Puede
vista del pacifismo, al que proporciona el estrechez de miras. sonar anticuado, pero yo estoy
cántico Give peace a chance (1969), toman- Ese final disparatado, ocurrido el 8 de orgulloso de lo de los Beatles.
do posturas más agresivas con Power to diciembre de 1980, cataliza un proceso de Creo que trajimos la alegría a
the people (1971) y el doble Some time in revalorización de Lennon, los Beatles y, aquella época, a mucha
New York city (1972). Al mismo tiempo, por extensión, el idealismo de los sesenta. gente. No quiero resucitarlos,
bajo la influencia de la teoría del grito pri- Bien es cierto que nunca se ha enterrado pero podríamos juntarnos en
mario del doctor Arthur Janov, se confiesa el legado del cuarteto. Su discográfica se pequeñas aventuras que
públicamente en una serie de discos inten- ocupa de ello, con puntuales reediciones resultaran saludables para
samente personales como Imagine. Aparte de sus clásicos y la publicación de viejas todos. El público lo
de una breve separación, aparece siempre cintas en directo (quedan en reserva abun- agradecería".
unido a Yoko Ono. En 1975, cuando ter- dantes canciones desechadas por el gru-
mina felizmente su batalla contra la Ad- po, que los supervivientes se niegan a lan- (Paul McCartney, 1973.)
ministración de Nixon -empeñada en ex- zar). Se consolida asimismo una verdade-
pulsarle de Estados Unidos como extran- ra industria de la nostalgia: si en los sesen-
jero indeseable y nace Sean Ono Len- ta se vendía todo tipo de objetos con su
nombre, ahora llegan oleadas de libros, ví-
deos, obras teatrales, películas. Sin olvi-
dar las incesantes ofrendas musicales de
músicos de todas las edades, que reviven
sus piezas o imitan su sonido. Todavía
hoy, 30 años después de que Lennon invi-
tara a Paul a integrarse en los Quarrymen,
se nota su sombra desmesurada. Con
ellos, el rock se hizo adulto, dilatando su
léxico y sus posibilidades expresivas. Y sin
proponérselo, mientras alteraban el rum-
bo de esa música, se convertían en decisi-
vos impulsores del cambio social: son mu-
chas las enseñanzas que subyacen en esa
hazaña fabulosa.
"ÉRAMOS PROFESIONALES. TOCÁBAM OS AUNQUE NO NOS OYÉRAMOS,
Y NO NOS DABA MIEDO ENFRENTARNOS A LA PRENSA" (John Lennon)
ELLOS SOLOS
SANTIAGO ALCANDA
Primero, George y John; después, Ringo y
Paul, los Beatles expresaron en los dos úl-
ti mos años como grupo una fuerte inquie-
tud por hacer cosas por sí mismos, ellos
solos, hasta el punto de que ninguno de los
cuatro pudo esperar a la separación defi-
nitiva.
Hasta su muerte, John Lennon publica
una docena de elepés, que se completaron
con discos póstumos y recopilaciones de
estudio o directo. Entre sus dos primeros
álbumes, Unfinished music number 1-Two
virgins -en el que aparece desnudo en
compañía de Yoko Ono- y number 2, el
tema Give peace a chance se escucha y lan-
za el nombre de Plastic Ono Band en todo
el mundo.
Lennon y la Plastic Ono Band han gra-
bado ya cinco elepés antes de la edición de
Imagine, en 1971, con la canción del mis-
mo nombre. Lennon no alcanzó en vida
ningún número uno. Imagine lo fue como
reacción inmediata a su muerte, así como
(Just hke) Starting over y Woman, de su últi-
mo álbum, Double fantasy. Durante cuatro
años se concentra en desarrollar su rock
personal con influencias varias del gospel,
del sinfonismo triunfante (Mind games),
del blues, a veces con piezas fuertes, otras
con baladas de paz o de amor (Jealous
beatle enclaustrado. Ambos firman un
guy).
En la penúltima grabación antes de su contrato, y el 4 de agosto John y Yoko em-
retiro voluntario con Yoko y su hijo Sean, piezan a grabar Double fantasy, con la pro-
ducción de Jack Douglas, en Nueva York. y sweet Lord, el
Lennon recupera el espíritu más genuino
En entrevistas, John destaca la aportación mayor éxito de George Harrison
de la música que le inspiró en sus años jó-
de excelentes músicos de estudio en su en solitario, se parecía
venes. Rock and roll presenta un repertorio
nuevo álbum. Y el 9 de octubre celebran la demasiado a He's so fine, un
de clásicos de los cincuenta y primeros se-
publicación del disco (Just hke) Starting viejo tema de las Chiffons.
senta. El 28 de noviembre de 1974, John
over, el primero en cinco años, que presen- Una sentencia de 1976
aparece en el escenario del Madison neo-
ta en portada al matrimonio Ono-Lennon determinó que se trataba de
yorquino junto a Elton John, donde am-
unido en un beso profundo. La canción, un plagio involuntario y que
bos interpretan Lucy in the sky with dia-
como el resto de su última producción, se Harrison debía renunciar a
monds y otros dos temas. En 1975 se lanza
regocija en la felicidad del hogar, que se sus derechos de autor. Ese
una recopilación de canciones editadas,
rompe con su asesinato el 8 de diciembre mismo año, George se refería
Shaved fish. Y Lennon no reaparece
de 1980. j ovialmente al asunto en el tema
hasta 1980.
David Geffen, responsable del sello Nada fue tan trágico en la carrera de su This song: 'Esta canción no
antiguo batería, Ringo Starr. En el perío- tiene nada complicado; / esta
Elektra-Asylum, especializado en rock ca-
do 1970-1981 graba ocho álbumes, irregu- canción no es ni blanca ni
liforniano, va a estrenar su propia marca
lares, variados, sorprendente alguno. Muy negra / y, por lo que yo sé, no
de grabaciones, e idea resucitar al famoso
poco antes de que cada uno se fuese por copia a ninguna otra".
su lado, Ringo edita una recopilación de
melodías standard, bajo el título Sentimen-
tal journey, piezas todas que, según él llegó
a reconocer-, su madre había adorado
siempre. Y en el mismo año, 1970, realiza
otra grabación, Beaucoups of blues, dirigi-
da por Pete Drake, famoso músico de
Nashville, con temas de country que tuvie-
ron escasa repercusión, que sí logran I
"I MAGINA QUE NO HAY PAÍSES. / NO ES TAN DIFÍCIL: / NADA POR
LO QUE MORIR O MATAR, / Y TAMPOCO RELIGIONES" (John Lennon)
George Martin.
EL 'BEAT'
BRITÁNICO
Los Kinks evolucionaron
desde sus orígenes ruidosos a
un pop decididamente
británico lleno de inteligencia.
Desarrollaron ambiciosas
obras conceptuales como
Arthur (o el declive y caída del
imperio británico) (1969).
"NOS INFLUYÓ DE LOS BEATLES LA SERIEDAD CON QUE HACÍAN MÚSICA.
PARA NOSOTROS ERA UN `HOBBY". (Peter Noone, Herman's Hermits)
El
sis, reconocible y fresco a la vez. Su des- música pop -junto con el fútbol- se con-
comunal victoria sacudió a los que se de- vertía en ansiada vía de escape.
dicaban a la guitarra como aficionados sin De repente estaba de moda ser británi-
demasiadas expectativas. ¡Cuatro chicos co. Ellos, que tan acomplejados se sentían escritor y activista
de Liverpool triunfando por el mundo en- ante la exuberancia de los maestros esta- negro LeRoi Jones explicaba
tero! Cuatro mozalbetes de clase obrera, dounidenses, se encontraban con que el así, en 1966, el impacto de los
sin demasiada educación, demostrando pasaporte de Su Graciosa Majestad era grupos británicos: "Ellos se
que los súbditos de Isabel II podían rocan- una llave que abría todas las puertas. apropian del estilo -energía,
rolear sin sentimientos de inferioridad. Irrumpían triunfalmente incluso en Amé- forma, etcétera- del blues
Tal vez no hubiera pasado nada si Eps- rica del Norte, desplazando al olvido a sus negro, sea urbano o rural, lo
tein hubiese fracasado en su misión de ídolos. Qué embriaguez. Y podían -de combinan con la imagen del
lanzar a los Beatles. Pero aquello funcio- hecho, debían- jactarse de su origen. En i nconformista blanco -el
nó y se produjo el inevitable fenómeno mi- las portadas de los discos se les veía en beatnik- y triunfan. Están más
mético: "Si ellos pueden, tal vez yo...". autobuses de dos pisos, apoyados en cabi- enterados que sus
Un anzuelo irresistible en un país estruc- nas telefónicas pintadas de rojo, frente a equivalentes norteamericanos y
turado en castas, donde el acento marca- venerables monumentos de metal enveje- han creado un género
ba la pertenencia de por vida a una clase cido. contemporáneo".
social, sin posibilidades de ascenso. Así, la Y si bien trabajaban sobre bases musi-
cales foráneas, aportaban su peculiar sen-
sibilidad. Algunos recuperaron las cancio-
nes de sus padres: Ray Davies, Paul
McCartney, Peter Noone, Ringo Starr y
otros adoptaron fórmulas o repertorio del
music hall británico. Más patriotas de lo
que creían, los más afortunados sufrieron
"¿NO HAY NINGÚN DIPUTADO QUE PRESENTE UNA LEY QUE OBLIGUE
A LOS CHICOS A CORTARSE EL PELO?" (Carta al `Daily Mirror', 1964)
Los Hollies
Las armonías vocales llevadas a su máxi-
ma expresión gracias a la calidad de sus
dos cantantes: Graham Nash (2 de febre-
ro de 1942) y Allan Clarke (15 de abril de
1942). Formados en Manchester en 1962,
The Hollies consiguieron con sus singles
un buen número de éxitos, sólo superados
por los Beatles. Se dieron a conocer en
1963 con una versión de Searchin, de The
Coasters, y, a continuación, I'm alive (su
primer número 1 en 1965), Bus stop, Ca-
rrie-Anne y On a carousel, para intentar co-
sas más comerciales con Jennifer eccles
(1968). Ese mismo año, Graham Nash se
estableció en Estados Unidos, integrándo-
se en Crosby, Stills and Nash, y The Ho-
llies continuaron actuando hasta que en
1973 les abandonó Allan Clarke para gra-
bar en solitario, aunque pronto volvería al
grupo, quizá esperando algo que se produ-
ciudad y paradigma del Merseybeat. Con ciría en 1983: el regreso de Nash para gra-
los Beatles compartieron escenarios en bar un disco y recordar viejos tiempos.
The Cavern Club y Hamburgo, así como
apoderado y productor. Su estilo pop y la Los Honeycombs
personalidad de su líder, el cantante y gui- A la batería del cuarteto de Londres, for-
tarrista Gerry Marsden (24 de septiembre mado en 1963, se sentaba una mujer: Ann
de 1942), les convirtieron en un grupo de Honey Lantrey (28 de agosto de 1943).
éxito y sus tres primeros discos escalaron Fue su signo diferenciador y les ayudó a
los primeros puestos de las listas. Una de conseguir un solo éxito, con la canción
sus canciones, You'll never walk alone Have I the right, en 1964. Se separaron en
(1964), todavía se canta en los campos de 1966.
fútbol.
Los Merseybeats
Herman's Hermits Típico cuarteto de Liverpool, formado en
Si algún grupo puede calificarse como pop- 1963 y con algunos éxitos menores. En
pie es Herman's Hermits. Canciones sen- 1966, tras el abandono de algunos miem-
cillas, desenfadadas, con variadas e indu- bros, continuaron como The Merseys, y
Los grupos ingleses dables influencias de otras bandas y esti- obtuvieron su mayor reconocimiento, con
han cambiado la actitud de los, y, ante todo, la voz e imagen aniñada la canción Sorrow, en 1966, tras lo cual de-
todos los músicos de su líder, Peter Herman Noone (5 de no- saparecieron.
norteamericanos. Qué noche la viembre de 1947). Se formaron en Man-
de aquel día y l a creatividad chester en 1963, Moody Blues
de los Beatles nos han hecho lo en torno a la fi- Quinteto formado en Birmingham en
que ahora somos: nosotros gura de Noone, 1964, con una línea negroide. Al año si-
dejamos el folk y el bluegrass un estudiante de guiente alcanzaron su primer número 1,
para coger instrumentos canto y arte dra- con Go now. Se apuntaron a los teclados y
eléctricos y dedicarnos al rock". mático que ya grandes orquestas, y en 1967 repitieron el
( Chris Hillman, de los Byrds era conocido éxito con el elepé Days of future passed.
californianos, 1965.) por sus apari- Han alcanzado gran popularidad con dis-
ciones en la
BBC-TV. De la
mano del pro-
ductor Mickie
Most, obtuvie-
ron su primer
éxito en 1964, Frecidie Garrity.
"QUERÍAMOS GRABAR UN DISCO EN DIRECTO, PERO NO RESULTÓ.
TE GRITABAN TANTO QUE TOCABAS MUY ACELERADO" (Gerry Marsden)
cos de sonido ampuloso y letras seudofilo- Los Dave Clark Five cultivaban una
sóficas, ya sin su cantante original (Denny apariencia pulcra y vendieron el
Laine, luego com- fantasmal sonido de Tottenham.
pañero de Paul
McCartney en el
grupo Wings).
LOS KINKS
CRONISTAS AGRIDULCES
JESÚS ORDOVÁS
La historia de los Kinks es, en buena
parte, la historia de las glorias y mise-
rias del pop británico; de cómo una mú-
sica que empezó siendo poco más que
un voluntarioso ejercicio de recreación
y asimilación del rock and roll y el
rhythm and blues norteamericano se
convierte en la música juvenil por exce-
lencia a escala mundial. Los Beatles,
l os Rolling Stones, los Animals y prác-
ticamente todos los grupos británicos
empezaron haciendo versiones y adap-
taciones de clásicos de rhythm and blues
y rock and roll. Y así también lo hicieron
los Kinks. De hecho, el primer single de
los Kinks fue una versión de Long tall
Sally, del legendario cantante negro
Little Richard. Pero el segundo (You do prohibió tocar desde 1965 hasta 1969 No es de extrañar que la siguiente
something to me) ya era una canción del por su "deplorable comportamiento" actuación de los Kinks en España tu-
líder de los Kinks, Ray Davies. en la gira americana de aquel año). viera lugar 20 años después. Y en esta
You really got me (Pye, 1964) fue el En España estuvieron por vez pri- ocasión en olor de multitudes, por la
tercero y el primer gran éxito mundial mera en el verano de 1966, justo cuan- categoría de mito que ha adquirido
del grupo. Desde entonces, el riff (frase do Sunday afternoon (Pye, junio, 1966) aquí el grupo londinense.
de dos o cuatro compases que se repite subía en las listas de éxitos británicas Entre una y otra fecha (1966-1986),
continuamente a lo largo de la canción) hasta alcanzar el número uno. Pero el la banda formada en 1964 por Ray Da-
de guitarra de la canción, muy parecido sentido del humor inglés de los Kinks vies, su hermano Dave (guitarra, vo-
al de Louie Louie, se ha convertido en no fue suficiente para encajar las difi- ces), Mick Avory (batería) y Peter
la quintaesencia del rock más duro y ex- cultades que les puso la policía españo- Quaife (bajo) pasó por una etapa in-
peditivo. la, el manager de la sala en la que toca- trospectiva, más crítica y diversificada.
Canciones como All day and all night ron (Yulia, de Madrid) y los empleados En ella, Ray Davies utilizó el lenguaje
(Pye, 1964), Tired of waiting for you del hotel Washington. Según contó el del music-hall, para hablar de los meca-
(Pye, 1965), Set me free (Pye, 1965) o propio Ray Davies en el Record Mirror nismos de poder de la industria disco-
Till the end of the day (Pye, 1965), cons- (25 de junio de 1966), en la plaza de Es- gráfica y los medios de comunicación
tituyeron el grueso de la larga serie de paña estuvieron a punto de llevarlos a (Lola versus powerman). Por entonces
singles de éxito que tuvo el grupo desde la comisaría por pisar el césped, el due- también lograron uno de sus mayores
1964 hasta 1970. Del sonido rudo pasa- ño de la sala se negaba a pagarles, ade- éxitos con Lola (Pye, 1970), una broma
ron a un estilo más refinado y personal. más de denunciarlos, alegando que sobre un travestido.
Pero aquella época dorada de los traían otro bajista (John Dalton) en El período en el que grabaron con
Kinks no estuvo marcada solamente sustitución de Peter Quaife, y al final RCA (1972-1977) no fue demasiado
por una docena de canciones definiti- únicamente pudieron tocar dos de las brillante, aunque editaron media doce-
vas y rotundas, porque Ray Davies seis galas contratadas, en condiciones na de elepés con algunas canciones me-
-el líder, cantante, guitarrista y autor delirantes. morables, como Everybody's a star
de casi todo el repertorio del grupo- (RCA, 1976). Mucho mejor les fue con
fue haciéndose cada vez más irónico, Arista, la compañía norteamericana
hasta convertirse en un observador, con la que editaron sus discos desde
crítico y afectuoso, del devenir de la so- 1977 hasta 1986; sobre todo con el do-
ciedad británica y la cultura pop. ble elepé One for the road (Arista, 1980),
Buena muestra de esa habilidad HISTORIA DEL `ROCK' en el que pasaban la cuenta de sus éxi-
para retratar personajes y ambientes tos a sus viejos fans.
en piezas de cuatro minutos son can- El último elepé de los Kinks hasta el
ciones como Dedicated follower of fas- PRÓXIMO CAPÍTULO momento (Think visual. London Records,
hion o Waterloo sunset, que también re- 1986) nos muestra un grupo todavía dis-
cibieron el espaldarazo del éxito. Éxito puesto a seguir dando guerra después de
que los llevó a actuar por todo el mun-
do (aunque en Estados Unidos se les ROLLING ST®NES más de 20 años de batallas. Y a un Ray
Davies con genio e ingenio.
EL PAIS
HISTORIA DEL `ROCK'
En la maniquea versión de la Prensa de 1964, los Beatles
eran los chicos buenos, mientras que los Rolling Stones repre-
sentaban todo lo malo y amenazador que podía haber para
la sociedad, y sobre todo para la juventud, tras el estruendo
de las guitarras eléctricas. Se trataba de una estrategia pro-
mocional, pero los Stones se encargaron de hacerla realidad:
muertos, violencia, drogas, juicios, perversidades de todo
tipo son los ingredientes de su biografía. Que es también la
historia de cómo unos muchachos enamorados de los soni
dos negros se forjan un estilo robusto y correoso, que para muchos es la quin-
taesencia del rock. Un cuarto de siglo después de su fundación siguen defendiendo
esa bandera, aunque ya con más pena que gloria.
STONES
sino también la opinión de que
representaron un vertiginoso
estilo de vida. 14 w
w
"EL `POP' ES SEXO Y HAY QUE GOLPEARLES CON ÉL
EN EL ROSTRO" (Andrew Loog Oldham, 1967)
Un toque de serenidad pétrea para cinco tencia con el devenir de los años, hasta
jóvenes airados. qué punto lo que podía tomarse en su día
como mero fogonazo publicitario o ca-
briola dialéctica acabaría siendo una reali-
dad contrastable, mensurable y de alcance
universal.
Cabellos largos, vestimenta descuida-
da, moralidad laxa, actitud a medio cami-
no entre la provocación y la indiferencia:
sobre estos pilares iba a cimentarse la re-
putación de un grupo que construía su re-
pertorio alrededor de una música con
fama de diabólica entre las filas conserva-
doras de la época, el blues con ritmo. Pero
cuando se aprestan a grabar el primer sin-
gle de su carrera, Come on, en la cara A, y I
want to be loved en el envés (editado el 7 de
junio de 1963), los Rolling Stones todavía
son un grupo mesurado en sus formas ex-
ternas; un sexteto que viste de uniforme,
que usa americanas de corte y entallado
clásicos, que luce corbatas.
Su debú televisivo se produce en el
programa Thank your lucky stars, de la ca-
dena ABC. Para tan memorable evento,
los Stones vistieron chaquetas de pata de
gallo con medios cuellos de terciopelo ne-
gro, pantalón oscuro y botines fulgurante-
mente lustrados; unos peripuestos mani-
quíes que antes de que empiecen a tocar
pueden ser perfectamente confundidos
con blandenguerías de la época Herman's
Hermits. No obstante, ya hay en ellos algo
(o mucho) que irrita a la gente de orden,
un halo caótico y provocador palpable
LOS MALOS desde los primeros compases de sus bron-
cas interpretaciones. Mientras estaban
Hubiera preferido que Mick saltando al aire las dos canciones de su
fuera un deportista, pero desde el
principio resultó muy
DE LA PELÍCULA primer single, un productor de la ABC se
lleva a A. L. Oldham hasta un rincón del
independiente. En la escuela, era MINGUS B. FORMENTOR plató y le ofrece un bienintencionado con-
de los rebeldes, aunque sacaba Un domingo primaveral de 1963. Eric sejo: "Si tienes alguna ambición respecto
notas extraordinariamente Easton y Andrew Loog Oldham se trasla a los Stones, deshazte del cantante. Su
buenas. Y se ganaba un dinerillo dan en automóvil hasta las afueras de apariencia es repulsiva, tiene neumáticos
vendiendo helados durante el Richmond para contemplar la actuación en vez de labios...".
verano. Hasta que llegó la de una de las más sólidas esperanzas del Mick Jagger y Keith Richard, nacidos
música. Recuerdo que Alexis nuevo rhythm and blues (r ü b) británico del ambos en 1943, trabaron conocimiento en
Korner llamó a mi esposa para momento: The Rolling Stones. El aconte- la escuela primaria Maypole County, de
que fuéramos a ver a Mick en el cimiento tiene lugar en el por entonces Dartford, localidad del condado de Kent,
Marquee, invitación que prestigioso Crawdaddy Club del Station de donde ambos son originarios. Sus ca-
rehusamos. Me di cuenta de que Hotel ante una feligresía compuesta a me- minos volverían a cruzarse 10 años des-
aquello iba en serio; fue cuando dias por fanáticos del r'n b y barriobajeros pués. Por entonces, a finales de 1960, des-
se quedaba colgado del teléfono de Chelsea. Al finalizar el concierto, Old- cubrieron un común amor por el rhythm
horas y horas. Luego, todos se ham rebosa entusiasmo. Easton, por su and blues americano y una también com-
dejaron crecer el pelo: hasta parte, a pesar de que mantiene ciertas re- partida amistad con el guitarrista Dick
entonces, él y su grupo eran el servas, no está precisamente descontento. Taylor. Taylor y Jagger formaban parte de
tipo de muchachos de los que En cualquier caso, el mismo lunes, Easton The Blue Boys, el segundo de ellos en cali-
cualquiera podría sentirse y Oldham ofrecen a los Stones un contra- dad de vocalista, y bajo el seudónimo de
orgulloso". to de representación exclusiva. Un mes Little Boy Blue, de manera que el reen-
más tarde, en mayo de 1963, Andrew cuentro entre Mick y Keith no tardó en
(Joe Jagger, padre de Mick). Loog Oldham, un cantante pop de 19 años propiciar la incorporación de éste y su gui-
que ya no tiene sueños de gloria artística,
sino sólidas aspiraciones a labrarse un fu-
turo como empresario, declara: "The Ro-
lling Stones no es un grupo más, sino todo
un estilo de vida. Oldham no podía ni
i maginar cuánta verdad encerraría su sen-
"LOS ROLLING PERTENECEN A ESE TIPO DE PERSONAS A LAS QUE UNO NO
DEJARÍA SALIR CON SU HERMANA MENOR" ('Daily Mirror', 1964)
tarra a la banda. En ese momento, Jagger Los Rolling sin Charlie Watts; el
estaba matriculado en la London School batería es el único stone que ha
of Economics, y a Richard acababan de mantenido una vida sin escándalos.
expulsarle de la Dartford Technical emergentes Stones en
School por inquietante acumulación de l as Navidades de
novillos. 1962, a lo que parece
Paralelamente, Lewis Brian Hopkin- más por el equipo de
Jones pasaba por serias crisis juveniles en amplificación que po-
su Cheltenham natal. Los estudios habían seía que por cualquier
dejado de ser su norte, a pesar de un bri- otro motivo.
llante aprovechamiento escolar. Ahora lo Sea como fuere, en-
ocupaban la música de jazz, los discos de tre enero y febrero de
r'n'b, un airado resentimiento frente a sus 1962 se decanta la que
mayores y, por si algo faltaba, las respon- iba a ser la primera
sabilidades paternas sobre dos hijos ilegí- formación de The Ro-
timos reconocidos apenas cumplidos los llings Stones: Mick
17 años. Tras una agitada peripecia vital Jagger (vocalista),
que le había llevado a vagabundear por Keith Richard y Brian
tierras escandinavas mientras mejoraba Jones (guitarras), Bill
su control de la guitarra, Brian Jones se Wyman (bajo), Char-
hallaba frugalmente instalado en Londres, lie Watts (batería) y el
en compañía de Pat Andrews, la madre de que se conoce como el
su segundo hijo. De modo esporádico, sexto stone, el pianista
Brian se unía a la Alexis Korner's Blues Ian Stewart. Así que-
Incorporated, a algunos de cuyos miem- daba articulada una
bros había conocido en el club local de banda a la que le espe-
jazz de Cheltenham, si bien su pasión es- raba uno de los futu-
condida era consolidar una banda de ros más brillantes,
rhythm and blues propia, a cuyo fin insertó prolíficos y rentables
un anuncio en la publicación musical Jazz de toda la historia del
News. Uno de los primeros en responder al rock. Cinco pilares so-
llamamiento de Brian fue el pianista Ian bre los que levantar un
Stewart. solo mito, si bien dos
El Ealing Blues Club era en aquellos de ellos con un grosor
días el cuartel general, cada sábado por la especial y determinan-
noche, de la banda de Alexis Korner y de te. "Si Brian Jones,
sus escasos pero fieles seguidores. Fue en Bill Wyman, Charlie Watts y yo no hubié-
una de estas sesiones donde Jagger, Ri- semos existido nunca, Mick y Keith ha-
chard, Dick Taylor y el resto de los Blue brían tenido un conjunto que hubiera so-
Boys conocieron a Brian Jones. Habían nado y hubiera tenido la misma imagen
entrado en contacto una serie de adictos que los Rollings Stones", declararía Ian os Rolling Stones nunca
al r'n b con claros matices diferenciadores Stewart años después. han aceptado ser portavoces de
entre sí. Por un lado, Jagger estaba rendi- ¿Cómo sonaban los primeros Stones? ningún movimiento, pero
damente prendado de los saberes de Jimmy Reed, un ¿A qué fuentes primarias remitían su ins- algunas de sus canciones han
bluesman deChicagoqueha- piración? Un claro indicio ya viene ence- adquirido carácter de himno por
bía alcanzado relativa notoriedad gracias rrado en el propio nombre de la banda. su habilidad para articular
al apogeo del rock and roll. Richard toma- Rollin' stone es el título de una vieja com- sentimientos generacionales.
ba como guías a Chuck Berry y Bo Didd- posición de Muddy Waters, una señal más Ése es el caso de Satisfaction (en
ley, lo que provocaba frecuentes discusio- de su adicción colectiva a los discos de la que Mick Jagger se confiesa
nes con un excelente guitarrista de blues blues. Muddy Waters, Jimmy Redd, Little frustrado ante la invasión
incorporado al círculo, Geoff Bradford, Walter, Slim Harpo eran sus principales publicitaria y el hecho de que su
admirador y emulador rendido de Muddy alimentos en lo que respecta al blues de chica tenga la menstruación);
Waters. Charlie Watts, batería fijo en la posguerra amplificado eléctricamente, un Street fighting man (la agitación
Blues Incorporated de Korner, se mostra- blues todavía próximo a sus raíces rurales. del mayo francés del 68 pasada
ba cauto ante la eventualidad de incorpo- El rock surgido a mediados de los cincuen- por el rock), o You can't aiways
rarse a un grupo de airados rebeldes muy ta lo asimilaban a través de la obra de gel what you want ("No siempre
poco motivados por el jazz, mientras que Chuck Berry, Bo Diddley o los Coasters, puedes conseguir lo que
Bill Wyman (Perks, según el registro civil) un sonido de corte mucho más urbano y quieres, / pero si lo intentaras
-ex miembro de la RAF que tocaba en juvenil. El trípode quedaba completado alguna vez, / podrías
una banda de rock afincada en el sur de con la aportación de la soul music, la músi- descubrir / que consigues lo que
Londres, los Cliftons- se incorporó a los ca que en los primeros sesenta estaban necesitas").
imponiendo figuras como Rufus Thomas,
Solomon Burke u Otis Redding, al mari-
dar elementos de blues y de gospel.
El interés de los Stones por la música
popular negra norteamericana no queda-
ba, pues, circunscrito a un solo estilo; no
"LOS BEATLES TENÍAN ALGO DE VENDEDORES DE SALDOS,
PERO LOS STONES NUNCA DAN PORQUERÍAS" (Elton John, 1971)
Los Rolling Stones durante una sesión basaron su repertorio en inolvidables co-
fotográfica llamativa, que los vers. Tanto es así, que su primer elepé, The
muestra en pleno frenesí caníbal. Rolling Stones (1964), sólo re-
coge un tema propio, Tell me;
el segundo y el tercero -The
Rolling Stones número 2 (1985)
y Out of our heads (1965)-,
tres cada uno, y hay que espe-
rar hasta Aftermath para en-
frentarse con una obra total-
mente compuesta por mate-
rial original del grupo.
En una entrevista concedi-
da a Jazz Beat (febrero 1964),
Brian Jones señalaba: "Esen-
cialmente, esa música nos re-
sulta extraña, es preciso escu-
charla mucho antes de quedar
sumergido en ella. Probable-
mente acabaremos por com-
poner nosotros mismos nues-
tro repertorio, pero antes de-
bemos absorber el idioma de
base. Por tanto, si bien a par-
tir de Aftermath arrancaría esa
anunciada carrera de autores,
era claro que no se perfilaba
como una renovación estilísti-
ca integral, como un rechazo
frontal a sus primeras expe-
riencias. De hecho, y tras casi
25 años de vida, las canciones
más perdurables y redondas
de su repertorio están vincula-
das de un modo u otro con la
música popular negra ameri-
cana, mientras que sus traba
eran otros seguidores más del r'n b britá- jos más esotéricos y divagantes (Between
nico, no se asemejaban en nada a aficiona- the button o Their satanic majesties request,
dos y puristas blancos dedicados a practi- ambos elepés grabados en 1967) son los
car o escuchar las formas más antiguas y que cortan sus umbicales conexiones con
legendarias de la música afroamericana la negritud y su arte.
despreciando las inmediatamente con- El material recogido en Aftermath se
as canciones de los temporáneas con farisaicas o indocumen- mueve en la línea que habían trazado po-
Rolling Stones están teñidas de un tadas acusaciones de comercialidad. Aun- cos meses antes sus tres primeros singles
erotismo primario que no ha que la etiqueta genérica empleada para re- americanos, otros tantos bombazos en
dejado de levantar polémicas. En cubrir el lote fuese la de rhythm and blues, ventas y popularidad: (I can't get no) Satis-
algunos casos (Under my lo cierto es que el quinteto británico em- faction, Gel off of my cloud y 19th nervous
thumb, Factory girl, Back street pleaba un repertorio amplio y escorado breakdown. Los Stones habían encontrado
girl) l a crudeza de los textos hacia donde debía para lograr arrastrar su propia vía, indudablemente deudora de
refleja aspectos del sistema masas de seguidores: el, rock and roll. El la música afroamericana, pero tan diferen-
británico de clases. Los grupos r'n b de los Stones no es en puridad músi- ciada del blues como pueda estarlo la jerga
feministas han protestado ca negra, como tampoco lo fue la de otras negroamericana del cockney barriobajero
airadamente contra Midnight formaciones de línea ortodoxa, desde la londinense o del teenager talk de los blan-
rambler (apología del de Korner a las de John Mayall, pero no cos americanos. Aftermath, un elepé bisa-
est(angulador de Boston), era escasa novedad ver a un culebreante gra, esencial en la historia musical de los
Brqwn sugar (canción racista), o la tipo como Jagger cantando con completa Stones, tendría sin embargo una repercu-
puillicidad de Black and blue, en desinhibición, una pronunciación franca- sión relativamente moderada, al coincidir
l a que una dama atada y mente extravagante y una sensualidad su aparición con la de dos obras funda-
vapuleada proclama su felicidad provocadora jamás vista hasta entonces. mentales, el Revolver, de los Beatles, y el
ante el nuevo disco del grupo. No se trataba de mera mímesis de lo ne- Blonde on blonde, de Bob Dylan.
gro, sino de la captación profunda de su
espíritu, de elaborar música primordial-
mente dirigida a la extraversión corporal.
Durante toda su primera etapa, desde
la grabación de Come on hasta llegar al
elepé titulado Aftermath (1966), los Stones
"SÓLO ME PONGO ENFERMO CUANDO
DEJO LA DROGA" (Keith Richard, 1974)
RITMO
OXIDADO
DIEGO A. MANRIQUE
Su historia legal podría llenar varios sa-
brosos libros. Carne de mito, sus andan-
zas corren de boca en boca (y han pasado
a la letra impresa, como en el caso del li-
bro Up and clown with The Rolling Stones, el
yo estuve allí de Tony Sánchez, ayudante
español del quinteto). La morbosa atrac-
ción que encierran sus letras -donde el
sexo es poder, el paso del tiempo se confi-
gura como principal amenaza, y se apues-
ta por la épica de la supervivencia- en-
cierra abundantes claves de una biografia
feroz.
Son muchos los ángulos posibles para
desentrañar las dimensiones de un grupo
que, siguiendo el tópico, es más que una
banda de rock. Precisamente entre la tur-
bulencia de rumores, connotaciones y mo-
ralejas, se olvida esa esencia: los Rolling
Stones como paradigma del rock.
Un grupo que tardó en afirmarse, en
trascender sus orígenes de adictos a la ne-
gritud musical y forjar un sonido reconoci-
ble. No les ayudó mucho su primer pro-
ductor, Andrew Loog Oldham, más bri-
llante en la promoción que en el estudio.
Se sintieron acomplejados por la exube-
rancia de sus competidores de Liverpool,
que se adelantaban a sus jugadas con se-
guridad: tal vez no fuera Their satanic ma-
jesties requesi (diciembre de 1967) una co-
pia de Sgt. Pepper's ( mayo del mismo año),
pero, con todos sus encantos, deslucía del obra. Es consecuencia del alejamiento en-
elepé de los Beatles. tre las formas de entender el mundo (y el
Es con Beggar's banquet (1968) cuando propio grupo) de Mick Jagger y Keith Ri-
se solidifica el clásico sonido Stones: guita- chards, que solían responsabilizarse res- a serie de incidentes de
rras sucias, ritmos pesados, un ambiente pectivamente de letras y música en los l os Rolling Stones con la ley
rancio con ecos de blues terrosos. A lo lar- tiempos dorados. Y también de la degene- alcanzó su punto culminante en
go de los años, han experimentado con el ración de unos métodos de trabajo: los 1977, cuando Keith Richards fue
reggae, el country, la disco-music o las bala- discos se graban en largas sesiones, com- acusado por la policía
das, pero siempre han retornado a lo que pletándose en diferentes estudios. Keith canadiense de tráfico de heroína,
saben que es su especialidad: una música puede pasar horas guitarreando hasta que en lo que se supuso una acción
densa y no muy tarareable (de ahí su rela- haya un riff aceptable al que Jagger da for- de castigo por la proximidad del
tivo fracaso en las listas de éxitos), marca- ma de canción y una serie de músicos grupo a Margaret Trudeau,
da por la tensión entre instrumentos y esa -los del grupo o invitados- configuran. esposa del primer ministro. Los
voz arrogante, monótona para oídos no Así, los Rolling Stones han acumulado hábiles abogados evitaron la
sintonizados con el rock en estado salvaje. astronómicas facturas de grabación, ar- cárcel al hombre considerado
A pesar de conocer ese secreto, han ido marios de cintas inacabadas y fama de como la piedra fundamental de
perdiendo incisividad y dinamismo en su holgazanes. En su cenit, esa forma orgáni- los Rolling Stones.
ca de destilar rock ha generado discos de
sob6rbia malignidad y rabioso impacto,
como Exile y On Main Street. Últimamente
no cuajan los ingredientes y parecen pri-
sioneros de sus vicios aristocráticos, can-
sadas panteras con botas de plomo.
"DURANTE UN TIEMPO ESTUVIMOS EN PELIGRO
DE SER RESPETABLES" (Keith Richards, 1966)
SUS SATÁNICAS
MAJESTADES
EDI CLAVO
Keith Richard avisó en 1966 de los pe-
ligros de la respetabilidad, y hoy, en
1987, los Rolling Stones es un grupo
EL `RHYTHM
AND BLUES'
BRITÁNICO
El Spencer Davis Group, con la
intensa voz del joven Steve Winwood
(a la derecha, abajo), causó
profunda impresión en Europa, y sus
éxitos han sido revividos
regularmente.
15
"CON EL `BLUES' ERAS PARTE DE UNA SECTA. ESTOY SEGURO DE QUE
MICK JAGGER O ERIC BURDON SENTÍAN LO MISMO" (John Lennon)
Chuck Berry y Bo Diddley. Sin olvidar a Georgie Fame, que en sus inicios hizo
Ray Charles, cuya voz tórrida presagiaba rhythm and blues, consiguió el éxito con
una canción pop, Bonnie and Clyde.
lo que luego se llamaría soul, algo que fas-
cinaría por igual a los Rolling Stones y a
miles de grupos.
Para los aspirantes a bluesmen anglosa-
jones, una disyuntiva: dedicarse al estudio
de sus inspiradores, buscando las formas
más primitivas y genuinas, o dejarse
arrastrar por el placer de hacer música
para un público joven, ansioso de noveda-
des sonoras. Alexis Korner o John Mayall
fueron los que levantaron la bandera del
purismo, mientras que los Rolling Stones
-a los que no faltaban pruritos proselitis-
tas- se encaminaron hacia el mercado
abierto por los Beatles.
Según el modo de ver del sector tradi-
cionalista, los grupos de rhythm and blues
no hicieron más que diluir los sonidos ne-
gros con concesiones al gusto del momen-
to, vendiendo una pálida copia mientras
que los intérpretes originales -nota melo-
dramática- se morían de hambre. Esas
acusaciones tenían una base cierta, coinci-
dente con la eterna historia de la explota-
ción del arte negro por manipuladores
blancos.
La otra cara de la moneda: muchos de
los bluesmen hubieran muerto realmente
en la miseria de no ser por la publicidad
generada por sus alumnos melenudos.
Aparte del negrismo militante de un Eric
Burdon, fueron muchos los discípulos que
reconocieron públicamente su deuda con
las fuentes del gueto; en su momento, pa-
garon el favor llevando a esos artistas ori-
ginales en sus giras o prestando sus nom-
bres a discos concebidos para presentar-
les ante un público amplio, caso de B. B.
King, Muddy Waters y otros. Qué bonita
paradoja: los británicos lograron que figu-
ras de color ignoradas por la América
blanca y en trance de olvido entre su pro-
pia comunidad tuvieran una nueva ca-
rrera.
Y la cuestión candente. Dado que se plazaron sutilidad por urgencia. Slim Har-
trata de un género derivativo, ¿qué validez
tiene el rhythm and blues británico? Mu-
chos de esos discos suenan hoy inmaduros
y risibles, críos imitando música de hom-
po recitaba las metáforas sexuales de I'm
a king bee con la calma de alguien que sabe
que se dirige a sus iguales; Mick Jagger en-
tona esa canción con el lúbrico deleite del
El rhythm and blues fue el
campo de entrenamiento de
futuras estrellas de la década de
bres. Tampoco se salvan las grabaciones mocoso que ha descubierto una forma de
de los fanáticos, que copiaban todos los expresar su calentura y no quiere que na- los setenta: Elton John tocaba
matices vocales e instrumentales de los die -especialmente la parte femenina de las teclas en Bluesology,
artífices negros en desesperado -y fútil- su audiencia- se equivoque respecto al mientras que Rod Stewart se
intento de meterse bajo su piel. Si el contenido. desgañitó soplando la armónica
rhythm and blues isleño merece un recuer- Ésa fue la grandeza del rhythm and o cantando con numerosos
blues británico de mediados de los sesen- grupos de escasa fortuna; David
do, es precisamente por los mixtificado-
res. Los que acentuaron el ritmo, subieron ta. La reconversión del blues de Chicago Bowie encabezó varios
el volumen de sus amplificadores y reem- en rock metálico y desenfrenado. El tram- conjuntos de sonido negroide
polín para que numerosos talentos -Ray cuando todavía se llamaba
Davies, Jagger-Richards, Steve Winwood, David Jones, y tuvo el detalle de
Van Morrison- pudieran generar sus homenajear esa época en el
propios estilos. El punto de partida para disco Pin-ups (1973).
que las guitarras de Eric Clapton, Jeff
Beck, Peter Green o Jimmy Page empeza-
ran a despegar.
"EN CUANTO OÍ LOS DISCOS DEL SELLO CHESS SÓLO PENSÉ
EN IRME A CHICAGO A VERLOS EN DIRECTO" (Van Morrison)
Van Morrison (sin instrumento), al enrola en los Monarchs, grupo que actúa
frente del grupo Them. por la República Federal de Alemania.
Regresa a Belfast en 1963 y forma su pro-
pio grupo ayudado por dos componentes
de los Monarchs: Them. Son Billy Harri-
son (guitarra), Ronnie Millings (batería) y
Eric Wisksen (bajo), más Morrison en las
voces. Firman contrato con Decca y se
trasladan a Londres, donde su imagen de
jóvenes airados (The angry young Them,
decía el eslogan de la época) y sus dinámi-
cas y congestionadas interpretaciones es-
tán a la orden del día. Una nerviosa ver-
sión del clásico Baby, please don't go, de
Joe Williams, les sitúa en listas, pero será
un par de composiciones del propio Mo-
rrison, Here comes the night y la lúbrica
Gloria, tantas veces versionada posterior-
mente, las que les establecen a nivel inter-
nacional.
Debido a problemas internos, los dos
únicos elepés de Them son registrados con
músicos de estudio, y tras una gira norte-
americana poco propicia, Morrison vuel-
ve a su tierra y el grupo continúa por su
cuenta. Van, animado por el productor
Bert Berns, se traslada en 1967 a Nueva
York para grabar sus primeras canciones
en solitario, entre las que destacan la eró-
tica Brown eyed girl o la claustrofóbica T.
B. Sheets. Berns muere de un ataque al co-
razón en diciembre de ese mismo año, y
C
Morrison ficha por Warner Bros. Con ab-
soluta libertad creativa graba en tan sólo
48 horas Astral weeks, obra capital de su
uando era un chaval de
discografia y una impresionante colección
quizá 10 u 11 años pensaba que
de canciones.
quería ser un cantante de
rock and roll. Era como un AN MORRISON: El resto de su carrera se ha dividido en-
tre el mercado norteamericano, donde
sueño. El sueño significaba
pudo cultivar su vertiente soul en discos
que ese muchacho tenía un
objetivo, una ambición. Y mi
`BLUES' MÍSTICOS como Moondance, y el descubrimiento
nostálgico de sus raíces irlandesas, que
sueño se hizo realidad. Pero la I GNACIO JULIÁ impregnan de aromas célticos elepés como
cosa es que creces y dejas de A lo largo de los años, Van Morrison ha Veedon fleece y toda su producción de los
ser ese chaval. Tienes objetivos desarrollado un estilo inconfundible de últimos tiempos. Con grabaciones recien-
y ambiciones distintas, a decir el blues, esculpiendo con su voz un tes, como Beautiful vision, ha mantenido el
veces no tienes ninguna cósmico aullido cuyo espectro va del susu- interés de sus seguidores, profundizando
ambición, a veces te das rro introspectivo al más doloroso y extra- con instintiva habilidad en las bases espi-
cuenta de que ya ni siquiera vertido de los lamentos. No canta, en el rituales del rock y el blues, haciendo de su
tienes aquella ambición. Son sentido estricto del término; se confiesa, música una religión libre y etérea. Van
diferentes niveles, es lo que balbucea inspiradas letanías, expresa sus Morrison sigue siendo ese individuo pe-
ll amamos vida". sentimientos íntimos más a través de infle- queño y huraño, poseído por su arte, tími-
xiones vocales que de las palabras propia- do y melancólico, ajeno a las inquisiciones
Van Morrison mente cantadas. Van Morrison ha sido el sobre su obra y su persona, náufrago vo-
mayor exponente blanco del potencial de luntario en los universos paralelos descu-
esta música como método curativo, como biertos y explorados por su voz. Univer-
exorcismo de demonios interiores, como sos a los que se llega mirando hacia aden-
catalizador de las inquietudes del espíritu. tro y escuchando, por utilizar el título de
Nacido George Ivan en Belfast el 31 de una de sus obras, "el inarticulado discurso
agosto de 1945, a los 11 años ya actuaba del corazón". a
en grupos locales amenizando los bailes
domingueros. Su madre era cantante de
jazz y blues; su padre, coleccionista fanáti-
co de discos: no resulta, pues, extraño que
dominara a muy temprana edad instru-
mentos como la guitarra, el saxófono o la
armónica. En 1960 deja la escuela y se
"CLAPTON AMA TANTO EL `BLUES' QUE NOS HA DEJADO: NO SOPORTA
QUE SE TOQUE TAN MAL COMO LO HACEMOS NOSOTROS" (Keith Relf)
A S. feligresía crecien-
te. Se estrenan
acompañando a
EL TRABAJO SUCIO Sonny Boy Wi-
lliamson, un
JOSÉ MARTA REY bluesman en gira.
Un disco atroz. El
El hecho de que en los Yardbirds se dieran
clima parece idó-
a conocer Eric Clapton, Jeff Beck y Jimmy
neo: firman con
Page, tres de los héroes de la guitarra más
Columbia, pero
pontificados, eclipsa otros aspectos sin
sus dos singles ini-
tanta medalla, pero no menos cruciales.
ciales naufragan.
Pioneros en casi todo, fueron psicodélicos
A finales de 1964
avant la lettre. Inauguraron el pop exótico
de infusiones orientales y la idolatría de aparece Five live
Yardbirds, primer
los guitarristas. Su originalidad, diluida en
elepé y modesto
l a dialéctica sonora de su tiempo, propició
documento de
buena parte del futuro, del garaje al heavy.
época. Necesitan
Sus cinco años son el más vivo escapa-
un éxito. Go-
rate de remolinos y contradicciones que
sacudieron la evolución del pop. Grupo de melsky les tienta
con las sirenas del
culto, mantuvo, sin embargo, un apretado
pop: una canción
romance con los flashes del éxito. Cancio-
del desconocido
nes pop de lujosa inspiración, gancho hip-
Graham Gould-
nótico y sonidos fantasiosos: humo indio,
man. Es For your
cantos gregorianos y bizqueos psicodéli-
love. Con clavi-
cos. Premoniciones de futuros trances hi-
cordio de Brian
ppies. Sin olvidar las raíces: sólidas punta-
Auger, llega al nú-
das de fogoso rhythm and blues.
Pese a la exuberancia de hallazgos, sus mero tres. Clap-
ton se larga con
singles se hacían en una sola toma. Su se-
John Mayall.
gundo elepé, con insólitas burbujas y revo-
Jimmy Page
lucionaria producción, se realizó en cinco
declina la sustitu
días y cuatro pistas. Precariedades que les
ción. Les recomienda a Jeff Beck. Por Es-
acompañarán hasta el final.
Hasta 1965 fueron una estricta banda tados Unidos se venden sus temas moder-
nos. En los estudios de Chess graban Sha-
de blues, típico caso de estudiantes de arte
pirrados por sellos como Chess y Vee Jay. pes of things. Pero Paul se despide. Su futu- eff Beck abre en los
ro como productor incluirá a Cat Stevens Yardbirds la página salvaje.
Antes de Jeff Beck, Keith Relf y su impo-
y Carly Simon. Por fin, Page olvida su I ntempestivo, pero de
nente flequillo robaban las miradas. Éste
mala salud y lucrativas sesiones y entra de i nagotables recursos,
sufría de asma, pero tocaba decentemente
bajista, compartiendo luego brevemente el desarrolló un arsenal de
la armónica y esgrimía una voz cortante.
punteo junto a Beck. Hasta noviembre, en ruidos e increíbles sonidos.
Paul Samwell Smith era el cerebro, un en-
vidiado bajista. De batería, Jim McCarty. que éste les deja tirados tras realizar la úl- Para Heart full of soul trajeron
tima maravilla del grupo (Happenings 10 de la India a un músico que
Ellos, junto a dos guitarristas (Chris Dreja
y Anthony Topham), sustituyeron a los years ago) y una explosiva escena en el fil- debía tocar el sitar. El
me Blow-up, de Antonioni. hombre, rodeado de melenudos
Stones en el club Crawdaddy de Rich-
Ya en 1967, el toque mágico de Mickie y barbaridades eléctricas, no
mond, regentado por Giorgio Gomelsky,
Most (Animals, Donovan) no impide su dio una nota. Beck agarró su
que se convirtió en su manager.
desorientado declive. Sus singles se hun- guitarra y grabó en un abrir
En octubre de 1965, el guitarrista Top-
den en la naciente era del álbum. Se di- de ojos el efecto deseado.
han vuelve a la universidad. Un Clapton
con pinta de monaguillo le reemplaza. Sus suelven en 1968. Relf morirá electrocuta-
gustos más modernos renuevan el reperto- do en 1977 tras fallidos episodios: Toget-
rio de versiones mientras se gana el apodo her, Renaissance (ambos con Jim) o Ar-
Manolenta en las célebres rave-ups, impro- mageddon. McCarty pasará por Shoot,
Illusion y otros grupos hasta la reunión de
1983 con Chris y Paul, primero como
Yardbirds y luego como Box of Frogs.
Jimmy Page corre mejor suerte. Tras reu-
nir unos New Yardbirds y cumplir una
gira nórdica, entra en la historia con Led
Zeppelin.
"LLEVAMOS DÉCADAS CANTANDO `BLUES', Y AHORA LOS JÓVENES
PIENSAN QUE LO INVENTARON LOS INGLESES" (Memphis Slim)
Eric Clapton, Peter Green o Mick Taylor; Los Pretty Things hacían una música
más rottingstoniana que el propio grupo
las baterías de Aynsley Dunbar o Keef de Mick Jagger.
Hartley, o los bajos de John McVie y Jack
Bruce se formaron en su grupo, que a par- dos caribeños. Le
tir de los setenta cambia la nacionalidad respaldaba una
de sus componentes por los norteamerica- banda flexible ¡¡a-
nos Don Sugarcane Harris, Larry Taylor o mada Blue Fla-
Harvey Mande¡, y la orientación de su mes, con la que
música hacia el jazz. Mayall nunca ha sido obtuvo éxitos
un hombre de discos de éxito, pero su la- como Yeh, yeh o
bor docente resultó espectacular. Gel away, antes
Graham Bond (1937-1974). Debutó de seguir en soli-
como saxo alto en la banda de Don Ren- tario a partir de
dell, aunque pronto cambió el saxo por el 1966.
órgano y se unió en 1962 a la banda de Manfred Mann.
Alexis Korner. En 1963 se independizó y Fue el grupo del
formó la Graham Bond Organization, pianista de jazz
para tocar una mezcla de rhythm and blues surafricano Mi-
y jazz. Entre sus músicos destacaron Gin- chael Lubowitz,
ger Baker, Jack Bruce, John McLaughlin, que en 1962 llegó
Dick Heckstall-Smith o Joh Hiseman. al Reino Unido y
Murió tras arrojarse al metro en la esta- fundó una banda,
ción de Finsbury Park de Londres. los Mann Hugg
Gracias al impulso de estos tres músi- Blues Brothers,
cos apareció una generación de artistas junto con Mike
que empezaron recreando piezas ajenas y Hugg, que sería
lograron en ocasiones resultados prodi- ' su compañero
giosos. Entre los solistas destacan los si- casi inseparable.
guientes: El nuevo nombre
Chris Farlowe (John Deighton) (1940). nace en 1963, y su
Uno de los muchos enamorados de los so- carrera se centra
nidos negroides, a los cuales daba un tra- en realizar versio-
tamiento adecuado gracias a su poderosa nes y algún tema
voz. Al final de los años cincuenta militó propio con el
en bandas de skiffle. En solitario, tuvo una rhythm and blues
banda de apoyo llamada Thunderbirds, como camino inicial, aunque en su evolu-
por la que desfilaron Albert Lee, Dave ción se van sucediendo diversas orienta-
Greenslade y Carl Palmer. No alcanzó ciones (folk, soul, pop) hasta acabar con
gran relumbrón, pero sí hizo discos muy jazz-rock y, en tiempos recientes, rock pro- Newcastle, n la universidad de
los estudiantes de
apañados, entre ellos versiones de los Ro- gresivo. Destacaron como intérpretes del arte nos inclinábamos
Se retiró repertorio de Bob Dylan. Por la banda por el
lling Stones (Think, Out of time).
en 1968 y regresó ocho años después con desfilaron excelentes músicos, como Tom jazz y el blues. Charlie Parker
McGuinnes, Mike Vickers, Paul Jones, era mi héroe. Para nosotros,
Albert Lee a su lado.
Long John Baldry (1941). Fue el can- Jack Bruce, Mike d'Abo o Klaus Voor- l os Animals, que eran de la
tante de las bandas de Alexis Korner y man. ciudad, no pasaban de ser
Cyril Davies hasta que éste murió. Enton- Pretty Things. Una larga carrera la otro grupo pop, algo que oías
ces decidió formar su propio grupo, los suya: en los comienzos eran como los Ro- de lejos sin concederle
Hoochie Coochie Men. En 1965 estuvo en lling Stones, pero mucho más primitivos y mucho mérito. Sin embargo,
salvajes. De hecho, su bajista Dick Taylor cuando me metí en un grupo,
Steampacket con Brian Auger, Julie Driscoll y Rod Stewart; luego trabajó con fue un stone hasta que decidió seguir por yo hice lo mismo: soul, rhythm
Bluesology, y posteriormente en solitario, su cuenta junto con Phil May, John Stax, and blues. Era demasiado
dedicándose a las baladas con cierto éxi- Brian Pendleton y Viv Prince. Fueron una duro tocar bien un saxófono". .
to. En los setenta volvió a grabar con el auténtica pesadilla para los pusilánimes,
patrocinio de Rod Stewart y Elton John, aunque evolucionaron, primero, hacia la Bryan Ferry
dos de sus famosos alumnos. psicodelia, y en los años setenta, hacia un
Georgie Fame (1943). Nació en Leigh rock más americano.
(Lancashire), y su verdadero nombre es Spencer Davis Group. Nacieron en Bir-
Clive Powell. Fue pionero en la mezcla de mingham, en 1963, con Spencer Davis,
rhythm and blues con toques de jazz y soni- Peter York y los hermanos Stevie y Muff
Winwood. El verdadero cerebro del grupo
era el teclista y cantante Stevie Winwood,
que lo abandonó para formar otra banda
(Traftic), momento en el que la orienta-
ción de la formación se escapa del rhythm
and blues. Sus más celebradas canciones
fueron Keep on running, Somebody help me,
Gimme some lovin' y I'm a man.
"APRENDIMOS `LA CASA DEL SOL NACIENTE' DE UN DISCO DE DYLAN,
ASÍ QUE NO TODO ERA OÍR NEGROS" (Eric Burdon)
L
leyenda.
Downbeat estaba
situado encima de
una especie de al-
OS ANIM ALS macén abandona-
do, yendo hacia
los muelles, y las
CARBÓN DE NEWCASTLE vías del tren pasa-
ban justo por de-
NACHO SÁENZ DE TEJADA trás, haciéndolo
El grupo británico de la primera mitad vibrar. Era estre-
de la década de los sesenta más in cho, húmedo y su-
fluenciado por la música negra norte- cio, y la música
americana fue The Animals. También torcía las pare-
el más agrio, desgarrador e inconfundi- des". Allí, los Ani-
ble. Buenos compositores, aunque mals se endurecie-
poco prolíficos, y hábiles en la elección ron, mientras Eric
de versiones, sus primeras canciones Burdon proclama-
tenían una estructura muy simple. Un i ba cada noche su
comienzo sencillo de la guitarra de amor por Ray
Chris Valentine, el órgano de Alan Pri- Charles.
ce o el bajo de Chas Chandler. Acom- A finales de
pañamientos repetitivos y machaco- 1963, Mickie
nes, con la fuerza de unos blancos que Most, un fracasa-
deseaban con toda su alma emular a do cantante de 25
sus maestros negros. Y la voz excelente años con aspira-
y profunda de Eric Burdon. Las ideas ciones de produc-
estaban claras. Sólo faltaba un golpe tor, les conoció y
de suerte, que adoptó nombre de can- les propuso gra-
ción: The house of the rising sun. La his- bar un disco en
toria de los Animals comenzó en 1958, Londres. Tras ha-
cuando en torno a un organista de 16 ber debutado el
años se formó el Alan Price Combo, 27 de diciembre
con un repertorio de skiffle-blues. Alan en el programa Saturday club, de la ble, duro y dramático arreglo de Alan
Price (19 de abril de 1942) alternaba BBC, en marzo de 1964 apareció su Price para La casa del sol naciente, pen-
sus estudios en la Jarrow Grammar primer single, con Baby let me take you sado a la medida de la voz de Burdon,
School con actuaciones en pequeños home, una canción tradicional norte- había sorprendido a unos aficionados
clubes de ciudades del noreste de Gran americana. Llegaron al número 15 de que cada día esperaban algo nuevo.
Bretaña. Al mismo tiempo, en New- las listas. Esta necesidad de cambio, unida a la
castle upon Tyne, un joven Eric Bur- Tres meses más tarde, los Animals saturación del mercado con nuevos
don (11 de mayo de 1941), estudiante realizaban un nuevo intento de éxito grupos, impidió a los Animals repetir el
de grafismo y fotografia, comenzaba con otra canción folclórica: The house éxito en 1965, a pesar de las excelentes
a interesarse por viejos discos de of the rising sun. En pleno reinado de los Don't let me be misunderstood, We gotta
blues. Beatles, cuando la fiebre era más alta a get out of this place o It's my life.
En 1962, la reunión de Eric Burdon causa del estreno de la primera película A finales de 1965, Alan Price aban-
con el Alan Price Combo dio como re- del cuarteto de Liverpool, los Animals donó el grupo por diferencias con Eric
sultado los Animals. Junto al cantante alcanzaron, el 25 de julio de 1964, en Burdon y temor a los viajes en avión,
y al organista, completaban el quinteto tan sólo tres semanas, el número uno formando el Alan Price Set, trabajando
de Newcastle el bajista Bryan Chas de las listas británicas, y durante el mes luego en solitario y como actor.
Chandler (18 de diciembre de 1948), el de septiembre repitieron el éxito en Es- Bajo el nombre de Eric Burdon and
guitarrista Hilton Valentine (21 de tados Unidos. Su impacto en el resto the Animals, continuaron las desercio-
mayo de 1943) y el batería John Steel del mundo no fue menor. Había triun- nes. En 1966, el batería John Stell re-
(4 de febrero de 1941). fado la fuerza y la sencillez. El impeca- gresó a Newcastle, y el bajista Chas
El repertorio de los primeros Ani- Chandler descubrió a Jimi Hendrix,
mals era un continuo homenaje a la convirtiéndose en su manager. Hilton
música negra, con canciones de John Valentine también abandonó, dejando
Lee Hooker, Ray Charles, Sam Cooke a Burdon solo con su nuevo grupo, los
y otros. A excepción de algunas peque- New Animals, que duró hasta que en
ñas giras, en las que lograron acompa- HISTORIA DEL `ROCK' 1967 inició una irregular carrera como
ñar a clásicos del blues como Sonny solista, con algún éxito al frente de
Boy Williamson, tocaban las noches de War. Los Animals originales volvieron
PRÓXIMO CAPÍTULO a reunirse en 1968, 1976 y 1983 para
los sábados en clubes de Newcastle,
como Downbeat y Club A Go Go. El grabar discos, aunque ya sólo la voz de
ambiente de sus primeras actuaciones
lo describe el escritor Nick Cohn: "El
LA ERA DEL 'POP' Eric Burdon era depositaria de ese es-
píritu que pretendían recobrar.
EL PAIS
FLORES
MULTICOLORES
JOSÉ MARÍA REY
Conquistado el mercado norteamericano,
Londres es la meca del pop. Y Carnaby
Street, su centro. Las radios piratas, la te-
levisión y la moda son parte del compló y
difunden las nuevas consignas de incon-
formismo e independencia. En minifalda,
algunas cantantes hacen sentir su pre-
sencia:
Lulu (1948). Tenía 16 años cuando, al
frente de sus Luvvers, triunfó con su pri-
mer single, Shout. Era de Glasglow, peque-
ña y regordeta, pero daba la talla desen-
vuelta con sus minifaldas, su ropa de An-
gela Cash y su voz arenosa, que redimía el
material un poco blando. Rodó con Sid-
ney Poitier To sir with love, cuyo tema cen-
tral le dio su número uno en EE UU. Se
casó -y divorció- con Maurice Gibb, de
los Bee Gees, y terminó en Eurovisión
(1969). Bowie produjo su reaparición en
1974.
Cilla Black (1943). La chica del guardarro- have to say you love me. Dusty in Memphis
pa de The Cavern (Liverpool). Gritona y (1969) fue su cúspide y su canto de cisne.
recatada, Brian Epstein le propició para Marianne Faithful (1947). Hija de una ba-
su debú un inédito de Lennon-McCartney, ronesa, vio en el pop la nueva aristocracia Algunos supervivientes
pero la gran campanada llegaría con su y fue su portavoz televisiva. Encarnó a la cuentan ahora que el swinging
versión del Anyone who had a heart (1964), chica interesante. Hablaba de temas pro- London fue un invento de la
con el que mantuvo buenas ventas hasta el caces con igual desvergüenza y tono. Tuvo Prensa, que se enteró tarde y
final de la década. relaciones con tres stones, hasta que se de- mal (en referencia al gran
Petula Clark (1933). Comenzó a los siete cidió por Jagger. Ellos le escribieron As reportaje que la revista
años. Ha participado en 20 películas. Su tears go by, su debú. Acompañó a Jagger a norteamericana Time dedicó
lista de éxitos se inició en 1954. Cuando el la India y a los titulares: detenciones, or- a la ciudad en 1966).
pop llegó, ella era como una madre un tan- gías, drogas... Hizo teatro, cine y actuó en Curiosamente, el mejor
to anticuada. Pero su admirable voz se San Remo (1966). Su voz ahogada sedu- testimonio del espíritu, el
apuntó a lo que llegaba: del vibrante cía desde modestas versiones mientras su ambiente, el color y la
Downtown al empalagoso This is my song. vida se desplomaba: en Australia, las so- amoralidad de esa época está
Dusty Springfield (1939). La voz soul con bredosis se complicaron con un intento de en la película Blow up,
pestañas postizas blancas. Abusaba del suicidio. Recuperada y con dos matrimo- realizada por un italiano
maquillaje, los cardados y la audacia en nios más, un lord y un punkie, inició una (Antonioni) a partir de un
preferencias sexuales negras, que le costa- nueva carrera en 1979, empañada de be- relato de un argentino
ron incidentes en Suráfrica. Dejó a los lleza escéptica. (Cortázar).
Springfields para entregarse a los canden- Sandie Shaw. Miope, larguirucha y des-
tes latidos rhythm and blues. Sin embargo, garbada, actuaba descalza con una voz
triunfó con una balada italiana, You don't rota y agridulce. Chris Andrews le sumi-
nistró sus más cautivadores momentos:
Long live love y una estirada ristra de éxi-
tos. Inmensamente popular en Europa,
grabó en varios idiomas. Ganó en Eurovisión en 1967; más tarde se convirtió al bu-
dismo, dedicándose a sus hijos hasta su
vuelta, en 1980, rehabilitada por Heaven
17 y los Smiths.
Aunque el pop parecía cosa de grupos,
también hubo un hueco para algunos so-
listas de voces rotundas, la mayor parte
con inflexiones negras. Éstos fueron los
"TODO LO MODERNO NOS RESULTABA MARAVILLOSO; TODO
LO VIEJO ERA HORRIBLE" (Twiggy, modelo)
SMALL FACES
ALMA `MOD'
DIEGO A. MANRIQUE
La historia ha reservado para los Small
Faces el dudoso galardón de la autenti
cidad: a diferencia de los Who, recicla-
dos en mods por astuta sugerencia de
sus managers, ellos eran genuinos
mods, muchachos de pulcras vestimen-
tas y cuidadas melenitas, adeptos a las
anfetaminas y al soul negro. Hubo mu-
chos grupos que intentaron reflejar
aquella agitación juvenil -The Action,
The Creation, Birds, The Eyes-, pero
l os Small Faces fueron los únicos que
conquistaron las listas regularmente,
con discos rotundos e impetuosos. Una
carrera paradigmática: crecieron como
músicos, se sintieron frustrados y ter-
minaron arruinados.
Su nombre (Caras Pequeñas) mere-
ce una explicación. Eran cuatro críos
diminutos y se atribuían justamente el
calificativo de caras, reservado a los
mods punteros en vestimenta y actitu-
des. humor cockney. Hasta que sus padres los ruidos ambientales) o el álbum Og-
En 1965 se unieron en el este de decidieron investigar qué pasaba con el den's nut gone flake, cuyo envoltorio
Londres, y causaron inmediatamente dinero del cuarteto; rompieron enton- -imitación de una caja de tabaco-
sensación entre los chicos de las Vespa ces con Arden y abandonaron el sello era tan llamativo como el contenido de
y los trajes de corte italiano. Al frente, Decca por Immediate, la vanguardista los surcos. De repente, a finales de
Steve Marriott (1947), antiguo actor compañía de Andrew Loog Oldham. 1968, todo se complicó. Problemas
infantil, aporreando la guitarra y au- Allí tuvieron libertad para experimen- para funcionar en vivo, números rojos,
llando con voz ardiente; el bajista era tar en el estudio y desarrollar una línea tensión entre los miembros. Se disol-
Ronnie Lane, y el batería, Kenney Jo- musical propia, cambiando la fidelidad vieron violentamente en Nochevieja;
nes, ambos nacidos en 1948; el organis- a los modelos norteamericanos por una para mayor indignidad, tuvieron que
ta definitivo fue lan McLagan (1946), nueva sensibilidad pop. hacer algunas actuaciones más, con el
experto en sonidos abrasivos. Fruto de esas nuevas circunstancias único objetivo de pagar facturas pen-
Lo del grupo era un entretenimien- fueron Here comes the nice, el psicodéli- dientes.
to: tocaban mal, pero tenían la imagen co Itchycoo Park, Tin soldier o Lazy sun- Liberados de ser caras pequeñas, los
y captaban la efervescencia del mo- day. Pero su reputación de grupo al que cuatro iniciaron aventuras decidida-
mento. Don Arden, un tiburón del las niñas chillan hizo que se olvidara la mente rock. Steve Marriott se unió a
showbiz, madurez de Marriott-Lane como auto- Peter Frampton -el guaperas de
les fichó, prometiéndoles 20 li-bras semanales por persona y cuentas res, su curiosidad técnica (uso del pha- Herd, otro arrepentido del pop- en
abiertas en las tiendas de Carnaby sing y otros efectos), la creciente rique- Humble Pie, terminando como un chi-
Street. ¡El sueño de cualquier mod! A za en arreglos, audacias como The uni- llador más, todo sudor y excesos ne-
las pocas semanas estaban triunfando versal (grabado parcialmente en el jar- groides. Sus compinches reclutaron a
con el rabioso What'cha gonna do about dín de Steve, con un casete que recogía Ron Wood y Rod Stewart y se divirtie-
it, plagio descarado de un tema del soul- ron mucho, como The Faces, banda al-
man Solomon Burke. Y no pararon: cohólica y rollingstoniana. Ronnie Lane
aparte de alguna versión impuesta tuvo una bonita etapa de músico tras-
(Sha-la-la-la-lee), Marriott y Lane com- humante antes de quedar deshecho por
pusieron temas viscerales, como All or una maligna enfermedad que despertó
HISTORIA DEL `ROCK' la solidaridad de sus coetáneos. A fina-
nothing, My mind's eye, Hey girl o I can't
make it. les de los años setenta, cuando los Jam
PRÓXIMo CAPÍTULO y los nuevos mods hablaban de Small
Los años 1965 y 1966 pasaron en un
frenesí de giras. Sufrieron avalanchas
de fans, se ganaron cierta fama de tipos
incontrolables y superaron todo con
D YLAN Y EL 'FOLK'
Faces con veneración, se reunieron con
una formación distinta. Fue un gesto
inútil.
EL PAIS
BOB DYLAN:
LA SOMBRA
RESBALADIZA
ANTONIO DE MIGUEL
Dylan cumplirá, en marzo de 1987, 46
años. Su primer disco se editó hace 25
años. Ha producido una obra musical que
supera la treintena de álbumes (sin contar
sus muchos elepés piratas). Ha sido anali-
zado, mitificado, denostado, asediado,
amado y odiado, pero pocas veces com-
prendido. Y realmente sigue siendo un
misterio, aunque todos -músicos, ami-
gos, supuestamente íntimos, protectores,
mujeres, público y periodistas- aseguren
tener la clave de un personaje sin cuya
existencia la cultura rock habría padecido
de leucemia. Acercarse a Dylan en los
ochenta requiere fuertes dosis de juven-
tud. Juventud física (no haber vivido los
años sesenta) o juventud de criterio (no
aferrarse a los tópicos críticos que se han
volcado sobre él).
Robert Allen Zimmerman nació el 24
de mayo de 1941 en Duluth, Minnesota. A
los seis años, con su familia (pequeños co-
merciantes de origen judío), se traslada a
Hibbing, un aburrido pueblo minero junto
a la frontera canadiense. Desde los nueve
años empieza a encariñarse con el piano,
la guitarra y la armónica. Desde los 11 ga-
rabatea esbozos de poesías. Simultanea
sus devociones musicales (Hank Williams
y Little Richard) con las cinematográficas
(James Dean), y en 1956 tiene su primer
grupo, Golden Chords.
El rock'n'roll y el blues son sus pasiones.
Echo Helstrom, su primera novia. Se gra-
duó, como buen chico, en junio de 1950 y
se trasladó a Minneapolis (facultad de Le-
tras) en septiembre de ese mismo año. Su
vida académica dura un año. Le atraía
más el hechizo bohemio de un barrio, el
Dinkytwon, donde toca por primer vez
con el nombre de Bob Dylan. Jamás ha
confesado el porqué de ese nuevo apelli-
do. La lógica lleva a pensar que lo tomó
del poeta galés Dylan Thomas.
Inaugurada la década de los sesenta,
"¿HAY ALGO QUE TENGA SENTIDO PARA TI? ¿CÓMO ES QUE TIENES
TANTO MIEDO DE DEJAR DE HABLAR?" (del libro de Dylan Tarántula)
C on Another side...,
Dylan inició un cambio que l e
desvinculó de las argollas
llaman del Ed Sullivan Show para que in-
terprete un tema. Dylan escoge Talkin'
John Birch Society Blues, sátira de una
reaccionaria agrupación americana. Pero
los poderes fácticos de la cadena televisi-
como mapa, / nos encontramos en las ori-
llas pronto, dije yo, / orgulloso, bajo la
frente acalorada; / ah, pero yo era muy
viejo entonces, / soy mucho más joven
ahora" (My back pages).
artísticas que la crítica y sus va la censuran, e incluso se suprimen del 1965 es el año clave. En marzo se edita
fans le habían impuesto. repertorio de su ya esperado nuevo elepé. Bringing it all back home, primero de su ca-
Muchos no se lo perdonaron En sus discos The freewheelin' Boy rrera que vendió un millón de copias. Con-
nunca, sobre todo Dylan (mayo de 1963) y The times they are tiene piezas como Subterranean Homesick
A. J. Weberman, un curioso a-changin' (enero de 1964) se contiene el
personaje que fundó el Dylan núcleo de sus más celebradas canciones Blues, Love minus zero/No limit, Mr. Tambourine man, Gates of Eden o It's all over
Liberation Front (Frente de de protesta, las que le etiquetarán de por now, Baby Blue, canciones básicas, preña-
Liberación de Dylan) e intentó vida, pero no consiguen encadenarle. Blo- das de imaginería y con anuncios de futu-
demostrar que el sistema win' in the wind, Masters of war, A hard ras connotaciones ácidas.
drogaba a Dylan para rain's a-gonna fall, Oxford tocan, Who killed Tras escuchar a Beatles, Animals y de-
desviarle de su papel como Davey Moore?, The times they are a-chan- más innovadores del pop británico (en el
l uchador social y cantante. gin', With God on our side... que tanto ha influido e influirá), da otro
Nadie había escrito mejores canciones salto hacia adelante rememorando sus
sobre la guerra, el pacifismo, la segrega- primeras pasiones rocanroleras. Fruto in-
ción racial y la realidad social de una ge- mediato, el single Like a rolling stone, pro-
neración que buscaba esperanzas. Entre digio de densidad musical. Y la ruptura
apocalíptico, simbolista y poéticamente
sugestivo ("la respuesta, amigo mío, está
flotando en el viento"), Dylan colapsó, en
el momento oportuno, el alma de miles y
miles de jóvenes. Canciones trascendidas
en himnos, aunque Dylan no impulsa al
activismo radical, sino que da una res-
puesta artística (no política) a las circuns-
"LOS PREDICADORES DE VERDAD SÓLO DEBEN DECIRTE:
NO ME SIGAS A MÍ, SIGUE A CRISTO" (Dylan, 1980)
pos están cambiando y Otro aspecto de Bob Las reivindicaciones de la minoría negra
fueron tratadas por Bob Dylan en temas
Dylan, rompe ya claramente con los pre- como George Jackson o Hurricane.
supuestos de acción política y expresión
de la izquierda tradicional. Sólo ha necesi- turbulento poema
tado dar unas pocas vueltas, a 33 revolu- en prosa" o como
ciones por minuto, al planeta delfolk, para "superrealismo
despegar mostrando una nueva cara, un con anfetas". En
nuevo aspecto evocado por el título del ál- ese libro escribe:
bum. Y al año siguiente vuelve a su esen- "Aquí yace Bob
cia, como sugiere el título de su álbum de Dylan asesinado
1965 Volviéndolo a traer todo a casa, en por la espalda".
cuya funda escribe: "He abandonado to- Una frase que
dos los intentos de alcanzar la perfección, sirve para intro-
acepto el caos". ducirnos en toda
Se ha electrificado, interpreta junto a la siguiente fase
temas folk otros fuertemente rock, como del Dylan poste-
La granja de Maggie o De nuevo en la carre- rior a su acciden-
tera. Pero destaca sobre todos Mr. Tam- te, que se inicia en
bourine Man, una de las primeras cancio- 1968 con John
nes que trata explícitamente el asunto de Wesley Harding.
la droga. Sus letras se ha-
Bob Dylan ha iniciado lo que se conoce cen más distendi-
por acid-rock. Sus canciones se vuelven das, suena a coun-
más visionarias: "Sobre las nubes cuadrú- try, las imágenes
pedas del bosque / el ángel vaquero cabal- bíblicas atosigan.
ga / con su vela encendida hacia el sol", Y lo mismo pasa-
canta, por ejemplo, en Puertas del Edén. Y rá con los discos
este aspecto superreal se reafirma en que vienen a con-
Highway 61 revisited, otro álbum de 1965, tinuación, donde
donde demuestra que el rock puede ser se presenta como
una forma apropiada para expresar senti- un hombre feliz
mientos poéticos. Puede que éstos sean de que vive con su
cortos vuelos, pero no se reducen a decep- familia. Y sea esto
ciones sentimentales adolescentes, como cierto o no en su J
W
ocurre en los otros rockeros que, según él vida privada, la ar
mismo confiesa, tanto le han influido: verdad es que en U
Chuck Berry, Fats Domino, Buddy Holly sus canciones de
y, claro, Elvis Presley. estos primeros años setenta da la impre-
Con el ya citado de 1966, Blonde on sión de haberse empeñado en proporcio-
blonde, la imaginación y el simbolismo se nar una sensación de felicidad sólo a fuer-
i mponen, como pueden demostrar estos za de insistir en que es feliz y de utilizar as canciones populares son la
versos de Visiones de Johanna: "En el inte- una voz más suave. única forma de arte que
rior de los museos, el infinito ha sido pro- También hay confusión. Y cierto caos describe el talante de nuestro
cesado. / Las voces repiten que la salva- que recuerda al de su pasado. Pero se im- tiempo. Es de lo que hoy se
ción debe parecerse a esto dentro de un pone un anhelo de salvación. Es más, llega cuelga la gente. No de los
rato". O este fragmento de Atascado en a señalarse que a partir de su álbum de li bros, ni del teatro, ni de los
Mobile otra vez con los blues de Memphis, 1975, Blood on the tracks, ha establecido museos", declaraba Bob
canción en la que el efecto acumulativo de un paralelismo entre él mismo y Cristo: los Dylan en 1966, cuando grababa
las imágenes, que se refuerza con el ritmo dos son líderes carismáticos, los dos traen su doble elepé Blonde on
repetido de la guitarra, resulta casi abru- un mensaje a su gente, los dos son márti- blonde -probablemente su
mador: "Shakespeare está en la callejue- res a quienes han traicionado (y el tema obra más conseguida-. De
l a, / con sus zapatos de punta y sus casca- central de Street Legal, un álbum de 1978, ella diría en 1978: "En algunos
beles, / hablando con una francesita / que es precisamente la traición que le han he- de los cortes de esos dos
dice conocerme bien. / Yo mandaría un cho). discos he estado más cerca que
mensaje / para saber qué le contó la chi- Y llega a identificar tanto las luchas de nunca del sonido que oigo en
ca,/ pero han robado la oficina de co- Cristo con las suyas propias, que al fin, en mi cerebro. Ese sonido fino, de
rreos / y el buzón está cerrado con llave". 1980, se declara salvado, y lo canta: "He mercurio. oro metálico y
En 1969 aparece su libro Tarantula, ca- sido salvado por la sangre de un cordero". brillante, con todo lo que eso
lificado por algunos como "un hermoso y Y sigue con mucha "Gracia salvadora" y significa. Ése es mi sonido
muchos "Señor, Señor" y "Dioses y cal- particular. No siempre he sido
varios". capaz de conseguirlo. Tengo
"El tiempo dirá quién ha caído, quién que volver al sonido que me
fue dejado atrás, cuando sigas tu camino y haga recuperar todo aquello".
yo el mío", cantaba hace 20 años. Hoy no
parece que el tiempo diga más que Dylan
está dispuesto a descansar en paz bajo la
cruz.
"¿NO VEIS QUE YA NO TENEMOS QUE SER ESCLAVOS?
EL LÁTIGO ESTÁ EN LA TUMBA" (The Band, 1968)
telectual de mu-
chos cantantes
folk de los se-
VOCES FRESCAS, senta.
Leadbelly
GUITARRAS DE PALO (1889-1949) re-
presentó el lado
negro y margina-
NACHO SÁENZ DE TEJADA do, y su música se
La fuerza y difusión del rock and roll du- propagó a través
rante la segunda mitad de los años cin de grupos como
cuenta ocultó la realidad de otras músicas The Weavers.
establecidas en la cultura popular norte- Con estos an-
americana muchos años antes, algunas de tecedentes, desde
las cuales habían ayudado como fuente de 1955 el Green-
inspiración al recién nacido rock. Entre wich Village neo-
ellas, el folk -palabra que, como un ambi- yorquino comen-
guo y siempre polémico cajón de sastre, zó a ser el centro
define diversos tipos de músicas popula- de un nuevo mo-
res en una cultura como la norteamerica- vimiento folk, que
na, caracterizada por la amalgama y el pronto prendió en
mestizaje- se mantuvo en un segundo otras ciudades y
plano. Era el depositario, en sus intérpre- abarcó desde las
tes más representativos, de un contenido tendencias más
intelectual del que carecía el rock and roll, tradicionales
por otra parte mucho más visceral e intui- (Kingston Trio) a
tivo. las nuevas y per-
La capacidad de crítica y la oposición sonales (Phil
al poder establecido, con diversos grados Ochs), con el
de radicalismo, fueron dos características paso intermedio
fundamentales de los primeros cantantes representado por
folk, y continuaban vigentes cuando, a fi- Peter, Paul &
nales de los cincuenta, volvió a primer pla- Mary. El conteni-
no el términofolk singer (cantantefolk). No do social estaba marcado por el movi-
hay que olvidar que para la nueva genera- miento a favor de la igualdad de los dere-
ción de cantantes folk, dos de los principa- chos civiles, a lo que posteriormente se
les maestros fueron Woody Guthrie y agregó la protesta contra la intervención Para los jóvenes
Leadbelly. en Vietnam, que alcanzó su punto álgido universitarios de finales de los
Woody Guthrie (1912-1967) significó el en 1964. Fueron dos importantes nexos de cincuenta y principios de los
primer punto de apoyo para el renaci- unión que impulsaron el renacimiento. El sesenta, el acervo folclórico
miento de este estilo. Compositor excep- cantante Richard Fariña (1937-1966) re- norteamericano
cional, prolífico y comprometido, creó conoció también como aglutinantes la sín- representaba una alternativa
canciones que fueron rápidamente popu- tesis entre la música tradicional y la ligera, saludable de autenticidad
lares. Parte de su influencia llegó a los jó- así como la obra literaria de Dylan Tho- frente a un rock and roll
venes a través de Pete Seeger (1919), al mas (1914-1953) y Allen Ginsberg (1926). excesivamente manipulado y
que también inculcó ese espíritu vagabun- Los nuevos cantantes y compositores desleído. Las viejas canciones
do que más tarde recogerían los poetas de apenas tenían más acompañamiento ins- hablaban de una historia
la beat generation, compañeros de viaje in- trumental que su propia guitarra, a la que hermosa y sangrienta; sus
en los estudios de grabación se añadía una protagonistas eran modelos
sencilla base rítmica. Lo importante era el éticos. El renacimiento del folk
contenido, aunque muchos se revelaron obedeció a la necesidad de
como excelentes músicos y compositores,. encontrar un lenguaje para
que gozaron de su máxima popularidad a expresar la disconformidad.
mediados de la década de los sesenta. Las
reglas del juego cambiaron el 25 de julio
de 1965, cuando Bob Dylan actuó en el
Newport Folk Festival acompañado por
un grupo de rock, ante la indignación de
los puristas.
Un mes más tarde, The Byrds lanza-
ban el tema de Dylan Mr. Tambourine
man. El folk había conseguido lo que per-
seguía hacía tiempo: su fusión con el rock
and roll. El folk-rock era una realidad.
"ESTA TIERRA ES TUYA, ESTA TIERRA ES MÍA, / ESTA TIERRA FUE
HECHA PARA TI Y PARA MÍ" (This land is your land, Woody Guthrie)
ANCIONES DE
TIEMPOS DIFÍCILES
ANTONIO GÓMEZ
Siempre tuvo aspecto famélico, recorrió
Estados Unidos a bordo de interminables
trenes de carga o paseando con parsimo-
nia las polvorientas carreteras. Cuentan
que era noctámbulo, bohemio y desorde-
nado; quiso ingresar en el Partido Comu-
nista Americano y no se lo permitieron
por heterodoxo, pero contó en más de mil
canciones cuanto vio, vivió y pensó a lo
largo de su corta pero agitada vida. Se lla- una novela. Así surgieron sus canciones
mó Woody Guthrie y su nombre figura sobre la construcción de las grandes pre-
con letras de fuego en la historia de la mú- sas de Bonneville y Grand Coule (Colum-
sica popular de nuestro siglo. Fue el pri- bia ballads, 1937), sus Baladas de Sacco y
mer cantautor y todavía hoy, cuando Bru- Vanzzetti (1946) y, sobre todo, sus esplén-
ce Springsteen quiere una, canción que re- didas Dust bowl ballads (Baladas de la
fleje como ninguna otra el espíritu joven, cuenca del polvo, 1950), la saga en la que
inconformista y fuerte de América, recu- cuenta la emigración a California tras el
si yo tuviera un martillo, /
martillearía por la mañana, /
martillearía por la tarde, / a
rre a un tema del viejo Woody: This land is
your land (Esta tierra es tu tierra).
Nació el 14 de julio de 1912 en Oklaho-
ma, en la ciudad de Okemah, "la más can-
tora, bailarina, bebedora, gritona, presu-
crack del 29, que finaliza con la irrepetible
Tom Joad, una balada de siete minutos en
la que resume la densa historia que John
Steinbeck había contado en sus quinien-
tas páginas de Las uvas de la ira y John
través de todo el mundo. / Si yo mida, andarina, chismosa, ruidosa, lloro- Ford en la película en la que Henry Fonda
tuviera una campana, / la na, fusiladora, peleona y apostadora" de encarnaba a Tom Joad.
tocaría por la mañana, / la las ciudades norteamericanas, según Woody Guthrie murió el 3 de octubre
tocaría por la tarde, / a través cuenta en su autobiografía (Bound for de 1967, tras 12 años en un hospital, a
de todo el mundo. / Si yo glory, 1943). Desde siempre ha sido consi- causa de la enfermedad de Huntington.
tuviera una canción, / la derado un cantante protesta, pero su obra Anteriormente había cantado en ocasio-
cantaría por la mañana, / la llega más lejos. Hizo canciones contra la nes con sus mejores amigos (Sonny Terry,
cantaría por la tarde, / a guerra y el desempleo, cantó a los huel- Brownie McGhee, Cisco Houstor, Lead-
través de todo el mundo. / Es el guistas y a los vagabundos, recuperó la belly o Pete Seeger) en actuaciones de
martillo de la justicia, / es la historia de bandidos generosos y anar- gran intensidad. Para ellos -y para algu-
campana de la libertad, / es la quistas asesinados, pero también cantó nos más jovenes, como Jack Elliot, Tom
canción del amor entre todos con su voz rasposa y su guitarra afónica a Paxton, Arlo, el hijo de éste, o Bob
mis hermanos y hermanas...". los niños y a los viejos, a los montes bos- Dylan-, Guthrie fue un compañero y un
cosos y a las llanuras desérticas. maestro.
(lf I had a hammer, de Pete Cuando aún el nazismo no había asola- De la saga de viejos compañeros de
Seeger y Lee Hays, fue un éxito do Europa escribió en su guitarra la si- Guthrie merece destacarse a Pete Seeger
popular para Peter, Paul & guiente frase: "Esta máquina mata fascis- ( Nueva York, 1919), que además de pri-
Mary en 1962). tas". Se unió con otros cantantes de ori- mer discípulo ha sido un maestro por sí
gen folk en los Almanac Singers o Peoples mismo. Seeger ha sido el cantante puente
Songs, sindicatos de cantantes progresis- entre Guthrie y los cantautores más jove-
tas dedicados fundamentalmente a apoyar nes. Prolífico, incansable viajero, compo-
con sus canciones y sus recitales las rei- sitor él mismo de pocas pero valiosas can-
vindicaciones obreras. ciones, su trabajo como intérprete dio a
Mucho antes de que los Beatles hicie- conocer antes que nadie a Phil Ochs, Pax-
ran con Sgt. Pepper la experiencia de con- ton o Dylan, entre muchos otros.
siderar el disco no como una colección in-
discriminada de canciones, sino como una
obra unitaria, Woody había compuesto ál-
bumes que eran ya obras tan completas
como pueda serlo un libro de poemas o
"LAS UNIVERSIDADES Y LOS ESTUDIANTES MÁS POLITIZADOS APOYAN
LA MÚSICA `FOLK'. NO ES UNA CONEXIÓN FORTUITA" (Newsweek, 1961)
DI-AS DE
DECISIÓN
ÁLVARO FEITO
Primeros años sesenta en Estados Uni-
dos: los iniciales síntomas de crisis del
rock and roll favorecen la aparición de un
movimiento de música folk que se produce
fundamentalmente en núcleos universita-
rios (Boston) y bohemios (Greenwich Vi-
llage, Nueva York). No surge de la noche
a la mañana: anteriormente, Woody
Guthrie, Cisco Houston, los Almanac Sin-
gers, los Weavers, Pete Seeger, Ramblin'
Jack Elliot, Malvina Reynolds y otros pio-
neros habían sembrado, por un lado, se-
millas de inconformismo y de rebelión. De
otra parte, los géneros más genuinamente
tradicionales y folclóricos (el country, el
bluegrass, el hillbilly) habían ofrecido ya
muestras genuinas de valor y vitalidad. Jó-
venes grupos, como los New Lost City
Ramblers, el Kingston Trio, el Chad Mit-
chell Trio, y, poco después, los Highway-
men, los New Christy Minstrels, los Coun-
try Gentlemen o los Limeliters, compo-
nían un frente artístico de innegable fuer-
za. El blues, como siempre, estaba presen-
te y bien presente, con viejos y nuevos ar-
tistas: Leadbelly, Josh White, John Lee
Hooker, Mississippi John Nurt,
B. B. King, Sonny Terry, Brownie Joan Baez (1941). La reina del folk en los
McGhee, Jesse Fuller, Muddy Waters, años sesenta procede de Staten Island,
Big Joe Williams y tantos más. Fue tam- Nueva York, de madre escocesa y de pa-
bién la gran época de la topical song, can- dre mexicano. Se dio a conocer en los fa- Los chicos adoran a
ciones que hablaban de los sucesos coti- mosos festivales de Newport, a partir del Dylan más que a mí. Por eso
dianos y los temas que estaban en la calle. primero en 1959. Tres años más tarde, sus creo que debería ayudarles,
Al amparo, imagen y semejanza de Bob primeros álbumes figuraban simultánea- no complacer sus sentimientos
Dylan, en el poderoso caldo de cultivo de mente en las listas de ventas y su figura negativos. Lo que ellos
los clubes, colee houses, hootenanys y festi- merecía los honores de portada de la revi- quieren oír es que todo da lo
vales surgió una verdadera avalancha de ta Time. Amiga íntima de Bob Dylan, in- mismo, y, en cierto modo, eso
folk singers. Fueron días de decisión. trodujo a éste en la escena folk de los gran- es lo que dicen las canciones de
des circuitos y festivales. Su admiración rock. Yo digo lo contrario:
Eric Andersen (1943). Compositor, can- por Dylan no disminuiría con el paso del que todo es importante y que
tante e intérprete de sus propias cancio- tiempo, antes al contrario: apareció en la tienes que tomar partido".
nes, nació en Pittsburgh, Pennsylvania. gira Rolling Thunder Revue, y en la pelícu-
Emergió de la escena folk del Greenwich la Renaldo y Clara de su ídolo. Activista de Joan Baez, 1967
Village, hacia el invierno de 1964. Su la paz, Joan Baez creó el Instituto para el
Thirsty boots, incluida en su segundo elepé, Estudio de la No Violencia, y sus activida-
fue un cierto éxito en la voz de Judy Co- des en este sentido han ido en aumento,
llins. Después de grabar su quinto elepé, paralelas con cierto alejamiento de la acti-
Avalancha (1968), se retiró de la escena, vidad discográfica. Ha realizado giras a lo
para volver en 1972 con Blue River, su ele- largo y ancho de todo el mundo y participó
pé más cotizado. fervientemente en las campañas por el
cese de la guerra en Vietnam, y, posterior-
mente, en Camboya. También ha cantado
en festivales benéficos para la Unesco. Su
extensísima e irregular discografia contie-
ne desde baladas tradicionales europeas
ALBERT GROSSMAN PRODUJO LOS PRIMEROS FESTIVALES DE `FOLK'
DE NEWPORT. MÁS TARDE DESCUBRIRÍA A PETER, PAUL & MARY
Nueva York. En 1956 grabó su primer Las canciones de Tim Harding fueron
disco, Odetta sings ballads and blues, segui- más conocidas por otras versiones que en
su propia voz.
do por Odetta at the gate of horn.
Fred Neil (1940). Originario de St. Peters-
burg, Florida, es conocido, sobre todo,
por ser el autor de algunas canciones.
Other side of this life la grabaron Peter,
Paul y Mary, y Jefferson Airplane, entre
otros, para Capitol. A little bit of rain fue su
recopilación sumarial.
Peter, Paul y Mary. Este trío -dos barbu-
dos y una cara de ángel- fue decisivo en la
popularización y vulgarización de cancio-
nes surgidas en los primeros años sesenta
en Estados Unidos, la gran época del folk
y la canción topical. Descubierto por Al-
bert Grossman -apoderado más tarde de
Bob Dylan en su etapa eléctrica y produc-
tor de los primeros festivales de New-
port-, el trío apareció en Nueva York
con versiones de If I had a hammer (com-
puesta por Pete Seeger y Lee Hays) o
Blowin'in the wind(Dylan), l evando al éxito
ambos temas. Peter, Paul and Mary gra-
baron álbumes de una cristalina y pura be-
lleza y su espectáculo visual en escena fue
uno de los mas excitantes en la época.
Participaron activamente en el movimien-
to por los derechos civiles y, posterior-
mente, en los raptes pacifistas antiguerra
de Vietnam. Después de grabar 10 álbu-
mes -ocho de los cuales alcanzaron el
disco de oro-, el grupo se separó en 1970;
sus miembros continuaron carreras musi-
cales por separado, aunque se han reuni-
do en varias ocasiones.
Tom Paxton (1937). Procedente de
Oklahoma -aunque había nacido en
Chicago-, Paxton llegó a Nueva York en
1 960. Allí encontró un ambiente eferves-
cente: clubes como el Gaslight, revistas sión extensísima de elepés que llegan hasta
como Broadside y Sing Out! y compañeros nuestros días. Pero sus últimos trabajos
de viaje como Julius Lester, Len Chand- no hacen sino repetir las fórmulas emplea-
ler, Dave van Ronk, Patrick Sky y los ya das con mayor fortuna en sus días de Ahora es el momento
más establecidos Pete Seeger, Bob Dylan, gloria. para tu amor, / y el momento
Phil Ochs. De este compositor y cantante Tom Rush (1941). Del foco delfolk de Bos- para tu compañía; / ahora
de limitadas facultades vocales, pero do- ton surgieron Joan Baez, Eric Von que falla la luz de la razón / y los
tado de una satírica incisividad y de una Schmidt, Jim Kweskin y el cantautor que fuegos arden en el mar; /
gran capacidad creativa, surgieron algu- ahora nos ocupa. Nació en Portsmouth, ahora, en este tiempo de
nas de las canciones más valiosas de la New Hampshire. Tras recibir su primera confusión, / tengo necesidad
época: guitarra, "de la que nunca tomé lecciones, de tu compañía".
The last thing on my mind, High sheriff of Hazard o Leaving London,por no ci- razón por la que, probablemente, me gus-
tar sino algunas. Muy conociddo en el Rei- ta tanto" (según sus propias palabras), (Children of darkness, de
no Unido, donde ha realizado numerosas Tom comenzó imitando a los primeros Richord Farlña, 1966).
giras, Paxton no ha cesado de cantar, rockers, como Gene Vincent y Carl Per-
crear y registrar sus temas, en una suce- kins. Durante su estancia en Harvard, se
inclinó al folk. Grabó para Vanguard,
Elektra y, ya en los setenta, con CBS.
Descubrió a autores como Joni Mitchell,
James Taylor y Jackson Brown.
Buffy Sainte-Marie (1941). Al igual que
Peter Lafarge y Patrick Sky, Buffy era de
origen indio. Nació en Canadá, pero cre-
ció en New England. Un viaje a Nueva
York cambió el curso de su vida; comenzó
allí a frecuentar los clubes de folk. Su can-
ción más famosa es Universal soldier.
"LOS PRÍNCIPES ABANDONAN A VECES A LAS PRINCESAS / CUANDO
ELLAS CREEN EN SU ROSA Y QUE LA DEBEN GUARDAR" (Antoine)
Con sus canciones sencillas y su cuidada la década consiguió plantar cara al rock
Imagen de vagabundo, Donovan fue el más como nunca más volvería a suceder. Ian
popular reflejo europeo de la moda folk. Campbell Folk Group, Bert Jansch y John
Renbourn con su grupo Pentangle, la In-
credible String Band y la Young Tradition
fueron los adalides de concepciones radi-
calmente opuestas sobre lo que es o no la
música tradicional. Florecieron los can-
tautores, unos más politizados como Leon
Rosselson, otros más costumbristas como
Ralph McTell, pero quienes se llevaron el
gato al agua fueron los grupos de folk-rock,
capitaneados por Fairport Convention,
que nace con el fin de la década.
Irlanda, que contaba con los emigran-
tes Tommy Maken y los Clancy Brothers
integrados en el movimiento folk estado-
unidense, aporta un par de grupos de muy
distinta catadura. Los Dubliners nacen en
un pub y toman prestado el nombre de un
libro de Joyce, aunque desarrollan una
obra menos intelectual: baste recordar
que su mayor éxito se titulaba Seven nights
drunk (Siete noches borracho). El otro gru-
po, los Johnstons, se lo tomaban más en
serio, alternando lo tradicional con un folk
más moderno. Paul Brady salió de allí. Lo
más genuino, sin embargo, se estaba ges-
tando con los Chieftains, que andaban
madurando su fina propuesta.
En Francia hubo peleas por versionear
a Dylan y compañía; recordemos J'entends
Cómo puedes decirme s er le train y Ecoute dans le vent, de Ri-
que te encuentras sola? / chard Anthony; La falle du Nord y N°y pen-
¿Cómo puedes decir que COS EUROPEOS se plus tout est bien, de Hugues Aufray, y
para ti no brilla el sol? / Déjame Qui a tué Davy Moore y Suzanne, de Grae-
que coja tu mano y te lleve me Allwright, que fue el más reputado.
por las calles de londres. / Te MANUEL DOMÍNGUEZ Más interesante y original resultó un me-
mostraré algo que te hará El folk reviva! estadounidense tuvo en lenudo con aspecto de beatnik, Antoine.
cambiar de opinión". Europa una repercusión muy dispar, cho Aparte de sus célebres elucubraciones y
cando con unas estructuras muy diferen- metamorfosis, canciones como Autoroute
(Streets of London, Ralph tes a las que lo sustentaban en Norteamé- européene n- 4 o La loa de 1920 permanecen
McTell) rica. La tradición del cabaré centroeu- en el recuerdo como lo mejorcito suyo.
ropeo, la canción popular con honda rai- Barcelona y Madrid fueron las dos ciu-
gambre política en el Mediterráneo y la dades españolas en que más nítidamente
chanson francesa resultaron realidades se hizo notar una mínima respuesta a la
muy difíciles de salvar. Por otro lado, si eclosión folk de Estados Unidos. El Grup
muchos de los temas que triunfaban en
EE UU se apoyaban en antiguas baladas de Folk, con Albert Batiste, Jaume Arnella, Xaec Boix -la versión scout-, Els
irlandesas o escocesas, era lógico que Sapastres, Falsterbo 3 y, también, María
donde las influencias se dejasen sentir de del Mar Bonet, Pau Riba y Jaume Sisa,
un modo más profundo fuese en las islas animaron el parque de la Ciudadela con
Británicas. sus banjos y canciones de Peter Paul
Fue en el año 1965 cuando el movi- & Mary, Seeger, Paxton y Dylan, en cata-
miento folk empezó a tener cabida en los lán. Madrid tuvo que contentarse con un
grandes medios de difusión. Dylan visita- Nuestro Pequeño Mundo, que nunca tenía
ba Londres, al tiempo que desde Glasgow claro lo que quería hacer, unas fugaces Al-
un cantante con cara de niño, guitarra mas Humildes y un Joaquín Díaz que
acústica y armónica al cuello, dejaba caer pronto se decantó por sus raíces caste-
las primeras de una serie de canciones un llanas.
tanto ingenuas que le valdrían el sambeni-
to de el Dylan británico: Donovan. Pronto
Catch the wind y Colours entraron a formar
parte del repertorio de los folkies de todo
el mundo, EE UU incluido.
Fue el inicio de una auténtica avalan-
cha de grupos y cantantes que a finales de
VANGUARD Y ELEKTRA FUERON SELLOS INDEPENDIENTES MODÉLICOS, QUE
ACOGIERON AL NUEVO .` FOLK' Y SE ABRIERON AL `ROCK' CALIFORNIANO
PHIL OCHS
UN HOMBRE EN GUERRA
RAMÓN TRECET
Cuando se acabó la llamada década
prodigiosa (los sesenta), la mayor parte
de los veteranos combatientes se olvi-
daron de los sueños de revolución. Tu-
vieron hijos, se compraron una casa y
se cocinaron a sí mismos en el horno
siguiendo las directrices del manual de
cocina más en boga. Pero Phil Ochs se-
guía en guerra: con la Administración
de Nixon, porque había una en Viet-
nam; con los sesenta, por haber tenido
la caradura de haberse acabado; consi-
go mismo, dedicado a destruir lo que
había creado anteriormente. Sobrevi-
vió exactamente seis años al final de la
década, su década. En su carrera musi-
cal, los acontecimientos sociales iban,
más que en ningún otro caso, unidos in-
separablemente a la creación de can-
ciones.
Creció artísticamente a la sombra
de Bob Dylan. Comenzando casi al
mismo tiempo, en el mismo sitio y con
parecidas ideas, las carreras de ambos
son antitéticas. Ambos pasaron de la
amistad al fustigamiento público (ganó 7°- de caballería de Errol Flynn en Mu- vieron con él hasta el final, saben a
Dylan; se le ocurrían mejores frases, te- rieron con las botas puestas, el sargento ciencia cierta si quería ser famoso,
nía más acceso a los medios de comu- que John Wayne interpretaba en Sands cambiar el mundo, ganar dinero o qué.
nicación, no creía que el mundo le de- of Iwo-Jima o Spencer Tracy haciendo Como dice Kris KristofFerson, "era una
biese nada). Ochs seguramente quiso de Edison. Phil Ochs, periodista, de- contradicción ambulante, parte verdad
ser Dylan. "La otra noche oí una voz. sembarcó en el Village neoyorquino y parte invención, tomando todos los
Resultó ser Dios. Me dijo: `Ochs, aquí dispuesto a ser Flynn-Custer, Edison- caminos equivocados en su solitario re-
Dios, cambio'. Yo dije: `Por supuesto Tracy y alguna cosa más. greso a casa". Fracasó entre 1969 y
me estás tomando el pelo, Dylan". Hasta 1964 todo va de acuerdo con 1971 como estrella de rock. Perdida
Phil Ochs quiso ser un Elvis Presley el guión. Actuaciones, encuentros, de- casi la voz, fue periodista en Londres.
con bandera roja: "Como sabéis, fallecí sencuentros, discos grabados para la De vuelta a Nueva York, reapareció en
en Chicago. Y fui al cielo porque era Elektra de Jac Holzman, festivales de un homenaje a Víctor Jara y editó una
muy bueno, y me preguntaron qué que- Newport y todo lo demás: Joan Báez canción sobre el caso Watergate.
ría ser. Y me lo pensé hasta llegar a ver- pone en el hit parade su There but fortune. La crítica social en las canciones
lo con claridad: quería ser Elvis Pres- En 1965 comienza el cambio: unos dejó de estar de moda. Para los que era
ley, el rey de la música. Si queda alguna evolucionan y otros pretenden quedar- un modo, la alternativa darwiniana: o
esperanza para América está en la re- se. Ochs se queda. Al final se queda evolución o desaparición. Philip David
volución, y si queda esperanza para la solo. Nadie, ni sus hermanos, que estu- Ochs se levantó una mañana de 1976,
revolución consiste en hacer que Elvis en casa de su hermana Sonny, y, apro-
Presley se convierta en el Che Gue- vechándose de la ausencia de su gente,
vara". pasó un cinturón por la mampara de la
Fue el arquetipo casi perfecto de puerta del cuarto de baño, puso una si-
adolescente de los años cincuenta. Ha- lla debajo..., y a negro.
bía nacido en 1940, en El Paso (Tejas), HISTORIA DEL `ROCK' Sus amigos -sin Dylan- se reu-
en el seno de una puritana familia ju- nieron poco después para homenajear-
día. Muy pronto su padre, médico de le. Sonaron sus himnos antibelicistas:
profesión, comenzó a dar muestras de PRóXIMO CAPITULO David Blue, Tom Paxton. Sammy Wal-
inestabilidad mental. Refugiado en su ker, Harry Chapín y otros compusieron
propio mundo, formado por su madre,
sus hermanos, y el cine más cercano, la
FOLK-ROCK sentidas odas necrológicas. Algunos
vieron en su derrota el final de una for-
historia norteamericana la escribían el ma de entender la canción política.
EL PAIS
HISTORIA DEL `ROCK'
El folk-rock fue el resultado de una feliz colisión entre la sen-
sibilidad del folk y la energía del rock. En 1965, Bob Dylan
(en la foto) y los Byrds demostraron que las canciones de
autor se beneficiaban del tratamiento eléctrico ( que era po-
sible su entrada en las listas de éxito). El ejemplo fue seguido
por abundantes artistas, configurando un movimiento de
breve vida en el que confluyeron intereses económicos y el
deseo de moldear una nueva estética que florecería definiti-
vamente en San Francisco en 1966. Entre los nombres más
memorables del folk-rock están Simon and Garfunkel, The Mamas and the Papas
y Lovin' Spoonful. La idea de sumar folk y rock también prendió en Europa, gene-
rando una serie de iniciativas artísticas que se mantienen hasta nuestros días.
THE BYRDS LA
BRISA MÁS FRESCA
JOSÉ MARTA REY
La piedra angular del rock americano. Su
aparición fue providencial y su incidencia
tan decisiva como la de los Beatles o
Dylan. Más aún: su bumerán devolvió a
éstos la inspiración prestada, y planeó so-
bre las futuras evoluciones de ambos; ni'
Rubber soul ni Highway 61 existirían sin
ellos. Cambiaron en buena medida la
cara de la música, el concepto de pop, y
enriquecieron insospechadamente el cen-
so de términos sonoros con una de las
mayores agendas de hallazgos de la déca-
da. Parte de sus grabaciones marcan hi-
tos: estrenaron efectos de sonido como el
phasing, y aparatos como el oscilador (sin-
tetizador primigenio). Catalizaron géne-
ros como el folk-rock, el acid-rock, el raga-
rock y el country-rock (y tuvieron en jaque
a la crítica en su intento de codificar todo
aquello).
Por primera vez, algo propio se erguía
en la parálisis americana que siguió a la experiencias. Todo esto bulle en la molle-
invasión británica. Sólo quedaba un grupo ra de Jim McGuinn. Incisivo e ingenioso,
competente, los Beach Boys, pero, ajenos puso de moda sus gafas dickensianas y las La idea de electrificar a
a los tiempos y los cambios, seguían con guitarras Rickenbacker de 12 cuerdas.
sus playas y sus chicas. Mezcla de casuali- Ejercía de líder y presidía la colisión de Dylan fue de Jim Dickson,
dad y genio, los Byrds querían ser los egos. Chiflado por los artefactos, es res- nuestro productor. Yo
Beatles y, en el camino, surgió una chispa ponsable de las diabluras electrónicas del conocía a Dylan de Greenwich
radicalmente nueva: un sonido levitativo ' grupo. Eso sí, su casa terminó como un Village. Éramos enemigos. Él
de guitarras campanilleantes y un mágico bazar: robots, láser y hasta un sintetiza- tenía una veintena de chicas
fervor vocal de agridulce belleza. dor, cuando nadie había oído hablar de fans y yo ninguna. Escogimos
Introdujeron en el pop inteligencia y todo eso. Mr. Tambourlne man e intenté
realismo; el mensaje y poesía del folk con Venía del folk. Acompañó a Limeliters, cambiar la inflexión vocal
bandeja de beat británico. La dualidad al Chad Mitchell Trio y a Bobby Darin, y como un cruce de Dylan y
emocional de su música refleja la ambi- grabó discos con Judy Collins o Tom and Lennon. Creo que lo
güedad sensorial del LSD. Y sus viajes si- Jerry (primer nombre de Simon and Gar- conseguí".
derales entre el hipnótico Oriente y el Oc- funkel), todo en Nueva York. Pero los
cidente futurista presagian el humanismo Byrds nacieron en Los Ángeles, donde Roger McGuinn
contracultural. Además, con su imantada McGuinn conoce a Gene Clark -un chi-
imagen (cabellos largos, vaqueros e indife- co de Kansas, de voz sensible, cuya guita-
rencia) establecen la nueva entidad ameri- rra se oye en el Green green de New
cana, silvestre y natural, frente al modelo Christy Minstrels- y David Crosby, al
inglés. que los folkies criticaban por su proximi-
Al margen de su contribución al rock de dad vocal al rock and roll.
su país, los Byrds son el último gran grupo Fascinados por las radiantes escenas
del reino de la inocencia pop y el primero del filme en el que actuaban los Beatles
en abrir las puertas del cielo y el infierno Qué noche la de aquel día, alumbraron la
de las que hablaba Huxley. Su azarosa intuición del folk-rock. Se bautizaron
existencia retrata una época ansiosa de como The Jet Set y los Beefeaters, antes
de quedarse en los Byrds, juego de pala-
bras con birds (pájaros). El quinteto se
completó con Chris Hillman, que cambió
su destreza a la mandolina de blue-grass
por un bajo japonés, y Michael Clarke,
que no había cogido una batería en la
vida, que puso la imagen y un flequillo per-
"ENSEÑAMOS A DYLAN LO QUE HABÍAMOS HECHO CON SUS CANCIONES
Y DIJO: `¡PERO SI SE PUEDEN BAILAR!" (Roger McGuinn)
LA GALAXIA DEL
TOLK-ROCK'
LUIS MARIO QUINTANA
Bob Dylan había demostrado que el mari-
daje entre el folk y el rock no era una idea
descabellada. Una vez superado el escep-
ticismo inicial de los puristas, numerosos
músicos se aventuraron en el terreno del
folk-rock. La gran mayoría se limitó a co-
piar el estilo y las canciones del maestro,
mientras unos pocos componían y algunos
desarrollaban bellas fórmulas sonoras.
Éstas fueron algunas de las más atractivas
figuras de un género que tuvo a Dylan y a
los Byrds'en lo más alto:
Los Turtles, que hicieron brillantes aunque la gran Mama murió atragantada
discos aparte del famoso Happy cuando comía un emparedado el 29 de ju-
together.
lio de 1974 en Londres. Phillips tuvo una
larga batalla con las drogas y en los
ochenta volvió a los escenarios con una
nueva versión de The Mamas and the
Papas.
Lovin' Spoonful. El grupo fue idea del neo-
yorquino John Sebastian (1944), junto con
el canadiense Zal Yanovsky (1944). Se-
hastían había estado en el Sur investigan-
do y coleccionando todo tipo de canciones
arcaicas, que servirían para poner en mar-
cha en 1965 al grupo, junto a Steve Boone
y Joe Butler. Se convirtieron rápidamente
en la más importante banda de su género
en la efervescente escena neoyorquina.
Fueron un grupo dulce, con canciones feli-
ces que cabalgaban entre el folk, el blues y
el country, y su gran éxito radicó en la hu-
manidad que transmitían. Las actividades
del grupo cesaron en 1968, después de de-
jar algunos éxitos como Do you believe in
magic (1965), Daydream (1966), Summer
in the city (1966) o Nasville cats (1966).
John Sebastian funcionó con fortuna
como solista durante los años setenta.
Charlatans. El primer grupo notable de la
bahía de San Francisco y, por tanto, los
iniciadores de lo que iba a ser la próspera
escena musical de esa ciudad. Su carrera
comenzó en 1964 con Mike Wilhem (gui-
tarra, voz), Richard Olsen (bajo, voz),
Dan Hicks (guitarra, voz), Mike Ferguson
El nes al estilo Dylan compuestas por Sonny (teclado), Sam Linde (batería) y George
y con insólitas instrumentaciones. Luego Hunter (voz). También pasarían por el
folk-rock no lo hicieron películas, se pasaron a Las Ve- grupo Darrel de Vore (teclado) y Terry
i nventaron los Byrds. Eran gas, y acabaron divorciándose en 1974. Wilson (batería). Su música se movía en-
Cher, siempre extravagante en vestimen- tre el blues, el folk y el country, y su presti-
muchos los músicos que
tas y peinados, ha tenido una carrera lla- gio no se cimentó en los discos, ya que gra-
estaban trabajando en esa
mativa en discos, televisión, cine (la re- baron poco y tarde, sino en la calidad de
fusión. Al primero que yo
ciente Máscara) y escenarios. sus músicos y en haberse pateado todos
conocí fue a Neil Young. Estaba
The Mamas and the Papas. Una de las más l os locales clásicos de la zona. Su único
tocando en Canadá con un
famosas familias de la música americana. elepé oficial, The Charlatans, se editó en
grupo llamado Los Squires y me
Por un lado, el matrimonio formado por 1969, y su última actuación se produjo en
asombró: de un tema de rock
John Phillips (1935), veterano de la escena el mítico Fillmore East en junio de ese
pasaban a una canción
neoyorquina, y Michelle Guiliam (1944), y mismo año.
tradicional como Cotton
por el otro Mama Cass Elliott (1943) y Grassroots. Fueron un grupo fantasma del
fields. Y todo con bajo, batería y Denny Doherty (1941). Estos dos últimos tándem Sloam-Barri, que en 1967 cedie-
guitarras a todo volumen. De
habían estado trabajando juntos en gru- ron el nombre a un cuarteto de Los Ánge-
hecho, Neil hizo lo contrario de
pos como los Mugwumps y en los Big les formado por Warren Entner (guitarra,
l os demás: dejó el grupo y
Three, al lado de Tim Rose. Se conocieron voz), Creed Bratton (guitarra), Ricky
empezó a tocar en solitario, en
en las islas Vírgenes y establecieron su Coonce (batería) y Rob Grill (bajo, voz).
plan Bob Dylan".
cuartel general en California, justo cuando Poco a poco su música iría evolucionando
estaba naciendo el concepto hippie. por senderos diferentes, aunque son muy
Steve Stills Con mucho optimismo en sus cancio- destacables sus primeras grabaciones:
nes y unas perfectas armonías vocales, se Let's live for today (versión inglesa de un
convirtieron en un grupo puntero y vende- tema italiano de los Rokes), Things I
dor. California dreamin (1966), Monday, should have said o Midnight confessions, l an-
monday (1966), su versión de Dedicated to zadas entre los años 1967 y 1968.
the one I love (1967), Creeque Alley (1967),
Twelve thirty (1967)... fueron sus más des-
xU tacados éxitos. A causa de diversos roces,
O el grupo se disolvió en 1968 y cada uno si-
a guió por su cuenta. Los que más fortuna
tuvieron fueron John Phillips y Mama
co Cass, que grabaron discos en solitario,
r
"CON EL `ROCK' ERA POSIBLE EXPLOTAR AL MÁXIMO LAS POSIBILIDADES
DRAMÁTICAS DE LAS VIEJAS BALADAS" (Dave Swarbrick)
E
Matthews, Sandy Denny y Richard
Thompson en primera fila.
L INCESTUOSO
CASO BRITÁNICO
NACHO SÁENZ DE TEJADA
La música folk británica mantiene con su
homónima norteamericana una relación
de influencia recíproca, ayudas generosas
en momentos de mutuo desfallecimiento
y, al mismo tiempo, una apreciable dife-
renciación en los planteamientos y resul-
tados. El folk-rock del Reino Unido tam-
bién presentó algunas diferencias nota-
bles respecto al norteamericano: su ape-
go a la tradición, un acercamiento más
superficial al rock and roll y una mayor
duración de la vida de los grupos, hasta el
punto de que algunos todavía continúan
en activo.
Fairport Convention son los padres del
invento. Desde su nacimiento en noviem-
bre de 1967, han tenido más de 15 forma-
ciones distintas, con más de 20 compo-
nentes que han grabado 16 elepés. A me-
diados de la década de los sesenta, al nor-
te de Londres, el bajista Ashley Hutchings través del Woodstock de Joni Mitchell. En
ya colaboraba con los guitarristas Simon 1972 creó el grupo Plainsong, y después se
Nicol y Richard Thompson. Junto a ,ellos, instaló en Estados Unidos. Por su parte,
Martin Lamble (batería), lan Matthews Richard Thompson (1949) abandonó Hay similitudes entre
(voz) y Judy Dyble (voz) integraron la pri- Fairport en 1971 para iniciar una obra Fairport Convention y las
mera formación del grupo. personal de gran nivel. Guitarrista incisi- bandas californianas. Pero
Fue a partir del verano de 1972 cuando vo y compositor prolífico, sus canciones creo que ellos tienden hacia el
el grupo encontró su formación más cono- mezclan aromas tradicionales con el rock, blues, mientras que nosotros
cida: Sandy Denny (voz, guitarra y tecla- y en 1974 comenzó a grabar discos junto a nos basamos en el folk. Sandy
dos), Trevor Lucas (guitarra y voz), Jerry su mujer, Linda Thompson, con colabora- Denny conoce lo que es la
Donahue (guitarra), Dave Pegg (bajo y ciones de antiguos componentes de Fair- tradición del folk, y creo que el
voz), Dave Swarbrick (violín y voz) y port. grupo se beneficia de esa
Dave Mattacks (batería). Algunos miem- Fuera de lafamilia Fairport está un gru- afinidad por las raíces inglesas.
bros de este sexteto, con altas -como la po tan sugerente como Pentangle, forma- El hecho de que toquemos
del fundador, Simon Nicol- y bajas -el do en 1967 por dos excelentes guitarristas con instrumentos eléctricos no
trágico fallecimiento de Sandy Denny procedentes del folk -John Renbourn y cambia nada".
(1947-1978)-, son los que todavía man- Bert Jansch-, dos músicos de jazz
tienen en la actualidad el espíritu del gru- -Danny Thompson y Terry Cox- y la Richard Thompson, 1968
po con actuaciones ocasionales. vocalista Jacqui McShee. Crearon una
Muchos de ellos han protagonizado música eminentemente acústica, con in-
provechosos proyectos. Así, Ashley Hut- cursiones en el folk, blues, jazz y músicas
chings fundó en 1970 Steeleye Span con orientales.
planteamientos similares a los de Fair- Desde Escocia llegó la Incredible
port, aunque con especial atención a las String Band. Un nombre de lo más apro-
danzas y folclor británicos de los si- piado: la Increíble Banda de Cuerda eran
glos XVII y XVIII. Mike Heron y Robin Williamson, que
lan Matthews dejó Fairport en 1969 idearon en 1965 uno de los grupos de folk
para formar su Matthews' Southern Com- más eclécticos, abiertos y demenciales.
fort, grupo con el que alcanzó el éxito a Canciones tradicionales de las islas, ragas
indias e instrumentaciones anárquicas ca-
racterizaron a un dúo imaginativo, alejado
de esquemas preestablecidos y que no
dejó sucesores ni imitadores. Grabaron su
último disco en 1976, y Williamson se es-
tableció en Estados Unidos, donde siguió
carrera en solitario.
"LAS PALABRAS DE LOS PROFETAS / ESTÁN ESCRITAS EN LAS PAREDES DEL
' METRO'/ Y SE SUSURRAN EN LOS SONIDOS DEL SILENCIO" (Paul Simon, 1965)
L MITO DE Con sus voces felices, los Beach Boys fueron los
CALIFORNIA
poetas del eterno verano de California. La base del
grupo eran Mike Love y Dennis Wilson (de izquierda a
derecha, el segundo y el tercero). 19
"IGUAL QUE VAMOS A EUROPA PARA VER EL PASADO VIVIENTE, UNO
DEBE VISITAR CALIFORNIA PARA OBSERVAR EL FUTURO" (Alison Lurie)
bulado por Hollywood haciendo algunas explícita, los grupos empezaron a surgir
películas sobre jóvenes y que consiguieron de todos lados. Se hablaba de un sonido
varios éxitos. Sin embargo, los años se- San Francisco, pero los grupos eran muy
senta empezaban a cambiar el tono de su diversos y coincidían únicamente en su a era inocente de la
humor. De la frescura de cabalgar sobre clara pertenencia a la opción vital del hip- música californiana concluye en
l as olas se pasó a otras cabalgadas menos pismo. 1964. Ese año los estudiantes
atléticas pero más intensas. En el húmedo Los Ángeles también sintió los rayos de la universidad de Berkeley
norte californiano una ciudad de tradición contraculturales. De los Byrds o los Buffa- i niciaron sus revueltas. Las
cosmopolita se preparaba para atraer y lo Springfield se pasó a supergrupos como drogas psicodélicas -el LSD
condensar una extraña energía que surgía Crosby, Stills, Nash y Young, con un esti- todavía es legal- empujaron
de una generación rabiosa y propensa a lo, más entroncado con las raíces country, a muchos surfistas hacia
replanteárselo todo. Las drogas psicodéli- que apoyado ponla industria fonográfica nuevos panoramas mentales.
cas hacían su aparición mientras que en- radicada en Los Angeles se expande rápi- Bob Dylan y los grupos
tre los jóvenes corría de boca en boca una damente. Los Beach Boys no perdieron británicos difundían actitudes
consigna: "Let's go to San Francisco". Y tampoco el tren, y Good vibrations fue la que no casaban con la
muchos se fueron a San Francisco. indicación de lo que la experimentación simplicidad de la cultura de la
Ya en la década de los cincuenta, los podía hacer por unos antiguos surfistas. playa. Finalmente, el envío de
gurús de la generación beat -Ginsberg, Los viajes sobre las olas dejaban paso a tropas norteamericanas a
Kerouac, Cassidy, Ferlinghetti...- ha- travesías con nuevos carburantes. Vietnam rompió el espejismo
bían escogido la bahía de San Francisco Pero detrás de ellos, amparada en la del eterno verano.
como refugio. De la misma manera, du- niebla tóxica angelina, surge una banda
rante el prodigioso verano del amor de compuesta de personajes pálidos y tene-
1967, en una ciudad en la que no había brosos que en sus canciones evocan oscu-
prácticamente ninguna tradición musical ras llamadas del subconsciente. Los
Doors, y en especial Jim Morrison, repre-
sentan la cara oscura de aquel mundo de
flores y amor y son al mismo tiempo la
más original y potente de todas las bandas
surgidas de la California de los años se-
senta, turbio presagio de todo lo que iba a
suceder en la época siguiente.
"CUANDO ESTOY ENCIMA DE UNA OLA TENGO UNA SENSACIÓN DE INMENSO
PODER. E S LO QUE QUIERO TRANSMITIR CON MI GUITARRA" (Dick Dale)
Una tabla y la capacidad para atrapar Pet sounds es el primer disco concebido to-
una ola son elementos que definen
parte de la mentalidad del surfista. talmente por Wilson, obra de inmensa su-
tilidad, gran riqueza emocional y delicada
atmósfera. No es un éxito des-
comunal, pero en el Reino
Unido recibe alabanzas hasta
de Paul McCartney. El resto
del mundo se entera de la ma-
durez de los Beach Boys con
el portentoso Good vibrations:
en tres minutos y 35 segun-
dos, un arco iris de climas mu-
sicales, una obra de naturale-
za experimental, pero con
gancho popular.
Los Beach Boys están en la
vanguardia del pop creativo,
pero ésta no va a ser una his-
toria feliz. Mantienen su pre-
sencia en las listas con piezas
deliciosas -como Heroes and
villains, Darfn', Do it again o I
can hear music-, pero las sin-
fonías de Brian se materiali-
zan entre dolores de parto.
Les persigue su vieja imagen,
anticuada en una California
que deriva hacia la psicodelia
(y que repudia a los Beach
Boys, forjadores de su mito de
adolescencia). Su compañía
tiene dudas respecto a la ren-
tabilidad del grupo. Brian se
enfrenta a sus compañeros de
aventura y se encierra en el
estudio en compañía del arre-
glista Van Dyke Parks, otro
genio insólito, y músicos pro-
fesionales. Está empeñado en
que el próximo disco sea la
versión californiana del Sgt.
Pepper's de los Beatles. Se va
a llamar Smile, ya tiene porta-
da y promete ser una obra em-
dedores del estudio. Y es que Brian ha ju- Dennis Wilson actuó en el cine. Una
gado con el LSD, está atormentado por su escena de Two-lane Blacktop, con
sordera (aparentemente, producto de las James Taylor y Laurie Bird.
palizas de su inflexible pa-
dre), pasa por una crisis
matrimonial e intenta, inú-
tilmente, despertar su ins-
piración rellenando su sala
de trabajo con arena playe-
ra, sentándose descalzo al
piano en busca de alguna
fabulosa melodía.
Las dudas artísticas de
Brian desembocan en pro-
blemas psiquiátricos. El
resto de los Chicos de la
Playa también chapotea en
una California diferente.
Mike Love se apunta a la
meditación trascendental y
embarca al grupo en una
disparatada gira con el ma-
harishi Manesh Yogi; Den-
nis conecta con la banda
asesina de Charlie Manson
y está a punto de perder la
vida por no colaborar en el
lanzamiento del líder como
estrella del rock. El paraíso
teenager tiene rastros de
sangre y locura.
A principios de los se-
tenta vuelve a subir la ma-
rea. Finalmente, los Beach
Boys son reconocidos en sus justas di- llantez, pero el grupo ya no es más que
mensiones de grupo emblemático. Se res- una máquina nostálgica. Abundan los en-
cata el legendario Surfs up, que es aplau- frentamientos personales y los discos en
dido unánimemente. Graban abundantes solitario, las giras canceladas y las graba- s automático; cuando
discos desiguales para Reprise y las reedi- ciones desganadas. Dennis Wilson se aho- hablo con viejos amigos / y la
ciones de añejas canciones se venden en ga (28 de diciembre de 1983), y sus herma- conversación gira sobre
grandes cantidades. El grupo se defiende nos consiguen que su cuerpo repose en el chicas que conocimos, /
en directo con el añadido de nuevos músi- mar por intercesión de Ronald Reagan, cuando su pelo era largo y
cos, pero no parece hallar su rumbo. Pe- que agradece así el hecho de que los suave / y la playa era el sitio
riódicamente se rumorea que Brian Wil- Beach Boys hayan tocado en las conven- adonde ir, / los cuerpos
son ha recuperado su forma, pero la reali- ciones del Partido Republicano. Práctica- bronceados y las olas de sol, /
dad es que se ha convertido en un perso- mente nadie se extraña de que canten con l as chicas de California y una
naje frágil al que sus amigos tratan como a Julio Iglesias o de que Mike Love apoye costa maravillosa, / cuando el
un niño, bajo el cuidado de un doctor que los intentos de establecer una clasificacion tiempo se calienta,
regula su vida. Patético. moral para los discos de rock. Pinceladas reunámonos / y hagámoslo de
Surge algún que otro destello de bri- de tristeza para el final: ya han superado nuevo".
el cuarto de siglo de existencia, y más que
un grupo son una institución norteameri- (Do it again, de los Beach
cana. En su haber, el poder evocador de Boys, 1968.)
docenas de viñetas musicales. El injerto
de un sedoso romanticismo en el corazón
del rock. Unas armonías impecables en las
que se miran todos los grupos vocales. Su
discreta excentricidad. Los soberbios edi-
ficios sonoros construidos por Brian Wil-
son, pionero en la producción moderna y
en la concepción de grabación como pro-
ceso artístico. Un optimismo, un amor por
la diversión, una voluntad de felicidad que
hablan de una tierra de leche y miel. La
cara sonriente del sueño americano, la
promesa de que es posible un verano
eterno. a
"TE PROPONGO ALGO MEJOR. S I TIENES VALOR, / HAGAMOS UNA CARRERA
HASTA 'LA CURVA DEL MUERTO" ('Deadman's curve', 1963)
das en español por jóvenes de aspecto sa- Los Mustang (a la izquierda) y Bruno
ludable y con ritmos que conectaran con Lomas. Abajo, Karina. A su derecha,
lo que se hacía en ese momento en las me- Los Relámpagos.
trópolis musicales; detrás estaba el fenó-
meno de los Beatles y el beat británico
como mentor y modelo.
Los protagonistas españoles no apare-
cieron de repente; muchos de ellos eran
pioneros en estas lides, con muchas expe-
riencias musicales a sus espaldas, que lo-
graron una audiencia masiva en forma de
conjuntos. Los grupos mandaban, aunque
figuras como Raphael, Miguel Ríos, Kari-
na, Gelu, Rosalía, y otros solistas, com-
partieron las mieles del triunfo.
Esta explosión juvenil iba acompañada
también por un acentuado nacionalismo
musical, con osadas declaraciones de al-
gún protagonista que aseguraba que no te-
nían nada que aprender de los extranje-
ros. No sólo componían canciones pro-
pias en castellano, sino que adoptaron con
fruición los tópicos de la cultura española
-o mejor andaluza- para titular sus
creaciones. Los Brincos, con Lola y Pare-
ces gitana; los Roberts, con Ave María y
Lola; Gatos Negros, con María Lola;
Micky y los Tonys, con Zorongo gitano; Pe-
kenikes, con El Vito y La gitana; Cheyenes,
con Válgame la Macarena, y Los Relámpa-
gos, con Dos cruces y Seguidillas, fueron
los ejemplos más sobresalientes. Incluso
Mike Ríos cambió su nombre por el de
Miguel Ríos, y desde sus primeras versio-
nes dio paso a canciones compuestas para
él, como Tema para Rocío y Serenata bajo
el sol, que son dos de las mejores obras de
toda su carrera.
Los acontecimientos se desarrollaban
muy deprisa y la disyuntiva era subirse
con rapidez al tren de lo moderno, juvenil de vida que incitaban al consumo, para
y ye-yé, o perderlo sin remisión. Se subie- que funcionara todo el complejo sistema
ron muchos. En primer lugar, los medios artístico-comercial.
de comunicación, y después, muchas em- La Cadena SER lo entendió así y en- hora, cuando vengan
presas de productos y servicios ligados al cargó a Tomás Martín Blanco la creación Los Brincos, os pido que no os
consumo de los jóvenes; y para que no fal- de un programa de alcance nacional que mováis de vuestros sitios.
tara nadie, la Iglesia católica también hizo reuniera todos estos ingredientes: El gran Pensad que si armáis mucho
sus pinitos. musical. Ya en 1965 era el lugar necesario alboroto no tendréis más
Fue la radio, sin embargo, la que apos- de difusión, reunión y presentación de festivales y, cuando termine
tó más fuerte, con programas no sólo de nuevos artistas que quisieran triunfar en todo, os vais tranquilamente
música ligera, como se llamaba entonces, toda España, recuperando el fenómeno de a vuestras casas".
sino específicamente jóvenes. A los pione- las fans, que había sido olvidado desde los
ros Raúl Matas, J. Soler Serrano, Ángel inicios del Dúo Dinámico, José Guardiola Pepe Palau, locutor de radio,
Álvarez, Enrique Ginés, Alfonso Eduar- y Marisol. Los Brincos y Bravos, Raphael a los jóvenes que presenciaban
do, Arribas Castro, J. María Mantilla y al- y Serrat, Sírex y Mustang eran el centro el festival de conjuntos en el
gunos más, les salieron discípulos por to- de las nuevas disputas juveniles. Palacio de Deportes de Madrid
das las ondas; pero se necesitaban progra- El turismo, en pleno auge, ayudó a la en 1966.
mas capaces de arrastrar a multitudes de ebullición musical de los sesenta. Los mi-
oyentes y aficionados identificados no llones de europeos que acudían a las cos-
sólo con la música, sino con otros modos tas mediterráneas favorecieron el trabajo
de mucho conjuntos, que tenían que com-
binar adaptaciones de éxitos foráneos con
canciones y ritmos aflamencados, typical
spanish, en muchos de los casos con volun-
tariosos esfuerzos, y en contra de sus aspi-
raciones artísticas. En Mallorca este es-
quema funcionó bastantes años con toda
JÓVENES ESPAÑOLES DE TODAS LAS CLASES SOCIALES ACCEDIERON
A LOS INSTRUMENTOS ELECTRÓNICOS EN LA `ERA DE LOS CONJUNTOS'
El
una pléyade de conjuntos que de cuando maestro de ceremonias, también contaron
en cuando sorprendían, en sus actuacio- con su gran festival en el Palacio Munici-
nes y discos, con algunas versiones o crea- pal de los Deportes, con Los Gatos Ne-
cine musical vivió ciones propias más acordes con sus in- gros, Lone Star, Salvajes, Dúo Dinámico,
sus años más productivos en los quietudes: eran Los Javaloyas, Beta Quar- Jóvenes, Bravos, Sírex y Brincos; y en ju-
sesenta, y, aunque ligado tet, Sixtar, Dogers, 5 del Este y, tal vez los nio, la plaza de toros de Valencia se llenó
fundamentalmente a Marisol, mejores, Los Z-66, que grabaron en casas con 20.000 personas para ver y escuchar a
Rocío Dúrcal, Joselito y otras discográficas catalanas y que pocas veces Sírex, Bravos, Karina, Dúo Dinámico y
figuras infantiles, se realizaron se acercaron por la Península. Huracanes. Con estos festivales y otros
muchas películas con Miguel Como las posibilidades de triunfo y tra- muchos que se celebraron en otras ciuda-
Ríos, Micky, Karina, Massiel, bajo aumentaron, bastantes músicos ex- des españolas se estableció un contacto
Los Sírex, Gatos Negros, tranjeros intentaron establecer en España permanente entre los artistas de varias re-
Raphael, Bruno Lomas, Los sus cuarteles generales. A los tradiciona- giones, que hasta entonces, salvo excep-
Bravos, Dúo Dinámico, Juan y les intérpretes italianos y franceses que ciones, se mantuvieron en un discreto ais-
Júnior, Los Pasos y Los íberos participaban en los festivales de la can- lamiento. También eran lugares privilegia-
como protagonistas. En ción, principalmente en Benidorm, Ma- dos de trabajo, que se convertían en el me-
conjunto, en toda la década se llorca y del Mediterráneo, en Barcelona, dio necesario para la subsistencia de mu-
rodó casi un centenar de les sucedieron unos cuantos grupos que chos y las ganancias de los pocos intérpre-
películas de este tipo, mientras contando como bagaje la música de in- tes que sobresalieron entre los cientos de
que en los 15 años siguientes fluencia inglesa supieron adaptarse e in- esforzados aspirantes.
no llegaron a contarse una cluso cantar en español. Los Tomcats,
docena. Si bien mucha fue la The End, Los Vampiros, Jess & James,
cantidad, la calidad no Tucky Buzard, Steve Rowland, Os Du-
abundaba. ques y Los Indonesios, entre otros, llega-
ron de varios países de Europa y tras una
pequeña estancia volvieron a sus países de
origen o se quedaron como músicos de
"COMPARAR A LOS BRINCOS CON LOS CONJUNTOS EXTRANJEROS ES COMO
COMPARAR A BEETHOVEN CON ALGUERÓ" (un lector de la revista `Fans')
Sin embargo, ese mismo año aparecie- Arriba, Los Sírex y Miguel Ríos (a la
ron los primeros avisos de los nuevos derecha). Abajo, Massiel, y a su
vientos que soplaban en el mundo de la derecha, los Pop Tops.
música. Al otro lado del Atlántico, Esta-
dos Unidos reaccionó a la invasión britá-
nica en varios frentes: el folk-rock, la psicodelia, el soul. .
No, Los Salvajes, Íberos y canciones sueltas de pocos más lograron aciertos míni-
mamente recomendables. Dentro del soul
español, con Los Canarios, Conexión,
Shelly y la Nueva Generación, Condes,
Yerba Mate y algunos más, sólo los prime-
ros consiguieron aciertos relevantes.
En el espacio de dos o tres años todo el
complejo se desmoronó. Volvieron con
fuerza los solistas: Serrat, Marisol, Aute,
Manolo Díaz, Karina; el espíritu de grupo,
de unión, de conjunto, sufrió un duro gol-
pe. Estos cambios vinieron acompañados
de un sentido crítico muy acusado respec-
to a las formas y contenidos de las cancio-
nes. La nova cançó había logrado una cier-
ta implantación (y, con Serrat, audiencia
en toda España). A la temática compro-
metida se unieron los sentimientos pacifis-
tas y libertarios de los hippies, y todas sus
secuelas.
En medio de toda esta disputa llegó el
asunto de Eurovisión, en abril de 1968. La
rápida sustitución de Serrat por Massiel y
la polémica desatada antes y después del lograron ningún éxito, aunque dejaron
triunfo de ésta iniciaron un período de obras interesantes y sirvieron para prepa-
desconfianza de los poderes políticos fren- rar a figuras que serían relevantes años
te a los músicos pop, que hasta entonces más tarde. Smash, Música Dispersa, Nue- as canciones de
habían quedado bastante al margen de la vos Tiempos, Máquina, Vértices, y OM, amor, tema único de todo el pop
censura y la represión. fueron los ejemplos más destacados. español hasta finales de los
Por si faltara algo, en mayo de ese mis- En medio, como fenómeno específico, sesenta, estaban siendo
mo año, París y San Francisco se hallaban lo que se llamó sonido Trabuchelli, que in- bombardeadas y la juventud
en pleno apogeo. Las revistas musicales tentaba conseguir un producto vendible a exigía algo más. Los grupos de
más influyentes -como Teleguía, y des- una gran mayoría con una cierta dignidad folk, que nacieron en toda
pués Mundo Joven- se empezaron a ocu- y calidad. Sus representantes eran los Án- España bajo distintos nombres
par también de estos temas, provocando geles, Módulos, Mitos y, sobre todo, Mi- -Ez Doz Amairu, Voces
una silenciosa división entre el público jo- guel Ríos, que con el Himno de la alegría Ceibes, Canción Castellana y
ven: los que no querían hablar de política y (1969), realizado con la inestimable ayuda Group de Folk, respondían
los que apostaron por un compromiso es- de Waldo de los Ríos, logró el éxito mun- en cierta forma a estos
tético y social más acorde con los nuevos dial y el segundo disco de oro para ja mú- requerimientos. Incluso Aute
tiempos. sica pop española. y Miguel Ríos cantaron
A partir de 1968, aparecieron dos co- También los aciertos de Alain Milhaud canciones en catalán ligadas
rrientes de dificil conciliación: por una con Canarios y Pop Tops se podrían en- a temas existenciales y
parte, un pop con vocación mayoritaria y marcar en esta línea; el resto de los grupos humanistas.
comercial, representado por Los Diablos, famosos fueron desapareciendo, aunque
Fórmula V, Puntos o Juan Pardo, que algunos, como los nuevos Brincos, inten-
aguantarán hasta mediados de los setenta taron su obra más ambiciosa, como es
con una producción cada vez más ramplo- Mundo, demonio y carne. Por si fuera poco,
na y vulgar, y, por otro lado, los grupos se estaba produciendo otro fenómeno: la
llamados progresivos y underground, que no popularización de las discotecas moder-
nas, con un buen sonido y muchas luces,
que aparecerían en todos los pueblos de
España, asestaron un golpe definitivo
-del que no se ha recuperado aún- a la
música en vivo. Pero esta ya es la década
de los setenta, que en lo musical y en Es-
paña poco tuvo de dorada.
"SI TE PREOCUPA MI PORVENIR, PUEDES DEJAR DE PENSAR EN MÍ. / NO
LOGRARÁS HACERME CAMBIAR; SOY COMO SOY" (`Flamenco', Los Brincos)
En su corta vida de éxitos, Los Bravos ron llamándose Sonor durante cierto
grabaron en castellano, inglés e tiempo, hasta que un ex miembro del gru-
italiano. po, Manolo Díaz, se cruza en su camino.
Éste queda impresionado por
la fuerza y la personalidad de
Mike y habla de ello a Alain
Milhaud, director artístico de
discos Columbia. Con No sé
mi nombre, La moto, La para-
da del autobús y otras cancio-
nes de Manolo Díaz, más la
ayuda del programa El gran
musical, de la Cadena SER, la
aparición de espontáneos fans
que surgieron de la nada para
buscarles nombre, y la clarivi-
dencia de Alain Milhaud, Los
Bravos saltan a la populari-
dad. Graban cuatro canciones
en Madrid, un single de pro-
moción, y contactan con la
Decca inglesa. Atraído por la
idea de Milhaud, llega a Espa-
ña el productor Ivor Ray-
mond con unas maquetas de
temas inéditos. Ahí está Black
is Back y los chicos se prepa-
ran para grabar en Inglaterra.
El 16 de julio de 1966, Black is
black, por los desconocidos Bravos, entra
DESFILE
DE CONJUNTOS
EDUARDO LÓPEZ GARCIA
La siguiente relación de pequeñas histo-
rias de los conjuntos más famosos de en
tre los cientos que existieron durante los
años 1964-1968 se inicia con la mención
de algunos grupos destacables que por
muy variadas razones no lograron alcan-
zar el éxito o acierto que los reseñados:
Alex y los Findes, Los Archiduques, Boti-
nes, Brisks, Buitres, Cefe y Los Gigantes,
Continentales, Corbs, Diablos Negros,
Diapasons, Dracs, Extraños, Flaps, Fle-
cos, Four Winds and Dito, Golden Quar-
ter, Jóvenes, H. H., Nivram, No, Pekes,
Pepes, Picnic, Protones, Pumas, Roberts,
Rocking Boys, Shakers, Suco y Los Escor-
piones, Tiburones, Top-Son, Watts, Wi-
kingos, Windys, Z-66, 4 Gats, 4 Z, 5 Xics.
Éstos y los que a continuación se tratan
configuraron una de las etapas más exci-
tantes de la música pop española.
Los Ángeles. Grupo granadino formado
en los primeros años sesenta bajo el lide-
razgo de Alfonso González (Poncho).
Como otros tantos, recorrieron una pri-
mera etapa, con algunos cambios de nom-
bre y componentes, hasta conseguir, bajo
el apelativo de Ángeles Azules, una cierta
audiencia en 1966 por su Canto a lo espa-
ñol. Ese mismo año saltan a una casa pun-
tera, Hispavox, y comienzan una larga ca-
rrera, basada principalmente en versiones otros grupos, sin que tuvieran demasiada
de éxitos extranjeros en los que destaca- audiencia. Ya desde entonces contaron
ban sus buenas artes vocales. Conforme con la inapreciable e insólita ayuda del pa-
avanzaban los setenta fueron ablandando dre de Teddy Bautista, su cantante y líder, n un tiempo ya
su estilo, aunque seguían siendo uno de que les preparó un viaje a EE UU con una olvidado, / donde todo era
los puntales del sonido Hispavox-Trabu- estancia de varios meses, justamente en normal, / cada uno iba a lo
chelli. Lograron éxitos notables con ¿Has uno de los momentos de mayor eferves- suyo, / no solían criticar. /
amado alguna vez a alguien?, 98.6, Maña- cencia de la cultura juvenil de los sesenta. Porque llevo el pelo largo, /
na, mañana, Dime, dime y Créeme. La En esta prolongada y privilegiada perma- no me toman por normal; /
muerte de Poncho en un accidente provocó nencia grabaron un álbum con componen- muchos siglos han pasado, /
la desaparición del grupo en 1976. tes de los Tokens como productores, en el no se puede ir hacia atrás. /
Los Canarios. Tras el preceptivo tanteo que se contienen quizá las primeras mues- Con esto se da uno cuenta, /
inicial en algunos grupos de aficionados, tras de música de garaje hecha por españo- de la gente que hay de más, /
varios jóvenes canarios forman en Las les. Conocen también el esplendor del que, ignorando el progreso, /
Palmas Los ídolos; con este nombre gra- soul, y a este estilo se dedican en los años están por civilizar. / Es mejor no
ban tres EP (discos con cuatro canciones) siguientes. De vuelta a España contactan hacer caso, / ya que un día
que contenían versiones de los Beatles y con Alain Milhaud, que consigue con sólo llegará / que, con melena o sin
dos discos, Pippermint frappé y, sobre ella, / por igual nos juzgarán".
todo, Get on your knees (Ponte de rodillas),
un gran éxito que mantuvieron con Child y Incomprendidos, canción de
el álbum Libérate. En las actuaciones eran Los No
especialmente convincentes e iniciaron
una corriente de soul español, que contó
con unos cuantos grupos que no tuvieron
"DESEARÍA SER COMO PAT BOONE: UN GRAN CANTANTE Y UN CREYENTE
QUE CUMPLE CON SUS OBLIGACIONES RELIGIOSAS" (Bruno Lomas, 1966)
Los Pekenikes, grupo instrumental por ge Matey de baterías, Los Pekenikes pare-
excelencia, contó, sin embargo, en cían una pequeña escuela de corto apren-
sus orígenes con diversos cantantes. dizaje y estancia pasajera para terminar
sus componentes en otros grupos como
los Brincos, Flecos o Sonor.
En 1966 editaron Hilo de seda, que se
convirtió en su mayor éxito, y guía para
sus futuras obras: Lady Pepa, Troncos hue-
cos, Frente a palacio, Embustero y bailarín,
Cerca de las estrellas. A partir de 1969, a
fuerza de repetirse a sí mismos, se fueron
agotando, y empezó la deserción de la ma-
yoría de sus miembros originales. El resto
se mantuvo con el nombre, y desarrolló
una carrera abundante en discos, pero
menos interesante en resultados. Para no
ser menos que otros, volvieron hace poco
tiempd de una forma fugaz e irrelevante.
Micky y Los Tonys. Con el nombre de
Los Tonys se formó en Madrid allá por el
año 1961, teniendo siempre como figura
estelar a Miguel Ángel Carreño, alias
Micky, que desde muy pronto es conocido
por el hombre de goma por sus famosas
contorsiones en los festivales del Price,
como su grupo vocal puntero. Con cancio- donde alguna vez les acompañaron tres
nes propias (Tiempos felices, No encuentro negros de Torrejón, los Black Dancers,
comprensión); de Manolo Díaz (Ojo por ojo, que eran la sensación de las matinales ma-
Que se mueran los Ayer tuve un sueño), y del componente del drileñas. Lograron muy pronto unos dura-
feos, / que no quede ninguno, grupo folk Almas Humildes Antonio Resi- deros contratos en la parrilla del Hilton de
ningún feo. / Pues nos quitan nes (Anoustka), consiguen gran repercu- Madrid y en la base de Torrejón. Entraron
las chicas / y tienen mucha sión, pero sin éxitos arrolladores. La moto, en el estudio en 1963, pero sólo con sus
vista; / nadie sabe que tienen también de Manolo Díaz, fue el motivo de versiones de Verde, verde y Zorongo gitano
un arte especial / para las otra disputa con Los Bravos, pero éstos se lograron algún pequeño impacto. En 1965
conquistas. / Yo, yo, yo, soy llevaron el gato al agua. A pesar de ser interpretaron Maratón ye ye, filme de Je-
muy feo, / y la estética, por algo veteranos en estas lides, la mili, los sús Yagüe, y aquí comenzó su escalada.
mucho que avance, no me cambios y una cierta desorientación en su No sólo la película es seguramente una de
salvará". línea musical acabaron con la carrera de las notables de todo el cine pop español
Los Pasos hacia 1972. En su última etapa sino que tiene además como aliciente el
Que se mueran los feos, de deambularon entre un cierto sonido con que en ella interpretaron sus mejores te-
Nicolás Curiel, interpretada por toques morunos (Habibi) o psicodélicos mas: Sha-la y Ya no estás. Después vinie-
Los Slrex (Lluvia en la estación) y simples y pegadi- ron No sé nadar, La gallina, No comprende-
zas canciones como Primavera en la ciudad mos cómo no somos millonarios y otras iro-
y Te quiero porque te quiero. Tras su disolu- nías por el estilo. Se disolvieron en 1970.
ción, algunos miembros siguieron en la Micky siguió como solista, en una trayec-
música; Álvaro, en La Compañía, y Joa- toria irregular, con un gran éxito, incluso
quín Torres, en sus estudios de produc- en la República Federal de Alemania, de
ción. Todos juntos volvieron en una fugaz la mano de Fernando Arbex, El chico de la
reaparición en directo, en 1985. armónica. Compartió el protagonismo con
Los Pekenikes. Formados en el año otros intérpretes en películas como Codo
1960 por los hermanos Sainz, Alfonso y con codo y Casi jugando, de fácil y justifica-
Lucas, con la incorporación de Tony Luz ble olvido. De los otros componentes, uno
e Ignacio Martín Sequeros como compo- acompaña a Julio Iglesias y los demás se
nentes estables, comenzaron transfor- dedican a diversas profesiones. Para no
mando el Madrid de Agustín Lara en un ser menos, volvieron como Micky y Los
tímido ritmo rockero, que interpretaban en Tonys sin pena ni gloria en los primeros
lugares frecuentados por estudiantes de la ochenta, pero con Micky no hay retorno
capital. Desde sus comienzos entablaron posible: nunca se ha ido, y sigue promo-
una lucha encarnizada entre ellos por viendo proyectos con diversos nombres y
mantener un vocalista y un batería perma- resultados.
nentes. Perdieron la batalla, pero ganaron
el éxito y la fama cuando se transformaron
en conjunto únicamente instrumental en
1966. Desde Eddy Guzmán, que era a la
vez vocalista y batería, a Júnior, Juan Par-
do y José Barranco como cantantes, pa-
sando por José Nieto, Pablo Argote y Jor-
LOS GRUPOS ESPAÑOLES SE EXPRESABAN A TRAVÉS DE `SINGLES' Y
'EPÉS'; COMPARATIVAMENTE, FUERON POCOS LOS QUE GRABARON `ELEPÉS'
Los Mustang. Fueron, junto con Los Sí- Carátulas de discos de los eternos
rex, el grupo más famoso de Barcelona. rivales catalanes: Los Sírex y Los
Aunque empezaron con una aceptable Mustang.
canción compuesta para ellos, No lo ves, se que en todos los guateques se intentara
convirtieron pronto en los versioneros por bailar sardanas y entraron de lleno en la
excelencia de todo el panorama musical adaptación de temas populares españoles
español. Primero con canciones francesas y la creación propia de otras canciones en
e italianas, y algún instrumental, y des- la misma línea de rancia hispanidad. Dos
pués adaptándose con facilidad a cual- cruces, Alborada gallega, Danza del fuego,
quier moda sucesiva, llenaron 14 años de La Santa Espina, El torneo y El arlequín de
trayectoria musical que finalizó cantando Toledo fueron algunas de sus obras mas
a David Bowie. Mayor espíritu camaleó- destacadas. Grabaron con los últimos
nico no lo ha habido en 30 años. Pero so- adelantos técnicos del momento, como las
bre todo Santi Carulla, como cantante, y seis pistas. Desaparecieron en 1971 y re-
Marco Rossi, de guitarra, encabezaron un gresaron en 1976 con un nuevo álbum, y
grupo que hoy es recordado por sus ver- otra vez en 1982, con ocasión del Mundial
siones de los Beatles, de las que vendieron de fútbol Naranjito. Pablo Herrero y José
miles de discos en España, a veces incluso Luis Armenteros, sus líderes y composito-
mas que los propios originales. Las adap- res principales, se dedicaron ya desde me-
taciones eran, en general, mas blandas y diados de los sesenta a componer para
dulcificadas que los originales, y nunca tu- todo tipo de artistas y estilos.
vieron el empuje de otros conjuntos cata- Tony Ronald y los Kroner's. Anthony
lanes. Como tantos otros, volvieron fugaz- den Boer, holandés, se instaló en España a
mente en los primeros ochenta. finales de los años cincuenta; desde enton-
Los Pop-Tops. Junto con Los Bravos y ces ha recorrido una larga carrera musical
Los Canarios, son el gran acierto del pro- que llega a 1977, como cantante, y conti-
ductor Alain Milhaud. Éste escuchó, por núa hasta hoy como productor de nuevos
la radio, en una retransmisión del Festival artistas. Los Kroner's Dúo, Tony y Char-
de Conjuntos Musicales de León de 1966, ley (el que después popularizaría La yenka
a un grupo llamado Los Tifones, cuyo can- con su hermano Johnny), Tony Ronald y
tante, Phil Trim, ya había estado en Espa- sus Kroner's y simplemente Tony Ronald,
ña con su grupo caribeño, The Trinidad fueron sus distintas mutaciones. Desde
Steel Band (incluso actuaron con los 1960, Tony ha plasmado toda una peque-
Beatles en Las Ventas). Su primer disco, ña historia del pop con una calidad media
ya con el nombre de Pop-Tops, fue una más que aceptable. Su mayor éxito fue
versión aceptable de A white shade ofpale, Help (1971), pero interpretó decenas de
de Procol Harum, que tuvo alguna difu- canciones propias y versiones en inglés,
sión, pero que no resistía la comparación español e incluso catalán, de múltiples y
con la original. En 1968 comenzaron sus opuestos estilos.
grandes éxitos con una canción dedicada Los Sírex. Con Antonio Miguel Cervero, asó el tiempo de los Beatles /
a Martin Luther King, The voice of the Leslie, el cantante, y Guillermo Rodríguez y también el de de los Rolling
dying man, y sobre todo con Oh lord why Holgado, guitarra, bajo y compositor, se Stones, / pero tú sigues tan
lord, con la que llegaron a media Europa. convirtieron en el grupo con los fans más l oca / y no atiendes mis
En 1971, con la canción francesa Mamy aguerridos de toda Barcelona, ganando razones. / Ahora empiezas
Blue, se les oyó en medio mundo. Consi- casi todas las batallas a sus máximos riva- una campaña: / que hay que oír
guieron un nuevo disco de oro para la mú- les, Los Mustang. Era ésta una continua- música de España, / y entre
sica española. ción de otras polémicas, mas pacíficas, en- todos elegiste a Los Brincos, /
Los Relámpagos. Comenzaron llamán- tre los admiradores de José Guardiola y el que te cantan claramente: /
dose Dick y los Relámpagos, y desde sus Dúo Dinámico. Tardaron en grabar, pero `l`ll t ry to find another girl, 1111
primeras actuaciones y discos (1963) mos- en 1965, con La escoba, su séptimo disco, t ry to find a mademoiselle'. /
traron una excelente habilidad instrumen- subieron muy arriba e iniciaron una serie Ya me he cansado de tus
tal, con potentes guitarras y órgano eléc- ininterrumpida de éxitos menores: Que se manías; / me has convertido
trico, con claras influencias de Shadows, mueran los feos, Culpable, El tranvía, Cuan- en antimusical, / y si tú quieres
Ventures y, sobre todo, de Johnny y los to más lejos estoy y Yo soy tremendo. El San
saber dónde encontrarme, /
Hurricanes. No obstante, desde el princi- Carlos era el club favorito para sus reunio- ya me buscarás".
pio contaban con temas propios en su re- nes y actuaciones; le dedicaron una can-
pertorio y no eran nada vulgares. El paso ción, versión del Ruta 66 que hicieron fa- El antimusical, canción de
de los Urales y Pretoriano se convirtieron moso los Stones, pero que astutamente Adolfo Waitman para Miguel
en clásicos de sus actuaciones. En 1965, firmaban ellos. También hicieron versio- Ríos
con Nit de llampecs, llegó el éxito; lograron nes del rock clásico en sus recitales, y se
mantuvieron en excelente forma hasta
1968, en que empezaron a decaer, desapa-
reciendo en 1972. Volvieron en 1980 con
nuevas canciones, y han sido, sin lugar a
dudas, los mas interesantes de todos
cuantos han regresado, por sus temas, hu-
mor y puesta en escena.
"CON EL PELO ALBOROTADO Y LAS MEDIAS DE COLOR, / UNA CHICA
`YE-YÉ QUE TE COMPRENDA COMO YO" (Conchita Velasco)
metidos a los dictados de un director des- Las Monjitas del Jeep se llamaban
pótico que odiaba su trabajo y humillados así, según la carpeta del disco, "por sus
por ejecutivos, técnicos y personal subal- viajes en este tipo de vehículo".
terno, como si fuesen apestados o se hu-
bieran introducido en los estudios de gra-
bación para efectuar un atraco.
Como gráfica muestra del profundo
desprecio que los maduros encargados de
realizar las versiones en castellano de los
hits anglosajones sentían por aquel tipo de
tareas, baste recordar la traducción de
Downtown por Chao, Chao, que trasladaba
a la playa una historia de asfalto con abso-
l uta impunidad.
Pero cuando los felices sesenta pasa-
ban su meridiano sin que los miembros de
la cofradía fonográfica nacional se hubie-
ran dado por enterados de lo que ocurría a
su alrededor, crecía en las ciudades el fra-
gor de nuevas guitarras que músicos inex-
pertos, pero también entusiastas, intenta-
ban afinar sin demasiado éxito, general-
mente por la rezumante humedad de los
sótanos en los que efectuaban sus ensayos
ante la incomprensión generalizada de sus
familiares, vecinos, guardias municipales
e incluso de sus ensordecidas y pragmáti-
cas novias.
Crecía la demanda del producto. Los
ecos que llegaban de EE UU y Reino Uni-
do, y en menor medida de Italia y de Fran-
cia, incrementaban los deseos de homolo- veterano Miguel Ríos, por fin libre de sus
gación de los teenagers hispanos, que so- compromisos de cantante funcionario
ñaban con emular a sus legendarios mo- obligado a realizar versiones a granel, fi-
delos. charon por la firma. a Iglesia no sólo
Novola, el sello de la discográfica Zafi- Por lo general, y confiados en la maqui- dejaba sus locales para que los
ro, que lanzó a Los Brincos, fue un primer naria musical de la casa, engrasada por estudiantes ensayaran u
intento de cubrir esa demanda. En Hispa- Trabucchelli y más tarde por el ampuloso organizaran festivales. Desde el
vox se desató su primera ofensiva contan- Waldo de los Ríos, los responsables de éxito de la monja belga Soeur
do con los oficios de un hábil productor, Hispavox no prestaban gran atención a la Sourire con Dominique, y al
Rafael Trabucchelli, que imprimía un sello base instrumental de sus grupos, cuyos abrigo de los vientos del
personal a sus grabaciones, sello que miembros eran frecuentemente sustitui- Concilio Vaticano II, cierta parte
pronto se convertiría en marca de fábrica, dos por profesionales mercenarios duran- de la jerarquía eclesial
sonido de la casa que respaldaba las gra- te las sesiones de grabación. A lo largo de toleraba estos contactos con la
baciones de conjuntos y solistas, de Rap- 10 años aproximadamente Hispavox pro- cultura popular, y surgieron
hael a Los Módulos, pasando por Karina bó caminos muy diversos: del folk beato de grupos musicales de monjas,
y los veteranos Pekenikes, una de las pri- María Ostiz a la rumba moderna de Los frailes y ediciones religiosas
meras apuestas de la casa, inteligente y Payos. Impregnados de cierto conserva- que contaban con una sección
brillante colaboración entre el virtuosismo durismo, los directivos de Hispavox no de jóvenes y conjuntos. Si de
de Trabucchelli y el aguzado instinto de apadrinaron grandes revoluciones forma- Argentina llegó el padre
rapiña de Alfonso Sainz, experto en pira- les. Probaron con la canción de autor sin Alejandro con el Twist del
tear melodías clásicas y canciones popula- compromiso de Mari Trini y Alberto Cor- marciano, en España
res de tiempos pretéritos para convertirlas tez, y alentaron monstruosidades orques- aparecieron Los Cuatro de
en brillantes instrumentales. tales del megalómano Waldo de los Ríos, Asís y Las Monjitas del Jeep,
Grupos como Los Ángeles, Los Mitos que abrieron paso a las posteriores abe- que no sólo cantaban ritmos
y Los Módulos, especialistas en armonías rraciones del maestro Luis Cobos. ye-yés, sino que se
vocales, o Los Pasos, que cultivaban cier- Por el frente abierto continuaron otras acompañaban con sus
ta vena humorística; la empalagosa Kari- compañías discográficas: Fonogram lanzó propias guitarras eléctricas y
na, antigua solista de Los Pekes, y luego el a Fórmula V, guiados por Mariní Callejo baterías. Anecdótico quizá y
desde las sombras, ejecutantes de un pop con pobres resultados
descremado y tópico. En Barcelona gol- artísticos y comerciales, pero
pearon con fuerza Los Diablos, aún más ayudaba a crear un ambiente
inanes que sus colegas madrileños, y hasta general favorable a la cultura
la firma Belter, bastión de las más inque- y música jóvenes.
brantables esencias de la españolidad
cantante, probó a saturar el mercado con
subproductos ye-yés.
"CON PATILLAS LARGAS, / ESTRECHO PANTALÓN, / UN JERSEI A RAYAS,
AUNQUE LLAME LA ATENCIÓN. / SOY ASÍ" (Los Salvajes, 1966)
Los Rascals fueron los mejores mayor originalidad fue añadir ortografia
representantes del llamado sonido de grandiosa al du-duá al uso (Cara mía) con
Long Island, mezcla de rock y soul. ágiles recursos del momento.
En Filadelfia, entre ídolos prefabrica-
dos tipo Fabian, surgieron algunas voces
con nervio propio. Len Barry (1942), anti-
guo vocalista de los Dovells, se transmutó
en James Brown blanco con ayuda de
Leon Huff, futuro diseñador del sonido Fi-
ladelfia. Otro nativo de la zona, Lou
Christie, pudo ser el Warren Beatty del
pop norteamericano. Tenía leyenda: escri-
bía sus canciones a medias con una amiga
vidente que preveía sus éxitos. Lightning
strikes (número 1 en 1966) definía su ro-
manticismo rosa sacudido por un convul-
sivo falsete.
Pero el falsete más hábil pertenecía a
Del Shannon (1939). Venía de Michigan y
fue uno de los primeros intérpretes en
componer su material: singular injerto de
pop y rock and roll en estribillos mortíferos,
se ganó la estima del publico británico. Su
clásico Runaway (número 1 en 1961) in-
cluía el innovador sonido del musitrón
(sintetizador primitivo). Hizo películas,
produjo a otros artistas y ha sido rehabili-
tado recientemente por Tom Petty.
Era más épico y lacrimógeno que Gene
Pitney (Conneticut, 1941), universitario
La onda expansiva del pop bajito con voz de enorme estatura. Como
llegó a Hollywood y ofreció a los Del Shannon, fue más popular en el Reino
hijos de los famosos la
oportunidad de triunfar por sí EL `LAMÉ' AL Unido. Tenía de publicista al representan-
te de los Rolling Stones, que le prestaron
mismos. Aparte de Nancy un tema inédito. Amigo de Phil Spector,
Sinatra (hija de Frank Sinatra),
Gary Lewis (hijo del cómico
PANTALÓN DE RAYAS Pitney escribió éxitos para Ricky Nelson
(Helio Mary Lou) y las Crystals, pero, cu-
Jerry Lewis) consiguió varios JOSÉ MARTA REY riosamente, triunfó con temas ajenos.
hits en 1965 y 1966, al frente La diferencia era tangible. Los grupos bri- Freddie Cannon (Massachusetts, 1940),
de los Playboys (hacían tánicos irradiaban trepidación. Parecían con su Talahassie Lassie (1959), ilustra la
escuálidas imitaciones de los tomar el desayuno al vuelo y hacer locuras persistencia rocanrolera y su inevitable re-
Beatles con arreglos de Leon todo el día. Los norteamericanos desayu- ciclaje. Otro camaleón fue Tommy Roe,
Russell). Dino, Des¡ and Billy naban, seguramente, sentados con toda la un sureño que abrió la década falsificando
contaban con un hijo de Dean familia. Formales a carta cabal, no tenían con éxito a Buddy Holly (Sheila, 1962) y la
Martin y otro de Des¡ Aznar, nada de juveniles salvo la edad. Cuando terminó como maduro militante del circo
hijo; Frank Sinatra los enroló en los Beatles llegaron, Estados Unidos se- Bubblegum (sonido chicle).
su compañía, donde sus guía los pasitos de los bailes de moda y la Tommy James & The Shondells son
versiones de folk-rock y pop no onda media arrullaba la prosperidad con- otro caso de permeabilidad descarada.
pasaron de ser éxitos servadora con azucaradas lagrimitas vo- Banda de garaje en Michigan, a los cuatro
restringidos. cales exprimidas por guapitos de brillanti- años de grabar Hanky Panky (1962) el
na y tupés caducados. tema traspasó las fronteras. Los Shon-
Las primeras reacciones frente al do- dells tiraron sus cursis jerseis de pico, se
minio británico oscilaron entre la rendida dejaron el pelo largo y se entregaron a un
imitación y la reconversión sagaz. Años prolongado idilio con las listas, disfrazan-
de colonización musical y sequía dieron, do sus pegajosas cancioncillas de chicle o
sin embargo, momentos y artistas brillan- psicodelia. Junto a ellos, Paul Revere &
tes. Para empezar estaban los Four Sea- The Raiders, quinteto de Portland (Ore-
sons. Algo mayores, tenían pinta de far- gón) con olvidadas credenciales de garaje
macéuticos pero eran el epítome del pop. y una sólida ristra de exitosas canciones
Desde Sherry (número 1 en 1962) dispen- de pop-rock.
saron sin cesar millonarios bálsamos de
lujuria vocal, drama y ternura, con el tran-
sido falsete de Frankie Valli. Venían de la
zona italiana de Nueva Jersey y se adapta-
ron dignamente a los cambios. Vecinos
más opacos eran Jay & The Americans,
quinteto de Brooklyn (1961-1970), cuya
LAS DI S COTECA S, CON LAS ' GO-GO G I RLS', SE POPULARIZARON A
MEDIADOS DE LOS SESENTA Y APOYARON AL `POP' MÁS RÍTMICO
Los Monkees. De izquierda a derecha, serie, sino que sus discos se vendieron
Davy Jones, Peter York, Mickey
Dolenz ., Mike Nesmith. muy bien desde el primer momento. Last
train to Clarksville; I'm a Believer; A little bit
me, a little bit you, y Daydream Believer, lle-
garon a los primeros puestos de todas las
listas de éxitos en 1966 y 1967.
Sin embargo, fueron criticados y pues-
tos como ejemplo de lo que la industria
discográfica es capaz de hacer para ven-
der discos. Los Monkees se defendían di-
ciendo que habían sido contratados como
actores para televisión. Pero si eso era
cierto en el caso de Davy Jones y Micky
Dolenz, básicamente actores, no así en los
de Mike Nesmith y Peter York, que proce-
dían del mundillo musical. Por otro lado,
las canciones habían sido compuestas es-
pecialmente para ellos por Tommy Boyce
& Bobby Hart, Neil Diamond y Carole
King & Gerry Goffin, expertos músicos, y
autores de numerosos clásicos de la músi-
ca pop norteamericana.
Pero si las canciones eran buenas y los
discos se vendían en todo el mundo, ¿qué
tenía de malo ser un monkee? En otra épo-
ca, probablemente nada, pero a mediados
de los años sesenta, cuando se acusaba a
la industria y a los medios de comunica-
ción de manipular a la gente hasta hacerla
pensar que la guerra de Vietnam era un
peligro para la libertad de América, ser un
monkee era sinónimo de vendido.
Los Monkees podían no ser unos ge-
nios, pero no les gustaba nada ser unas
Nadie vio la película que marionetas. Por eso, en el verano de 1967
hicimos con Los Monkees! Pues decidieron que había llegado el momento
me encanta, la he visto
millones de veces. OS MONKEES: de hacer una gira por todo el país. Y no les
fue nada mal. Recibieron buenas críticas y
Cinematográficamente, es la demostraron tener suficiente sentido del
mejor película de rock que se `POP' DE TELEVISIÓN humor para representar sus papeles con
haya filmado. De hecho, es una sonrisa. Con el paso del tiempo fueron
antirrock, tiene una estructura JESÚS ORDOVÁS emergiendo las personalidades de cada
única. Yo trabajé incluso en El fabuloso éxito de Los Beatles en Esta- uno y se fueron ganando la comprensión
l as sesiones de grabación de la dos Unidos con sus discos y sus películas de algunos críticos y de personajes como
banda sonora, y aparezco en desconcertó a la industria del entreteni- John Lennon o Frank Zappa.
l a contraportada del disco, que miento norteamericana. Pero no tardaron En 1968 saltaron de las pantallas de te-
era realmente bueno. Pero, en reaccionar. La CBS lanzó a los Byrds, levisión a las del cine, con la llamativa
ah, nadie se enteró". un grupo californiano al que hubo de ayu- Head (dirigida por Jack Nicholson y Bob
dar en sus primeras grabaciones para que Rafelson). Al año siguiente, Peter York
Jack Nicholson tuvieran el impacto deseado. Y la cadena dejó el grupo. El resto siguió como trío,
de televisión NBC creó de la noche a la pero no tardaron en separarse, por el inte-
mañana a Los Monkees. Pero mientras rés de Mike Nesmith en emprender su ca-
que Los Byrds eran una banda de rock na- rrera como cantante, espléndido, de coun-
cida, al igual que lo fueron los cuatro de Li- try-rock. Sus tres compañeros también se
verpool, de la voluntad de sus miembros establecieron como solistas, discretos.
originales, Los Monkees fueron un grupo Curiosamente, las canciones de Los
reunido, dirigido y utilizado por los ejecu- Monkees han ido ganando adeptos con el
tivos y productores de la NBC para una tiempo, y muchos han descubierto que son
serie inspirada en las dos primeras pelícu- gemas del mejor pop juvenil hecho en la
las de Los Beatles. Norteamérica de los sesenta.
El invento funcionó. Davy Jones (can-
tante), Mike Nesmith (guitarra), Peter
York (bajo) y Mickey Dolenz (batería)
fueron los elegidos para convertirse en los
Beatles norteamericanos de la televisión.
Pero lo más sorprendente es que no sólo
tuvieron un gran éxito como actores de la
TRAS LOS MONKEES, LOS INVENTORES DEL 'SONIDO CHICLE' DESARROLLARON
UN GRAN NEGOCIO DEL 'POP': MÚSICA PARA MENORES DE EDAD
CHICLE
MUSICAL
JAIME GONZALO
Eran melodías pegajosas, inofensivas, in-
sustanciales. Escrupulosamente envasa-
das al vacío. Buscaban un público fácil.
Gente de laxo criterio y paladar lacio.
Como las golosinas, atraían a los niños.
Su efecto parecía similar: sabor dulzón y
fugaz, sin valor nutritivo, indigesto en do-
sis elevadas. Colesterol para los tímpanos.
El sonido bubblegum (literalmente, globo
de chicle) no entraba en la dieta de un dia-
bético.
Pero tampoco hay que denostarlo en
exceso. Rastreando las ruinas de tan efí-
mero fenómeno podemos encontrar sor-
presas incólumes. Pequeñas miniaturas de
pop bobalicón y evanescente. Música ins-
tantánea. Redondos pedacitos de falsa
inocencia y ritmos embaucadores. Euforia
de laboratorio, sin pretensiones, matices o ba curtido en los aspectos técnicos del ne-
mensaje. La química del entretenimiento gocio (distribución, venta, grabación o
en estado puro llevada a los confines fun- producción). Lo suyo era la promoción.
cionales del kleenex. Había sido capaz de convencer a las emi- Los Archies fueron el
Detrás de una fachada tan ligera de soras de radio para que radiasen extrava- único grupo del sonido chicle
cascos se escondían unos bastidores com- gancias (Wooly Bully, de S am The Sham) y que escapó al dominio del
plejos. La idiosincrasia del bubblegum es- burradas (96 Tears, de Question Mark and sello discográfico Buddah.
tribaba en que su aparente espontaneidad ' The Mysterians). Tenía el cómo, sólo le Apadrinados por Don
era totalmente artificial. De hecho, en faltaba el qué. Una vez fundada su propia Kirshner (cazatalentos
1967, el pop norteamericano era de todo compañía -Buddah Records-, en 1968 profesional, descubridor de
menos natural. La pequeña polvareda le- contrató a los productores y compositores l os Monkees), y con Jeff Barry
vantada por las bandas punks o de garaje Jerry Kasenetz y Jeff Katz para que ecua- componiéndoles (el que con
-anárquicas, desaliñadas, espléndida- lizasen sus ideas en sonido. Ellie Greenwich había
mente impetuosas- veía su consistencia Durante dos años el bubblegum fue el suministrado éxitos a Phil
financiera abortada no ya sólo por infraes- sonido de la América joven. Monopoliza- Spector), fueron el paradigma
tructuras débiles (discográficas indepen- do por Buddah, consagró episódicamente más cruel del bubblegum: no
dientes con problemas de distribución), a bandas como Ohio Express, 1910 Fruit- existían. Se trataba de un
sino también por la falta de coherencia en gum Company o Lemon Pipers. Cancio- proyecto de estudio con
sus propósitos (obtenían un hit y, al no po- nes de título absurdo -Yummy yummy, músicos anónimos para poner
der repetirlo, mutaban hacia objetivos Chewy chewy; Simon says; 1, 2, 3, Red música a unos dibujos
musicales más convencionales). El bubble- light- hicieron bailar al mundo (curiosa- animados. Pero Sugar, sugar
gum -empleando prácticamente idéntico mente, sin pasar jamás por encima del llegó al número uno y es la
fuselaje instrumental que el garaje- era cuarto puesto en las listas) y vendieron canción con mayor rango de
planificado, predecible y compacto, donde millones de copias. Una buena campaña y clásico y que mejor ha
sus antecesores pecaban de accidentales, un negocio rentable. sobrevivido a la extinción del
zigzagueantes e inconexos. Del caos deri- A finales de 1968, tanta simpleza esta- bubblegum.
vaba el orden. ba mal vista. Las modas cambiaban y aun-
Neil Bogart fue el responsable de las que no faltaron metamorfosis de emergen-
correcciones. Al contrario que otros ar- cia en el bunker de Buddah -los Lemon
quitectos discográficos, su olfato no esta- Pipers injertándose en la psicodelia, la
Fruitgum Co. apuntándose al rock progre-
sivo- no supieron superar el estigma de
cadena de montaje de singles. Convencer a
millones de personas para que se compra-
sen un disco de larga duración de bubble-
gum, a esas alturas, era imposible. Su fu-
neral estaba encargado.
EL `SONIDO GARAGE' CONSISTÍA EN IMITACIONES CRUDAS DE
LOS ESTILOS DOMINANTES A MEDIADOS DE LOS AÑOS SESENTA
Los Blues Magoos, con los trajes media era de uno o dos años, y raro era el
eléctricos que, alimentados por pilas, que conseguía grabar más de dos o tres
se iluminaban intermitentemente. singles. En 1972, el crítico de rock y músico
Lenny Kaye comenzó una labor de reedi-
ción de estos grupos, inspirando una in-
gente cantidad de recopilaciones (Peb-
bles, Boulders, Back from the Grave...)
que han ayudado a valorar la importancia
y rlI ueza de aquella época.
i stos fueron algunos de los más intere-
santes representantes del género.
Barbarians. Procedentes de Boston
(Massachusetts), era el grupo del batería
Victor Moulten, alias Moulty, que perdió
su mano izquierda en un accidente y toca-
ba con un garfio. A ellos se deben temas
como Hey ftúe bird (1964), Are you a boy or
are you a girl? (1965) y Moulty (1966).
Blues Magoos. Neoyorquinos, destaca-
ban por su vestimenta y peinados, asuntos
de los que se ocupaban especialistas. Su
rock psicodélico fue de lo mejor que dio la
ciudad entre 1966 y 1967. A destacar sus
elepés Psychodelic lollipop (1966) y Electric
comic book (1967).
Count Five. De la ciudad de San José,
portaban capas al estilo de Los Brincos.
El responsable de la banda era el cantante
y guitarra rítmica Sean Byrne. Fueron los
autores de Psychotic reaction (1966).
Chocolate Watch Band. Procedentes de
San José (California), el grupo fue apadri-
nado por Ed Cobb, que intentó convertir-
los en los Rolling Stones norteamerica-
La canción Louie, Louie, de nos. Una banda sin líder, pero con todos
Richard Berry, fue grabada por sus elementos mirando en la misma direc-
vez primera por los Wailers. A ción, en la que también cupo la experi-
partir de ellos, se pueden contar OS RUIDOS mentación. Entre sus mejores canciones
decenas de grupos que han quedan Sweet your thing (1966), Are you
gonna be there (1966) o No way out (1967).
realizado versiones sobre este
mítico tema; entre otros,
DEL GARAJE 13th Floor Elevators. La tercera aven-
tura de Roky Peyote Erickson; antes estu-
Bobby Fuller, los Kinks, Toots LUIS MARIO QUINTANA vo con los Roulettes y The Spades, con los
and The Maytals, Stooges, No resulta nada sorprendente que dos dé- que grabó en 1965 su clásico You're gonna
Los Elegantes, Flamin' cadas después de su nacimiento, el rock de miss me, que también incorporaría al re-
Groovies, Frank Zappa, los garaje norteamericano (1963-1967) haya pertorio de su tercer grupo, los Ascenso-
Sandpipers, Tim Buckley, suscitado tanto interés entre los jóvenes res al piso 13. Su afición por los alucinóge-
Desperados, Tom Petty, músicos y oyentes, y pase por un período nos le condujo a vivir internado durante
Barry White, los Sonics, Beach de esplendor superior al que tuvo en su varias etapas de su vida; su entretenimien-
Boys y Jim Capaldi. momento. Durante aquellos años, miles to era conversar con seres de otros plane-
de nuevas bandas nacieron en todos los tas. Sus elepés con este grupo tejano,
Estados norteamericanos. Fueron grupos Psychedelic sounds (1966), Easter everywhe-
que reaccionaron ante la invasión de mú- re (1967), Live (1968) y Bull of the woods
sicos del Reino Unido y que se dispusie- (1969) le han convertido en leyenda. Des-
ron a desarrollar un género que en teoría pués de la disolución del grupo, en 1969,
se les tenía que haber ocurrido a ellos. Roky Erickson ha seguido grabando, ya
Al beat y rhythm and blues británicos en solitario o con The Aliens, excelentes
añadieron grandes dosis de espontanei- discos. El último de ellos fue Don't slander
dad, y crearon así la primera oleada de me (1986), al lado del veterano bajista
grupos punk de la historia. Eran músicos Jack Casady (Jefferson Airplane).
muy jóvenes, que ensayaban preferente-
mente en garajes, y que crearon cientos de
canciones que tenían que haber sido éxi-
tos contundentes y que se perdieron en la
inmensa vorágine del movimiento.
La mayoría fueron grupos locales, que
rara vez se movían de sus áreas. Su vida
LOS `GRUPOS DE GARAJE' ERAN CONOCIDOS TAMBIÉN COMO `PUNKS' POR
LA INSOLENCIA Y AGRESIVIDAD QUE SE DESPRENDÍA DE SU MÚSICA
LA
ENCRUCIJADA
DEL BÚFALO
NACHO SÁENZ DE TEJADA
La casualidad tuvo mucho que ver en
la creación de Buffalo Springfield, dis
frazada de encuentro fortuito entre dos
coches conducidos por jóvenes músi-
cos con ideas y ganas. El 3 de marzo de
1966, durante un embotellamiento de
tráfico en la ciudad de Los Ángeles, de
ventanilla a ventanilla comenzaron a
i maginar proyectos los americanos
Stephen Stills y Richie Furay y los ca-
nadienses Neil Young y Bruce Palmer.
Después, reuniones informales, inter-
cambio de canciones y la realidad de
Buffalo Springfield, uno de los grupos
más genuinos del rock californiano y
con una importante proyección poste-
rior de varios de sus componentes, con nadiense Dewey Martin (30 de sep- nente del grupo Blood, Sweet and
Crosby, Stills, Nash & Young como tiembre de 1942), los ensayos mostra- Tears-. Tras un segundo álbum fan-
descendientes directos. ron la diferencia entre las canciones tasma que nunca fue editado (Stampe-
No eran principiantes, pero tampo- compuestas por Stephen Stills a la me- de), en diciembre de 1967 apareció Buf-
co veteranos. Stephen Stills (3 de enero dida de su voz, las tendencias country falo Springfield again, coincidiendo con
de 1945) apenas conoció su Dallas na- de Richie Furay y los apuntes de Neil los primeros abandonos de un Neil
tal. Vivió en cinco ciudades norteame- Young de lo que sería su estimulante Young que, enfrentado con el dominan-
ricanas, en Panamá y Costa Rica. A los trayectoria en solitario. te Stills, no había actuado con el grupo
18 años comenzó como cantante folk En febrero de 1967 se publicó su pri- seis meses antes -el 16 de junio de
en Nueva Orleans, y en 1964 se trasla- mer elepé (Buffalo Springfield), con una 1967- en el Monterrey Pop Festival,
dó a Nueva York, donde residía Richie pulcra instrumentación, en la que des- donde fue sustituido por David
Furay. tacaba la guitarra acústica de Stephen Crosby. No triunfaron en tan impor-
También aspirante a folk singer, Ri- Stills, la influencia en las armonías vo- tante escenario: la sutilidad de Buffalo
chie Furay (9 de mayo de 1944) comen- cales de unos Beatles filtrados por la Springfield se manifestaba únicamente
zó a tocar la guitarra a los ocho años. costa Oeste y una variedad en las can- en el estudio de grabación.
I mpresionado por el ambiente de ciones -en función de que el composi- El 20 de marzo de 1968, Neil Young,
Grenwich Village, el renacimiento del tor fuera Stills, Furay o Young- que Richie Furay, Jim Messina y Eric Clap-
folk y los Beatles, se encontró con Stills las hacía recorrer varios estilos. Tam- ton fueron detenidos en Los Ángeles
en los Au Go Go Singers, efimero gru- bién incluía su único éxito importante, por posesión de marihuana. La cárcel y
po de folk comercial. For what it's worth, que alcanzó el nú- las multas no ayudaron a animar al
El canadiense Neil Young (12 de no- mero siete en las listas. grupo: a los pocos días, Young anunció
viembre de 1945) había conocido a Problemas con la policía, y con la su abandono definitivo. El 5 de mayo
Stephen Stills y a Richie Furay en los administración para obtener el permiso de ese mismo año, Buffalo Springfield
clubs de folk de Toronto, tras disolver de residencia, obligaron al bajista Bru- actuó por última vez en Long Beach
su primer grupo de rock: Neil Young ce Palmer a regresar a Canadá, siendo (California).
and the Squires. Poco después formó sustituido por Ken Koblun y después Tres meses más tarde se publicó su
los Minah Birds, con el bajista Bruce por Jim Fielder -más tarde compo- adiós discográfico, Last time around, en
Palmer. En un viejo coche fabricado el que participaron Jim Messina y el
para una casa de pompas fúnebres, via- hermano de Neil, Rusty Young, que
jaron Young y Palmer hasta California, junto a Richie Furay empujaban una
hacia el fortuito encuentro con Stephen nueva banda: Poco.
Stills y Richie Furay en el embotella- HISTORIA DEL `ROCK' Son muchos los grupos posteriores
miento de tráfico. Los cuatro vivían en que tienen una gran deuda con Buffalo
Fountain Avenue cuando en el lateral Springfield, banda-encrucijada que
de una apisonadora descubrieron pin- PRÓXIMO CAPÍTULO reunió a músicos que trabajaron juntos
tada una marca que se convirtió en su solamente durante 26 meses y graba-
nombre: Buffalo Springfield.
Tras la incorporación del batería ca- MOTOWN ron tres discos para guardar en la vi-
trina.
ELPAIS
HISTORIA DEL `ROCK'
Entre las compañías discográficas, Motown es única por ha-
ber dado nombre a un estilo que hoy, a juzgar por los pasti-
ches de sonido Motown y las abundantes versiones de sus vie-
jos éxitos que siguen lanzándose al mercado, todavia sigue
vigente. Regida de forma patriarcal por Berry Gordy, fue
una auténtica fábrica de éxitos de insospechada eficacia, en la
que se curtieron artistas como Stevie Wonder, Lionel Rit-
chie, Marvin Gaye, los Four Tops, los Temptations o Diana
Ross (en la foto). Era música negra, con voluntad de llegar a
un público universal, que rompió barreras racistas y acabó dejando atrás el gueto
de Detroit, su ciudad natal, para instalarse en la rutilante California.
MOTOWN
i ntérpretes de la compañía se presentaban en bloque,
como se comprueba en la marquesina del famoso teatro
Apollo, de Nueva York. 22
"LLAMADA ALREDEDOR DEL MUNDO: / ¿ESTÁIS LISTOS PARA UN NUEVO
RITMO?" (Martha & The Vandellas, 'Dancing in the street', 1964)
LAS SUPREMEs,
UNA AGRIDULCE SAGA
ANTONIO DE MIGUEL
En 1966, la Motown llegó a producir la ter-
cera parte de los singles del mercado norte-
americano. Desde 1964 a 1969, las Supre-
mes de Diana Ross consiguieron 16 singles
que superaron el millón de ventas, siendo
13 de ellos número uno en las listas de
EE UU, récord sólo superado por los Beat-
les y Elvis Presley. De humildísimas muje-
res del gueto pasaron a convertirse en cele-
bridades internacionales. La música, una
vez más, era el mejor misil para ascender
de la nada a la gloria; el mágico sueño.
Diana Ross (1944), Florence Ballard
(1944) y Barbara Martin cantaban juntas
desde jovencitas. Eran vecinas en el mis-
mo barrio de Detroit, y habían incorpora-
do a su grupo a Mary Wilson (6 de marzo
de 1944), proveniente de Misisipí.
Berry Gordy supo de su valía, pero es-
peró el momento oportuno. En 1960 les
firma contrato. Barbara Martin deja el ría en 1976) es reemplazada por Cindy
grupo después de varios singles sin éxito (I Birdsong. Desde ese momento, el grupo se
want a guy, Your hearts belongs to me), has- denomina Diana Ross and The Supremes,
y en su nuevo single, Reflections, se utilizan esde 1970 se ha publicado
ta que en 1964 llega su primer impacto, casi una treintena de álbumes
Where did our love go, un tema compuesto diversos efectos electrónicos. El año 1968
ve la asociación de Diana Ross and The de Diana Ross, de cuya
por Holland-Dozier-Holland, que fue nú- producción se han encargado
mero uno en las listas de EE UU durante Supremes con los Temptations, espec-
tacular sobre todo en el álbum TCB, Ta- otros tantos músicos
dos semanas y número tres en el Reino distintos. Con ninguno de ellos
Unido. king care ofbusiness (banda sonora del pri-
mer especial de televisión en color, en paladeó el frenesí que le
Las Supremes podían ya ser calificadas reportaron los tiempos de las
1968), y el abandono de H-D-H como
como el más popular grupo femenino nor- Supremes. Eso no fue
teamericano. Pero aún quedaban muchísi- equipo de compositores.
Desde 1970, Diana Ross abandona las obstáculo para que Capitol la
mos récords por conquistar. Baby love fichara por 13 millones de
(1964), Come see about me (1964), Stop in Supremes, siendo sustituida por Jean Te-
rrell. En 1972, Cindy Birdsong deja su dólares y que la MCA se gastara
the game of love (1965), Back in my arms otros 30 millones en la
again (1965), Nothing but heartaches puesto a Lynda Laurence; luego, la Terrell
se va y entra Shari Payne. Mary Wilson realización de su tercera
(1965), I hear a symphony (1965), My world película protagonista, The wiz
is empty without you (1966), You can't hurry iniciará una breve carrera en solitario, en
1977. (1978, un desastre comercial),
love (1966), You keep me hanging on (1966),
Por el contrario, Diana Ross, que fue junto a Michael Jackson y
Love is here and now you're gone (1967) y Richard Pryor y bajo la
The happening (1967), entre otros, supera- bautizada en su día como la respuesta ne-
gra a Barbra Streisand, demostró ser pro- dirección musical de Quincy
ron también el millón de ventas. La Mo-
clive a similares ambiciones broadwayanas Jones.
town no daba abasto. Cada dos meses de-
bía sacar un nuevo single de las Supremes y trastocó su hechizante ronroneo vocal
para satisfacer la demanda. Todos los te- en una exigente carrera musical. Triunfó
mas nacían de la incansable pluma y pro- en aventuras cinematográficas (encarnan-
ducción de los supermanes Holland, Do- do el papel de Billie Holiday en Lady sings
zier y Holland. the blues y luego protagonizando Maho-
En mayo de 1967, Florence (que mori- gany). Los ochenta la desgajan de su pri-
migenia compañía y la emparentan con
amores ocultos (Muscles, tema de 1982,
producido y escrito por Michael Jackson)
o la obligan a ilícitas asociaciones (Berry
Gibb, Julio Iglesias). La Diana Ross En-
terprises Incorporated, su empresa, crece
y crece.
"AHORA M E D OY CUENTA DE LO MAL Q UE ME TRATÓ MOTOWN
Y DE CÓMO ME ENGAÑARON" (James Jamerson, bajista)
El estricto sonido
Detroit dejaba sitio, en el
catálogo Motown, a cosas
los sesenta y setenta. Cerca de un 33% de
las producciones de la primera Motown
está a su nombre. Dejaron la corporación
en 1968 para fundar Hotwax e Invictus,
sellos menores que dieron una increíble
muy diversas. Al lado del sinfín OS ARTIFICES colección de buenos temas a cargo de
de artistas blancos como Chairmen of the Board, Honey Cone y, so-
bre todo, Freda Payne. Con posterioridad,
Chris Clark, R. Dean Taylor o
Rare Earth, copias de sus
DEL SONIDO Lamont Dozier ha grabado una recomen-
colegas negros, se editaron dable docena de elepés y los Holland, jun-
PATRICIA GODES tos o separados, han seguido dando clási-
elepés de estrellas de la Es fácil abusar de los superlativos cuando
televisión como Linda Carter, cos a todos los que han tenido la suerte de
se habla de la magia de Motown. "Eran caer en sus sabias manos.
The Bionic Woman o Irene una gran fiesta", dice el músico de estudio
Granny Ryan, abuela de Los Jackson 5. Ídolos de la música chicle ne-
Johnny Griffith respecto a las grabaciones groide, crecieron en edad y popularidad,
nuevos ricos. También de aquellos temas insuperables. "Holland,
grabaron allí ídolos de salas de para convertirse en los máximos vendedo-
Dozier y Holland nos daban hojas con los res de discos del universo. Sin embargo,
fiestas como Sammy Davies acordes", comentó el difunto bajista Ja-
Jr., Leslie Uggams o Diahan antes de Thriller, de Michael Jackson, y la
mes Jamerson, "pero nos dejaban hacer lo gomina, estaban los flecos, los afros y el
Carroll, y viejas glorias pop que pensásemos que iba a quedar mejor.
como Four Seasons, Pat Boone pop más arrogante nunca hecho por niños
Ambos, junto al pianista Earl van o por mayores. Michael y sus hermanos
y Bobby Darin. Sin olvidarnos Dyke y el batería Benny Benjamin, fueron
del sello Black Forum, que inauguraron la nueva era de la música ne-
los responsables del influyente sonido. gra en octubre de 1969, cuando se editó 1
grabó una serie de discursos "Mi inspiración", decía Jamerson, "pro- want you back, que terminó con los manie-
de líderes políticos negros o el viene de Oriente; así, el bajo de Standing in rismos de los sesenta. Otras grandes crea-
testimonio de los soldados the shadows of love es completamente ára- ciones son: Abc, Mama's pearl, I'll be there,
negros destacados en Vietnam. be". Mientras, Griffth aparecía más in- Never can say goodbye, Dancing machine o I
fluido por el jazz. En la versión de Gladys am love.
Knight de I heard it through the grapevine se J. Walker. Líder de los All Stars, es un sa-
inició la costumbre de grabar con dos ba- xofonista salvaje y dinámico, hábil crea-
terías. Voces y temas cambiaron, pero la dor de eslóganes y estribillos fáciles de
base instrumental era inconfundible; la-
mentablemente, los nombres de esos ma-
gos nunca aparecieron en las portadas de
los discos de las cabezas de serie del sello.
Four Tops. Prototipo de grupo vocal ne-
gro, gracias al éxito mundial de Reach out
111 be there, en 1966. Es un cuarteto enrai-
"LAS COMPAÑÍAS SE INTERESAN SÓLO POR COSAS MUY COMERCIALES.
MOTOWN NO ES MEJOR NI PEOR QUE LAS DEMÁS" (Marvin Gaye)
MINGUS B. FORMENTOR
Cuando su carrera había dado un nue-
vo vuelco espectacular del lado del éxi
to y la fortuna, Marvin Gaye murió
asesinado un día antes de cumplir los
45 años. Su padre, clérigo de 70 años,
le disparó un par de tiros en el pecho
durante una discusión, declarando más
tarde que había actuado en defensa
propia ante la agresión de un hijo fuera
de sí por efecto de las drogas. última
pirueta, trágica esta vez, de una vida
regida por sobresaltos pendulares, de
un artista en permanente lucha consigo
mismo y con su mundo profesional, fa-
miliar y afectivo.
Marvin Gaye vivió sus gozos y sus
sombras como cantante soul, pero el Motown fueron como batería de estu- relaciones con Gordy eran cada vez
caso es que jamás había sido ése su ob dio en los discos iniciales de los Mira- más distantes y las ventas bajaban de
jetivo en la vida. "Nunca intenté cantar cles y de Stevie Wonder. Sus primeros modo perceptible. Estaba de nuevo en
el material caliente. Lo hice, con no éxitos como cantante solista le llegan otro punto bajo de su existencia.
poca resistencia, porque... bien, busca- con Stubborn kind of fellow (1962) y Entonces llega su obra maestra,
ba dinero y gloria. De modo que acabé Hitch hike (1963), temas en los que con- What's going on? (1971), completamen-
cediendo a la imposición de trabajar tó con el apoyo de las Vandellas. Gaye te escrita y producida por Gaye. Tres
con todo tipo de productores. Pero lo mantenía en esa época una posición de sus singles entran en el top 10. Una
que yo buscaba era ser una estrella del bastante inusual en el imperio Mo- serie de agradables y comerciales melo-
pop, alguien como Nat King Cole, town. Como cuñado de Berry Gordy se días sirve de fondo a manifiestos ecoló-
Frank Sinatra o Tony Bennett. Intenté aseguraba una posición dentro del clan gicos, antinucleares y a favor de la libe-
ser un cantante pop como Sam Cooke, familiar, pero su carrera, al igual que su ración del gueto; la sensualidad del
probar que nuestro tipo de música y vida privada, estaba moldeada por una crooner negro, del que las enamora, al
nuestro modo de sentir pueden acomo- cruda atmósfera de rivalidad derivada servicio de la consciencia social de su
darse perfectamente al contexto de las de la política de mercadotecnia selecti- raza y del pueblo americano en gene-
baladas pop". va que Gordy aplicaba a su escudería ral. Y de arriba abajo. Queda resuelto
Marvin Gaye nació en Washington de grupos y solistas. su divorcio con Anna, pero el pintores-
el 2 de abril de 1939. Durante su infan- La súbita muerte de Tammi Terrell co sistema judicial norteamericano le
cia cantaba y tocaba el órgano en la sobre un escenario en brazos de Mar- obliga a grabar dos discos para que los
iglesia a cargo de su padre. A los 16 vin (junto a ella había creado algunas royalties sirvan de indemnización a su
años decidió alistarse en las fuerzas aé- piezas de soul romántico que funcionan ex esposa. Aquí nace el singular y de-
reas, pero pronto se quebraron sus sue- con la precisión de un mecanismo de cepcionante doble elepé titulado Here,
ños juveniles al ver que en lugar de pa- relojería: Ain't nothing like the real thing, my dear (1978).
sar los días volando se escurrían entre If this world were mine o You're all I need Marvin vive durante años exilios in-
duras marchas y un sinfín de tareas to get by) le sumió en el más profundo teriores y desapariciones externas.
cuarteleras. Era francamente demasia- abatimiento. Por añadidura, su matri- Hasta 1982, tras dos décadas de force
do para su irrefrenable aversión a toda monio con Anna iba de mal en peor, las jeo, no consigue romper su contrato
autoridad y reglamentación. De regre- con Motown. Con 42 años ficha por
so a Washington, Marvin comienza a Columbia. Aparece el erótico Midnight
cantar con varios grupos locales. Pri- love. Otra vez el éxito, renace el ave Fé-
mero los Rainbows, luego los Mar- nix del soul moderno. "Si se tuviera que
quees, más tarde los Moonglows, afa- hacer una película sobre Sam Cooke,
mado grupo de doo-wop que estaba vi- HISTORIA DEL `ROCK' no puedo pensar en nadie mejor para el
viendo su segunda encarnación dirigi- papel protagonista que en Marvin
do por Harvey Fuqua. Fuqua y Gaye PRóXIMO CAPÍTULO Gaye", declaraba Mary Wilson a fina-
no tardarían en emparentar a través de les de los setenta. Marvin quiso corro-
sus respectivos matrimonios con borar con tal minuciosidad la opinión
Gwendoline y Anna Gordy. ajena que acabaría muriendo en olor de
Sus primeros trabajos en la Tamla EL 'SOUL' astracanada como el gran Sam.
Heredera directa del rhythm and blues y del canto gospel de
las iglesias, la música soul expresó de forma contundente el
orgullo racial de la minoría negra durante los años sesenta.
Sobre las bases sentadas por Ray Charles, Sam Cooke y
Jackie Wilson se levantaron voces apasionadas que emocio-
naron a medio mundo, como las de Otis Redding, Aretha
Franklin o James Brown. Y es que el soul no quería quedarse
en el gueto: de hecho, ha sido alimento espiritual y musical
para infinidad de estrellas del rock blanco. Una muestra de
su poder es el éxito reciente de viejas grabaciones de Percy Sledge (en la foto) y
otros soulmen: su riqueza vocal y la capacidad de sus canciones para captar senti-
mientos universales lo convierten en un género sin edad.
23
Enfático y desgarrado, Otis Redding era la esencia del
soul sureño, afirmación rotunda de la identidad de una
comunidad que ya no aceptaba ser discriminada por
el color de su piel.
"YO INVENTÉ LO DE `RHYTHM AND BLUES'. SI HUBIERA SABIDO LO QUE SÉ
AHORA, LO HUBIERA LLAMADO `RHYTHM AND GOSPEL" (Jerry Wexler, productor)
les. Puede hacerlo con sobriedad o con I ke y Tina Turner, dúo prolífico que
buscó el éxito
desgarro, pero lo esencial es mantener la entre el público del rock.
credibilidad al transformar sentimientos
en interpretaciones.
El cantante es el gran comunicador,
pero depende de colaboradores anóni-
mos: músicos, arreglistas, compositores,
hombres de negocios. Cada estudio tiene
su equipo, y se puede establecer un mapa
del soul señalando los centros de elabora-
ción donde graban artistas locales o figu-
ras llegadas desde el Norte. En Memphis
(Tennessee) están Stax-Volt, Goldwax,
Hi, ARC. En Muscle Shoals (Alabama)
funciona Fame. En Miami (Florida), el
punto de cita es Criteria. Nashville, Ma-
con, Jackson, Shreveport, Nueva Orleans,
o Houston, también tienen sus fábricas de
soul.
Habitualmente los músicos son blan-
cos y negros. Para los que ven en el soul la
expresión de la minoría negra sureña es
una conmoción descubrir que esos cortan-
tes toques de guitarra corresponden a un
piel blanca como Steve Cropper o que Dan
Penn y Spooner Oldham, autores de tan-
tas piezas dolientes, no tendrían proble-
mas en Suráfrica. Ellos comparten con sus
compinches negros origen geográfico, pre-
ferencias musicales y actitud vital; son lo
que Norman Mailer define como blancos
negros. Y es que el soul no quiere ser única-
mente la voz de los guetos urbanos o rura-
les. Las estrellas viajan a Europa y se manejadores blancos. Ya no cabe hablar
asombran de recibir inmensa adulación de sentimientos fraternales.
por parte de un público que se ha habitua- Todavía quedan por escribir páginas
do a su música a través de adaptadores excelsas (Al Green, Laura Lee, Millie á& principios de los
británicos. Otis Redding acepta tocar gra- Jackson, Frederick Knight, Ann Peebles, setenta, el soul pierde el favor
tis en el festival de Monterrey, poniendo Denise Lasalle), pero soplan otros aires. del público, que prefiere otras
un pie en el mercado hippy. Incluso en el Se va diluyendo la especificidad de los so- ofertas. Hay música negra con
Sur son muchos los soulmen que se ganan nidos regionales, se transforma la natura- i nfluencia del rock (Sly, War)
la vida con contratos en fraternidades uni- leza de la relación entre artistas y oyentes, o el jazz (Earth, Wind and Fire;
versitarias, donde ya se acepta la integra- disminuye la importancia del vocalista en Herbie Hancock), funk
ción sin mayor problema. favor de las orquestaciones. callejero (Kool and The Gang,
El frente unido del soul se despedaza en De repente soul suena a viejo, a rústico. Ohio Players), elegantes
1968. La muerte de Otis Redding se siente En la radio hay nuevas propuestas, y el grupos de baladas (Delfonics,
como un hachazo, como lo es en términos soul pasa a la clandestinidad. A lo largo de Stylistics, Chi-Lites),
comerciales la ruptura entre el sello Stax y los setenta sólo se graba en pequeñas cantantes con conciencia social
Atlantic, la potente compañía neoyorqui- compañías. Los héroes de la década ante- (Stevie Wonder, Curtis
na que ha esparcido internacionalmente la rior se adaptan a los nuevos sonidos o se Mayfield, Marvin Gaye),
buena nueva del soul. El asesinato de Mar- hunden en locales de tercera categoría: ya fantasiosos sonidos de
tin Luther King rompe la ilusión de la ar- no reflejan el clima de la época, han pasa- seducción (Barry White, Isaac
monía racial. De las canciones de amor se do de moda (y eso es la muerte en el show- Hayes) que avisan que
pasa a estridentes declaraciones de negri- biz). Paradójicamente, el soul se mantiene Filadelfia y la disco music están
tud: hasta un tipo tan conservador como como útil modelo estilístico para superes- a la vuelta de la esquina.
James Brown lanza su Dilo alto, soy negro trellas blancas. Son dos actores, John Be-
y estoy orgulloso. Ese año, en una concurri- lushi y D. Aykroyd, fans del género, los
da convención de la industria del soul hay que propician una recuperación con la pe-
violencia y amenazas: un fantasmal Comi- lícula Granujas a todo ritmo (1980). Llegan
té para el Juego Limpio exige dinero a los luego los libros eruditos, las reediciones,
las reapariciones. Hoy, lejanas ya las con-
diciones sociales que determinaron su
emergencia, el soul queda como prototipo
de la mejor música negra, patrón a imitar
o resucitar. Porque, como lo demuestra el
hit parade británico, puede ganar batallas
después de muerto.
"COOKE PO DÍA TRANSPORTAR A LAS MUJERES AL BORDE DEL FRENESÍ;
LAS EXCITABA HASTA QUE ALCANZABAN EL ORGASMO" (J. W. Alexander)
El
formaciones de las Raelettes, su coro
femenino.
campo del jazz tam-
bién destaca Ray
MISTERIO Charles; es un exce-
lente pianista y toca
bien el saxo alto. Ha
DE RAY CHARLES grabado discos for-
midables con Milt
Jackson y la banda
JOSÉ RAMÓN RUBIO de Count Basie. Su
Ray Charles Robinson nació el 23 de sep- álbum
tiembre de 1932 en Albany (Georgia, The genius after hours es una de
EE UU). Su infancia, que transcurrió en las joyas del glorioso
Florida, fue muy desgraciada: su hermano catálogo jazzístico de
menor murió ahogado, y él quedó ciego a Atlantic. Ha proba-
los seis años y huérfano a los 15. Se dedicó do incluso con la
a la música desde muy joven. Primero tra- ópera, y tiene regis-
tó de imitar al simpático Louis Jordan; tradas dos versiones
después, a Nat King Cole. A comienzos de de Porgy and Bess,
los cincuenta probó un nuevo estilo, bajo una con Betty Carter
la influencia del intérprete de gospel Alex
Bradford y de la cantante de rhythm and y otra con Cleo Laine. Cuando se pone
blues Ruth Brown, de quien fue director patriótico hace ver-
musical durante algún tiempo. Con ese siones escalofrian-
nuevo estilo firmó por la que era entonces tes de himnos como
una compañía discográfica menor, At- America the beautiful.
lantic. Pero el soul es lo
En Atlantic, éxitos como I've got a wo- suyo. No sería exa-
man, What'd I say?, Yes indeed ó Don't let geración decir que la
the sun catch you cryfng le otorgan un so- voz de Ray Charles
brenombre, El Genio, y un cetro honorífi- es la quintaesencia
co, el de rey del soul. Sus posteriores gra- del soul. El propio es
baciones para ABC Paramount, Tangeri- pectáculo de Ray Charles, ese show medi-
ne y CBS le confirman en ese reinado, al do y mecánico que tanto desespera a los
tiempo que diversifican su campo de promotores bienintencionados y a los téc-
acción. nicos de sonido, se salva exclusivamente I soul es cuando coges
Porque la importancia de Ray Charles por el soul. Es el soul lo que hace que a Ray una canción y la haces parte
no se agota en el terreno del soul. Durante Charles nunca le suene igual Georgia ni I tuya. Una parte tan auténtica,
más de 20 años, desde el lejano disco Mo- can't stop loving you: el genio prefiere tan real de ti mismo, que la
dere sounds in country and western music arriesgarse noche tras noche, recrearse en gente piensa que de verdad
hasta el reciente From the pages of my la suerte, improvisar. Si quisiéramos po- te ha sucedido a ti. El soul es
mind, ha sido una estrella en el mundo del nernos poéticos diríamos que a Ray Char- como la electricidad: un
country. De su habilidad para el repertorio les, cada vez que se sienta al piano y nota espíritu, un impulso, un poder".
estándar dan fe versiones espléndidas de un micrófono cerca y un público algo más
material aparentemente tan poco adecua- allá, le vuelven todos los antiguos demo- Rey Charles
do como Some enchanted evening o Till the- nios de su infancia desgraciada, de su raza
re was you. En cuanto a la pura música perseguida, de sus pasadas batallas contra
pop, ¿quién no recuerda sus interpretacio- los narcóticos. Y entonces, aunque el am-
nes de Yesterday o Eleanor Rigby? En el biente sea falso y estudiado, el genio nos
cuenta su historia de verdad.
Ray Charles es un capítulo fundamen-
tal de la música de nuestro tiempo. Y es
que ha influido en muchísimos cantantes.
Negros, como Wilson Pickett; negras,
como Tina Turner, han aprendido su lec-
ción sin renunciar a ser originales. Los
blancos han sido menos escrupulosos y le
han copiado directamente. Es muy fácil
advertir la huella de Ray Charles en gente
Arthur Conley, que fue dirigido soul brother oficial. Así le conocían en los
musicalmente por su descubridor, Otis
Redding. círculos jazzisticos. "Soul es lo que surge,
dijo, "cuando tu parte interior sale a la su-
perficie, lo que no puedes aprender en los
libros de música". Su dúo discográfico con
Ray Charles se llamó Soul Brothers, se-
gún un concepto turco sugerido por Ah-
met Erthegun para definir su gran amis-
tad. El término gustó, y antes de 1965 ya
había sido absolutamente adoptado. En-
tre los artistas importantes de soul, figuran
los siguientes:
Sigue en activo vía Malaco Records, y es Con los Impressions, Curtis Mayfield
un caso único de supervivencia musical. (en la foto, tocando la guitarra) puso
Sus influencias, su maestría y su escuela música a la agitación política negra.
no han decaído en ningún momento.
Clarence Carter. Rústico, bluesy y soca-
rrón, este guitarrista ciego grabó, bajo la
supervisión de Rick Hall, en Muscle
Shoals, varios discos de ruda sensibilidad
como Too weak too fight; Sleep away o una
versión de Patches que fue número uno.
Continúa editando, como siempre esporá-
dicamente, discos donde combina una
desgarrada impostación vocal con su gus-
to por los chistes y equívocos picantes.
Nunca tuvo mucho éxito, pero es un soul-
man original, cálido y nada aburrido.
El
Nothing can stop me, Familiar footsteps, The basa en el genio de sus solistas: Marvin
girl don't care, Groovy situation se juntan Junior, Chuck Barksdale y Johnny Carter.
con Tomorrow I may not feel the same, Get
down y Does she Nave a friend, entre 1979 y Lee Dorsey. Era boxeador, pero se convir- uptown soul florece en
1982. tió en el prototipo del soul en Nueva Or- Nueva York, Chicago y, más
leans a partir de su unión, en 1961, con tarde, en Filadelfia. Es culto,
Don Covay. Nació en California del Sur, Marshall Sehorn y Allen Toussaint. Muy i maginativo y adulto, con
en mayo de 1938. Estuvo con Marvin respetado entre los artistas de rock and roll grandes influencias del jazz,
Gaye y Billy Stewart en The Rainbows; por temas vacilones y humorísticos como l a música latina y los más
fue protegido de Little Richard, quien le Yaya, Doremi: Holly cow, Working on the i nsospechados géneros. Sam
llamó Pretty Boy (Niño Bonito) y le incor- coalmine y Yes, we can. El arrastre con que Cooke (al pasarse al pop) y los
poró a su espectáculo, pero su reputación canta el estribillo de Cynthia bastaría para violines de los Drifters
procede de hits como Mercy, mercy; Sookie convertirle en un clásico aunque no hubie- crearon los cimientos de una
sookie, o See saw, verdaderos epítomes del ra hecho nada más. Murió en 1986. faceta que engarza más de
soul de los sesenta, grabados, aún ahora, cerca con Nat King Cole que
por propios y extraños. Autor favorito de Eddie Floyd. Tiene pocos éxitos en su ha- con Robert Johnson, y se
Aretha Franklin, su mayor aportación a la ber, pero todos son inolvidables: Knock on hermana con el pop, el cabaret
historia musical es Chain offools, que ella wood, Raise your hand, I've never found a y las big bands. Algunos
grabó en 1967. No tan bien comprendidos girl. Su reputación entre los aficionados es creadores: Dionne Warwick,
fueron los dos espléndidos elepés que editó desproporcionada pero comprensible, ya Walter Jackson, Ruby and
Mercury en 1973 y 1974, Super dude I y que es un compositor fuera de serie cuyas The Romantics, Tommy Hunt,
Hot blood. canciones nunca se han dejado de grabar Ben E. King, Jerry Butler. Fue
y versionar. Fue miembro de la escudería uno de los sonidos dominantes
The Dells. Quinteto vocal de Chicago de Stax. de los años setenta.
grandiosas proporciones. Se formaron en
1953, pero su verdadera relación con el Al Green. Gran mito de los setenta. Surgió
soul surge, años después, con una sucesión como la respuesta sureña a la sofisticación
ininterumpida de clásicos como Stay on del soul en la época. Hoy día, dada la tri-
my corner, Oh, what a night, Standing ova- vialización posterior de la música negra,
tion; My pretending days are over, o The love se le considera el sucesor, en su década,
we had stays on my mind. Su reputación se de los grandes soulmen. Nació en Arkan-
sas el 13 de abril de 1946; se inició en un
grupo familiar de gospel. Emigró a Michi-
gan y formó los Creations. Tuvo su primer
hit en 1968, con Back up train. Se consagró
en 1971 con Tired of being alone y Let's stay
together, para Hi Records, de Memphis.
I'm still in love with you, Let's get married,
"ES ALGO QUE TE HARÁ CONOCERTE A Ti MISMO. ¿POR QUÉ NO REVISAS TU
MENTE? HA ESTADO CONTIGO TODA TU VIDA" ('Check out your mind'; Curtis Mayfield)
do en junio de 1942, fundó los Impres- Sam and Dave fueron una de las más
sions, con los que estableció la fusión de i ncandescentes presencias del soul en
discos y escenarios.
gospel y ritmos latinos que identifica el so-
nido de su ciudad. Está obsesionado por Percy Sledge. En
la causa negra, la convivencia social y la un alarde de puro
religión. Su estilismo musical bascula en- sentimentalismo
tre los lujosos arreglos de sus primeros e inspiración im-
elepés en solitario y el sonido seco, cortan- provisó un gran
te y algo desesperado en su álbum Live, o clásico musical,
de discos minoritarios como Something to When a man loves
befeve in love is the place o Honesty. Ha ga- a woman, en base
nado un lugar en la historia gracias a Gipsy a un desengaño
woman, I'm so proud, People get ready, amoroso que
Were a winner, This is my country y Amen había sufrido. Su
(con los Impressions) y a los elepés Roots; voz dolorida ha
Curtis; Back to the world, Superfly o Sweet creado otros
exorcist (como solista). grandes lamentos
country-soul,
Wilson Pickett. Le llamaban el malvado. como Warm and
Nació en Alabama en 1942, fue solista de tender love, Out of
los Falcons y tuvo sus primeros éxitos en lefifield, Take time
Double L. En 1964 fichó por Atlantic, gra- to know he, Sud-
bando en el Sur temas absolutamente re- den stop y I'll be
presentativos, como Midnight hour, Land your everything:
of thousand dances, Funky Broadway o Mini suficiente para
skirt Minnie. Su voz ronca y su misma pre- consagrar a este
sencia le han convertido en el verdadero soulman de Leigh-
paradigma del soulman. Su mejor disco, ton (Alabama).
sin embargo, es de 1973 y se llama Mr. Otro maestro de
Magic Man. Fue grabado en Filadelfia, y la escuela de
muestra una faceta mucho más sofistica- Muscle Shoals.
da, pero igualmente fascinante.
Sly and the Fa-
Joe Simon. Experto en combinar soul y mily Stone. Sly,
country. Nació en Luisiana en 1942, vivió pinchadiscos de
en California y sus grandes éxitos son: You San Francisco, se
keep me hangin' on, My special prayer, convirtió en una de las figuras más decisi-
Drowning in the sea of love, Step by step y vas del soul y el rock gracias a un sabio y
otros, grabados en Monument y Spring. alegre conglomerado de psicodelia, desfa-
No contento con la consideración que te- chatez y grandes canciones como Dance to I LSD y las experiencias
nía de clásico y elegante, inició una recon- the music, Every day people, I want to take de Jimi Hendrix se combinaron
versión, en la época de la disco-music, a you higher, Thank you, Family affair y los en el gueto negro dando vida
base de capas, pelucas de colores y pen- elepés There's a riot going on, Fresh y Small a productos inverosímiles. Sly
dientes que, por fortuna, no gustó, vol- talk, piezas claves en la génesis del funk despejó las dudas que
viendo a sus raíces de modo más o menos contemporáneo. quedaban, comenzando su
forzado. carrera con el peinado afro
Staple Singers. Familia sureña emigrada a más grande y la música más
Sam and Dave. Apellidados, respectiva- Chicago con inicios en el gospel y el folk salvaje. Obtuvo la palma
mente, Moore y Prater. Son sureños, y durante los cincuenta y primeros sesenta. George Clinton, inmigrante en
sus piezas rápidas y rítmicas, basadas Unas sesiones con Steve Cropper y Al Detroit, que creó un
casi siempre en el desarrollo de los riffs Bell les integraron en el soul allá por 1969. i ndescriptible mate mágnum de
del viento, personifican el espíritu baila- Han producido así una cadena de clási- empresas, grabaciones y
ble de los últimos sesenta. Por proble- cos, como Respect yourself, I'll Cake you the- protegidos en torno a sus
mas personales y de drogas, Sam y Dave re, If you're ready come go with me o City in grupos Parliament y
dejaron de hablarse hasta que se separa- the sky. Siguen en activo, y han trabajado Funkadelic. Más moderados
ron, de un modo más o menos intermi- recientemente con David Byrnie, del gru- fueron los Chamber Brothers,
tente, según las exigencias del mercado. po Talkin' Heads. Imprescindibles por la l os Isley Brothers o los Bar-Kays
Pero el dúo ya no ha vuelto a la era dora- voz rotunda e imponente de Mavis en su segunda etapa. La
da de Soul man, You don't know like I Staples. psicodelia negra también tuvo
know o I thank you. su esplendor.
Billy Stewart. Fue pianista de Bo Didley.
Tuvo algunos éxitos, como Reap what you
saw, Sitting in the park y su versión de Sum-
mertime. Nació en Nueva York en 1937, y
falleció, en un accidente de tráfico, en
1970. Tenía un estilo vocal inconfundible y
muchas veces imitado, casi cercano al ma-
"ME CRITICARON EN LAS IGLESIAS Y TAMBIÉN LOS MÚSICOS; LUEGO, CUANDO
VIERON QUE TENÍA ÉXITO, TODOS EMPEZARON A COPIARME" (Ray Charles)
Jackie Wilson fue uno de los más Hold what you've gol, The love you save,
dinámicos You're right Ray Charles, Skinny legs arad all
predecesores del soul. y Rub down. Murió en 1982.
LA INDUSTRIA
DEL GRITO
PATRICIA GODES
James Brown reniega explícitamente de su
último éxito, Gravity. Womack and Wo-
mack se quejan de que los directivos del
sello Wea les obligan a alterar textos y
hasta secuencias de sus canciones. Si esto
ocurre en 1987, cuando Michael Jackson
ha demostrado que un negro puede ven-
der 30 millones de discos, ¿qué ocurría
hace 20 años, cuando la música negra era
un reto a nivel social?
El soul se desarrolló vía minúsculas
compañías locales, que fueron aumentan-
do su poder al ritmo de la popularidad de
sus artistas. Don Covay recuerda cómo él
y Wilson Pickett se divertían compitiendo
en ser el que más nombres de discográfi-
cas especializadas recordaba. Fame, Stax,
Hi, King y SSS dieron a conocer los soni-
dos del Sur, al mismo tiempo que explota-
ban su potencial. Atlantic, en Nueva
York, capitalizó el mercado comprando
las distribuciones de muchos sellos me-
nores.
En California, Specialty e Imperial do-
minaban el mercado en los cincuenta,
mientras los sesenta vieron una tremenda
floración de nuevos sellos, hasta el punto
que se ha dicho que había tantas compa-
ñías como artistas. Minit, luego absorbida
por Imperial, fue la más importante. En
Luisiana surgieron Ronn y Sansu. Chica- asegura que hacían los discos por instinto.
go fue la cuna del truste Chess / Chekker / Pero la tarea del productor ha sido abso-
Cadet. Las compañías sufrían presiones lutamente definitiva para encauzar el ta-
por parte de los medios de comunicación y lento del artista. Wexler y colegas como or su origen marginal,
los pinchadiscos, pero los artistas se sen- Rick Hall, Al Bell, Allen Toussaint, Carl gran parte de la discografía soul
tían explotados por la industria. Así, Etta Davis y Steve Cropper han actuado tradi- no se recicla comercialmente
James y Bo Didley han demandado a cionalmente como mediadores entre los y llega sólo al alcance de muy
Chess por no pagar sus royalties; Martha intereses de la industria y los del intér- pocos. Arthur Alexander es,
Reeves e Irma Thomas son pobres hoy prete. como James Carr, ejemplo
día, y hasta James Brown se vio una vez Hugo Peretti, productor italonortea- i nevitable, lo mismo que los
obligado a demandar a King Records, que mericano de RCA, responsable de los dis- productores John Richbourgh y
no se daba por enterada del fin de su con- cos de Sam Cooke, cuenta cómo la com- Swamp Dogg (alias Jerry
trato. pañía daba prácticamente la espalda al WiNams Jr.). Mientras, Irma
"No había productores entonces", co- cantante hasta que descubrió que Sam era Thomas se ha convertido en
menta Ahmet Ertegun respecto a los pri- el que más vendía después de Elvis Pres- mito porque los Stones se
meros tiempos de Atlantic, "y quien diri- ley. Para Cooke, la falta de interés había adueñaron de su Time is on
gía la compañía producía los discos". Su supuesto una garantía de libertad respecto my side. Las mujeres se han
compañero y colaborador Jerry Wexler a sus grabaciones. Otros no tenían tanta ll evado la peor parte en el
suerte, pero, contra lo que cuentan las le- soul. Linda Jones, Lorraine
yendas y el tópico comúnmente aceptado, Ellison, Maxine Brown y
no todo eran páginas negras. "Escribí See- Barbara Lewis son algunas de
saw para Aretha en cinco minutos, y toda- l as olvidadas.
vía me da royalties. Una canción de éxito
termina con los problemas de la renta",
confiesa Don Covay.
"YO NO DIRÍA QUE EL BLANCO CARECE DE ALMA, PERO SÍ CREO QUE LA
HA MANTENIDO ESCONDIDA DURANTE MUCHOS AÑOS" (Charlie Mingus).
Mitch Ryder tuvo éxitos en 1966 y 1967, oyente del sofisti-soul de Filadelfia. Su títu-
y ha sido reconocido como inspirador lo, Blue-eyed soul (El soul de ojos azules).
por figuras como Bruce Springsteen. Con esta oftalmológica denominación se
tildó periodísticamente al soul hecho por
blancos.
Si el ideólogo negro LeRoi Jones tiene
razón al decir que "cuanto más inteligente
es el blanco más necesita robar del negro
para realizarse, muchos de los mejores
éxitos de la cultura pop nacen de ese robo.
Joe Cocker, Eric Burdon, Mick Jagger y
sus Stones y, sobre todo, el egregio Rod
Stewart, no habrían existido con su poten-
cia artística sin amamantar febrilmente en
los pechos de la música negra. Rod Ste-
wart, el más soulero de todos los citados,
es un maravilloso caso de cristalización
negro-blanca.
¿Qué es lo que lleva a los artistas blan-
cos a interesarse por la música negra? Se
podría establecer una rápida ecuación en-
tre la condición social del pueblo negro y
el origen social (también desarraigado) de
muchos jóvenes blancos que les oriente
por ello hacia el blues y sus formas musica-
les derivativas. Se produciría un fenóme-
no de identificación artística, y, como el
hecho de tocar vivencialmente una música
i mplica una conciencia social determina-
da, nos topamos súbitamente con el desclasamiento. Esto, que en el caso del soul
blanco norteamericano parece apuntala-
do de lógica (convivencia de blancos y ne-
gros en guetos urbanos, con la consecuen-
cia de que los hijos de blancos encuentran
un mayor atractivo en el blues que en las
formas musicales de sus padres), no tiene
justificación en el caso del soul británico.
El Reino Unido, precoz en su venera-
nancia con su larguísima versión (21 mi- Eric Burdon, un británico de garganta
nutos) del Get ready de los Temptations, negroide, demostrada en sus discos
plagado de solos instrumentales y muy en solitario, con los Animals o con War.
aplaudido por el público rock. Norman con Gamble-Huff, los productores estela-
Whitfield veló por ellos hasta que los cam- res de la ciudad de Filadelfia. La carrera
bios y la carencia de éxitos aconsejaron su del dúo fue un vaivén continuo sin estilo
disolución. Delaney & Bonnie, un matri- definido hasta que en 1975 consiguen su
monio singular, se especializó en hacer primer logro, Sara smile, de su cuarto ele-
discos con sus lujosos Friends (Clapton, pé. Rich girl se extrajo de su quinto disco,
Whitlock, Radle, Russell, Keltner, etcéte- Bigger than,both of us. Su explosión como
ra), recorriendo EE UU y el Reino Unido sex-symbols del soul blanco se concretó y
en una divertida troupe de la que siempre afirmó cuando se ocupó de producir sus
sobresalía la cálida voz de Bonnie, una discos el cerebro-del-light-sound David
preciosa mujer cuyo aprendizaje en Mem- Foster. Quince años juntos, más de una
phis con la Stax Records le dejó huella in- docena de elepés y varios discos de Hall en
deleble. solitario acreditan a este dúo como lo más
Tower of Power iniciaron su carrera atractivo y mágico del soul estadouni-
funky en los setenta en California, y sus dense.
componentes han sido reclamados para Del Reino Unido, y concretamente de
muchísimos discos: Lenny Pickett, Steve Escocia, saltó a la respetabilidad la Avera-
Kupka, Mic Gillette, Greg Adams y Emi- ge White Band. Sexteto formado en 1972
lio Castillo constituían una sección de que logró un hit enorme con su tema Pick
viento eficaz y creativa. Los Blues Brot- up the pieces en 1975. Se trasladaron a vi-
hers no fue un grupo con pretensiones de vir a Estados Unidos y completaron una
longevidad. Nacieron de dos mentes ca- vida discográfica no exenta de lujos, como
lenturientas, John Belushi (muerto de so- un delicioso álbum en 1977 con Ben E.
bredosis hace unos años) y Dan Aykroyd. King, ex Drifters, y un doble elepé en di-
Actores, cómicos y verídicos amantes del recto, Person to person, de igual fecha.
soul, se rodearon de monstruosos instru- Otro emigrado es Robert Palmer, que
mentistas blancos -Steve Cropper y alternaba el papel de vocalista en la banda
Duck Dunn (ambos viejos lobos de los Vinegar Joe con Elkie Brooks (primeros
Booker T. & The MG's), Lou Mardii, setenta). En solitario desde 1974, ayudado
Tom Malone, Alan Rubin- y grabaron por miembros de Little Feat y The Meters,
un histórico álbum, Briefcase full of blues fue dando a luz sus pasiones por el soul en
(1978), que fue número uno en EE UU. Le a fertilización en el cruce
álbumes de poco éxito, pero tan sinceros
siguieron Made in America y la banda so- racial viene también generada
como emocionantes: Sneakin' Sally
nora de Granujas a todo ritmo, película di- por cosas tan cotidianas
through the alley, Pressure drop, Some peo-
rigida por John Landis. Los Blues Bros. como escuchar la radio y
ple can do what they like, Double fun y Se-
han supuesto una brisa fanática de amor crets, aunque su ascensión meteórica no le comprar discos. Muchos
al soul (y punto de inflexión en la recupera- llegaría hasta el electro-disco Clues, en blancos han crecido oyendo a
ción popular de esta música). l os negros, y de esa manera
1980, adentrándose en una sonoridad más
William Royce, conocido como Bozz calculada y cool. han aprendido su cultura. El
Scaggs, (1944), amigo colegial de Steve De igual apariencia gentleman es Paul desarrollo de los mass media
Miller y compañero de sus primeras aven- Young, que en cambio tuvo la fortuna de y el incalculable patrimonio
turas, se lanzó con su propia banda -The hacerse grande desde su primer disco, No musical atesorado por los
Wigs- en 1964 y ejerció de bohemio por parlez (1982), un disco magnético que re- negros han causado su
Londres y Estocolmo. Poseedor de una velaba el tenaz aprendizaje de los jóvenes absorción como elementos
cambiante obra musical, sus mejores in- artistas británicos en la escuela negra. La básicos de la música popular
terpretaciones soul se encuentran en My firme riqueza vocal de Paul convertía un universal, con su inevitable
time (1972), Slow dancer (1974, producido repertorio caprichoso en una alfombra plasmación comercial.
por Johnny Bristol) y Silk degrees (1976). única finamente tejida por su garganta.
Desde este momento Scaggs se sumergió Aún lo hizo mejor en su segundo elepé,
en un crossover brillantísimo, refinado, con The secret of association (1985), eligiendo
éxitos en las listas anglosajonas, pero de- un tema de oro líquido, Every time you go
masiado pulcro para un cantante de su in- away, de Daryl Hall, para convertirlo en
conformismo y posibilidades. una obra maestra de sentimiento e inter-
Hall & Oates, Daryl y John, respectiva- pretación. Rizando más el rizo, es preciso
mente, grabaron su primer elepé en 1972 hablar de Simply Red, el grupo de Mick
con Arif Mardin de productor. Hall tenía Hucknall, posiblemente la mejor voz soul
envidiables antecedentes de colaboración blanca de la actualidad; un fenómeno sur-
gido en Manchester, capaz de escribir ma-
ravillas como Jericho o Holding back the
years en su debú, y de lanzarse a un segun-
do álbum más soul todavía, Men and wo-
men, pidiendo la colaboración del compo-
sitor Lamont Dozier. Un ejemplo de hasta
dónde puede llegar el soul blanco.
JAMES BROWN USÓ SU INFLUENCIA EN 1968, AL APARECER EN
TELEVISIÓN PARA PEDIR CALMA DURANTE LOS DISTURBIOS RACIALES
James Brown.
'HIPPIES'
Joplin como vocalista, encarnaban la esencia del San
Francisco hippy, con su imagen abigarrada, sonido
blues y filosofía hedonista. 24
"TODA UNA GENERACIÓN / CON UNA NUEVA EXPLICACIÓN: / GENTE EN
MOVIMIENTO" (`San Francisco. Lleva flores en tu pelo', 1967)
Los conciertos al aire libre, donde las El nuevo rock es el equivalente occidental
tribus hippies se congregaban. de los dazibao que aparecen en las paredes
de las ciudades chinas durante la Revolu-
ción Cultural.
Ya no es aceptable cantar sobre el pla-
cer de hacer manitas o el primer beso a la
luz de la luna. Hay que reflejar las atracti-
vas posibilidades de la revolución sexual.
Stephen Stills canta: "Si no puedes estar
con la persona que amas, / ama a la perso-
na con la que estás", mientras su compa-
ñero David Crosby propone compartir
amantes en Triad. En Londres, John Len-
non se proclama reformista ante la iz-
quierda violenta en Revolution; Mick Jag-
ger se manifiesta ambiguamente sobre la
agitación callejera en Street fightin' man. A
ambos lados del Atlántico, los últimos
años sesenta son la era de la gran negación:
la contestación afecta a todos los pilares
de la sociedad. Y las guitarras eléctricas
proporcionan puntos de cita, himnos y
consignas. Los Weathermen, el grupo más
radical salido del movimiento universita-
rio, toma su nombre de una canción de
Dylan: "No necesitas a un hombre del
tiempo para saber de dónde sopla el
viento".
Esta simbiosis entre música y rebelión
se hace palpable en San Francisco. Allí
coinciden diversos vectores de fuerza en
1965-1967. Es un sitio agradable: no al-
canza el millón de habitantes, tiene tradi-
ción de tolerancia y acepta en su seno una
mezcolanza de razas, lenguas y costum-
bres. Hay mar, bosques y parques esplén-
didos. Y recibe los rayos de dos focos de
inconformismo: la universidad de Berke-
ley, nido del izquierdismo académico, y
North Beach, refugio de beatniks.
El barrio de Haight-Ashbury se empie-
za a poblar de elementos jóvenes que
aprovechan las bajas rentas. Se esboza
una comunidad de universitarios, vaga-
bundos, artistas y vividores que reciben
alborozados las sucesivas entregas de mú-
sicos en pletórica expansión, como los
Beatles y Bob Dylan. A ese impulso exte-
va¡ de Woodstock, Joe disuelve el grupo Sly and The Family Stone aportaron
(1970), regresando a su izquierdismo tro- l as ideas de San Francisco a la música
tamundos, que le llevará a París (1973) y negra.
al Reino Unido. Pone música a filmes Zappa con su Pri-
como Qué hacer (chileno) o Gass (novela mer álbum (1965),
de Henry Miller), y alterna grabaciones i nicio oficial del
solitarias con secuelas del fish: Country Joe underground; su
all stars; Energy crisis, un dúo con Melton, pirotecnia escato-
o el decepcionante Reunion (1976). lógica y literaria
dejaba a éste
Electric Prunes. Quinteto energúmeno con como un simple
esa expresión de enfado congénito propia maletilla. Sus es-
del acné y la indigestión peliculera. Prove- pantosas pintas
nían de Seattle (Washington), pero apare- les llevaron a la
cieron en Los Angeles armados de un ar- portada de revis-
senal de distorsiones, zumbidos eléctricos tas como Life, y el
y un infalible tratado psicótico (I had too poeta Allen Gins-
much to dream, 1966), protoclásico del ga- berg cantaba
raje psicodélico. Con su primer elepé se se- Hare Krishna en
pararon, resurgiendo a los pocos meses su disco Tender-
con una formación enteramente distinta. ness junction
Reflejo de su tiempo, pasaron del single- (1968) acompa-
bomba al pretensionismo conceptual, rea- ñado al armonio
lizando toda una Misa en fa mayor (1967), por otro persona-
algunos de cuyos extractos asfixian la se- je de la era beat,
cuencia alucinógena del filme Easy rider. Gregory Corso.
Disueltos en
Flaming Groovies. Eran un anacronismo 1969, Tul¡ Kup-
vivo, y han conseguido ir siempre con ferberg volvió al
10 años de retraso. Mientras los demás teatro y a la Pren-
grupos de San Francisco fabricaban fan- sa, y Ed Sanders
tasías lisérgicas, ellos asesinaban el espíri- se hizo rico con
tu musical de Chuck Berry en piezas de su libro The fa-
dos minutos. Una década después, cuan- mily, reportaje so-
do el punk barría los estertores de esa era, bre el caso Char-
ellos descubrían la ternura agridulce de les Manson. En
los Beatles y los Byrds en reconstruccio- 1 983 se reunie-
nes gloriosas, como Shake some action ron.
(1976) o Now (1978), álbumes británicos
con producción de Dave Edmunds. Hot Tuna. Amigos de la infancia e hijos de
En 1969, la CBS les compró su primer buenas familias de Washington (sus pa-
disco, Sneakers, reeditándolo como Super- dres eran, respectivamente, un diplomáti-
snazz. Desde entonces, víctimas de su le- co finlandés y un famoso dentista), Jorma l entados por el
yenda (arrestos, drogas, separaciones), Kaukonen (1940) y Jack Cassady (1944) potencial negocio que la música
son una banda maldita, con épocas sin aprovecharon la desintegración de su gru- l ocal prometía, las compañías
contrato, apenas aliviadas por la edición po, los Jefferson Airplane, para dar escape de discos cayeron sobre San
de esporádicos singles independientes. a sus frustraciones bluesísticas. Banda pa- Francisco. Casi
Ciryl Jordan (1948) y George Alexander ralela, sólo se índependizaron a la ruptura desconocidos, Jefferson
(1944), han reactivado unos nuevos Groo- del Airplane (1974). Su primer álbum, Hot Airplane sucumbieron a la
vies, con los que siguen actuando. Tuna (1970), era absolutamente acústico, oferta de RCA: 24.000 dólares,
pero en posteriores emisiones incorpora- cantidad sólo rebasada por
Fugs. Los Lenny Bruce del underground. ron electricidad, variedad estilística y mú- Elvis 10 años antes (30.000).
Estrafalario trío de poetas satíricos, utili- sicos temporales, como Papa John Más sonado fue el caso de
zaron el rock para difundir su terrorismo Creach, veterano violinista negro. Sus fo- Steve Miller, avalado por su
cultural, exorcizando por igual los demo- gosos conciertos no cesaron hasta su di- reputación profesional entre
nios del Pentágono (en la marcha pacifista vorcio final (1978). Kaukonen ha conti- l os aficionados. El sello EMI
que Norman Mailer narra en Los ejércitos nuado con sus tatuajes y sus discos pro- batió el récord: 50.000
de la noche) que la hipocresía de la era pios (tres). Cassady se puso al día con gru- dólares más 10.000 extra y la
Johnson. Irreverente producto del Green- pos como SVT, hasta un reciente reen- posibilidad de grabar en
wich Village neoyorquino, se anticiparon a cuentro con su ex compañero. cualquier parte del mundo. En
Londres, Paul McCartney
¡ron Butterfly. A pesar de su cortedad ar- tocará la batería en su álbum
tística, fueron terriblemente populares Brave new world.
gracias a In-a-gadda-da-vida (1968), pro-
fuso viaje de 17 minutos entre sándalo hip-
nótico y solos rituales. Encarnaban el as-
pecto más trivial pero vistoso de la inge-
"YO ESPERABA MARAVILLAS DE LOS GRUPOS DE SAN FRANCISCO, PERO
RESULTÓ QUE SÓLO TOCABAN `BLUES' SIN GARRA" (Frank Zappa)
Los Youngbloods, uno de los muchos ppies), acompañados de gran éxito en sin-
grupos que evolucionaron del tolk al
gles y elepés hasta su escisión, en 1972.
rock.
Malogradas sus pretensiones solistas y su
candidatura a la alcaldía de Los Ángeles,
Kay reanudó el grupo por dos años (1974-
1976, con un sonido más tosco), y, una vez
más, en 1981.
En
vuelta.
de jazz y el resto estuvo en el grupo Red
1967 surgió en San Rooster. Cerebrales y fisicos, crearon un Youngbloods. Su música infundía una ele-
Francisco la frecuencia ambicioso transbordador sonoro que iba vada sensación de pureza atmosférica.
modulada, con su inicial del rock punzante californiano (I got a line Básicamente, folk-rock delicado, pero
revolución de las ondas. A la on you) al efectismo exigente (Mister Skin), enérgico. La voz aguda de Jesse Colin
búsqueda de una audiencia o la innovadora fusión de jazz, bossa y Young impregnaba sus canciones de una
i mpresionable, difundía con rock, antes de que esto fuera "lo más". transida dulzura. Músicos imaginativos,
misional furor los nuevos diluían los sonidos ácidos entre detalles
sonidos, desde maquetas hasta Steppenwolf. Su clásico Born to be wild acústicos y jazzísticos de atractivo infor-
el largo tema Ina-gadda-da- (número 2 en 1968) es considerado el pri- malismo. Su tercer álbum, Elephant moun-
mer aldabonazo del heavy metal. Iban de tain (1968), es una obra maestra de la líri-
vida, íntegramente. Nacía
también la revista Rolling pose amenazadora. John Kay, su líder ca hippy. Sin embargo, no eran de San
-alemán del Este emigrado a Canadá-, Francisco, sino de Boston, donde toma-
Stone, que estrenó el nuevo
jamás se quitó las gafas negras. Su música ron el nombre del segundo disco de Young
periodismo en el rock. Ambas
era rugiente y elemental. Rock duro, pero (1964). Las grabaciones del núcleo origi-
cosas amplificaron lo que
maleable, de quedones estribillos e indeci- nal (1965) no aparecieron hasta 1970 (Two
ocurría en locales como el
sos vaivenes entre el sonido chicle y la psi- trips), y sus dos primeros elepés se realiza-
Avalon o el Fillmore, viejos
codelia tardía (Magic carpet ride, número 3 ron en Nueva York (con Félix Pappa-
teatros bañados ahora en
en 1968). Esto les hacía tan enormemente lardy, productor de Cream), conteniendo
decibelios, humos extraños e
i nnovadoras proyecciones de comerciales como desdeñados por la críti- Get together (1967), su gran éxito dos años
ca. Grupo bien visto, tenían buenas can- más tarde, cuando el grupo era ya parte de
l uces entre la audiencia (light-
ciones y llevaron a una audiencia amplia la escena californiana.
shows).
cierto mensaje crítico.
El quinteto original se formó en Toron-
to con el nombre Sparrows, pero se disol-
vió en 1967. Meses después bajaron a Los
Ángeles y mutaron su nombre al de Step-
penwolf (El lobo estepario) título del nove-
lista Herman Hesse (popular entre los hi-
"LA FE Y LA HONESTIDAD SON VALORES QUE CUENTAN PARA MÍ. ÚNICAMENTE
TE ACOMPAÑA EL RESPETO, QUE SE GANA CON HONESTIDAD" (John Fogerty)
Arthur Brown se presentaba en los nales, los casos de "jóvenes estrellas del
escenarios como el dios del Fuego pop" atrapadas con las manos en la masa.
I nfernal, y triunfó con Fire en 1968. El mundo artístico británico tenía cier-
ta tradición en estos temas. Pero más que
los escritores Thomas de Quincey, Aldous
Husley o Malcolm Lowry, los modelos
que inspiraron al pop psicodélico británico
vinieron de California. En 1967, San Fran-
cisco desbancaba a Londres como capital
intelectual del movimiento juvenil; hasta
allí se desplazaron exploradores de los
Beatles (George Harrison) o los Stones
(Brian Jones).
El torbellino californiano depositó lin-
dos colores sobre la superficie del pop bri-
tánico. En las islas fue una moda gozosa-
mente asimilada por Carnaby Street y la
industria musical. Grupos que el día ante-
rior hacían rhythm and blues aparecieron
disfrazados de hippies de boutique, corean-
do consignas sobre las flores y el amor.
Unos veteranos músicos de estudio se po-
dían reencarnar como The Flowerpot
Men (Los Hombres del Florero) y triunfar
con su Let's go to San Francisco (Vayamos
a San Francisco).
Las condiciones sociales de San Fran-
cisco no se podían reproducir en Londres:
Vietnam era una guerra ajena, la climato-
logía no permitía dormir en los parques y
no se vivía una era de prosperidad econó-
mica que permitiera a los universitarios el
abandono del sistema. Musicalmente, la
DIÁLOGO SOBRE
LOS VENUSINOS
ÁNGEL S. HARGUINDEY
"No quiero intervenir en la película por-
que no da esperanza", parece ser que dijo
en su día el patriarca Bob Dylan sobre
Easy rider. Es una de esas frases que pue-
den hundir a un individuo para el resto de
sus días, tanto por su profundidad de aná-
lisis como por la visión profética. Años
más tarde, el filme de Dennis Hopper si-
gue demostrando su vitalidad y conoci-
miento del ser humano, al mismo tiempo
que Dylan puede ser bailado a ritmo de
sardana -como ocurrió en sus conciertos
españoles- sin que desmerezca en nada
el ímpetu del juglar.
Easy rider no es, evidentemente, una
película perfecta, pero contiene los ele-
mentos suficientes para que su visión, casi
20 años después de haber sido realizada
(1968), permita constatar varias cosas: en
primer lugar, que una película con un cos-
te de producción muy bajo puede multipli-
car por cien sus ingresos. En segundo lu- de dólares que recaudó la película, re-
gar, que las ensoñaciones utópicas han de- presenta al espíritu bondadoso, ecolo-
jado paso a la sonrisa benevolente (los gista, aquel que cree en las comunas, el
amor e, imaginamos, en la alimentación Easy rider sacudió las
creyentes siempre han sido algo naifs) y,
macrobiótica. Es el personaje más estructuras de Hollywood.
por último, que los personajes vitales,
anodino y artificial de todos cuantos Primero, estableció la validez
pragmáticos, sin objetivos a medio o largo
pueblan la acción y el que peor resiste el del rock en las bandas sonoras.
plazo (caso de Jack Nicholson y Dennis
Hopper) permanecen en el tiempo. paso del tiempo. Hubo quien sugirió el Segundo, demostró la
La industria de Hollywood sacó sus en- pedir a la agencia soviética Tass el que existencia de un vastísimo
señanzas. Tras el éxito económico de la retocaran la cinta a fin de conseguir que público juvenil que deseaba
producción de Peter Fonda se replanteó desapareciera de la misma dicho perso- ver expresados sus
sus esquemas tradicionales y comenzaron naje. De haberse hecho, estaríamos ante sentimientos con
a surgir películas de bajo presupuesto el mejor mediometraje de la historia del vehemencia, lo que dio lugar a
pero con más atención en los guiones y, cine. un aluvión de películas
sobre todo, con un desmedido afán de co- Dennis Hopper y Jack Nicholson son contraculturales (R. P. M.,
nectar con los jóvenes. Apurando el razo- los sin camisa de la trama. No creen en Zabriskie point, Wild in the
namiento se puede explicar el auge de las nada salvo en cosas muy concretas y tan- streets). Tercero, abrió las
películas para doceañeros que inundan las gibles: los carnavales de Nueva Orleans, puertas a directores jóvenes,
pantallas actuales, desde las batallas ga- las borracheras, los burdeles y la conve- como Brian de Palma, Martin
l ácticas a los regresos al futuro, en ese niencia de salir deprisa de un bar sureño Scorsese, George Lucas,
convencimiento industrial de que quienes en donde varios nativos buscan bronca Steven Spielberg, Francis
asisten al cine son los jóvenes. Antes, los por la longitud del pelo de los motoristas. F. Coppola y otros. Fue un
de 20 años, y ahora, los de 12 o 14. Los Son personajes que prefieren el placer in- relevo que creó resentimiento:
estudios demográficos ocuparon desde mediato antes que la redención de la hu- al fracasar Dennis Hooper
entonces un lugar al sol. manidad. Capaces de dialogar sobre los con su siguiente obra, The last
Peter Fonda, productor y, por tanto, venusinos en una noche de alcohol y ma- movie, fue condenado al
principal beneficiario de los 100 millones rihuana con el mismo señorío que ir en ostracismo.
moto con traje, corbata y un casco dorado
de rugby. Se conocieron en una cárcel lo-
cal y sólo les separó la muerte. Años más
tarde Hopper sería dinamitado por su hija
punk en la espléndida Out of the blue. Peter
Fonda se ha debido de comprar un falans-
terio para él sólo.
"EL SOL OSCURECE, EL CIELO ES UN MAR, / EL SUELO PARECE CRISTAL.
DISTINGO DOS FORMAS QUE ME HACEN LLORAR" (`La droga', de l os Zoorns, 1968)
HE DOORS
SIEMPRE CERCA DEL FINAL
MARIANO ANTOLIN RATO
The Doors eran el cantante, composi-
tor, poeta, actor, alcohólico y delin
cuente Jim Morrison (1943) y tres mú-
sicos que, en frase de su líder, "devuel-
ven el orden con la música al caos que
yo traigo con las palabras". Estos músi-
cos se llamaban Ray Manzarek, órga-
no, piano y bajo (1935); Robby Krieger,
guitarra (1946), y John Densmore, ba-
tería (1945). De 1967, cuando grabaron
por primera vez, a 1971, año en que
apareció su último disco y Morrison
murió en París, fueron uno de los gru-
pos más populares de la historia del
rock norteamericano. Posiblemente el
que tuvo peor prensa. Y los creadores
de un sonido eléctrico que pertenece al
universo de las ciudades, mil veces re-
cuperado en los ochenta, donde los
Doors han encontrado adoración pós- al número 1 de las listas norteamerica- tema Not to touch the earth. Los planes
tuma. nas. The end, por su parte, una de las para representar La celebración en un
Jim Morrison, hijo de un almirante canciones más discutidas del rock, con- teatro no llegaron a cuajar.
de la Armada, quería ser un poeta fran- tiene las famosas líneas: "El asesino lla- Por entonces, Morrison es conside-
cés. Estudiaba cine en la universidad mó a una puerta / y miró hacia el inte- rado por The New York Times "el
de California en Los Ángeles (UCLA), rior. / '¿Padre?'. / 'Sí, hijo'. / Te quiero símbolo sexual más poderoso que haya
lo mismo que Ray Manzarek, que ya matar. / Madre, quiero'...". Y seguía aparecido en nuestra cultura popular
había tocado en los clubes de blues de un alarido demencia¡ de Morrison. desde James Dean y Elvis Presley". Y
Chicago (una de sus fuentes origina- En Strange days y Waitingfor the sun, otros periodistas le llaman "el evange-
les). Se conocieron en 1965 y decidie- l os álbumes siguientes, vuelven a apa- lista del ácido del rock", "el misionero
ron formar un grupo al que se unirían recer imaginativos y potentes. A dife- del sexo apocalíptico", "el rey del rock
Krieger y Densmore, que entonces to- rencia de los grupos de San Francisco orgásmico" o "el Rasputín con cara de
caban en The Psychedelic Rangers. Lo que buscaban un nuevo sueño americano ángel del rock" (esto cuando se dejó
llamaron The Doors (Las Puertas), una de vocación marginal y comunitaria, barba). Por su parte, Morrison declara-
clara referencia a la frase del poeta vi- los Doors continúan expresando la rea- ba que el rock mantenía relaciones con
sionario británico William Blake ("Si lidad norteamericana con toda su vio- la tragedia griega y Nietzsche. Hablaba
las puertas de la percepción se limpia- lencia. En este último elepé aparece de que los Doors hacían "política eróti-
ran, cada cosa aparecería al hombre tal otra canción que llegó al número 1 en ca" y de que sólo le interesaba "lo que
cual es: infinita"), que Aldous Huxley las listas de singles, Hello, I love you, ins- sea rebeldía, desorden, caos y, particu-
ya había utilizado para titular su libro pirada en otra de The Kinks, uno de los larmente, cualquier actividad que pa-
acerca de las experiencias con mesca- rezca carente de sentido". Entre tanto
lina. grupos favoritos de Morrison. En la cubierta de este disco también aparece el fue detenido por utilizar lenguaje obs-
Tras una temporada de actuaciones texto de 7_. a celebración del rey Lagarto, ceno y animar a la revuelta. Y en 1969,
en clubes del Sunset Boulevard de Los un poema basado en las creencias de en Miami, acusado de hacer actos obs-
Ángeles, los contrató Elektra Records. Morrison en las filosofias orientales, cenos en público. De este año es The
Su primer elepé, The doors, apareció a que sólo tiene expresión musical en el sofí parade, donde sonaban más pop. Y
principios de 1967, convirtiéndoles casi de 1970, Morrison hotel, donde la ban-
de inmediato en una de las grandes da, en gran forma, se endurece.
bandas del momento. El disco recoge L. A. woman apareció en 1971, y fue
la atmósfera teatral inspirada en Anto- saludado como su mejor disco desde el
nin Artaud y su Teatro de la crueldad primero. Contiene temas tan turbado-
HISTORIA DEL 'ROCK'
(también incluía una canción de Ber- res como Riders on the storm. Por enton-
tolt Brecht / Kurt Weill), y la mezcla de ces, Morrison había anunciado que es-
muerte y sexo, que serán de importan-
PRÓXIMO CAPíTULO taba cansado de ser una estrella de rock
cia fundamental en la imagen del gru- y que dejaba el grupo. Se fue a vivir a
po. Dos de los temas se harían clásicos: 'BLUES ROCK' París, decidido a ser poeta, y en esa
Light my fire y The end. El primero llegó ciudad murió en julio del mismo año.!
En la segunda mitad de los años sesenta, el rock cayó bajo el
hechizo del blues. Esa expresión musical del negro norte-
americano iluminó los pasos de muchas estrellas blancas de
los años hippies. En el caso de Eric Clapton y otros famosos
británicos, fue una fascinación por discos de artistas estado-
unidenses que estaban marginados en este país. Por el con-
trario, los norteamericanos midieron sus fuerzas con los
bluesmen negros, y tuvieron otro enfoque más vitalista. El
blues-rock generó el culto al guitarrista y dio via libre a nu-
merosos imitadores y vulgarizadores. Paradójicamente, esta expropiación del gé-
nero permitió a grandes creadores como Muddy Waters (en la foto) vivir sus
últimos años con dignidad y aplausos.
Lo más ofensivo es
que una música que ha sido
En el Reino Unido, las guitarras eléc-
tricas tienen idéntica procedencia, directa
(Peter Green) o indirectamente (Clapton,
Jeff Beck, Jimmy Page), a través de los es-
rechazada puede ser
aceptada cuando la hacen tipos LANCOS, tilos de Buddy Guy y Freddie King, carac-
terísticamente más duros y agresivos que
de piel blanca. Si te copian, el de B. B. King, pero también basados en
es la mejor alabanza, un claro
signo de grandeza. Si un
NEGROS Y 'BLUES' él. El caso de Jimi Hendrix, aun con la pe-
músico blanco viene y me dice: culiaridad de su origen negro-norteamericano, resulta ejemplar: las fuentes de su
' Esa música es fantástica, FRANCISCO JAVIER RODRÍGUEZ estilo son las mismas pero su innovación
quiero aprender a tocarla', me de las posibilidades de la guitarra eléctrica
Eric Clapton lo expresó con gráfica elo-
siento halagado. Pero si el y su tremendo espectáculo no podían ha-
cuencia: "El rock es como una pila eléctri
público le aplaude a él y me ber encontrado el éxito inicial en otra par-
ca; cada cierto tiempo hay que regresar al
i gnora a mí, resulta te más que en Londres, verdadero caldo
blues y volver a cargar". En la segunda mi-
i ntolerable". tad de los años sesenta, precisamente de cultivo para la experimentación guita-
cuando ese género negro-norteamericano rrística a partir del blues.
Jerry Butler, 1970 pierde vigencia entre su propia gente en En Norteamérica siempre habían sido
favor de la música soul, legiones de jóve- más puristas. Allí la afición a este género
nes blancos americanos y británicos popu- había surgido del folk revival en los clubes
larizan una adaptación de las técnicas y el del Greenwich Village neoyorquino, y an-
repertorio bluesísticos con mayor o menor tes de que la formación de Paul Butterfield
fidelidad a los originales negros. En este popularizara el estilo urbano de Chicago,
contexto, los estilos de algunos de los más la mayoría de los intérpretes blancos de
eminentes bluesmen modernos (B. B. blues se dedicaba a reproducir los estilos
King, Buddy Guy, Freddie King, Elmore de guitarra acústica anteriores a la 11 Gue-
James) proporcionan a varios guitarristas rra Mundial. De hecho, la presentación
las bases para redefinir el rock por una del grupo fuera de Chicago tiene lugar en
nueva vía: el virtuosismo de la guitarra so- el Newport Folk Festival de 1965, y a fina-
lista.
La situación, auspiciada por el éxito de
l as bandas británicas de rhythm and blues,
tiene su raíz más inmediata en dos forma-
ciones localizadas, respectivamente, en
Londres y Chicago: los Bluesbreakers de
John Mayall y la Paul Butterfield Blues
"HAY QUIENES HABLAN DE MÍ COMO DE UN REVOLUCIONARIO. ESO ES
ABSURDO; TODO LO QUE HICE FUE COPIAR A B. B. KING" (Eric Clapton)
les de ese año graba su primer álbum para B. B. King, en los primeros años
sesenta. Sus discos impresionaron a
el sello Elektra. Será entre las bandas de
decenas de guitarristas de rock.
la psicodelia californiana donde esta for-
mación dejará una marca más profunda.
El Festival de Monterrey de 1967 y las
giras americanas de Cream ese mismo año
como introductores del rock en los gran-
des auditorios señalan la fusión de las co-
rrientes de blues-rock norteaamericana y
británica.
Jimi Hendrix y Janis Joplin fueron las
grandes revelaciones de Monterrey, pero
el cartel incluía también al grupo Canned
Heat, que practicaba con éxito la adapta-
ción al boogie eléctrico de los clásicos del
blues rural de Misisipí.
A partir de entonces se desencadena la
eclosión de bandas y solistas que culmina
en el blues boom de 1968-1970, con un es-
pectro estilístico que abarca desde el blues
acústico tradicional más puro (Graham
Hine, Jo-Ann Kelly, Mike Cooper, en el
Reino Unido hasta la exacerbación del
blues-rock (Led Zeppelin, Ten Years After,
Johnny Winter) que había anunciado la
Jimi Hendrix Experience y que desembo-
cará en el hard rock.
A mitad de camino se sitúan músicos
más abiertamente vinculados al estilo de
Chicago (Steve Miller Band, Charlie Mus-
selwhite), junto a otros como John Ham-
mond, que había adoptado la amplifica-
ción en fecha relativamente temprana
(1964) en compañía de M. Bloomfield y al-
gunos miembros de The Band. Ninguna
técnica instrumental de la tradición o de la
actualidad del blues negro permanece aje-
na al descubrimiento. Y si la guitarra eléc-
trica solista es la herramienta por antono-
masia, la armónica, instrumento impres- sión al género a través del grupo Hot Tuna
cindible de esta música por sus posibilida- y los discos de Howlin' Wolf y Son House
des tímbricas, gana también nuevos per- inspiran alucinaciones como la de Captain
feccionistas blancos (Rod Piazza en Ba- Beefheart. En lo que respecta a los blues- La verdad es que el
con Fat, Magic Dick con la J. Geils Band, men negros, la consecuencia del blues público blanco acepta mejor el
King Biscuit Boy). boom es palmaria. Su música cambia sus- blues que la gente de nuestra
Como antes lo hiciera Eric Clapton, tancialmente de escenario y de audiencia. raza. Me duele reconocerlo,
otros miembros de los Bluesbreakers y de Aunque son muy escasos los que consi- pero es así. Para muchos
l a banda de Paul Butterfield emprenden guen una popularidad comparable a la de negros, un cantante de blues es
trayectorias independientes bajo el signo sus émulos blancos, la actitud de recono- un tipo analfabeto y sucio,
de la fusión blues-rock: Peter Green y John cimiento que adoptan muchos de éstos borracho y mujeriego. Y lo
McVie forman Fleetwood Mac; Mike hacia sus maestros (Mike Bloomfield, por entiendo: ellos quieren huir
Bloomfield reúne el supergrupo Electric ejemplo, presenta a B. B. King a la au- de un pasado terrible, que
Flag, con el batería Buddy Miles. La psi- diencia del Fillmore West en 1968) propi- i dentifican con el blues. Para
codelia californiana es terreno abonado cia que el público joven y blanco se fami- ellos, es música que recuerda el
para todo tipo de aproximaciones al blues; liarice con los artistas del gueto, hasta el racismo y la opresión, que es
mientras Grateful Dead y los Doors ver- punto de que, ignorados por sus propios propia de emigrantes sureños
sionan a Willie Dixon, dos componentes hermanos de raza, encuentran una nueva que viven en la peor parte del
de Jefferson Airplane constatan su adhe- audiencia en las universidades, en las sa- gueto. Y eso me entristece: el
las de rock y en los festivales. En este cam- blues es mucho más".
bio de público que arranca del blues boom
hay que buscar la explicación a un caso B. B. King.
tan actual como el del joven bluesman Ro-
bert Cray, instalado ya cuatro veces en las
listas británicas... y un absoluto descono-
cido entre los negro-norteamericanos.
"Q UIERO HACER MÚSICA TAN PERFECTA, QUE SE FILTRE A TRAVÉS DEL
CUERPO Y SEA CAPAZ DE CURAR CUALQUIER ENFERMEDAD" (Jimi Hendrix, 1970)
Mi primer
representante, Steve Paul, no
entendía cómo pudiendo
AndILive). El albino paga inmediatamente
el precio del éxito: la aventura desemboca
en nueve meses de desintoxicación en un
hospital de Nueva Orleans (1972).
El retorno al blues ocurre en 1977. La
tocar otro tipo de música con la OHNNY WINTER, amistad con Muddy Waters (a quien pro-
que seguro que haría más duce cuatro elepés donde también inter-
dinero, yo seguía empeñado en
tocar blues. Le parecía
EL ALBINO FEROZ viene como guitarrista) no solamente pro-
porciona memorables grabaciones (los
absurdo. Pero nada hay que me tres primeros reciben premios Grammy),
haga tan feliz como tocar el FRANCISCO JAVIER RODRIGUEZ sino que también devuelve al tejano al te-
blues. Me gusta el rock and roll, Tan paradójica como su propia condición rreno que le pertenece. En 1984, Winter
y me gusta también la música encuentra su lugar en un sello indepen-
-el más blanco de todos los intérpretes
country, pero el blues es, sin diente de Chicago que trabajaba hasta en-
de blues blancos- resulta la figura de
duda, mi favorito. Necesito tonces exclusivamente con artistas ne-
Johnny Winter: prototipo del superguita-
tocar blues eléctrico tanto gros: Alligator. Sus nuevas grabaciones
rrista, estrella del blues-rock y del hard-
como un motor necesita no desmerecen de anteriores trabajos.
rock; pero, también, estilista original e in-
gasolina". comparable en la línea de los mejores gui-
tarristas salidos de Tejas. Un sonido defi-
Johnny Winter, 1986 nitivamente negro.
Algunos detalles de su biograha tem-
prana presentan un cariz determinante y
revelador. Nacido John Dawson Winter
111 el 23 de febrero de 1944 en la localidad
"SENTADA JUNTO A LA VENTANA, MIRANDO LA LLUVIA, / ALGO SE APODERÓ DE
MÍ, / Y FUE COMO SI ME PUSIERAN UNA BOLA Y UNA CADENA" (Janis Joplin, 1968)
El
Otis Rush y Freddie King. Las modestas
ventas de su primer single, publicado en
junio de 1964, no les permitieron salir del
denominador común circuito de los pequeños clubes, y la apari-
entre los músicos de blues es su ción de un segundo disco en octubre del
fanatismo. Especialmente en
I nglaterra, ya que están RIC CLAPTON: mismo año no mejoró las cosas. En marzo
de 1965 los Yardbirds grabaron For you
distanciados del lugar donde love. Fue su mayor éxito y la canción más
han nacido. No saben lo que
significa ser músico de blues
EL DIOS BLANCO DE alejada del rhythm and blues. Clapton em-
prendió nueva retirada: "Se están hacien-
en América, como lo puede
saber Mike Bloomfield. Se LOS 12 COMPASES do demasiado comerciales, y si me voy a
convertir en una máquina musical de ha-
sienten muy románticos al cer dinero, me largo".
respecto y tienen muchos NACHO SÁENZ DE TEJADA Un mes más tarde, Clapton ya tenía
i deales. Afecta al ego y llegan a Eric Clapton personifica como pocos la nuevo trabajo. Su amor por el blues y la
creerse superiores, los únicos historia del rock. Fue protagonista del re intransigencia mostrada con los Yard-
tipos que tocan música de surgir musical británico en la primera mi- birds no le dejaban muchas opciones. La
verdad. Yo puedo admirar a tad de los sesenta con el blues como fuente más clara era John Mayall, que a sus 32
un John Mayaf por su de inspiración. Se convirtió en líder caris- años estaba considerado uno de los pa-
i ntegridad, pero llega un mático de una superbanda, Cream, creada dres del blues británico. La estancia de
momento en que tienes que para que sus tres miembros desplegasen Clapton junto a los Bluesbreakers de Ma-
dejar el blues de Chicago con absoluta libertad sus posibilidades yall representó una de las mejores épocas
para hacer tu propia música si musicales. Necesitó conocer y trabajar en del guitarrista y el comienzo de su recono-
quieres formar parte del el país cuna del rock and roll. Cayó en el cimiento público a gran escala. Fueron los
sonido contemporáneo". pozo de la heroína, que en su caso tuvo días de las pintadas callejeras proclaman-
fondo, y finalmente inició una nueva ca- do "Clapton is God" (Clapton es Dios), y
Eric Clapton, 1968 rrera musical que une la necesidad de es- mientras permaneció en los Bluesbreakers
tar presente en listas de éxitos con una fi-
delidad a esos 12 compases que confor-
man el blues y que todavía constituyen el
fundamento de su música.
Nació el 30 de marzo de 1945 en Ripley
(Reino Unido) y pasó la infancia con sus
abuelos. En el Kingston Art School de-
"CUANDO LLEGAMOS A ESTADOS UNIDOS, NADIE SABÍA NADA DE MUDDY
WATERS. ¡CREÍAN QUE ERA UNA CIUDAD!" (Paul McCartney)
W
J
C7
Z
y
John Mayal¡. La historia del blues en el John Mayal¡ mantuvo su grupo como
una escuela eficaz para jóvenes
Reino Unido tiene nombre propio, que es i nstrumentistas.
John Mayall (1943). Aunque es más cono-
cido por Room to move y su armónica, lleva na (1970). Kim
una dilatada carrera de más de 25 años Simmonds siguió
como músico. Sus primeros discos se con numerosas
aproximaban al sonido de Chicago. Em- reformas. Stan
prendió una verdadera cruzada por el Webb, de Chic-
blues en general, por Otis Rush en particu- ken Shack, recaló
lar (Crusade, 1967) y por J. B. Lenoir en sus filas en el
(Turning point, 1969). En 1968, con Bare año 1974, junto
wires, dio un vuelco espectacular. A partir con Miller Ander-
de ese momento sólo grabó material com- son, ex Keef
puesto por él, con base de blues pero con Hartley.
una concepción más moderna y unos arre- El blues tuvo
glos más elaborados. Blues from Laurel en Estados Uni-
Canyon (1968) sigue en la misma línea. És- dos un efecto bu-
tos últimos son sus dos mejores discos. merán. Se puso
Posteriormente trabajó sin batería en Tur- de moda cuando
ning point (1969), su disco más vendido. llegaron los gru-
Empty rooms (1970), USA Union (1970) y pos británicos
Memories, de corte autobiográfico, mar- que habían adop-
can la época dorada de Mayall, que llegó a tado la música
la cumbre con Jazz blues fussion (1971). Si- que ellos mismos
guió grabando discos, pero sin apenas re- habían rechaza-
percusión. do. En Chicago,
al principio de los
Ten Years After. De Alvin Lee (1944) de- años sesenta, de-
cían que era el guitarrista más rápido del butaron una serie
mundo. Estaba influenciado por el boogie de músicos blan-
y los guitarristas de jazz; se consagró en el cos que aprendie-
festival de Woodstock con una mítica in- ron directamente
terpretación de I'm goin' home. Sus pun- de los maestros
teos volaban frenéticamente sobre la base negros. En 1968,
que le iban creando el bajista Leo Lyons l a mayoría de
(1943), el batería Rick Lee (1945) y el te- ellos se traslada-
clista Chick Churchill (1946). Cantaba ron a San Fran-
además con una voz nasal a lo Memphis cisco. Allí el blues
Slim. Undead (1968) fue el mejor disco del estaba de moda,
grupo, grabado en vivo, pero Ssshh (1969) pero sólo los re-
le superó en ventas; de Criklewood Green cién llegados sa-
sacaron Love like a man, el único single de bían tocar con au-
éxito. Se separaron en 1974. Las aventu- tenticidad.
ras posteriores de Alvin Lee resultaron
baldías. Mike Bloomfield
(1943-1981). Hubiera podido ser una su-
Savoy Brown. Tuvieron numerosos cam- perestrella de la guitarra de no haber sido
bios desde la formación original, en 1966. por su carácter retraído: apenas salía del
La clásica estaba integrada por Chris área de San Francisco para actuar. Poseía I santoral del rock está lleno
Youlden, cantante; Kim Simmonds, guita- una técnica envidiable, posiblemente la de grupos bautizados a partir
rra y líder de la banda; Lonesome Dave mejor en un guitarrista blanco de blues y de las páginas del blues. Los
Peverett, como segunda guitarra solista; rock (como se puede comprobar en High- Groundhogs tomaron su
Tony Stevens, bajo, y Roger Earl, batería. way 61 revisited, de Dylan). Había nacido nombre de una canción de
Estos tres últimos se fueron en 1971, tras en Chicago, donde aprendió de los gran- John Lee Hocker; Canned Heat,
Looking in, para formar Foghat, una de las des maestros. Formó parte de la Butter- de Tommy Johnson; Moody
bandas más potentes de los años setenta, field Blues Band durante dos años, en Blues, de Slim Harpo; Rolling
y se afincaron en EE UU. Savoy Brown cuyo segundo disco, East-West, desarrolló Stones, de Muddy Waters;
hacía blues al estilo de los Fleetwood Mac, toda su técnica guitarrera en una raga- Chicken Shack, de Champion
pero algo más sofisticado. Sus mejores rock cercana a algunos trabajos de los Jack Dupree y Amos Milburn;
discos son Blue matter (1969) y Raw Sien Yardbirds y los Byrds. Con Al Kooper in- Mother Earth, de Memphis Slim;
tervino en el legendario disco Super ses- l os Honeydrippers, de
sion, que no llegó a concluir. Creó en 1968 Roosevelt Sykes y Joe Liggins;
Electric Flag, con Barry Goldberg, Nick Juicy Lucy, de Jerry McCain;
Gravenites y Buddy Miles. Sólo estuvo un Skid Row, de Curtis Jones...
año con ellos, aunque los intentó resucitar
en 1974. Apadrinó a una apreciable banda
( Mother Earth), grabó con James Cotton,
"LO QUE NOS ATRAÍA DE LA CULTURA NEGRA ERA SU... LIGEREZA MORAL.
¡ SE DIVERTÍAN MÁS QUE NOSOTROS LOS BLANCOS!" (Nick Gravenites)
1970, Live, aunque siguió grabando y ac- Canned Heat, alabados por expertos
tuando durante años. en blues rural, terminaron convertidos
en una bullanguera banda eléctrica.
Canned Heat.
Fueron la quin-
taesencia del
blues, al que ele-
varon a la enési-
ma potencia. Su
especialidad eran
l os viejos country-
blues, que adapta-
ban y arreglaban
de tal manera que
hacían versiones
i nnovadoras. Su
mayor éxito, On
the road again
(1968), lo sacaron
de un disco de
1928 de la Mem-
phis Jug Band.
Contaban con W
músicos excep-
cionales. Tenían
dos guitarristas:
Henry Vestine
(alias Flor de Sol),
de estilo desga-
rrado, y Al Wil-
son (alias El Búho
Ciego), del que se decía que no veía más Union). Hubo más cambios hasta la
allá del cuello de su guitarra. Éste tocaba muerte de Bob Hite, en 1981.
con slide, y sacaba un sonido cristalino;
además, dominaba la armónica y cantaba Fabulous Thunderbirds. El blues hecho en Muchos de los músicos
con un increíble hilo de voz. El cantante nuestros días con energía. Este cuarteto blancos que tocaban blues
era Bob Hite (conocido como El Oso, por tejano cuenta con uno de los mejores ar- tuvieron la oportunidad de
sus más de 120 kilos), que también tocaba monicistas actuales, Kim Wilson, que con grabar con maestros. Mike
armónica y guitarra. Los tres eran el Jimmie Vaughan a la guitarra, son los úni- Bloomfield, con Big Joe
alma mater del grupo. Expertos recono- cos que quedan desde su debú en 1979. Williams, Sleepy John Estes y
cidos en blues, eran propietarios de algu- Pertenecen a la penúltima hornada de gru- Eddie Vinson; Rory
nas de las mejores colecciones de discos pos americanos dedicados al blues, junto Gallagher, con Muddy Waters;
de 78 revoluciones. Se completaban con con Roomful of Blues, Duke Robillard Peter Green, con Eddie Boyd
Larry Taylor, que se hacía llamar El & The Pleasure Kings, los Nighthawks y y Memphis Slim; Stan Webb,
Topo y era el mejor bajista que cualquier otros. con Champion Jack Dupree;
grupo podía tener en sus filas, y Adolfo Tom McGuinness y Hughie Flint,
Fito de la Parra, batería mexicano que John Hammond. Uno de los primeros y con Arthur Crudup; Al Wilson,
había sustituido al primero, Frank más constantes músicos blancos que se con Skip James, Bukka White y
Cook. En 1968 hicieron Going up the han dedicado al blues. Nacido en 1943, su Son House. La lista es
country, basándose en una canción de padre es el famoso cazatalentos (Dylan, i nterminable: aparte de tomar
Henry Thomas de 1928. La incluyeron Bessie Smith, Springsteen) del mismo provechosas lecciones, los
en su álbum más ambicioso, Living the nombre. Intérprete de todo tipo de blues, alumnos devuelven el favor a los
blues, en el que hicieron una larga pieza country blues y urban blues. Es un buen ar- hombres que les inspiraron.
casi psicodélica, donde Alan Wilson to- monicista, además de guitarra. Por su gru-
caba la guimbarda. Henry Vestine se fue po, los Screaming Nighthawks, pasó Jimi
y llegó de Detroit Harvey Mandel, tan Hendrix. Luego tuvo al mismo tiempo a
bueno como el anterior. En 1970, a los 27 Charlie Musselwhite, Mike Bloomfield,
años de edad, moría Al Wilson. Volvió Robbie Robertson, Levon Helm y Garth
Vestine, pero Larry Taylor y Harvey Hudson.
Mandel se fueron con John Mayall (USA
J. Geils Band. Se les puede considerar
como la versión norteamericana de los
Rolling Stones. J. Geils, el líder y guita-
rrista, es casi el menos protagonista. Peter
Wolf (cantante), que se casó con Faye Du-
naway; Magic Dick (la mejor armónica
que se puede oír), y Seth Justman (teclis-
"DEBO ESTAR AGRADECIDO A LOS MÚSICOS BLANCOS DE `BLUES'. ABRIERON
PUERTAS QUE ESTABAN CERRADAS PARA NOSOTROS" (B. B. King, 1967)
to (tubas), y unos
arreglos tan exube-
rantes como llenos
de matices. A partir
de 1974, en su Mo'
roots, se adentra en
los ritmos del Cari-
be, siendo el primer
americano, y además
negro, que descubre
y toca reggae. Inclu-
so hace incursiones
en el flamenco y can-
ta en espanglish (no
en vano pasó una
buena temporada en
España).
EFF BECK
GUITARRA TEMPERAMENTAL
ANTONIO DE MIGUEL
Jeff Beck no ha nacido para estrella del
rock: indisciplinado discográficamente,
desconocedor del single como cebo de
ventas, reacio a las entrevistas, incapaz
de soportar el trajín profesional de las gi-
ras y rebosante de mil inquietudes guita-
rrísticas que le llevan cada vez por un ca-
mino distinto... Y, sin embargo, ha con-
seguido un respeto, una admiración y
una fidelidad entre medios de comunica-
ción, músicos y amantes del rock como
muy pocas estrellas puedan atribuirse.
¿El método? Ser él mismo, mantener la
magia a su alrededor y tocar la guitarra
de una manera sublime.
Beck nació el 24 de junio de 1944 en
Surrey (Inglaterra). Mientras estudiaba
en el Wimbledon Art College, escuchó
con fruición a Gene Vincent, Buddy
Holly, Eddie Cochran... Sus primeras
experiencias semiprofesionales, en 1964, longación de lo que podía haber sido el (sólo dos elepés en la misma cuerda),
fueron junto a Cyril Davies y en un par grupo de no haber surgido tremendos deshace la banda en julio de 1972 y...
de oscuros grupos llamados Deltones y choques entre sus miembros. i sorpresa!, cumple un antiguo proyecto:
Tridents. Beck se había decantado visce- En 1969 se separan. Stewart y Wood forma un power-trío con Tim Bogert
ralmente en su forma de tocar hacia el se van a Faces; Beck sufre un violentísi- (bajo) y Carmine Appice (batería), duros
blues; se pensó en él para sustituir al pu- mo accidente automovilístico, fracturán- obreros del rock, anteriormente en Van¡-
rista Eric Clapton en el seno de los Yard- dose el cráneo. Dieciocho meses de baja. Ha Fudge y Cactus. Beck, Bogert & Ap-
birds (marzo 1965). Pero Beck no era un Gajes del oficio: Beck es un fanático de pice vivieron como grupo desde septiem-
purista, sino un obseso de los pedales, el los coches y las carreras, posee una cui- bre de 1972 hasta abril de 1974, dejando
eco y los efectos de distorsión. Fue él dada colección de modelos Ford y él una herencia de dos elepés, BB & A y
quien catapultó a los Yardbirds con su mismo ejerce de mecánico, alterando la Live in Japan, confirmando la inviabili-
i magen de gentleman apacible pero ira- cilindrada de sus vehículos. En abril de dad de los supergrupos y el error de ha-
cundo como instrumentista. La célebre 1971 vuelve con un remozado Jeff Beck cer música para cumplir las demandas
escena de Beck destrozando guitarra y Group, esta vez integrado por Max del mercado.
amplificadores en la película de Antonio- Middleton (teclas), Cozy Powell (bate- Del sonido mastodóntico de BB & A
ni Blow up es la mejor muestra de ello. ría), Clive Chaman (bajo) y Bob Tench Jeff Beck salta en arriesgada pirueta al
En noviembre de 1966 deja a los (voz). Gente desconocida con la que jazz-rock. Así graba Blow by blow (1975),
Yardbirds e inicia su zigzagueante carre- Beck se zambulle a gusto en el rhythm & su único disco de oro en ventas, todavía
ra solista. Primero se descuelga con dos blues y graba otros dos álbumes, Rough con Middleton en las teclas y producción
singles atípicos, High ho silver l1ning (cuya & ready y Jeff Beck Group. de George Martin. Después le siguieron
cara B, el apabullante Beck's bolero, esta- El hallazgo es Middleton, un pianista Wired (1976), primera colaboración con
ba firmada por Jimmy Page) y una ver- ágil e imaginativo que excita la inventiva los veloces Narada Michael Walden (ba-
sión de Love is blue, de Paul Mauriat. En de Beck. Manteniendo su regla de oro tería) y Jan Hammer (sintetizador); Live
febrero de 1967 nace el Jeff Beck Group, (1977), y There & back (1980). Nada de
con Rod Stewart (voz), Ron Wood cantantes, nada de grupos estables y sí
(bajo), Nicky Hopkins (teclado) y mu- mucho sonido evolucionado, mucha fan-
chos problemas para encontrar un bate- tasía para multiplicar las posibilidades
ría fijo. Dos históricos elepés, Truth (con de la guitarra como elemento electróni-
Mickey Waller en los tambores) y Beck- HISTORIA DEL `ROCK' co. Seis años tardó Beck en publicar un
ola (esta vez con Tony Newman). Tem- nuevo trabajo: Flash, un álbum-cajón-de-
peramentales versiones de clásicos y te- sastre en el que vuelven los cantantes
mas escritos por todo el grupo hacen de PRÓXIMO CAPÍTULO (Rod Stewart, Jimmy Hall) y aparecen
estos discos una lección de obligada es- productores influyentes (Hile Rodgers,
cucha en la historia del blues-rock. Jimmy Arthur Baker). Beck canta, no compone
Page siguió al grupo de cerca y es seguro nada y toca la guitarra en todos los colo-
que Led Zeppelin nació como una pro- 'ROCK' PROGRESIVO res estilísticos que domina.
EL PAIS
HISTORIA DEL `ROCK'
El terremoto cultural de 1967-1968 desencadenó en el rock
una voluntad de desbordar las fronteras convencionales
de la música que se tradujo en voluntariosos experimentos
vanguardistas. El concepto de rock progresivo englobaba
una gran variedad de tendencias: en Estados Unidos eran
grupos que incorporaron elementos del jazz y personalida-
des tan polivalentes como Frank Zappa (en la foto). En
Europa se tendió a enlazar la búsqueda de nuevos sonidos
con la tradición de la llamada música culta: Emerson,
Lake and Palmer, Genesis, Pink Floyd o Yes fueron comercializados bajo la
equívoca etiqueta de rock sinfónico. En casi todos ellos late un deseo, más o
menos explícito, de proporcionar al rock la categoría de arte.
S yd Barrett y David
Gilmour cohabitaron en Pink
vaban juntos seis meses, decidieron po-
tenciar la parte visual de sus conciertos
con diapositivas y cintas proyectadas so-
bre ellos (siempre en función de crear un
Floyd durante casi dos
meses. Antes habían tocado INK FLOYD, efecto complementario al de la música, a
juntos como dúo de folk. base de colores vivos y sensación de líqui-
David, un guitarrista efectista, PESADILLAS EN do en movimiento: psicodelia de pureza
casi total).
entró porque los demás no
Waters (1947), Wright (1945) y Mason
aguantaban ya los desvaríos de
Syd y pensaron que tal vez ALTA FIDELIDAD (1945), tres universitarios envueltos en la
con un buen amigo a su lado espiral contracultural, probaron muchas
volvería a centrarse. En abril DAVID S. MORDOH combinaciones antes de introducir Wa-
En el rock no hay unidad métrica que sirva ters a Syd Barrett (1946), un compañero
de 1968; Barrett los dejó para
recibir tratamiento médico y, para sopesar la importancia de un grupo. de bachillerato, al grupo. Syd fue a Lon-
de paso, convertirse en uno de Hoy eres lo más y pasado mañana te han dres a estudiar pintura, pero acabó to-
decapitado. Los ejecutores suelen ser una cando la guitarra. Verdadero motor de
l os perdedores más tribu formada por críticos, consumidores esta etapa de la banda, componía gran
aclamados del rock. Tras y altos cargos de las empresas discográfi- parte del material, diseñaba las portadas,
grabar dos idiosincrásicos cas, aunque en definitiva es uno solo: el tomaba casi todas las decisiones y bas-
elepés, Barrett terminó tiempo. En la década de los ochenta, Pink tante LSD. Su progresivo deterioro psí-
encerrándose en el domicilio Floyd fueron vapuleados ferozmente por- quico impulsó el recambio por David Gil-
materno de Cambridge. Para que no encajaban en las tendencias domi- mour (1947).
Gilmour, se trata de una nantes; sin embargo, resultaría imposible Pocos confiaban en la recuperación de
historia "más triste que hacer un balance coherente del período
romántica". Pink Floyd. Afortunadamente, es enton-
1967-1977 sin recordarlos. ces cuando emerge Waters como cerebro
Cuando la marea psicodélica califor- reordenando la estrategia. Aceptan encar-
niana invadió el Reino Unido, en 1966, en-
contró en los jóvenes universitarios
-como los componentes de Pink Floyd-
a su público más receptivo. Con unas
cuantas pinceladas de color local se eti-
quetó el trasvase como psicodelia inglesa.
Las prospecciones de Pink Floyd mantu-
"MADRE, ¿CREES QUE TIRARÁN LA BOMBA? MADRE, ¿DEBO
CONFIAR EN ESTE GOBIERNO?" ('Mother', 1979)
gos de bandas sonoras, aunque al mismo Los miembros de Pink Floyd terminaron
tiempo aprovechan la experiencia para pleiteando por la propiedad
del nombre del grupo.
aprender a usar códigos del nuevo medio
a la hora de componer las canciones de
sus próximos elepés formales. En el doble
Ummagumma incluso se palpa: canciones
largas y descriptivas grabadas en directo,
atmósfera densa, etérea, hipnótica, espa-
cial. La canción de más impacto tiene un
ritmo pausado y va subiendo despacio. Se
llama Cuidado con el hacha, Eugene. Con
semejante título aparece la sospecha de
que algo debe ocurrir. Sin apenas tiempo
para confirmar tal presentimiento, el audi-
tor se siente de pronto sobrecogido por un
alarido desgarrador: el hacha, el grito, Eu-
gene... Se huele la sangre con un mínimo
de fantasía.
La segunda parte del disco doble está
repartida entre los cuatro músicos, con
mil trucos imprevistos y espectaculares,
desde el insecto que revolotea hasta ser
aniquilado en la bucólica Grantchester
Meadows hasta la orgía de sonidos gutura-
les de la canción que le sigue. ¿Un proyec-
to curioso? Con la popularización de los
estupefacientes entre las nuevas camadas
de los distintos estratos sociales (recuér-
dese que estamos en 1969), más bien se
trata de un disco mítico.
Pese a no vender muchas copias, Um-
magumma hace de abrelatas para que
Atom heart mother y Meddle consoliden al mera vez desde 1967 (el año de Arnold
grupo como uno de los punteros de la dé- Layne, See Emily play y Apples and oran-
cada recién estrenada. Se siguen a rajata- ges), consigue un éxito aceptable en forma-
to sencillo. Las cualidades etéreas de
bla las consignas de moda. Todo monu-
Antes, los grupos no acostumbraban a l a música de Pink Floyd
mental, a lo grande: la contraportada de
tardar tanto entre disco y disco. En eso resultaban ideales para
Ummagumma, con un display de instru-
también Pink Floyd fueron pioneros. Wish ambientar programas de radio,
mentos -sobre todo los percusivos- documentales, cortometrajes
para anonadar a cualquier adolescente you were here apareció en septiembre de
1975, casi 30 meses después; un sucesor y películas. Ellos mismos
que esté pensando comprar su primer am- trabajaron para el cine en
plificador; la gran vaca de Atom heart mother; digno, aunque demasiado formal. Y con la
llegada del punk se adaptaron -dentro de varias ocasiones (Tonite let's all
la mpliación brutal de la oreja que
sus posibilidades- a los arreglos eco- make love in London, More,
llena toda la funda exterior de Meddle; una
nómicos predominantes (Animals). Zabriskie point, La vallée, The
cara de sólo una canción en estos dos últi-
Pasada la tormenta resurgen con otro body), aparte de aparecer en
mos elepés, etcétera.
trabajo ambicioso, The wall, doble disco Pink Floyd live at Pompeii
Y de pronto, la sorpresa: todas las in-
conceptual alimentado mayormente por el (1972). Sus relaciones con la
vestigaciones y triquiñuelas aprendidas en
sombrío panorama mental de Waters: la so- vanguardia europea fueron
seis años son vomitadas, con la ayuda del
ledad, la incomprensión y el muro que cons- estrechas: colaboraron con el
ingeniero Alan Parsons, en 12 canciones
truimos para aislarnos de nuestro entorno coreógrafo Roland Petit y hubo
de pop comercial de nivel alto, producien-
do uno de los discos más vendidos de to- (y de la realidad). La película subsiguiente, proyectos frustrados, como
dos los tiempos, Dark side ofthe Moon. So- protagonizada por Bob Geldof, obtuvo divi- una película en compañía de
nido de un corazón latiendo, de helicópte- dendos generosos, así como la canción Rudolf Nureyev y Roman
ros, de un despertador, de cajas registra- Another brick in the wall, censurada en Sur- Polanski.
doras, los gruñidos inmaculados de una áfrica y en algunas emisoras británicas al
voz de color femenina y los de un lunático, denunciar la represión en su sistema educa-
con el balance final de más de 300 sema- tivo. Este pesimismo crónico, por último, se
nas ininterrumpidas en el hit parade de la consolida durante las primeras semanas de
publicación Billboard. Y Money, por pri- 1983 con la aparición de The final cut, reple-
to de consignas antibelicistas: una triste
despedida para combatientes honrados con
tantas medallas. Pero que sus seguidores
fieles no desfallezcan, ya que, aun mutilados
por el transcurrir de los años (Waters quiere
enterrar el nombre del grupo), amenazan
con volver en 1987.
"SIN GABRIEL, EL GRUPO GENESIS HA ABANDONADO LAS PIEZAS MÁS
COMPLEJAS PARA ACERCARSE DECIDIDAMENTE AL MERCADO DEL `POP"
Por King Crimson pasaron muchos (Wimborne, Dorset, 1946) no había teni-
músicos, dirigidos siempre por do éxito en sus primeras experiencias ar-
Robert Fripp (primero por la izquierda). tísticas, ni cuando a los 17 años formó The
League of Gentlemen, ni con The Creama-
tion, ni acompañando a los discretísimos
Salena Jones y Norman Vaugham. Ni si-
quiera cuando conoció a los hermanos Pe-
ter y Mike Giles y formó con ellos un trío,
que pasó a la historia gracias a un curioso
álbum titulado The cheerful insanity of Gi-
les, Giles & Fripp (Deram, 1968) y, sobre
todo, por ser el embrión de lo que un año
más tarde sería King Crimson.
Aunque el nacimiento oficial de King
Crimson como grupo -con Fripp, Mike
Giles, Greg Lake y Ian McDonald- está
fechado el 13 de enero de 1969, no fue has-
ta su aparición en el célebre concierto-ho-
menaje de los Rolling Stones a su ex com-
pañero Brian Jones (Londres, Hyde Park,
5 de julio de 1969) cuando se dio a cono-
cer públicamente, noqueando a propios y
extraños con su sonido denso y técnica-
mente brillante.
El primer álbum del grupo, In the court
of the Crimson King (1969), supuso una
auténtica revolución en el mundo del rock;
"una extraña obra maestra" (como dijo
Peter Townsend), con una calidad fuera
de lugar, intensa, dramática, poética. Los
El
textos de las canciones, escritos por Peter
Sinfield, oscuros y barrocos, creaban, en
propósito fundamental unión perfecta con una música violenta y
de King Crimson es organizar la extrañamente frágil, un mundo lleno de
dolor, pero armonioso e incluso román-
anarquía, utilizar el poder
l atente del caos y permitir que ¡NO CRIMSON, tico.
l as diferentes influencias Y con el éxito, inesperado, llegaron los
puedan interpretarse y
encontrar su propio
LAS VISIONES primeros cambios en el seno del grupo,
convirtiéndolo en el dúo Fripp-Sinfield,
un tándem creativo insuperable. Arropa-
equilibrio. Debido a ello, la
música evoluciona, más que DEL REY FRIPP dos por una serie de músicos de indiscuti-
se desarrolla, a lo largo de ble valía -Mel Collins, Keith Tippett,
JORGE ARNAIZ Gordon Haskell, Andy McCullogh, etcé-
líneas predeterminadas. El
repertorio, tan variado, posee King Crimson es un caso insólito dentro tera-, Fripp y Sinfield lograron profundi-
un motivo común, por cuanto de la historia del rock progresivo europeo. zar aún más si cabe las ideas expuestas en
representa las disposiciones Lo es debido a su música, tormentosa e el extraordinario primer álbum del grupo,
cambiantes de las mismas inclasificable, que incluso hoy, 18 años publicando In the wake of Poseidon (1970)
cinco personas". después de su aparición, goza de una cre- y Lizard (1970), dos obras consideradas
dibilidad y una aceptación fuera de toda como menores, pero que con el paso de los
Robert Frlpp, 1969 duda, y a su leyenda errática, cúmulo de años fueron adquiriendo una importancia
aventuras y desventuras casi épicas, mar- singular (sobre todo, Lizard, uno de los
cada por la conflictiva y carismática per- momentos cumbres de la fusión del rock y
sonalidad de su líder, Robert Fripp. Tam- el jazz de vanguardia).
bién por la rara unanimidad del público y La culminación del estilo Crimson llegó
la crítica a la hora de enjuiciar el movimien- con Islands (1971), su obra más homogé-
to sinfónico, apartando a King Crimson del nea y cuidada, que marcaría el final de una
resto de sus congéneres -E. L. & P., Gene- época brillante, pero dubitativa, y también
sis, Procol Harum, Yes, etcétera-, prácti- de la asociación Fripp-Sinfield. Dado el
camente defenestrados, y entronizándolo agudo egocentrismo de Fripp y la progre-
como a un verdadero rey. Sólo que, en siva osadía de sus conceptos musi-
realidad, el Rey Carmesí era una máscara
detrás de la cual se escondía el genio visio-
nario de uno de los músicos más inquietos
y excéntricos de los últimos 20 años, un
chamán autocrático de nombre Robert
Fripp.
Guitarrista excepcional, Robert Fripp
"LA FRUSTRACIÓN CREATIVA ERA LA RAZÓN PRINCIPAL DE LA
DESESPERADA ENERGÍA DEL GRUPO" (Robert Fripp)
cales, esa ruptura era algo inevitable, por Robert Fripp, en uno de sus
cuanto suponía una liberación total de la conciertos en solitario.
música que ya nunca más llegaría a estar
hermanada con la poesía, convirtiéndose
ésta (o mejor dicho, la voz humana) en un
instrumento musical más al servicio de las
ideas de Robert Fripp.
El nuevo King Crimson, formado en
mayo de 1972 con Robert Fripp, el bajista
John Wetton (ex Family) y el batería Bill
Brufford (ex Yes) como eje central, sería
al mismo tiempo la única formación que
podía ser considerada como un grupo ver-
dadero, tanto por la afinidad de ideas de
los tres músicos como por su compenetra-
ción natural. El nuevo álbum del grupo,
Lark's tongues in aspic (1973), sexto en la
carrera del grupo (anteriormente, en 1972,
se había publicado Earthbound, grabado
en directo en el transcurso de la gira ame-
ricana de la formación precedente), conte-
nía una música mucho más estirada y
cáustica que la de los discos anteriores,
sin la más mínima concesión a la galería,
que tendría su continuación en Starless
and Bible black (1974), Red (1974) y USA
(1975), tres álbumes excepcionales, duros,
donde la leyenda paranoica del grupo co-
braría las dimensiones de una realidad
manifiesta, que pudo ser vivida por los
asistentes al concierto madrileño del gru-
po (noviembre de 1973), justo en el um-
bral de su separación. sino un clarificador preámbulo de lo que
Después de la ruptura del grupo (fina- años más tarde sería una ambiciosa cuatri-
les de 1974) se abriría un larguísimo com- logía de marcado carácter personal for-
pás de espera, de más de seis años, hasta mada por Exposure (1978), God save the En 1974 dejé King Crimson
una nueva reaparición del rey -con Ro- Queen / Under heavy manners (1979), The por varias razones. A nivel
bert Fripp a la guitarra y mecanismos va- league of gentlemen (1980) -con Sara Lee profesional fue, sobre todo, el
rios, Adrian Belew a la guitarra y como al bajo, Barry Andrews a los teclados y resultado de la posibilidad
voz solista, Tony Levin al bajo y Bill Bruf- Johnny Toobad a la batería- y Let the po- decreciente de un contacto
ford a la batería-, que se vería coronada werfall (1981), que no sólo supo resumir los real entre la audiencia y los
con tres álbumes muy interesantes -Dis- puntos más significativos de la era King músicos. Me pareció que eran
cipline (1981), Beat (1982) y Three of a per- Crimson, sino que recogió también las di- tres las causas: primero, los
fect pair (1984)-, que si bien no suponían versas influencias foráneas (producto de crecientes aforos en los
ningún paso hacia adelante en la trayecto- las colaboraciones de Fripp, como músico acontecimientos de rock;
ria profética del Rey Carmesí, sí consti- y como productor, con gente tan dispar segundo, la aceptación
tuían un complemento a la prolífera carre- como Blondie, David Bowie, Peter Ga- general de la música rock como
ra en solitario de Robert Fripp, cuya in- briel, Daryl Hall, Andy Summers, Talking deporte de espectador;
fluencia sobre los músicos de los últimos Heads, Van der Graaf Generator o XTC), tercero, la relación vampírica
15 años ha sido reconocida ampliamente, que de una manera u otra marcaron toda la entre la audiencia y los
tanto por héroes del punk como por crea- música pop de los años ochenta. músicos".
dores vanguardistas. Incluso ahora, más o menos identifica-
Porque Fripp, personaje conflictivo y do con la música contemporánea ambiental, Robert Fripp, 1980
diríase lunático, siempre estuvo por de- Fripp sigue demostrando sus cualidades
lante de un tiempo/época/estilo concre- únicas a través de unos álbumes extrema-
tos. Sus primeras experiencias fuera del damente personales, como Robert Fripp
seno de Crimson, arrancando en Centipe- and the league of crafty guitarists (Opal,
de, de Keith Tippett, y continuando con 1986), registrado en directo en compañía
No pussyfooting (1973) y Evening star de sus alumnos, o el grabado a dúo con su
(1975), al alimón con Brian Eno, no fueron mujer, Toya Wilcox (Virgin, 1986). "La
creatividad está motivada por el dolor in-
terior", decía Fripp, defendiendo su pro-
puesta de las unidades creativas de tama-
ño pequeño, inteligentes, independientes y
de gran movilidad. Él siempre fue así, un
visionario fuera de la ley que ha sabido en-
señar el futuro.
"NO ME ENLOQUECÍA LA MÚSICA, PERO VI QUE ERA UN MEDIO MÁS
FÁCIL PARA GANARME LA VIDA QUE, POR EJEMPLO, LA PINTURA" (lan Anderson)
Al frente de Jethro Tull, lan Anderson se có la época. Pero en el caso de Jethro Tull
ha preocupado de dar contenido
teatral a sus conciertos. había una diferencia. Su cantante tocaba
la flauta, y cuando lo hacía elevaba la pier-
na como un pelícano.
Sus conocimientos de ballet, llegados a
él a través de su hermano, le hacían mo-
verse de manera dinámica, agresiva, dis-
tanciada de lo usual en la época, consis-
tente en tratar al micrófono como si fuera
el Muro de las Lamentaciones de Jerusa-
lén. Aquel chico tenía algo distinto. Y em-
pezó el lío. Actuación en un festival multi-
tudinario, publicación del primer álbum
(This was, 1968) y diana. A partir de enton-
ces, la historia de Jethro Tull es una suce-
sión de álbumes, ropajes para vestir al
CUENTOS DE
CANTERBURY
ANTONIO DE MIGUEL
En el devenir de las nuevas formas musica-
les del rock, la escuela de Canterbury está a
la cabeza como un inagotable filón de
i deas. Alguien, jocoso, definió el sonido
Canterbury como un cóctel de Duane Eddy,
John Coltrane y James Brown. El símil es
exagerado pero gráfico: los primeros nom-
bres de la leyenda Canterbury; Wilde Flo-
wers, estuvieron en activo de 1964 a 1967,
tocando música de todos los colores, go-
zando de la psicodelia y sin grabar jamás
un disco. De esta célula emergieron, entre
otros, Robert Wyatt (batería), Richard Sin-
clair (bajo), Hugh Hopper (bajo), David
Sinclair (teclas), Pye Hastings (guitarra) y
Richard Coughlan (batería).
La banda de más pedigrí de todas las
nacidas en Canterbury fue Soft Machine. solitario de Kevin Ayers es la de un perpe-
Cuatro lunáticos la hicieron posible en tuo hippie obsesionado por la bebida e im-
1967: Mike Ratledge (teclas), Kevin Ayers potente a la hora de dar continuidad a to-
(bajo), Wyatt y el especialísimo David dos sus talentos como músico y composi- Robert Wyatt dejó Soft
Allen, un beatnik australiano amigo de tor. De todos modos, en sus discos se Machine en 1971; dos años
Corso y Burroughs (a quien pidió permiso plasma un aroma artístico original y de un después sufrió un accidente y
para dar el nombre a la banda). El no me- contagioso lirismo: Shooting at the Moon se quedó paralítico. En todos
nos raro Kim Fowley les produjo un (1971), The confessions of Dr. Dream sus trabajos se ha erigido en
(¡cómo no!) extraño single, se presentaron (1974). Mike Oldfield y otros notables gui- bastión incólume de la mejor
en el UFO londinense junto a Pink Floyd tarristas estuvieron a sus órdenes. Hace vanguardia, colaborando con
e hicieron una escapada a Saint-Tropez tres años grabó con músicos españoles l os más prestigiosos grupos y
para tocar en un happening picassiano. A que le rescataron de su retiro mallorquín. solistas, tanto del rock como
la vuelta, Allen tuvo problemas aduaneros El grupo Caravan surgió en 1968 como del jazz. Su álbum de 1974,
que le devolvieron a París, en donde crea- herencia directa de Wilde Flowers (Has- Rock bottom, pasa por ser
ría años después su gran e idealista pro- tings, Coughlan y los hermanos Sinclair). uno de los discos claves de la
yecto, Gong, banda multiforme íntima- En sus cuatro primeras obras (Caravan; If década. En los ochenta ha
mente ligada a la estética de Canterbury. i could do it...; In the land of Grey & Pink, y i ncrementado el contenido
Como trío, Soft Machine hizo una gira Waterloo Lily) representan la cara más político de su obra, y ha
americana en 1968 con Jimi Hendrix, al fi- propia del sonido Canterbury, melódicos, llegado a grabar en español
nal de la cual grabaron su primer álbum, amables y envueltos en finas volutas de te- canciones de Víctor Jara y
producido por Chas Chandler y Tom Wil- clado mágico. Después endurecieron su Pablo Milanés.
son, obra deliciosamente lisérgica. Con el sonido y perdieron el encanto.
cambio de Ayers por Hugh Hopper, la La saga del movimiento tuvo más cris-
Machine desbrozará a partir de Volume talizaciones: Delivery (Lol Coxhill y Steve
two (1970) su marcada personalidad jazz- Miller); Matching Mole, formado por
rock, centrada en la inagotable fantasía de Wyatt; cuatro bandas más underground,
Wyatt yel endiablado órgano eléctrico de Uriel, Egg, Khan y National Health, cuyo
Ratledge. Contaron con brillantes instru- nexo es la presencia de Dave Stewart en
mentistas, como Elton Dean, John Mars- los teclados; Hatfield & The North, refun-
hall y Karl Jenkins. Sus seis primeros ele- dición estilística y consciente de las claves
pés no tienen desperdicio. La carrera en de Canterbury; Steve Hillage, miembro de
Gong y hacedor de inquietos álbumes en
los que juguetea con la electrónica, la metafísica y la fantasía.
Sonido Canterbury. Precinto de garan-
tía. Estigma indeleble. Asomados siempre
a la ventana del aire puro y libre. Buenos
chicos.
"TODO EL DINERO QUE GANO LO INVIERTO EN MIS NUEVOS PROYECTOS. YO
NO SOY COMO LOS POETAS, QUE NO NECESITAN EQUIPO" (F. Zappa, 1981)
Frank Zappa (tercero por la izquierda) una familia mortalmente aburrida, según
siempre ha sabido rodearse de sus propias palabras. Hijo de un hombre
músicos eficaces. capaz de cualquier trabajo -profesor de
historia, matemático
y meteorólogo fue-
ron sus menesteres
durante la infancia
de Frank- y de su
nada destacada es-
posa, el futuro fusti-
gador de la moral
conservadora co-
menzó a interesarse
por la música -sus-
titutiva de unos estu-
dios poco estimulan-
tes- escuchando
por la radio cancio-
nes de rhythm and
blues y machacando
los discos de música
clásica propiedad de
la familia. Sus prime-
ros impulsos lo lleva-
rían a tocar una ima-
ginaria percusión so-
bre su colchón. El
motivo de ello sería
básico para su poste-
rior evolución: Ioni-
zación, un tema de
Edgar Varése com-
puesto para 37 ins-
trumentos de percu-
sión, se convierte,
junto a algunas co-
sas de Stravinski, en su pieza preferida.
Instalado en el pueblo de Lancaster, al
sur de California, Zappa se alía con su
Frank Zappa creó a finales amigo Don Vliet (futuro Captain Beef-
de los sesenta las compañías
Bizarre y Straight, en RANK ZAPPA, heart) en la gozosa aventura de escuchar
música negra y empaparse de sus ritmos y
asociación con Herb Cohen. formas vocales. Esto, unido a los intensos
Con la última se dedicó a la
noble tarea de catapultar INCONFORMISTA Y estudios de armonía musical que lleva a
cabo Frank, junto al interés crítico por
nuevos nombres. Captain una sociedad reprimida sexual y anímica-
Beefheart and His Magic Band,
GTO's, Lord Buckley, Alice
EXPERIMENTADOR mente, van haciendo germinar la futura
concepción vital del joven músico. Insta-
Cooper, Tim Buckley y algunos QUIM CASAS l ado en Los Ángeles, trabajando en una
más tuvieron el privilegio de Pocos son los músicos que, como Frank agencia publicitaria para poder comer y
contar con su apoyo. También Zappa, pueden definir mejor la compleji- pagar las facturas, Zappa hace sus pinitos
ha colaborado en discos de dad del rock, sus contradicciones y acier- musicales componiendo las bandas sono-
los Animals, L. Shankar, Grand tos, su constante evolución, su sentido crí- ras para dos películas que no saldrán ja-
Funk Railroad, John Lennon y tico y su integración en los cauces más más de la reducida área californiana, Run
Jean-Luc Ponty como consumistas. Articulista, dibujante, corro- home slow (1959), western dirigido por Tim
productor o arreglista. sivo letrista, virtuoso de la guitarra, pro- Sullivan y Don Cerveris, y The world's
ductor, arreglista y compositor fecundo, greatest sinner
Zappa es sinónimo de respeto y provoca- (1960), una comedia de Timothy Carey. Poco después, con el escaso
ción, de ruptura de los moldes más codifi- dinero reunido en estas desventuradas ha-
cados y generalizados, a la búsqueda de la zañas, compra una especie de maloliente
creación ajena a modas contractuales.
Zappa es, pese a quien pese, una parte
fundamental de la historia del rock. Sus
más de 20 años en activo así lo atestiguan.
Nacido Francis Vincent Zappa el 21 de
diciembre de 1940 en Baltimore, localidad
de Maryland, nuestro hombre provenía de
"UNA GENERACIÓN POLÍTICAMENTE SENSIBILIZADA COMO TAL
JAMÁS HA EXISTIDO EN ESTADOS UNIDOS" (Zappa, 1974)
El
proyectaba la banda. Los discos salían poco preparada musicalmente, psicodéli-
como bombas de un cañón: EL&P (1970), cos y dispuestos a la hipnotización colecti-
Tarkus (1971), Pictures at an exhibition va más trepidante. Su único éxito fue Sil-
rock progresivo es una (1971), Trilogy (1972), Brain salad surgery ver machine, tema editado en 1972, que es
etiqueta que para su mejor (1973)... I maginería épica, elaboradísi- tan sólo un rock and roll con efectos elec-
comercialización se mos en composición y siempre con la lo- trónicos adosados. Hawkwind sólo quisie-
manufacturó en sellos cuacidad solista de Emerson como bande- ron ser una banda psicodélica tecnificada;
especializados; unos, ra. Después de un triple en directo, salió a por eso, al revés que muchos nombres de
i ndependientes; otros, creados flote el aburrimiento de cada uno de ellos l a época, Hawkwind fue acrecentando su
por las propias compañías realizando Works, volumen I (1977), en el credibilidad con el paso del tiempo hasta
como subsellos: Virgin, Island, que se repartían individualmente las caras ser unos clásicos del rock progresivo más
Deram, Vértigo, Track, Dawn, para sus propios desfogues. Los tres álbu- i nteresante. In search of space (1971), Doremi fasol latido (1972), Space ritual (1973),
Harvest, Bronze, Charisma, mes que seguían olían a muerto. Se hicie-
etcétera. Algunos artistas ron millonarios, fundaron el sello Manti- Hall of the mountain Grill (1974), resisten
-Emerson, Lake and Palmer, core y asesinaron el rock sinfónico, ago- muchas escuchas aún gozosas. Siguen en
Moody Blues, Frank Zappa- tándolo. El monstruo que habían fabrica- activo.
montaron sus propias marcas do los engulló. Retornaron, con un nuevo
en busca de una mayor batería, en 1 986. Henry Cow. Son los más raros de la tribu.
autonomía. Nacieron en pleno 1968, en la universidad
Family. Roger Chapman (voz), Charlie de Cambridge, con Fred Frith (guitarra),
Whitney (guitarra), Rob Townsend (bate- John Greaves (bajo), Geoff Leigh (saxos),
ría), Jim King (saxos) y Rick Grech (bajo, Tim Hodgkinson (teclas) y Chris Cutler
violín) formaron una familia estable en (batería). Nueva izquierda, amores van-
Leicester en 1966. Su primer disco tardó guardistas e intelectualismo fueron sus
dos años en llegar, Music in a doll house, y atributos. En Francia e Italia se les vene-
tuvo éxito. Demostraban poseer nervio. raba, mientras en el Reino Unido se les
Chapman magnetizaba en el escenario miraba con recelo. Era la banda más avie-
con su frenética manera de cantar. Asen- sa del sello Virgin. Para que su raza musi-
tados en el blues y el rock, Family mantu- cal no se enturbiara, se fundieron con otra
vieron el equilibrio pariendo una música
enjuta, recia, esquemática, igual de pun-
zante en las fases acústicas que en las
eléctricas. A song for me (1970), Fearless
(1971), Bandstand (1972). Los frecuentes
cambios de bajo y teclas erosionaron la
unidad, pese a la categoría de los cambios:
"SOY UN PERSONAJE TENEBROSO; DE OTRA FORMA NO PODRÍA ESCRIBIR
ESTA MÚSICA" (Peter Hammill, de Van der Gaaaf Generator)
CUENTOS DEL
FUTURO IMPOSIBLE
JULIO MURILLO
Al igual que muchos otros grupos en-
cuadrables en el rock progresivo britá-
nico de la pasada década, Yes es una
de esas bandas capaces de suscitar
sentimientos y opiniones irreconcilia-
bles; con ellos no existe el término me-
dio: o los amas o los odias. El grupo vi-
vió su época dorada entre 1970 y 1978;
de hecho, ésos fueron los años de ma-
yor éxito para el resto de los grupos si-
tuados en las coordenadas del vulgar-
mente llamado rock sinfónico. Curiosa-
mente, el género nació y creció con
fuerza en el Reino Unido y en el resto
de Europa, lo que tiene su explicación.
La música de Yes, de King Crimson, de
Genesis y de tantos otros es una curio- nes- que poco o nada tenía que ver rante 1975-1976, todos los miembros
sa alquimia de elementos y conceptos con la realidad de la calle. Tanto Close del grupo graban en solitario. Going for
procedentes del rock, la cultura hippie, to the edge como Tales from topographic the one (1977), con Wakeman de nuevo,
la psicodelia y la inmensa tradición ro- oceans (1973) o Relayer (1974) sublima- y Tormato (1978), ponen punto final a
mántica europea. El Viejo Continente, ron las fantasías de buena parte de la la formación clásica de Yes. Drama
con su inagotable musa histórica y su comunidad, y pretendían ser la llave (1980), con Squire-White-Howe, res-
descomunal legado clásico, era el terre- capaz de hacer girar la cerradura de las paldados por los dos ex Buggles, Tre-
no abonado capaz de propiciar la pri- puertas del delirio. vor Horn (luego famoso productor) y
mera metamorfosis importante del En el plano estrictamente musical, Geoff Downes, será un intento inútil de
rock. Tras los experimentos de grupos Yes fueron unos adelantados a su tiem- prolongar la vida de un grupo que ya lo
como Cream o Traffic, la obra de po, capaces de encerrar en un solo dis- había dicho todo. Anderson se centra-
Emerson, Lake and Palmer o Yes no es co tantos ritmos, melodías, atmósferas rá en su trabajo con Vangelis; Wake-
sino una consecuencia lógica. e ideas como las empleadas hoy día en man trabajará en sus discos, y Howe se
Jon Anderson (1944) y Chris Squire fabricar cien. embarcará en abominables experien-
(1948) botaron la nave durante los últi- Resumamos el resto de la historia. cias con Asia y GTR.
mos días de 1968, ayudados por Bill Tras Close to the edge, Brufford se pasa En 1983, Yes resucitan de la mano
Brufford, Tony Kaye y Peter Banks. El a King Crimson y es sustituido por de Anderson-Squire-White, respalda-
grupo pasó de ofrecer, en sus primeras Alan White (1949). Aparece Yessongs dos por Tony Kaye (el que fue teclista
actuaciones, versiones de material clá- (1973), triple set en vivo y filme de igual de Yes en sus tres primeros elepés) y
sico de Stephen Stills, Byrds o los título. Tales from topographic oceans Trevor Rabin a la guitarra. Tras la edi-
Beatles, a producir su propia música, conlleva la partida de Rick Wakeman, ción del elepé 90125, el grupo emprende
temas de rotunda instrumentación y animado por el éxito de su primer elepé una gira mundial, que los trae por vez
amplia cobertura vocal. Tras la marcha en solitario, The six wives of Henry VIII; primera a nuestro país. Forman parte
de Peter Banks y Tony Kaye y su susti- sus siguientes trabajos irán descen- del cartel del monstruoso Rock in Rio, y
tución por Steve Howe (1947) y Rick diendo la escala de la calidad, hasta lle- en 1985 aparece 90125 Live-The solos.
Wakeman (1949), en The Yes album y gar a lo caricaturesco. Patrick Moraz La mera existencia de Yes en 1987
en Fragüe, respectivamente, Yes asentó sustituye a Wakeman en Relayer. Du no deja de ser anecdótica: son un dino-
definitivamente las bases de su sonido. saurio cuyo peso y volumen le propor-
Con Close to the edge (1972), el gru- ciona la inercia necesaria para seguir
po inauguró una época presidida por la avanzando, un negocio que se resiste a
ampulosidad de sus proyectos. Eddie presentar expediente de crisis y cerrar
Offord era el productor habitual, y Ro- puertas. Lo mejor de su obra queda
ger Dean, el encargado de diseñar las HISTORIA DEL `ROCK' atrás y constituye por sí solo un motivo
portadas de los álbumes, amén del dis- más que suficiente para revalorizarlos.
positivo escénico: grutas, pasarelas, El día, no muy lejano, en que las nue-
mundos desolados. Una gélida ambien- PRÓXIMO CAPÍTULO vas generaciones repesquen la fantasía
tación para una música eminentemente y las ideas que Yes expresaron en sus
futurista; simple ficción científica -lle- discos, el rock saldrá de su paupérrima
na no obstante de acertadas intuicio- 'JAZZ-ROCK' condición actual.
HISTORIA DEL `ROCK'
La creciente ambición de un rock en plena efervescencia hizo
que algunos músicos, a finales de los sesenta, se aproxima-
sen al jazz. Abrieron brecha grupos numerosos, como
Blood, Sweat & Tears, o Chicago, que tuvieron una buena
acogida. En sentido contrario, movidos por motivos eco-
nómicos o por un clima propicio para las aventuras musica-
les, abundantes jazzmen adoptaron instrumentos y formas
del rock, siguiendo la pista del inagotable Miles Davis (en la
foto). Asi nace un género, conocido como fusion o jazz eléc
trico, de gran desarrollo en los últimos 15 años. El pop pronto advierte sus diferen-
cias radicales con el jazz, aunque no renuncie a ocasionales incursiones en esta
estética, como es el caso, por ejemplo, de Sade.
El
McLaughlin tienen plena sustancia armó-
nica y melódica. Miles había sido el pri-
mer músico de jazz importante en presen-
jazz siempre ha tar improvisaciones de conjunto con ins-
ejercido cierta influencia sobre trumentos eléctricos, pero McLaughlin
el rock. Lógica, pues su
filogénesis remonta a uno y otro
hasta el blues. Las bandas
AZZ-ROCK', fue quien se percató de que la nueva tec-
nología reclamaba el desarrollo de nuevas
que en los cincuenta
acompañaban a Little
EL CRUCE formas musicales y nuevos enfoques ins-
trumentales.
Junto a Miles Davis tocaron los cere-
Richard o Ray Charles incluían
i nvariablemente a varios
músicos de jazz. Treinta años
DE CULTURAS bros rectores de Weather Report, el de la
Mahavishnu Orchestra y Shakti, el de Re-
MINGUS B. FORMENTOR turn to Forever, el de Lifetime o el de los
más tarde, en su versión Como género distinto dentro de la música Head Hunters. Todos los grupos citados
electrónica, jazz y rock siguen popular de nuestro tiempo, el jazz-rock más arriba han desaparecido como tales,
manteniendo un fructífero nace durante la segunda mitad de los se- pero Miles sigue catapultando jóvenes
diálogo. senta. Su cuna se escinde entre el Reino músicos dispuestos a desarrollar sus ideas
Unido y Estados Unidos, entre la patafisi- con los oídos bien atentos al presente. Lo
ca de Canterbury y el hippismo de Califor- que durante la década anterior se etiquetó
nia, entre el claro intelectualismo y la os- como jazz-rock, jazz eléctrico (quizá el tér-
curidad radical, entre las presiones em- mino más preciso y clarificador de los acu-
presariales y los imperativos del impulso ñados) o fusión hoy día recibe casi tantos
creador. nombres como estrellas tiene Hollywood:
Por parte americana, Electric Flag; no wave, punk jazz, funk jazz, reggae jazz,
Blood, Sweat & Tears, y Chicago, serían rock improvisado. Para referirse a tan va-
las formaciones encargadas de abanderar riopinto cocido, Davis suele hablar en la
el movimiento. Fue la de todos estos gru- actualidad de "música social de la calle".
pos una combinación más escorada al ar- Si en años pasados Jimi Hendrix o Sly
tificio que a la esencialidad, un cóctel sin Stone ejercieron una influencia seminal en
ligazón que se obtenía al sobreañadir ins- el propio Davis, en Ornette Coleman y en
trumentos de viento que soplasen en clave otras materias grises de primera clase
jazzística sobre bases rítmicas innegable- dentro deljazz, a estas alturas ya son ellos
mente rockeras. A pesar de sus resonantes mismos los que inspiran a nuevas genera-
éxitos de ventas, fueron formaciones poco ciones de rockeros fronterizos.
estables, proyectos de escaso fuste musical
y enorme productividad económica.
Algo casi antagónico sucedió con los
flirteos entre jazz y rock iniciados en el
Reino Unido por esta misma época. Soft
"¿`ROCK'? ¿`JAZZ'? ÉS AS SON PALABRAS INVENTADAS POR LOS BLANCOS.
YO NO TOCO `JAZZ' NI `ROCK': TOCO MI MÚSICA" (Miles Davis)
Jeff Beck, pionero del rock más primeros grupos rock que añadieron sec-
desenfrenado, también puso su ción de viento a su base rítmica lo hacían
guitarra al servicio del jazz eléctrico. pensando más en las de algunos bluesmen
que en los combos de jazz o big-bands de
baile. No obstante, la etiqueta estaba ahí,
jazz-rock, sabiamente manipulada por la
multinacional CB S en un momento de
próspero desarrollo económico para las
compañías discográficas.
El jazz-rock, como producto industrial,
atesoraba muchos atractivos. Enumere-
mos varios: el virtuosismo de sus protago-
nistas, ya que, de idéntica manera que el
jazz, adopta como brazo de realización
básico y útil la improvisación; no hay can-
ciones (sólo mantenían este formato las
primeras bandas americanas del género),
sino temas; el jazz-rock es una música fun-
damentalmente egoísta: abunda más en
las nomenclaturas en tomo al líder de la
banda que en el concepto de grupo bajo
nombre unitario; es música de volumen
montañoso y gran aparatosidad; ha crea-
do personalidades aceleradas, omnipre-
sentes, y pese a la babelística maraña de
etiquetas, la estética del jazz-rock ha que-
dado limpiamente delimitada en su propia
turbulencia. ¿Halo mágico? ¿Un toque de
distinción? ¿Un spray de intelectualidad?
El público rock vio cómo se les venían
encima unas claves sonoras más o menos
jazzísticas que eran incapaces de diferen-
ciar y catalogar, pero que sonaban como
algo novedoso para la mayoría. Jazz se
convertía en término-salvoconducto sin
matizaciones de su sabroso y polifacético
proceso cultural. Aquello sonaba a jazz y
punto. La fascinación, el saberse degusta-
dor de un elixir hasta ese momento ignoto
era la mejor vaselina para convertir lo que
los puristas llamaban superchería o puro
artificio en un subgénero altamente subje-
tivo y embriagador. Incluso artistas de du-
Comprendernos requiere dosa calidad salvan los primeros obstácu-
tiempo porque nuestra música
puede únicamente ser
asimilada retrospectivamente,
A SELVA los de su carrera inyectando a su música
unos cuantos gramos de colorante jazzy,
como la historia. Incluso
cuando componemos hay un DEL `JAZZ-ROCK' algo así como un efluvio que todo lo hip-
notiza. Es más, muchos músicos de cohe-
rente pedigrí jazzístico no pudieron esqui-
lapso de tiempo entre la ANTONIO DE MIGUEL var el tufillo popularizante que a otros de
actual escritura y el mundo en Fusión. Confusión. Turbulento océano de sus colegas menos imaginativos pero más
que puedes comprenderla. hábiles les obsequió el jazz-rock, y se em-
Cada parte sólo tiene sentido en nombres propios, grupos, etiquetas, varie-
dades estilísticas... Es el embravecido bocaron hacia la rentabilidad económica y
base del total. Nuestra mundo del jazz-rock, perdón, jazz -fusion, las purpurinas del show-biz. El jazz-rock,
música demanda todo del con sus miles de bifurcaciones puras e im-
oyente. O la amas o la odias. perdón, crossover, perdón, jazz -funk. Te-
rrenos movedizos. Lodazales plagados de puras, originadas en una u otra fuente, na-
No hay término medio" hipertecnología, volumen alto, clichés y cidas en Estados Unidos o en Inglaterra,
excesos. Esas hambres por dotar al rock en Europa o en Japón, con excesos o sin
ellos, con clichés o sin ellos, sí que puede
Joe Zawlnul de un mayor calibre, unas aristas más
enorgullecerse, en su bastardez, de haber
gruesas y hasta respetables (¿para quién?
Para los propios músicos, quizá) que trajo hecho más acólitos al jazz que ninguna en-
la culturización del pop a fines de los se- ciclopedia de Leonard Feather o de J. E.
senta encontraron en el jazz un terreno no
sólo abonado, sino fecundo y rebosante de
contraprestaciones. El jazz, como el rock
and roll, hunde sus entrañas en el blues; a
veces resulta más lógico pensar que los
"CON LA MAHAVISHNU HICIMOS CANTIDADES IMPENSABLES DE DÓLARES.
PERO LA MÚSICA SE ESTABA PROSTITUYENDO" (John McLaughlin)
aún arcaicos e ingenuos, pueden rastrearse en la segunda mitad de los años sesenta. Algunas inquietudes de
jazzmen como
Charles Lloyd, Gary Burton, Larry Coryell o Jeremy Steig. Eran inmaduros flir-
teos con el pop más que investigaciones re-
levantes. A la par que Miles Davis comen-
zaba sus fascinaciones eléctricas y se ro-
deaba de atrevidos delfines, un carismático músico de rock, Al Kooper, neoyorquino, fiel colaborador de Dylan desde 1965,
prestigioso músico de supersesiones e in- mismo productor del segundo álbum de
cansable fabulador de proyectos, convo- BS&T). La banda había nacido llamándo-
caba al guitarrista Steve Katz y al batería
Bobby Colomby, para formar una big-
band de ocho miembros y largo título,
se The Big Thing, con Robert Lamm (te-
clados), Terry Kath (guitarra), Peter Cete-
ra (bajo), Danny Seraphine (batería) y
E l jazz-fusion
norteamericano ha adoptado a
Blood, Sweat & Tears (BS&T, Sangre, tres sopladores, Walter Parazaider, James descarriados hijos europeos
Sudor y Lágrimas). Pesó más el amor al Pankow y Lee Loughnane. Todos con for- del Este que allí se refugiaron
blues de Kooper, descaradamente procla- mación musical universitaria. Les insufla- cegados por el destello de las
mado en su forma de derretir los teclados, ba al principio una rebeldía política muy noches neoyorquinas: Joe
que la apariencia jazzy de la formación, del momento, que el tiempo fue abortan- Zawinul, Jan Hammer,
con el 50% del grupo dedicado a los ins- do. Intensos en su bascular rockero y segu- Miroslav Vitous, Jaroslav
trumentos de viento. Su segundo elepé, ros en sus arreglos de metal (inspirados en Jakubovic o Jeff Tyzik. Algo
BS&T (1969), ya sin Kooper, sustituido las clásicas big-bands americanas), Chica- así ocurrió con una pléyade de
vocalmente por un grandullón anglo-cana- go encontró una senda más vibrante para percusionistas
diense, David Clayton-Thomas, dio más mantenerse en vigor durante varios años. suramericanos (Airto, Manolo
protagonismo a la sección de metales, y el Titularon ordinalmente sus elepés, y en Badrena o Laudir de Oliveira).
sonido se hizo impetuoso, con puentes de- concreto su primer álbum se mantuvo casi
dicados a los solistas. En estos primeros tres años en las listas norteamericanas. El
tiempos, el single aún valía como soporte, cuarto fue una caja de cuatro discos, Live
y se extrajeron nada menos que cuatro, at Carnegie Hall (1971), en el que además
muy agradecidos en ventas. La banda ini- de un folleto a color y un descomunal pos-
ció luego una agitada existencia marcada ter, se incluía un alegato político a favor de
por los cambios permanentes de personal, la "vuelta del poder del voto" y se daban
aglutinando sucesivas generaciones de precisas instrucciones para que cada uno
muchos y buenos músicos, pero manifes- eligiera al próximo presidente de Estados
tando graves despistes a la hora de selec- Unidos: "Puedes establecer una alternati-
cionar repertorio. Su fórmula de rock más va que se convierta en una poderosa fuer-
brillantina jazzy se desligó de la audiencia. za de este país". Combinaron prudente-
A trancas y barrancas fueron sacando ele- mente baladas con arranques enérgicos de
pés hasta 1977, y ni siquiera la sabia mano ritmo, y se permitieron un ocasional resur-
de Bob James pudo salvarles. Era una gimiento al éxito en 1976 con el tema If
banda de oficio, sin caso que resolver. you leave me now, melosa imagen de unos
Chicago erosionados por la evolución del
Factor clave en su declinar fue la irrupción de Chicago Transit Authority en 1969, jazz-rock. La muerte de Terry Kath en
de la mano de James Williams Guercio (el 1978 les pilló ya con el paso cambiado.
BS&T y Chicago fueron los primeros
pasos sintomáticos de músicos rock hacia
el jazz, hacia un jazz de formas clásicas y a
veces hasta escolar, como vía para hacer
progresar el rock y apartarlo de su esque-
"EN 1972 VI A UN MÚSICO TOCAR EL 'MOOG'. CREÍ QUE ME VOLVERÍA LOCO
SI ESO NO LO TOCABA YO, Y NO PARE HASTA CONSEGUIRLO" (Herbie Hancock)
WEATHER
REPORT
MÚSICA DE LA ALDEA GL0BAL
MINGUS B. FORMENTOR
El saxofonista Wayne Shorter y el te-
clista Joe Zawinul llevaban tras de sí
una carrera amplia y brillante cuando
grabaron, respectivamente, Odissey of
Iska y Zawinul. En el disco del saxo te-
nor y soprano se hace acompañar de
vibráfono, guitarra, dos contrabajos y
tres percusionistas. Odissey of Iska se
plantea como la banda sonora del peri-
plo de un descubridor negro, Iska, algo
así como un Ulises nigeriano, que de-
viene símbolo del alma humana y de su
cósmico vagar. Por su parte, Zawinul
constituye una especie de fresco sono-
ro sobre múltiples impresiones que el
pasado ancló en la memoria de su
autor.
Con ayuda de tres vientos -flauta, el jazz-rock. Bajo la vigilante tutela de mestizo y el impulso dado a la idea de
trompeta y saxo soprano-, dos con- Shorter y Zawinul desfilan por la for- la improvisación colectiva. Otro más
trabajos y tres percusiones, Joe Zawi- mación no menos de una veintena de anecdótico, pero no para nosotros, es
nul concierta su teclado con el de Her- excelentes jazzmen contemporáneos a
bie Hancock, otro allegado compañero lo largo de sus 15 años de vida y otros el apego manifestado por Shorter-Zawinul a la cosa ibérica. Valgan como
de pretéritas experiencias junto al tantos elepés. La nómina más lujosa y prueba sus temas Gibraltar, Lusitanos,
maestro Miles. Por los surcos de la amplia cae del lado de los percusionis- Plaza Real (de Barcelona), Manolete y
obra de Zawinul desfilan sus tiempos tas (Airto Moreira, Dom Um Romao, Adiós, y eso sin rozar ni por un momen-
de niñez como pastor de ovejas en Mino Cinelu, Alyrio Lima, Manolo Ba- to el flamenco jazz.
Austria; un poema tonal en el que se re- drena, entre ellos), pero lo que ha mar- A punto de cerrarse la pasada déca-
memora el entierro de su abuelo en un cado escuela ha sido el bajo. Por enci- da se produjo un marcado declive co-
pueblecito de alta montaña; las prime- ma de todos, Jaco Pastorius, incorpo- mercial y de aceptación en el rincón del
ras impresiones de Joe cuando llega a rado al grupo a partir del elepé Black jazz-rock que podríamos llamar clásico.
Nueva York, procedente de Francia, market (1976). Pastorius ha sido deter- El único grupo que siguió contando con
en los días de primera juventud. Un minante en el bajo eléctrico durante la marcado fervor popular sin perder su
disco denso y sugerente que entusias- última década, personalísimo; para al- garra experimental fue Weather Re-
ma a Miles Davis y le hace declarar: gunos, no sin exageración, casi un Jimi port. Pero la fórmula se ha agotado. Lo
"Para escribir esta clase de música de- Hendrix de las cuatro cuerdas. que ellos tardaron tres lustros en expri-
bes sentirte interiormente libre. Y tie- Entre los rasgos más característicos mir, un sonido peculiar, sus sucesores
nes que ser Joe Zawinul, con dos hijos y sobresalientes de la fusión propiciada in péciore, Steps Ahead, lo han dilapi-
color beis, una esposa negra, dos pia- por Shorter y Zawinul está su clara dado en menos de uno.
nos; tienes que ser originario de Viena, vinculación a las raíces del rhythm and El año pasado, Zawinul se paseaba
del signo Cáncer y estar libre de todo blues, sus devaneos con el tropicalismo con un remozado Weather Up Date,
cliché". que, a pesar de la sugerencia de su nó-
Era, pues, razonable esperar muy mina (Steve Khan a la guitarra, Victor
grandes cosas cuando Joe Zawinul y Bailey de bajista y Peter Erskine ante
Wayne Shorter se reúnen en 1971 para la batería), se mostraba falto de aliento
formar Weather Report. Para terminar con respecto a su ilustre antecesor.
de darle color al tema se asocian un ba- Shorter obliga. Y hablando de Shorter,
jista checo, Miroslav Vitous; un percu- HISTORIA DEL `ROCK' viaja ahora mismo con un terso quinte-
sionista brasileño, Airto Moreira, y el to en el que las funciones percutivas es-
rudo batería Alphonse Mouzon, de ori- PRÓXIMO CAPITULO tán a cargo de sendas damas, la bate-
gen antillano. Weather Report suele rista Terri Lyne Carrington y Marilyn
ser considerada, y con razón, la banda Mazur. Aquí, en ese pie negro de Wea-
más redonda e influyente deja década ther Report, sí queda todavía aliento
en que cuaja como subestilo autónomo para dar y vender.
A partir de 1970, con el éxito masivo de James Taylor y Ca-
role King, la figura del cantante que interpreta sus propias
canciones adquiere una creciente relevancia. En su mayoría
reflejan el clima espiritual de su generación en términos hu-
manistas; se habla del retorno al campo y de nuevos mode-
los de convivencia. Suelen ser músicos autodidactos, de for-
mación universitaria, que dan gran importancia al contenido
literario de sus composiciones, sin renunciar a los instru-
mentos eléctricos. Poco a poco, estos hijos de los Beatles y
de Bob Dylan amplían sus marcos de referencia y se acercan al jazz (Joni Mitchell,
en la foto), al country (John Denver), a los standards (Carly Simon) o a la música
negra, con desiguales resultados artisticos y comerciales.
COMPOSITORES
primeros años setenta, tanto por su música como
por la aureola de superviviente que rodeaba a James
Taylor y la imagen vitalista de su mujer. 28
"SABES QUE MI AMOR SIEMPRE ESTÁ ALLÍ PARA QUE TÚ LO
RECIBAS. / ADIÓS NO SIGNIFICA QUE ME HAYA IDO" (Carole King)
Jackson Browne, combinando música y sus obras, subiendo, cada vez con más fre-
política, es el arquetipo de cantante- cuencia, un piano al escenario, y mostrán-
compositor concienciado. donos sus rostros, jóvenes y guapos. Has-
ta el paisaje cambió. Del Greenwich Villa-
ge neoyorquino, con sus gélidos inviernos,
se pasó a las tibias aguas californianas.
Los grandes festivales dieron la alter-
nativa a gentes como Crosby, Stills y
Nash, o Melanie. A pesar de todo, eran
años de bienestar, en los que la felicidad
parecía estar al alcance de la mano. Entrá-
bamos en la era de Acuario. Sólo peque-
ñas tragedias personales alteraban esta
plácida situación. Por suerte o por desgra-
cia, las canciones, al interiorizarse, las re-
flejan. Un gran mensaje de amistad, You'-
ve got a friend (Has conseguido un amigo),
domina aquellos tiempos rutilantes. Todo
se resuelve de un modo civilizado, con una
sonrisa en la boca y una flor en el cabello.
Anteriormente, a mediados de los años
sesenta, cuando la cosa iba por otro lado,
había ciertos cantantes que ponían el
acento en cuestiones diferentes labrando
una obra más personal o, simplemente, no
encuadrada de lleno en los corsés habitua-
les. Uno de éstos era Tim Buckley, que ha-
bía publicado su primer álbum en 1966.
Otro personaje un tanto marginal a este
mundo era el canadiense Leonard Cohen,
Los seguidores del movimiento poeta y novelista, que un buen día, ven-
de los cantantes-compositores ciendo su natural timidez, se atrevió a gra-
estaban pendientes de los
líos amorosos de aquella gran
familia de gente guapa:
ENTE GUAPA bar. Si Buckley era el corazón y la sensibi-
lidad a flor de piel, Cohen, con su voz
sombría, era la cabeza y la ternura in-
Crosby, Stills, Nash, Young,
Joni Mitchell, James Taylor, CON CANCIONES terior.
En Nueva York, allá por 1967, había ya
Carly Simon, Carole King. Tras
cada encuentro o cada
despedida aparecía una buena
PROPIAS muchos cantantes que, desde el folk o des-
de fuera, buscaban ese algo más. Estaba
Laura Nyro, eterna precursora, que nunca
canción: El solitario, Judy MANUEL DOMÍNGUEZ alcanzó el triunfo anunciado. Estaba Janis
ojos azules, Casi me corto el La canción tradicional fue dejando paso, Ian, que irrumpió con la fuerza de sus 16
pelo, Willy, Ama a quien está en los años sesenta, a una canción de au años y de la canción Society's child. Tam-
contigo. En España se tor que poco a poco se hizo más intimista, bién a Arlo Guthrie y su Alice's restaurant,
comentaba con pasmo el por lo que perdió una gran parte de su car- y a Tim Hardin, en cuyo segundo elepé en-
hecho de que Joni Mitchell ga política. El corte no se produjo de una tregaba Lady carne from Baltimore e If I
hubiera estado tomando el manera brusca. La guerra de Vietnam tar- were a carpenter, convertida en éxito por
sol en una playa mediterránea, y daría aún varios años en concluir, y los hé- Bobby Darin. Desde Canadá llegaba una
provocaba cierto regocijo el roes de esta nueva generación se ocupa- canción que le abriría las puertas a su au-
rumor de que Graham Nash ron esporádicamente de los derechos hu- tor: Early morning rain, de Gordon Light-
hubiera perdido a su novia en manos, las matanzas, la energía nuclear y foot. Procedente de Irlanda, se traslada-
el Rastro madrileño. otros asuntos. ba a EE UU Van Morrison, quien, en se-
Recién estrenada la nueva década, la guida, colocaría muy alto el listón.
confluencia de dos estrellas causa un to- La década termina y los compositores
rrente de luz y color; una cascada de fue- se disponen a dar el salto. Crosby Stills &
gos artificiales que encandila con la evi- Nash preparan el camino. Habiendo per-
dencia de sus formas bellas y brillantes. tenecido a diversos grupos, se reúnen en
Con majestuosidad llegan las canciones un conjunto imposible en el que cada cual
de James Taylor y Carole King. Parece lleva su voz cantante, apoyado por los
como si hasta entonces los compositores otros dos. Durante algunos meses funcio-
no hubieran existido. Es una imagen tan
engañosa como la de los fuegos de artifi-
cio. La historia de la música popular mo-
derna está cimentada sobre sólidas can-
ciones que siempre tienen un nombre de-
trás. En los setenta estos compositores sa-
lieron a la luz. Se lanzaron a interpretar
"ENCUENTRA EL PRECIO DE LA LIBERTAD ENTERRADO EN EL SUELO. / MADRE
TIERRA TE TRAGARÁ, / HAZ QUE TU CUERPO DESCANSE" (Stephen Stills)
nará. Imponen, además de una imagen, Crosby, Stills y Nash fueron un nuevo
concepto de grupo: unir tres cantantes-
una música electroacústica, a medio cami- compositores bien definidos.
no entre el folk y el rock. Una música ama-
ble y fácil de escuchar. En los primeros
años setenta, en un irreal estado de ino-
cencia colectiva, llueven desde los cuatro
puntos cardinales canciones irradiando
amor, compañerismo, amistad e historias
más o menos tiernas. Sus protagonistas
son personajes públicos, predicadores del
amor. Tendrán un reinado breve, pero in-
tenso.
Califomia, tierra de promisión, ocupa
el primer punto de la rosa de los vientos.
Allí han establecido sus huestes Crosby y
compañía. Allí viven otros muchos, y los
que no, acuden a grabar a sus estudios. Ja-
mes Taylor, con la canción de Carole King
You've gol a frfend, se convierte en el sumo
sacerdote. Carole King, con una larga tra-
yectoria tras de sí, canta ahora sus com-
posiciones. Tapestry es su gran aldabona-
zo, que no podrá repetir. Carly Simon se
une al grupo afortunado con el You're so
vain (Eres tan creído), malévolamente dedi-
cado a Warren Beatty. Además, es la que xU
se casa con James Taylor.
En Hollywood, Randy Newman y Dory
Previn traen una nueva densidad literaria cidieron a poner su guitarra al servicio de
en canciones cargadas de intención. Los su propia música. Son tipos como J. J. Ca-
Angeles seguirá surtiendo artesanos de la le, con una forma única de entender las
canción, aunque el signo de los tiempos canciones; Ry Cooder, que va del folk al Kris Kristofferson realiza
cambie el arquetipo enunciado. Jackson blues pasando por el tex-mex; David un certero retrato de sus
Browne, Warren Zevon o Tom Waits im- Bromberg, con su disfraz de demonio. compañeros de canción en
primirán un sello muy personal en su obra. En el Reino Unido, donde elfolk no ha- estos versos: "Es un poeta, es
El área de Nueva York continuará bía llegado nunca a las cotas de politiza- un ladrón, / es un poeta, es
aportando gente, en gran parte crecida en ción de Estados Unidos -con las honro- un traficante, / es un peregrino
el ambiente folk; entre ellos, Don McLean, sas excepciones de Ewan McColl y Leon y un predicador, y un
cuyo American pie fue todo un hito -con Rosselson-, existía ya una tradición de problema cuando está
problemas de censura en España-, y brillantes compositores y cantantes, Bert fumado; / es una
Harry Chapín, que hilvanaba prodigiosas Jansch, Ralph McTell o Donovan, sin ir contradicción andante, / en
historias, y cuyo Taxi circula aún como más lejos. En los primeros setenta, la figu- parte real, en parte ficción, /
modelo a copiar. Una avioneta se llevó las ra estelar será Cat Stevens, que luego se que yerra todos los caminos en
esperanzas de una carrera brillante: la de convertirá al islam y abandonará la músi- l a solitaria ruta de regreso al
Jim Caroe. También de tierras del Norte ca. El otro gran autor es Al Stewart, que hogar".
(Illinois) proceden John Prine y Steve antes de alcanzar la popularidad ya había
Goodman. Este último, fallecido de leuce- dado muestras de su exquisito talento con
mia en 1984, pasará a la historia por su obras como Love chronicles, donde narra
City of New Orleans. sus correrías entre el sexo femenino desde
Resonancias vaqueras abundan en su más tierna infancia. Gerry Rafferty, Ri-
unos cuantos autores que ayudaron a en- chard Digance, Nick Drake, John Martyn,
grosar la lista: Kris Kristofferson (Me and Claire Hamill y Joan Armatrading com-
Boby McGee); Jerry Jeff Walker (Mr. Bo- pletan el plantel británico. En Francia, por
jangles); John Stewart (Cannons in the su parte, Georges Moustaki desarrolla
rain); Dan Fogelberg (Souvenirs); John con éxito una chanson con aires mediterrá-
Hartford (Gentle in my mind). Y en la pláci- neos. Maxime Leforestier permaneció
da Florida aparece una especie de cowboy algo más ortodoxo, e Yves Simon reflejó
de agua salada, Jimmy Buffet. en sus modos las enseñanzas del otro lado
A esta lista habría que añadir aquellos del Atlántico. Con los nuevos impulsos del
músicos de estudio que un buen día se de- rock y el pop la canción de autor ha atrave-
sado una larga bajamar. En estos últimos
años personajes como Michael Franks,
Steve Forbert y Suzanne Vega empiezan a
proliferar, mientras que estrellas como El-
vis Costello o Bruce Springsteen redescu-
bren, bajo nuevos planteamientos, el con-
cepto de cantante-compositor.
"A MEDIDA QUE DESGASTEMOS EL MUNDO MÁS Y MÁS, LA ECONOMÍA Y LA
ECOLOGÍA SE CONVERTIRÁN EN LA MISMA COSA" (James Taylor, 1979)
Jackson Browne fue el más lírico contiene material ya grabado por otros ar-
cronista de los avatares de la tistas y cuenta con un buenísimo elenco de
contracultura californiana. músicos de estudio. De estas fechas es su
colaboración con los Eagles. Glenn Frey
retocó un tema -Take it easy- que
Browne no terminaba de redondear y lle-
gó el primer fogonazo del éxito Eagles. La
colaboración se mantendría en posterio-
ACKSON BROWNE, res álbumes, y aunque la reputación de
Jackson Browne crecía espectacularmen-
te, no atinaba con igual densidad popular
LA COMPOSTURA en sus trabajos como artista solista. For
everyman (1973) cuenta ya con la partici-
pación de David Lindley, ex Kaleidosco-
ANTONIO DE MIGUEL pe, efectivo guitarrista y violinista, así
La carrera de Jackson Browne parece como con una estrella invitada bajo seu-
marcada por una burlona fatalidad. ¿Qué dónimo, Elton John. Late for the sky (1974)
pensar si no de un cantante-compositor se ampara en un concepto más unitario de
cuya mejor canción la llevan a la gloria banda. The pretender (1976), editado poco
otros artistas (Take it easy, Eagles) y cuyo después del suicidio de su esposa, lo pro-
mayor éxito popular es Stay, un tema no duce Jon Landau (representante de Bruce
escrito y casi no cantado por él. Jackson Springsteen). Son álbumes de brillante
Browne encaja las bromas del destino con decorado, en los que la música va comien-
relajada complacencia, y como en alguna do terreno a los textos y en los que Brow-
de sus canciones ha escrito, "nada sobre- ne desarrolla sus continuas interrogantes:
vive, sino el modo / en que vivimos nues- amor como elemento de prisión o salva-
tra vida". Jackson Browne ha huido siem- ción, esperanza de un mundo mejor o te-
pre del alboroto que exige la maquinaria mores apocalípticos, estrés de la ciudad o
del pop. Tímido, atractivo, excelente com- paz del campo...
I principio, las positor, limitado músico, visto como figu- Como resultado de una ambiciosa gira
canciones de Jackson Browne ra de culto por críticos y colegas, vivió sus mundial se publicó en 1978 Running on
atrajeron a personalidades de mejores momentos de popularidad entre empty, conteniendo temas ajenos y pro-
tan dispar horizonte como Nico, los años 1974 y 1979. pios y consiguiendo su único éxito de ven-
Johnny Rivers, Nitty Gritty Jackson Browne nació el 6 de octubre tas hasta el momento, gracias a una ver-
Dirt Band, Tom Rush, de 1949 en Heidelberg (República Federal sión de Stay, una composición de 1960 lle-
Hourglass, Eagles, Jackson de Alemania). A los tres años, la familia vada al éxito por The Zodiacs.
Five, Joe Cocker, lan Matthews, vuelve a Los Ángeles. Las primeras ganas Los pocos álbumes que desde entonces
Kiki Dee, Joni Mitchell o Joan de música se las contagió (casi se las im- han jalonado el discurrir de Jackson
Baez... Luego, recurriendo a un puso) su padre, apasionado deljazz y de la Browne por el rock le han resituado en su
tema ajeno, experimentó otra trompeta, que quería ver a su hijo conver- papel de talentoso compositor, algo mal-
sensación: vender millones de tido en un Louis Armstrong redivivo. La dito y bien adiestrado en el arte senequista
discos como solista. presión paterna no prosperó, y el boom del de la calma existencial.
folk en los años sesenta da a Browne sus
primeras señas de identidad. Pasa seis
meses con la Nitty Gritty Dirt Band, con-
sigue un contrato de compositor para la
editorial de Elektra e incluso graba una
maqueta con 30 canciones. Jackson Brow-
ne se había trasladado a Nueva York a
principios de 1967, y tuvo la suerte de
compartir con la cantante Nico el escena-
rio del club Dom, regentado por Andy
Warhol. Tres de sus temas figuran en
Chelsea girl, primer elepé de la hierática
alemana occidental. Unos problemillas
por posesión de marihuana y vuelta estra-
tégica a Los Ángeles. Participa en un frus-
trado experimento, Paxton Lodge, algo así
como una consciente reclusión paradisia-
ca de cantautores para concepción de re-
pertorio infalible, que había ideado un eje-
cutivo de Elektra, y conoce al emprende-
dor David Gefen, que planeaba la crea-
ción del sello Asylum y que se apresta a
ficharle.
Su primer álbum, Jackson Browne
(1971), que se edita en octubre de 1971,
"Y YO LE DIGO ADIÓS A AMÉRICA, / Y LE DOY UNA SONRISA
DE BIENVENIDA AL MUNDO" (Tim Buckley, 1967)
HIJOS DEL
SUEÑO AMERICANO
ÁLVARO FEITO
La doble revolución de los años sesenta
(la rebeldía ideológica expresada en pará-
metros poéticos y el inconformismo musi-
cal que preconizaron Dylan y The Beat-
les) posibilitó el nacimiento de una gene-
ración de reconcentrados cantautores.
Poco atraídos, en líneas generales, por la
fuerza y vitalidad del rock and roll, su mun-
do artístico estaba más cercano a la litera-
tura (beat generation, Norman Mailer), el
cine europeo (la nueva ola francesa, los ai-
rados británicos) y la tradición reciente del
folk-rock. Hubo entre ellos nombres fulgu-
rantes de un solo día (una sola década).
Predominó, sin embargo, un elevado tono
intelectual, una mirada crítica hacia la so-
ciedad circundante y una inspiración mu-
sical basada en acentos intimistas y senti-
mentales, algunas veces melancólicos.
Fue una pléyade de artistas que no acabó
de asumir la fábula del sueño americano,
pero que, en buena medida, acabó engulli-
do por ella.
mi
ha ido en aumento con el tiempo, aunque
Dan Fogelberg (1951). Fue estudiante de haya basado buena parte de su repertorio
artes plásticas en la universidad de Illi- en sus más queridos compositores: Hoyt
nois, su área nativa, antes de dedicarse a Axton, Goodman, Dylan, y su propio pa-
madre te dijo: la canción. Sus inicios fueron prometedo-
' Jovencito', en lugar de llamarte dre. Algunos álbumes: Hobo's Lullaby,
res: colaboró en obras de Eric Andersen, Last of the Brooklyn cowboys, Outlasting the
por tu nombre. / No quiso Roger McGuinn y Buffy St. Marie y actuó blues (con el grupo Shenandoah), En con-
dejarte entrar en casa. / Volvió como telonero de Van Morrison. Kenneth cierto (doble, con Pete Seeger). En el elepé
sus pasos sobre mí Buttrey y Norbert Putnam, dos leyendas Amigo dedicó un recuerdo-homenaje al
diciéndome: / ' Pero, querida, él de Nashville, le produjeron su disco ini- chileno Víctor Jara.
no es de la misma raza que cial: Home free. En la misma cuna del
nosotros'. / Y me prohibió que country and western volvió a reincidir, pro- Janis Ian (1951). Otra luminaria neoyor-
te volviese a ver. / No, yo no ducido ahora por el rockero Joe Walsh, quina, otra niña prodigio, compuso a los
quiero volverte a ver". con Souvenirs. Captured angel no hizo sino 15 años Society's child, conjurando los vi-
confirmar las expectativas. En los ochenta cios de las hipocresías en la vida actual. El
(Janla lan, Society's child.) acentuó la tónica de fino baladista y evo- mismísimo Murray the K, pinchadiscos
cador de atmósferas sutiles. encumbrado, alentó a tope la promoción
del primer disco de la joven artista. Una
Steve Forbert (1955). Probablemente el úl- gran cantidad de conciertos en universida-
timo de los folk-singers de toda una época: des y colegios fue el resultado, pero la es-
empezó a grabar en 1978. En Forbert en- trella no resistió por mucho tiempo. Reti-
contramos huellas de diversas maneras rada durante cuatro años, retornó en 1974
musicales (rock, pop, country, blues) ensam-
bladas con el espíritu de un estilo absolu-
tamente personal. Procedente de Misisipí,
instalado en Nueva York desde joven, ha
realizado un cuarteto de discos dificilmen-
te superable como tal: Alive on arrival;
Jackrabbit seim; Little Stevie Orbit y Steve
"Y CUANDO MUERA, CUANDO ME HAYA IDO, / NACERÁ OTRO NIÑO EN
NUESTRO MUNDO, / PARA SEGUIR ADELANTE" (Laura Nyro, 1966)
con nueva banda acompañante, canciones Laura Nyro realizó música muy
dramática, con textos enigmáticos y
más maduras y el mismo sentido de la fra- colores negroides.
gilidad y la inocencia. Notables discos ja-
lonaron esta segunda etapa: Stars, Bet-
ween the unes, Aftertones...
El
aunque siguió rodeándose de gente sol- complejas y sincréticas, de un sofisticado
ventes: Joni Mitchell, Ringo Starr, The hermetismo. Piece by piece, su más recien-
Supremes. te contribución, es un elegante ejemplo de revivalismo ha llegado
Por lo que respecta al contingente bri- ello. también al folk en los años
tánico, también contó con autores de gran ochenta. Teniendo siempre
categoría, de muy variada orientación es- Cat Stevens (1948). Después de una eta- como referencia la famosa
tilística. Aparte de personajes inclasifica- pa netamente pop, con títulos como I love década prodigiosa, una serie
bles como Roy Harper, éstos fueron los my dog y Matthew and son, así como hits de artistas (entre los que
nombres principales: para los Tremeloes y P. P. Arnold, este destacan los nombres
londinense de ascendencia balcánica rea- femeninos) ha vuelto su mirada
Joan Armatrading (1950). Esta morenita lizó una serie de álbumes supuestamente hacia una canción sencilla,
británica nació en St. Kitts, isla del Cari- conceptuales, repletos de cándida imagi- sensitiva, incorporando algunos
be. A los ocho años se trasladó a Birming- nería infantil y acústicas resonancias pos- aspectos de corrientes
ham, y un lustro más tarde comienza a hippies: Mona bone jakon, Tea for the tiller- sonoras contemporáneas.
componer y a cantar en público. Muy afi- man, Teaser and the firecat -el más inspi- Dentro de esta promisoria
cionada al jazz, varios de sus discos po- rado- y Catch bull at four fueron algunos tendencia hay que situar los
seen acentuadas connotaciones de ese gé- de sus aciertos. Convertido al islamismo, nombres de Phranc, Ferron y
nero. Ha vendido la nada despreciable ha abandonado la música casi por com- sobre todo de la neoyorquina
cantidad de siete millones de ejemplares pleto. Suzanne Vega. Por el lado
de elepés. A resaltar entre ellos: Secret, se- masculino, Peter Case y T-Bone
crets; To the limit; Me myself I; Walk under Al Stewart (1945). Este escocés tuvo ine- Burnett representan el deseo
ladders, y el más reciente Slide ofhand. Po- vitable influencia dylaniana en sus prime- de contar sentimientos con
see una voz febril y sinuosa, en la más ros años de advenedizo folk-singer. Versá- acompañamientos básicos.
pura línea de Nina Simone. til y experimentalista, en su primer elepé,
Bedsitter images (1967), introdujo una am-
John Martyn (1948). Inquieto e incisivo plia sección de cuerdas, hecho inusual por
guitarrista, cantante y compositor nacido, entonces. Escribió después sus devaneos
al igual que Al Stewart, en Glasgow, si sentimentales en Love chronicles y entró
con buen pie en la nueva década: Zero she
fl ies, Orange y Past, presente and future con-
solidaron su creciente fortuna y su paso a
los temas de contenido histórico. Pero fue
con Modern times y The year of the cat
cuando rompió definitivamente y traspasó
fronteras.
"NUESTRA MÚSICA RESISTIRÁ. LAS FUTURAS GENERACIONES ENTENDERÁN
QUE ÉRAMOS SERES HUMANOS LO MÁS AUTÉNTICOS POSIBLE" (G: Nash, 1983)
música; el resulta-
do es Everybody
knows this is now-
NEIL YOUNG, EL here (1969) y el
inicio de una fruc-
ÚLTIMO INCA tífera colabora-
ción. Con After the
goldrush (1970),
IGNACIO JULIÁ su espléndido ter-
Contradictorio y siempre cambiante, Neil cer elepé, llega la
Young es el perfecto paradigma del can- madurez; después
tautor, en su caso, eléctrico, que sublima vendrán el lanza-
sus inseguridades y anestesia sus más do- miento junto a
lorosas vivencias expresándolas en públi- Crosby, Stills y
co. Epiléptico y de carácter melancólico, Nash, y la consa-
cuando no abiertamente depresivo, este gración con Har-
canadiense alto, desgarbado y de maneras vest (1972), y la
algo torpes ha hecho un poco de todo para canción Heart of
escapar del encasillamiento al que se vio gold en el primer
sometido tras el éxito masivo de Crosby, puesto de las lis-
Stills, Nash and Young. Desde la separa- tas. Su recién ad-
ción de Buffalo Springfield, en 1968, ha quirida condición
sido folksinger siniestro, guitarrista heroi- de rock-star y la
co, defensor de la épica negativa del punk muerte por sobre-
y hasta arribista del techo. Sin olvidar su dosis de Danny
faceta secreta como cineasta. Su carrera Whitten, guita-
musical ha sido irregular, sistemáticamen- rrista de Crazy
te puntuada por altibajos y, sin embargo, Horse, le empu-
coherente. Mejores o peores, sus discos jan a realizar una
conforman una sincera autobiografia en serie de obras
sonido. descarnadas e in-
Hijo de un conocido periodista depor- quietantes. El ar-
tivo, nació el 12 de noviembre de 1945 en tista se resiste a
Toronto, Canadá. Tras pasar por el ukele- ser embalsamado
le y el banjo, encuentra en la guitarra un en vida. Son tres elepés sombríos donde se
sugerente caudal de posibilidades expresi- entierra definitivamente la utopía hippy
vas. Su ídolo de aquellos días es Hank desde la experiencia personal; tres pelda-
Marvin, de los Shadows. Poco después, ños de bajada que concluyen, tras Time fa- e interesa expresar lo que
las canciones de los Beatles le empujan a des away (1973) y On the beach (1974), en pasa por mi mente. No espero
transitar por varios conjuntos adolescen- el magistral Tonight's the night (1975): una que la gente escuche ml
tes de su ciudad, hasta que, a mediados de inspirada crónica de la desesperación ba- música a todas horas. A veces
los sesenta, viaja hasta Nueva York, don- ñada en vapores etílicos y visitada por el es demasiado intensa. Si
de conoce a Bruce Palmer, que le introdu- fantasma del amigo perdido. Las resta- quieres poner un disco a las
ce en los Mynah Birds de Rick James, gru- llantes guitarras de Zuma (1975) anuncian once de la mañana, no
po que grabará algunas maquetas para su recuperación. Sus siguientes discos in- pongas Tonight's the night. Pon
Motown, sin llegar a más. cluyen un digno apaño de sobras, Ameri- a los Doobie Brothers".
A principios de 1966 llegó a Los Ánge- can stars'n 'bars (1977); una recopilación
les con Palmer, y encuentra a Stephen más que sensata, el triple Decade (1978), y (No¡¡ Young.)
Stills, Richie Furay y Dewey Martin, a los una colección de temas de aires country,
que se unen para formar Buffalo Spring- Comes a time (1978).
field. Tras una atribulada trayectoria y Rust never sleeps (1979) es una nueva sor-
tres excelentes elepés, el grupo desaparece presa: en contadas ocasiones ha sabido un
y Neil se embarca en solitario. Su primer artista rock saltar de generación en genera-
trabajo (1968) descubre un músico ator- ción sin hacer el ridículo, como lo consigue
mentado, entre la paranoia y la autocom- aquí Neil Young invocando a Johnny Rot-
pasión. Para su segundo disco adopta al ten y extendiendo el muy original concepto
grupo Crazy Horse y le da un giro a su del elepé a una gira, un doble en vivo y una
película. Desde entonces, Young ha deam-
bulado sin rumbo, pasando del rockabilly al
techo y regresando a sus raíces sin lograr re-
sultados dignos de mención. No obstante, la
decadencia, por estéril que parezca, sigue
siendo parte de esa imagen completa que
siempre ha pretendido mostrarnos.
"HE LIMITADO EL NÚMERO DE COSAS QUE QUIERO HACER EN MI VIDA.
PERO QUIERO VIVIRLAS MÁS INTENSAMENTE QUE NUNCA" (Tim Buckley, 1974)
Unidos) como Willie Nelson, Billy Swan (en la foto) o Waylon Jennings. Entre unos y otros recuperan tanto la vertiente
lacrimógena como el lado más festivo del country, conectando con un público
juvenil y de pelos largos. La capital de la música vaquera, Nashville, terminaría
aceptando en sus estudios de grabación esa invasión de los valores del rock.
OUNTRY-ROCK'
cabecillas del country-rock se autodenominaron
forajidos para marcar sus distancias frente al
convencionalismo de Nashville. 29
"¿ESTÁS PREPARADO PARA EL CAMPO? / PORQUE YA ES
TIEMPO DE IR" (Nell Young, `Are you ready for the country?')
ÁGUILAS
CALIFORNIANAS
DAVID S. MORDOH
El desplome de la California hippy, nada
más entrar los setenta, fue un poco como
la caída del imperio romano. Tras la
muerte de Jimi Hendrix, Janis Joplin y Jim
Morrison, con los sueños de cambio con-
vertidos en pesadillas, el rock queda roto
como unidad cultural y pierde su papel de
portavoz generacional; se acabaron las
peregrinaciones a San Francisco. Esa
época de vacío es aprovechada por gente
agazapada en la sombra -mayormente,
músicos exentos de las lacras ideológicas
de la catástrofe- para intentar abrirse
camino. En Los Ángeles se reúnen los
Eagles en 1971.
Gente con experiencia: Don Henley to- 1974). La mano de su sustituto, Bill
caba la batería para Shilohs; Randy Meis- Szymczyk, se nota en el resultado final.
ner fue bajista de Poco; Bernie Leadon Canciones bien acabadas, profesionalidad
formó parte de la legendaria Dillard and hasta el último detalle, y nada de riesgos. a escena californiana
Clark Expedition, y Glenn Frey estuvo a Es la fórmula para entrar en las emisoras resurgió en los setenta y
las órdenes de, entre otros, Bo Diddley y americanas. Es el éxito. Así lo prueba The coincidió con el auge de
Bob Seger. Aparecen como grupo de best of my love, canción a la que siguen las Eagles. Se trataba de discos
acompañamiento de Linda Ronstadt. triunfales One of these nights, Lyin' eyes y pulcros y soleados, poco
Escuchando su primer trabajo, Eagles Take it to Che limit, estas últimas extraídas estridentes, normalmente de
(1972), nadie podía imaginar que se con- del disco One of these nights (1975). Pero a jóvenes compositores.
vertirían en uno de los conjuntos más ta- la consagración definitiva le falta ese pe- Gracias al aval económico de
quilleros del planeta. Es un disco agrada- queño empujón que viene en forma de las casas discográficas, se
ble, de guitarras cristalinas y voces en- Grandes éxitos (1976), demostrando, con rodeaban de experimentados
sambladas con maestría, fraguado sobre sus ocho millones de copias vendidas, que músicos de sesión del mundo
cimientos de country rock. Como les falta Eagles saben hacer magníficas canciones del country o del jazz; quedaba
mordiente en las composiciones más dispersas en elepés mediocres. así garantizada la calidad,
musculosas, destacan inmediatamente, Finalizando 1975, se marcha Bernie dependiendo las únicas
además del éxito Take it easy (escrita a Leadon. Para sustituirlo, fichaje de lujo: sorpresas de las
medias con Jackson Browne), los pasajes Joe Walsh. Guitarrista viril con amplia composiciones. Los diferentes
tranquilos. Lo mismo ocurre en 1973 con discografia bajo su nombre, tiene un histo- miembros de Eagles
su segundo elepé Desperado, el mejor de rial en el que destaca poderosamente la participaron en incontables
su carrera-, sólo que ahora han subsana- época pasada en el trío legendario James proyectos de aquellos días.
do algunos errores: entre las innumerables Gang. Aporta más bien poco, aunque es lo
gozadas melódicas se pueden también en- suficientemente polivalente -los teclados
contrar guitarras afiladas dispuestas a en- de New kid in tocan, por ejemplo- como
trar en combate. Lo produce, al igual que para no defraudar.
el anterior, Glyn Johns. Hotel California (1977) marca la cúspi-
El disco, sin embargo, fracasa comer- de -más de diez millones de discos ven-
cialmente. Presionados por tal inoperan- didos-. Tras él, un declinar lento que se
cia, adoptan medidas drásticas con la in- esboza con The long run -Tim Schmidt,
clusión de un tercer guitarrista -Don de Poco, entra por Randy Meisner- has-
Felder- y el despido de Johns a mitad de ta concretarse en 1980 con el doble Live.
grabación del tercer disco (On the border, Eagles habían intentado evolucionar, in-
cluso probaron algo de soul, pero éste no
era exactamente el problema. En algún lu-
gar del camino que lleva de la mansión al
banco, perdieron la inspiración. Y ni los
esporádicos éxitos de alguno de sus miem-
bros en solitario consigue, en la actuali-
dad, pellizcar la fibra de la añoranza.
"ME FUI DE POCO PORQUE ESTABA CONSIGUIENDO MUCHO
PRESTIGIO, PERO NADA DE DINERO" (Jim Messina)
Rita Coolidge y Kris Kristofferson los años setenta las coyunturas dieron una
contribuyeron a renovar el ambiente prolífica producción a todo tipo de mari-
de Nashville, capital del country. dajes sonoros que tuvieran el rock como
bandera.
El country-rock tuvo más razón de ser
(por génesis y realidad social) que otras
fusiones, en cambio, más perdurables. El
género no contiene elementos de fascina-
ción ni de intelectualismo, ni antes ni aho-
ra, careciendo también de la parafernalia
culturalista de otras formas mistificantes
del rock progresivo; eso sí, ha sido un re-
trato en polaroid de una música instantá-
nea, divertida, contagiosa, de rancias cos-
tumbres y dispuesta a fecundarse de san-
gre joven.
Área Code 615. Supergrupo de los más co-
tizados y omnipresentes sesioneros de
Nashville: Mac Gaydon (guitarra), Nor-
bert Putnam (bajo), Wayne Moss (guita-
rra), Bobby Thompson (banjo), Buddy
Spicher (violín), Weldon Myrick (pedal
steel), Charlie McCoy (armónica), David
Briggs (teclados) y Kenny Buttrey (bate-
ría). Concebida como banda de estudio,
grabaron dos elepés entre 1970 y 1971,
combinando vigorosamente sus raíces
country con recreaciones de Dylan y los
Beatles. Varios de ellos siguieron unidos
bajo el nombre de Barefoot Jerry, pero el
trabajo asalariado para discos de otros ar-
tistas les cercenaba toda posibilidad de
vuelo autonómico. Un grupo excesiva-
mente perfecto.
Asleep at the Wheel. Lo que empezó sien-
do un modesto trío que ensayaba en una
granja de Virginia Occidental se convirtió
en un quinteto que buscaba la fama en
San Francisco y terminó como una big-
band de hasta 11 miembros, asentada defi-
En pleno furor nitivamente en Austin (Tejas). El primer
comercial de cadencias country disco llegó en 1973, ya con Chris O'Con-
se dieron a conocer algunas nell de vocalista. Cambiaron de casa dis-
bandas pop -America, Bread, A COSECHA DEL cográfica tanto como de formación, y se
Brewer & Shipley, Seals & caracterizaron por fusionar country, rock y
Croft- que utilizaban `COUNTRY-ROCK' jazz con singular desparpajo. Su lugar pre-
pequeñas dosis de folk y ferido de actuación fueron los jolgoriosos
country, más como condimento ANTONIO DE MIGUEL bares de country. Muy recomendables sus
efectista que como materia Country, pero rock. Armonías vocales, elepés Wheelin' and dealin' (1976) y Wheel
prima real. Casi todas ellas pero instrumentación caliente; ritmo rápi- (1977).
alcanzaron varios éxitos a do, pero dulce; tradición, pero evolu-
golpe de mesura y ción... Finalidad última: pasarlo bien con Commander Cody and bis Lost Planet Air-
blandenguería. Fueron parte una música que se oye con la misma facili- men. Desde primeros del año 1967, Geor-
de lo que se llamó el soft-rock. dad con que se bebe una cerveza. El coun- ge Frayne, alias Commander Cody (piano),
try-rock ha dado a la historia del pop una y John Tichy (guitarra) aglutinaron en tor-
larga lista de compositores, una brisa de no suyo diversos músicos de soul y country
amabilidad e intrascendencia y un buen que se tomaban la música como una bro-
ramillete de canciones éxitos de venta. ma de fin de semana. La variable banda
Bien es cierto que, salvo media docena de
nombres, sus protagonistas no resistirían
una criba si buscáramos una elite de im-
prescindibles figuras rock. Y también es
verdad que el country-rock se observa hoy
con similar efecto al de un lancero bengalí
en medio de una estación nuclear; pero en
"LA EMISORA DE MÚSICA 'COUNTRY' SUENA SUAVE, / PERO NO HAY
NINGÚN MOTIVO PARA APAGARLA" ('Visions of Johanna', Bob Dylan, 1966)
tenía por sede Detroit, y no se fue estabili- Linda Ronstadt ha realizado una
zando hasta que entraron en ella tipos i nsólita carrera, que va desde el country
como Bill Kirchen (guitarra), Andy Stein hasta las canciones del Tin Pan Alley.
(violín, saxo) o Billy C. Farlow (voz). En podían variar,
1969 deciden convertirse en la banda pero la perenne
country-hippie de San Francisco, y es allí dirección de Da-
donde comienza su leyenda discográfica niels era férrea,
con Lost in the ozone (1971). Todos sus dis- muy apegada al
cos fueron baratos de presupuesto (el se- rock, gustosa de
gundo costó 5.000 dólares y se grabó en lanzarse a mara-
cuatro pistas), escasos en tiempos de tra- tonianas giras y
bajo, imperfectos; pero con una esponta- con una envidia-
neidad, un saltarse las reglas de lo conven- ble disciplina a la
cional, que en seguida les granjeó amplias hora de com-
simpatías de un público ecléctico. Se di- poner.
solvieron en 1976, después de seis diverti-
dos álbumes y un último en directo, testa- Joe Ely. Una de-
mento de su valiosa aportación al country- vastadora mezcla
rock sin almíbares (We've got a live one de tex-mex, coun-
here). try, blues, rocka-
billy y honky-rock.
Rita Coolidge. Nacida en Nashville (1944). Joe Ely es un fo-
Leon Russell la bautizó cariñosamente rajido hispano del
como Delta Lady. Trabajó como cantante sonido más fron-
de coro en iglesias, hizo tímidas aparicio- terizo. Admirado
nes como solista de grupos (The Moon- y reclamado
pies) y lució su voz de lujoso acompaña- como artista invi-
miento para Delaney and Bonnie, Joe Co- tado en varias gi-
cker, Stephen Stills o Eric Clapton (entre ras por los
otros cientos). Su primer disco se edita en Cramps y los
1971, con el sello A&M, compañía ideal Clash, sus traba-
para sus relajados trabajos, de limpio aro- jos han dejado
ma country, versiones de estándares y bri- atrás el gorro va-
llante entretejido musical. Pureza y finura quero y las pro-
a prueba de exigentes. Mientras estuvo ducciones de
casada con Kris Kristofferson, grabó con Chip Young para
él varios elepés, incidiendo en una fórmula encarar los tiem-
tan country como son los duetos. Con la pos vertiginosos
Coolidge no es cuestión de resaltar algu- que nos acechan
nos de sus discos sobre otros; todos son en álbumes como
algodonosos y de espléndidos recursos vo- Live shots (1980) y Musta notta gotta lotta
cales. (1981). Un chico inquieto, que experi-
menta últimamente con los sintetiza-
Charlie Daniels Band. El corpulento Char- dores. Fueron legión los
lie Daniels (guitarra y violín) empezó a ser cantantes puristas de country
conocido cuando, de su Carolina del Nor- Emmyloa Harris. Nacida en Birmingham (casi todos ellos asentados en
te natal, se trasladó a Nashville, en 1967, (Alabama) en 1949. Después de patearse l a meca Nashville) que se
para tocar en discos de Flatt and Scruggs, todos los clubes de folk de Nueva York, l anzaron a flirtear con el pop y
Pete Seeger, Ringo Starr y Bob Dylan, o Gram Parsons se la lleva a Los Ángeles, y el rock de una forma esporádica
para escribir canciones que interpretaron el idilio se junta con la profesión en esos o persistente, según
Elvis Presley, Tammy Wynette, etcétera. dos elepés que Gram nos dejó antes de su capacidades: Dolly Parton, Don
En 1971 le ofrecen un contrato discográfi- muerte. Emmylou se erige en albacea de Williama. Glen Campell
co y funda la Charlie Daniels Band, con sus geniales intuiciones country-rock y a la Tanya Tucker, Cristal Gayle,
Joel di Gregorio (teclados), Fred Edwards necrófila sombra del héroe encarrilará su Freddy Fender, Larry Gatlin.
(batería), Barry Barnes (guitarra), Mark trayectoria solista. Pieces of the sky (1975), El crossover los atrajo para
Fitzgerald (bajo) y Gary Allen (batería), Elite hotel (1976) y Luxury liner (1977) extender su popularidad
sólida formación al estilo sureño que im- compensan las baladas con los arranques entre un público joven que los
primió una compacta serie de álbumes: rockeros de sus fabulosos músicos (la Hot desconocía. El rey de la
Fire on the mountain, Nightrider, Saddle Band). Se casa en 1977 con su productor, edulcorancia country pop es
tramp, Uneasy rider... Algunos miembros Brian Ahern, y los años ochenta traen a Kenny Rogers.
una Emmylou más sosa de imagen, sin la
finura sexy de las primeras carpetas, más
centrada en el country de salón, demasia-
do seria.
Kristofen.Nacd1936 Kris
Brownsville (Tejas). Vida azarosa y nove-
"LOS TIPOS DE NASHVILLE TOCAN TAN LIMPIO COMO EL AGUA DEL CAMPO,
TAN FRESCO COMO EL ROCÍO DE LA MONTAÑA" ('Nashville cats', John Sebastian, 1966)
producirían cambios de personal y se des- Buddy Cage, de los New Riders of the
crubiría una especial tensión entre los di- Purple Sege, con un instrumento básico
versos gustos de cada músico. Poco pre- del country: la steel guitar.
tendieron hacer un country-rock elabora-
do, algo trascendente, en el que Furay te-
nía un papel mesiánico y que no consiguió
todo el éxito que se presagiaba para la
banda. Pickin' up the pieces, Deliverink,
From the incide o A good feelin' to know for-
man parte de esta búsqueda atractiva y no
siempre acoplada. Guando Furay se va, en
1973, Poco queda formado por Paul Co-
tton (guitarra), Tim Schmitt (bajo), Rusty
Young (pedal steel) y Grantham (batería).
Con menos egomanías, la banda funciona
mucho mejor, más esquemática y más di-
recta en sus planteamientos: así van lle-
gando Cantamos, Head over heels y el po-
pularísimo, casi estándar ya, Rose of Ci-
marron (1976). Fantásticas voces, engra-
naje sereno de los dos compositores (Co-
tton y Young) y una altura musical de mu-
chos brillos pop.
LA ASCENSIÓN
AL CIELO DE
GRAM PARSONS
J. MARTA REY
Gram Parsons creó Flying Burrito
Bros. Los contagió de su visión: un
country renovador que llevara al oyente
tradicional la insurrección de los tiem-
pos y al hippy a las raíces. Frágil y tími-
do, su agitada biografia lo convirtió en
mártir de lujo. Hoy, mientras sus com-
pañeros de viaje se apolillan como reli-
quias, su leyenda crece entre genera-
ciones que aún llevaban pañales cuan-
do él vivió.
Los Byrds se apuntaron la inaugura-
ción oficial del country-rock. Pero los
Burrito escribieron las más gloriosas
páginas del género. En ambos casos fue
Parsons el responsable. Tenía una voz
de ángel triste que encarnaba con per-
versa ironía y sentimiento su íntimo ternational Submarine Band en Los su segundo, Burrito deluxe (1970), Mi-
conflicto: un chico bien, atrapado entre Ángeles. Allí su seducción personal lo chael Clarke (otro ex Byrd) ocupa los
el sur profundo y cristiano y los excesos introduce en Hollywood. Intima con tambores y Bernie Leadon (futuro Ea-
de la ciudad del pecado. Sin él el grupo Brandon de Wilde (el niño-actor de gle) la guitarra. Un accidente de moto
pasó a ser uno de tantos imitadores del Raíces profundas), que ayuda al cuarte- aparta a Parsons de la escena. Cuando
estilo que ellos iniciaron. to en su disco inicial, aún inédito: las el disco sale ya no está con ellos: es
Fueron los primeros cowboys eléc- cintas desaparecieron. ahora inseparable de Keith Richard, el
tricos. Su mentolada simbiosis de imá- Siguen dos singles (uno de ellos guitarrista de los Rolling Stones. Son
genes hippies de honky tonk hipodérmi- tema central del filme Que vienen los ru- tiempos de pendiente por las drogas
co y repesca de la tradición camionera sos), una aparición peliculera (The trip) duras, viajes sin fondo que afloran más
supusieron un reto adelantado a su y el álbum Safe at home, verdadero tarde en sus dos únicos y transidos dis-
tiempo. Para el público vaquero eran debú del country-rock, aunque nadie lle- cos individuales: G. P. (1973), y el pós-
sólo otros hippies greñudos. Para el de gó a enterarse. Con los Byrds registra tumo, Grievous angel (1974). Ambos,
rock, en una época radical, aquello era Sweetheart of the rodeo (1968). Pero, junto a su musa particular, Emmylou
country, el odiado estandarte del con- algo engreído, exige destacar su nom- Harris.
servadurismo nacional. Cuando los bre sobre el del grupo. Finalmente los Rick Roberts lo sustituye. Le suce-
Burrito aparecieron con aquellos flori- abandona a los tres meses, negándose den deserciones y reemplazos, inclu-
dos trajes de Roy Rogers endominga- a tocar en la racista Suráfrica. Al regre- yendo a miembros de Country Gazette,
do de Hollywood en su primera porta- so, Chris Hillman le sigue. cuyo sonido blue-grass domina final-
da, fue demasiado. Nadie los aceptó; Parsons y Hillman reúnen en los mente. Los Burrito aguantan dos dis-
años más tarde eran el modelo más Flying Burrito Bros. a músicos de estu- cos más, y se disuelven en 1971, cuan-
i mitado. Sencillamente, habían cons- dio como Chris Ethridge (bajo), do Hillman y Al Perkins se unen a Ma-
truido el sonido californiano de la pró- Sneeky Pete Kleinow (steel guitar) y un nassas. En 1974, Kleinow y el violinista
xima década. desfile de baterías. Sorprenden al mun- Gib Guilbeau retoman el nombre,
El suicidio de su padre -cantautor do con Gilded palace of sin (1969). Para manteniéndolo en vulgar actividad
country- marcaría la fijación musical hasta la fecha.
de Parsons. Nacido Cecil Connor en El 19 de septiembre de 1973 Par-
Winterhaven (Florida) en 1946, creció sons es encontrado muerto en el desier-
en Georgia. Adoptado por un acomo- to cercano a Los Ángeles. En su sangre
dado padrastro, cambia de nombre y HISTORIA DEL `ROCK' hay rastros de morfina, cocaína y alco-
domicilio (a Nueva Orleans), pero se hol. Unos días después, su compinche
fuga de casa. Deambula por Nueva y empresario Phil Kaufman secuestra
York antes de formar los Shilohs PRóXIMO CAPITULO el féretro camino de su familia (en Nue-
(1964), aspirantes a Kingston Trio. En va Orleans) y quema sus restos en el lu-
1965 ingresa en la universidad de Har- gar de la muerte, cumpliendo así los de-
vard, que abandona para montar su In- 'ROCK' SUREÑO seos del difunto.
HISTORIA DEL `ROCK'
El fértil sur de Estados Unidos, que ha incubado
eljazz, el blues, el rockabilly o el soul, se puebla en
los años setenta de grupos hirsutos que combi-
nan las especialidades musicales de la región y
abanderan una renovación de las costumbres.
La Allman Brothers Band cumple la función de
rompehielos, y logra devolver la confianza en si
mismos y el orgullo a sus paisanos. Esa misma
época ve la eclosión de otros movimientos sonoros de la zona: el rock del pantano,
con veteranos como Dr. John (en la foto), y los outlaws (renovadores del country).
Es el renacimiento musical de un territorio hasta entonces marginado por la in-
dustria del rock.
Lynyrd Skynyrd defendía como Han cambiado las cosas. En los sesen-
grupo las esencias más rancias ta, cualquier muchacho sureño que se des-
de la cultura sureña. viaba de la normalidad tenía que enfren-
tarse a las consecuencias o emigrar
-caso de Janis Joplin- a climas más to-
lerantes. Así, gentes como los hermanos
Allman toman esa ruta de fuga, pero des-
cubren que California no es el paraíso pro-
metido y vuelven a su tierra. Allí crean nú-
cleos de resistencia en los que experimen-
tan con nuevos estilos de vida: la sensa-
ción de estar rodeados fortalece su música
y sus convicciones. Se desarrolla un pro-
fundo sentido de la hermandad, el ácido
crea un curioso misticismo, se celebran los
excesos como reacción al ambiente purita-
no y represivo. Es el germen del rock su-
reño.
Doble lucha. En casa tienen que luchar
para que sea aceptada su diferencia. Cara
al exterior deben afirmar su orgullo de ori-
gen ante unos medios y una industria que
les miran por encima del hombro. Son los
Allman Brothers los responsables de
obrar el milagro: tras ganarse al público
sureño, conquistan el respeto de las me-
trópolis con música enfebrecida. Les ayu-
dan los buenos contactos de Phil Walden,
su mentor y director del sello Capricorn.
Ese modelo de ascensión será repetido en
años posteriores por infinidad de grupos
de la zona, que hacen gala de sus raíces,
buscan la identificación con sus seguido-
res y exhiben gran facilidad para crear
música festiva.
Con un paisano instalado en la Casa
Blanca, el sonido del Sur vive años de
prosperidad. Pero está descabezado: la
El
desintegración de los Allman Brothers re-
vela los conflictos entre los ideales origi-
nales y una realidad cambiante. Sus here-
rock sureño es una deros se hacen más chovinistas, buscan
síntesis de elementos diversos. complacer los oídos masivos y caen en la
Del gospel toma su fuerza
i nterior y carácter comunitario. EBELION EN LA reiteración. Aunque no se extingue el mer-
cado del boogie bullicioso -atendidos por
Con el blues, sus guitarras unos ZZ Top que saben dosificarse y cam-
cantan y gimen. El country
aporta sentimentalismo,
CONFEDERACIÓN biar de chasis-, el rock del Sur cae en
descrédito. Coincide prácticamente la ig-
mientras que el soul DIEGO A. MANRIQUE nominiosa derrota de Carter a manos de
proporciona vitalidad. Una noche de 1974, la mansión del gober- Ronald Reagan con la bancarrota del sello
I nspirados por los grupos nador de Georgia recibe a unos desacos- Capricorn.
británicos y californianos, tumbrados visitantes: Bob Dylan, que Hay una posdata feliz. Aunque los tem-
desarrollan esas bases en acaba de dar un concierto, llega acompa- blores del punk y la nueva ola llegan tarde,
i mprovisaciones exaltadas: ñado por músicos locales. El gobernador, los ochenta han visto otros grupos sure-
l os mejores discos combinan vestido con pantalones vaqueros, los reci- ños. Son los hermanos menores de los
ese impulso aventurero con be amistosamente y mantienen una charla muchachos que iban a fumar marihuana a
una sólida asimilación de la hasta las tantas. El político en cuestión al- la tumba de Duane Allman, en busca de
herencia sonora del Sur. canzará dimensiones internacionales no se sabe qué revelación. El grupo para-
poco después: se llama Jimmy Carter. Y el digmático es actualmente REM; aunque
mismo hecho de que se celebre tal encuen- alejados de los esquemas de sus anteceso-
tro evidencia que el sur de Estados Uni- res, maduran con igual individualismo y
dos ya no es ese territorio hostil a las tri- modestia en un suelo especialmente fe-
bus contraculturales que se podría dedu- cundo.
cir de películas como Easy rider (1969),
donde brutales paletos acaban a tiros con
los hippies californianos que han osado ho-
llar sus carreteras.
"QUIERO A ESTE GUITARRISTA, PRESENTÁDMELO. ¿CÓMO
CONSIGUE TOCAR ASÍ?" (Eric Clapton, antes de grabar 'Layla' junto a Duane Allman)
mermó calidad. No pasaron nunca de esa Leon Russell impulsó el rock sureño
serie B en la que parecían encontrarse con el sello Shelter y colaborando con
muy a gusto. Su fichaje por Capricorn en Clapton o J. Cocker.
1977 coincide con una reestructuración ría), Bill Payne (te-
general de la banda y con el sometimiento clados) y Ritchie
de Dandy a un refinamiento vocal de éxito Hayward (batería).
que dio como resultado su mejor disco, Los dos primeros ha-
Race with the devil. bían participado en
discos de Zappa,
Johnny van Zant Band. Tercer eslabón de aunque Little Feat
la saga Van Zant (los otros dos son Ron- no nacía con intere-
nie, de Lynyrd Skynyrd, y Donnie, de 38 ses minoritarios. Sus
Special). En su Jacksonville natal, y ya elepés iniciales que-
desde los 16 años, Johnny formó un ilusio- daron sólo para de-
nado grupo para tocar en bares y clubes gustadores de lo ex-
locales. Hacen tres álbumes en los albores quisito. Con el cam-
de los ochenta, el primero de ellos produ- bio de Estrada por
cido por Al Kooper. En 1985, reduciendo tres músicos -Paul
su nombre a Van Zant, graban un álbum Barrere, Ken Grad-
homónimo, hard-rock de muchos grados ney y Sam Clayton-
pero de discutible imaginación. el grupo grabó otro
disco, de coleccionis-
Leon Russell (1941). Nombre sagrado de tas: Dixie chicken
la historia del rock. Cantante, multiinstru- (1973). Siempre ace-
mentista, arreglador, compositor, produc- chados por la sepa-
tor y ejecutivo, Russell es una personali- ración, tentados ha-
dad volcánica, amplio conocedor del rock cia buenas remune-
como arte y como negocio, siempre dis- raciones como sesio-
puesto a embarcarse en aventuras a las neros, Little Feat
que él termina dando su temperamental continuó destilando
sello. Nació en Lawton (Oklahoma), y ha su jugoso rock, teñi-
desarrollado su carrera en California. Por do de soul y músculo,
sus dedos han pasado todos los instru- en álbumes de mayor
mentos pensables y él ha pasado por los repercusión comer-
discos de muchísima gente. Aparte de ser cial, como Feats,
elegido por Phil Spector como músico de Don't fail me now (1974), The last record al-
sesión fijo, su mayor fama la consiguió bum (1975) o el suculento Waiting for Co-
como alma-mater de los Mad Dogs y En- lumbus (1978). Una historia discográfica
glishmen, que acompañaron a Joe Cocker rebosante de matices y sazonada agria- ¡ en, oí a Mr. Young
en 1970. Creó su estudio de grabación, y mente por el hálito de la maldición. cantando de ella. / Bien, oí al
dirigió dos compañías discográficas (Shel- viejo Neil degradándola. /
ter y Paradise), es respetado por seguido- Lynyrd Skynyrd. Su origen se remonta a Bien, espero que Neil Young
res y músicos del blues, el rock, del soul, del 1964, cuando Ronnie van Zant (voz) se recordará / que un sureño no
country y del pop, y su aspecto de noble alía a Allen Collins y Gary Rossington, l e necesita merodeando por
medieval esconde a un cálido maestro de guitarristas y alumnos del mismo instituto aquí. / Dulce hogar,
todas las formas musicales. Como solista que Ronnie en Jacksonville. Dice la leyen- Alabama, / donde el cielo está
se pueden destacar sus elepés Carney da que LS es la derivación del nombre de azul. / Dulce hogar,
(1972) y el triple Live (1973). Un genio de un profesor de gimnasia que les traía fritos Alabama. / Señor, regreso a
carne y hueso. por la longitud de sus cabellos. Con la in- casa por ti".
corporación de Ed King (guitarra), Leon
Little Feat. Banda de culto, aclamada por Wilkeson (bajo), Billy Powell (teclados) y (Lynyrd Skynyrd, Sweet
críticos y gourmets, su tenacidad les pro- Bob Bums (batería) se dispusieron a gra- home, Alabama, 1974.)
porcionó un cierto éxito en sus años fina- bar en 1972 su primer disco, Pronounced
les, y pagaron el pasaparte a la inmortali- leh-nerd skin-nerd, bajo el patronazgo de
dad con la desaparición de su líder, Lowell su descubridor, Al Kooper. Inmediata-
George, en 1979. Californianos, es de ley mente la banda empezó a enseñar sus afi-
incluirlos en este diccionario por su soni- ladas uñas sureñas. LS se convirtió en la
do. La banda se formó en 1970, con Lo- publicidad rockera del orgullo sureño:
well George (guitarra), Roy Estrada (bate- banderas confederadas, altivez surfista,
elogios a políticos tan reaccionarios como
George Wallace, letras batalladoras, pero,
eso sí, una magistral facilidad para pro-
yectar convincente boogie-rock, sin que fal -
ten los mejores trucos para llevarse a la
audiencia al huerto (entradas espectacula-
res de guitarras, voces bien moduladas so-
bre estribillos básicos). Así lo hicieron en
"SOMOS TIPOS NORMALES DEL SUR. N I ESTAMOS ORGULLOSOS NI AVERGONZADOS.
Y AQUÍ NO HAY SUPERESTRELLAS. SOMOS GENTE DE LA CALLE" (D. Allman)
EFLUVIOS
DEL PANTANO
DIEGO A. MANRIQUE
Los Estados sureños, humillados por la
historia y reducidos durante décadas a pa-
tio trasero del sueño norteamericano,
cuentan, sin embargo, con la principal re-
serva de leyendas estadounidenses. Una
mitología que ha alimentado literatura y
cine con sus evocaciones de un pasado
atormentado. Y en el corazón metafórico
del Sur, los tenebrosos pantanos de Luisia-
na. Tierras inhóspitas donde no penetra ni
el sol ni la civilización, habitada por ariscos
personajes aferrados a costumbres primiti-
vas que a veces -los cajuns, descendientes
de emigrantes franceses expulsados de Ca-
nadá- ni siquiera hablan inglés. Es el
mundo del pantano, bayou o swamp.
Lo de swamp rock fue una ocurrencia
del productor Jerry Wexler para agrupar
una serie de grabaciones de finales de los
sesenta que esbozaban el universo mítico
de los pantanos sobre agrestes fondos so-
noros. Algunos de los autores -los cali-
fornianos Creedence Clearwater Revi-
val- no habían puesto los pies en aque-
llos parajes; sin embargo, captaron sus di-
mensiones fabulosas, con barcos de rue-
das, misteriosas supersticiones y pesadi-
llas de agua podrida. Por el contrario,
Tony Joe White era un nativo de Luisiana
y sus historias tenían un mayor realismo:
Polk Salad Annie, Roosevelt and Ira Lee o
Rainy night in Georgia transportaban al
oyente a una sociedad encerrada en su mi- cas rurales. Muchas de las grabaciones
seria y sus fantasmas. pantanosas tuvieron como protagonistas a
El rock del pantano era enjuto en instru- un núcleo de intérpretes de la lejana
mentación y pesado en ritmo, empapado Oklahoma. Habitantes del submundo de Aparecen ecos del
de gospel, blues, soul y otras olorosas rece- los estudios de Los Ángeles se dieron a co- pantano en grabaciones de
tas propias de Luisiana. Había margen nocer como soporte instrumental del dúo artistas tan dispares como
para el delirio: Mac Rebennack, músico Delaney and Bonnie, una agrupación que Freddy Fender y los Neville
de los años cincuenta, reapareció en 1968 influyó decisivamente sobre Eric Clapton, Brothers. El primero es un
como Dr. John Creaux the Night Tripper, Joe Cocker, George Harrison, Mick Jag- cantante country de origen
gran sacerdote del vudú psicodélico de ger y otros famosos británicos. Entre los hispano que graba bajo la
Nueva Orleans. Al otro extremo, Joe amigos de la pareja estaban el prolífico tutela de Huey Meaux,
South añadía comentarios sociales a sus Leon Russell y un esquivo personaje lla- productor con extensas
daguerrotipos sureños en piezas como mado J. J. Cale; sus canciones encajaban credenciales. Por el lado negro,
Down in the boondocks, Games people play o en las quimeras del Sur profundo. los hermanos Neville han
Walk a mile in my shoes. Nunca fue una etiqueta vendedora lo desarrollado su bayou funk en
Para otros, el swamp rock servía de ex- de swamp rock, aunque ahora vuelva a re- sabrosos discos que
cusa para desatar una imaginación ali- surgir en discos de Nick Cave, Gun Club y actualizan los aires de Nueva
mentada por la escucha de vetustas músi- otros exploradores de rincones oscuros. Orleans.
Mientras, los auténticos pantanos de Lui-
siana siguen viviendo a ritmo lento; con
raras excepciones -la última fue My toot-
toot, de Rockin' Sidney, en 1985-, los so-
nes del cajun y el zydeco no traspasan la
espesa frontera vegetal del bayou.
"EN TEJAS, UNA BUENA NOCHE DEL SÁBADO DURA HASTA EL LUNES. ASÍ
QUE TIENES QUE TENER AGUANTE. Y ESO SE NOTA EN LA MÚSICA" (Billy Gibbons)
ZZ TOP
J. MARTA REY
Los reyes del boogie-metal. Imprevisi-
bles y extravagantes, Z Z Top ondean
las barbas más disparatadas del rock.
Su inconfundible estampa de cowboys
ricachos (sombreros Stetson y trajes
bordados), contrapuesta por anacróni-
cas y luengas barbas de pope ortodoxo,
es casi más popular que su millonaria
gastronomía sureña: blues-rock caliente
y autopistas eléctricas.
Pese a su tremenda fama siempre
han esquivado los relampagueos de so-
ciedad. Remisos a servir de plancton ga- nacotecas y arte moderno, que forma raje, como los Warlocks, mutados en
cetillero, prefieren la reclusión familiar parte del consejo patrocinador del Mu- American Blues, un grupo que se teñía
de su Tejas cuando se lo permiten sus seo de Houston. Lo que no contrarres- el pelo de azul. Tras un single indepen-
abultadas giras. Aún en activo, con más ta aficiones más prosaicas: el coleccio- diente y dos álbumes de presentación,
éxito si cabe, son hoy los únicos supervi- nismo de coches. Vive en una casa de el éxito de La Grange (1974) y su elepé
vientes del añejo esplendor del rock su- medio millón de dólares que, para fasti- Tres hombres (1973) los establece entre
reño. ¿Su secreto?: evitar la quema del dio de sus infelices invitados, mantiene públicos diversos. Gracias a su mortí-
primer plano de actualidad mediante in- vacía salvo una cama y una sinfonola fero e insistente boogie, hasta el contin-
termitentes ausencias pero mantenien- con discos de otra leyenda tejana, gente heavy puede adoptarlos.
do la fidelidad de su público con impre- Roky Erickson. Incluso se le puede en- Avalados por su fuerza de convoca-
sionantes actuaciones y distanciadas contrar en congresos internacionales toria en vivo, todos sus discos alcanza-
grabaciones que compensarán la espe- de magia, como el reciente de Madrid. rán ventas de oro o platino. Sin embar-
ra. Por otra parte, un oportuno lavado Natural de Houston, es hijo de un go, ni uno solo es en directo, excepto
de cara les ha permeabilizado a los soni- director de orquesta local y la secreta- una cara de Fandango (1975). Misterio-
dos y conceptos contemporáneos: del ria personal del ex presidente Lyndon samente, tras la expedición triunfal de
bar de carretera a la sofisticación digital B. Johnson. Éste visitaba su casa mien- Tejas, el grupo se esfuma. Hay rumores
de Eliminator o Afterburner (sus últimos tras Billy iba de hippie y abandonaba de disolución. Se dice que han muerto
trabajos), sin perder su identidad. Antes sus estudios de diseño para tocar con en accidente. Pasan tres años. Y cuan-
eran una banda consecuente con las exi- Moving Sidewalk. Con ellos teloneó a do el mundo los da por desaparecidos,
gencias de la época. Ahora, una pinto- Doors, Hendrix y demás estrellas en vi- regresan con Degüello (1979). Próximos
resca atracción pop cuyos vídeos son sita tejana. Fue Hendrix quien lo descu- lapsus, bienales, traen El loco (1981) y
dieta obligada en los programas musica- brió, citándolo en un programa televisi- Eliminator (1983): rotunda puesta al día
les de televisión. vo como el más prometedor guitarrista e inmensas ventas.
Su gran baza han sido los concier- del país. No iba descaminado. Especie No importa que un antiguo colabo-
tos. La gira de su álbum Tejas (1976) de Mark Knopfler de la Gibson, posee rador saque a la luz feos asuntos, de-
parecía casi una feria de muestras. Jun- una ingeniosa habilidad para extraer mandándolos por no haberle pagado
to al trío podían verse diversas espe- los más singulares sonidos. su cesión de la autoría de un tema.
cies de la zona: coyotes, crótalos y has- El trío despegó a finales de 1970. Tampoco que a Hill se le dispare en el
ta un búfalo. Todos ellos en vivo. Y sus Auténtica locomotora rítmica, Frank estómago una de sus armas; o que
más recientes giras no le van a la zaga: Beard (batería) y Hill llevan tocando Beard -que a pesar del apellido es el
máscaras gigantes de Tutankamón juntos 20 años. Nativos de Dallas, se único que se afeitó la barba- prefiera
echando laser rojo por los ojos y, el iniciaron en formaciones locales de ga- repartirse entre el golf, su negocio de-
cuadro central, Billy Gibbons (guita- portivo y su ayuda a los programas de
rra) y Dusty Hill (bajo) en traje negro rehabilitación para drogadictos. Z Z
con el remate chiflado de una gorra de Top están sólidamente instalados. Son
béisbol. dignos norteamericanos de derechas.
Artífice de esto es Gibbons, parlan- HISTORIA DEL `ROCK' Pero aún saben escribir -o comprar-
chín admirador del fallecido Howard decentes canciones. Eso sí, con alto
Hughes. Dispuesto a superar a éste en contenido lúdrico: "Nadie se mete con
excentricidad, Gibbons es una fuente PRÓXIMO CAPÍTULO nosotros. Nuestros elepés se colocan en
de sorpresas y contradicciones. Su tos- el último cajón y los comités de la mo-
ca pose de noble bruto rockero oculta ralidad se desmayan al llegar a los dis-
un adorador de Gaudí, experto en pi- 'GLAM ROCK' cos de Zappa".
HISTORIA DEL `ROCK'
En España fue conocido como gay rock por sus connotacio-
nes homosexuales. En otros países se usaron indistintamen-
te los términos de glam rock y glitter rock para calificar la
llamativa fauna que invadió los escenarios, a principios de la
década de los setenta, con todo tipo de maquillaje. David
Bowie (en la fotografía), Elton John, Marc Bolan, Rod Ste-
wart, Sweet, Slade y otros muchos artistas británicos reivin-
dicaban el gusto por el espectáculo más rutilante, vendiendo
fantasía y extravagancias a un público ávido de audacias.
Del mismo tronco salieron dandis de nuevo cuño, como Bryan Ferry. Por el lado
norteamericano predominaron esperpentos a lo Alice Cooper, que pusieron banda
sonora a los mitos del terror.
siendo sacudido por la marejada punk vado por la revolución del videoclip, Bowie
(que tiene en Bowie uno de sus puntos de tantea el terreno y da el paso: quiere ser
referencia), el artista se refugia en las som- importante también en el cine. Pero, pri-
bras de Berlín y preconiza un movimiento mera contradicción, David Bowie es ecuerdo / cuando
cibernético posteriormente vulgarizado arrastrado por su devorador ego y se des- estábamos / junto al muro. /
por el tecno pop. Entre Heroes y Lodger cubre su medianía interpretativa. Y es que Las pistolas / disparaban
edita Stage (1978), segunda recapitulación la estrella absoluta parece no cuajar como sobre nuestras cabezas. /
en directo. bestia cinematográfica; aunque oportuni- Entonces nos besamos. /
Mil novecientos ochenta. Con la nueva dades no le han faltado para demostrarlo, Nada podía derrumbarse, / y la
década, nuevo Bowie. Las partes más ex- Bowie continúa sin justificar su supuesto vergüenza / estaba al otro
perimentales de la trilogía berlinesa que- talento dramático. l ado. / Oh, podemos
dan perfectamente ensambladas en la co- Con la excepción de su experiencia tea- golpearles / siempre y para
lección de canciones que componen Scary tral (el deforme John Merrick en The elep- siempre, / y entonces podemos
monsters (1980), su última obra maestra. hant man, 1981) y televisiva (el vagabundo ser héroes / sólo por un
Una condensación de lo mejor de Bowie arribista de Baal, de Bertolt Brecht, 1982) día... / Yo seré el rey, / y tú... /
que da carpetazo a más de 10 años de y de su primera incursión en la pantalla Y tú serás la reina. / Nada
constantes inquietudes y le permite afron- grande (el extraterrestre de The man who podrá desterrarlos. / Podemos
tar los nuevos tiempos con un sentido fell to earth, de Nicolas Roeg, 1976), en el golpearles / sólo por un día, /
pragmático del negocio. Más estrella que resto de sus incursiones filmicas no ha podemos ser héroes / sólo por
nunca, elimina los elementos perturbado- destacado especialmente con la brillantez un día".
res y, sin dejar de generar modas y modos, artística ni el magnetismo succionador
se acomoda en su autocomplacencia e in- que su rutilante cartel le adjudica de en- David Bowie: Héroes, 1977.
tenta abarcar lo poco que todavía no tenía trada. Bowie, malabarista de la fascina-
controlado. Bowie se masifica, se dispara, ción aplicada a la imagen, no da la medida
se desdobla y escenifica como nadie el pa- exacta cuando ha de prescindir de la usual
pel de hombre estrella para todos los pú- piel de actor que le identifica día a día y
blicos. Es el momento de tomarse en serio ha de hacerse cargo, en la ficción, de unos
sus escarceos con la interpretación. Moti- papeles a los que inevitablemente regala
con sus adquiridos y camaleónicos tics de
conducta.
Interpretándose a sí mismo, está la fil-
mación del último concierto de la saga
Ziggy, y una breve aparición en Yo, Cristi-
na F. Y, si bien Dentro del laberinto y Princi-
piantes se han beneficiado, además de su
"NO CREO QUE SEA POSIBLE PARA UN ARTISTA DECIR MÁS DE DOS COSAS
REALMENTE NUEVAS EN ESTO DEL `ROCK AND ROLL" (David Bowie)
E LTON JOHN,
EFERVESCENTE AVE
tradicional, boni-
tas melodías eje-
cutadas por un
pianista de voz
agradable, sólo
que ahora Elton
suelta las amarras
de su pasión ocul-
DEL PARAÍSO ta por el rock and
roll, tanto musi-
DAVID S. MORDOH calmente como en
Calvito, gordito, bajito, a Elton John le cuestión de ves-
sientan bien los diminutivos. Lo hacen en- tuario, sumido en
trañable, y porque lo es, lo definen mejor. un mundo priva-
Mirando cualquier fotografía suya se hace do de lentejuelas
difícil apostar por él como triunfador, so- y zapatos de pla-
bre todo en una disciplina de las caracte- taforma, más su
rísticas del show biz, que exige que la belle- colección de gafas
za venda tanto o más que el contenido ar- de sol.
tístico. Pero Elton fue listo. Suplió sus li- Rocket man;
mitaciones físicas a base de imaginación y Honky cat, Daniel;
buen humor, se convirtió en una especie Saturday night's
de payaso adorable capaz de encandilar a alright for fighting;
todo tipo de audiencias; el contrapunto Crocodile rock;
perfecto a una profesionalidad y un talen- Bennie and the jets
to de envergadura. y otros temas
En cierto modo tuvo suerte. Le tocó vendieron millo-
hacerse famoso en la época del glam rock y nes hasta conver-
no le costó mucho adaptar su idiosincra- tirlo en el artis-
sia -un innato placer por lo estridente, ta rentable por
cayendo en la vulgaridad- a la tendencia excelencia de la
dominante. Hasta los primeros setenta El- década. Pero su
ton no era más que un buen compositor de primer número
presencia grisácea, confortablemente ope- uno en su país lo
rativo en el seno del pop romántico. Origi- obtuvo gracias a
nario de la región inglesa de Middlessex una canción a me-
(1947), su nombre verdadero es Reginald dias con Kiki Dee
Kenneth Dwight. Forma parte de Blueso- -protegida de su
logy como teclista antes de conocer a Ber- propio sello, Roc
nie Taupin, poeta con el que colaboraba ket-, Don't go breaking my heart (1976).
haciendo canciones por encargo y que se Para entonces, los álbumes de Elton
convertirá en su mano derecha. A partir John han perdido encanto en pos del sa-
de 1970, juntos forman la pareja composi- voir (aire norteamericano. Obsesionado ¡ton John es activo,
tora más importante a nivel comercial por aventuras vecinas -Bowie y Lennon rico y entusiasta del fútbol.
después de Lennon y McCartney. en Fame se separa del imprescindible Semejante trinomio no puede
En aquellos días Elton despega con su Taupin, creyendo que encontrará en otras más que desembocar en el
segundo elepé, el que contiene la inmortal fórmulas el secreto de la eterna juventud sillón presidencia¡ de una
Your song. Aunque el Reino Unido mues- musical. Numerosos proyectos dan fe de entidad deportiva. Cogió al
tre recelos, los norteamericanos lo acogen su carencia de rumbo. Ya no son colabo- equipo de fútbol de Watford
rápidamente. Después de un tercer disco raciones desde la cúspide, como la de la -periferia londinense- en
-Tumbleweed connection (1970) apare- película Tommy, de Ken Russell, o las que Cuarta División y lo llevó a
ce el extraordinario Madman across the le proyectaban un futuro como quinto Primera en sólo cinco
water (1971), su cumbre lírica. Llega a la beatle, sino los zarpazos ciegos del despo- temporadas, llegando a
consagración masiva por la vía de Honky seído jugando a retirarse. Es la oferta de clasificarlo incluso en finales de
chateau (1972); Don't shoot me: I'm only the Elton John para los ochenta, resignado a Copa en Gran Bretaña y en
piano player (1973), y el doble Goodbye ye- su música y al papel de estrella mítica en torneos continentales. ¿Que el
llow brick road (1973). Es un pop de lo más decadencia -en parte causada por la ino- club sufre un bache? Elton
portuna confesión de bisexualidad-, ca- siempre está dispuesto a
paz en un momento de gracia de sorpren- desembolsar un millón de
der con productos aceptables Too low li bras para fichajes.
for zero, 1983-, pero consciente de que su
futuro será actuar, junto a otros cuarento-
nes, en la fiesta de cumpleaños de algún
miembro de la familia real británica.
"BRYAN FERRY ES UN ENGREÍDO CON CIERTA TENDENCIA I NTELECTUAL.
N O TIENE IDEA DE NADA; ES UN PURO ESNOB" (Bryan Eno, 1977)
Gary Glitter era un cantante sin éxito Gran Bretaña de los setenta. Gracias a él
hasta que decidió aprovecharse del
nuevo mercado del glam rock. la década tomó color, y sabihondos como
Rick Wakeman o aristócratas como Mi-
chel Des Barres tuvieron que vestirse de
luces.
Hasta la new wave de 1978, su fuerza
popular fue innegable. Guitarristas hea-
vies, como Rick Derringer; cuasi clásicos,
como Todd Rundgren, y soul sisters, como
Labelle, adoptaron su estilo. Edgar Win-
ter se encontró a sí mismo tras la sombra
de ojos azul y las botas de plataforma. Fol-
kies como Steeleye Span accedieron a ser
producidos por Mike Batt, un artífice de
pop infantil, y se llegó a divertidas aberra-
ciones, como la de Jobriath. Fue una edad
dorada en la que el culto a la imagen llegó
a extremos nunca imaginados. El único
problema lo tenían los fans, pues imitar a
los ídolos se volvió casi imposible: era
toda una hazaña encontrar un modelo si-
milar a los de Dave Hill (de Slade), pero
todavía lo era mayor salir a la calle con
eso puesto. Éstos fueron los protago-
nistas:
1971, con Funny Funny. A finales del año Emigrada de Estados Unidos, Suzi
Quatro triunfó en el Reino Unido con sus
se consolidaron con Tom tom turn around, trajes de cuero y su sonido duro.
de unos australianos llamados New
World. Descubrieron a grandes figuras: creciente. Triunfaron en
Sweet y Suzi Quatro principalmente, se- 1974 con dos elepés lla-
guidos inmediatamente por Mud, Smokie mados The human me-
y Exile. Acusados por la crítica de ser in- nagerie y The psychomo-
trascendentes y manipular a sus artistas, do. Harley también gra-
Chinichap superaron su mala reputación, bó en solitario, pero no
y a finales de la década ya eran respeta- ha quedado ninguno de
bles (sin ningún esfuerzo de su parte, todo sus títulos.
hay que decirlo). Chapman, productor ar-
tístico de los discos, triunfó por todo lo Suzi Quatro. Nació en
alto con sus trabajos para Blondie y The Detroit, de una familia
Knack al principio de la new wawe. muy musical. Triunfó, a
sus 22 años, de la mano
Mott TU Hoople. Grupo típico del pos- de Mickie Most, con un
hippismo británico, siempre inseguro acer- precioso conjunto de
ca de su línea; ahora heavy, ahora acústi- cuero y arrolladoras
co-vocal. David Bowie aclaró su futuro al composiciones de Chin-
pasarles un gran tema, All the young dudes, nychap: Can the can; 48
a finales de 1972, iniciando una nueva eta- crash; The wild one, et-
pa para el grupo, que fructificó con elepés cétera. Vendía una ima-
como Mott y The hoople, en la faceta más gen de chica dura, pero
seria del glitter. Su líder, Ian Hunter, se su cara infantil sugería
erigió en el Dylan glam, más que nada por que tenía un corazón
el aspecto, y adquirió una sólida fama de tierno, y el resultado
persona interesante gracias a su reticencia era que todos los chicos
a quitarse las gafas de sol. Grabó también se volvían locos por
en solitario, pero su influencia no fue nun- ella, y las chicas por ser
ca tan decisiva como la de otros coetáneos como ella. Por su parte,
más horteras. la crítica musical la
despreciaba. Después
Slade. Dave Hill, Jim Lea, Don Powell y de 1975 pasó a un se-
Noddy Holder eran skinheads, se llama- gundo plano.
ban Ambrose Slade y grababan para Fon-
tana. Eran horribles, pero Chas Chandler Sweet. Eran Brian Con-
-ex Animal y ex manager de Jimi Hen- nolly, Andy Scott, Mic
drix- intuyó su gran potencial. Sacó a ke Tucker y Steve Priest. Tenían un as-
flote su feeling rockanrolero, y lo hizo cre- pecto tan deplorable que rompieron con la
cer a la vez que sus cabelleras. Joyas como tradición teen de admirar al ídolo por los
Cum on feel the noize; Look wot you dun; deseos de ser como él. A Sweet se les ad- I rock and roll de los
Skweeze me pleeze me; Mama weer all era- miraba por sus buenos discos o por las cincuenta liberó, en la era glam,
zee now, o Coz i luv you, maravillosamente apoplejías que provocaban en los reaccio- su faceta más frívola por la vía
histéricas y conmovedoramente rápidas, narios, pero nunca nadie en su sano juicio de los discos de The Rubettes
le demostraron que tenía razón. El aspec- querría ser como ellos. Tuvieron una de (Jukebox fi ve, 1 can do it,
to del grupo era atroz, pero quizá porque las más impresionantes series de hits de la Sugar baby love),
ellos mismos componían su repertorio lo- historia, desde Funny Funny, en la prima- Showaddywaddy (Hey rock
graron una credibilidad de la que carecían vera de 1971, pasando por Coco; Poppa and roll) o Mud (Tiger teet),
sus competidores. Han sobrevivido muy Joe; Little Willy; Big Wam bam; Blockbus- grupos cabareteros de gran
bien al transcurrir del tiempo, cultivando ter; Ballroom blitz; Teenage ramipage, y calidad vocal y afición a dar
el heavy metal, y son una verdadera insti- Hellraiser, hasta Fox on the run, cuatro versiones de los clásicos. La
tución británica, con la tradicional cos- años después. Por entonces tomaron las gran estrella fue Alvin Stardust,
tumbre de editar un disco navideño cada riendas de su carrera aunque su populari- que, enfundado en cuero
año. dad no logró mantenerse; pero son inexcu- negro, decía que era intocable,
sablemente clásicos. i mitaba a Gary Glitter y tuvo
Steve Harley and Cokney Rebel. Junto a varios éxitos divertidos: Jealous
Roxy Music son los inventores de un con- Wizzard. Sinónimo de Roy Wood, vieja mlnd y My coo ca choo. Sin
cepto musical muy británico y pretencio- gloria pop británica que transmutó en he- ellos, quizá el rock and roll no
so, que ha llegado hasta hoy con fuerza chicero sideral y se dedicó a adular a los hubiera recuperado nunca su
Beach Boys, hasta que Brian Wilson se popularidad.
dio por enterado, le invitó a cenar y sus
hijas le dedicaron una versión de su Fore-
ver. Wood había estado con Move, fundó
la Electric Light Orchestra, grabó alterna-
tivamente bajo su nombre real y el artísti-
co y siempre mantuvo un buen nivel.
"PODRÍAMOS TOCAR COMPLETAMENTE A OSCURAS O CON CUATRO BOMBILLAS
Y LA GENTE SEGUIRÍA APLAUDIÉNDONOS..." (Freddie Mercury)
A kind of magic, el
último álbum de Queen, es al
mismo tiempo banda sonora
por igual al funk, al disco-sound, al rocka-
billy, a las baladas o a la moda imperante
del momento. Su imagen también ha cam-
biado; hoy el glam es sólo un recuerdo
del filme Highlander, de Russell
A AMBIGUA ocultado por cazadoras de cuero negro y
posturas virilmente rockeras; gorras de
Mulcahy. A lo largo de su plato, gafas oscuras, bigotes poblados y
carrera, el grupo no ha MAGIA DE QUEEN pelo corto. Que otros muerdan el polvo.
permanecido alejado del Musicalmente, Queen halló su fórmula
mundo cinematográfico. Aparte JULIO MURILLO ideal en lo que ellos mismos denominan
de discos propios con títulos En los días en que lo andrógino era moda sus "canciones himno, piezas fácilmente
i nspirados por los Hermanos y subrayar los ojos con una linea de rimel identificables, de esquema sencillo y tono
Marx, han realizado la banda signo de distinción, nació Queen. Roy epopéyico como We are champions; We will
sonora del Flash Gordon de Thomas Baker, un avispado productor, se rock you; One vision, o Radio Ga-Ga, que
Dino de Laurentiis. Sus temas encargó de que el invento sonara alto y constituyen los momentos más altos de
han contribuido al éxito de fuerte, potenciando también la baza bise- su directo. Intercalan los elepés de estudio
películas como ¡ron eagle, xual y glamourosa del cuarteto. El cantan- con greatest hits, plásticos en vivo, discos
Revenge of the nerds, te, Freddie Mercury (1946); el bajista en solitario, colaboraciones, bandas sono-
Metropolis y Teachers, entre John Deacon (1951); el guitarrista Brian ras y singles aislados, que suponen en su
otras. May (1947), y el batería Roger Taylor totalidad un volumen de ventas superior a
(1949) integraban una formación que ha los 80 millones de ejemplares. Son cam-
resistido a las mil maravillas los embates peones en el arte de la dosificación, apun-
de las modas posteriores y las sañudas crí- tan y dan en la diana, arrastran multitudes
ticas de la Prensa musical. y, como gobernantes magnánimos que
May y Taylor procedían de una banda son, han puesto fin al ostracismo al que
llamada Smile; Deacon y Mercury debu- habían condenado a los sintetizadores.
taban por vez primera en un grupo. Queen
(1973), su primer álbum, constituía todo
un despliegue estratégico de buen hacer.
El sonido rozaba el rock duro: guitarras
aceradas, salvajes, fluidas; bases rítmicas
contundentes, y una cobertura vocal bas-
tante insólita, que recordaba inevitable-
mente a las polifonías corales clásicas. Y,
como contaban en la contraportada, nadie
tocaba los sintetizadores.
Con sus siguientes discos -Queen II
"TÉCNICAMENTE SOY MALO, PERO TENGO ALGO MUCHO
MEJOR QUE OFRECER: EL 'FEELING" (Rod Stewart)
Alice Cooper desarrolló todas las representaba una truculenta fábula moral
posibilidades del rock como
espectáculo teatral. sobre rock erizado. Viaje a los infiemos y
catarsis comunitarias.
Comenzó su vida en 1945 como Vin-
cent Foumier. Creció en Phoenix (Ari-
zona) y fue un buen atleta con tendencia a
la rebelión. Tuvo grupos y, buscando el fi-
nal del arco iris, recaló en Califomia en
plena apoteosis hippy. Dado que paz y
amor era el lema de rigor, Vincent optó
por lo contrario. Adoptó el nombre de una
campesina quemada en el siglo XVII bajo
la acusación de brujería y se dedicó a es-
candalizar a los niños de las flores. En poco
tiempo eran la banda más odiada de Los
Ángeles.
Frank Zappa, connoisseur del mal gus-
to, les apoyó y editó sus primeros discos.
Pero fue el representante Shep Gordon el
que puso a punto el fenómeno con ayuda
de expertos músicos de estudio y del pro-
ductor Bob Ezrin. Con él Alice se especia-
lizó en trallazos de rock que glorificaban el
fin de curso, los ardores eróticos y demás
preocupaciones del teenager medio. Tam-
bién tenía otra faceta: se declaraba necro-
filico ("Me encantan los muertos / justo
antes de que se queden fríos), cantaba a
los Niños muertos, se proponía como can-
didato presidencial (Elected), se ponía tier-
no para hablar de la menstruación (Sólo
las mujeres sangran), y alienaba a todo pa-
dre decente. Además, su espectáculo al-
canzaba insólitas cotas de premeditada
locura y se destapó como un concepto
vendible: en la primera mitad de los seten-
ta, Alice Cooper fue la gran estrella del
circuito norteamericano.
Como en los cuentos, tuvo su castigo.
Despidió a sus compinches, pasó por el
todo en Estados Unidos, y sigue manteniendo una amplísi- ma audiencia. En la actualidad, el término engloba desde los bramidos de guita-
rristas desbocados y auténticos como Ted Nugent (en la foto) hasta los acicalados
sonidos de grupos ligeros como Europe o Bon Jovi.
TANTO LOS MÚSICOS COMO LOS OYENTES DEL `HEAVY METAL' PREFIEREN
DESIGNAR A SU MÚSICA COMO `ROCK', EL ÚNICO `ROCK' AUTÉNTICO
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en una masa vibrante que considera al rock
como núcleo aglutinador de un estilo de vida
EAVY METAL' que la diferencia y enaltece.
"EL `ROCK' ES EL CANAL QUE NOS PERMITE DAR SALIDA A TODAS
LAS FRUSTRACIONES Y CARENCIAS" (Bon Scott, AC/DC, 1979)
El rock es entretenimiento
escapista. Algo que toda
sociedad necesita, sea
una batería machacona, una guitarra so-
lista desaforada y poco más; la voz se in-
tenta abrir paso, chillando entre instru-
mentos amplificados más allá del límite
del dolor. No conoce la sutilidad; prefiere
occidental o comunista. En este L IMPERATIVO el impacto fisico, ojos y oídos asaltados
por la enormidad de los decibelios e impo-
sentido hacemos lo mismo
nentes despliegues de luces.
que Fred Astaire y Ginger
Rogers, sólo que usamos un
CATEGÓRICO Es una fe basada en la idea de la resis-
tencia -a pesar de su origen proletario,
volumen mayor de sonido. La DIEGO A. MANRIQUE no hay ansias revolucionarias- que ad-
gente viene a nuestros Fue en Nova Express donde el escritor Wi- quiere pleno sentido en los rituales del di-
conciertos y se olvida de los lliam Burroughs apodó a uno de sus per- recto, donde se alcanza una íntima com-
conflictos con su mujer, o con sonajes como The Heavy Metal Kid. Aho- penetración entre espectadores y ofician-
su novia, o con el jefe de la ra el mundo rebosa de chicos de metal pesa- tes. Los músicos son saludados con puños
oficina o el profesor. Hay do. Se trata de una secta prohibida para cerrados, el símbolo de la victoria y gritos
países que lo intentan prohibir adultos y buscadores de valores conven- de ánimo: su presencia ha hecho una piña
pero es inútil: esas tácticas cionales. Es música intimidante, repetiti- desafiante de seres dispersos. Desde el es-
sólo consiguen que la gente se va, visceral. Embutida en sudor, decibe- cenario, esa masa en tensión es pulsada
i dentifique más con el lios y muecas, preserva en estado puro el con habilidad: los artilleros del heavy gus-
concepto del rock". mito adolescente del rock como bandera tan de exhibir su poder. Poder para domi-
de rebelión. Sospechosa ante los medios nar los sentidos descargando himnos
David Lee Roth, 1982. de comunicación, su falta de respetabili-
dad exacerba su aureola de heroísmo.
Aparenta estar fuera de la ley (y de la in-
dustria del espectáculo) para reforzar su
magnetismo y vender una arisca válvula
de escape.
Rastreando en su cosmogonía se llega
hasta los Kinks, cuyo You really got me
(1964) contiene inconfundibles guitarras
macizas; al año siguiente, el My generation
de los Who añade desafio generacional al
poderío instrumental. Pero los forjadores
del ruido metálico son los tres guitarristas
que pasan por los Yardbirds: Eric Clapton
-con la ayuda posterior de Jimi Hen-
"EN ESTE CAMPO, LA IMAGEN ES CASI TAN IMPORTANTE COMO LA
MÚSICA" (Derek Shulman, descubridor de Bon Jovi, 1987)
DEEP PURPLE,
EL PESO
DE LA LEYENDA
ANTONIO DE MIGUEL
El incansable afán mitificador del cosmos
heavy ha colocado a Deep Purple en un lu
gar privilegiado de su parnaso. Lugar y le-
yenda conseguidos por unos cuantos temas
célebres, un trío de músicos carismáticos y
una abultada historia de descendencias bas-
tardas. Pero no todo fueron durezas en la
historia de este grupo británico. A decir ver-
dad, cuando Deep Purple nace, en febrero
de 1968, sus componentes no tienen claro
qué tipo de música van a realizar.
Jon Lord (1941), un teclista con estudios
musicales clásicos, que pasó por algunos
grupos de rhythm and blues (The Artwoods);
Ritchie Blackmore (1945), un guitarrista in-
tenso que acompañaba a seres extravagan-
El
álbumes In rock (1970), Fireball (1971) y Ma-
tes como Screaming Lord Sutch; Ian Paice chine head (1972). Rigurosos trabajos de
(1948), batería miope y contumaz; el bajista composición (temas estructurados y modu-
Nicky Simper (1946), y el vocalista Rod lares), claves instrumentales coordinadas paulatino
Evans (1945), salen a la palestra con una entre guitarra-voz-teclados, riffs limpios y resquebrajamiento de Deep
afortunada versión de Hush, del sureño Joe comerciales; en fin, un sonido molde clara- Purple originó otras muchas
South. Pasó inadvertido en el Reino Unido, mente identificable que cristaliza en singles propuestas de sus miembros: la
pero se encarama al número cuatro de las fantásticos como Highway star; Smoke on the frustrante lan Gillan Band; las
listas norteamericanas en el verano de 1968. water, o Strange kind of woman. guirnaldas clásicas de Jon Lord
Voces melodiosas y juegos pantanosos de La pugna de egos llega en sus días de (Gemini suite y Windows), l a
órgano. Se incluye en su primer álbum, Sha- máximo esplendor, reprochándose unos a descabellada carrera al heavy
des ofDeep Purple, atractivo crisol de psico- furibundo de Ritchie
otros el encasillamiento estilístico. Antes de
delias, blues-rock y latiguillos progresivos en que Gillan y Glover se vayan, dejan graba- Blackmore's Rainbow,
el que Jon Lord ordenaba y mandaba. Las do un doble álbum de lujo, Made in Japan generador de media docena
querencias beatles les embarcan en una al- (1972), lúdica antología, aún válida, de lo de elepés con ayuda de gente
godonosa, casi reverencial versión de Help. que aportó el grupo en los años setenta. atractiva, como Ronnie
En similar régimen de agradable mesco- Con la incorporación de Glenn Hughes James Dio y Cozy Powell; por
lanza se mueven sus siguientes álbumes, (batería) y el desconocido vocalista David último, David Coverdale creó
Book of Taliesyn y Deep Purple, ambos de Coverdale (1951), Deep Purple tiene años l os Whitesnake para dar asilo a
1969. Lord los lleva a su terreno cuando de vida irregular, con mucha competencia viejas glorias del rock
graban Concerto for grupp & orchestra, en el pisándoles los talones. Who do we think we británico, Lord y Paice
Royal Albert Hall londinense, con la Royal are? (1973); Burn, Stormbringer (1974), sólo i ncluidos.
Philharmonic Orchestra. Por suerte, para convencieron a sus fans. Blackmore, hipo-
ese momento se han producido ya los dos condriaco egocéntrico y agresivo, sueña con
primeros cambios: el cantante Ian Gillan su gloria particular. Lord es un espectro. El
(1945) y el batería Roger Clover (1945) an- trueque de Blackmore por el norteamerica-
sían, junto a Blackmore, dar una definición no Tommy Bolin (1951) inyecta bríos más
más granítica al sonido Deep Purple. La voz y oxigenados al grupo (Come taste the band
la guitarra ganan la apuesta a Lord, y apare- (1975), casi enteramente compuesto por él
ce su primer éxito británico, Black night, ma- En julio de 1976 se disuelve la banda y el
triz de su nueva línea, que se concreta en los año acaba con un disco póstumo, Made in
Europe, y con la muerte de Bolin en Miami.
Después de infructuosas aventuras, Lord-
Paice-Blackmore-Glover-Gillan decidieron
reanudar en 1984 su vieja amistad en una
nueva edición (sospechosa de insinceridad)
de Deep Purple.
"EL 'ROCK AND ROLL' NO ES CONTAMINACIÓN SONORA. /
EL 'ROCK AND ROLL' NO VA A MORIR" (AC/DC, 1980)
El
una apisonadora. Pero su efectista trucu- perchería imitadora. Fabulada por su gurú
lencia, truenos, cruces, amenazas guita- (el crítico Sandy Pearlman), tan borgiana
rreras y la voz maligna de Ozzy Osbourne imaginería no era sino excusa para sus
(1948), junto a una serie de pasmosas can- descargas metálicas: riffs inflamados, me- heavy metal es un lenguaje
ciones, sembró furor en la América ado- lodía sugerente y ductilidad instrumental. universal. Los alemanes
lescente. Realizaron docenas de giras. Rock neoyorquino precursor de Spring- Scorpions no son los únicos
Cuando el truco estuvo visto se desmarca- steen o Patti Smith, colaboradora even- en triunfar fuera de casa.
ron del supuesto satanismo y se pasaron a tual del quinteto cuando era novia de su Accept, también alemanes,
los apocalipsis. Grupo de elepés, sus cinco teclista, Allen Lanier. son la más reciente revelación
primeros son clásicos indispensables del i nternacional. Los suizos
género. A la larga han sido el grupo más Tommy Bolín. Un caso desgraciado. Des- Krokus actúan regularmente en
imitado. tinado a ser el gran guitarrista de los se- Estados Unidos. Los
Compañeros de escuela, Ozzy, Tony tenta, sólo llegó a hacer suplencias. Tocó australianos Rose Tatoo
Iommy (guitarra, 1951), Geezer Butler en los peores discos de James Gang; en el pasearon sus tatuajes por
(bajo, 1949) y Bill Ward (batería, 1948) más discutido de Deep Purple (Come taste medio mundo. Los franceses de
eran, antes de la posesión, chicos normales the band), y su primera aventura (Te~ Trust llegaron al Festival de
de Birmingham. Se llamaban Earth y ha- fue un fracaso. Adiestrado en grupos de Reading. Vic Vergat, italiano, ha
cían pop en la onda de los Move. Un año blues, frecuenta el jazz-rock neoyorquino teloneado fuera a estrellas
después (1969), ya como Black Sabbath, hasta que Joe Walsh le recomienda a Ja- i mportantes. El toque japonés
entran en las listas con Evil woman. Desde mes Gang (1973). Sus mejores trabajos se l o ponen Bow Wow, y, en el
encuentran en discos ajenos. Sus relam- caso español, Barón Rojo, con
pagueantes solos en el Spectmm de Billy gran éxito crítico en sus
Cobham deslumbraron a críticos y profa- visitas británicas.
nos, y cuando por fin canaliza su genio en
Private eyes, muere, a causa de una sobre-
dosis de heroína, el 4 de diciembre de
1976. Tenía 26 años.
"ME GUSTA EL `COUNTRY', EL VIEJO `ROCK', LAS CANCIONES DE AMOR...
PERO NOS PIDEN LO OTRO, LO DE SIEMPRE" (Francis Rossi, Status Quo, 1984)
Arriba, las
Runaways
californianas,
que abrieron el
rock a los
grupos femeninos
de sonido duro.
A su derecha, el
grupo Mountain
(Leslie West, en el
centro); fue una
de las primeras
respuestas
norteamericanas
al heavy metal
británico. Los
británicos Uriah
Heep (en el centro)
se
caracterizaban
por sus
apocalipsis
rítmicos y
batallas
i nstrumentales.
Debajo, Saxon,
uno de l os
nombres
principales de la
ll amada nueva ola
del heavy metal
británico. A la
derecha, una
i magen de jungla
de Ted Nugent.
"MOTORHEAD NO TIENE SECRETOS. TOCAMOS MÁS DURO, MÁS PESADO,
MÁS FUERTE Y MÁS RÁPIDO QUE NADIE" (Lemmy, 1979)
Judas Priest nacieron como banda el chiste fácil de la crítica, pero batieron
apocalíptica, pero ahora prefieren la
estética del cuero. récords de audiencia. Cuando la fiesta ter-
minó (1976), Farner montó un negocio de
energía alternativa y un par de discos tor-
pes, hasta que en 1981 se reunieron tem-
poralmente.
LAS OTRAS
GUITARRAS
DESQUICIADAS
JESÚS RODRÍGUEZ LENIN
Junto a los músicos exhibicionistas tipo
Ingwie J. Malmsteen, Tony Macalpine,
Ritchie Blackmore, Ulrich Roth, Michael
Schenker o Angus Young, existe otra es-
cuela de guitarristas nada proclives a pun-
teos brillantes y escalas multicolores. Se
trata de individuos incendiarios, convul-
sos y generadores de un sonido duro a
más no poder. No basan su fuerza en el
virtuosismo, sino en las descargas de
adrenalina que provocan en el aturdido
oyente. Son los herederos de Fred Sonic
Smith (MC5), Ron Ashenton (Stooges),
Sterling Morrison (Velvet Underground) centro de reunión de un buen número de
y el tremendo Jimi Hendrix. guitarristas criminales. Podemos empezar
Muchos de estos trituradores de cuer- el recorrido por Arto Lindsay, que dio a co-
das están relacionados con Nick Cave, a industria del rock l anza
nocer en el grupo DNA su estilo, hiriente
cantante australiano que se ha hecho ro- regularmente estrellas de la
chirrido de cuerdas desafinadas y melodías
dear constantemente por los más destaca- guitarra, pero, después de
cortadas a machetazos. Lindsay se dedica
dos y furiosos guitarristas del lado salvaje Hendrix, ha ignorado
ahora a músicas más reposadas. De la mis-
del rock. Primero sería en los Boys Next ma tierra de nadie entre el rock, el jazz, la sistemáticamente a los
Door y luego en los influyentes Birthday música improvisada y la vanguardia, surgen músicos negros. Sin embargo,
Party, en los que estaba Rowland S. Ho- algunos de los sonidos más
guitarristas ambiciosos como Glenn Bran-
ward, creador de atmósferas de blues in- ca, Rhys Chatman y Scott Johnson, sin vo- abrasadores de los últimos
fecto y rif fs crispados por el dolor que in- luntad de aceptar compromisos para acce- tiempos proceden de
fiere a su martirizado instrumento. Éste der a las listas de ventas. También circulan guitarristas que vienen del
trabaja actualmente en el Reino Unido, punk jazz. Son ilustres
por Nueva York británicos excéntricos
con Crime and the City Solution y These desconocidos como Vernon
como Fred Frith (ex Henry Cow) o Johnny
Inmortal Souls. Reid, Ronnie Drayton o el
Rotten, portavoz de los Sex Pistols, que se
Nick Cave también sacaría del anoni- poderoso James Blood Ulmer,
ha descubierto en PIL como enamorado de
mato a los guitarristas más crudos de la que están redefiniendo el
las guitarras deformes; a sus órdenes, el fan-
República Federal de Alemania (RFA), vocabulario del instrumento.
tasma del punk se ha revitalizado con apor-
como Remo Park y Martin Peter, base taciones del heavy metal. Otros iconoclastas
fundamental del sonido del grupo Die neoyorquinos, como los productores Arthur
Haut, un compendio de reverberación, ca- Baker y Bill Laswell, hacen uso frecuente de
dencias pesadas y distorsión de pesadilla. guitarrazos pesados en contextos insospe-
Otra fiera berlinesa es Blixa Bargeld, chados.
antiguo líder de los ya desaparecidos La urbe neoyorquina también ha tembla-
Einstürzende Neubauten, monstruosos do con las osadías de Pat Place, la única
representantes del rock industrial y repre- mujer con agallas para hacer daño a una
sentación musical del sonido de los altos guitarra, que inunda los discos de Bush Te-
hornos. Toca ahora con Nick Cave en el tras con una prolongada serie de zumbidos
último grupo del temible australiano: The inmisericordes, que convierten en sulfúrico
Bad Seeds. elfunk ácido de su banda. Algo parecido su-
Nueva York, una de las ciudades más cedía con Jody Harris, quien antes de morir
abyectas del mundo, no podía dejar de ser de sobredosis terminaba de lograr la histe-
ria en los Contortions, de James Chance.
Los últimos azotes de la escena neoyorqui-
na son Thurston Moore, atronador de los
Sonic Youth, y Norman Westberg, de los ul-
traviolentos Swans, tal vez la banda más
llena de sensaciones peligrosas que exista
hoy día en el mundo.
"LO ÚLTIMO QUE DESEO SER ES RESPETABLE, O QUE ME CONSIDEREN
UN GRAN INSTRUMENTISTA. YO TRABAJO CON EMOCIONES" (Jimmy Page)
LED ZEPPELIN
DEL CIELO AL INFIERNO
33
tiene como parte ritual de sus conciertos el
ROCK URBANO sacar a bailar al escenario a alguna de las
asistentes. Así afirma su deseo de
i dentificación con su público.
"LA LUZ BLANCA DESARREGLA MI MENTE, / ME VA A DEJAR CIEGO. / BAJA
HASTA MIS PIES. / SEÑOR, TEN PIEDAD" ('White light / White heat', Lou Reed, 1967)
No
Su relación con Warhol tuvo sus contra-
partidas. Iniciada en realidad como un an-
sé bien adónde tojo del divo, cuando éste se aburrió del
voy, / pero voy a intentar tema tuvieron que valerse por sí mismos. Se
alcanzar el reino si puedo. / habían adelantado demasiado. Su indivi-
Cuando pongo un pico dentro ELVET dualismo cínico zozobró ante la incompren-
de mi vena, / te digo que las sión general. Años después sería germen de
futuros movimientos. El mismo concepto
cosas ya no son iguales. / He UNDERGROUND, que daría la fama a David Bowie. Su leyen-
tomado una gran decisión. /
Voy a tratar de anular ml vida, / da crece. Sus discos son reeditados regular-
porque cuando la sangre BULEVAR OSCURO mente y su letal electricismo y depravada
comienza a brotar, / cuando frialdad siguen inspirando la formación de
sube el émbolo de la JOSÉ M. REY nuevas bandas. Su sombra se ha alargado
jeringuilla, / siento la muerte Hasta ellos, el pop no había perdido la ino- insospechadamente.
cerca. / Heroína. / Va a ser mi cencia. Al fin y al cabo, las drogas hippies o Criaturas diferentes, fueron originales en
los desplantes sexuales de los sesenta no casi todo. Su sonido nada debía a los ingle-
muerte. / Heroína. / Es mi mujer
eran sino peldaños en la educación exis- ses. En todo caso, a los grupos vocales de
y es mi vida, / porque una
tencial de una generación asomada al lado finales de los cincuenta. Inauguraron el sa-
dosis en mi vena va directa al
prohibido: inconformismo contra una mo- domasoquismo (Venus in furs) en el rock, la
centro de mi cabeza, / y
ral hipócrita, o manifestaciones de bús- ambigüedad sexual y una peligrosa sensa-
entonces me siento mejor que
queda metafísica de inequívoca lectura ción de violencia. Ya no era el guiño travie-
muerto".
positiva. Después de la Velvet Under- so del porro adolescente, ni la trascendencia
ground, ya nunca sería lo mismo. psicodélica de la LSD. Estaban hablando
Heroin. Lou Reed, 1967
A bordo de un nombre prestado del títu- de heroína, de una droga de peso ajena al
lo de un librucho porno, Velvet Under- universo virgen del pop y más propia de tur-
ground pervertirá las ilusiones del pop con bios asuntos gansteriles.
su nihilismo descarnado. Perpetraban can- Removían la basura para extraer una be-
ciones de moqueta raída, palpitación hipo- lleza agria, cuyo morboso atractivo creó
dérmica y naturalismo callejero. Visiones una poética de la droga. El mismo Lou Reed
ateridas de madrugada. Desnudas instantá- explotaría esto más tarde, en solitario, De-
neas de marginalidad neoyorquina. Toda
una galería de sentimientos culpables, debi-
U lidades y pesadillas decadentes animadas
O de caótica autodestrucción sonora. Territo-
a rios desconocidos hasta entonces que anti-
cipan el realismo en el rock.
Música al límite; arrebatos anfetamíni-
M
"SU VIDA FUE SALVADA POR EL `ROCK'. / SABÍAS QUE PODÍAS BAILAR
CON LA EMISORA DE `ROCK AND ROLL" ('Rock'n'roll', Lou Reed, 1970)
gando a la pantomima de hacerse sacar al John Cale y Nico, dos personajes que
escenario o simular inyectarse en directo. escaparon del mando de Lou Reed en
The Velvet Underground.
Una imagen irresponsable -y para colmo,
falsa- del mártir roto, al borde siempre de
su último trance, pero infalible en el circo
mitómano del rock y que, amplificada por
cierta crítica, ayudó lo suyo a extender el
fantasma de la heroína con todas sus conse-
cuencias.
Pese a tan malas referencias, eran chicos
cultos. Residentes en la universidad de Sira-
cusa -más que nada en el bar-, Sterling y
Lou intercambiaban versiones de rhythm
and blues. Hijo de una abogada de Long Is-
land, Lou creció entre colegios caros, clases
de piano y el psiquiatra. A sus 15 añitos lle-
gó a grabar un single con los Shades. Y ape-
nas graduarse en letras, entró de composi-
tor de imitaciones a sueldo de un sello bara-
to, Pickwick. Allí registró varios singles bajo
nombres como Beachnuts, Roughnecks o
los Primitives (1964). En estos últimos co-
noce a John Cale, un músico galés becado
para estudiar teoría contemporánea con el
compositor Xenakis, y enrolado en The
Dream Syndicate, la entidad experimental
de La Monte Young. ción de Jimmy Page. Lou no está de acuer-
Cale descubre el rock como vehículo a su do, pero accede a que la chica cante parte
conceptualismo destructivo y Reed es un del repertorio. Acertado: el gótico angular
poeta urbano de voz limitada, pero que su- de su voz añade frío y melancolía a las can- Fuera de The Velvet
ple con arrastrada afectación. Son caminos ciones. Andy, entusiasmado, monta su Ex- Underground, Nico prosiguió
convergentes. Un vesánico activista de la ploding Plastic Inevitable, espectáculo mul- una intermitente carrera
i mprovisación con sueños de ruptura van- timedia que escandaliza por donde pasa entre la belleza agónica y las
guardista, y un minimalista perverso, capaz con su agresiva puesta en escena: extraños emociones yertas. Envejecida
de exprimir en tres minutos toda la magia bailarines, Nico con látigo y el grupo que y desmoronada, vivió un tiempo
elemental del rock, que quiere ser una estre- nunca toca lo mismo dos veces. En Los Án- en Barcelona, con sus
lla. Dos genios complementarios de cuya geles graban su primer álbum. Andy figura fantasmas del pasado, antes de
colisión surge la esquizoide personalidad como productor ejecutivo, aunque se limitó mudarse a Manchester,
del grupo. Sterling se les une junto a Angus a poner parte del dinero e ir a saludar a los donde trabaja irregularmente
McLise, un percusionista de vanguardia chicos. La suerte les rehúye. Tendrán que en sellos independientes.
que abandona escandalizado en cuanto el esperar un año para tenerlo en la calle. Y John Cale cosechó una notable
grupo comienza a cobrar. En su lugar cuando aparece lo hace sin apoyo alguno, reputación como productor,
-más contrastes- entra Maureen Tucker, esperando que el nombre de Warhol haga trabajando con los Stooges
hermana de un amigo común y una chica de milagros. No los hace. Nico, mientras tanto, (directos herederos de The
lo más normal, que tiene una batería y un actúa en solitario acompañada por Sterling Velvet), Patti Smith y Jonathan
amplificador. Estamos en 1965 y se hacen o Jackson Browne, un autor prometedor a Richman, sin abandonar la
llamar Warlocks, Falling Spikes y, más tar- quien vampiriza durante una temporada. edición de sólidos álbumes
de, Velvet Underground. De común acuerdo rompen con Andy y propios que cubren la
Andy Warhol, musa de la modernidad graban en condiciones precarias -24 ho- elegancia, el pulso inquietante o
artística, atento a la ascendente preponde- ras- "¡te light / White heat, un título que el ingenio lúdico.
rancia del rock en esos años, se encapricha ilustra la confusión del cuarteto y hace refe-
con ampliar sus actividades. Y ahí están rencia a los efectos del ácido y la heroína o a
ellos actuando por unos dólares. Warhol los los estragos de las anfetas. Un plástico tur-
rescata e instala en su Factory. Comienza la bulento, de cortantes aristas, protagonista
operación. de las feroces tensiones y batallas de egos
En principio, un polémico reajuste: Andy que concluirán con la exclusión de Cale del
les impone a Nico, estilizada modelo alema- grupo a instancias de Lou Reed. Su sustitu-
na que ha trabajado con Fellini en su filme to será Doug Yule, un jovenzuelo de Boston
La dolce vita, anunciado coñá en España y que, tras secundar fielmente la estrategia
realizado un single en Londres con produc- comercial de Velvet Underground, impon-
drá su mediocre criterio a un grupo maltre-
cho, adueñándose del mismo tras la marcha
de Lou, en medio de las sesiones de su ál-
bum póstumo, Loaded. Durante las mis-
mas, Sterling ganó una oposición y dejó la
música para ejercer de profesor de literatu-
ra en Austin.
"TE DICEN QUE TODO ES BASURA, / QUE LAS MUJERES NUNCA SE
DESMAYAN DE VERDAD / Y QUE LA VIDA ES UN ENGAÑO" (`Sweet Jane', L. Reed)
OU REED, LA
MIRADA DEL ANIMAL Lou Reed
está ahora
más cerca
de saborear en
JUAN CERVERA paz un
Lou Reed: conspicuo cronista de las mise- whisky que de
rias de la gran ciudad, escueto poeta de la morir por
fragilidad de los sentimientos. Decadente sobredosis.
y salvaje, ángel de la muerte y estrella de
lujoso terciopelo, ambiguo y provocador, pero de certera sensibilidad, poseedor de
visceral y melancólico: las mil caras del ar- una garganta grave que sabe modular re-
tista, los camuflajes del animal, el atrayen- gistros de elevado dramatismo con una
te vértigo del teatro de la vida. Louis Alan ternura desarmante, sus actuaciones en
Reed (Nueva York, 1942), tras desligarse directo son continuas relecturas de su pro-
de las turbulencias de los Velvet Under- lija obra: enfundado en cuero negro y teñi-
ground en las mezclas finales del álbum do de rubio, o de aspecto bonachón y so-
Loaded, y con una leyenda de yonqui irre- brado de peso, sus discos en vivo ofrecen
cuperable a sus espaldas, se instala en las guitarras irritadas del citado Rock
Londres en 1972, a la búsqueda de tran- `n'roll animal y Lou Reed live (1975, restos
quilidad regeneradora. Demuestra que si- del anterior), el deslumbrante descontrol
gue vivo al presentarse con el conciso Lou i mprovisado del soberbio Take no priso-
Reed (1972), un elepé que pasa casi inad- ners (1978) y la escrupulosa y perfecta pro-
vertido. fesionalidad de Live in Italy (1984).
Entra en contacto con su discípulo Da- Inaugura la década de los ochenta con
vid Bowie, quien le produce Transformer Growing up in public (1980), ya sin los fan-
(1972), refinado disco empaquetado den- tasmas negativistas anteriores. En los
En 1985, Lou Reed tro de la corriente del glam-rock y posee- años siguientes, un matrimonio estable y
colaboró en Lost in the stars, dor de clásicos de la talla de Walk on the el apego a los placeres cotidianos nos pre-
disco homenaje al wild side, himno que le distingue a lo largo sentan a un hombre maduro capaz de en-
compositor alemán Kurt Weill, de los años. Lou Reed, narrador irónico y tregar obras de la apabullante sinceridad
con una personalísima condescendiente de los ambientes van- de The blue mask (1982), el inicio de un pe-
versión de September song. guardistas neoyorquinos, triunfa con una ríodo en apariencia más asequible pero ja-
Enlazaba así con su visión obra llena de sutilidad y glamour. El espe- más aletargado. Legendary hearts (1983),
adulta de entender la música: jismo de purpurina se derrumba al año si- New sensations (1984) y Mistrial (1986) es-
"Quiero ser el Kurt Weill del guiente con Berlín (1973), uno de los dis- tán repletos de lúcidas y sardónicas mira-
rock. Mi i nterés, desde los cos más dolorosos de toda la historia del das a la sociedad y a las relaciones huma-
tiempos de Velvet rock: una ópera de muerte y miseria narra- nas, con la perspectiva de un creador que
Underground, ha sido siempre da con la lucidez de alguien que ha logra- ha definido mejor que nadie el sentido del
algo muy sencillo: tomar el do volver del viaje al infierno. El público rock urbano como espejo de su tiempo.
rock, el formato pop, y hacerlo se desconcierta, la crítica no asimila sus Orgulloso de su equilibrado distancia-
para adultos. Con una cuchilladas perfectas. Vistos los resulta- miento entre vida y obra, Reed está ahora
temática para adultos, escrita dos, su siguiente entrega se concentra en más cerca de saborear relajadamente un
de tal manera que adultos, agradar a todos: Rock'n'roll animal (1974), whisky mientras consume vídeos triviales
como yo mismo, puedan grabado en directo, es una bofetada de que de morir de sobredosis en el submun-
escucharla". rock anfetamínico, que insufla nueva savia do urbano: un nuevo guiño de la bestia que
a escogidos momentos del legado Velvet no se contradice en absoluto con sus anec-
Underground. dóticas apariciones en bandas sonoras de
Consagrado como una de las figuras películas menores (Noches desoí, Perfecto
más representativas de los setenta, la ca- Soul man) o con sus discretas participacio-
rrera de Reed oscilará desde la premedita- nes en eventos benéficos a favor de Am-
da intrascendencia de Sally can't dance nistía Internacional.
(1976) o Rock and roll heart (1976) a la cru-
dísima distorsión electrónica de Metal ma-
chine music (1975), de la cautivadora sere-
nidad de Coney Island Baby (1975) a las
desconcertantes inquietudes de Street
Hassle (1978) o The bells (1979).
Guitarrista de escaso exhibicionismo
"ESCALERAS ARRIBA, LOS NEW YORK DOLLS ESTÁN PATEÁNDOLO TODO, /
CHICA MALA BUSCANDO UN BESO" (`Max's Kansas City', Wayne County, 1976)
¡soy POP,
LA RESURRECCIÓN
DEL `KAMIKAZE'
PATRICIA GODES
El 14 de abril de 1987, Iggy Pop cumplió
los 40. Veinticinco de esos años constitu-
yen una carrera musical insólita: ha atra-
vesado innumerables etapas, saltando de
la sordidez más real al vitalismo más de-
sesperado, con un tono siempre tan amar-
go y una vecindad tan peligrosa con el
caos que no se han podido establecer luga- nes de satén blanco y pecho al descubier-
res comunes sobre su música. No hay to. Se encontró a sí mismo en el escenario,
acuerdo respecto a las etiquetas y menos bajo la forma de un ser agresivo y exhibi-
aún respecto a cuáles son los mejores de cionista. Entonces nació el mito. Me aterra Estados
sus nueve álbumes en solitario (Kill city; Desde 1968 hasta 1973, fue el hombre Unidos. El país está basado en
The idiot; Lust for life; TV eye live; New va- escándalo oficial. Su actitud rompía con algunos valores realmente
lues; Soldier; Party; Zombie birdhouse, y las consignas hippies brindando sus susti- perversos. Es perverso el modo
Blah, blah, blah). tutos: autodestrucción, violencia, drogas en el que se sujeta a la gente.
Al contrario de lo que ocurre con su duras, decadencia y la estudiada estupi- Dicen que la muerte es el final,
música, sobre su figura se amontonan los dez que luego adoptarían los punks cuan- pero yo creo que lo peor es la
tópicos. Bien sea como el más salvaje, el do le eligieron como su único padrino. En indiferencia y el aburrimiento.
más drogadicto, el más musculoso o el aquellos días sólo fueron grupo de culto Si me garantizaran un sueldo
más degenerado, sus circunstancias per- para fanáticos: The Stooges (1969) y Fun fijo todas las semanas para
sonales superan siempre la trascendencia house (1970) no vendieron. Bajo la protec- tocar y ensayar, yo firmaría.
de sus discos, por buenos que sean. La ción de David Bowie, los Stooges graba- Ya sé que eso es comunismo,
gente quiere verle romper sus pantalones, ron Raw power (1973) y tuvieron una gran pero casi lo prefiero al
cortarse con botellas, insultar al público, campaña de promoción. Vivieron como capitalismo de la industria de la
pelearse o desplomarse definitivamente. rock stars, no triunfaron y acabaron des- música. Aquí, o estás abajo,
Ahora, tras su regeneración, van a ver al trozados. Después de separarse, Iggy se muerto de hambre, o en la cima,
superviviente. trasladó a California, hablándose de una convertido en un juguete
Y es que el éxito de James Newell Os- posible unión con los restos de los Doors, popular".
tenberg no es musical ni conceptual; sus pero todo acabó en un intento de suicidio
méritos son principalmente personales. y su posterior reclusión en un centro psi- Iggy Pop, 1982
Hay algo en su ser y su capacidad expresi- quiátrico. Ya curado, reemprendió su ca-
va que despierta la fascinación del público rrera con ayuda de Bowie, pero sucumbió
de un modo tan fiel como morboso. Hijo de nuevo a las drogas durante una gira
de un maestro, James creció en el remol- norteamericana. El público quería al Iggy
que donde su familia tenía el hogar, en hecho polvo que conocía y acabó tenién-
Ann Arbor, Michigan. Desde niño fue un dolo.
inadaptado, según dice, a causa de la ropa Después, su vida ha sido un lento pro-
que sus padres le elegían y su excesivo ceso de restablecimiento. "En los prime-
proteccionismo. Con otros delincuentes ros ochenta empecé a obsesionarme por
en potencia, formó grupos de escasa vida cómo me sentiría estando completamente
(los Iguanas; los Prime Movers). Se tras- sobrio. Sospechaba que mi promiscuidad
ladó luego a Chicago, tocando la batería sexual se entrometía en mi música impi-
con los bluesmen locales. La escucha de diéndome llevar una vida hogareña, y yo
los Doors le hizo volver al hogar. Allí, pensaba que en ella encontraría una base
como vocalista de los Stooges, comenzó a para trabajar más duro y mejor". Hoy,
vestirse a su gusto, pelo platino, pantalo- Iggy juega al golf, esquía, aprende surf, no
toma drogas, no bebe, intenta dejar de fu-
mar y está felizmente casado. Su último
elepé ha sido calurosamente recibido, ha
tenido su primer éxito con los Real Wild
Child (Wild one), y se siente optimista:
"Haré mis mejores discos dentro de cinco
o diez años".
"EL `ROCK' LLEGÓ A MÍ CUANDO PARECÍA QUE NO HABÍA ESCAPATORIA
POSIBLE Y ABRIÓ ANTE MÍ UN MUNDO DE POSIBILIDADES" (B. Springsteen, 1978)
Springsteen contó hasta 1984 con el Cuando por fin lo hace es algo tan imprevi-
guitarrista Steve van Zandt (a la sible como Nebraska (1982); 10 canciones
derecha) como soporte musical. registradas en solitario en su propia casa
miento, buscando con una grabadora de cuatro pistas; 10 títu-
ese algo intangi- los preñados de insondable tristeza y deses-
ble o simplemente peración. Así se descubre a un Springsteen
huyendo de la ascético, que adapta a su tiempo las ense-
realidad, dejan de ñanzas de Hank Williams o Woody Guth-
serlo. Ahora son rie, ofreciendo una imagen de América iné-
perdedores sin dita por su crudeza y realismo. Pero incluso
posibilidad de re- al final del peor viaje, y éste es de pesadilla,
dención, seres se encuentra "una razón por la que vivir".
que arrastran con Una obra de estas características podía ha-
ellos secretos in- ber sido fatal para su carrera, la evidencia
confesables, ani- de que no sabía hacia dónde dirigir su músi-
males que aúllan ca, pero Nebraska perdurará como el raro
en la oscuridad triunfo de un artista que supo arriesgarlo
sin conseguir por todo y presentarse desnudo ante su público
ello que cicatricen antes de iniciar la última etapa hacia el éxito
sus heridas inte- masivo.
riores. El lado Que llega en 1984, con el rotundo Born
sombrío del sue- in the USA, un elepé que lleva casi 20 millo-
ño americano ha nes de copias vendidas en todo el mundo.
encontrado a un Las nuevas canciones, nuevamente inter-
dotado cronista que además puede llegar pretadas junto a la inspirada E Street
a una gran audiencia. Acompañado por la Band, respiran un encomiable aire de coti-
formación clásica de la E Street Band, su dianidad. Son historias que suenan a ver-
Creador de una nutrida ya mítico grupo ' e acompañamiento, dad, no tanto porque parecen directamen-
escuela de cantantes urbanos, Springsteen se embarca en una gira por te tomadas de personas y anécdotas rea-
Bruce ha tolerado igualmente Estados Unidos que hará historia. Noche les, sino porque son esencialmente univer-
l as aventuras en solitario de sus tras noche, ante públicos que le conocen sales. Contrariamente a lo que ocurría en
músicos habituales. El más por la publicidad que por su valor Born to run, los personajes aspiran a for-
saxofonista Clarence real, Springsteen demuestra su visceral mar parte de una comunidad, a disponer
Clemmons ha sacado dos sinceridad mientras Max Weimberg (bate- de un pasado y una familia, un lugar en el
discos de soul. Steve van Zandt, ría), Garry Tallent (bajo), Steve van que vivir y un trabajo digno con el que ga-
alias Miami Steve o Little Zandt (guitarra), Roy Bittan y Danny Fe- narse el sustento.
Steven, puso su guitarra al derici (teclados) y Clarence Clemons Se le tacha de nacionalista exacerbado,
servicio de Springsteen hasta (saxo) edifican a sus espaldas un impo- de producto típico de la era Reagan. Lo es
1984, cuando decidió funcionar nente muro de sonido que va de una suave por oposición: basta con leer o escuchar la
por su cuenta. Van Zandt ha atmósfera al más devastador ataque fron- letra de Born in the USA para captar la
grabado hermosas baladas tal en un abrir y cerrar de ojos. vergüenza y frustración que siente el pro-
urbanas y piezas con un No habrá nuevo producto Springsteen, tagonista, un veterano de Vietnam, ante
voluntarioso contenido político, con la excepción de su participación en el su país. Son versos agrios y acerados, sen-
sin descartar futuras festival No Nukes y en las consiguientes pe- cillos, pero impactantes, y sólo alguien tan
colaboraciones con Bruce. lícula y disco, hasta octubre de 1980, fecha li mpio de corazón y lleno de coraje como
en que se publica The river. Concebido como Springsteen podía lograr que toda una na-
un compendio de todo lo hecho hasta el mo- ción, todo un mundo, quisiera oírlos. Esto
mento, también como una colección de esti- es lo que Bruce Springsteen nos ha ofreci-
los e influencias (soul, rockabilly, country, ba- do: un sentimiento solidario en una época
lada, etcétera), este doble álbum, a ratos dominada por la insensibilidad o la sensi-
festivo y a ratos melancólico, le abre defini- bilidad fraudulenta, una voz de ánimo de
tivamente todos los mercados. Es una triun- la que brota un torrente de palabras y mú-
fal exhibición de sus dotes como intérprete y sicas apasionadas, y algunos consejos
compositor, un verdadero caudal de sonido aprovechables. Que no se debe confiar a
y sentimientos. Su interés por lo social, por ciegas en los líderes. Que se ha de ser uno
las personas de carne y hueso, cuaja en can- mismo y pensar por uno mismo. Y que
ciones tan entrañables como la que da título sólo soñando se da el primer paso para
al disco, basada en la historia real de su her- que los sueños se hagan realidad. Su his-
mana y su cuñado: boda obligada por cir- toria se ha contado ya demasiadas veces,
cunstancias biológicas, dificultades eco- pero sigue resultando ejemplar.
nómicas, desempleo, hastío y desesperanza;
un final injusto para los sueños adolescentes
de la clase obrera.
En abril de 1981 realiza su primera gira
europea, y arrasa con su ilimitada entrega
sobre un escenario. Y de nuevo a esperar un
próximo disco que no parece llegar nunca.
"LOS MEJORES ARTISTAS DEL MUNDO SON LOS QUE ESCRIBEN SUS PROPIAS
CANCIONES ES IMPORTANTE CREERSE LO QUE DICES" (Bryan Adams)
DE FUEGO representante de
Bowie financiara
su primer álbum,
Chestnut Street in-
ANTONIO DE MIGUEL cident (1976), bajo
Artistas literaturizables. Amalgama de so- el apellido de
nidos sobre asfalto. Rockeros esquemáti- Cougar (puma).
cos, rockeros intelectualizados y rockeros Escaldado, se re-
desesperados. Vidas de urdimbre mítica, fugió en el Reino
premeditada, junto a vidas de neón fundi- Unido y firmó
ble. Dureza y refinamiento desposados en contrato con
las mismas camas de la agresividad ciuda- Riva, el sello de
dana. Latidos de urbe. Locuras consan- Rod Stewart. A
guíneas. Agonías de individualidad para biography conte-
un rock apasionante. nía la canción I
need a lover, que
Bryan Adams. Canadiense, nacido en servía para el ful-
1959. Demostró una precoz facilidad para minante lanza-
la composición: a los 18 años incrementó miento de Pat Be-
el repertorio de Bachman-Turner Over- natar. Luego ya
drive, Ian Lloyd, Prism o Kiss. Hombre de todo fue rodado:
gran ambición artística y aspecto físico John Cougar, Not-
atractivo, publicó en 1980 su primer ál- hin' matters...,
bum. Para el segundo contó con la más va- American fool, Uh-
liosa ayuda del productor Bob Clear- huh, Scarecrow.
mountain (Stones, Roxy, Springsteen). Cougar es un fan-
Cuts like a knife (1983) y Reckless (1984) tástico retratista
fueron sus puntos clave de repercusión in- de ambientes, po-
ternacional. Fluido compositor de melo- see una voz ca-
días robustas y letras adolescentes, canta liente (Rod Ste-
con voz ahogada, tiene la varita mágica wart, Bob Seger)
del rock comercial y parece haber supera- y escribe melo-
do su tendencia a ser catalogado como días que arras-
producto sexy. Discreto con la guitarra, tran, inteligente-
Adams no ceja en su empeño de ser un mente sazonadas
rockero para todos los públicos, limpio y de rock y soul. Sólo corre un peligro: estan-
trabajador, convencido de que sus cancio-
nes transmiten "inquietud romántica".
Garland Jeff reys ha sabido unir las Cale) le mostraron el lado duro del nego-
historias de la ciudad con cio. Miembro de oscuras bandas y pa-
contundentes ritmos tropicales.
seante sonámbulo de Nueva York en los
primeros setenta, tuvo su primera oferta
discográfica en 1973, y grabó un tema clá-
sico de su repertorio, Wild in the streets.
Tras varios falsos despegues, firmó por
A & M en 1976 y dio continuidad a sus
intuiciones de reggae, rock y soul. Ghost
writer, One-eyed Jack, Escape artist o Rock
and roll adult son visiones novelescas y
fantasmagóricas, sueños interculturales
bajo el manto instrumental de unos músi-
cos inmejorables. Luces nocturnas y amo-
res de raza para un hombre sensible a las
realidades sociales y a su propio papel de
artista.
M alcolm McLaren
estaba realmente interesado en
mis ideas (ropa desgarrada
urbano como Nueva York. Incompatible
por esencia, Hell es un lobo estepario que
se adelantó a su tiempo y al que no hay
época-moda-tendencia capaz de disecar.
The Echoes y The Hassles. Lo fichó CBS
en 1973, y allí construyó sus escalones a la
gloria del estrellato: Piano man, Streedife
serenade, Turnstiles, The stranger, 52nd
Raíz de punkies y estertor de rockeros ur- Street, hasta llegar a The bridge (1986).
cogida con alfileres, pelo corto, banos, la suya ha sido una vida extremis- Con una banda casi permanente y el tone-
bla, bla, bla). Me quería llevar ta, aunque en los últimos tiempos se haya laje de un supervendedor, Joel ha ido per-
a Inglaterra para hacer un grupo remansado, por aquello de las dulzuras diendo sinceridad y ganando poderío téc-
que marcara nuevas del matrimonio. nico. Le sobra oficio y ha tenido todo el
tendencias, que introdujera éxito que a otros de sus conciudadanos se
nueva sangre en la música, John Hiatt. Originario de Indianápolis les negó. Su célebre composición Just the
volviendo al propósito original (1952), el primer inductor para su poco re- way you are pasa por ser una de las más
del rock, que es tener lazos compensada carrera musical fue su her- versionadas de todos los tiempos. Disci-
de comunicación entre los mano mayor, que se suicidó cuando John plinado y seguro de sí mismo, ha termina-
jóvenes. No quise ir con él. Un tenía nueve años. Hincha de Elvis, Curtis do convenciéndose de que su música re-
par de meses más tarde oí Mayfield y The Band, Hiatt tiene una per- presenta el lado más blando de Nueva
hablar de unos tales Sex sonalidad frágil y sentimental. Las prime- York.
Pistols". ras conexiones profesionales las tuvo a
mediados de los años setenta: se fue a Nils Lofgren. Nacido en Chicago (1953),
Richard He¡¡ Nashville y aprendió las artes de composi- de madre italiana y padre sueco, crecido
tor. Pasó por varias compañías, editó ál- en Washington, echó los dientes tocando
bumes sin ningún éxito -Hangin' around el acordeón, el piano y la guitarra. Reco-
the observatory, Overcoats, Slug line, Two bit nocido admirador de Hendrix y el pop bri-
monsters, All of a sudden-, algún crítico tánico, Lofgren es uno de esos talentos in-
osado le llamó el Elvis Costello a la ameri- fravalorados, desaprovechados, que se ha
cana, y las notas fundamentales que lo de- convertido en acompañante de lujo, pero
finen son su voz poco educada, afán de que no encuentra la fórmula para ser reco-
mantenerse al margen de las tribus, carác- nocido en lo que él mismo vale como solis-
ter intimista y poco sofisticado (canciones ta. Ni siquiera su integración en la banda
en esqueleto). Un caso evidente de subes- de Springsteen parece que vaya a cambiar
timación. su suerte. A los 15 años formó sus prime-
ros grupos, y a los 17 tocó con Neil Young.
Garland Jeffreys. Mulato, nacido en
Brooklyn (1944), Garland creció estudian-
do a Shakespeare, jugando al béisbol y
graduándose en arte. Escuchar a Frankie
Lymon le empujó a fijar su atención inte-
lectual en el pop. En 1966, algunos amigos
especiales (Lou Reed, Eric Burdon, John
"A LOS 17 AÑOS LLEGUÉ A GREENWICH VILLAGE. VIVIENDO EN LAS
CALLES UNA SEMANA APRENDÍ MÁS QUE EN TODA MI VIDA" (Nils Lofgren)
Tenía ya su propia banda, Grin, muy roc- Willy de Villa, cantante de Mink de
kera y saludable, y publicó cuatro elepés de Villa y una de las voces más persuasivas
inexistente resonancia. En 1974 se disol- de la última década.
vieron, y Nils compaginó sus colaboracio- Elliott Murphy.
nes como guitarrista con sus trabajos en Neoyorquino de
solitario: Nils Lofgren, Cry tough, Back it 1949, en los años
up, I came to dance, Night after night, Nils, del glamour se le
Night fades away... Álbumes temperamen- llamaba el Gatsby
tales en los que logra transmitir mucha del rock por sus
energía y mucha verdad. elegantísimas
prendas de vestir.
Meat Loaf. Con la potencia de una apiso- Murphy es otro
nadora irrumpió Meat Loaf en el mundo desheredado te-
del rock. Un álbum torrencial (Bat out of naz y convicto.
hell), una voz torrencial, unas letras to- Aunque Lou
rrenciales, todo era grandioso en el primer Reed le apadrina-
disco de Cacho Carne (apodo obvio que se ba, aunque sus te-
mereció desde los 13 años por su aspecto). mas guardan el
Marvin Lee Aday nació en 1947, en Dallas calor de estrofas
(Tejas) y actuó en muchísimas obras tea- dylanianas, aun-
trales, incluidas Hair y The rocky horror que le han produ-
show. Ted Nugent le hizo cantar en Free cido profesiona-
for all (1976); en 1977 se avalanzó con les contratados, y
Bat... Composiciones de Jim Steinman aunque en Euro-
(wagneriano confeso), producción de pa ha recibido el
Todd Rundgren, portada de Richard Cor- calificativo de ge-
ben, muchas guindas para un pastel sono- nio, su carrera es
ro de riquísimos sabores dramáticos que una sucesión ple-
vendió muchos millones de copias en los na de fracasos co-
años siguientes. La continuación, Dead merciales. Aquas-
ringer (1981), no tuvo tanto eco, al igual how (1974), Lost
que ocurriría con el disco en solitario de generation (1975),
Steinman Bad for good (1981).. Separados, Night lights (1976)
los posteriores intentos de Meat Loaf por y Just a story from
ofrecer un rock más venial han sido peque- America (1977) lo
ños fracasos. convirtieron en
un involuntario
Mink de Ville. Aunque Willy de Ville apestado de muy
(1953) formó su banda en San Francisco fina creatividad.
tocando blues y boogie, volvió a su ciudad
natal (Nueva York), atraído por un esce- Tom Petty &
nario magnetizador (el del club CBGB), y Heartbreakers.
tan sólo respirando hondo se empapó del Aspecto blando, brazos duros y nervios
aroma circundante. Cabretta (1977), su rockeros conforman a Tom Petty, guita-
primer elepé, era un clásico del mejor rock rrista y cantante de Florida (1952), emi-
callejero: crisol de experiencias del gueto, grado a Los Ángeles, descubierto por La vida evoluciona
expresadas con violencia en la maleable Denny Cordell, copropietario de Shelter rápidamente y veo que mis
voz de Willy. Spanish stroll fue un tema Records. Crea una banda cuya única meta actitudes se han quedado
prodigioso y su único éxito. fue trabajar en una idea de sonido muy en- anticuadas en algunos
carnado en los años sesenta, cruce de Ed- aspectos. Me acerco a los
Eddie Money. Edward Mahoney (1949), die Cochran y Byrds. Mike Campbell (gui- 40 años y no puedo pretender
de origen irlandés, fue hippy y policía antes tarra), Ron Balir (bajo), Bermont Tench ser todavía un Leen-age. Eso
que rockero. El promotor Bill Graham le (teclado) y Stan Lynch (batería) son los no significa que no ame el rock
descubrió. Su debú fue fantástico, pero Rompecorazones. Sus dos primeros dis- and roll, sino que me
sus cinco obras posteriores no transmitie- cos, Tom Petty & The Heartbreakers (1977) interesan también otros tipos
ron la misma credibilidad. Oscuras histo- y You're gonna get it (1978), chorrean con- de música. Gershwin fue el
rias de drogas, accidentes y descontroles vicción. Con el cambio de productor (Jim- compositor norteamericano
han hecho imposible su sueño de conver- my Iovine) el sonido se hizo más grandio- más grande, porque trabajó
tirse, como decía una de las canciones del so, con desarrollos más épicos, pero siem- en muy diferentes medios y
primer elepé, en una rock and roll star. pre nacidos en el corazón tradicionalista llevó el sonido de la calle a los
de Petty. Damn the torpedoes, Hard promi- teatros de ópera".
ses y Southern accents los han convertido
en una banda top 1 en EE UU. Billy Joel
Jonathan Richman. Sus primeras armas
musicales las hizo como erudito y obsesi-
vo estudioso de la obra de Velvet Under-
"VIVIMOS EN LAS CALLES / PORQUE SOMOS LAS REINAS DEL
RUIDO, / LA RESPUESTA A TUS SUEÑOS" (The Runaways)
Television. Decir
Television es decir
Tom Verlaine. Na-
cido en Nueva Jer-
sey (1951), su
nombre real es
Tom Miller. Mal
aprendiz de piano,
mal aprendiz de
saxo, se dedicó a
la guitarra y fue
durante años más
escritor que músico, estando íntimamente el epitafio, ya que en agosto de ese año, una
ligado a Patti Smith. En 1971 tuvo su pri- el epitafio, ya que en agosto de ese año, una
mer grupo, Neon Boys, con Richard Hell noche de luna llena, Television cesó de emi-
(bajo) y Billy Ficca (batería). Un par de tir. Verlaine ha continuado con sus cadenas e encuentro solo, /
años más tarde, los tres citados más Ri- privadas (Tom Verlaine, Dreamtime, Words rodeado de extraños que antes
chard Lloyd (guitarra) formaron Television. from the front...), sin perder el hálito deca- fueron mis amigos; / estoy
Las discusiones entre Hell y Verlaine se re- dente que le cuelga de la mirada. cada vez más lejos de ml
solvieron con un nuevo bajista, Fred Smith, hogar / y confieso que he
aunque hubo una larga historia de dificulto- Warren Zevon. Bohemio empedernido, frá- perdido el rumbo. / Había
sas grabaciones nunca finalizadas, con pro- gil de carácter y aspecto, desde que vino al demasiados caminos. / Vivo
ductores como Eno o Allen Lanier. Fue la mundo en Chicago (1947) no ha cesado de para correr / y corro para
última banda de la oleada neoyorquina de buscar su oportunidad. Notable pianista, vivir. / Nunca me equivoco a
los primeros setenta que editó oficialmente extraordinario compositor, grabó cintas ar- l a hora de pagar / ni en lo que
sus elepés, con lo que Verlaine pudo reelabo- queológicas en California, y sus temas apa- debo. / Me muevo a ocho
rar estéticamente lo que se vendía ya como recen en algún disco de los Turtles. Músico millas por minuto / durante
rock urbano de Nueva York. Después de de estudio y compositor publicitario, tocó meses y meses, / rompiendo
Little Johnny Jewel (1975), un single lanzado con los Everly Brothers y hasta se aparcó todas las normas. / Me
de forma privada, firmaron por Elektra, y una temporada en España. A mediados de encuentro buscando un
Marquee Moon (1977) entró directamente los setenta, de la mano de su amigo e idola- refugio otra vez / contra el
en la sección de discos fetiche de la época. trador oficial Jackson Browne, inició su lú- viento. / Soy ya viejo, pero
Una obra que resumía ciertos clichés y re- cida aventura: Warren Zevon; Excitable boy, sigo corriendo contra el viento".
cordaba momentos brillantes de la Costa Bad luck streak in dancing school, Stand in the
Oeste más perdurable. Adventure (1978) fue fine, The envoy. Su indefenso porte universi- Against the wind, Bob Seger
tario no coincide con su robusta manera de
hacer música, poética pero con entereza,
desmarcándose de sus colegas de Los Án-
geles. Una intensidad que le nace en la voz y
le ayuda a desgranar perversas historias
electrificadas, macizas. En tiempos recien-
tes lo patrocinan los sureños R. E. M.
"CUALQUIER ARTE DEBE SUFRIR RETOS, CAMBIOS, REINTERPRETACIONES.
SI NO SOBREVIVE, ES QUE NO VALE LA PENA" (Tom Waits, 1986)
T
Tom Waits ha sabido experimentar y crear
con éxito un sonido único.
ble, mezcla de
jazz y blues con
OM WAITS elementos van-
guardistas, adere-
LA VOZ INSONDABLE DE zados siempre
UN MONSTRUOSO DESAGÜE con una letras
que por sí solas le
consagran como
JOSÉ MARTA MARTI FONT uno de los gran-
La carrera artística y personal de Tom des cantores de la
Waits podría muy bien ilustrar la trans vida norteameri-
formación sufrida por algunos de los cana.
miembros más lúcidos de su genera- Y cuando ya se
ción cuando pisaron el último escalón especulaba con el
de la década de los setenta. Siguiendo tiempo que le
con cifras, convendría aclarar que, al quedaba a su hí-
haber nacido en 1950, habría que su- gado o con la ma-
marle la crisis que implica cumplir los trícula del coche
30 y tener la oportunidad de subirse al que le atropellaría
último vagón de la adultez a tiempo. una madrugada,
Porque Waits, a lo largo de la década Waits escapó de
pasada, llevaba una larga y decidida l a quema. Los
carrera hacia la autodestrucción pre- amigos llegaron
coz, lo que sirvió para que produjera en su rescate.
con cierta perseverancia algunos de los Francis Coppola
mejores álbumes de los años setenta. le encargó la ban-
Si no fuera porque el término rock da sonora de Co-
tanto vale para un roto como para un razonada (One
descosido, a este hombre sería dificil from the heart) y
clasificarle. Más que un cantante, empezó a darle
Waits es un actor, un chansonnier, casi papeles anecdóti-
un cantautor. Su obra rastreaba, y si- cos en sus pelícu-
gue haciéndolo, entre lo más nausea- las (el obtuso
bundo de la noche, entre vómitos, deli- dueño del billar
rium tremens, violencia gratuita, amo- de Rumble fish, el
res imposibles y desamores ciertos, y camarero de Out
todo esto no era un delirio de su imagi- siders, el gorila de Cotton Club). Aquel percusiones caseras y, sobre todo,
nación, una fantasía gloriosa; su vida trabajo, más estable, le proporcionó una voz más profunda que nunca, un
era exactamente así. una tregua. rugido capaz de fundirse con cual-
La pequeña colonia de artistas que Sin embargo, su casa de discos le quiera de los instrumentos o acallar-
pululaba en aquellos años por el decré- había abandonado, y los críticos de los a todos. La voz.
pito centro de Los Ángeles podía verle Los Ángeles le situaban musicalmen- Además, por supuesto, una mujer.
cada noche, cuando ya empezaba a cla- te en un callejón sin salida. Entonces, En 1981 se casó con la actriz Kathleen
rear, aporreando de mala manera el la compañía Island le ofreció un con- Brennan, y poco después llegó el pri-
viejo piano destartalado del café Ato- trato, y con él llegó Swordftshtrombone mero de sus dos hijos. Siguió un tiempo
mic, mientras rugía, con esa voz de de- (1983), un trabajo conceptual en por California, pero finalmente decidió
sagüe insondable, incongruentes frases esencia que desbordaba el contenido emigrar al Este. Ahora vive en Nueva
mezcladas con sonoras y repetitivas in- del vinilo (Waits quiere convertirlo en York, asegura que ha dejado de fumar,
terjecciones soeces. Luego, algún alma una obra teatral). Intrincadas estruc- bebe con moderación y ha iniciado una
caritativa, a menudo en forma de mu- turas sonoras, exuberante instrumen- sólida carrera como actor de teatro y
jer, conseguía llevárselo a trompicones, tación, en la que cabían marimbas y cine, de la que es un buen ejemplo su
cuando no con los pies por delante. trabajo en Down by the law, de Jim Jar-
Tom Waits era una institución, a ve- mush, en la que trabaja junto a otro
ces lamentable, pero también era un músico carismático: John Lurie.
músico y un artista de categoría incon- Su último álbum, Raindogs (1985),
mensurable. Algo que ya se aprecia en la línea del anterior, pero con 19
desde sus primeros álbumes, como HISTORIA DEL `ROCK' canciones, sigue desprendiendo la fuer-
Closing Time (1973) o The heart of satur- za de sus comienzos, pero además de-
day night (1974), en los que aún no ha- nota una intensa búsqueda hacia ade-
bía encontrado un camino definido, PRóXIMO CAPITULO lante. No puede ser de otra manera,
pero que se plasma en los magistrales porque, según su teoría, "una canción
Heartattack and wine (1980) y Small debe tener su propio sistema nervioso.
change (1976), en los que desarrolló un La melodía es como el humo, y el ritmo
estilo totalmente personal e inclasifica- 'ROCK' EUROPEO son las toses".
HISTORIA DEL `ROCK'
La sacudida de mayo de 1968 también llegó al rock. En
Europa, los músicos más inquietos se plantean el concepto
de grupo, la idoneidad de los instrumentos convencionales
para plasmar su tiempo, y la necesidad de buscar una identi-
dad propia lejos de los esquemas importados. Esa conmo-
ción produjo una notable efervescencia creativa en Alema-
nia Occidental, con iniciativas innovadoras reflejadas en
grupos como Can o Kraftwerk (en la foto), que exportan sus
hallazgos, aunque sin alcanzar comercialmente a fenómenos
como el grupo Abba. En España, el rock pasó por momentos amargos, para resu-
citar a partir de 1975, con la aproximación a las raíces musicales autóctonas (Tria-
na; Dharma) y el establecimiento de vías de expresión urbana (Burning; Tequila).
El grupo francés Magma transmitió en comercial para que las grandes estrellas
su música una concepción esotérica del rock incluyan Europa en sus giras. El
cargada de simbologías. rock tiene su propia butaca reservada en
varios puntos claves del continente.
Las floraciones artísticas que se suce-
dan en los 'años setenta serán un reflejo
más de lo que ocurra en las dos grandes
capitales del mundo rockero. Son días
progresivos. El rock busca fecundaciones
de nivel cultural más elevado: música clá-
sica, jazz, vanguardias electrónicas...
Tres componentes fáciles de desarrollar
en Europa, ya que incluso el jazz (el menos
blanco de los tres elementos) siempre ha
sido visto en el continente como un inqui-
lino bienvenido y agasajado.
En Francia y la República Federal de
Alemania (RFA), sociedades a las que el
torbellino del Mayo del 68 inyectó altas
dosis de revolucionarismo, se centrarán
W0 las materializaciones más fantasiosas,
Y más atractivas y, de hecho, las que global-
0 mente colorearán el rock europeo de la dé-
0 cada como un producto progresista. As-
pecto que, sin embargo, no impide que sea
un grupo pop holandés de pocas pretensio-
a nes, Shocking Blue, el primero en llegar a
número uno de las listas americanas con
Venus (1970). Música sencilla y comercial,
a la que Mariska Veres pone su voz y su
melena.
La utopía ha nacido Bandas mucho más arrogantes como
para mí de un largo silencio. Kayak y Ekseption optan por la onda sin-
Durante toda mi juventud no
dije ni una palabra. Escuchaba A CONEXIÓN fónica. Titanic y, sobre todo, Golden Ea-
rring obtienen algunos éxitos con su rock
a todos, pero no decía nada básico de guitarrazo. Los que alcanzan
porque me sentía extraño a sus
preocupaciones. No sabía si
EUROPEA desde Holanda un mayor grado de acerca-
miento a los mercados británico y ameri-
yo estaba loco o era el mundo el ANTONIO DE MIGUEL cano fueron Focus, banda sustentada en
que lo estaba. Los políticos El rock europeo no ha alcanzado nunca su dos músicos de indiscutible valía técnica,
discutían y la gente discutía las mayoría de edad. Contrapesar su historia, el guitarrista Jan Akkerman y el teclista-
discusiones de los políticos. sus nombres, sus logros, con similares pa- flautista Thijs van Leer. Álbumes como
Mientras, yo sentía la rámetros del rock anglo-americano, es un Moving waves y Focus 3 fueron respetados
impasividad definitiva del ejercicio de crueldad en el que se adivina internacionalmente antes de que el grupo
universo. Pero ahora sé que fácilmente la conclusión. Europa ejerció, se resquebrajara. Con intereses más ico-
este juego no durará mucho eso sí, desde finales de los años cincuenta, noclastas surgirían a finales de los setenta
tiempo, y que es preciso una aplicada labor de caja resonante, de- el Gruppo Sportivo y una personalidad in-
cambiarlo rápidamente. He jándose seducir por todos los ritmos que teligente, Hermann Brood.
decidido combatir, animado de venían del Reino Unido y de Norteaméri- En Dinamarca, los que más discos ven-
un odio enorme, lo que todas ca, a la par que generando figuras nacio- den son Gasolin', banda de rock discreto
esas gentes han hecho en este nales de semejante identidad y discutible en la que anida un futuro solista aprove-
mundo". originalidad. chable, Kim Larsen. Sin olvidar a un gru-
En los años setenta, las asignaturas po de culto, Savage Rose, de los hermanos
Christian Vander, de rockeras ya habían sido absorbidas pro- Koppel. Finlandia produce una banda
Magma. fundamente en unos países de sociedad exótica, que, gracias al interés del sello
avanzada y consumista como Francia, británico Virgin, encuentra mayor eco del
Italia y Alemania Occidental. Las compa- lógico a su talla, Wigwam. No sólo el gru-
ñías discográficas practican una política po Abba anima Suecia, mercado con un
de ediciones amplia y rápida (el mercado prolífico nivel de ediciones propias, aun-
discográfico de esos tres países goza de que sólo algunos nombres trascienden al
una dinámica envidiable), y proliferan las
revistas especializadas, y otras de carác-
ter juvenil más divulgativo, que barajan ti-
radas más que rentables. Televisiones y
radios proyectan la actualidad palpitante
de los éxitos y las nuevas tendencias. Exis-
te la necesaria infraestructura técnica y
"SOMOS UN GRUPO DE GENTE DESCONCERTADA
VIVIENDO UNA SITUACIÓN CONFUSA" (Faust)
resto del continente: Tomas Ledin (aman- Por el grupo Gong desfilaron
extraordinarios músicos de diferentes
te de los ritmos negros), Hanson & Karl- países.
sson (órgano y batería que explotan la eti-
queta swedish underground), Michael B.
Tretow (hombre orquesta polivalente),
Magnus Uggla, y Made in Sweden, banda
de la que sale Georg Wadenius, futuro gui-
tarrista de Blood Sweat & Tears.
En Grecia, toda la herencia queda en
manos de Aphorodite's Child y las aven-
turas megalómanas de su teclista Vange-
lis. También se dejan escuchar voces hún-
garas con reivindicaciones rockeras (Lo-
cocomotiv G. T.; Omega; Skorpio) y algu-
nos pérfidos investigadores polacos que
aman el jazz y los ritmos friccionantes
(Czeslaw Niemen; Breakout; Michal Ur-
baniak). Hasta Emerson Lake & Palmer,
quizá sin saberlo, tienen sus discípulos
checoslovacos en el trío Collegium Mu-
sicum.
Italia muestra un abanico más multico-
lor. Bandas jazz-rock muy inspiradas por
colores mediterráneos (Nova y Perigeo),
trabajadores del sinfonismo pasados lue-
go a los falsetos disco tipo Bee Gees (New
Trolls), músicos todo terreno, péro disco-
gráficamente confusos (I Pooh), bandas
politizadas de difícil catalogación rockera
(Area; Arti + Mestieri), descubrimientos
del sello Manticore apadrinados por el
omnipresente Keith Emerson (Premiata
Forneria Marconi; Banco), o algún disco
raro del por entonces casi desconocido cos y españoles. Alíen vuelca en Gong su
Franco Battiato, que publica en 1974 su filosofía patafisica, su bohemia de freak
disco electrónico Clic, dedicado a Stock- vocacional, su eclecticismo poético y mu-
sical, y deja una discografia de enorme in- La comercialización y
hausen.
Italia da además un gran productor y terés liberalizador: Camembert electrique; publicidad del rock alemán
estrella del negocio discográfico, Gorgio The flying teapot; You; Angel's egg... Mag-
como etiqueta exportable la
Moroder, luego reinjertado en la RFA ma, por su parte, tiene igualmente su pon- llevan a efecto el periodista
para crear el discotequero sonido Munich tífice en la figura de Christian Vander; Rolf-Ulrich Kaiser y el
(Donna Summer...). Francia amplía en amante de la utopía y la cosmología, se in- productor Peter Meisel al crear
los setenta su espectro de nombres con venta un lenguaje (el kobaia) y fabrica la el sello Ohr (oreja) y teorizar
Ange y Triangle (rock sinfónico), Zoo, y concepción esotérica que Magma siempre sobre la nueva música pop
Chute Libre (dos épocas del jazz-rock), ha transmitido en su música y su simbolo- alemana. Las portadas de
Jean-Patrick Capdevielle (imitador ilusio- gía. De equívoco pelaje ideológico (algu- Ohr pasarán a la historia del
nado de Springsteen), Telephone, y Trust nos discos tienen títulos fácilmente mani- diseño por su tremendismo
(rock duro), Litúe Bob Story o Starshooter pulables, Mekanik Destruktiw Komman- provocador. Ese¡ sello británico
(nuevo impulso urbano), Clearlight, y doh), la verdad es que Vander consigue independiente Virgin el que
Christian Boulé (vanguardia electrónica una banda estimulante y poco comprendi- -primero vía importación y
de estudio), y el inefable Jean-Michal Ja- da, férrea en sus grafismos, creadora de luego con fichaje de grupos-
rre (electrocomercialidad). una convulsa marea de significados y esti- introduce el rock alemán en el
De la escena gala, dos nombres mere- los, y que no ha sido igualada en su mag- mercado europeo con visos
cen ser destacados: Gong y Magma. Mu- netismo por ningún otro grupo francés. de credibilidad.
cha fantasía y recreación de mundos idea- La RFA es el único foco que brilla con
les en ambos. Gong es el hijo mental del luz propia y que es capaz de organizar un
australiano David Allen, que pasó por la movimiento con etiqueta comercial expor-
primera formación de Soft Machine. Gru- table al mercado internacional: el kraut-
po flexible, disparatado, por él desfilan ex- rock o rock alemán. Es una corriente musi-
traordinarios músicos franceses, británi- cal íntimamente ligada a la identificación
arte-ciencia (de ahí su liturgia tecnológi-
ca), que convierte la improvisación en dei-
dad y que nace con el deseo de enfrentarse
al monopolio anglo-americano por parte
de una juventud aburrida de soportar el
estigma nazi como descabello cultural
permanente. De hecho, fue el país donde
"NUESTRA MÚSICA ES EL SONIDO DE LA VIDA INTERIOR; SÓLO PRETENDE
ESTIMULAR LA IMAGINACIÓN DEL OYENTE" (Edgar Froese, de Tangerine Dream)
KRAFTWERK,
GENERADORES
DE RUPTURA
DIEGO A. MANRIQUE
Han protagonizado, para horror de mu-
chos, la más completa contestación a los
presupuestos estéticos del rock. Recha-
zando sus raíces norteamericanas, han
optado por un sonido incardinado en el
tiempo presente, producido a través de la
última tecnología sonora. Frente a la habi-
tual actitud hedonista de los músicos, se
presentan como obreros que cumplen ho-
rario en el estudio de grabación. Recupe-
ran la herencia de las vanguardias eu-
ropeas anteriores a la II Guerra Mundial y
son minimalistas convencidos.
Kraftwerk ni siquiera muestran sínto-
mas de vanidad, a pesar de que sus paten-
tes están en la trilogía berlinesa de David
Bowie, en el más salvaje hip-hop de la ne-
gritud neoyorquina, o en los destacamen- de la música repetitiva a los sintetizadores
tos de grupos de sintetizadores. Operarios
satisfechos del buen acabado de su traba-
jo y nada descontentos con su paga, están
ajenos a los modos del show business. Ralf
pop; convenientemente recortada, penetra
en numerosas emisoras, tanto comerciales
como de vanguardia.
Con ocasionales caprichos experimen-
Es ridículo pensar que
el hombre está dominado por la
máquina. Existe una
Hütter (1946) y Florian Schneider (1947) tales, Kraftwerk se abren al gran público:
conectan en Dusseldorf allá por 1968. En los ritmos se hacen cada vez más baila- i nteracción entre ambos, la
su pasado, estudios de conservatorio y de- bles, las melodías aspiran a la simplicidad máquina ayuda al hombre y
vaneos en grupos de jazz o blues. Un deseo de canciones de cuna para la era del chip, y éste se siente agradecido.
de integrar los sonidos de la civilización la sequedad sintética se combina con un Nosotros amamos a nuestros
industrial en su música los lleva a fundar discreto humor. El sector más enterado aparatos, tenemos con ellos
Organisation, que desemboca en Kraft- queda seducido por su dominio técnico una relación... erótica. Está
werk (Central Eléctrica). -disponen de su propio estudio, Kling naciendo el hombre-máquina. Y
Sus primeras creaciones, Kraftwerk Klang- y por la integración del vídeo y la no hay motivos para sentirse
(1970) y Kraftwerk 2 (1971), los muestran cibernética en sus espectáculos en vivo. asustado por esta nueva
agresivos, tanteando las posibilidades del Tienen además un andamiaje teórico del sociedad".
estudio, integrando electrónica e instru- que no presumen.
mentos convencionales con la ayuda del Tras Radiactivity (1975), Trans-Euro- Florian Schnelder, 1978.
productor Conrad Conny Plank. Con pe Express (1977) y The man machine
Ralf + Florian (1973) pierden aspereza y (1978) llega Computerworld (1981). Pie-
ganan en nitidez. En Autobahn (1974) de- zas melifluas y escuetas, música ambien-
muestran que tienen futuro comercial: la tal de cuidado diseño, detalles graciosos
pieza que le da título es la descripción en (uso de calculadoras, vocación políglo-
22 minutos de un recorrido por una auto- ta) y completa asepsia ideológica. Lue-
pista, una feliz adaptación de las fórmulas go, justo cuando sus concepciones domi-
nan las listas de éxitos, desaparecen. Al-
gunos trabajos ocasionales, como el
tema Tour de France (1983) o la colabo-
ración con el cineasta Fassbinder en el
filme Berlin Alexanderplatz, recuerdan
que siguen en activo, preparando alguna
sorpresa. Pero Electric Cafe (1986) sim-
plemente demuestra que se han hecho
más lacónicos y esquemáticos. Un es-
fuerzo de depuración que seguramente
no se les agradecerá.
"SOMOS UNO DE LOS POCOS GRUPOS DEL MUNDO QUE PUEDE PERMITIRSE EL
LUJO DE HACER EXACTAMENTE LA MÚSICA QUE LE GUSTA" (Benny Anderson)
C
setenta con la música cerebral del
grupo Can.
AN, RITOS
DE LUNA LLENA
J. MARTA REY
Diez años antes de que grupos actuales
como Talking Heads o PIL oficializaran el
término art-rock, Can ya lo servía en una
primera edición. Surgidos en los revueltos
tiempos del mayo de 1968 francés, prácti-
camente al lado de Colonia (Alemania Oc-
cidental), su particular lectura de los fenó-
menos sociomusicales de la época y la in-
gestión devota del floreciente underground
(Pink Floyd, Soft Machine o las ácidas co-
rrerías californianas) los llevarán al estre-
no de un nuevo capítulo, el rock alemán.
En un país donde el brote hippy prendió
con fuerza, la distancia fisica respecto del
modelo anglosajón produjo una visión in-
telectualizada que la música de Can ilus-
tra con su carácter cerebral. Ese rostro au- dos. Jaki Liebezeit (1938) hacía free jazz en
tóctono de su sonido y un sugestivo con- Manfred Schoof Quintet. Y Michael Karoli
cepto de hipnosis rítmica y rotación mini- (1948), el más joven, pasó de consumado
mal los acreditan como el grupo continen- violinista a guitarra exuberante. olger Czukay pasa
tal por excelencia y uno de los más influ- La primera formación se completaba por ser uno de los chiflados más
yentes de la década. Respetados por las con dos norteamericanos: un profesor de geniales del pop. Artífice de
nuevas generaciones, son además pione- arte, Malcolm Mooney, que ponía su voz sonidos complejos con Can, ex
ros en un montón de cosas: integración de negra, y David Johnson, flautista de fugaz alumno de Karel
elementos étnicos sobre tramas futuristas, estancia. Se sirvieron del rock para inocu- Stockhausen y dueño de
percusiones tribales y preindustriales, se- lar sus revolucionarias tesis de ruptura es- cumplido currículo -Brian
llos independientes propios y cirugía elec- tética. La suerte les acompañó. Editado Eno, The Edge-, Czukay ha
trónica de instrumentos, precursora del en su propio sello, su primer álbum, Mons- descubierto el valor supremo
tecno. Su música es pura alquimia. Resiste ter movie (1969), les proporcionó una cier- del arte simple. Avieso
el embate del tiempo. Arquitecturas móvi- ta popularidad. Les llovieron ofertas para observador, sus álbumes en
les surcadas de laberintos teclísticos. bandas sonoras (Deep end, de Skolimovs- solitario albergan joyas del
Eclecticismo polarizado entre la rienda ki, entre otras), que el grupo reúne en i ngenio y la ironía, collages
suelta (Tago Mago, 1972) y la sutilidad me- Soundiracks (1973). En Zúrich realizan minimalistas de lúdica factura
lódica (Ege Bamyasi, 1973). Libertad ex- una actuación de vanguardia, Prometheus, por cuyo objetivo han pasado
perimental bajo control, dispensada entre y en 1970, Damo Suzuki (1950), un estra- el poder de los medias, una
densas exploraciones, cancioncillas leves. falario japonés que encuentran cantando celebración católica en la que
Tipos realmente curiosos, perturbados en las calles de Múnich, sustituye a Moo- utiliza la voz de Juan Pablo II, o
por la fiebre del momento, sacrificaron un ney. Será su período más efervescente. Fu- una excéntrica versión del
estable futuro por la incierta senda del rock. ture days (1974) los descubre definitiva- himno chino.
No les fue mal. Aunque tuvieron mejores mente en el Reino Unido. Mientras tanto,
críticas que ventas. Cuando los hippies llega- aparece Limited edition, colección de su-
ron, ellos eran ya gente mayor. Su teclista, puestos anuncios televisivos, miniaturas,
Irmin Schmidt (1937), pasaba de los 30 y las exóticas series de falsificaciones et-
años. Discípulo de músicos contemporá- nológicas realizadas, como todo su mate-
neos como Stockhausen y Berio, alternaba rial, en sus estudios, Inner Space. Incluso
su puesto en una orquesta con la dirección y disfrutaron de un par de singles en las lis-
los conciertos de piano. Holger Czukay tas: I want more y su perversión del villan-
(1938) era el bajista y manejador de los rui- cico Silent night.
Damo se va con los testigos de Jehová.
Siguen como cuarteto hasta Saw delight
(1977), en que reclutan a Rosco Gee y
Reebop Kwaku Baah (Traffic). La música
se aplaca, pero poco a poco su estela se
desvanece. Sus miembros se desperdigan,
y para 1982, Can ya no existe.
"A DIFERENCIA DE LA MÚSICA CLÁSICA, EN EL `POP' TIENES QUE EXPRESARTE
EN CUATRO MINUTOS, UNA LIMITACIÓN QUE AGUDIZA EL INGENIO" (F. Battiato)
EL FURGÓN
DE COLA
JESÚS ORDOVÁS
Los años setenta no fueron demasiado fá-
ciles ni felices para el rock español. Al co-
menzar la década, la era dorada de los
grupos había tocado a su fin. Los Brincos,
los Bravos, los Cheyenes, los Sirex y el
resto de los grupos pop y rock que tantos
éxitos habían logrado a mediados de los
sesenta estaban separados o malvivían de
las galas veraniegas. Unos y otros habían
sido incapaces de responder con un míni-
mo de creatividad e imaginación al desafio
de la fabulosa expansión del rock británico
y norteamericano.
El mercado discográfico español era ya
lo suficientemente importante como para
que las compañías multinacionales ven-
dieran sus productos a un público joven
"ávido de nuevas experiencias. Pero a la
hora de hacer rock progresivo, under- más consistentes. Edigsa edita en 1975 el
ground, o rock sinfónico, malamente po- álbum de Sisa Qualsevolt nit pot sortir el sol;
dían los poco curtidos y escasamente do- aparece Iceberg; la Orquesta Mirasol; la
Companya Eléctrica Dharma, y Fusioon; Los primeros años
tados grupos españoles competir con las
grandes bandas anglosajonas y sus impre- la & Batiste, y Pau Riba, ponen en las setenta están dominados por
sionantes equipos. Sin embargo, lo inten- tiendas discos más atractivos y calientes. l as canciones de verano.
taron. Es entonces cuando despegan los festiva- Mientras los grupos
Máquina fue uno de los primeros gru- les de rock, con Canet como gran centro progresivos y underground
pos progresivos que aparecieron en los al- de peregrinación donde anualmente se aburren, triunfa la música
bores de la década de los setenta. Cabezas dan cita los miles de seguidores del rock playera. Caben hasta las
de cartel en cualquier festival underground catalán. Jordi Serra i Fabra, uno de sus rumbas: los Payos tienen un
de los que se celebraban en Barcelona, tu- principales protagonistas, llegará a decir éxito tras otro (La sueca; La
vieron el apoyo de la pequeña burguesía que "el poder del rock catalá es baza clave gorda; La pequeña Anita, y
progre catalana y gozaron de algunos mo- en el desarrollo de la música vanguardista María Isabel), aunque luego
mentos de gloria. Pero de la misma gloria nacional y también el primer movimiento se arrepienten y forman Triana.
efimera y agridulce que saborearon otros verdaderamente autóctono con calidad y Por su parte, Fórmula V, los
grupos y personajes del momento, como sentido". Diablos y otros muchos no
Música Dispersa; Vértice; Dos más Uno; Pero buena parte de esa música su- dejan de cantar La playa, el
OM; Agua de Regaliz; Fusioon; Pau Riba; puestamente autóctona es una mezcla de mar, el sol, el cielo y tú hasta el
Tapimán; Sisa; la & Batiste; Toti Soler, y salsa, jazz, folk, sardanas y rock con aires hastío.
un largo etcétera. mediterráneos que tan sólo en algunos
El rock progresivo catalán no tuvo la momentos llega a ser verdaderamente ori-
suficiente consistencia para interesar al ginal. Se plastifican demasiados temas y
resto de España. Los músicos no eran pocas canciones memorables. Y cuando
todo lo buenos que exigía este tipo de mú- alguna de estas canciones se hace verda-
sica y las compañías de discos no pudie- deramente popular, como en el caso de
ron vender en el mercado algo tan flojo. Pedro Navaja, resulta que no es ni siquiera
Unos y otros fueron aprendiendo de sus tan buena como la original de Rubén Bla-
errores, y a mediados de la década ya apa- des. A la hora de hacer canciones, tan sólo
recen algunos grupos con discos y directos Sisa; Gato Pérez; Pau Riba, y pocos más,
aciertan de cuando en cuando. Y en nin-
gún caso llegan a tener grandes éxitos.
Los grupos del underground sevillano
también pasaron por un proceso similar.
En 1970 aparece el primer elepé de Smash,
la banda puntera del rock progresivo an-
daluz. En un primer momento logran lla-
mar la atención de Prensa, radio y televi-
"NO SE TRATA DE HACER `FLAMENCO-POP', SINO DE CORROMPERSE. Y SÓLO
PUEDE CORROMPERSE UNO POR EL PALO QUE LE PEGA LA BELLEZA" (Smash)
El flamenco-pop es
uno de los hallazgos más felices
de los años setenta. Tras
nido, sus presentaciones en Madrid y Bar-
celona y sus ocurrentes declaraciones:
"Nosotros somos hombres de las prade-
ras como Bob Dylan o Jimi Hendrix.
Nuestros carnés de identidad son nues-
ganadores (los yuppies).
Tiempos dificiles: grupos como Cáno-
vas, Rodrigo, Adolfo y Guzmán, que in-
tentan hacer aquí lo mismo que Crosby,
Stills, Nash & Young en Estados Unidos,
Peret y los Amaya, aparecen la tras caritas, y estamos en contra de los no hallan suficiente eco en los medios ni
Terremoto, Amina, Bambino, hombres de las montañas, que se enrollan apoyo entre el público. Y lo mismo ocurre
los Chichos, los Chorbos, los por el palo de la violencia y la marcha físi- con la gente que busca una tercera vía en-
Chunguitos, El Luis, La ca, y de los hombres de las cuevas lúgu- tre el rock y la canción de autor, como Vai-
Marelu, y un larguísimo etcétera bres, que se enrollan por el palo del dogma nica Doble; Hilario Camacho; Luis
de combos gitanos y payos y te suelen dar la vara chunga. Eduardo Aute, y los valencianos Pep La-
que toman por asalto las listas Pero las relaciones de Smash con los guarda; Remigi Palmero, y Julio Busta-
de éxitos, inundan las que ellos llaman "los hombres de las cue- mante.
gasolineras y los mercados con vas suntuosas provocar. l a separación del Mejor suerte tienen los vascos de la
casetes y revolucionan el grupo, sin que ninguno de sus discos lle- Orquesta Mondragón cuando deciden, al
mundo del rock. Una buena gue a alcanzar el éxito deseado. Otros in- igual que hicieron los Canarios en su mo-
muestra de ello es la tentos posteriores, impulsados por el pro- mento, trasladarse a Madrid y tomar la
popularidad lograda por las ductor Gonzalo Garciapelayo -que tam- Bastilla desde la propia capital. Gurru-
Grecas con su primer disco: bién estuvo con Smash-, tendrán mejor chaga y su orquesta llegan en un momento
Te estoy amando locamente suerte. El éxito popular que alcanza Tria- en el que la ciudad se abre a todos los
(1974). El sonido del na en los últimos años setenta compensa vientos. Con un Ramoncín provocador,
productor José Luis de Carlos con creces la incomprensión que sufrió en unos Burning excitantes. Y comparsas
se bautiza como gypsy-rock, un principio la gente que luchó por crear el como Cucharada; Tequila, o Moris, crean-
y es una excitante mezcla de llamado rock andaluz. do el caldo de cultivo propicio para que
flamenco y rock duro con Al socaire de la popularización de este aparezcan los grupos de la nueva ola.
toques negros. tipo de rock con acento andaluz surgen
formaciones similares, como Cai; Alame-
da; Imán; Guadalquivir; Medina Azahara,
o Mezquita. Todos ellos funcionan con
mayor o menor suerte durante la segunda
mitad de la década. Alameda llegan a ven-
der más de 100.000 copias de su primer
"VEINTE AÑOS DE CAMINO PARA AL FIN PODER GRITAR A LOS HIJOS DEL
` ROCK AND ROLL': ¡BIENVENIDOS!" (`Bienvenidos', Miguel Ríos, 1982)
APRENDER A
SER ROCKERO
PATRICIA GODES
En España el rock es un fenómeno importa-
do, nunca bien comprendido ni asimilado.
Por eso los 25 años de la carrera de Miguel
Ríos son una búsqueda continua, a través
de numerosos reciclajes, no siempre bien
interpretados, de la verdad rockera que lle-
ga desde el mundo anglosajón.
Miguel Ríos (1944) trabajaba en la sec-
ción de discos de unos grandes almacenes
en su Granada natal. Descubre a Paul
Anka, Elvis y Ricky Nelson, tiene muy
buena voz y es contratado por Phillips en
1962. Con canciones como La pera madu- flojos, cargados de ínfulas intelectuales, lo
ra; Popotitos; El chico ye yé, o Tú sí tienes alejan del rock and roll. El peso de la música
ángel, prodigios de ingenua modernidad y progresiva es enorme en España y se olvida
pruebas irrefutables de lo mal que se cap- premeditadamente la faceta juvenil y calle- i guel Ríos ha tenido
taba aquí eso del rock, Mike Ríos se con- jera del rock, y tras el fracaso de su espec- un interesante papel social.
vierte en la versión hispana de Hallyday o táculo Noche roja tiene que replanteárselo: Aparte de ganar
Celentano. Testarudo, recupera luego su "Cuando tocaba el meddley de rock and roll respetabilidad y espacios para
nombre de pila e inicia al poco una nueva notaba que conectaba visceralmente con el el rock, ha servido para
etapa, en Sonoplay (1966), con Ahora que público. Me dije: `Estás haciendo el canelo, canalizar en buena medida
he vuelto y La guitarra. No tiene suerte. aquí tienes una comunicación efectiva". cierta liberación intelectual
Otro contrato discográfico (Hispavox) En 1979 sale Los viejos rockeros nunca de sectores juveniles.
lo integra en la escudería del productor mueren; se le recibe como al hijo pródigo y Contemplar a un ídolo pop
Rafael Trabucchelli. En 1968, después de su versión de King Creole lo reconcilia con consultado en televisión sobre
los Bravos, los Brincos y los Pekenikes, el los puristas. Algún buen tema, como Santa los más trascendentales y
pop español tiene ambiciones, no se con- Lucía, le gana la simpatía del gran público variados temas y opinando con
forma ya con ser una mala copia y busca consumidor. Rock and roll bumerang (1980) suficiencia y dominio, suponía
conjugar la idiosincrasia local con el origi- y Extraños en el escaparate lo consolidan. un gran paso en la superación
nal anglosajón. Ríos es de los que lo lo- Ríos se embarca en una gran aventura: el de sus complejos de
gran con más éxito a través de El río; Vuel- doble elepé Rock and Ríos, grabado en vivo, i nferioridad de la cultura juvenil.
vo a Granada; No sabes cómo sufri Yo sólo es el acontecimiento de 1982, gran logro co-
soy un hombre, y Contra el cristal. mercial y profesional. Su gran momento.
Descubre entonces los cambios apor- Un año después, el Rock de una noche de
tados por el hippismo, y gracias al afortu- verano cae mal entre los esnobs, que no ad-
nado éxito mundial del Himno a la alegría miten su indiscutida popularidad; también
(1969) viaja por todo el mundo. Cuando se critica La encrucijada (1984). Todo lo que
vuelve de Estados Unidos, sus sacudidas antes se calló sale a la luz; Ríos es el malo
a lo Joe Cocker, camisas estampadas con de la película y se le acusa de proteccionis-
estrellas, declaraciones pacifistas y Con- mo oficial, de demagogia, olvidando su úni-
ciertos de rock y amor (1972) demuestran co gran problema: el musical. Cuando Rock
palpablemente que un español puede do- en el ruedo (1985) fracasa, no es el artista,
minar el lenguaje del nuevo rock. sino su poco inspirado repertorio, el que de-
En los setenta atraviesa, sin embargo, cepciona. Del mismo modo, El año del co-
una mala etapa. Las colaboraciones con meta (1986), producción muy cuidadosa,
Teddy Bautista, y elepés como Memorias de realizada por el estadounidense Tom
un ser humano (1974), La huerta atómica Dowd, no acaba de convencer por sus te-
(1976) y Abandalus (1977), pretenciosos y mas irregulares. '
Pero seguramente aún veremos unas
cuantas vueltas triunfales de Miguel Ríos.
Si algo hay de cierto en las acusaciones de
demagogo o rutinario es sólo culpa de su
desmesurado afán de gustar a todos y de ser
personal, y ésos no son motivos condena-
bles. El público lo sabe muy bien.
"ME ENSEÑARON A HABLAR, / Y SÓLO ME SALIÓ UN AULLIDO; / UN DÍA
I NTENTÉ REÍR, / Y AQUELLO FUE COMO UN RUGIDO" (`Hey, nena', Burning, 1978)
Burning, grupo clásico del rock mercado internacional con música calien-
madrileño, reivindicado por bandas te en la onda de Santana. Y el éxito no se
de la nueva ola de la música española. hizo esperar. En 1972, con Wild safari y
Woman, entraron en los primeros puestos
de las listas de varios países europeos y
americanos, y llegaron a ser número uno
en Canadá. Lo mismo sucedió con Casa-
nova; Mr. Money, y Children, pero, sobre
todo, con Hi Jack (1974), que fue número
uno de las listas de Disco Music del Re-
cord World estadounidense. En 1977 fue-
ron elegidos tercer mejor grupo funk del
mundo por la revista Playboy. Pero poco
después comienza su decadencia, la sepa-
ración y las reorganizaciones sucesivas
del grupo, ya sin demasiada fortuna.
Sisa (1948). Barcelonés, se dio a conocer Pau Riba, superestrella del rock
con los inclasificables Música Dispersa, catalá, junto a Sisa (con gafas).
que hicieron un elepé (Orgía, 1972). Pero la
fama, la gloria y el éxito le llegarían como Tequila y Confidencial, pero el grupo desa-
cantante solista. Aficionado por igual a los pareció del panorama precisamente cuan-
Beatles que a Franz Zappa o Antonio Ma- do habían conseguido lo más dificil: un
chín, Jaume Sisa logró su primer gran éxi- nombre, un sonido y una popularidad ga-
to con el memorable Qualsevolt nit pot sor- nada a pulso.
tir el sol (1975). Tanto en sus discos como
en sus actuaciones en directo Jaume Sisa Vainica Doble. Gloria van Aerssen y Car-
se hacía acompañar de músicos progresi- men Santonja crearon en los albores de la
vos y de conservatorio. Pero también rea- década uno de los dúos musicales más
lizó incursiones en el pop con el grupo bar- creativos y singulares de la historia del pop
celonés Melodrama (1979). En 1984 deci- español. Empezaron cediendo canciones
dió despedirse del mundo de la canción como El afinador de cítaras al grupo Nue-
con un doble álbum (Transcantautor, últi- vos Horizontes (1969) y El rigor de las des-
mas noticias, 1984). Dos años más tarde dichas (1970) a los Tickets. Y entraron en
reapareció en Madrid con el nombre de el mundo del cine de la mano de Iván Zu-
Ricardo Solfa (1986). lueta (Un, dos, tres... al escondite inglés), e
hicieron música y canciones para Furtivos
Smash. Lo formaron cuatro sevillanos y (1975), Clímax (1978) y Al servicio de la
un danés rubio, a mediados de 1969. Crea- mujer española (1978). No les faltó trabajo
dores de un lenguaje original y de una mú- en series de Televisión Española (Refra-
sica no menos auténtica (a pesar de ser nes; Las doce caras de Eva; Tres eran tres;
una mezcla de rock, blues y flamenco), se Suspiros de España). Mientras tanto, fue-
lanzaron a la conquista del país con la ron editando algunos singles como Vainica
ayuda de un equipo de editores, producto- Doble (La bruja, 1970; Refranes, 1971)
res y compañías plastificadoras (Diábolo, hasta lograr hacer todo un elepé (Vainica
Philips, Boccaccio). No lo consiguieron: al Doble, 1971) con José Nieto de productor,
parecer, luchas intestinas por el poder, el arreglista y alma mater. No tuvieron de-
dinero y la línea a seguir dieron al traste masiada suerte, ni tampoco con elepés
con el proyecto más ambicioso puesto en como Heliátropo, (1973). Se disolvieron, al
marcha desde la capital andaluza en los parecer definitivamente, en 1985.
primeros setenta. Grabaron algunos sin- Prácticamente todos
gles memorables (Ni recuerdo ni olvido; Esta Veneno. El primero y único elepé de Vene- l os grupos de éxito que dio el
vez venimos a golpear; El garrotín) en los rock español en los años
no fue todo un aldabonazo para la época.
tres años que funcionaron las distintas Apareció en 1977 y lo editó la CBS con setenta se dieron a conocer en
formaciones, incluyendo en ellas a Gual- todas las precauciones que toma una mul- Madrid, Barcelona, Sevilla y
berto y a Manuel Molina, de interesantes tinacional cuando tiene un producto peli- Valencia, aunque hay que
trayectorias posteriores. groso en su catálogo. Para empezar, modi- mencionar nombres como
ficó la portada original de forma que no se Bloque (santanderinos),
Tequila. Los argentinos Alejo Stivel y notara que el nombre del grupo estaba Brakamán (donostiarras),
Ariel Rot, y los españoles Julián Infante, grabado sobre chocolate. Y para rematar, Atila (gerundenses), Traidor,
Felipe Lipe y Manolo Iglesias, formaron lo distribuyó como si en verdad fuera ve- I nconfeso y Mártir (bilbaínos),
en 1977 el primer grupo pop madrileño que nenoso. Huelga decir que Veneno no tu- Tabletón (malagueños) o
consiguió grabar y tener éxito. Sus prime- vieron el éxito de las Grecas y ni siquiera Mediterráneo (alicantinos).
ras actuaciones tuvieron lugar en colegios el de Triana. Sus actuaciones eran un im- Ninguno de ellos consiguió dar
mayores y salas de baile. Y su primer dis- posible -no tenían equipo alguno-, su el salto cualitativo necesario
co (Matrícula de honor, 1978) tenía todos campaña de promoción se redujo al míni- para que sus canciones llegaran
los defectos de la improvisación y la falta mo y la voz de Kiko Veneno no estaba de- a ser memorables.
de recursos. Pero su segundo elepé masiado educada. Además, la mezcla era
(Rock & roll, 1978) era otra cosa. Un soni- ciertamente fuerte: historias de la otra Se-
do pop brillante, fresco y contagioso les villa -la de los delincuentes, las cucara-
abrió inmediatamente todas las puertas. chas y los gitanos- contadas por sus pro-
Posters, discos en vinilo amarillo, clubes pios protagonistas con guitarras destem-
de hinchas, apoderado de lujo, portadas a pladas y en tonos desvergonzados. En
todo color en las revistas, tratamiento de 1982 Kiko Veneno lo intentó de nuevo con
estrellas en la radio y la televisión... Te- el mismo sello (Seré mecánico por ti), pero
quila atrajeron al rock a grandes masas ju- el gran público siguió sin darse por entera-
veniles. Luego vinieron discos como Viva do. Así que ayudó a la cantante Martirio a
convertirse en una revelación posmoder-
na y aprovechó para lanzar un nuevo ma-
nifiesto (Pequeño salvaje, 1987). Por su
parte, los gitanos venenosos (Rafael y Rai-
mundo Amador) grabaron sus propios
discos como Pata Negra, tan irreverentes
y mágicos como era de esperar.
"LO QUE SEDA EN LLAMAR ' ROCK-FLAMENCO' ES UNA ETIQUETA QUE NO VALE.
TOCANDO, SOMOS GENTE NATURAL, SOMOS ANDALUCES" (Eduardo Rodríguez, 1978)
TRIANA
EL BREVE RESPLANDOR
El saxofonista argentino Gato Barbieri mayor o menor rigor, con desparpajo o su-
ha vendido internacionalmente su tilidad; en cualquier caso, dan color a una
tórrido saxo. música que necesita de la no-
vedad para seguir seduciendo.
Una lista exhaustiva de
deudas sería interminable.
Santana y sus epígonos di-
fundieron los encantos de la
salsa y la percusión. El reg-
gae también desengrasó los
esquemas rítmicos del rock,
aparte de abrir las mentes de
músicos (The Police) y pro-
ductores a las posibilidades
de jugar con la mesa de mez-
clas tal como hacían los re-
yes jamaicanos del dub. La
pareja David Byrne-Brian
Eno y el alemán Holger Czu-
kay han realizado embriaga-
dores collages con materiales
sonoros exóticos. Peter Ga-
briel utiliza ritmos brasile-
ños y africanos como base de
algunas de sus composicio-
nes. Los Talkings Heads
también se han aproximado
al continente africano, apar-
te de interesarse por los so-
nidos de minorías étnicas norteamerica-
nas. En el Reino Unido, los grupos que
recuperaron el ska jamaicano han am-
A pesar de la presencia pliado su horizonte con otros aires cari-
constante de aportaciones beños y africanos. Paul Simon triunfa in-
jertando sus canciones en un contexto
tropicales en los discos de
éxito, el público occidental no OS NUEVOS surafricano. Baterías como Ginger Ba-
acepta fácilmente a los ker, Mick Fleetwood, Stewart Copeland
creadores originales. Tras
conseguir laboriosamente el
BUCANEROS y otros han documentado sus particula-
res expediciones a las fuentes de los rit-
triunfo internacional de Bob DIEGO A. MANRIQUE mos afroamericanos. Influyentes com-
Marley, el sello Island ha Jon Hassef, trompetista canadiense de positores de la escuela minimalista (Phi-
i ntentado repetir la jugada con vanguardia, preconiza la música del cuar- lip Glass, Steve Reich, Terry Riley) han
Jorge Ben, Paco de Lucía, las to mundo, resultado de la amalgama de incorporado conceptos musicales no oc-
Fania All-Stars y King Sunny las tradiciones tercermundistas con la cidentales. Tejas, por su proximidad con
Adé. En todos los casos, el tecnología occidental. En realidad, esa México, es campo de intuitiva cohabita-
i ntento no dio los resultados fusión existe en casi todas las latitudes. ción entre avispados músicos chicanos y
apetecidos. Tiene diferentes nombres, según las zo- anglosajones.
nas de implantación: chicha (Perú), soca No han faltado los casos de venalidad
(Trinidad), zouk (Guadalupe), reggae (Ja- ( Malcolm McLaren apropiándose del
maica). Y es que el rock, el soul y otras copyright de canciones que oyó en sus
tendencias anglosajonas han afectado a viajes por tierras soleadas), pero ya no
los músicos de todo el planeta. En contra vale hablar de imperialismo cultural. El
de lo que predecían los pesimistas, ese in- pillaje de ideas es mutuo, inevitable, so-
flujo no conduce a la homogeneización y breentendido y tan colosal en dimensio-
al empobrecimiento sonoro; por el con- nes que necesita explicaciones más so-
trario, el choque de culturas ha engendra- fisticadas. Las telecomunicaciones han
do monstruos fascinantes, que convierten reducido el mundo a una aldea global; el
en fuente de inagotables deleites cual- rock y sus equivalentes en otras socieda-
quier incursión por las músicas de la peri- des no pueden estar ajenos a lo que ha-
feria. cen sus vecinos.
No ha sido ajeno el rock a esos murmu-
llos situados más allá de sus fronteras na-
turales. Desde 1966, cuando los Beatles y
otros músicos británicos cayeron bajo el
hechizo de Ravi Shankar, el rock recibe
periódicamente transfusiones de sangres
exóticas. Son apropiaciones hechas con
"LOS ARTISTAS DE `REGGAE' SE EXPRESAN PARA SUAVIZAR LAS TENSIONES DE
OTROS, DICIÉNDOLES QUE SUS SENTIMIENTOS SON COMPARTIDOS" (B. Wailer)
Simpson. Abandonado por sus compañe- Jimmy Cliff (1948). Se apellida Cham-
El
por el éxito de su último disco, Rhythm ki- completa de la música de la isla del ska al
llers, producido por el brillante Bill Las- rock steady y al reggae. Clásicos suyos son
well. Constituyen la sección rítmica más 6 and 7 books of Moses, 54-46, that's my
i mportante del reggae y del mundo. La pri- number (sobre la estancia de Toots en la reggae tiene su fuente de
mera sesión en que participa el batería Sly cárcel), Pressure drop, Monkey man, Sweet i nspiración en el
(por Sly Stone) Dunbar es un éxito inter- and dandy y un etcétera larguísimo. En los rastafarianismo, religión
nacional: Double barrel, de Dave and An- primeros ochenta, Toots despide a Jerry j amaicana que surgió entre la
sel Collins. Consigue trabajo y reputación Mathias y Raleigh Gordon, los Maytals, y población negra por la mala
en los estudios Channel One, donde forma los sustituye por chicas, conduciendo a los comprensión de las doctrinas
tándem con el bajista Robert Robbie Sha- seguidores del grupo a la perplejidad. de Marcus Garvey. Su teoría
kespeare. Han acompañado a todos los del regreso a África llevó a
grandes del género, y aparte de su renom- Pete Tosh. Winston Hubert McIntosh i dentificar la coronación de
bre como productores, han sido músicos (1944) se da a conocer como miembro de Halle Selassie, antiguo ras
fijos de los estudios Compass Point de las los Wailers hasta 1974, y compuso algu- tafarl, con la vuelta de Dios a
Bahamas, siendo prácticamente artífices nos temas míticos (Get up stand up; 400 la Tierra para liberar a los
de los discos de todas las estrellas de rock years). Tras la separación convierte la le- oprimidos. Los rastas
que han acudido allí en busca de un buen, galización de la marihuana en su caballo consumen mucha marihuana
sólido, inconfundible e irresistible acom- de batalla, cosechando prohibiciones. (ganja), no comen carne de
pañamiento rítmico. Mick Jagger y Keith Richard, admirado- cerdo, son pobres y sueñan con
res de los Wailers, le fichan en 1979 para su peregrinación a Etiopía, su
Third World. Formado por Michael Ibo Rolling Stones Records, donde debuta tierra de promisión.
Cooper y Stephen Cat Coore, ex miem- con Bush doctor. Se ha desacreditado un
bros de Inner Circle, el sexteto se da a co- poco por lanzar discos mediocres en pos
del público de rock. En cambio, el otro ex
Wailer Neville O'Reilly Livingstone, alias
Bunny Wailer, ha llevado con más digni-
dad su apellido, y aunque ha grabado in-
discriminadamente, su carrera, promete-
doramente iniciada con Blackheart man,
es digna de ser investigada.
"SI TÚ ERES UN ÁRBOL GRANDE, / NOSOTROS SOMOS EL HACHA
PEQUEÑA /AFILADA PARA DERRIBARTE" (`Small axe', Bob Marley)
mético, expresaban una realidad muy lo- Marley fue el principal introductor del
reggae y la cultura rasta, convirtiéndose
calista, tenían un estilo musical letárgico y en un símbolo para los pueblos negros.
espacioso que no gozaba de respeto. Para
dar dignidad al producto, Blackwell les
concedió todos los lujos: campañas de
promoción, portadas cuidadas, muchas
horas en el estudio. Cath a fire (1973) fue
un tiro al aire, a pesar de que su densidad
emocional no pasó inadvertida a los mejo-
res oídos. Burnin' (1973) incluía I shot the
sherif, luego éxito para Eric Clapton.
Conflictos. En medio de su gira de
presentación por el Reino Unido, los
Wailers retornaron a casa, interpretan-
do la nieve como una señal de que Jah
(Dios) desaprobaba la aventura. Al
poco, Tosh y Livingstone se marchaban.
Lo que el grupo perdió en variedad lo
ganó en eficiencia: Bob se planteaba su
carrera con toda la profesionalidad posi-
ble en un rasta.
Los siguientes elepés tenían el suficien-
te magnetismo para convencer a un públi-
co habituado a ritmos premiosos y cancio-
nes triviales. Ciertamente, Natty dread
(1974), Live! (1975), Rastaman vibration
(1976), Exodus (1977), Kaya (1978), Baby-
Ion by bus (1978), Survival (1979) y Uprising
(1980) empequeñecían casi toda la música
que se hacía en las capitales del rock. Ha-
bía sensualidad y brasas de insurrección,
una profundidad de sentimientos que
Marley desgranaba con voz diminuta,
arropado por los coros de las I-Threes y
envuelto en una pegajosa neblina musical
(bajo omnipresentes rascaduras de guita-
rra, subrayados de viento, engrudo de te-
clados).
Además tenía carisma. Una figura en-
juta que en el escenario parecía poseída
por fuerzas ancestrales. Marley resistía
los embates de la fama sin ceder un ápice:
discutía con los que no aceptaban la divi-
nidad de Haile Selassie, emperador etío-
pe, y conseguía recorrer todos los países
sin que los aduaneros descubrieran su re-
serva de ganja. Un elegido: en 1976 unos
pistoleros irrumpieron en su casa dispa-
rando contra él, su mujer y su manager. amigos o de represalia política (Marley
Sobrevivieron y el ataque quedó envuelto apoyaba al Gobierno socialista).
en el misterio, hablándose de venganza A pesar de ese flirteo, Marley no creía ras la muerte de Marley, la
por una deuda impagada de uno de sus en la política. Estuvo en África -invitado discográfica Island ha tratado
en los festejos de independencia de Zim- su legado con respeto.
baue- y no vio el paraíso. Su mensaje era Aparte de elegantes
espiritual: "Hay que despertar al pueblo recopilaciones, sólo ha
negro de su sueño de siglos para que poda- publicado un disco póstumo
mos ver lo que somos en realidad". (Confrontation, 1983). La
En 1980, Marley se sintió mal: le descu- viuda, Rita Marley, se ocupa de
brieron un tumor cerebral. Sus amigos lo mantener su recuerdo, y
mantuvieron en secreto mientras recibía graba ocasionalmente. Sus
tratamientos de todo tipo en Nueva York, hijos, que cantaron en el
Florida, México y Baviera. Cuando los funeral, también trabajan bajo
doctores alemanes vieron que no había es- el nombre de The Melody Makers.
peranza, cruzó el Atlántico y murió unas
horas después en Miami. Dicen que en ese
momento rayos y relámpagos rasgaron los
cielos de Jamaica.
"ESTO QUE LLAMAN SALSA, EN REALIDAD NO ES NADA NUEVO. CUANDO LA MÚSICA
CUBANA ESTABA DE VERDAD EN DEMANDA, NADIE HIZO CASO" (Mario Bauzá)
La Fania Al¡ Stars reunió a salseros Se cita a España como trasfondo histó-
neoyorquinos para grabaciones y
giras. En el centro, Celia Cruz. rico, pero la verdadera exportadora de la
latinidad musical, la fuente por antonoma-
sia de ese spanish-latin tinge, es la bella
Cuba. Desde la música de tradición culta
al rock, nada, ni el ragtime, ni el jazz, el
blues, las melodías de corte Tin Pan Alley,
el boogie woogie o el pop contemporáneo,
se ha visto libre de su dosis de latinidad.
Cuba se erige como astro central del siste-
ma, mientras que Puerto Rico, Colombia,
Santo Domingo o México asumen un
nada menospreciable papel de planetas
menores. Los años treinta contemplan la
introducción de la música cubana como
subestilo de éxito en la corriente global de
la música popular norteamericana. Los
cuarenta alumbran la cálida y creativa fu-
sión conocida como jazz latino. En los cin-
cuenta, la emergente cultura rock incorpo-
ra pinceladas de latinidad desde sus pri-
meros pasos: las maracas de Bo Diddley,
las cuantiosas rumbas grabadas por los
primeros grupos vocales negros, los temas
compuestos por Leiber y Stoller con aro-
mas caribeños, la corriente orleanesa pro-
fesada por Fats Domino y el maestro
Longhair.
Los años sesenta se presentaron agita-
dos en lo político y un tanto magmáticos
en su vertiente musical. El derrocamiento
de Batista y su dictadura trajeron consigo
una densa corriente migratoria de músi-
cos cubanos. Entre ellos y las nuevas ge-
En Navidad fui invitado / a neraciones de neoyorquinos iban a prepa-
la casa de Pellín. / Llegó Ismael rar el camino para la eclosión de la salsa.
ya estirado / con Cheo y LGO Las discusiones sobre la adecuación y
Nieves al frente. / Estaba la exacto significado del término salsa han
fiesta caliente, / Solano las
palmas hacía / y Helma atrás les DE SALSA sido en verdad abundantes y prolijas. Sin
embargo, puede pasarse sin rubor por en-
decía: / 'No hay cama pa MINGUS B. FORMENTOR cima de ellas ante la incuestionable ver-
tanta gente'. / Vi al Gran El spanish tinge -nombre que recibe en dad de que en este caso la etiqueta ha he-
Combo que llegaba / y a Estados Unidos la inclusión de ritmos, cho mucho a favor del producto. La pers-
Ramito el de la altura; / más timbres, fraseos o instrumentación de ori- pectiva que da tanto alejamiento (en el es-
atrás, Johnny Ventura / con gen afro-cubano o afro-latinoamericano pacio y en el tiempo) permite decantar la
Chacho el Indio charlaba. / en temas del más variado origen musi- subsistencia que se esconde tras el voca-
Roberto Torres estaba / con cal- se ha infiltrado en todos y cada uno blo. Ésa no es otra que la reelaboración de
Javier Vázquez y su gente, / y de los rincones de la música popular de la tradición musical afro-cubana en medio
Rafael Conde, de repente, / nuestro siglo. La acuñación del término to- urbano (la más gigantesca metrópoli occi-
intentó apagar la luz, / pero que hispano -con harta frecuencia se ha- dental), con textos adaptados a la situa-
gritó Celia Cruz: / 'No hay bla también de toque latino- se adjudica a ción sociopolítica del barrio (se deja de
cama pa tanta gente'. / Y Tony Jelly Roll Morton, eximio pianista y com- lado el bucolismo de bohío y la pirueta da-
con la Protesta / la salsa positor que se autoproclamaría hasta el fi- daísta a favor de la reivindicación y los re-
quería empezar, / y Héctor nal de sus días como el genuino inventor tratos urbanos). Sin olvidar la contribu-
Lavoe al llegar / encontró que del jazz. Decía él: "En una de mis melo- ción de músicos criados en la propia Nue-
la Selecta / ya se encontraba días más antiguas, New Orleans blues, ya va York con una infancia impregnada por
dispuesta / para alegrar el puede advertirse el spanish tinge. En reali- otras sonoridades que las estrictamente
ambiente; / y en una esquina dad, si no se logra introducir elementos caribeñas.
Tito Puente / empezaba a españoles en las melodías, nunca se podrá Del Bronx, puertorriqueños nacidos en
pestañear, / y volvió Celia a conseguir la auténtica sazón del jazz". Norteamérica, son creadores salseros tan
gritar: / '¡No hay cama pa Exageradas o no, esas puntualizaciones
tanta gente!". de un hombre todo exageración se han en-
cargado de consolidarlas con hechos, des-
de los años veinte, valedores tan eminen-
tes como Bennie Moten, Louis Arms-
trong, Duke Ellington, Dizzy Gillespie o
Chick Corea.
"PARA MÍ EL BOLERO ES COMO UN BAÑO MARÍA, UN DISCURSO
LENTO, CALIENTE Y CON SUDOR" (Curet Alonso, 1977)
La percusión (hierros
esenciales como los Palmieri, Charlie y cueros) es el motor de las
(1927) y Eddie (1936), o Willie Colón orquestas de salsa.
(1950). El pianista Eddie Palmieri se erigió
en personalidad carismática entre la po- gido en la zona Este
blación neoyorquina durante los primeros de Los Ángeles (su
sesenta, tanto en lo político como en lo gran éxito, Viva Tira-
musical. La Perfecta -su primera agrupa- do, 1970), las otras
ción musical- refleja la dureza de las ca-bandas californianas
lles, y su música solicita la atención de de rock latino surgidas
a principios de los se-
quienes las pisan, de los que tienen un co-
nocimiento de primera mano sobre la jun- tenta tuvieron estre-
gla urbana. cha vinculación con
Durante esa época, Eddie sigue toda- Santana. Malo fue
una banda fundada en
vía bastante anclado al sonido típico, pero
1971 por su hermano
tras la disolución de La Perfecta, en 1968,
Palmieri se decanta hacia experimentos menor, Jorge; Azteca
por entonces más marginales, sofisticando lo crearon los disiden-
tes del primer grupo
sinfónicamente las instrucciones de los te-
mas, aproximando sus arreglos a patrones ensamblado por Car-
jazzísticos. De un profundo conocimiento los Santana. Ambos
de la tradición, una ferviente admiración grupos tenían una in-
por la técnica pianística de McCoy Tyner clinación más jazzísti-
y una muy personal visión del swing cari- ca que Santana, y algo
beño han surgido obras de tanta enjundia similar sucedió con
como Sentido (1973) o The sun oflatin mu-bandas afines (Toro,
sic (1974). Chango, Seguida) na-
cidos en Nueva York.
El trombonista Willie Colón, nacido en
1950 en el sur del Bronx, fue uno de los La más interesante fue
arquetipos del nuevo sonido salsoso desde Seguida. La obsesión
los comienzos de su carrera. En 1967 ob- de Randy Ortiz, su
tiene su primer contrato de grabación, confundador, era combi-
nar ajustadamente la
el sello Fania, y registra El malo, donde se
presenta un nuevo y desconocido cantante rítmica que marca el
puertorriqueño, Héctor Lavoe Pérez. Co- bajo de rock con la
lón, con su aspecto de duro simpático, su propia del tumbao lati
nueva orquesta liderada por dos trombo- no, y tener libertad total para los solos que
nes y sus grandes vocalistas, no tarda en ejecute cualquier otro instrumento. Y,
modelar un enraizadísimo soul de barrio, bajo esa perspectiva, otras bandas surgi-
una de las líneas maestras del movimiento das al amparo de la fórmula Ortiz (Wild, a permanente penetración de
salsero. Con Lavoe graba algunas de sus Wind, Caldera) seguirían mostrándose elementos afro-cubanos, unas
mejores obras -Cosa nuestra (1972) o Lo mucho más cerca del jazz latino que de la veces en estado de notable
mato (1974)-, pero su gran proyección a salsa o el rock achicanado. pureza, otras bajo una más que
escala masiva la obtiene a raíz de sus tra- Pasado ese fenómeno, quedan lejos los aceptable mixtura, resulta
bajos junto a otra de las grandes voces años dorados para la salsa; cayó el impe- uno de los rasgos más
salseras, el panameño Rubén Blades. rio Fania (obra de un buen músico puerto- sobresalientes y fascinantes
rriqueño de extensa carrera, Johnny Pa-
Pero mientras la latinidad musical pura de la música popular del
asentaba sus reales en Nueva York, Cali- checo, y un poco escrupuloso negociante siglo XX.
fornia vería nacer un curioso híbrido que ¡talo-americano, Jarry Massucci); ya no se
prodigan los multitudinarios festivales
pronto etiquetaron de rock latino. La figu-
ambientados por una amplia convención
ra central de esa corriente fue el guitarris-
ta Carlos Santana. En 1970, Santana pu- de estrellas latinas (las Cesta All Stars, las
Coco All Stars y, por encima de todo, las
blica Abraxas, su segundo elepé, y el clási-
co Oye cómo va, de Tito Puente, pasa a bien conocidas Fania All Stars), pero mu-
convertirse en declaración de principios chas de las grabaciones efectuadas por
del naciente género: la voz se utiliza de viejas y nuevas glorias en las dos últimas
décadas (Celia Cruz, Tito Puente, Machi-
acuerdo con la tradición sonera clásica, la
guitarra suena inconfundiblemente rocke- to, Oscar d'León, Cheo Feliciano, Justo
Betancourt, Pete Conde Rodríguez, Rafael
ra, en los teclados se alberga la sonoridad
jazzy. Cortijo, Rafael Ithier y El Gran Combo,
A excepción de El Chicano, grupo sur- Papo Lucca y su Sonora Ponceña o La
Charanga Vallenata) resistirán la decolo-
ración que impone el paso del tiempo so-
bre toda moda. Porque, a estas alturas de
los ochenta, la salsa es, más que moda, un
bien afincado modo de interpretar el afro-
caribeñismo musical con reconocimiento
y proyección internacionales.
"ÉSTE ES EL FIN DEL ARTE, ¿NO? LLEGAR A TODO TIPO DE GENTE,
ACTUAR COMO MEDIO DE COMUNICACIÓN SOCIAL" (Rubén Blades)
Hermeto Pascoal, uno de so. Eran tiempos en los que tras la deno-
l os más insólitos minación latin american rhythm se escon-
artistas brasileños.
día una auténtica caja de Pandora de la
que podían aparecer sambas, boleros,
rumbas, y lo que se terciara. Con estos an-
tecedentes, el primer elepé de Joáo Gilber-
to, Chega de saudade (1959), que contiene
canciones de Antonio Carlos Jobim, Car-
los Lyra y Vinicius de Moraes, sólo podía
causar estragos entre los músicos norte-
americanos. Consagrados artistas como el
saxofonista Stan Getz se encargaron de
que la bossa nova (nueva aptitud) alcanza-
se los más recónditos lugares del planeta.
Hoy, aquel suave pero firme balanceo rít-
mico forma parte del acervo de la música
occidental como reflejan, entre otros, al-
gunos grupos británicos y más de un rela-
jado solista californiano.
En la década de los sesenta, el auge de
la televisión va a servir de trampolín a nu-
merosos jóvenes que se lanzan a la aven-
tura musical. Es el período de los grandes
festivales competitivos que, retransmiti-
dos a todo el país, establecen récords de
audiencia. De tales certámenes saldrían
muchas de las grandes figuras de la MPB,
la música popular brasileña: Edu Lobo,
Chico Buarque, Gonzaguinha, Ivan
Lins... En el III Festival de la TV Record,
octubre de 1967, dos jóvenes de Bahía
causan cierto revuelo. Gilberto Gil (1942)
sube al escenario para ofrecer una sor-
prendente mezcla de instrumentos autóc-
tonos y guitarras eléctricas. Caetano Velo-
so (1942) irrumpe con una formación roc-
kera. Ambos son la máxima expresión del
tropicalismo cuyo manifiesto sonoro es el
disco Tropicália ou panem et circenses
(1968). Para Caetano Veloso, el movi-
miento liberó a la música brasileña de fór-
Hay gente que se queja mulas rígidas "porque acabó con lo que la
de los discos cuidados. Les bossa nova había instituido como buen
parece que ya no suenan
`auténticamente brasileño'. RASIL, gusto. Cultivó también el mal gusto, por-
que el buen gusto paraliza la creatividad".
Como si el subdesarrollo De las huestes bahianas formaban, asi-
fuera una característica
esencial de lo brasileño. Para CUERPO Y ALMA mismo, parte María Bethania (1946), her-
mana de Caetano, calificada como la voz
un norteamericano, ser una CARLOS GALILEA
más cargada de intensidad dramática del
estrella internacional es algo Entre las músicas de Brasil y Estados Uni-
dos se viene desarrollando un largo y aca- país, y Gal Costa (1946), otra garganta
normal; para un brasileño, es un privilegiada. Junto a la carismática Elis
crimen. Este debe ser pobre, lorado romance. No en vano las mismas
matrices (indígena, africana y europea) Regina, ya fallecida, sirvieron para allanar
tocar samba, hacer macumba y el camino a una pléyade de excelentes in-
todo tipo de chorradas para que confluyen en Brasil se hallan presen-
tes en aquellas zonas de Estados Unidos térpretes femeninas: Simone, Fafá de Be-
turistas. Estoy harto de esa lem, Nana Caymmi, Elba Ramalho, Mari-
i magen de nosotros que donde se han gestado algunas de las músi-
cas más contundentes de este siglo (blues, na, Joyce, Leila Pinheiro...
i ntentamos vender". Mientras Caetano y Gil siguen hacien-
(Gilberto Gil, 1983) jazz, rock & roll). También les une ser pro-
ducto de culturas jóvenes a las que no do de las suyas y exasperando a más de un
ahoga el peso de la tradición, como sucede respetable crítico, Jorge Ben (1940) lleva a
a veces en el Viejo Continente. la práctica, con inusitada eficacia, los pos-
La primera en desatar la pasión del tío
Sam fue Carmen Miranda, con sus céle-
bres tocados a modo de frutero tropical y
sus vistosos trajes de bahiana. Corrían los
últimos años treinta y los primeros cua-
renta, cuando sonaba en todos los gramó-
fonos la Aquarela do Brasil, de Ary Barro-
"NADA NUEVO EXISTE EN ESTE PLANETA / QUE NO SE HABLE AQUÍ
EN LA MESA DEL BAR" (Milton Nascimento/Fernando Brant, 1975)
W
Y
Disfrazados para representar a varios grupos dos, los locales para gay, de latinos y de
sociales, Village People fueron uno de los negros, insistían en masajear los sentidos
productos pintorescos de la era disco.
con salsa, James Brown y los elegantes
combinados de Filadelfia. Sus pinchadis-
cos eran eclécticos, y lo mismo aceptaban
importaciones africanas (Manu Dibango)
que híbridos españoles (Barrabás) o teu-
tones cibernéticos (Kraftwerk).
Fueron unos cuantos productores mer-
cenarios los que concibieron la idea de
acentuar los elementos bailables y añadir
merengue melódico. Con músicos y voca-
listas de estudio pusieron banda sonora a
un período azotado por la recesión econó-
mica. Canciones que hablaban de la dan-
za como escape de una realidad llena de
incertidumbres, que predicaban la pro-
miscuidad sexual. Ocurría todo esto des-
pués de la crisis del petróleo y antes de la
irrupción del SIDA.
La locura del baile generó una enorme
industria. Las discográficas vivieron años
de vertiginosa prosperidad, las discotecas
se multiplicaron (al igual que las empresas
especializadas en luz y sonido), surgió una
moda disco, renacieron las academias de
baile y la épica de los gimnastas de la pista
quedó reflejada en docenas de largome-
trajes y programas televisivos. Ningún
área de la música popular quedó intacta.
A pesar de la opinión de
sus detractores, no había un
Prácticamente, todos los artistas negros
dedicaron sus esfuerzos al nuevo merca-
do, habitualmente trivializando su talento
expresivo pero contentos de ganar nuevos
sonido disco monolítico. A
partir de los hallazgos de ITMO públicos. Jazzmen adaptables (Grover
Washington, Donald Byrd, Herbie Mann
IMPLACABLE,
Motown, Philadelphia y mil más) intentaron pagar sus facturas
Records International y James con incursiones discotequeras. Músicos
Brown, diversos personajes brasileños o salseros se subieron al carro.
-Barry White, Giorgio
Moroder, Van McCoy,
Bohanon, Jacques Moral¡,
NOCHES DE DELIRIO Llegó la saturación. La abundancia de
productos que buscaban el mínimo deno-
minador común, la reiteración de muchos
Cerrone o la pareja Nile DIEGO A. MANRIQUE artífices de la disco, la nueva moralidad pa-
Disco Sucks. El eslogan se hizo muy popu- trocinada por Reagan, la deshumaniza-
Rodgers-Bernard Edwards-
lar entre las gentes del nuevo y del viejo ción del ambiente discotequero, la llegada
desarrollaron fórmulas
rock, que coincidían únicamente en que sí, de otras propuestas sonoras, se unieron
particulares que se influían
la disco music era repugnante. Nada más para quitar brillo a las fantasías de los tra-
mutuamente y que, en los
odioso para ellos, garantes de la pureza de volta. Sin embargo, los conceptos funda-
mejores casos, se remodelaban
sangre de la música juvenil, que ver a la mentales de la disco music, recargados por
regularmente.
jet-set y a las masas sacudir sus carnes a los descubrimientos (rap, hip hop, electro
las órdenes de ritmos insidiosos concebi- funk, scratch) de la periferia neoyorquina,
dos por oscuros personajes sin pretensio- definen el sonido de los años ochenta. El
nes artísticas. Pero el pulso lo ganó aque- maxi se ha establecido como formato au-
lla hija bastarda del soul. Primero fueron tónomo, el productor funciona como al-
los príncipes del rock de los sesenta (Ro- quimista, se han desdibujado las fronteras
lling Stones, Paul McCartney, Rod Ste- entre lo blanco y lo negro y pocos artistas
wart) los que pasaron por el aro. Luego, desdeñan el filón de las discotecas. Se si-
muchos de los revolucionarios del punk gue bailando hasta el fin de la noche,
(Iggy Pop, Talking Heads, Clash, John como en tiempos de la disco y sus ensorde-
Lydon, Blondie) terminaron aproximán- cedoras quimeras de purpurina.
dose al enemigo.
La disco music fue un fenómeno clan-
destino durante la primera mitad de los
setenta. El rock progresivo había proscrito
bailar y reducido la participación del pú-
blico a unos aplausos concedidos de ante-
mano. Por el contrario, en Estados Uni-
"LA MÚSICA `DISCO' ES EL LATIDO QUE DICE AL HOMBRE QUE ESTÁ VIVO. PUEDE
SER PELIGROSA, PERO TIENE UN POTENCIAL POR DESCUBRIR" (David Bowie)
fue lógico que lo invitaran a grabar en soli- Archie Bell and The Drells eran tejanos,
tario. Su primer elepé fue muy bien recibi- pero se beneficiaron de la sabiduría de
músicos y productores de Filadelfia.
do, y con los siguientes se convirtió en un
genuino sex-symbol, pero un accidente le
obligó a retirarse temporalmente. Regresó
paralítico, confinado a una silla de ruedas,
y con un contrato con WEA. Su más po-
pular creación fue la canción que inspiró
la película Choose me, de Alan Rudolph.
Junto a Billy Paul, Pendergrass representa
la figura del vocalista masculino en Fila-
delfia.
Pero, por supuesto, son los grupos nati-
vos los que constituyen la verdadera can-
tera del sofistisoul. Gente como los Tymes,
quinteto que triunfó en los sesenta con So
much in love, para Cameo. En los setenta la
reciclaron bajo la producción de Billy
Jackson, con quien también hicieron Miss
Grace y You little trustmaker. Otros pione-
ros fueron los Delfonics, vehículo de los
primeros éxitos de Thom Bell. Vendían el
concepto del sexy-soul y sus creaciones
Didn't I blow your mind this time y Lala
means I love you funcionaron espléndida-
mente. Los Intruders eran clásicos de ori-
gen: se conocieron en una barbería y gra-
baron sublimes piezas como Win place or
loose (She's a winner) o I'll always love my
mama.
No hay que olvidar a las grandes estre-
llas, los Stylistics y los Trammps; los unos, Filadelfia es una ciudad muy musical:
reyes de lo dulce; los otros, de la pista de nacer o grabar allí es algo así como una
baile. Los Trammps siempre fueron auto- garantía de calidad. La caterva de grupos
suficientes, dirigidos por el trío Baker, Ha- y artistas menores es impresionante: Despertad todos, no os
rris y Young, que les abastecían de cancio- Johny Williams, Garnett Mimms and En- quedéis durmiendo, / no hay
nes y conceptos como productores y com- chanters, Fat Larry, Derek and Cindy, que pararse, sólo hay tiempo
positores. Su primer éxito fue una versión Bell and James, People's Choice, Soul de pensar en el futuro, / el
de un tema antiguo, Zing went the strings of Survivors, Ebonys, por nombrar sólo a los mundo ha cambiado mucho
my heart, seguido por Hold back the night y, que han tenido algún éxito importante. respecto a como era antes; /
algo después, That's where the happy people Particularmente interesantes eran New está lleno de odio,
meets y Disco inferno. También produjeron York City, que grabaron con Thom Bell aburrimiento y pobreza. /
a grandes artistas, como Eddie Kendricks. un increíble Quick, fast, in a hurry (1973), y Despertad vosotros,
Los Stylistics, por el contrario, tenían un no hay que olvidar que Hall and Oates, el maestros; es el momento de
gran solista, Russell Tompkins Jr., posee- dúo blanco más lleno de soul, viene de Fi- enseñar cosas nuevas, quizá
dor de un falsete tierno, pero el nivel de ladelfia. así os escuchen. / El mundo no
sus discos dependía directamente de Sin embargo, hoy no se habla de sonido mejorará si lo dejamos estar".
quién fuese el productor. Con Thom Bell de Filadelfia. Hay razones evidentes:
hicieron los exquisitos Betcha by golly wow, Thom Bell ya no graba y PIR no tiene dis- Wake up everybody, Harold
Stop look and listen, You are everything, I'm tribuidora multinacional. Pero por detrás Melvin and The Bluenotes,
stone in love with you, Break up to make up, hay un entramado de intereses comercia- 1976.
Rockin'roll baby, You made me feel brand les, conceptos de mercadotecnia y presio-
new. En 1975, los dueños de su compañía, nes económicas que han llevado la situa-
Hugo Peretti y Luigi Creatori, decidieron ción al extremo. En primer lugar, los dis-
ocuparse de su carrera. Tuvieron éxito y, cos producidos como el sonido Filadelfia
gracias a los arreglos de Van McCoy, hi- dicta eran muy caros: ahora, pudiendo re-
cieron un híbrido latinizado muy intere- solver la papeleta con tres Dx7, un Emu-
sante. En los ochenta se integraron en PIR lator y un Lynn 9000, se evitan las grandes
para satisfacción de sus fans y grabaron secciones de cuerda, viento y ritmo. Pero
un emotivo álbum, 1982. los acompañamientos electrónicos y el
sampling, que funcionan muy bien en otros
tipos de música, no dan tan buenos resul-
tados cuando se trata de arropar la voz de
un Russell Tompkins Jr., como se com-
probó en el elepé Some things never change.
Las cosas han cambiado, pero quizá no
deberían haberlo hecho.
"HA HABIDO AÑOS EN QUE HE VENDIDO MÁS DISCOS QUE LOS ROLLING
STONES PERO NO ESTOY EN LOS LIBROS" (Harry K.C. Casey)
El lento declinar de TK
Records no impidió éxitos
ocasionales, como los de T-
1976. Firmemente asentado sobre su fór-
mula, lanza los éxitos con precisión, cada
uno en el momento justo: Get down tonight,
That's the way I like it y Shake your booty
(con Sunshine Band), I get lifted, I can lea-
Connection (Do what you wanna L BALANCEO ve you alone, It's been so long, I ain't lyin
( George McCrae), compaginándolos con
do, 1977) y Anita Ward (Ring
trabajos en otras discográficas locales de-
my bell, 1979). En cuanto a DE MIAMI pendientes de Henry Stone, como Alston,
otros artistas destacados de
Cat o Glades. Produjo a Gwen McCrae,
aquellos días -más afiliados a DAVID S. MORDOH mujer de George (Rockin'chair), y ayudado
Miami en sí que al sonido de
El verano de 1974 fue cómodo para los por Willie Clarke, a Betty Wright (Shoorah
Miami-, están Clarence Reid,
pinchas. Cuando la pista empezaba a mos- shoorah y la ganadora de un premio
Little Beaver y Timmy
trar signos de agotamiento, no había más Grammy, Where is the love). A partir de
Thomas (el de la seminal Why que sacar Rock your baby de la funda, sol- 1977, su mezcla de funk blanco y rhythm
can't we live together) y
tarlo descuidadamente sobre el plato, de- and blues comercial se diluye frente a otros
Latimore (la gran voz de Let's jar caer la aguja y esperar unos segundos productos de impacto sonoro mayor, pa-
straighten it out). También se -a veces, la entrada rompía un tanto el sando a un segundo plano salpicado con
potencian los estudios locales ritmo de la velada- antes de subir el vo- hits esporádicos: I'm your boogie man,
Criteria, famosos gracias a lumen y efectuar la mezcla. El resultado Keep it coming love (1977), Gimme some
haber sido utilizados por Eric era inmediato, con la gente dándose bofe- para Jimmy Bo Horne (1978), Please don't
Clapton en su 461 Ocean tadas por conseguir medio metro cuadra- go, Yes I'm ready (1979, el último junto a
Boulevard. do para bailar. Intepretada por George Teri DeSario) y Give it up (1983). Estuvo
McCrae, moreno de agudos contundentes bien mientras duró. Este hombre, nacido
desconocidos hasta entonces, vendió más en Florida en 1951, ha sido superado, pero
de 10 millones de copias y al mismo tiem- no iza bandera blanca. Por mucho que ha-
po puso en boca de todos un nuevo térmi- ble ahora del funk británico o el rap neo-
no: el sonido de Miami. yorquino, sabe que en cualquier momento,
Los padres del invento se llaman Harry en el menos esperado, puede volver a te-
Wayne Casey y Richard Finch. Se cono- ner su oportunidad. Y ya ha demostrado
cieron cuando Casey entró a trabajar en la no ser de los que las desaprovechan.
discográfica de Henry Stone y Steve Alai-
mo -padre del blue eyed soul y descubri-
dor de Sam and Dave-, TK Records,
donde Finch era bajista de sesión, ingenie-
ro suplente y encargado del almacén. Jun-
tos forman KC and The Sunshine Band,
algo así cómo la banda de la casa para
"MI MÚSICA ES ARCOIRIFÓNICA EN TRES DIMENSIONES. LLENA DE COLORES.
PUEDES DISFRUTARLA CON LA MENTE O SÓLO CONSUMIRLA" (Coati Mundi)
UNA JUNGLA DE
CARTÓN PIEDRA
MINGUS B. FORMENTOR
Bailar al son de la música afrolatina es ex-
troversión y gozo que exige espacios am
plios y limpios de obstáculos, algo franca-
mente antagónico de esos recintos tortuo-
sos iluminados al parpadeo donde barras,
rincones, desniveles e implementos mil de-
cantan una topografía más próxima al labe-
rinto que a la pista de baile. De algún modo
debía resolverse esta palmaria incongruen-
cia, o como mínimo aliviarla en parte. Las
discotecas no albergan música afrolatina tal
cual, pero por suerte para los bailarines ca-
bales no se han librado de sus buenas dosis
de toque latino, y de ello pueden dar puntual
noticia desde los seguidores del rock achica-
nado de Santana hasta los amantes del
funk jazz británico.
La hibridación pop más ampliamente di- de 1980 decide poner en marcha, junto con
fundida de lo que en el mundo anglosajón se Andy Hernández, un nuevo y alocado pro-
denomina latín international es la cimentada yecto: Kid Creole and The Coconuts.
a mediados de los setenta en torno a la Se trata de exponer un tropicalismo de Kid Creole and The
Dr. Buzzard's Original Savannah Band. mil soles, de potenciar la vertiente espec- Coconuts grabaron la mayoría
Esa colorista y caliente formación neoyor- tacular de la Savannah Band (que sigue su de sus discos para el sello ZE.
quina, fundada en 1976 por Stony Browder, camino sin los prófugos), de recuperar, en lo Como la compañía Celluloid,
daba cobijo a tres músicos de origen latino: posible, la locura escénica de los veinte con centró sus operaciones en
Andy Coati Mundi Hernández, más conoci- la empanada de sonidos propia de los Nueva York, aunque contaba
do entre los círculos salseros como Andy El ochenta. Y Kid Creole, Coatimundi y sus con capital europeo. ZE
Loco a causa de su propensión a tocar el sabrosísimas coristas-bailarinas lanzan sus apostó, entre otras aventuras,
piano con sus posaderas; el mítico Don Ar- dos primeros discos, Of the coast of me y por extender la frontera de la
mando, criado en El Barrio y en otros tiem- Fresh fruit in foreign places, se conciben como disco music con
pos integrado en las bandas de gira de Ja- minumusicales de pop latinizado, con cierta aproximaciones al rock o los
mes Brown, y Cory Daye, hijo de portugués trama interna que les da compacidad al sonidos tropicales, todo con un
y puertorriqueña. tiempo que dificulta su aceptación masiva. toque de refinamiento hip.
Percusiones de matriz africana, cuerdas No importa demasiado. No es ninguna no- Aunque no tuvo grandes éxitos
al estilo hollywoodense, vientos tras las hue- vedad que a mayor imaginación y calidad, de venta, ZE presentó en los
llas de una big-band ellingtoniana, ritmo mayores trabas a la hora de triunfar en el primeros ochenta influyentes
bata mutando subliminalmente hacia un negocio discográfico; sus injertos de caste- grabaciones de Material,
vudú urbano, tam-tams en el imperio de las llano, italiano, teatralidad y majadería difí- James Chance, Cristina,
telecomunicaciones, todo revuelto en fresco cilmente iban a colaborar a su difusión ma- Suicide, Davitt Sigerson, Was
cóctel para que ningún pinchadiscos disco- siva. Pero a la postre el espectáculo ha podi- (Not Was) y toda la familia de
tequero de Nueva York pueda poner en do con la música, les ha abierto mercados August Darnell.
cuarentena la bailabilidad del producto. En que probablemente ni sospechaban. Han
seis años, la banda pone en circulación cua- ido cayendo los discos -Tropical gansters
tro álbumes, dos con RCA y otros tantos (1982), Doppelganger (1983), In praise of ol-
con Elektra. En el ínterin, el hermano me- der women and other crimen-, se han multi-
nor de Browder, el bajista de la banda, va plicado las giras fuera de Estados Unidos,
acumulando alias (Darrio, August Darnell, se han consolidado como arquetipo del pop
Kid Creole) e ideas, hasta que a principios arrevistado para públicos proclives al soni-
do disco con gusto herético. Y a pesar de las
tareas de August Darnell como productor,
o de los escarceos de Andy Hernández en
solitario, la forma idónea de paladear ese
suave cóctel no es precisamente el vinilo.
Hay que verlos para creerlos. Hay que ver-
las para gozarlas.
"PODEMOS AYUDAR A LA GENTE DEMOSTRANDO QUE NOS PREOCUPAMOS
Y LES ENTENDEMOS A TRAVÉS DE NUESTRAS CANCIONES" (Ashford y Simpson)
Gwen McCrae y Betty Wright, dos nes jazzísticas y rockeras; pueden hacerlo
vocalistas del soul sureño que tuvieron cantautores comprometidos o grupos ca-
que combatir al imperio de la disco music. llejeros, entre el funk y la psicodelia, pero
lo que ya no será nunca es pobre, humilde
o pesimista.
Algunos grandes de los sesenta conti-
núan en activo, e incluso, en las favorables
circunstancias de la nueva década, logran
sus mejores discos: Gladys Knight, Diana
Ross, los Staple Singers, Curtis Mayfleld,
Stevie Wonder, los Temptations, Marvin
Gaye, Smokey Robinson o James Brown.
Si hay talento nunca hay problemas. En el
ur surgen grandes estrellas como Millie
Jackson y Latimore, que renuevan y po-
nen al día sus clásicos conceptos, y aun-
que Stax debe declararse en bancarrota
en 1974, aún tiene tiempo de descubrir los
nuevos talentos de Luther Ingram y Shir-
ley Brown, mientras en Nueva Orleans los
Meters cobran status de institución y Allen
Toussaint es uno de los compositores más
cotizados. A continuación, se reseñan al-
gunos de los nombres memorables de la
música negra de los setenta.
Ashford and Simpson. Nickolas Ashford
(1943) y Valerie Simpson (1948) trabaja-
ron como productores, intérpretes y auto-
res para los sellos Scepter y Motown en
los sesenta; Marvin Gaye y Tammi, Te-
rrell, Gladys Knight, Ray Charles y Diana
El
Ross grabaron sus temas. Ella hizo dos
elepés, de raíces gospel, en Motown. En
1973 grabaron Gimme something real, su
sonido sofistisoul primer disco como dúo. Hasta 1982, gra-
parece definitivamente perdido cias a un contrato con Capitol, no habían
en los primeros ochenta. Ni tenido gran éxito, pero sí reputación de
l os revivalistas y nostálgicos lo RO NEGRO DE músicos sensibles y nada convencionales.
recuerdan, prefiriendo el soul Ternura y búsqueda musical, serenamente
duro de los años sesenta. Sin
embargo, músicos británicos
LOS AÑOS SETENTA combinadas, son las características de I
wanna be sefish, It's still good to ya, A musi-
como Paul Weller y sus PATRICIA GODES cal affair, Street opera y Solid, sus mejores
i mitadores recurren al soul La liberalización de la sociedad norteame- discos.
refinado en busca de recursos ricana y las luchas por los derechos civiles
creativos no trillados. Surge en los sesenta facilitaron la aparición de Johnny Bristol (1935). Autor-productor de
l o que los especialistas llaman una próspera y culta burguesía negra para los años dorados de Motown, fue respon-
soul britannia, con grupos la que estudios universitarios, grandes ca- sable de Someday we'll be together, de las
como Blow Monkeys y Simply sas, ropa elegante, joyas y coches consti- Supremes. Acabó mal con Berry Gordy y
Red al frente, que expolian a tuían prácticamente una reivindicación se inició en solitario con el gran Hang on in
l os auténticos creadores, social. La música negra de los años seten- there baby, con atmósferas y lujo de sofisti-
aunque realizan una ta refleja esta situación; la euforia invade soul más sonidos rústicos de R&B (no en
i nteresante labor de los estudios de grabación y dos intereses vano nació en Carolina). Continuó hacien-
recuperación. polarizan la atención de los músicos: el do prodigios de orquestación y grabación,
sexo, como de costumbre, y los temas so- pero sin triunfar. Su mejor canción es po-
ciales. siblemente Love no longer has a hold on me,
Aparecen docenas de subgéneros y fe- éxito en Europa en 1980. También ha pro-
nómenos menores que acompañan la ten- ducido discos de Bozz Scaggs, Tom Jo-
dencia general hacia la sofisticación or- nes, los Osmonds, Buddy Miles y Jerry
questal, inspirada en los lujosos sonidos Butler.
de las grandes urbes. Productores supera-
vezados dirigen las grabaciones despilfa-
rrando presupuestos y medios. El soul
puede ser dulce, como el de los grandes
grupos vocales; bailable, como el disco-
soul neoyorquino; puede responder a con-
ceptos intelectuales, como las hibridacio-
"MI PROBLEMA ES DEMASIADA PRODUCCIÓN Y MUY POCAS SALIDAS. TENGO
MATERIAL PARA 20 `ELEPÉS' ESPERANDO QUE LO EDITEN" (George Clinton)
George Clinton (1940). El organizador del Earth, Wind and Fire, una banda
lío más divertido de la música moderna. ambiciosa que aportó propuestas místicas
Problemas legales con los Parliaments, su a la música negra de los setenta.
grupo vocal, le obligaron a concentrarse
en su banda de acompañamiento, Funka-
delic. Ficharon por Westbound y destaca-
ron por sus pintorescos espectáculos ul-
trapsicodélicos. Recuperó a Parliament,
mutación sideral de su primer grupo, los
llevó al sello Casablanca, y acabó en las
listas con sus dos grupos. La situación era
muy descarada y Clinton inventó una reli-
gión esotérico-musical, el P funk, que le
sirvió de excusa para inundar el mercado
de subproductos -The Horny Honks,
Zapp, Parlet, Brides of Funkestein, Bri-
desmaids y Bootsy's Rubber Band-, has-
ta que cansó a la gente. Detrás de todo
hay un funk divertido, bailable y enloque-
cido. Continúa en solitario y es muy respe-
tado, especialmente en el Reino Unido.
Entre su inmensa discografia destacan
Chocolate city, Mothership connection, The
clones ofDr. Funkenstein (Parliament), Ahh
the name is Bootsy baby (Bootsy), Uncle
Jam wants you y One nation under a groove
(Funkadelic).
Labelle fue una de las sorpresas negras de conceptos rítmicos, aunque las influen-
mediados de los setenta, con cias hispanas les hacen esmerarse en los
escenografías y repertorio imaginativos. arreglos de metal. Callejeros e inspira-
dos, fueron muy convincentes en su mo-
mento con elepés como Raising hell, Night
fever, y temas como Party time, Spanish
hustle y Night fever. Muy prolíficos, saca-
ban discos indiscriminadamente, con lo
que la calidad se resintió, pero fueron de
los primeros en grabar un rap en el tema
King Tim Ill (1979).
El
con mensaje y los efectos sonoros. Su Everything is everything y Extenssions of a
tema clásico es In the rain, cantado por man) en una línea que se cortó con su sui-
Wee Gee (William Howard), luego intér- cidio.
término northern prete en solitario. Entre sus grandes dis-
soul nace en el norte de cos están Watcha see is watcha gel, Toast lo Isley Brothers. Combo familiar de Ronald
I nglaterra a fines de los the fool, Devil is dope, y elepés como Dra- (1941), Rudolph (1939) y O'Kelly Isley
sesenta, en ciudades como matic jackpot, Drama V y Joy ride. (1937-1986). Los Isley triunfaron en 1959
Wigan y Blackpool. Lo con una improvisación que concluía su
originan algunos mods Earth Wind and Fire. Grupo clave para el versión de Lonely Teardrops en vivo,
recalcitrantes, que se funk frívolo de los ochenta, aunque tenían Shout; también hicieron piezas tan brillan-
empeñan en seguir oyendo los pretensiones filosóficas. Su evolución es tes e imitadas como Twist and shout, Res-
sonidos de la Motown de los paralela a la de la música negra en general. pectable, Nobody but me y Who's that lady?
sesenta. Aparece así un círculo Formado alrededor de Maurice White Grabaron varios discos notables en Mo-
de coleccionistas que (1941), ex sesionero de Chess y autor con town: I guess I'll always love you, This old
rebuscan en las más oscuras facilidad para los estribillos comerciales, heart of mine, Behind a painted smile. Crea-
grabaciones de soul urbano. coleccionaron hits durante 10 años: That's ron una compañía, T-Neck, y junto a dos
I mitando su fórmula se crean the way of the world, Shining star, Gel away, hermanos más, Ernie y Marvin, y un cuña-
i nfinidad de producciones Serpentine fire, September, Let's groove... do, Chris Jasper, hallaron un sonido elec-
discográficas de segundo orden Duros y experimentales al principio, se trónico pionero del funk and roll, con clási-
destinadas a satisfacer las convirtieron en algo perfectamente pop. cos como That lady, Live it up, Midnight sky
demandas de un mercado tan Atraviesan una crisis con conatos de reu- y Harvest for the world, más elepés rotundos
consumista como inmovilista, nión y algunos miembros grabando en so-
que ha llegado a ser una litario.
i mportante influencia en el
pop británico. Fatback Band. Neoyorquinos y proveedo-
res de funk discotequero, muy popular en-
tre 1975 y 1976. Su líder, Bill Curtis, es ba-
tería, lo que explica su obsesión por los
"LA MÚSICA `DISCO' ES COMO UNA PELÍCULA `PORNO':
TE DIVIERTE DURANTE CINCO MINUTOS" (Herbie Mann)
como 3 + 3, Live it up, Fight the power, The Barry White encaminó el soul hacia la
heat ¡son o Go for your guns. Recientemen- confección de sonidos aptos para la
te bifurcados, han grabado, por un lado, seducción y el dormitorio.
los tres originales, y por otro, Isley, Jas-
per, Isley, que han creado el último gran
tema de la familia: Caravan of love.
Donna Summer fue una de las pocas seguido grabando bellos discos con sus
cantantes que tuvo vida comercial tres apellidos como único nombre artís-
tras el resplandor de la disco music. tico.
al éxito con el
productor Bert de Odyssey. Las hermanas López, con voces
Coteaux, en 1970, de sabor salsero, fueron el eje del trío que
con Black seed are se consagró en 1976 con Native New Yor-
growing, Spinnin' ker, Easy come easy go / Hold the motta
around. Su can- down y el elepé Odissey, producido por
tante, Donald Sandy Linzer. Tenían todo el ambiente de
McPherson, mu- las calles de Nueva York, con la promis-
rió de leucemia y cua mezcla de culturas y formas de vida
fue sustituido por reflejadas en su música.
Cuba Gooding.
Con su voz sedo- Ohio Players. El heavy street funk en su má-
sa vendieron un xima expresión. Se fundaron en 1959 y
millón de Every- grabaron desde 1967. Tuvo gran repercu-
body plays the fool sión su serie de discos de los primeros se-
(1972). Grabaron tenta (Pain, Pleasure, Ecstasy, Skin tight,
Afrodisiac, álbum Honey, Contradiction y Angel), con las por-
erótico, con Ste- tadas más densamente sensuales de la his-
vie Wonder, y toria. Vendían mucho entre el público ne-
Euphrates river, gro, pero resultaban demasiado duros
que son dos dis- para los blancos, aunque en los ochenta
cos etéreos y fría- optaron por un sonido más convencional.
mente sensuales. Sus bajos y sus apartes vocales, herederos
El trío se separó a de la obra de Sly Stone, han resultado
mitad de la déca- muy influyentes (Rick James, Kool and
da para volver a the Gang, Fatback Band).
reunirse en 1980.
Ann Peebles (1947). Su obra maestra es I
Van McCoy can't stand the rain, versión femenina del
(1940-1979). What's going on de Marvin Gaye, donde
Gran orquesta- Ann despliega su profunda y clara voz so-
dor, en los sesen- bre unas melodías inusualmente bellas y
ta produjo a las un reiterativo ritmo de Memphis. Antes
Shirelles, Chuck había grabado 99 pounds, Straigh for the
Jackson, Gladys heart y versiones de clásicos soul, pero, al
Knight, Ruby and igual que sus discos posteriores, como Be-
the Romantics, Jackie Wilson y Brenda ware, quedan minimizados por la clase de
and The Tabulations. Los discos a su Rain.
nombre, al igual que sus arreglos para los
La revolución no será discos de Stylistics con Hugo and Luigi, le Minnie Riperton (1947-1979). Con una te-
televisada, / no podrás convirtieron en el Lecuona yankee con te- situra de cuatro octavas cantó en The
quedarte en casa, hermano, / mas orquestales de inspiración latina y un Gems y Rotary Connection. Consiguió un
no podrás pasar de ella, / no inconfundible uso del viento, los pianos y contrato con Epic gracias a un empleado
podrás perderte en la percusión. Con The hustle, Disco baby y los de la compañía, que, fascinado por la voz
heroína / ni aprovechar los álbumes Disco baby, The disco kid, The real que había oído en un disco, siguió su ras-
anuncios para sacar una McCoy, Rhythms of the world y Lonely dan- tro hasta su casa de Florida. El resultado
cerveza. / La revolución tendrá cer demostró que una pieza disco podía te- fue una producción de- Stevie Wonder,
como estrellas a Natalie ner una gran riqueza musical.
Wood y Steve McQueen, / no
dará sex appeal a tu boca, / Moments. Nombre poseído legalmente
ni te quitará los granos, / ni te por Sylvia Robinson, del sello All Plati-
hará perder peso, / ni te irá mun, que ponía a disposición de los tríos
mejor con coca-cola, / porque vocales masculinos que contrataba la
la revolución no será compañía. Los Moments clásicos son los
televisada, / no habrá de Harry Ray, Al Goodman y Billy
reposiciones, hermanos y Brown, productores, autores y creadores
hermanas, / la revolución será del sweet-soul refrescante y sensual de
en directo". Don't rain in my backyard, Look at me I'm
in love, Love in a two way street y Sexy
The revolution will not be mama. Su discografia es complicadísima,
televised, Gil Scott-Heron, 1971. pues hay varios elepés con el mismo título
y discos con denominaciones diferentes de
igual contenido, pero merece la pena de-
sentrañarla. Dejaron All Platinum y han
"LO LLAMO MÚSICA TRIDIMENSIONAL, CON RITMO PARA EL CUERPO, IDEAS
PARA LA CABEZA E INSPIRACIÓN PARA EL CORAZÓN" (Gil Scott-Heron)
Perfect angel (1974), con temas como Lo- Agradable anomalía de la música negra
vin'you, tiernos, optimistas y decisivos, de los setenta fue Bill Withers, respuesta
soul a los cantautores californianos.
con los que se ganó un puesto de honor en
el recuerdo del público, a pesar de una ca- En los setenta se
rrera irregular. Tras una larga batalla con- retiró a estudiar,
tra el cáncer, falleció en Los Ángeles; el pero la influencia
disco póstumo, Love lives forever, contenía de sus grabacio-
aportaciones de sus admiradores, desde nes con Burt Ba-
Michael Jackson hasta George Benson. charach (Anyone
who had a heart,
Gil Scott-Heron (1949). Intelectual de iz- Walk on by, Don't
quierdas, fue escritor antes que músico. make me over, et-
Con ayuda de Brian Jackson vertió sus cétera) en el sofis-
poemas en música y fue apasionándose tisoul fue decisiva.
poco a poco por el show bussines, represen- En los setenta,
tando oficialmente en él la sensatez y el sólo tuvo dos éxi-
cerebro. A pesar de ello, ha tenido éxitos tos, Then came
en las listas (The bottle, The revolution will you, con los Spin-
not be televised, Storm music, B movie, Jo- ners, y One you hit
hannesburg). Dedica ahora sus esfuerzos a the road. Al firmar
alertar de los peligros de la energía nu- con Arista en
clear y a atacar la política del presidente 1979, su carrera
de Estados Unidos, Ronald Reagan. Es el se reanimó con
único teórico de la conciencia racial que producciones de
ha sobrevivido en los frívolos ochenta. Barry Gibb y
Barry Manilow.
Donna Summer (1950). Se apellida Gaines
y nació en Boston. Llegó a Europa con Barry White
una troupe de Hair, se empleó como coris- (1944). Muy co-
ta en unos estudios de Alemania Occiden- nocido en España
tal y, gracias a las producciones de Gior- por Love theme;
gio Moroder, llegó a ser una figura decisi- Never, never gonna
va y polémica. Revolucionó los conceptos give you up; You're
del mercado musical, dando a la música the first, the last,
de baile una trascendencia y respetabili- my everything y
dad antes vedada. Se situó en las listas de Let the music play,
todo el mundo con producciones indepen- lo que le condenó
dientes alemanas, algo insólito entonces. al descrédito. Los
Pionera del primer disco-tecno, acabó de- conocedores sa-
sacreditada por hacer concesiones al roc- ben, sin embargo,
kismo y revelar un temperamento purita- que este enorme tejano fue el arreglista de
no que no coincidía con su erotismo exhi- Harlem shufe (Bob and Earl), de The duck
bicionista. Sus mejores discos son: Love to (Jackie Lee) y de Walking in the rain with
love you baby, I remember yesterday, Four the one I love (Love Unlimited). Con este uando dejé de
seasons of love y Once upon a time. trío femenino para el acompañamiento dedicarme exclusivamente a la
vocal y Love Unlimited Orchestra para el disco, todos los que me
Dionne Warwick (1941). La Venus de New instrumental, White grabó sus éxitos en rodeaban se me echaron
Jersey pertenece a una familia musical, los setenta. Sus producciones resultaban encima; pensaban que había
aprendió a cantar en la iglesia y tiene una demasiado caras, por lo que intentó suplir matado la gallina de los huevos
preciosa voz, estudiadamente digna y fría. sus gigantescas secciones de cuerda y ba- de oro. Pero aquello me
tallones de guitarristas con sintetizadores, estaba asfixiando. Me sentía
algo que, evidentemente, fue imposible. como Juana de Arco, víctima
de los malentendidos,
Bill Withers (1938). Una de las personali- i mposibilitada para
dades más insólitas de la reciente historia escaparme del papel que me
musical. Instalaba lavabos en aviones habían asignado. Yo no era
mientras grabó Jusi as I am, su primer ele- una cantante de disco music,
pé, una inspirada versión negra del can- podía hacer rock, gospel o
tautor folk, la antítesis del glamour. De standards. Aretha Franklin o
1972 a 1981 hizo muy buenas cosas: Grad- Barbra Streisand no tienen
ma's hands, Ain't no sunshine, lean on me que ganarse la vida fingiendo
(número uno en 1987 en la versión de Club orgasmos en el escenario".
Nouveau), Lonely day y Soul shadows, y
Just the one of us, con Crusaders y Grover Donna Summer, 1979.
Washington Jr., respectivamente. Parece
evidente que no hay sitio, en los ochenta,
para su estilo soleado y humanista.
"RECUERDA, EL MUNDO ENTERO ES UN CIRCO. / NO
SEAS TÚ EL PAYASO" (De `Funny Bone', Chic, 1978)
CHIC
FACTORÍA DE LUJO
ANTONIO DE MIGUEL
Chic no inventó la disco music, pero hizo
algo más dificil: condimentar una verda
dera especialidad de la casa con sus bien
ligados cerebros musicales, Nile Rodgers
y Bernard Edwards, la Chic Organiza-
tion. Plato de alta cocina internacional
para gourmets que también saben pala-
dear los elementos básicos, primarios,
sobre los que se cimenta la especial ma-
nera de fabricar éxitos de estos dos neo-
yorquinos. Reacios al uso de la habitual
artillería electrónica sintetizada, su fina
sensibilidad de instrumentistas, compo-
sitores, arreglistas y productores les bas-
taba para dar color y nervaturas vitalis- cuál es la más universal de las reacciones y descubría nuevos hallazgos rítmicos,
tas a unas melodías tan sencillas como ante la música: el baile". Abandonadas Good times, My feet keep dancing, My for-
efectivas. Eligieron el camino del múscu- las dudas, a Edwards se le ocurre un bidden lover. Letras hedonistas, algún
lo en lugar del de la técnica endiablada, y nombre panlingüístico, Chic, y Nile em- disloque humorístico, presencia instru-
demostraron lo que aún se puede hacer pieza frenéticamente a escribir temas. mental poderosa, modélica artesanía de
con guitarra, bajo, batería, teclados, vo- Junto a Tony Thompson (ex batería de producción, derroche de elegancia y
ces humanas y algunos refuerzos orques- Labelle) y la cantante Norma Jean buen gusto.
tales. Se puede hacer algo tan lúdico Wright graban unas cintas que se pasean La Chic Organization se afianza
como crear detonantes que inciten al sin respuesta por varias compañías dis- como factoría imbatible de éxitos millo-
baile no computadorizado, no secuen- cográficas. Semejante escasez de olfato narios y Rodgers-Edwards se ven agasa
ciable. es enmendada por el presidente de la At- jados por suculentas ofertas para hacer
Nile y Bernard, ambos nacidos en lantic y el primer elepé de Chic está en la de sastres discográficos a otros artistas
1952, provienen de familias modestas calle en 1977, con portada fantasma y un de dudoso futuro o nombres del rock que
("muy pobres y muy inteligentes", mati- single descarado, Dance, dance, dance. El precisan una loción de negritudes rítmi-
zan ellos) en las que la música era un salto a los mercados internacionales lo cas: la francesa Sheila, Debbie Blondie
miembro más. Nile iba para científico darán al año siguiente con C 'est Chic, en Harry, Sister Sledge, Diana Ross,
nuclear, pero una reflexión sobre la gue- el que ya aparecen sus fotografias y que Johnny Mathis, Carly Simon.
rra le bastó para olvidar esos malos pen- cuenta con las dos nuevas vocalistas, Chic harán todavía varios álbumes
samientos; su futuro compañero despun- Alfa Ánderson y Lucy Martin. como grupo: Real people, Take it off Ton-
taba como matemático, pero la música Cápsulas de licor tan embriagantes gue in Chic..., bañando su música de sa-
sedujo sus cuerpos, sedujo sus almas, y como Le freak, I want your love o instru- bores rhythm and blues, más duros, me-
pasaron directamente al mundo de las mentales diamantinos (Savoir faire) ele- nos tragables para públicos de piel rosa-
sesiones de grabación. El guitarrista varon a Chic por encima de inventos da. Pese a realizar música de altísimo ca-
Rodgers lo que de verdad ansiaba era electrónicos y bailes robotizados. La gui- libre personal, no vuelven a tener éxito.
convertirse en líder exhibicionista de una tarra y el bajo llenaban cada célula del Pragmáticos, entierran Chic y se dedican
banda de rock para emular las hazañas sonido Chic. Cuarenta millones de dis- a actividades más productivas. Para di-
de su ídolo Jimi Hendrix, pero, al final, se cos vendidos y el interés despertado en- vertirse, Rodgers inicia, respaldado por
integró a un grupo de rhythm and blues, tre los músicos de rock ribetearon la ma- toda la organización, sus propias fanta-
The Big Apple Band, sección rítmica del gia del grupo. Risqué (1979) jugaba exte- sías de supermúsico, Adventures in the
cuarteto vocal New York City. Fueron riormente con cierto glamour nostálgico land of the good groove (1983) y B -Movie
años (de 1972 a 1975) de estimulante matinée (1985). Edwards también prueba
compenetración junto a un insobornable el funcionar como solista (Glad to be hete,
obseso del bajo eléctrico, Edwards. 1983), y trabaja con músicos de rock en
En 1976, sin trabajo a la vista, deci- Power Station. La factoría Chic (prime-
den asociarse sin saber qué camino esti- ro Rodgers-Edwards, luego sólo Rod-
lístico tomar. Hasta pensaron por un HISTORIA DEL `ROCK' gers) ha dejado su marca de calidad-co-
momento embarcarse en arduas tareas mercialidad-prestigio-lujo en variadísi-
punkies barajando nombres como Oran- mos discos de David Bowie, Grace Jo-
ge Julius o el más tremendista de Allh
PRÓXIMO CAPítuLo nes, Duran Duran, Mick Jagger, Madon-
and The Knife-Wielding Punks: "Quería- na y varias decenas más de afortunados
mos tocar lo que en ese momento estaba mortales a los que ha reavivado una vari-
en el ambiente hasta que comprendimos (ROCK` ADULTO ta mágica que suena Chic.
HISTORIA DEL `ROCK'
Aplicar el calificativo de adulto a un artista de rock puede
considerarse como un insulto: ésta es una música que pre-
tende tener la llave de la eterna juventud. Sin embargo, exis-
ten abundantes grupos y solistas -Diré Straits, Pink Floyd,
Génesis, Mike Oldffeld (en la foto), Steely Dan- que evitan
los clichés adolescentes en el desarrollo de sus conceptos
personales, aunque intenten disimular su edad o falta de
imagen vendible al no aparecer en las portadas de sus dis-
cos. Más peyorativo es el término AOR, que designa a una
serie de bandas que han logrado una altísima popularidad aprovechándose del
conservadurismo de la radio norteamericana y usando certeras técnicas de lanza-
miento, creando un rock a la medida de las exigencias del mercado.
especifique con
letra visible en los
EL LUSTROSO créditos- a la
competencia. El
instrumentista fir-
SONIDO DE ma encantado,
porque se garanti-
LOS ÁNGELES za el grifo de con-
tactos permanen-
te y un puesto de
DAVID S. MORDOH trabajo fijo. A
En una ciudad de las características de partir de allí bro-
Los Ángeles todo es relativo. Las distan- tan las pequeñas
cias largas son cortas; las drogas, vitami- mafias de músicos
nas; Van Halen, rock duro; George Ben- que controlan los
son, jazz; los Eagles, country, y Michael diferentes estilos;
Jackson, soul. Los Ángeles adquiere raíces suelen aparecer
para revender tras pasarlas por su filtro siempre todos
particular; en el proceso las aplasta y ex- juntos, tocando
prime, sustituyendo el mensaje original en el primer tra
por el suyo propio. De hecho, es la ciudad bajo de cualquier desconocido, convir-
que mejor resume la dinámica creada por tiendo lo que inicialmente era un producto
el sistema de vida estadounidense. anónimo en joven promesa con amigos
Verdadera tierra prometida en cuestión ilustres. os Ángeles cuenta
de estudios de grabación, recibe buscado- Los escrúpulos quedaron en el pueblo; con una numerosa colonia de
res de fortuna de todos los rincones del esto es Los Angeles. Tiene el mismo color músicos profesionales, que
país, así como del resto del mundo. Sobre- el dinero de figurines del pop (Leif Garrett, cubren encargos
viven los mejores, pero siempre hay donde Shaun Cassidy) que el de cantantes meno- cinematográficos,
escoger. Suelen ser músicos versátiles, páusicos (Garfunkel), folclóricas recicla- publicitarios y discográficos.
más preocupados en perfeccionar su téc- das (Joan Baez, Juddy Collins), seudopoe- Los responsables de crear el
nica que en perder tiempo escribiendo tas (Carole Bayer Sager, James Taylor), sonido perfecto fueron en
canciones; músicos de sesión. De Los Án- mocitas con sueños estirados (Karla Bo- realidad un núcleo de
geles jamás saldrá ningún movimiento noff, Louise Goftin), compositores inquie- baterías (Jim Gordon, Jim
sanguíneo como el punk, porque ellos, con tos (Joni Mitchell, Van Dyke Parks, Keltner, Jeff Porcaro, John
su fría profesionalidad, dominan la si- Randy Newman, Jimmy Webb), cantauto- Guerin, Russ Kuntel),
tuación. res de vaso largo (Christopher Cross, Va- guitarristas (Larry Carlton,
Esta aparente polivalencia -que les lerie Carter, Dan Fogelberg, Stephen Bi- Dean Parks, Ray Parker, Lee
permite acompañar a artistas de pop, jazz shop) o grandes vocalistas sin rumbo (Boz Rittenou, Danny Kortchmar),
o country- degenera en estereotipo, hasta Scaggs, Eddie Money). La cuestión es ob- saxofonistas (Tom Scott, David
el punto de haberse cambiado los papeles: tener resultados ultraprofesionales para Sanborn, Jim Horn) y otros
actualmente son ellos, llevando consigo la las fieras de las ondas, aunque todos aca- que, con exquisita
llave para entrar en las emisoras america- ben por parecerse entre sí. Y en medio de profesionalidad, se ganaron
nas, quienes fijan el tipo de sonido del que tanta fórmula aburridamente aplicada, el derecho a figurar en las
los contrata. Más que un estilo, el AOR de personajes valiosos como Rickie Lee Jo- contraportadas y cobrar
Los Ángeles implica la carencia de éste, nes, Warren Zevon y Tom Waits procuran tarifa doble.
canciones sin madre ni padre moldeadas zafarse de la trampa con diplomacia.
para amantes de lo neutro. Toto son el prototipo de AOR califor-
Aun así, existe la posibilidad de detec- niano. Amigos desde 1972, sus vidas se
tar clanes diversos alrededor de las gran- cruzaron en innumerables sesiones. En al-
des multinacionales, como Warner Bro- guna de ellas -como el disco de Boz
thers y CBS. Éstas necesitan un buen plan- Scaggs Silk degrees- incluso demostraban
tel de músicos bajo contrato, ya sea para habilidades compositoras, lo cual lleva a
darle forma a las canciones de los afortu- Steve Lukather (guitarra), Bobby Kimball
nados talentos que superan la selección (cantante), David Paich (teclados), Jeff
previa, o simplemente como mercancía de Porcaro (batería), David Hungate (bajo) y
intercambio para mejorar la imagen de la Steve Porcaro (teclados) a formar el grupo.
casa, cediéndolos -siempre y cuando se Del primer álbum, en 1978, extraen el sen-
cillo Hold the line, que les abriría las puertas
de éxitos como Rosanna, Africa y I won't
hold you back los tres del disco Toto IV
(1982). Su carrera -como las de Bread o
Mr. Mister- hace suspirar a otros com-
pinches, encerrados en una rutina tan lu-
crativa como agobiante.
"LA MÚSICA DEBE ALIVIAR EL PESO DE LA REALIDAD, DESCONECTAR
Y HACER SOÑAR... LA REBELDÍA LA DEJO PARA LOS JÓVENES" (Christine McVie)
Los Fleetwood Mac californianos: de taron (1967) con el más brillante capítulo
i zquierda a derecha, Nicks, de blues realizado en Inglaterra.
Buckingham, Fleetwood y los McVie. El influjo del ambiente hizo su mella: su
sonido adopta una dimensión más íntima.
Los blues reptantes abren paso a cortes de
hondura lírica reforzados por una tercera
guitarra: la de Danny Kirwan (1950), que
inocula virus pop y melodías frágiles. Tras el
instrumental Albatross (1968), Green, entre
lo profano y lo místico, escribe algunos de
los más bellos pasajes guitarrísticos de la
historia del rock Man of the world, Oh well.
Un delicioso álbum, Then play on (1969), re-
coge este período. También se suman furti-
vos a los ritmos tribales, pero su éxito no
llega a Estados Unidos, donde Santana ca-
pitaliza sus hallazgos.
Sumergidos en la vorágine del under-
ground, el LSD y las presiones del "negocio„
minan la salud mental de Green, que renun-
cia a la música. Jeremy, tras cristalizar en
Kiln house (1970) y un atractivo álbum en
solitario su esquizoide obsesión por Buddy
Holly, desaparece misteriosamente en Los
Ángeles, en medio de una gira americana
(1971). Le reemplazan Bob Welch (1946),
californiano afincado en París, y Christine
McVie (1943), ex Chicken Shack, mujer de
Una extraña maldición John. Teclista y compositora, había sido vo-
persigue a los guitarristas de tada vocalista de 1969 en Inglaterra y reali-
Fleetwood Mac. La fiebre zado un álbum propio.
religiosa de Peter Green le lleva LEETWOOD MAC, Sigue la mala racha. Kirwan, neurótico y
desinspirado, es expulsado, mientras Welch
de enterrador a ordenanza de
hospital, a una comuna israelí o
a devolver sus royalties a
vicios se desvive entre ser el doble pobre de Green
y la nueva orientación tardo-californiana.
La entrada de Dave Walker y Bob Weston
punta de arma. Unos lastimosos MATRIMONIALES sólo añade rutina blues-rockera. Se irán
álbumes le rescatan en los pronto. Y cuando comienzan a levantar ca-
ochenta con anormal obesidad. JOSÉ MARTA REY beza Welch también abandona. En el últi-
Jeremy Spencer huye del Premio a la perseverancia. Un orgasmo de mo momento llega el milagro. Se llama
grupo y se enrola en los Niños discos millonarios y pleitesía internacio- Lindsey Buckingham (guitarra y voz) y Ste-
de Dios, arrastrando a su nal es su moraleja edificante. Acosados vie Nicks (voz), un matrimonio californiano
mujer, acudida a rescatarle. por las más peregrinas desventuras, Fleet- con un fallido debú como dúo.
Tras un disco catequista, su wood Mac han sorteado 10 formaciones Fleetwood Mac (1975) sirve de ensayo
pista se pierde en Italia. Los distintas, varias crisis de identidad y os- afortunado al nuevo quinteto. A partir dé
elepés de Danny Kirwan y tensibles virajes, geográficos (de Londres Rumors (1977) todos son nubes rosas, pese
Bond Weich acabarán en las a Los Ángeles) y musicales, a través de a coincidir con los divorcios de ambas pare-
rebajas. Tampoco Lindsey tres décadas. Guiados por su escuálido y jas: Christine vivirá con Dennis Wilson
Buckingham, el más gigantesco batería Mick Fleetwood (1942) (Beach Boys) y Stevie, amiga de Tom Petty,
camaleónico, tendrá mejor y el bajista, John McVie (1945) -únicos colabora con éste. Están instalados. Incluso
destino comercial. supervivientes originales, han celebra- Tusk, un doble más arriesgado, mantiene las
do sus 20 años como grupo. ventas. Las giras monstruo encienden tenta-
Su nombre salpica instantáneamente ciones en solitario. Mick grabará en África
estribillos risueños, canciones animosas (The Visitor), pero sólo Stevie, con su prime-
de pop diáfano, bucles vocales y elaborada ro Belladonna (número uno en 1982), iguala-
sencillez. La anestesia perfecta para el de- rá el fulgor comercial del grupo. El material
clinar hippy. Almíbar adulto para una nue- nuevo escasea y Mirage (1982) los despide
va burguesía que jugó a cambiar el mundo discretamente hasta Tango in the night
y hoy sólo hace intercambio de pareja. No (1987), una revisionista puesta al día por la
siempre fue así. Fleetwood Mac han sufri- mutua nostalgia de sus cuentas corrientes.
do notorias metamorfosis: en un principio
eran poco más que la prolongación de Pe-
ter Green, guitarrista de trazo fino y tensa
fluidez. Peter, Mick y McVie tomaron el
nombre de un tema inédito de sus meses
con John Mayall y, con la adición de la sli-
de-guitar de Jeremy Spencer (1948), debu-
"ENSE GUIDA SUPE QUE `BIRTH OF COOL', DE MILES DAVIS, MARCARÍA UN HITO
EN LA HISTORIA DE LA MÚSICA: PESABA UNA BARBARIDAD" (Walter Becker)
fruto de la adapta-
ción tan peculiar
STEELY DAN, de la influencia
jazzística en sus
canciones. Becker
ENIGMÁTICA y Fagen no preten-
den mezclar dos
BRILLANTEZ géneros en busca
de un resultado
bastardo (jazz-
DAVID S. MORDOH rock), sino aplicar
Se puede llegar a pensar que para escuchar determinadas pro-
a Steely Dan antes hace falta ponerse el es- piedades del jazz
moquin, tal es la elegancia de su música. dentro del contex-
Durante casi una década fueron sinónimo to acartonado del
de perfección instrumental, del gusto por lo rock para desan-
sobrio y bien acabado, como las grandes quilosarlo.
marcas de calidad garantizada superándose La reactiva-
año tras año. Ferozmente criticados por ción comercial
sectores reacios a la premeditación -o falta con el single de
de espontaneidad- en el rock, aguantaron Rikki don't lose
mientras tuvieron algo que decir, para ter- that number
minar la aventura en su justo momento. Na- (1974) provoca la
die les podrá acusar jamás de explotar esa escisión. Baxter
gallina de huevos de oro que es el consumi- es un superguita-
dor poco exigente con discos redundantes. rrista, necesita las
El alma del grupo la componen dos neo- giras para disfru-
yorquinos con cara de pocos amigos, Wal- tar y ganar dinero
ter Becker (Quenns, 1951) y Donald Fagen (al estarle vetada
(Passaic, Nueva Jersey, 1951), bajista y te- la composición,
clista, respectivamente. El nexo común a no cobra comisio-
tan estrecha amistad, forjada en el Bar Co- nes). Renegando
llege de Nueva York, es su pasión por el de los escenarios,
jazz. Antes de formar Steely Dan -nombre el dúo sólo quiere
de un instrumento erótico en Naked lunch, trabajar dentro
famosa novela de William Borroughs-, del estudio. Bax-
junto a Jeff Baxter y Dennis Dias, guitarris- ter toma la decisión. Su fuga a los Doobie
tas, y el batería Jim Hodder, la pareja ejer- Brothers se deja sentir en los dos elepés si-
cía funciones mercenarias, como acompa- guientes, Katy lied (1975) y The royal scam
ñantes de Jay & The Americans y composi- (1976). Becker y Fagen quedan libres para Steely Dan han tenido
tores de plantilla de la corporación ABC. crear sin ataduras, rodeados de músicos algunas aventuras
Aparece confusa la imagen inicial de de sesión tras despedir primero a Hodder cinematográficas. Zalman
Steely Dan, quizá debido al éxito de Do it y después a Días. Impecable hasta el míni- King les encargó en 1969 la
again en sencillo: la percusión, sabrosamen- mo detalle, sin reparar en gastos ni tiem- banda sonora de su película
te contenida, alcanza las discotecas -gran po, Aja ve la luz en 1977 como respuesta You-gotta walk it like you talk it.
descrédito a los ojos de la mayoría sinfóni- visceral de un mundo establecido (el rock) Nueve años después
ca- y le da al álbum Can 't buy a thrill (1972) cuando ha divisado a lo lejos al enemigo compondrían el tema principal
una proyección errónea. Quienes, en cam- amenazador (el punk). Por fin esboza ple- de FM. En cuanto a las
bio, no acostumbran a fiarse de los juicios namente los sueños de unos autores ilumi- actividades de Fagen y Becker
previos pudieron disfrutar de las excelen- nados: el jazz como esencia, el rock como tras la ruptura, el primero
cias del producto, 10 canciones magistral- medio, historias esquivas en las letras. publicó el delicado The nightfly
mente diseñadas y ejecutadas sobre el mis- Esta cumbre expresiva deja poco mar- en 1982. Becker asombra con
mo límite entre pop y rock la mayoría huyen- gen a la superación. Tanto ellos como su una peregrina asociación con
do de las estructuras arquetípicas. Más tar- público lo saben. Gaucho (1980) contenta, China Crisis (Flaunt the
de se verá, con las dos ofertas siguientes, pero no asombra; un acabado exquisito imperfection, 1985). Ambos
Countdown to ecstasy (1973) y sobre todo sin la codicia de nuevos horizontes, que reaparecen tocando juntos en
Pretzel logic (1974), que su peculiaridad es revela entre líneas el estado anímico de tres canciones de Zazu, de
sus autores: el final anda cerca, el disco se Rosie Vela (1987), gracias a
venderá igualmente (una ausencia de tres los buenos oficios de su eterno
años aumenta incluso la demanda); y no productor, Gary Katz.
hay motivo para arriesgar más de lo exigi-
ble. Su separación, en 1981, dejó un asien-
to libre, aún hoy vacante. Eran únicos, de
veras.
"EL NEGOCIO DE LA MÚSICA HA DESTRUIDO EL ARTE
DE LA MÚSICA" (Kevin Cronnin, de REO Speedwagon)
Cheap Trick, banda norteamericana, con Frampton tiene 17 años y excita las más
dos de sus héroes, Dave Edmunds y Roy
Wood (segundo y cuarto por la Izquierda). rudas pasiones de las jovencitas británi-
cas. Él quiere que se le reconozcan sus ha-
bilidades guitarrísticas y frecuenta la com-
pañía del hosco Steve Marriott, con quien
forma una banda de fiebres, Humble Pie.
Tras tres años de sudores rockeros,
Frampton consigue cierta reputación bus-
cada. Ya puede dar el salto en solitario.
Varios discos juguetones, de rock medio,
la emigración a Estados Unidos y el abso-
luto delirio en 1976 con el doble en directo
Comes alive, aún hoy uno de los discos
más recordados por los tesoreros de
A&M. Frampton vuelve a ser instrumen-
to de su atlético cuerpo, y esta vez no pone
trabas a que la mercadotecnia y la publici-
dad lo vendan nuevamente como ídolo de
adolescentes ardientes. El artista y sobre
todo su apoderado, Dee Anthony, juegan
buenas cartas y revientan la banca."Rock
melodioso, temperado, toma y daca, cal y
arena, ninguna molestia al escucharlo; en
fin, un pastel en el que P. F. es la sabrosa
guinda. El año 1977 (con I'm in you) tam-
bién es de gordas vacas para un hallazgo
The Doobie Brothers. California, 1970. comercial sin epílogos dignos. Pierde el ti-
Banda de rock duro llamada Pud: Tom món de una manera bochornosa partici-
Johnston (guitarra), John Hartman (bate- pando en la película Sgt. Pepper's, junto a
rampton comes alive ría) y Dave Shogren (bajo). Encuentro los Bee Gees, y su carrera solista decre-
puso mucho énfasis en cosas con el guitarrista Pat Simmons. Nacen los ciente acaba con tres mediocres álbumes
que no deberían ser tan Doobie Brothers, los Hermanos Canuto que no resucitan ni su prestigio ni su por-
I mportantes para un músico. La en argot californiano. Diez álbumes para te. Eso sí, jamás ha perdido el señor
presión para hacer nuevos una trayectoria que despega a buen ritmo Frampton vocación y autoridad como ins-
discos fue algo antinatural y me rockero desde el segundo trabajo, Toulou- trumentista. Bowie sabe lo que ha ganado
hizo perder diversión en mi se Street (1972) (en donde se enquistaba su fichándolo para su gira de 1987.
trabajo. Estuve abrumado y éxito Listen to the music), mezclando con
perdido durante mucho fortuna la apariencia sureña de dos guita- Dan Hartman (1950). Originario de Ha-
tiempo. No podía mantenerme rras y dos baterías con la realidad de sus rrisburg, Pensilvania, Dan estudia piano
equilibrado; me convertí en amores por la tradición de la costa oeste. desde los siete años, y tiene su primer gru-
un entertainer más que en Sin tener un estilo personal picotean del po a los 13, The Legends. De 1971 a 1975
guitarrista. Fue una actitud country, del blues y hasta incluyeron arre- es bajista del Edgar Winter Group, de-
muy negligente por mi parte". glos de metal. Las voces sazonan tal ensa- mostrando además su devorador talento
lada. Ensalada que va ampliando sus in- de cantante, compositor y multiinstru-
Peter Frampton gredientes (Jeff Baxter, Michael McDo- mentista. Ambicioso y competente, Hart-
nald, desapareciendo Johnston) hasta ad- man se atrinchera en un fastuoso estudio
quirir aromas olfativamente neutros, inde- casero, The Schoolhouse, en Connecticut,
fensos, olor a pólvora mojada. What a fool y desde allí coloca temas a Tavares, Three
believes, sencillo del álbum Minute by minu-' Degrees, Montrose o Sergio Mendes, pro-
te (1978), es la prueba de blandura que duce a Foghat e incluso desempeña labo-
confirma su desvío hacia un pop tostado. res de ingeniero. De fino olfato comercial,
Su productor-descubridor, Ted Temple- en 1978 se apunta al disco pop con Instant
Tan, no permite desmadres, y la banda replay, repitiendo suerte al año siguiente,
pierde mordiente. Las medias tintas aca- Relight my fire, en una de cuyas sesiones
baron con la banda después de un nostál- colabora Stevie Wonder. Maestro del hi-
gico The farewell tour, en 1983. McDonald bridismo, quizá su único disco sincero sea
ha continuado trabajando el filón del soul Ii hurts to be in lave (1981), cariñoso home-
satinado, a veces en dúos con solistas ne- naje a los años sesenta, pop juvenil y fres-
gros (James Ingram, Patú Labelle). co en el que no faltan los detalles horteras
y en el que la sofisticación brilla por su au-
Peter Frampton (1950). Dominado por y
dominador de su propia imagen de guape-
ras, la vida musical de este británico siem-
pre joven viene marcada por su palmito.
Primero como víctima: a finales de los se-
senta, su banda, The Herd, obtiene varios
éxitos por las tiernas pintas que gastan.
"NOS GUSTARÍA HACER CON EL `ROCK' LO QUE DEBUSSY HIZO
CON LA MÚSICA IMPRESIONISTA" (Kerry Livgren, de Kansas)
Lanzados como grupo de espectáculo retro, cera década de vida. A pesar de todas esas
Manhattan Transfer han demostrado una coincidencias estructurales, todas y cada
notable inquietud artística. una de las censadas rebosa personalidad
artística.
Carole King compuso con su marido,
Gerry Goffin, muchas piezas maestras de
la historia del pop. Llegados los setenta,
Carole entra de lleno en las canciones de
la luz de las velas. Linda Ronstadt y Ma-
ria Muldaur, ambas formadas musical-
mente en California, pasaron una primera
época de flirteo country para entrar en su
madurez vital y vocal en terrenos aleda-
ños al jazz vocal reblandecido, de los que
constituyen buenos y respectivos ejemplos
elepés como Lush life y Sweet and slow.
Carly Simon también pasaría con los años
a grabar, bajo la producción del vibrafo-
nista Mike Mainieri, homenajes al stan-
dard como Come upstairs o Torch. Rita
Coolidge, la Delta Lady de Leon Russell,
alcanza su mayor éxito en 1977 con Anyti-
me... anywhere, hermosa colección de
canciones en la que no faltan clásicos,
como Higher and higher o Words. Bette
Midler, hawaiana de nacimiento, ha sido
llamada la primera estrella cabaretera del
rock, calificativo que avalan tanto sus dis-
cos como sus capacidades actorales (re-
cuérdese su recreación de Janis Joplin en
la película The Rose).
Por lo que respecta a los grupos voca-
les, y dejando de lado la función de los
Sha Na Na como parodistas del rock and
L a nostalgia (a la que
no debe confundirse nunca con
el revivalismo, a pesar del
roll de los orígenes, destaca con brillantísi-
ma luz propia la obra de los Manhattan
Transfer. De modo algo similar a la Mid-
ler, ese cuarteto neoyorquino espiga mate-
riales en los treinta, cuarenta y cincuenta,
eventual solapamiento que se A NOSTALGIA con puntuales incursiones en la cultura
produce entre uno y otra) rock propiamente dicha. Formado en
toma cuerpo musical en voces NO ES UN ERROR 1969, ese exquisito par de parejas (Tim
femeninas o en grupos Hauser, Janis Siegel, Alan Paul y Cheryl
vocales mixtos. Sería difícil MINGUS B. FORMENTOR Bentine) constituye una formación vocal
asegurar si la razón reside en La nostalgia no siempre es un error. Tal de muy altos vuelos en la tradición vocala-
que son las mujeres las vez lo sea en asuntos del corazón, de la se implantada por Eddie Jefferson y John
primordialmente afectadas edad, de lo que fue y ya pasó, de lo que Hendricks. Su textura es innegablemente
en el fenómeno desde un pudo haber sido si... Pero asimilada al te- jazzy, con un toque escénico camp, amplio
ángulo activo, o bien si rreno musical y centrada en el devenir his- y lujoso guardarropa y guiños a estrellas
resulta imprescindible que sean tórico del pop-rock, no sólo no se ha mos- del espectáculo del siglo XX tan significa-
ellas las estimuladoras del trado pulsión errónea, sino más bien tivas como Fred Astaire, Clark Gable o
oído para generar la balsámica abundante manantial de éxito y buenos di- Cab Calloway. Con todo, los Manhattan
calidez del recuerdo en los videndos económicos. Ahí están los casos no son mera cuestión de imagen. Trabajos
amantes del género. de Carole King (1942), Linda Ronstadt como Extensions, Mecca for moderas o Vo-
(1946), Carly Simon (1945), Bette Midler calese son una muestra palpable de que la
(1945), Maria Muldaur (1943) y Rita Coo- nostalgia (musical) no es ningún error y
lidge (1944). que cualquier camino es bueno para que
Hay algunos otros elementos comunes los crecidos a ritmo de rock degusten otras
en la lista recién reseñada. El más obvio, hierbas de primerísima calidad al devenir
la edad: generación atómica, diríamos, o adultos auditivos.
la quinta de los Beatles. El segundo, que
todas ellas han estado vinculadas por la-
zos sentimentales a hombres con cierta
notoriedad en el universo del pop contem-
poráneo. El tercero, por fuerza significati-
vo, que su obra, etiquetable de nostálgica,
la producen una vez sumergidas en su ter-
"UNA DE LAS COSAS AGRADABLES DE HACER MÚSICA DE PELÍCULAS ES
QUE ESTÁ DISEÑADA PARA REALZAR LA EXPERIENCIA VISUAL" (Mark Knopfler)
UNK'
tiempos hacia una contestación política radical. Los Clash
destacaron como proveedores de vibrantes eslóganes
combativos. 38
"SI LA MÚSICA `POP' SE VA A USAR PARA DESTRUIR NUESTRAS INSTITUCIONES,
DEBEREMOS ANIQUILARLA" (Marcus Lipton, parlamentario conservador)
que correspondió al Roxy Club. Este local El punk recurrió a las indumentarias
fue núcleo del punk durante varios meses, provocativas de La naranja mecánica, el
hasta que su dueño se enfrió, intimidado fil me de S. Kubrick. En la foto. los Adicts.
por la histeria desatada en los medios de otra clase de
comunicación, y pasó del asunto. Para en- animadores,
tonces, el punk era ya un estilo consolida- aquellos que
do, un mensaje apoyado por una minoría venían del pub-
creciente, y los grupos accedieron a loca- rock y no de-
les tradicionales, como el Marquee y seaban tanto
otros. la destrucción
¿Qué horrorizaba a los periodistas mo- del rock como
jigatos, los políticos conservadores y las su reconver-
gentes bienpensantes? Un nuevo estilo sión en algo
que, además de su textura sonora áspera, nuevamente
había engendrado una forma de vivir, pen- válido y vi-
sar, vestir y comportarse que denunciaba brante. Ambos
con rabia los valores establecidos. Empu- sectores,los
jados por la falta de recursos y por su des- estrictamente
tructiva visión estética, los punks conver- punks y los pio-
tían objetos cotidianos y de desecho en ro- neros de la
pas y bisutería. Querían sobre todo ser di- new - wave,
ferentes. Vestían camisetas rasgadas y compartían un
pintarrajeadas, adoptaron los imperdibles desprecio fe-
como joyas, llevaban el pelo corto y en roz por la apa-
punta, convirtieron la mutilación en ma- tía del rock es-
quillaje. El pretendido feísmo de su ima- tablecido.
gen, como la agresividad de su música, fue No debe ol-
un revulsivo, un desafío a una sociedad vidarse la di-
que sentían les había infravalorado. mensión políti-
Pero no se quedaron en las apariencias. ca del punk,
En poco menos de un año disponían de su aun sabiendo
propia Prensa, fanzines como Sn n' Glue, de sus insalva
donde exponían sin recortes sus opiniones bles contradicciones. Cuando abogaban
y prejuicios, y de su propia infraestructura por la anarquía se referían al caos sin más;
en sellos independientes que fueron la res- cuando negaban el futuro parecían nihilis-
puesta al poco interés inicial demostrado tas ingenuos; cuando invitaban a la des- l egó, ocurrió y
por las discográficas. El punk se había trucción sistemática lo hacían sin plan- desapareció. Cuando empezó,
convertido en una fuerza indiscutible; ha- tearse la posibilidad de edificar un nuevo me sorprendió; nunca había
bía establecido sus propias reglas y elabo- orden. Pero detrás de tanta furia se escon- visto un movimiento con un
rado una nueva y excitante estética. Sin dían lecciones prácticas como la filosofia potencial tan tremendo
embargo, los medios de comunicación se del háztelo-tú-mismo, que daría paso a la desarrollarse tan rápidamente.
quedaron en la violencia gratuita, el his- creación de innumerables sellos indepen- Todos los jóvenes hacían
trionismo, el aspecto escandaloso del dientes y pondría en entredicho el poder algo, creían en esa idea. Lo
asunto. de la industria; o la implantación del pogo sentían y lo expresaban en su
La fulgurante ascensión de los Sex Pis- como el más democrático de los bailes: no forma de vestir, la misma
tols benefició a muchos otros grupos que requiere habilidad alguna, cualquiera sabe historia de siempre, y en su
pudieron grabar gracias a las primeras pá- brincar, y además permite ver fugazmente música, como siempre. Y
ginas de los periódicos y a las apariciones al grupo en escena a cada nuevo salto. escupieron y dijeron `joder'
televisivas de Johnny Podrido y sus cole- A mediados de 1977, el punk ya esta- en televisión. ¿Y luego, qué?
gas. Así, puede considerarse el punk como ba cambiando. Día a día, la industria, Nada".
la invención de unos cuantos agitadores como había hecho con el rock hippy, re-
que, como Malcolm McLaren, aprovecha- dujo el movimiento a una simple ecua- Don Letts, director de la
ron la coyuntura para implantar una nue- ción: canciones cortas y potentes, ropa película Original punk movie
va moda. Se trataba de despertar el apa- atrevida y desgarrada, diseños provisio-
gado factor disruptivo del rock y sentarse nales y desencajados. Era inevitable: no
a esperar los beneficios. Había también era posible mantener por más tiempo un
nivel tan alto de rabia, energía y excita-
ción. Difícilmente habrá en el futuro un
fenómeno musical tan fuerte como el
punk, algo que pueda superar su impac-
to. Ésta es su contrapartida: haber nega-
do la posibilidad de futuras revoluciones
en el pop, de un nuevo despertar que nos
devuelva el rock en su estado más puro.
Con el punk, desgraciadamente, se ganó
una batalla, pero, a la larga, se perdió la
guerra.
"SOY UN ANTICRISTO, / QUIERO DESTRUIR A LOS QUE PASAN A MI LADO /
PORQUE QUIERO SER LA ANARQUÍA" (`Anarchy in the UK', Sex Pistols, 1977)
Du rante 1977, l os Sex Pistols fueron la Para la mayoría del público enterado, crí-
pesadilla del Reino Unido (Sid Vicious al ticos y medios de comunicación, los Pis-
bajo y Johnny Rotten como solista). tols son el gran cohete que dio comienzo a
una nueva era musical, imponiendo sus
conceptos en diseño gráfico, moda, pelu-
quería, mercadotecnia, sonido, actitudes y
filosofia. Esta historia se inició en Sex,
boutique londinense regida por Vivien
Westwood y Malcolm McLaren, cuando
un muchacho de pelos verdes llamado
John Lydon (1956), cruzó su umbral en
1975. McLaren, Matlock y los dos compa-
ñeros de su grupo musical, Paul Cook
(1956) y Steve Jones (1955), se mostraron
interesados y decidieron probar si su chi-
rriante aspecto podía ser útil para su
aventura rockera, The Sex Pistols. Tras
comprobar sus dotes, haciendo play-back
sobre el fondo de un disco de Alice Coo-
per, Lydon fue fichado como cantante. La
primera actuación que dieron, en la escue-
la de arte donde estudiaba Matlock, duró
sólo 15 minutos: gustaron tan poco que,
para quitárselos de encima, les cortaron la
corriente. Eran puro ruido, pero empeza-
ban a componer espasmódicos retratos de
su frustración juvenil, que enriquecían un
repertorio basado inicialmente en temas
de los Who y los Small Faces.
Para el Bromley contingent, ardiente
Johnny Rotten dejó a grupo de fans que les seguía y que incluía a
los Pistols y recuperó su Billy Ido¡ y Siouxsie, aquellos primeros
verdadero apellido, Lydon. A meses -finales de 1975 y principios de
finales de 1978 sacó Public 1976- fueron una época excitante, pero
image, un single a cargo de su Johnny dice que no hubo buenos tiempos.
nuevo grupo, PIL (Public Image SEX PISTOLS, Sea cual sea la verdad, el caso es que
adoptaron el papel de gamberros oficiales,
Ltd.). Desde entonces ha empezaron a escupir, a pelearse y a alar-
hecho nueve elepés, ha UNA TRAGICOMEDIA dear de malos modales, y el nombre de
colaborado con grandes de la
Sex Pistols se hizo popular. Johnny tomó
vieja ola, líderes del rap o PATRICIA GODES el acertado apodo de Rotten (Podrido) y
figuras de la vanguardia asumió alegremente la tarea de escandali-
neoyorquina, como el productor "He cambiado el mundo", dijo John
Lydon en 1984; "la sociedad musical es zar a la nación. Tenía grandes dotes para
de su último disco, Álbum, Bill ello, y como daba la impresión de que, en
Laswell. Steve Jones y Paul mejor ahora". Inmediatamente, el ex líder
de los Sex Pistols pasaba a despotricar el fondo, era bastante espabilado, se con-
Cook, abandonados a su virtió no sólo en el portavoz del grupo,
suerte, intentaron el escándalo contra todos los grupos y cantantes de
moda. Más realista parece Glen Matlock, sino en algo así como en la voz de la con-
grabando con un ladrón de primer bajista del grupo, que ya en 1980 ciencia de la adormecida juventud musical
altos vuelos y formaron un declaró no estar satisfecho de la herencia: británica. El rumor se convirtió en clamor
grupo que fracasó, The "Los chicos siguen haciendo lo mismo que y la poderosa EMI les ofreció un sabroso
Professionals. Tras pasar por su hace tres años. Son como los viejos hi- contrato, editándose seguidamente un dis-
infierno particular, Jones ha ppies, los fans del heavy metal y los viejos co, Anarchy in the UK, gloriosa bofetada
presentado su primer elepé en teddy boys". John Lydon también encuen- de sonido cortante y voz malévola.
solitario, en una línea de rock tra embarazosas las crestas y ha renegado La consagración definitiva llegó, para-
convencional. del término punk. Su máxima satisfacción: dójicamente, cuando respondieron con
haber ganado en los tribunales al antiguo todo su repertorio de insultos y obsceni-
representante del grupo, quedándose los dades al presentador de un programa de
músicos con el botín de aquella aventura. televisión. Al día siguiente se desató la in-
En 1977 no había ni triunfalismo ni la- dignación: algún honrado obrero había ti-
mentaciones, pero sí arrestos, prohibicio- rado su televisor por la ventana, las traba-
nes, agresiones fisicas, primeras páginas y
editoriales indignados: las vidas de los
Pistols parecían envueltas en un torbellino
que iba a comerse el mundo. El espejismo
ha sobrevivido a pesar del macabro dra-
ma de Sid Vicious, el cinismo de Lydon y
el desencanto de los demás protagonistas.
"YO NO HE TENIDO NUNCA PUNTOS DE VISTA POLÍTICOS, NI LOS TENDRÉ. ME
HE PREOCUPADO SIEMPRE DE MÍ MISMO Y SEGUIRÉ HACIÉNDOLO" (John Lydon)
jadoras de la fábrica de discos se negaban La pareja trágica del punk, Sid Vicious y
a tocar los de los Pistols y las secciones de su compañera, Nancy Spungen, vestidos
cartas de los periódicos echaban chispas. para comparecer ante un juez londinense.
Nunca se había mostrado tan unánime el puntilla definitiva. La energía iba desapa-
Reino Unido en su rechazo a un grupo. reciendo gradualmente; el público se soli-
Aterrados, los ejecutivos de EMI se apre- viantaba ante unos tipos chillones que les
suraron a romper el contrato, entregando insultaban. Se odiaban entre ellos y se
a McLaren y a los chicos un montón de produjo la desbandada general. Rotten
libras como indemnización. dejó el grupo para formar PIL; Jones y
Estas escaramuzas ocuparon páginas y Cook grabaron en Brasil con el delincuen-
más páginas en la Prensa. McLaren repi- te Ronald Biggs; Sid, con Nancy como re-
tió su estratagema de agitación con la dis- presentante, se quedó en Nueva York
cográfica A&M, gracias a que los Pistols para intentar su lanzamiento en solitario.
se comportaron como vándalos en sus ofi- Como no estaba nada lúcido, fracasó
cinas. Grabaron God save the queen, un es- estrepitosamente. Siguieron meses de mi-
truendoso insulto a la sociedad británica, seria hasta que Nancy fue descubierta
sabiamente compuesto en el año del jubi- apuñalada en el baño de la habitación que
leo de Isabel II. Nuevo escándalo, nuevo ocupaban en el hotel Chelsea. Sid fue acu-
despido, nuevo cheque. El sello Virgin se sado de su muerte, encarcelado y puesto
atrevió, por fin, a apoyar el producto, y en libertad bajo fianza (pagada por el sello
God save the queen fue prohibida en todas Virgin). Su descenso fue vertiginoso: in-
las emisoras, convirtiéndose rápidamente tentó suicidarse, siguió metiéndose en
en éxito. Con Pretty vacant y Hollidays in broncas, y un día tomó una dosis de heroí-
the sun repitieron la hazaña, y para la edi- na pura en un 90% y se acabó. Su madre,
ción del álbum Never mind the bollocks una hippie cuarentona, le procuró la droga;
here's The Sex Pistols, la compañía, olién- lo que no sabía es que lo que le dio era,
dose que soplaban vientos de cambio, mo- como ella misma dijo, demasiado bueno.
dificó el diseño verde y bucólico de su eti- A partir de ahí nació el mito y murió la
queta por otro azul, funcional y menos revolución. Los adolescentes habían odia-
comprometido. Nadie se quedó indiferen- do el concepto mesiánico de la estrella de
te ante aquella plaga: patriotas del rock rock de los años setenta y dieron la bienve-
como Phil Collins y Keith Richards abo- nida al punk nihilista y destructivo. Ahora
minaron de aquellos indocumentados que se habían cambiado los papeles y Sid, un
querían enterrarlos. asesino al fin y al cabo, era el nuevo me-
Entre tanto, tras una actuación en Sue- sías. El lema desafiante de No hayfuturo se os Pistols sólo
cia, Matlock abandonó el grupo, aburrido sustituyó por el patético El punk' no está editaron un elepé, pero los
de los líos de McLaren, el protagonismo muerto, y el fenómeno del que tanto habla- i ntereses comerciales han
de Rotten, las tonterías de Steve y Paul y ban los medios de comunicación poco te- multiplicado su legado
las limitaciones musicales. Sus ex compa- nía que ver con el famoso espíritu de 1977: discográfico. Sid sings, Carry
ñeros le vituperaron -"le gustaban dema- su validez comenzó a tambalearse, a pe- it on, some more product y
siado los Beatles"- y le reemplazaron sar de los fieros y patéticos esfuerzos de Floggin' on a dead horse, más
por John Simon Ritchie (1957), alias Sid sus defensores, y sus fronteras se desdibu- l a banda sonora de The great
Vicious, que había hecho de batería con jaron. Comenzaron los reciclajes -el rock'n'roll swindle, reúnen
Siouxsie and the Banshees. No tocaba caso más llamativo fue el de Police, que todas las notas oficialmente
muy bien el bajo, pero daba muy bien el adoptaron poses punk para darse a cono- grabadas por el cuarteto.
tipo: pelo erizado, palidez cerúlea, aspec- cer- y se abrieron las puertas a infiltra- También salieron abundantes
to granujiento, estupidez no fingida. ciones innombrables. El minimalismo, los temas primitivos y
En la primavera de 1977, Sid, un tipo aburridos discos de músicos sin conoci- grabaciones en directo. No deja
prácticamente virgen y más novato de lo mientos y la nueva ola hicieron su apari- de ser comprensible: muerto
que parecía, conoció a una drogadicta ción; el mundo de la música se abrió a Vicious, las cotizaciones de
neoyorquina de buena familia, Nancy todo tipo de motivaciones extramusicales. aquel grupo apostólico
Spungen, y, a pesar de los esfuerzos de Si el punk quiso ser en algún momento un subieron como espuma en el
McLaren por separarlos, se enamoró de revulsivo y una voz de alerta frente a la mercado negro del
ella y acabó enganchándose también a la idiotez social y musical, se había converti- coleccionismo discográfico.
heroína y distanciándose de los otros tres do en lo contrario: inmovilista, sórdido,
Pistols. Fue el principio del fin de los Pis- aburrido, mesiánico y, a su vez, idiota.
tols. La excursión por Estados Unidos Su historia ha sido en parte escrita por
que dieron al año siguiente fue, tal como gente que no la vivió ni desde fuera; mu-
se aprecia en las filmaciones incluidas en chos de los hechos están manipulados y
la película The great rock 'n'roll swindle, la no hay muchas vías para desentrañar las
ideas y motivaciones de sus protagonistas.
Nadie puede creer en una película como
Sid y Nancy, donde se retrata a los difun-
tos como a unos nuevos Romeo y Julieta.
La conclusión es tan evidente como de-
cepcionante: ni el punk ni los Sex Pistols
lograron sus supuestos objetivos.
"SID VICIOUS PUDO SER EL NUEVO CLIFF RICHARD. LO IMAGINO EN LAS
VEGAS: HUBIERA DESBANCADO HASTA A TOM JONES" (Malcolm McLaren)
Lo más desagradable
que me ha ocurrido fue el juicio
por el dinero acumulado por
como medio óptimo de distribución de la
música, se adelanta al redescubrimiento
del country (She Sheriff), toca con su vari-
ta mágica a Boy George, aterroriza a ene-
Glitterbest, la compañía de los ALCOLM migos y amigos con planes para lanzar
una revista de pornografia infantil o mon-
Sex Pistols. Terminó en 1986 tar un musical sobre el Ejército Republi-
y yo perdí; ellos se repartieron
cerca de un millón de libras,
McLAREN, PIRATA cano Irlandés (IRA).
Harto de poner palabras en boca de chi-
como si yo no hubiera hecho
nada. La gente se asombró VENTRÍLOCUO cos ambiciosos e ingratos, McLaren termi-
na convertido en artista. Carece de voz, pero
de que no opusiera mayor concibe influyentes discos como Duck rock
resistencia, pero la verdad es DIEGO A. MANRIQUE (piratería de ritmos tercermundistas), Fans
que estaba cansado. Para John Por su estentórea amoralidad, hace méri- (inmortales piezas operísticas traspasadas a
Lydon era una vendetta tos para ser considerado el personaje más Harlem) o el anunciado proyecto de recupe-
personal, como si yo fuera el detestable de la erupción del volcán punk. rar el vals en compañía del guitarrista Jeff
malo de la película, el Al mismo tiempo, es imposible negarle sus Beck. Imparable charlatán, se instala en
causante de todos sus insólitas cualidades como gran destripa- Hollywood, donde vive en la antigua man-
problemas. Le dejé ganar. dor de los mitos del rock, su pasmosa ver- sión de Cecil B. de Mille, y se enamora de la
Allá él y su católico sentido del satilidad en los más diversos campos y el actriz Lauren Hutton. Ahora dice ser un ro-
castigo" ser protagonista de una extraordinaria ca- mántico, pero no hay más que raspar su pa-
rrera picaresca. Experto carterista, ha labrería para hallarse con la piel de un per-
Malcolm McLaren, 1987 desplumado a varias compañías discográ- sonaje digno de Dickens: "Puedo ser un la-
ficas; igualmente, ha diseñado el modelo drón, pero tengo la suficiente movilidad
de ascensión hacia el éxito en la década de para no quedarme encasillado; al menos na-
los ochenta, aunque tenga más fracasos die podrá compararme con David Bowie,
brillantes que éxitos trasladables a la un ecléctico de tercera categoría".
cuenta corriente. Señores del jurado, Mal-
colm McLaren.
Nacido (en 1947) en el seno de una des-
hecha familia judía, crece en el norte de
Londres y recorre abundantes colegios,
donde demuestra tanta inteligencia como
incapacidad para sacar buenas notas.
"AUNQUE LOS MEDIOS LO HUBIERAN IGNORADO, EL `PUNK' HUBIERA OCURRIDO,
SI NO CON LA MÚSICA, CON BANDAS CALLEJERAS" (Captain Sensible, de Damned)
CURSO DEL 77
J. MARTA REY
Destinado a infligir traumas serios en la
música y las maneras sociales, la bofetada
del punk surgió como un simple motín de
autoafirmación juvenil. La aparición de la
crisis económica y la creciente dificultad
de acceso a un mundo musical cada vez
más alejado y encarecido (grandes equi-
pos, culto al virtuosismo...) fomentó un
nihilismo militante incapaz de identificar-
se con la música holgazana y el confort
burgués de los grupos paquidérmicos y el
AOR. Nacía una estética agresora, de re-
chazo airado, construida con retales de
náusea existencial, imperdibles, indumen-
taria mutilada y variopinta joyería (cuchi-
llas, remaches y objetos devaluados). Un
uniforme de provocación al alcance de
cualquier chaval de barrio.
Musicalmente era parecido. Eructos
de rabia eléctrica, nada original al prin- lescente que inflamaba sencillos como Or-
cipio. Ruido derivativo (Stooges, gasm addict, What do I gel, y sus tres álbu-
MC5...) que a la larga creó una mueca mes. Sólo tuvieron pequeños éxitos. De-
sonora inconfundible, un estilo despecti- bió de darles mala suerte firmar con Uni- a revuelta punk fue
vo y espasmódico traicionado poco a ted Artists el mismo día que moría Elvis especialmente propicia a la
poco por sus creadores y revivido cuatro Presley. En 1981, Shelley, que ya había emancipación de las chicas.
años más tarde (1980) por una nueva flirteado en solitario con un álbum (Sky Era su venganza. Cada nuevo
oleada de puristas (oi!, afier punk y de- Yen, 1980), en su propio sello (Groovy), grupo contaba con alguna de
más crestas). El apartado ideológico era disolvió el grupo continuando por su lado ellas. Las Slits hacían reggae-
más complejo. En el recipiente del punk con Homosapiens (1982) y otros lujos so- punk y tenían a Palmolive,
cayeron salivazos anarcoides, fascistas, noros de línea tecno. Steve Diggle, el otro una malagueña que las dejó por
etílicos, positivos, góticos o de por libre. guitarrista, tras Teardrops, forma Flagg of l as Raincoats, otro cuarteto
Aquí están algunos. Convenience. femenino de art-pop naif. Más
cosmopolitas, las Mo-dettes
Buzzcocks. El punk de provincias. Con sus Crass. Son una pequeña multitud de en- explotaban sus encantos
caras tiernas y sus canciones bonitas lle- fervecidos anarcopunks enrolados en una físicos, y Polystyrene lucía en
nas de voces, guitarras tonificantes y estri- comuna y entregados a todo tipo de pa- la televisión su prótesis dental y
billos, estaban más cerca del pop-rock, siones activistas. Punks de la segunda ge- ropa de rebajas. Más serias y
pero compartían la urgencia del punk. neración (1978), residen en una granja femeninas resultaban las Au
Fueron la primera gran banda del género de Essex y atienden su homónima compa- Pairs, mientras Beki
aparecida en Manchester. Allí, en 1975, ñía, donde difunden sus discos y los de Bondage, de punkette perversa,
Pete Shelley y Howard Devoto, dos uni- grupos afines. Artistas filoproletarios, son espoleaba sueños mórbidos
versitarios fanáticos de los Stooges, incu- gente culta con nombres alusivos como de los últimos mohicanos. Un
ban el cuarteto y traducen el lema "Hazlo Penny Rimbaud -su mentor espiritual-, reflejo insólito de estas chicas
tú mismo" en un soberbio EP autofinan- un hippie de mayo de 1968 redimido en británicas es Nina Hagen,
ciado (Spiral Scratch, 1977), primero y últi- el fragor punk. Más moralistas que nihilis- emigrante de Alemania
mo con Devoto, que se marcha para ini- tas, emiten vitriólicos atentados de rui- Oriental, que convirtió el punk
ciar Magazine. do sordo en dos minutos amontonados en en soporte de sus primeros
Su música resumía lo mejor del mo- media docena de nutridos álbumes con disparates.
mento: radiante espontaneidad, sonidos portadas desplegables, interminables
primitivos e ingenio guitarrístico. Un con- arengas y dibujos de escándalo. Todo
tagioso torbellino de insatisfacción ado- un fustigante aunque minoritario universo
estético en blanco y negro, exhibido en
varios países. Aunque musicalmente indi-
geribles, sus corrosivas dedicatorias a
Margaret Thatcher (How does it feel to be
the mother of a thousand dead?) contra la
guerra de las Malvinas les hicieron popu-
lares al más alto nivel... de censura.
"EL `PUNK' ES LA ÚLTIMA BASURA. SUS DEFENSORES SON RIDÍCULOS.
CUANDO DESAPAREZCA, NADIE LO LAMENTARÁ" ('Sunday Times', 1976)
Generation X, grupo del que salió Billy disolución (1978), James terminará for-
I dol (primero por la izquierda), actual mando Lords of the New Church, mien-
ídolo juvenil en Estados Unidos.
tras los otros, entre un baile de nombres y
grupos, se reúnen con Sensible a la guita-
rra y una orientación más sofisticada con
débil brillo (Black album, 1980). En 1982,
el número uno del Captain en solitario, con
su socarrona versión del standard Happy
talk, acabará por disgregarlo en una carre-
ra individual entre el music-hall, la psico-
delia y un pop genuinamente inglés. Des-
pués de varias escaramuzas privadas de
Rat y Vanian y de tres años sin contrato,
incorporan a Roman Jugg y Bryn, reali-
zando Anything (1986) y una polémica
transformación sonora, casi heavy, mante-
niendo el nombre hasta la fecha.
Los Ramones se caracterizaban por el a su guitarra con esa ira ciega que nace de la
ruido y su humor juvenil. De izquierda a inadaptación más absoluta. Dee Dee
derecha, Johnny, Marky, Joey y Dee Dee. (1952), el más bruto, callado pero agresivo,
es el típico gamberro callejero que encuen-
tra en su bajo eléctrico una disciplina para
su instinto destructivo. Tommy (1952), el
batería, no sabe, no contesta.
En 1975 encontramos a estos cuatro cre-
tinos maravillosos actuando regularmente
en clubes de Manhattan como el CBGB.
Tocan 20 temas en media hora y son descu-
biertos por la elite de la escena rock neoyor-
quina. Lou Reed es de los primeros en pa-
sear su maqueta por las discográficas. Sin
resultado, ya que ningún ejecutivo en sus
cabales le ve futuro a ese rock en estado
puro que los Ramones proponen para sal-
var a la civilización de su decadencia. Final-
mente, una marca independiente, Sire, se
arriesga. Aquel primer elepé (1976) sería
esencial para diseñar la inminente rebelión
de los imperdibles. Contiene 14 píldoras le-
tales, 14 viñetas de desquiciada negatividad
quinceañera, 14 inmejorables razones para
amar instantáneamente a sus autores por su
divina ineptitud.
En 1977 nos llegan dos episodios más de
sus aventuras en ese fascinante submundo
hecho de tiras cómicas, tejanos rotos, diálo-
Los punks británicos gos onomatopéyicos, zapatillas playeras,
son unos amargados. Tocan cola de esnifar y violencia juvenil. Leave
canciones sobre el problema home y Rocket to Russia amplian su reperto-
de no tener trabajo. Y eso no OS RAMONES, rio sin ampliar necesariamente su vocabula-
rio musical. Esta primera etapa de su carre-
puede ser muy alegre. Bueno,
ra, la mejor, ya que su efectividad se basa en
nosotros también estábamos
en el paro cuando
CATARSIS la inimitable vitalidad adolescente y el fac-
tor sorpresa, concluye en 1978 con la edi-
empezábamos, y eso no nos
i mpidió hacer temas QUINCEANERA ción de un doble en vivo, It's alive, donde se
resumen perfectamente sus principales cua-
divertidos. Ellos tienen una lidades. Su siguiente trabajo, Road to ruin,
mentalidad muy negativa. Y IGNACIO JULIÁ exhibe tímidos atisbos de evolución. Hasta
odian a Estados Unidos. ¿Cómo Reduciendo a su mínima expresión una ex- se permiten un par de solos de guitarra, algo
se atreven?". citante mezcla de tonadas pop y contunden- inédito en su espartana concepción musical.
cia rock, acelerando el resultado a límites Pero lo que pocos hubieran imaginado en-
Dee Des Ramone, 1977 vertiginosos, los Ramones detonaron sin tonces es que la hermandad ramoniana cae-
proponérselo el renacimiento punk de la se- ría en manos de uno de los más grandes ma-
gunda mitad de los setenta. Eran chavales nejadores de sueños adolescentes en soni-
de clase media, mortalmente aburridos por do. Nada menos que Phil Spector. El resul-
la irritante normalidad de la high school. En- tado de esta unión, el polémico End of the
cerrados en un garaje del neoyorquino ba- century (1980), es un muy aprovechable tes-
rrio de Queens, combatían la frustración timonio de la imposible madurez de estos
adolescente edificando un enorme ruido que eternos mequetrefes.
era el equivalente musical de darse con la Durante los ochenta han probado di-
cabeza contra una pared hasta perder el versos productores, han publicado elepés
sentido. que, sin decir nada nuevo, prolongan su
Estamos a principios del verano de 1974 discurso musical y han sido proclamados
y los cuatro hermanos Ramone, que lo son máxima influencia por las hordas hard-
únicamente en la ficción, se dedican a que- core, descendientes directos de aquel
mar amplificadores de segunda mano como punk-rock del que los Ramones fueron un
única respuesta a su total falta de motiva- precedente básico.
ciones. Joey (1952) es una percha humana
de dos metros y pico que no ve más allá de
la punta de su nariz pero ha refinado su
oído coleccionando discos de los años se-
senta. Johnny, camuflado tras un insolente
flequillo, fan de los Beatles y Buddy Holly,
parece un surfer retardado mientras castiga
"EN EE UU, EL `PUNK' FUE LA PRIMERA MODA JUVENIL NO
MANIPULADA POR EL GOBIERNO" (Michael Kowalski, 1978)
Los Dead Kennedys, de San Francisco, tivo No New York, producido por Brian
representaron la rama más corrosiva Eno en 1978. Con ellos irrumpe el ruido
dei punk norteamericano. total: ha nacido la no-ola, y el precio para
sus descubridores significa el anonimato
absoluto. Aun cuando James Chance se
establece como sumo sacerdote del punk
funk gracias a Off White (1979) y Buy
Contortions (1980), abriendo el camino a
Lounge Lizards, con John y Evan Lurie
al frente, que rescatan al jazz del am-
biente purista para someterlo a severas
revisiones, bajo la tutela de Teo Macero,
en Lounge Lizards (1980). Empiezan a
caer los prejuicios, y el espíritu punk se
descubre como elemento altamente re-
novador. El bajista Bill Laswell, respon-
sable de Material, combina los ritmos
bailables y las guitarras punzantes, sor-
prende con Temporary Music (1979) y
busca nuevos contactos con la música
africana a través de caminos poco orto-
doxos, colaborando con virtuosos y lu-
minarias del Bowery, a la par que James
Blood Ulmer inquiere agresivamente
con Are you glad to be in America? (1980)
y completa el círculo al otorgarle al jazz
más adecuado. Tiene ricos anteceden- un nuevo aire batallador. Sucesivamen-
tes: New York Dolls, Patti Smith, Suici- te, los aficionados del ruido otean nue-
de, los Ramones. Epatante, violento, ex- vos horizontes en busca de una mayor
A hora es el momento
presivo, el rock marginal crece en el club erudición sonora. Experimentos como
de perder todo control, /
distorsiona tu cuerpo y CBGB y obvia las influencias británicas, Golden Palominos o Don King consi-
distorsiona tu alma, / al contrario que en otras ciudades. Salvo guen que la esencia del punk mute hacia
contorsiónate tú mismo. / excepciones, como los Dead Boys, otros sonoridades posmodernistas. Pero algu-
Olvida tu aprecio por la raza fugitivos de Cleveland, que lanzan him- nas espadas todavía siguen en alto.
humana, / redúcete a cero. / nos de poco minutaje (sonic reducer) que Los discípulos de Lydia Lunch, ya
¿Por qué no intentas ser idiota arrasan cualquier tipo de resistencia au- consagrada como musa pornográfica del
ral. Su líder, Stiv Bators, sigue expri- bajo Nueva York, acechan. Responden a
en lugar de inteligente? / Una
miendo la experiencia a bordo de los nombres como Sonic Youth o Swans; los
vez que te hayas sacado del
Lords of the New Church, sin llegar a su- primeros se decantan por un rock hirien-
cerebro toda la basura, /
perar experiencias pasadas. te que predica el final de los días felices
olvídate del futuro / y, hasta
Mientras, los personajes más dispa- de la América de los ochenta en discos
entonces, contorsiónate tú
res y veteranos de la escena local asu- como Evol (1986); los segundos prefieren
mismo". men su condición de punks, aunque no torturar al oyente con poesías sangrien-
sean músicos de vocación. Un travestido tas envueltas en un caos ralentizado y
Contort yourself, James llamado Wayne County se traslada a claustrofóbico, alcanzando sus máximas
White and The Blacks, 1979 Londres en busca de más popularidad; cotas de perversión en Cop (1984). Fi-
su rock soez y sus procacidades en esce- nalmente, un emigrado australiano apo-
na no cuajan en el estudio y el éxito nun- dado Clint Ruin funda el clan Foetus, en
ca le llegaría. Cherry Vanilla intenta el cual es el único responsable, funcio-
convertirse en la chica fogosa del punk y nando como one man band y realizando
llega incluso a registrar dos álbumes embrutecidos ensayos sobre la cultura
para RCA, a pesar de su poca consisten- pop con seudónimos como You've Got
cia musical. Los Cramps ofician de ar- Foetus on Your Breath o Foetus Art Terro-
queólogos del pop y rescatan a sus hé- rism, coronados en 1985 por el elepé Nail.
roes del pasado, materializan un oscuro Muestras de que la energía agitadora del
sonido garage y son inmortalizados como punk todavía galvaniza a los tempera-
estrellas de serie-B. Y Wendy O. Williams, mentos más turbulentos.
actriz porno, hace rugir a los Plasmatics
mientras revienta un Cadillac en cada uno
de sus espectáculos.
El relevo es inminente. En 1977,
Lydia Lunch tiene 17 años y busca cómo
demoler las estructuras del rock clásico,
sólo por el gusto de molestar. Lo consi-
gue junto a James Chance, un saxofonis-
ta lunático, y combos como Mars o
DNA, todos recogidos en el disco colec-
"QUERÍA REACCIONAR UN POCO CONTRA EL `PUNK'. SE TRATABA
DE ROMPER TAMBIÉN LA NUEVA FÓRMULA" (Howard Devoto)
Howard Devoto, del grupo Magazine, The Creatures, sacan Feast, música mini-
exhibiendo en su gorro el nombre de malista y exótica; Severin, junto a Robert
Nietzsche. Smith, líder de The Cure, edita un álbum
i mbuido de psicodelia (Blue sunshine) bajo
el apelativo de The Glove. Y es Robert
Smith, aprovechando la crisis que atravie-
sa en tales momentos su grupo, quien
vuelve a ocupar el puesto de guitarrista de
los Banshees, como ya hiciera en 1979.
Nocturne (1984) es un doble en directo gra-
bado en el Royal Albert Hall, correcto
pero insípido, sin nervio. Hyaena (1984)
resulta un fiasco semejante. Robert Smith
decide retomar las riendas de unos remo-
zados y sorpresivamente triunfantes Cure;
en su sustitución llega John Carruthers (ex
Clock DVA, otro grupo retorcido): 1986
ve la salida de Tinderbox. malas críticas y
acusaciones generalizadas de esclerosis,
involución, anquilosamiento.
Su Through the looking glass (1987),
poco aclara respecto al futuro del grupo.
Es un disco de versiones que contiene al-
gún destello gratificante, que permite pen-
sar en cierta oxigenación, junto a deslices
obvios. El horizonte aparece oscuro
-ahora, en otro sentido- para la Reina
de Hielo y sus secuaces.
Los Cure de Robert Smith han sido
más astutos y han tenido más suerte. Em-
densos, es un disco deliciosamente malsa- piezan como un trío (Robert Smith a la
no, puro vértigo: la voz utilizada casi guitarra y voz, Michael Dempsey al bajo y
como elemento de percusión, un bajo sim- Laurence Tolhurst a la batería) de pop atí-
La noche del 17 al 18 ple y rotundo, percusiones retumbantes y pico y brillante -Three imaginary boys
de mayo de 1980, después de una guitarra que chirría y proporciona co- (1979)-, para subirse rápida, descarada y
ver en la televisión Stroszek, lorido al mismo tiempo. Perfecto. exitosamente al carro de lo siniestro en
película de su director favorito, Menos complaciente incluso resulta Seventeen seconds (1980), donde, tras el
Werner Herzog, lan Curtis Join hands (1979), un segundo álbum que cambio de Dempsey por Simon Gallup,
(cantante y letrista de Joy lleva más allá los presupuestos del ante- priman los temas majestuosos y los am-
Division, epiléptico, rior: letras que hablan de enterramientos bientes difuminados. Mantienen la línea
emocionalmente hipersensible prematuros, madres odiadas y efectos pla- en Faith (1981), pero, con la aparición de
y con tendencias depresivas) cebo, arreglos tortuosos y sonidos distor- Pornography (1982), el grupo, su música y
se ahorcó en la cocina de su sionados, sobre unos temas que son au- su líder se tambalean: demasiado tópico,
casa. La razón: fue incapaz de ténticas pesadillas musicadas. A mitad de demasiado evidente. Gallup se marcha,
soportar el abandono de su la gira de presentación del disco, por razo- Tolhurst se dedica a aprender a dominar
mujer, ocurrido algunas nes no muy claras, Morris y McKay desa- los teclados y Smith se entretiene con las
semanas antes. Tenía 23 años. parecen. Su lugar lo cubren el guitarra y el ya mentadas aventuras de The Glove y los
batería de los Cure, el grupo telonero, has- Banshees.
ta el final de la gira. Para Kaleidoscope Sin embargo, el año 1983 ve cómo, con
(1980) hay un nuevo batería (Budgie) y la un grupo fantasma que en realidad está
colaboración a las guitarras de Steve Jo- formado tan sólo por Smith y Tolhurst,
nes (ex Sex Pistols) y John McGeoch (aún acompañados por músicos eventuales, y
en Magazine). Es el último quien final- un tema -Let's go to bed- del que el pro-
mente se incorpora al grupo, y con esta pio Smith reniega en un principio, el soni-
formación graban Juju (1981) y A kiss in do remozado de The Cure -ahora ligero
the dreamhouse (1982). Son los días del
máximo esplendor: los grupos oscuros es-
tán en pleno apogeo, y es Siouxsie quien
se erige en diosa indiscutible, convirtiendo
su imagen y su música en el modelo a
i mitar.
Pero McGeoch abandona (problemas
de alcohol, drogas y cabeza), y los sínto-
mas de decadencia que ya se anunciaban
en A kiss... estallan. Todos los miembros
de los Banshees ocupan 1983 en aventu-
ras paralelas: Siouxsie y Budgie, como
"SE NOS HA LLAMADO DEPRESIVOS, CUANDO LO ÚNICO QUE
REFLEJÁBAMOS ERA APATÍA" (Robert Smith, The Cure)
THE CLASH
LOS 'PUNKS' ROJOS
FERNANDO MARTÍN
A principios de 1976, en la zona oeste de
Londres, los 101'ers deleitaban a la pa-
rroquia tocando rhythm and blues salvaje.
Pero su cantante Buddy Meyers (1952),
apodado Joe Strummer por su forma de
aporrear la guitarra, notaba que la banda
se le quedaba pequeña. En abril tocó con
los 101'ers por última vez. Los teloneros
de aquel concierto cambiaron su vida.
Eran los Sex Pistols. Strummer alucinó
con ellos. Poco después se encontraba
por la calle a dos ex miembros de un gru-
po clave del punk londinense, London
SS. Eran Mick Jones (1956), guitarrista,
y Paul Simonon (1956), bajista novato.
Junto a ellos, Terry Chimes, batería, y
Keith Levine, guitarrista, que les aban-
donaría pronto por su excesiva politiza- El nuevo testamento, pero que acabó titu- En 1982, nuevo recorrido america-
ción. The Clash habían nacido. A instan- lándose como el corte uno de la primera no, teloneando a los Who en su despe-
cias de su productor, Bernie Rhodes, se cara, London calling. dida. Y pronto el último disco con la
trasladan a Camdem Town y se estrenan En total, 19 magistrales canciones en formación al completo. Combat rock su-
en agosto como teloneros de los Sex Pis- las que, con la ayuda de Mickey Gallag- pone volver al elepé único como forma-
tols. Precisamente el revuelo en torno al her a los teclados, la banda exhibe un im- to. Buenas canciones como Should I
punk abre las puertas de las multinacio- presionante talento creativo e instru- stay or Should I go, Know your rights o
nales del disco, ansiosas por acaparar el mental. Temas como Death or glory, Four Rock the cashbah plantean la posibili-
fenómeno. Los Clash firman con CBS un horseman, Lost in the supermarket o el dad de hacer música comercial digna;
contrato en ventajosas condiciones. En cañí Spanish bombs marcan el listón que al lado, otros temas que revelan la fas-
diciembre, las autoridades municipales The Clash nunca ha superado. cinación por las discotecas, demasiado
prohiben la Anarchy Tour en la que van Y a partir de aquí comienza la deca- funk mal asimilado. Clash no ha apren-
embarcados los Pistols, los Clash y los dencia, favorecida por las drogas, el dido a hacer música trivial. Y, para col-
Damned. En enero de 1977, aparece el eclecticismo musical exagerado, la va- mo, las drogas apean a Headon de la
primer álbum. The Clash es un disco im- guería y la falta de dirección. Esto de- batería. Le sustituye, primero, el cono-
prescindible para entender la crispación semboca en 1980 con la edición del triple cido Terry Chimes, y definitivamente,
social de la época. Canciones como Hate Sandinista. Dos horas de flirteo con los el ex Cold Fish Pete Howard. Y ya en
& war, Cheat, Remote control, Career más diversos y exóticos estilos para 1983 Strummer y Jones se pelean. Jo-
oportunities y el jamaicano Police & thie- "mosquear al público punk", según nes es sustituido por dos guitarristas:
ves ponen un enérgico cerco musical al Strummer. Y entre tanto funk, reggae, Nick Shepard y Vince White. Con esta
establishment de la vieja Europa. El disco dub, rap y soul, pocas canciones con la formación se graba el último disco, Cut
se convierte en una bomba. fuerza de lo ya conocido. La energía se the crap (1985), del que poco puede de-
Al año siguiente, nuevo batería, evapora y lo más provocador es el título. cirse: resulta penoso incluso para el
Nicky Topper Headon (1956), y nuevo Aunque para paliar la desilusión, ese propio Strummer.
elepé en el mercado, Give 'em enough rope, mismo año aparece Black market Clash, En la actualidad Joe pasa largas
que destaca el talento del tándem Strum- recopilación de temas editados en temporadas en Andalucía produciendo
mer-Jones para crear himnos generacio- singles. a los granadinos 091, aparte de partici-
nales como All the young punks y Tommy par en películas (Sid & Nancy y Straight
Gun. El sonido resulta un tanto heavy, to hell). Siempre asegura que va a ha-
pero los lleva al número dos de las listas blar con Mick Jones para reunificar el
inglesas. Para conquistar nuevos merca- grupo. Este último tiene ya en marcha
dos, se embarcan en su primera gira por su propio proyecto musical, llamado
EE UU, con críticas inmejorables. De HISTORIA DEL `ROCK' Big Audio Dynamite, con dos elepés,
vuelta a la patria, los Clash participa en rock blanco, más hip hop, y nada que ver
conciertos contra el racismo o para pa- PRÓXIMO CAPÍTULO con el glorioso pasado. Topper Headon
liar el hambre en Kampuchea, afirman- avala su curación con discos de soul pu-
do así su militancia. Su obra maestra lle- rista. Y Paul Simonon en casa, recor-
ga en 1979: un álbum doble, vendido a dando los divertidos días del punk,
precio de sencillo, cuyo nombre iba a ser 'NEW WAVE' hace ya 11 años.
A los pocos meses de la escandalosa erupción del
punk, el Reino Unido ve la consolidación de una fla-
mante alternativa al rock decrépito y a sus radicales
negadores. La new wave (nueva ola) se presenta como
un ofrecimiento lúdico que conecta con los sonidos de
mediados de los años sesenta y en el que priman las
canciones y la jovialidad. La new wave supera pronto,
de todas formas, su fase nostálgica, y llega a conver-
tirse en pista de despegue para extraordinarios artis-
tas, como Madness, Jam, Elvis Costello, The Police, Joe J ackson (en la foto), los
Pretenders y otros muchos, que en su mayoría han conseguido mantener su ca-
rrera.
WAVE'
ganar credibilidad con actuaciones en las que definen su línea de
reggae-rock. En la foto, de izquierda a derecha, Sting, Andy
Summers y Stewart Copeland. 39 w
"NO ME INTERESA EL ARTE. LO QUE QUIERO ES DESARROLLAR CANCIONES
CON ESTILO, CHISPA, IMAGINACIÓN. EL `POP' DE SIEMPRE" (Nick Lowe, 1979)
Los grupos de new wave recuperaron las mejor del pasado. Tampoco deseaban ar-
apariencias pop de los años sesenta como mar a sus guitarras con alambre espinoso,
señales de identidad. En la foto, Advertising. renunciar a las melodías por estrépitos
apocalípticos o pasarse la vida haciendo
muecas feroces al mundo. Allí estaban los
corazones impetuosos de lo que rápida-
mente se llamaría new wave, avalancha
que aglutinó a añorantes de los inmacula-
dos años sesenta, veteranos del pub-rock y
resistentes activos al imperio del rock ma-
crocefálico.
Y es que en la primera mitad de los se-
tenta el rock había repudiado muchos de
sus valores originales. El single, vehículo
de canciones inmediatas, fue arrinconado
en favor del elepé, donde el artista tenía
que destilar inmensos pensamientos y
consolidar apabullantes conquistas musi-
cales. Un empacho de vanidad que conta-
ba con la complicidad de una industria del
entretenimiento satisfecha de poner rien-
das doradas al caballo loco de 1967. En
estas andanzas, el rock había adquirido
una oronda respetabilidad, pero cojeaba
por su arrogancia de nuevo rico, su distan-
ciamiento respecto al público pagador, su
cinismo de máquina perfectamente engra-
sada. No es extraño que durante aquellos
años inciertos en las publicaciones musi-
cales fuera de rigor afligirse y pontificar
sobre una posible muerte del rock. Era un
augurio prematuro: más que morir, había
perdido algo de integridad, mucho de aca-
loramiento, casi toda la pubertad espi-
ritual.
Esas cualidades abundaban en las pro-
puestas de la nueva ola. Para algunos gru-
pos, el punk había supuesto un purgante
reconstrucción del pop ardiente. Lo más La nueva ola dio luz verde a grupos
femeninos. En la foto, las Bodysnatchers,
evidente era conectar con la tradición bri- grupo skatalitico del sello Two Tone.
tánica de los sesenta. Resultaba demasia-
do tentador el modelo de los Beatles y fue-
ron abundantes los grupos que se empeña-
ron, respaldados por ansiosas discográfi-
cas, en reconquistar aquellos esplendores.
Los resultados fueron lamentables, al
igual que ocurrió con los que optaron por
los patrones desaliñados de los primeros
Rolling Stones y su rhythm and blues. Por
el contrario, salieron a flote los que apos-
taron por reavivar las llamas de sonidos
menos obvios, conectados con oscuros
cultos juveniles. Las bandas de ska (Spe-
cials, Madness y compañía) dieron difu-
sión a una música que en su primera apa-
rición a mediados de los sesenta no había
trascendido demasiado. Los Jam y otros
torpedos mods se aproximaron al soul an-
fetamínico, reconociendo de paso su deu-
da con los mejores Kinks, también pre-
sentes en los dedos de los Pretenders.
En estos tipos se aunaba la veneración
por tiempos pretéritos con una decidida
voluntad de dar vehemencia a su reperto-
rio, insertándolo en la problemática del
Reino Unido. Se recuperaban viejas fór-
mulas, pero, lejos de reducirlas a ejerci-
cios de añoranza, su probada eficacia se
multiplicaba con un ansia de comunica-
ción, de definición juvenil, de articulación
de respuestas. Ese mecanismo explica que
Madness, Specials, Jam o Dexy's Mid-
night Runners calaran tan hondo: emitían
música urgente para un presente agitado.
Además, a su debido momento esas in- ción, su arrastre popular, su maleabilidad.
fluencias ska, soul, reggae- retrocedie- Disfrutaban con la posibilidad de subver-
ron para perfilar construcciones sonoras tirlo y reconvertirlo. Así, tras la abundan-
más individualizadas. cia de corbatitas, flequillos y ropas a lo n Estados Unidos, la new
Algo similar ocurrió con solistas como Carnaby Street, empezó un juego -con wave tuvo una vida más difícil.
Graham Parker, Elvis Costello o Joe Jack- guiño incluido- que tomaba como refe- Aunque allí hubo en la
son: si el énfasis de los grupos estaba en la rencias las más lejanas tendencias. Nick primera mitad de los setenta
acción social, los nuevos cantantes-com- Lowe, que inmortalizó el feliz lema de pop abundantes grupos de pop
positores recuperaron la dimensión perso- puro para la gente de ahora, se presentaba anglófilo -Flamin' Groovies,
nal y se centraron esencialmente en refle- en la carátula de su primer disco grande Big Star, Wackers, Stories,
xionar sobre los conflictos amorosos (con disfrazado de diferentes tipos rockeros. El Raspberries-, las emisoras de
algunas incursiones posteriores en la are- pop tenía una trayectoria rica en estereoti- radio mantuvieron una
na política). No había en ellos mucho mar- pos y tendencias, un filón que recuperar testaruda resistencia ante sus
gen para la frivolidad, pero sí el convenci- con cariño y/o ironía. Al abrigo de esta vi- herederos. Los pocos grupos
miento de que el pop era un medio podero- talista nueva ola empezaba una explora- pop que triunfaron -Knack,
so y lo suficientemente adulto para reco- ción sistemática de páginas polvorientas Go-Go's- no tuvieron mucho
ger sus obsesiones. del pop que ha desembocado en el actual margen para crecer
Grupos y solistas exhibían un entendi- estado de revival permanente. musicalmente y se
miento profundo del sentido y la historia Hay otras moralejas en la epopeya de la extinguieron desastrosamente.
del pop. Agradecían su poder de excita- new wave. El grupo más universal de los que
se acogieron a tan benévola etiqueta resultó
ser Police, que forjaron un inconfundible so-
nido propio. Estos y otros aciertos fueron
posibles gracias a un clima de exaltación de
los valores intrínsecos del pop: se recuperó
el single, se buscó el acoplamiento emocio-
nal con su audiencia, se explotó su potencia-
lidad de música embriagadora. Lo apoda-
ron nueva ola, pero también pudo bautizarse
como renacimiento del pop. Todavía se perci-
be su brisa vivificante.
"LOS ÉXITOS LO S COMPONGO YO PORQUE TENGO TALENTO INNATO
PARA ELLO Y PORQUE GANO MUCHÍSIMO DINERO" (Sting)
Chrissie Hynde, que ha sabido expresar su que ella esperaba. Se gana la vida como
testaruda personalidad a través de las buenamente puede hasta que conoce en una
diversas formaciones de los Pretenders.
fiesta a Nick Kent, periodista, que, además
de compartir su amor por Iggy Pop, le da
trabajo en el New Musical Express.
Cuando regresa a Estados Unidos trata
en vano de formar una banda estable. Re-
gresa a París para cantar con un fugaz gru-
po. De allí volverá en 1976 a Londres, don-
de es espectadora de primera fila de la ex-
plosión punk. Malcohn McLaren, en cuya
tienda de ropa había trabajado, la mete en
un grupo con la condición de que se haga
pasar por chico. Da fútiles clases de guitarra
a un tal Johnny Rotten. Intenta trabajar con
Mick Jones, después de los Clash. Intentan
domarla y lanzarla como solista, pero ella
insiste en ser parte de un conjunto. Entran
en escena Pete Farndon (bajo), Jim Honey-
man Scott (guitarra) y Martin Chambers
(batería). Los tres son del mismo pueblo,
Hereford. Los Pretenders son una realidad.
Nick Lowe les produce una bonita versión
del Stop your sobbing, de Ray Davies. Du-
rante 1979, y con Chris Thomas en los con-
troles, completan su elepé debú, que aparece
a principios de 1980 y alcanza el número
uno de las listas británicas.
El secreto está en el talento de la chica
para fabricar canciones entre el rock duro y
la tradición pop británica. La energía en bru-
to de The wait contrasta con la sensibilidad
de Kid, el suave tono reggae de Private hfe,
con el ritmo hipnótico del hit Brass in pocket.
Al año siguiente sale el álbum Pretenders II,
pero Chrissie se siente insatisfecha en su pa-
pel de estrella, se da a la bebida y se mete en
problemas; sus colegas aprovechan el éxito
para zambullirse en drogas de todo tipo. La
gira mundial en la que se ven atrapados em-
Durante la regla, nada me peora la situación. Pete y Chrissie, que han
parece divertido; me vuelvo sido novios durante dos años, se pelean, y
hipersensible, me deprimo;
pero, aun así, pienso que la RETENDERS, éste se engancha con la heroína. Pero la sor-
presa la da Jim, apareciendo muerto a cau-
píldora es algo artificial. sa de una sobredosis. Por similares excesos,
Quizá sea más natural, más
positivo, pasar por eso que
MENSAJE DE AMOR muere luego Pete.
Con dos nuevos miembros, jóvenes y
evitarlo. Para mí, el acto de la IGNACIO JULIÁ aparentemente saludables, los Pretenders
procreación es lo más La historia de Chrissie Hynde contiene los reaparecen con Learning to crawl (1983).
importante y real que puede ingredientes (talento, azar, individualismo y Chrissie ha aprovechado la pausa y ha teni-
hacer una persona, y el hecho tragedia) de los grandes mitos del rock. A do una hija con Ray Davies, su ídolo de los
de que no se tenga control los 12 años, en la escuela, le pidieron que re- Kinks. En el período de tiempo que separa
sobre ello me parece una dactara un poema basado en su palabra fa- este tercer elepé de su último trabajo hasta
barbaridad". vorita. La palabra que escogió fue Inglate- la fecha, Get close (1986), rompe con Ray,
rra. La fascinación de esta norteamericana, conoce a Jim Kerr, cantante de Simple
Chrissle Hynde, 1981 nacida en 1951 en Akron (Ohio), por el país Minds; se casan y tiene una segunda hija.
de sus héroes de adolescencia (Beatles, Sto- En la actualidad tras los Pretenders se es-
nes, Kinks) marcaría profundamente su conde una mujer vegetariana e indepen-
posterior trayectoria humana y artística. Lo diente, que no teme expresar sus personales
tenía muy claro: quería ser Brian Jones, Jimi puntos de vista a través de sus canciones.
Hendrix y Jeff Beck. Soñaba con que todos
los parques de América tuvieran algún día
una estatua de James Brown. En 1973, obe-
deciendo un intenso impulso, viaja a Lon-
dres. Lleva como único equipaje dos discos
de los Stooges y uno de los Velvet Under-
ground. Pero Londres no es ese paraíso pop
"PORQUE TÚ SEAS UN NEGRO Y YO UN BLANCO, / NO
CREO QUE TENGAMOS QUE PEGARNOS" ('Doesn't make it aliright', Specials, 1979)
SKATALÍTICOS'
DEL REINO UNIDO
JESÚS ORDOVÁS
Cuando una nueva generación hace suyas
las calles y se prepara para la toma de los
medios, a menudo echa mano de la música
de los negros. Esto ocurrió a mediados de
los años sesenta, cuando los mods británi-
cos se nutrieron de la música soul, el rhythm
and blues y el ska. Y lo mismo ocurrió en
1977, cuando la juventud británica tomó los
bares, los clubes y los pubs de las principales
ciudades. Junto al punk primitivo, rabioso y
agresivo, ninguna otra música mejor que el
ska servía para expresar esa urgencia vita-
lista.
El ska era una música jamaicana que ha-
bía tenido sus momentos de mayor gloria y
expansión a mediados de los años sesenta,
que es cuando llegó a tener éxito en el Reino
Unido. Aunque mucho antes ya se bailaba
en los clubes jamaicanos. Y era patrimonio Gobierno y la sociedad británica y el adoce-
de grandes grupos, como los Skatalites, que namiento de la música pop.
se ganaban la vida haciendo bailar a los tu- Además de los Specials, que consiguen
ristas que visitaban Jamaica. El líder de los un éxito tras otro con sus discos y produc- He vivido demasiado tiempo /
Skatalites, el trombonista Don Drummond, ciones (Too much to young / Stereotype, en una trampa construida de
fue un tipo clave en la evolución del ska. La 1980), su sello edita los discos elepés de The mentiras. / Pero un día voy a
influencia de Drummond en la moderniza- Selecter, otro combo skatalítico formado por escapar, / porque me he dado
ción de la música popular jamaicana fue de músicos blancos y negros, con la cantante cuenta / de que tienes que
tal envergadura que, a pesar de morir en la de color Pauline Black al frente y el guita- derribar la puerta / de la trampa
prisión por haber matado a su mujer, se le rrista Noel Davies como compositor princi- en la que estás. / Tienes que
recuerda como El Santo. pal (Too much preasure, 1980. Celebrate the escapar antes / de que las
Ya se ve que el ska no era precisamente bullet, 1981). Aparte de Elvis Costello, Gra- cuatro paredes se cierren. /
música de santos. Identificada con los rudies ham Parker, Graduate (Elvis should play ska, ¡Rompe la puerta!".
de Kingston y los skinheads londinenses, 1980), The Bodysnatchers y otros muchos
perdió pronto su popularidad. Pero quedó cantantes y bandas con alguna que otra in- Break down the door, The
en el recuerdo de irredentos aficionados bri- cursión en el género, otro de los grupos rele- Special AKA, 1980
tánicos. Sus hermanos menores decidieron vantes fue The Beat. Su primer elepé lo edi-
rescatarlo en la estela del punk. taron en 1980 (I just can't stop ft), y durante
Los Specials, un grupo de Coventry for- cuatro años tuvieron una serie de éxitos gra-
mado por dos negros y cinco blancos (entre cias a un brillante sonido pop con fuertes do-
los que destacaban Jerry Dammers y Terry sis de ska y soul.
Hall), son de los primeros en alcanzar el éxi- Dosis que se incrementaron a favor del
to, con A message to you Rudy (1979) y el soul con las nuevas formaciones creadas por
álbum Specials, producido por Elvis Coste- los disidentes y separados. Dave Wakeling
llo y editado en su propia marca, 2 Tone. y Ranking Roger, de los Beat, dieron vida
Con ellos, y parafraseando una de sus can- en 1983 al proyecto General Public. Por su
ciones, empieza una nueva era en la música parte, otros dos miembros de los Beat
pop británica. Una era en la que la gente (Andy Cox y Davis Steel) forman Fine
más joven y más pobre del país arremete Young Cannibals (1985), tras la disolución
contra el racismo, el conservadurismo del del grupo. También Pauline Black, de los
Selecter, inicia una carrera en solitario, y
Jerry Dammers, de los Specials, forma The
Special AKA, con los que edita pocos dis-
cos, aunque entre ellos está una arrolladora
canción dedicada al líder negro surafricano
Nelson Mandela (1984), y produce a Rhoda
(The Boiler, 1982). El ska británico ha sido
base de provechosas aventuras.
"LO MEJOR DE ESTE GRUPO ES QUE SOMOS GENTE NORMAL. EL `POP' TIENE
DEMASIADAS ESTRELLAS ENDIOSADAS EN UN PEDESTAL" (Suggs, Madness)
THE JAM,
HONESTIDAD `MOD'
JUAN M.BELLVER
En 1977, junto a la anarquía revolucionaria
propugnada por los Sex Pistols y los Clash,
surge, con igual fuerza, la rebeldía genera-
cional de los Jam, portentoso trío pop desti-
nado a convertirse en uno de los pilares bá-
sicos del rock británico de los últimos 10
años. El núcleo de la banda se forma en
1974, en Woking (Surrey). En el instituto lo-
cal, el guitarrista Paul Weller (1958) conoce
al bajista Bruce Foxton (1955), y el batería
Rick Buckler (1955). Han divagado entre la
psicodelia, el rock and roll y los Beatles, pero
Weller se interesa por la cultura mod de los
años sesenta. El trío practica un pop-rock
emocionante, poderoso y preciso: siempre a
caballo entre la insurgencia juvenil y la críti-
ca costumbrista; íntegramente comprometi- hol-, se producen cambios, tanto en el
do con el vitalismo mod de los años sesenta apartado musical como en el ideológico.
(The Who, Kinks, Small Faces, etcétera). Sus melodías se acercan al soul, y su política
Además, Paul Weller se presenta como lí- -inicialmente se declaró monárquico, por i cen que los Jam fueron el
der carismático, capaz de desatar las pasio- llevar la contraria a los vecinos del punk- detonador de la reaparición de
nes más encendidas a través de unas com- se decanta hacia el laborismo. l os mods, pero la verdadera
posiciones viscerales y sentidas, donde el Ya convertido en el grupo más prestigio- bomba del revival de los
mensaje agridulce descansa en unas letras so del Reino Unido, el trío se esfuerza en ochenta fue la película
tan personales como intensas. conquistar al público europeo y norteameri- Quadrophenia (1979), basada
Su primer álbum, In the city (1977), sor- cano; pero el excelente Sound affects (1980) en un disco homónimo de los
prende por su dureza e inmediatez, pero re- no obtiene, fuera de las islas, el éxito desea- Who. En el Reino Unido
fleja una situación confusa en el devenir mu- do. Para colmo, The gift (1982) es acogido surgieron bandas como los
sical de la banda. Seis meses después, apa- con frialdad: el exceso de pasión negroide New Hearts, los Lambrettas,
rece This is the modere world (1977), un se- disgusta a los puristas. Con todo, los chicos Melton Parkas, Purple Heart,
gundo elepé que rechaza todo planteamien- se embarcan en su primera gira mundial, la Squire, The Chords y los más
to punk en busca de una estética pop emi- Trans Global Express Tour, con una sección populares, Secret Affair. En
nentemente británica, desarrollada luego en de viento. Pero eso no les basta. Ante la po- España, para no ser menos,
All mod cons (1978) y Setting sons (1979). Y sibilidad de que el grupo se convierta en una aparecieron Los Elegantes,
aunque el trío degenere hacia el chovinismo estructura artística estanca e inmovilista, Brighton 64, Telegrama o Los
más autocomplaciente, es éste un período Weller anuncia la inmediata disolución en Escándalos.
de saludable y fecunda creatividad: entre un una carta abierta a todos sus fans: "Creo
elepé y otro, los chicos se entretienen editan- que ya hemos hecho cuanto podíamos ha-
do un buen puñado de singles con una cali- cer juntos. Quiero que terminemos con dig-
dad extraordinaria. Aparecen así maravillas nidad". Sus dos compañeros no aceptan
como News of the world (1978), Strange town alegres tal noticia.
(1979) o Going underground (1980), para mu- El 6 de diciembre de 1982, los Jam dan el
chos, la mejor canción del año, o A town ca- último de sus seis conciertos de despedida
lled Malice (1982). en el Wembley Arena -100.000 demandas
Mientras, la personalidad de Weller va de entradas sin satisfacer-. Mientras, llega
madurando -lee libros, conoce a su adora- al número uno su creación postrera, el single
do Pete Townshend (The Who), sufre una Beat surrender, y se edita Dig the new breed
crisis nerviosa y abandona la carne y el alco- (1982), una selección de sus mejores graba-
ciones en vivo. Luego, tras la separación, ni
Bruce Foxton, en solitario, ni Rick Buckler,
con The Time, han salido de la mediocri-
dad. Sólo Paul Weller, que forma The Style
Council con el teclista Mick Talbot (ex
Dexy' Midnignt Runners), ha mantenido el
nivel c reativo habitual, siempre fiel a esa ho-
nestidad que nunca le ha abandonado.
"ME GUSTARÍA VER LAS LISTAS DE ÉXITOS LLENAS DE 'SOUL'; CREO
QUE EL 'ROCK' ESTÁ EN DECADENCIA" (Kevin Rowland, 1980)
EL SOPLO
REFRESCANTE
J. MARTA REY
La nueva ola significaba ante todo la im-
plantación de la normalidad. De la asfixia
nihilista de un punk encerrado en sí mismo
a la actitud más relajada de descubrir que
la vida sigue. La ropa de todos los días es
el nuevo uniforme. Aunque su posterior
autoasunción, como fenómeno artístico,
derivaría en el derroche colorista y la so-
fisticación de los ochenta (fantasiosa in-
dumentaria, cortes de pelo, posismo), lo
cierto es que comenzó descubriendo lo
sencillo.
No se eluden las listas de éxitos. Al
contrario. Hay quien lo ve como simple
oportunismo, una estrategia pactada con
vistas a un mercado más dispuesto a acep-
tar los aliviantes sonidos de unos grupos
aseados con cara de buenos chicos. Su
única exigencia era la originalidad. Para
eso, todo valía. Consecuentemente, la mú- tarra con historial en grupos franceses
sica se hizo más pop redescubriendo el en- (Robín Wills), y para colmo, se agenciaron
canto de lo efímero, de lo intrascendente, a Chris Wilson, de los Groovies. En reali-
y reactivando modas y poses de otras dé- dad tenían todo prestado. Desde el nom- I caso de Tom Robinson
cadas en un curioso combinado de actua- bre, tomado de un añejo tema de los Stan- il ustra la capacidad de la new
lidad. dells. Nunca pasaron de la serie B, pero wave para generar
La mayoría de estos grupos salió del despertaron un fanático culto de seguido- permanentes reajustes. Surgido
circuito independiente, que se establecía res, especialmente en Europa, hasta su di- en la trastienda del punk
como alternativa en auge hasta su inme- solución (1985). Wills y Wilson se encon- como rocker tardío, cosechó
diata explosión. Sin embargo, muchos han trarían de nuevo en un segundo capítulo: enorme éxito con temas
terminado en multinacionales, converti- Fortunate Sons. peleones (2-4-6-8 Motorway,
dos en las estrellas de hoy. No todos tuvie- 1977) e himnos de militancia
ron esa suerte. Aquí tienes las dos caras Boomtown Rats. El título de su primer sin- homosexual (Glad to be gay,
de la moneda. gle, Looking after nº 1 (1977), definía clara- 1978) para ponerse al día con su
mente sus intenciones, y Bob Geldof, su efímero grupo Sector 27.
Barracudas. El surf-punk. Su mayor origi- portavoz, no se cortaba en repetirlo: ser Más tarde descubriría la
nalidad fue reponer las brisas vocales y las nuevas estrellas del rock, el anatema tecnología fría, el pop heroico y
guitarras playeras de los sesenta, motori- del punk. Y lo consiguieron. Gracias a la un cierto optimismo.
zadas con energía nuevaolera, y el lado frí- lengua polémica y el acaparador carisma Personaje inquieto y activista
volo de la psicodelia. Gracias a su impeca- de Geldof, junto a un nutrido plantel de de izquierdas, ha colaborado
ble imagen de época y a un single indepen- ilustraciones sonoras del cambio de sensi- con Peter Gabriel y músicos de
diente, EMI les editó su primer álbum, bilidad juvenil: de la autoobsesión punk a países del Este. Ha escrito
Drop-out with the Barracudas (1981). Su la despreocupación de una realidad asu- canciones con Elton John, un
desfachatez resultaba fresca y divertida. mida. Canciones que nacen con fustigante musical, televisión, y además
De pronto descubrieron a los Byrds, vía descaro punk y se dispersan en un singular tiene un programa de radio en
Flamin' Groovies. Se pusieron serios y se pop de elaborada variedad entre sus mejo- l a BBC.
erigieron en pioneros del actual folk-rock res momentos: Rat trap (1978) o I don't like
garajista. Disponían de un crispado can- mondays (1979): inspirada en el caso verí-
tante canadiense (Jeremy Gluck) y un gui- dico de Brenda Spencer, la colegiala que
disparó sobre sus compañeros porque no
le gustaban los lunes.
Activado como sexteto cerca de Du-
blín (1975), sus alborotados conciertos les
sirvieron de presentación en Inglaterra,
donde se instalaron. Su Looking after n- 1
inauguró la programación moderna (new
wave), de la BBC, y sus álbumes fueron su-
"NO TENÍAMOS TALENTO MUSICAL NI NADA, PERO LA GENTE QUERÍA
VERNOS PORQUE ENLOQUECÍAMOS EN EL ESCENARIO" (Suggs, Madness)
Dave Edmunds, que en sus producciones y El rock and roll y el rhythm and blues
discos propios ha demostrado un
enciclopédico conocimiento del rock. eran dos estilos que no tenían cabida en la
estructura del musical imperante en aque-
lla época, y los arriesgados grupos que se
empeñaron en practicarlos fueron asu-
miendo esta situación, retirándose humil-
demente al circuito sudoroso de los bares
de garrafa: antros en donde no se solía co-
brar la entrada, y el grupo tocaba a cam-
bio de un mísero porcentaje de caja. A las
bandas británicas que a lo largo del dece-
nio se enfrascaron tercamente en esta lu-
cha moral contra la voracidad del negocio
pop se las encuadró bajo la acertada eti-
queta del pub-rock.
Y, llegado este momento, se hace nece-
saria una aclaración. El pub-rock no es un
estilo, ni tan siquiera un movimiento. Es
algo mucho más simple: un fenómeno ar-
tístico, una forma de entender y vivir el
mundo del rock, y, ante todo, la primera
oposición seria a la masificación de la mú-
sica como espectáculo involucionista. Por
ello cabe considerarlo como precedente
i mportante de la revolución punk de sus fi-
las salieron muchos de los más notables
creadores de la new wave.
La expansión de tan singular contra-
cultura en los ambientes urbanos del Rei-
no Unido se vio fortalecida por una serie
de factores de obligada mención: la exis-
tencia de un circuito nacional de pequeños
clubes y pubs que programaban -y aún
hoy programan- actuaciones, la eclosión
de un sinfín de sellos independientes
(Stiff, F-Beat, Charly, Chiswick, etcétera)
surgidos a raíz de la ruptura de 1977 y la
aparición de un público fiel y entusiasta,
aunque reducido. A esto hay que añadir la
influencia notable de una publicación, Let
it Rock, revista erudita de marcada inclina-
ELVIS COSTELLO
BUENAS INTENCIONES
RAMÓN DE ESPAÑA
Declan McManus (1954) supo desde la
cuna que estaba llamado a convertirse
en el rey de la nueva ola. Por eso, a la que
pudo, adoptó el rutilante alias de Elvis
Costello y se lanzó a las arenas del rock
and roll embutido en un traje de segunda
mano y asegurando -como nos decía en
el título de su primer elepé que su pun-
tería era perfecta o que sus intenciones
eran buenas.
Cuando el bueno de Elvis, antiguo
manejador de ordenadores, publicó en
1977 My aim is true, Londres vivía la ex-
plosiónpunk; ya saben, aquel tocomocho
que se inventó Malcohn McLaren para
promocionarse a sí mismo y a su tienda
de ropa a costa de cuatro adolescentes
ingenuos y sus aún más ingenuos segui- 1987 se extiende la carrera coherente de sultar a James Brown y a Ray Charles;
dores. En plena era del imperdible, al- un estajanovista del pop. ¿Se han fijado una ocurrencia alcohólica le colgó el
guien tenía el valor de reivindicar el pop y ustedes que siempre pone en sus elepés sambenito de racista.
las bellas melodías, de escribir letras tan todas las canciones que le caben y más? Fue esa fijación con los clichés de ul-
desencantadas como crueles y de pre- ¿No es cierto que, a pesar de su prolífica tramar -unida a su amistad con el im-
sentarse en público con una corbata de obra como compositor, también sabe ha- prescindible T. Bone Burnett, produc-
su padre y unas gafas que recordaban a cer honor a temas ajenos? No contento tor de Los Lobos y autor de algunos
Buddy Holly, el rey de los babosos, la con ello, el hombre ha ido diversificando agradables álbumes- la que le llevó,
bestia negra de todo punk que se preciara su oferta musical a lo largo de los años, cuatro discos después, a coronarse rey
de serlo. El mentado McLaren debería desarrollando las claves del pop en cuan- de América. En su King of America
haberle prestado atención al cuatro ojos tas direcciones le ha sido posible. Cuan- (1986), Costello, tras tres obras meno-
y ofrecerle sus servicios como apodera- do parecía que había dejado sentadas las res Imperial bedroom (1982), Punch
do, aunque es poco probable que Elvis le bases del moderno rock con su segundo the clock (1983) y Goodbye, cruel world
hubiera hecho caso: a diferencia de álbum, This year's model, siguió adelan- (1984)-, conseguía una pieza redonda,
Johnny Rotten, Costello era un tipo que te, Get happy!! (1980) reivindicaba el más definitoria de eso que ha dado en
sabía perfectamente lo que quería y que soul de puños apretados, mientras que llamarse nuevo rock norteamericano que
no necesitaba las trapisondas de un en el sexto elepé nos sorprendió a todos otros discos fabricados por ciudadanos
mangante para darse a conocer. Elvis, declarándose un amante del country del país del tío Ronnie. Para demostrar
casado y con un hijo, tenía otras cosas and western, grabado en Nashville en que aún no había dicho su última pala-
que contar sobre las relaciones persona- 1981, Almost blue, lectura europea de la bra, unos meses después publicaba
les y la sociedad que le cobijaba. música para vacas y camioneros que Blood and chocolate, su última obra has-
Enterrador, tal vez involuntario, del hace estragos en Estados Unidos. Un ta el momento de escribir estas líneas,
punk-rock, Elvis Costello fue un adelanta- país donde siempre se miró con sospe- en la que se recuperaba su alias -había
do de lo que algunos bautizaron como cha a un tipo tan amargado: todavía se firmado King of America como Declan
new wave. Recordemos que en ese confu- recuerda una pelea de 1979 con Steven McManus- y su rotundo grupo de
so cajón de sastre se metió, a finales de Stills, Bonnie Bramlett y otros músicos toda la vida -los Attractions- para
los setenta, a gente diversa, apenas unida californianos, cuando se le ocurrió in- ofrecernos un elepé-charter de regreso al
por cierta intención de tomarse las cosas Reino Unido y a sus orígenes.
más o menos en serio. Ya hemos hecho ¿Cuál será el siguiente paso del ami-
bastante el ganso, parecían decirnos, ya go Elvis? Quién sabe. Tranquilo en
hemos roto unas cuantas sillas y hemos Londres con su novia -la dulce Cait
vomitado sobre los mongoloides de la O'Riordan, que fue bajista de uno de
primera fila: ahora ha llegado el momen- HISTORIA DEL `ROCK' los grupos realmente memorables de
to de trabajar. las islas, los Pogues-, retirado de la
bebida, este workaholic del pop puede
Elvis es un chico muy trabajador. In- PRóXIMO CAPITULO salirnos por donde menos lo espere-
numerables singles (algunos, bajo seudó-
nimo) y 11 elepés en 10 años son prueba mos. En cualquier caso, que no cunda
cabal de ese aserto. De aquel My aim is
true de 1977 a este Blood and chocolate de
'NE w wa VE USA ' el pánico, sus intenciones siempre se-
rán buenas.
HISTORIA DEL `ROCK'
En Estados Unidos, los conceptos new wave tuvieron una
excelente acogida entre sectores de músicos anglófilos que
apostaron por repescar la frescura estética del pop de los se-
senta. Sin embargo, a diferencia del Reino Unido, esas ini-
ciativas fueron coartadas por la incomprensión del mercado,
dándose abundantes casos de ascensiones rápidas (The
Knack, The Go-Go's, Blondie) seguidas por disoluciones
ignominiosas. Carreras más sólidas han sido las de The
Cars o Talking Heads (en la foto, David Byrne), que han
sabido remozarse en los ochenta. Sin embargo, el movimiento generó una pléyade
de sellos independientes y escenas regionales que han dinamizado inmensamente
el rock norteamericano.
Martha Davis, de los Motels, fue una de California natal. Resultado: 15 millones
l as grandes voces dramáticas de la de discos vendidos de Get The Knack
new wave californiana. (1979) y un single relámpago, My Sharona.
Ellen Foley. As- Fueron buenos propagandistas de la eti-
pecto inocente el queta nueva ola, gastaban un look educa-
de esta mujer, do y fueron incapaces -es una historia
tras el que se que se repite en muchos nombres de los
ocultan sus incon- citados en este diccionario- de mantener
fesables ardores. el barco a flote por mucho tiempo. Des-
Nacida en Saint pués de ... But the little girls understand
Louis, se decidió (1980) y Round trip (1981) lo intentaron fú-
pronto por la fa- tilmente cambiándose el nombre a The
rándula, trasla- Game. Con su éxito monumental del pri-
dándose a Nueva mer álbum como Knack dieron confianza
York en 1972, in- a la industria para que invirtiera en grupos
terpretando va- de variado pelaje, muchos de ellos efí-
rios papeles de meros.
teatro y frecuen-
tando las sesiones Moon Martin. Miope de origen tejano, lo
de grabación. suyo es el rock urbano con aromas de pop
Canta con Meat hipnótico. Primero conocido por sus com-
Loaf en el simbó- posiciones (sobre todo, Cadillac walk, to-
lico Bat out of hell mada por Mink DeVille), empieza a can-
y pronto le cae un tar imitando a Bob Seger, graba varios
contrato solista. discos con el grupo Southwind y en 1979
Ian Hunter y debuta con un apetecible Shots from a cold
Mick Ronson le nightmare. Obseso recreador de la mítica
preparan Nightout callejera, tímido y misógino, vuelca sus
(1978), resultón y pasiones solitarias en otros dos trabajos
contundente; los macizos, Escape from domination (1980) y
Clash -ella man- Street fever (1980), antes de intentar
tiene relaciones (¿quién le engañó?) un golpe de efecto con
con Mick Jones- pirueta descalabrante en Mystery ticket
le cocinan el se- (1982), producido por el entonces sinteti-
gundo, Spirit of St. zado Robert Palmer.
Louis (1981), inconexo y pretencioso; Vini
Poncia le produce el tercero, Another The Motels. La cantante, autora, líder e
breath (1983), y la carrera de Ellen Foley imagen principal de esta banda, Martha
Ella viene del planeta se va al garete. Davis, entra en la vida a mil por hora. Na-
Claire, / sé que viene de allí. / cida en Berkeley, casada a los 15 años con
Conduce un satélite Go-Go's. En cierta medida fueron las Ban- un oficial de las Fuerzas Aéreas, antes de
Plymouth / tan rápido como la gles de 1981. Belinda Carlisle (voz), Char- la veintena tiene ya dos hijas, sus padres
velocidad de la luz. / En el lotte Caffey (guitarra), Jane Wiedlin (gui- suicidados, y en la mirada esa sensación
planeta Claire el aire es rosa, / tarra), Kathy Valentine (bajo) y Gina ácida de que el color rosa no existe. Junto
todos los árboles son rojos, / Schock (batería) empezaron a tocar jun- a músicos rebotados de otras guerras, nin-
nadie muere allí, / nadie tiene tas en Los Ángeles en 1978. Una gira con guno imberbe, forma The Motels en 1978,
cabeza". Madness revela el potencial del grupo. en Los Ángeles. Lógicamente, se les inclu-
Miles Copeland las ficha, y el elepé Beauty ye en la new wave, pero Martha no ha ocul-
Planet Claire, The B-52's and the beat, editado en 1981, llega al nú- tado que su música nace del rock y el
mero uno de EE UU en 1982. Pop fresco, rhythm and blues, proyectando siempre
frivolón y juvenil, proyectado por cinco historias dramáticas, crispadas, sin amor
chicas monas y alegres. ¿Quién es de pie-
dra? Las circunstancias se encargarían de
desbordarlas, ablandaron sus posturas, y
la pesada rueda comercial cercenó las me-
tas a las que podían haber llegado. Dos
discos fofos, Vacation (1982) y Talk show
(1984), fueron su despedida. La cantante
Belinda Carlisle editó en 1986 su debú
como solista, sin ninguna repercusión.
The Knack. El dorado productor Mike
Chapman tocó con sus dedos mágicos el
primer disco de unos tales Doug Fieger
(voz, guitarra), Berton Averre (guitarra),
Prescott Niles (bajo) y Bruce Gary (bate-
ría), que se hacían llamar The Knack en su
"TE CORTO LA CABEZA, NENA, / Y LA METO EN EL TELEVISOR. / ME
GUSTA MIRAR MI `TELE', / TE VEO EN MI `TELE" ('TV set', The Cramps)
Di confianza por nada ni nadie, enharinán- Romantics (grupo de pop duro), flanqueados
dose en maillots sonoros eficaces, pero no por dos miembros de otra banda
exigentes. De ahí que la discografia del de similares intenciones, Cheap Trick.
grupo haya sido irregular y polémica, des-
tacando el primero, The Motels (1979), so-
bre los demás, Careful (1980), All four one
(1982), Little robbers (1983) y Schock
(1985).
más interesan-
tes de la escena
musical norte-
TALKING HEADS americana de
la última déca-
EL IMPERIO DE LOS ENTENDIDOS da, rica en di-
versos niveles
JORDI BELTRÁN de lectura y
En 1973, Chris Frantz entró en contac- compacta a pe-
to con David Byrne, un tipo delgadu- sar del crecien-
cho y de aspecto inquietante muy inte- te endiosa-
resado en todo aquello que fuese expre- miento crítico
sión artística. Byrne, escocés de naci- de Byrne y los
miento (1952), que se había desplazado conflictos con
con sus padres a Canadá cuando tenía sus tres cama-
sólo dos años, y a Baltimore cuando radas. Talking
acababa de cumplir los nueve, había Heads 77, su
cursado estudios en la Baltimore Art primer álbum,
School, y posteriormente se había em- les convirtió en
barcado en una aventura musical lla- una banda
mada Bizadi, un dúo que deleitaba a ejemplar en
clientes de clubes y restaurantes cali- pleno apogeo
fornianos con versiones de Sinatra y de la new wave norteamericana. David fascinante My life in the bush ofghosts jun-
otros temas clásicos interpretados con Byrne había conseguido fabricar una se- to con Brian Eno. Jerry Harrison publicó
acordeón y violín. rie de historias con un sonido tan origi- Red and black un disco muy cercano a la
Chris (1950) estaba estudiando en nal como apabullante. Una canción, órbita del grupo. Tina se puso a grabar
la Rhode Island School of Design, sim- Psycho killer, se convirtió en himno de la con sus hermanas, Laura y Lani, y su
patizó con David y sus gustos musica- época por aclamación popular. Byrne marido, Chris Frantz, bajo el nombre de
les y le propuso formar una banda de plasmaba allí oblicuos discursos críticos Tom Tom Club, y editó un elepé repleto
rock para amenizar las fiestas que se dirigidos, con una temible epilepsia rít- de música bailable con altas dosis de hu-
montaban en su escuela: así nacieron mica, al mundo que le rodeaba. mor e ingenuidad. Parecía que tras la
The Artistics, un quinteto especializa- Luego vendrían edición de Remain in light, los Talking
do en repertorio de los sesenta (Kinks, More songs about buil-dings and food (1978),contoquesdesoul Head se habían quedado desarmados,
Paul Revere, etcétera). En 1974, David y una producción más sofisticada a car- no sabían cómo superarse. Su compañía
se fue a Nueva York; Chris le siguió go de Brian Eno, pero manteniendo los editó The narre of this band... (1982), un
con su amiga -futura esposa- Marti- mismos principios básicos que habían doble grabado en directo que recogía los
na Weymouth (1950). Juntos se instala- inspirado sus primeros temas. Fear of sonidos del grupo desde 1977 a 1981;
ron en un discreto apartamento del Lo- music (1979) fue otra producción de Eno luego el grupo se metió en el estudio y
wer East Side y empezaron a compagi- en la que se adivinaba el abandono de su confeccionó Speaking in tongues (1983),
nar trabajos ocasionales con ensayos estética espartana y la evolución hacia del que sólo destacaban tres canciones y
nocturnos; fue en ese apartamento ritmos más convulsivos e influenciados los vídeos promocionales, dirigidos por
donde nacieron Talking Heads. por sonidos africanos, y, finalmente, Re- Byrne. En 1984, Stop making sense colo-
Talking Heads (Cabezas Parlantes) main in light (1980), una obra densa que caba al grupo en la gran pantalla con una
debutaron en el club CBGB en junio de puso la música de Talking Heads en oí- excepcional película que recogía la esen-
1975 como teloneros de los Ramones. dos de gente que nunca antes les había cia de un concierto del grupo, pero la
Chris, David y Tina sorprendieron a la prestado atención. banda sonora parecía una prolongación
mayoría de los que habían asistido al Mil novecientos ochenta y uno marcó de The narre of this band...
tugurio para ver en directo a Ramones un período de reflexión; las malas rela- Un importante cambio de orientación
sin esperar nada especial de un trío to- ciones entre Byrne y el resto desembocó llegó en 1985 con Little creatures, música
talmente desconocido. en varios proyectos individuales. David con toques rockeros que decepcionó a
Para 1976 ya tenían un contrato con editó Catherine Wheel -música para una muchos de los primeros seguidores de la
Sire Records, que pondría en circula- coreografía de Twyla Tharp- y grabó el banda, que veían cómo mejoraban sus
ción ese mismo año Love goes to a buil- videoclips, pero no sus discos. De todas
ding on fire, primer single de las Cabe- formas, David Byrne resarció a los más
zas Parlantes. En 1977 se añadió al severos con Music for the knee plays
grupo un cuarto miembro que anterior- (1985), rancia banda sonora para un pa-
mente había mantenido colaboracio- HISTORIA DEL `ROCK' saje de la maratoniana obra teatral Civil
nes esporádicas con Talking Heads: wars, de Bob Wilson. La obsesión de Da-
Jerry Harrison (1949) había sido teclis- vid Byrne por convertirse en un artista
ta con Jonathan Richman y Elliot PRóXIMO CAPÍTULO total le llevó a True stories, título con el
Murphy, entre otros, y estaba dispues- que editaron en 1986 dos discos, uno con
to a reforzar la sección rítmica de Tal- canciones de Talking Heads y otro con
king Heads, que a partir de ese mo- N la banda sonora de la película del mismo
mento iniciarían una de las carreras UEVA OLA' ESPAIVOLA nombre, dirigida por Byrne.
HISTORIA DEL `ROCK'
La nueva ola (núcleo generador de lo que luego se conocería
como movida) revolucionó el panorama musical español en
los primeros años ochenta. Estaba animada por aprendices
de músicos con ansias de expresarse y romper con el añejo
rock que dominaba en España. Alentada por personajes de
los medios de comunicación que simpatizaban con las fla-
mantes tendencias anglosajonas, la nueva ola fracasó en su
primer intento de conectar con el gran público, pero con la
ayuda de los nacientes sellos independientes se ha estableci
do sólidamente. Alaska (en la foto) y Dinarama, Radio Futura, Nacha Pop, Gabi-
nete Caligari, El último de la Fila y la mayor parte de los grupos pop que triunfan
actualmente tienen sus raíces en aquella insurrección lúdica y escandalosa.
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conjuntos joviales que surgieron en 1980, querían
UEVA OLA' vender música playera. Tras el fracaso, sus
EN ESPAÑA miembros formaron grupos tan heterodoxos como
Décima Víctima, Derribos Arias o Gabinete Caligari.
"AHORA RESULTA QUE TIERNO FUE EL PADRE DE LA `MOVIDA'. NI ÉL NI NADIE
ME AYUDARON A COMPRARME UNA GUITARRA" (Jaime Urrutia, Gabinete Caligari)
riesgos: el pase por Popgrama (en la segun La nueva ola supuso la incorporación
da cadena de Televisión Española) de la activa de muchos elementos femeninos.
En la foto, Las Chinas.
filmación del concierto de Canito -presen-
tación en sociedad de todo el movimiento, tuvo un resultado
en homenaje al desaparecido batería de saludable. Enfren-
los Secretos- provocaba abundantes tados a las esca-
cartas airadas. madas discográfi-
No faltaba razón a los enojados televi- cas, los grupos
dentes. Aquellos titanes nuevaoleros ape- volvieron a patear-
nas dominaban los rudimentos de la músi- se el circuito de lo-
ca, se peleaban regularmente con la tecno- cales -El Esca-
logía sonora y estaban verdes en muchos lón, El Jardín, Ca-
sentidos. Todo lo cual no impidió que las rolina, Marquee
compañías grabadoras, que contaban con y, por fin, Rock-
el venturoso precedente de Tequila, se de- Ola- en busca de
jaran arrastrar por la euforia dominante y las indispensables
contrataran grupos a diestro y siniestro, tablas. El núcleo
en pos de los nuevos Brincos. En 1980, de seguidores cre-
prácticamente todos los grupos con reper- ció: el Concierto
torio propio pasaron por sus despachos, de Primavera
editando discos a los pocos meses. Un (1981) atrajo a
chaparrón de canciones inmediatas, rit- 15.000 personas.
mos cuadriculados, estribillos espumosos, Esto no es Hawaii,
amores tiernos, convocatorias generacio- el programa de
nales. Era el gran desembarco, destinado Radio 3, se convir-
a una acogida triunfal. Al menos ésa era la tió en inevitable
teoría. plataforma nacio-
Fue el desastre. Con algunas excepcio- nal para los novísi-
nes protagonizadas por Radio Futura, mos. Al mismo
Nacha Pop, Zombies, Secretos y Pega- tiempo se rompía
moides (que, de cualquier forma, no ven- la unanimidad es-
dieron nada que se correspondiese con el tética (pop por la
alboroto armado), la mayoría de los lan- cara"), con la lle-
zamientos se estrellaron. Los grandes ca- gada de cajas de
nales torcieron el gesto, se habló de "un ritmo y sintetiza-
invento madrileño", las discográficas tro- dores, cachivaches
pezaron una y otra vez. Pero los principa- anteriormente mal
les responsables fueron los propios gru- vistos, y la contes-
pos: los exuberantes Mama fracasaron to- tación de las hor-
talmente al traspasar al vinilo su enérgico nadas irritantes. El
directo; Radio Futura se embarcaron en romanticismo re-
una desgraciada operación de infiltración cio del barcelonés
en el público quinceañero; Paraíso dieron Loquillo y los desaforados disparates de los
uno de sus peores conciertos precisamen- gallegos Siniestro Total rompían el mo-
te en la presentación oficial de su primer nopolio madrileño de las iniciativas, mien-
tras que la presencia de novedosos grupos I punk estallaba en el
single; Los Trastos se dejaron convencer
de que podían ser el recambio de Los Pe- británicos en los escenarios locales servía Reino Unido, y los niños de
cos. El resplandor del volcán pop resultó para tomar lecciones provechosas. papás ricos hispanos, como
ser apenas el destello de una bengala. Todavía no se podía cantar victoria. El Kaka de Luxe, jugaban a hacer
El invierno llegó pronto aquel año. Y desinterés de la industria se palió en 1982 música. Lo que grabaron era
con arriesgados sellos independientes. Gru- demasiado: había unas cuantas
pos como Radio Futura o Nacha Pop se for- canciones muy fuertes que lo
talecieron en las adversidades, mientras que hacían impublicable. Pero eran
otros (Pegamoides, Rápidos, Coyotes, Pa- tan divertidos como malos
raíso) se reciclaban con tino. La movida se tocando. Alaska sólo tenía 14
hacía pasto de periodistas y las instituciones años cuando grabó, y su
empezaban a interesarse por el asunto. El guitarra abultaba tanto como su
resto ya es historia reciente. Y el hecho de exuberante culo; El Zurdo
que muchos de aquellos torpedos de 1980 se cantaba como Tarzán llamando
hayan extraviado por el camino o, lo que es a sus elefantes".
peor, traicionen ahora sus altos ideales pri-
migenios no enturbia la hazaña. Al fin y al Mariscal Romero, productor
cabo, la música no fue más que el elemento de Kaka de Luxe, en 1978
catalizador-propagandista de una forma de
interpretar la ciudad, de concebir la vida.
No es nostalgia recordar que aquéllos fue-
ron años excitantes y embriagadores. a
"`BAILANDO' ES PURA COPIA: GIBSON BROTHERS. TODO LO COPIAMOS.
YO LO HE COPIADO TODO SIEMPRE" (Carlos García Berlanga)
A pesar de sus escasas facultades New York Dolls, Alice Cooper y Gary
vocales, Alaska se ha convertido en Glitter inspiraban en su precoz cerebro, se
personaje público por derecho propio.
integra en un conglomerado de músicos,
no músicos, dibujantes teóricos y fantas-
mones que termina dando a luz a Kaka de
Luxe.
"Yo no estoy en el mundo de la música
porque tenga vocación de cantante, dijo
Alaska en 1984; "yo tenía vocación de ser
como Bowie". Gracias a los planteamien-
tos minimalistas del punk ve cumplidos
sus deseos en una casi estéril escena musi-
cal donde sólo Burning o Tequila ponen
una nota de color: Alaska puede interpre-
tar su papel de estrella libremente, pues se
presta a todo tipo de actos, aportando vis-
tosidad. Ofrece mucha personalidad y en-
canto, y a pesar de que el grupo se disuel-
ve en el verano de 1978 y el disco que edita
Chapa Rosario, Toca el pito, La pluma
eléctrica y Viva el metro- pasa rápidamen-
te a las rebajas, hay ya un público de fieles
que lo recibe encantado y queda a la espe-
ra de mayores logros por parte de sus pro-
tagonistas.
"Me divertía muchísimo", dice Alaska
respecto a sus inicios, "porque no me
preocupaba. Nacho y yo salíamos a mo-
vernos y simular que tocábamos... Cuan-
do Enrique, nuestro guitarrista, nos mira-
ba, nos poníamos a disimular, pero nor-
malmente le dejábamos a él que lo hiciera
todo; por algo sabía tocar. , Era una cosa
divertida, que no tenía pretensiones y que
Las jóvenes no habían estaba muy bien. Lo que no sé es esos mi-
tenido mucho sitio en el rock tos que se crean de dónde han salido".
español hasta que Alaska les
abrió las puertas. Ella nunca dio LASKA: En 1979, después de la desbandada de
Kaka de Luxe, Alaska reaparece con tres
el tipo de rockera aguerrida, y ex compañeros -Carlos García Berlanga
por eso su legión de seguidoras
resultó de lo más curioso:
`ROCK' DOMÉSTICO (1959), Manolo Campoamor y Nacho Ca-
nut (1957)-, más un batería cambiante,
Rubi, una argentina de voz PATRICIA GODES al frente de Los Pegamoides. No es un año
chillona y pelo decolorado, Los antiguos miembros de Kaka de Luxe muy activo por compromisos militares de
siempre indecisa en lo musical, suelen comentar que si de verdad les vie- los chicos, pero el perfil juguetón, colorido
o Las Chinas, cuarteto que ron actuar todos los que ahora lo presu- y pimpante que caracterizó al grupo se va
grabó un single bien men hubieran llenado estadios. El mito ha dibujando nítidamente. Carlos habla del
considerado (Amor en frío) y superado la realidad, pero en aquel grupo, chic de supermercado, escribe su primera
cuya vocalista, Kiki d'Aki, ha detrás de una inmensa guitarra modelo canción, El bote de Colón, que no deja du-
continuado en solitario. Flyin' V, tocaba una jovencita que había das sobre su intención, y se establece
También fueron graciosos tomado el nombre artístico de Alaska en como principal proveedor de canciones
grupos punkies femeninos, homenaje a un personaje de Lou Reed y para el grupo.
como Pelvis Turmix o Las que iba a conmocionar los planteamientos Después de varias crisis, Los Pegamoi-
Vulpes, que protagonizaron del rock español. Ella es en buena medida des se consolidan con la edición por Hispa-
un escándalo al emitirse en responsable de haberlo sacado del under- vox, en julio de 1980, de un disco con tres
Televisión Española su tema ground y hacerlo accesible a las mentalida- temas: Odio por ti, El hospital y Terror en el
Quiero ser una zorra. des domésticas, uno de los modos de ha- hipermercado. La formación que mira con
cer español un fenómeno musical impor- descaro desde su portada desplegable es
tado. definitiva: Olvido, voz -ha dejado definiti-
Olvido Gara Jova, hija de cubana su- vamente la guitarra-; Nacho, bajo; Car-
persticiosa y español exiliado, nació en la los, guitarra y voz; una estudiante de con-
ciudad de México en 1963. Catorce años
después era la primera punk de un país
como España, donde ni el rock era cosa de
todos los días ni, aún menos, solían subir a
los escenarios adolescentes vestidas de
pantera. Empujada por las fantasías que
su fervor por Marc Bolan, David Bowie,
` DESEO CARNAL' ESCANDALIZA: EL `PUNK' ESTÁ ASIMILADO POR LA SOCIEDAD,
PERO EL SONIDO FILADELFIA TODAVÍA ESTÁ MAL VISTO" (Carlos García Berlanga)
servatorio, Ana Curra Fernández, a los te- Alaska y los Pegamoides en 1980. De
clados, y un batería inexperto pero batalla- izquierda a derecha: Olvido, Nacho,
dor, Eduardo Benavente (1963). El disco no Carlos y Ana Curra. Falta Eduardo.
se vende demasiado, pero se oye, y editan deja con la boca
otro en marzo de 1981 (Otra dimensión, Bote abierta a todos:
de Colón y Quiero salir). Unos dicen que pla- unos, admirados
gian, otros se quedan con la boca abierta. ante los arreglos
Ellos declaran que quieren ser la comidilla, orquestales, la pul-
y siguen jugando a ser estrellas. cra grabación y
No son un grupo cómodo. Insultan pú- sus excelentes pie-
blicamente a su primer productor (Julián zas, y otros, los
Ruiz), se pelean con Ramoncín, Hispavox puristas, escanda-
rompe los contratos con los problemáticos lizados ante su lí-
Nacho y Eduardo. Surgen roces entre Car- nea convencional
los, que escucha a Jobim y Gershwin, que y lujosa. Cuando
habla de arte y cultura, y el resto del grupo, alcanza la prodi-
cada vez más londinófilo, punky y siniestro. giosa cifra de
Nace Parálisis Permanente como proyecto 300.000 copias
de Benavente y Canut para dar rienda suel- vendidas (un boom
ta a sus inquietudes más góticas; Curra y al que no es ajena
Olvido se visten de luto y componen piezas la presencia de
militares. Las tensiones se hacen cada vez Alaska en el pro-
más fuertes, hay conatos de separación en grama televisivo
Navidad de 1980, y a la vuelta de la minigira La bola de cristal),
del verano, Carlos abandona el grupo, aun- el disgusto de és-
que accede a completar el elepé que llevan tos ya es enorme.
meses grabando en las horas que dejan li- Celosos al tener
bres las estrellas de Hispavox en el estudio que compartir su
de la casa. Al fin y al cabo las canciones son propiedad priva-
suyas, piensa. da, muchos de los
El disco sale en marzo de 1982, algo des- fans más extremis-
pués del primer single de Parálisis -que de tas piensan que se
ser casi una broma ha llegado a convertirse les ha traicionado
en un proyecto serio-; lleva el arrogante tí- y abandonan. Su
tulo de Grandes éxitos y tiene un éxito mode- deserción hace
rado, gracias a que Bailando, el single que se que, dos años más tarde, No es pecado se
extrae, gusta y se oye por todas partes. Car- venda más lentamente, sin el reclamo que
los, mientras, ha formado un grupo, que ellos habían supuesto como espoleta para el
bautiza con el nombre de Dinarama, y lla- público mayoritario. Pero la popularidad de os problemas internos de
ma a Nacho, que tiene que dejar Parálisis, Alaska ya es sólida, y su trascendencia en el su grupo han creado una serie
donde le sustituye Curra. La saga tiene ya mundo de la música, muy importante. de satélites alrededor de
ribetes de fotonovela. Hoy día, Alaska, aunque no dotada para Alaska, entre los cuales destaca
Dinarama graba varias maquetas, prue- el canto, es una intérprete competente, con Parálisis Permanente. Sus
ba varias cantantes y se presenta en directo; destreza y profesionalismo, una mujer po- herederos tras la muerte de
pero sólo cuando, tras la nunca explicada pular requerida para opinar -pese a su as- Eduardo Benavente (1983) se
disolución de Los Pegamoides, en otoño de pecto de ultratumba, resulta razonable y ll amaron Seres Vacíos, y Ana
1982, la muy sensata Alaska se reúne con hasta conservadora-, a la vez que una es- Curra tomó su mando: en
ellos, cobra visos de realidad como grupo. trella con éxito y brillo. Sus discos de oro y 1985 los disolvió, iniciando una
Carlos tiene que ir a la mili y es sustituido platino y su repercusión populachera le han frustrante carrera
temporalmente por Ángel Altolaguirre, ver- valido el reproche de diversos sectores que discográfica con Una noche sin
sión donostiarra de Iggy Pop, un buen guita- quizá no han adivinado que la infradesarro- ti, y volviendo a las andadas.
rrista y técnico de sonido que será el pro- llada escena musical española se ha benefi- Curra y Alaska colaboraron con
ductor del álbum Canciones profanas (1983). ciado de un triunfo comercial de este estilo. Los Nikis en el proyecto
El elepé es considerado como bastante flojo Los hechos hablan por sí mismos: la es- discotequero Negros, SA. Y Los
y fluctúa indeciso entre lo comercial, lo am- cena rockera española cobra visos de reali- Pegamoides fueron los
bicioso, lo discotequero y lo gótico. dad, Alaska busca nuevos mercados en La- acompañantes de Almodóvar y
En 1984, Carlos se reintegra a la vida ci- tinoamérica y tiene una enorme populari- McNamara. También dos de
vil y presenta sus nuevas canciones. A prin- dad sin necesidad de convertirse en bote de l os guitarristas que han pasado
cipios de verano se graba Deseo camal con detergente o de claudicar de sus principios por Dinarama han formado
un productor británico. Cuando se edita -nunca quiso otra cosa que salir en lapren- sus propios grupos: Ángel y Las
sa del corazón-. "Para continuar adelante Guays y Fanny y Los Mas.
me da igual lo que piensa la gente; yo no
estoy en esto por nadie más que por mí.
Hago las cosas que me gustan, y pienso que
por eso van a gustar a los demás". No es
casual que su A quién le importa se haya con-
vertido en una especie de himno.
"SOLÍA PENSAR QUE MADRID ERA EL VACÍO. AHORA CREO QUE ES FRONTERA.
EN LAS FRONTERAS NUNCA DEJAN DE PASAR COSAS" (Santiago Auserón, 1984)
N o deja de ser un
problema carecer de etiquetas,
tener miras amplias y no
unos apabullantes directos y dando for-
ma al esqueleto de lo que será De un país
en llamas (1985). Es éste un elepé mucho
más potente, grabado en Londres con
producción de los músicos británicos Jo
querernos cerrar caminos. Si ADIO FUTURA: Dworniak y Duncan Bridgeman.
mantienes una cierta El cambio estilístico planteado a par-
ambigüedad, comercialmente
es más complicado meterte
EN CONTINUO tir de este disco -hacia una música más
norteamericana, donde quepan apuntes
en un mercado que ya está de blues o reggae, de música latina o
bastante establecido; pero si MOVIMIENTO soul-provoca nuevos cambios en la for-
eres listo y no quieres que mación del grupo: Solrac es sustituido
pasado mañana se te haya JOSÉ LUIS FERNÁNDEZ ABEL por Carlos Torero del Castillo (1964), y
acabado todo, tienes que Radio Futura nació en 1979 de la unión Pedro Navarrete (1962) se incorpora
mantener siempre cierto nivel de un ex estudiante de Filosofía en París como teclista. Registran su último traba-
de misterio" (Santiago Auserón, 1954, voz y guitarra) jo, La canción de Juan Perro (1987), en
y su hermano Luis (1955, bajo), un guita- Nueva York, contando de nuevo en la
Luis Auserón, 1984 rrista proveniente de Kaka de Luxe (En- producción con los buenos oficios de Jo
rique Sierra, 1957) y dos artistas plásti- Dworniak y además con la participación
cos devotos del pop (Herminio Molero, de reputados músicos norteamericanos.
1948, teclados y cajas de ritmo, y Javier El disco tiene una acogida incierta,
P. Grueso, 1956, voz). complicada por los problemas para to-
Prácticamente, son fichados sin ha- car causados por la baja médica de Enri-
ber actuado en vivo. Fascinados por Bo- que Sierra. Sin embargo, la belleza de
wie y Roxy Music, la aparente frivolidad canciones como Annabel Lee o La negra
de sus primeras canciones (Música mo- flor y la inmediatez comercial de 37 gra-
derna, 1980) camuflaba maquiavélicos dos o A cara o cruz dan fe de que Radio
planes de infiltración en un mercado en- Futura, por encima de épocas tenebro-
tonces dominado por el fenómeno fans, sas, deslices e incomprensiones, logra
sin dejar de ser referencia favorita de las seguir acertando en su apuesta por la
vanguardias madrileñas del momento. búsqueda constante, la inquieta explora-
Así hacían su primera aparición en TVE ción y la mejor ambición artística.
de la mano de la ineludible Paloma Cha-
morro en Imágenes, para saludarnos po-
cos meses después desde el infausto
Aplauso.
La estrategia fracasó por no vender
-según criterio de los ejecutivos de His-
pavox- lo suficiente, y llegaron los cam-
"SOMOS LOS QUE LLENAMOS LOS ESTADIOS... / SOMOS LOS QUE NO VAMOS
AL TEATRO / Y SOMOS CARNE DE BAR" (G. Caligari, `Canción del pollino', 1986)
Olvidados por su anterior sello las hadas (1983) y Ya viene el sol (1984) fue-
discográfico, Mecano han revivido ron más desiguales, con temas olvidables y
artística y comercialmente a partir de 1986.
otros de alto nivel como Hawai Bombay;
Barco a Venus o Aire.
Estéticamente, prosiguieron en una línea
un tanto infantil, con portadas de lo más
naif, lo que contribuyó a encasillarles aún
más como grupo adolescente. Las ventas no
fueron tan espectaculares, pero la asombro-
sa facilidad del principal compositor del
grupo y el responsable de su característico
sonido, Nacho Cano (1963), para conseguir
ritmos bailables y melodías que se pegaban
a la memoria con descarada facilidad, man-
tuvo a Mecano en un relativo primer plano
y lo consolidó como grupo de espectro fami-
liar. Tras esta etapa algo gris, en la que in-
cluso coquetearon tardíamente con el soni-
do industrial en el maxi Japón, entraron en
una dinámica de grandes galas por todo el
país, circunstancia que aprovecharon para
publicar un elepé en vivo (1985) un tanto
inútil, ya que no es un grupo que gane un
ápice en directo.
Sus relaciones con la compañía se dete-
rioraron bastante, hasta el punto de llevar-
les a abandonarla, y cuando empezaban a
lindar con la frontera de un cierto olvido
sorprenden a todo el mundo descolgándose
La actividad de los dos con un impecable quinto elepé, Entre el cielo
y el suelo (1986), con Ariola, que no sólo les
hermanos Cano en proyectos vuelve a poner entre los grupos más vendi-
musicales ajenos al grupo es
intensa pero muy diferenciada. ECANO, dos, sino que les granjea una credibilidad
Nacho, que fue el primero en que hasta el momento se les venía discu-
animarse, se inclina ARQUITECTURA tiendo.
Ana Torroja (1960), la menuda y ambi-
especialmente por la ciosa cantante, ha educado su personalísi-
producción y el mecenazgo de
otros grupos como La Unión, INOCENTE ma voz e impone su presencia y su estilo en
las nuevas canciones. Por otra parte, una
Magenta y Betty Troupe. GUILLERMO HERNAIZ cuidada sesión de fotos ofrece una imagen
También compone sintonías Mecano irrumpió en la esquelética escena más madura del grupo, aunque lo más im-
como la de Radio El País o del neopop de los ochenta con el atrevimien pactante es, sin duda, el contenido musical
bandas sonoras -Sal to de no tener que quemar todas las etapas del disco: una colección de canciones de
gorda- y ha grabado un disco del cutrerío para llegar al éxito. Eran niños una sensibilidad y un gusto asombrosos, es-
a medias con Germán de buena familia, grabaron para la poderosa pecialmente en los temas de José María
Coppini. José María, por su CBS y fueron superventas desde el princi- Cano (1960), que parece decidido a abando-
lado, se ha consolidado como un pio, y eso les granjeó la inevitable mala fama nar su papel de compositor ocasional fir-
compositor de encargo y de los que triunfan y un cierto halo sospe- mando los mejores momentos, como Cruz
trabaja para Ana Belén, choso en los círculos de enteradillos. Su im- de navajas, Hijo de la Luna o la vibrante Me
Mocedades, Massiel o pecable primer single. Hoy no me puedo le- cuesta tanto olvidarte. Nacho, pese a repetir
Emmanuel. vantar / Quiero vivir en la ciudad (1980) sonó alguno de sus errores, sube también el nivel
por las ondas hasta la saciedad y abrió paso y hasta se atreve a cantar con un cierto esti-
a una sucesión imparable de hits: Perdido en lo a lo Silvio Rodríguez.
mi habitación, Me colé en una fiesta. . . Funda- Una nueva etapa parece abierta con la
mentos no faltaban, el álbum de debú unanimidad de criticas elogiosas y con la
(1982), pese a la terrible presentación y el apertura del mercado latinoamericano, en el
empachante look new-romantic con el que que han entrado con holgura. La evidencia
quisieron vender al trío, era un compendio de su buen momento ha servido para que
de singles potenciales, una lección de buen por fin se reconozca la solidez e importan-
pop, ligero y ágil, plagado de guiños frívolos cia de su obra.
y urbanos. El éxito de este elepé desató el
fenómeno Mecano, que arrasaría durante
dos años en todo el país. Tan sólo una ins-
trumentación algo gris y fría y unos arreglos
monótonos y llenos de tics tecnos restaron
algo de frescura a este primer trabajo. Los
dos siguientes discos, Dónde está el país de
"¿DÓNDE VA EL `ROCK' ESPAÑOL CON GRUPOS QUE CANTAN 'ME PICA UN HUEVO',
'LAS TETAS DE MI NOVIA' O 'MATAR HIPPIES EN LAS CÍES'?' (Miguel Ríos, 1983)
UN BALANCE DE
LA `NUEVA OLA'
PATRICIA GODES
Hay quien piensa que el rock español nace,
prácticamente, con la nueva ola. Cierta-
mente, éste ha sido el único movimiento
capaz de sobrevivir al paso del tiempo:
sus 10 años de vida contrastan con los tres
o cuatro que, como mucho, aguantaron
sus antecesores. Las causas son económi-
cas, sociales y culturales, y tienen relación
directa con las circunstancias atravesadas
por nuestro país. Sus pioneros vienen de
la clase media o alta, saben idiomas y les
resulta fácil estar al día de las novedades y
tendencias del extranjero. Ese mayor co-
nocimiento les otorga más libertad y posi-
bilidades de huir del mimetismo: así se de-
sarrolla el curioso combinado de ingenio,
originalidad y pura xerocopia que se cono-
ce como nueva ola o movida.
El odio al hippismo senil, las gamberra- la aparición del nuevo romanticismo, que
das de los Sex Pistols y la apariencia que aquí surge hermanado con el tecno más cu-
daba el primer punk anglosajón de ser algo tre. En 1982 llega la onda siniestra con los
nuevo y libre de los lastres del pasado em- primeros discos de antiguos Ejecutivos n pub madrileño, La Vía
pujan a estos chicos y chicas al mundo Agresivos (Gabinete Caligari, Décima Láctea, y el grupo Esplendor
musical. También es un factor decisivo el Víctima, Derribos Arias) y de Parálisis Geométrico fueron los
éxito, en 1978, de Tequila, primer grupo Permanente. Es la primera vez que el pop primeros en editar discos
de rock en español que sube a las listas. español se ocupa de temas como la muer- i ndependientes. A finales de
Cuando Kaka de Luxe, que parecen diver- te, las perversiones, la guerra, el nazismo 1981, Los Nikis dieron un disco
tirse mucho, logran cierta reputación, sus o la religión. Pronto, sin embargo, se con- autofinanciado en un
amigos y seguidores se espolean y forman vierte en patochada, y a su cobijo se forma concierto, animando a Aviador
sus propios grupos. una elite frívolo-intelectual cuyo vehículo Dro, Gabinete Caligari,
Zombies, Mermelada de Lentejas, de expresión más o menos oficial es el pro- Décima Víctima y Parálisis
Mama, Paraíso, Nacha Pop, Los Bólidos, grama televisivo La edad de oro. Se inte- Permanente, gente con
Los Secretos, Alaska y los Pegamoides, gra a pintores, fotógrafos, diseñadores y experiencias discográficas
Radio Futura, Los Elegantes, Aviador cineastas: surge el llamado gualtraperio y frustrantes, a decidirse a
Dro, Ejecutivos Agresivos y Nikis son la se postula la posmodernidad. editar su música por cuenta
primera hornada, entre los años 1978- Los contrarios a la vena artística han propia. A los lanzamientos de
1980. Después, tras los primeros recicla- formado Las Hornadas Irritantes, que DRO, GASA y Lollipop siguió
jes, la adopción del estilo de vida de rock protagonizan discos y festivales muy di- una gran avalancha de sellos
stars y las primeras intervenciones de in- vertidos de puro gamberros. Glutamato i ndependientes. La mayoría han
dustria, críticos y disc jockeys, el fenómeno Ye-Ye, Sindicato Malone, Derribos y Pel- desaparecido, ya que no
se dispara: en enero de 1981 se catalogan vis Turmix son sus representantes, llenos siempre tenían buen producto y
más de 200 grupos entre Madrid, Barcelo- de ganas de molestar y mala uva (Todos los tampoco supieron funcionar
na y provincias. negritos tienen hambre y frío; Dios salve al empresarialmente. Sin
La evolución estilística pasa del heavy lendakari). Radicalizados, al ver el cariz embargo, su labor de
endeble de los primeros escarceos punks al que va tomando la cosa se refugian en un guerrilla fue positiva, animando
revivalismo de los sesenta y el chic de su- tipo de vida bohemia y alcohólico, mien- l as ondas y dando
permercado. Sintetizadores y cajas de rit- tras otra facción lo hace en el rock and roll oportunidad a jóvenes músicos
mos se abaratan y preludian con su uso clásico a partir de las míticas jam sessions de talento.
en el diminuto club Salero. Todo ello aca-
ba en lo que se autodenomina movida
auténtica, que aglutina a los rockers no ce-
rrilles, grupos de garaje, ángeles del infier-
no, nuevos psicodélicos y simples hippio-
sos, que reaparecen aprovechando el caos.
Cuando, en 1978, comenzó todo, no
"QUIERO BAÑARME EN MARES DE RADIO, / CON NUBES DE ESTRONCIO, COBALTO
Y PLUTONIO; / QUIERO TENER ENVOLTURAS DE PLOMO" (Aviador Dro, 'Nuclear, sí')
Tras estrenarse en el rock and roll arcaico, Combinan su vocación comercial con el
Los Coyotes han optado por reivindicar compromiso futurista y radical. Tienen
músicas todavía no aceptadas en España. cuatro elepés: Alas sobre el mundo (1982),
Síntesis, la producción al poder (1983), Cro-
mosoma salvaje (1985) y Ciudadanos del
imperio (1986), divertidos y experimenta-
les a un tiempo, pero lo que les da su
auténtica validez es que junto a la hojaras-
ca ideológica hacen buenas canciones:
Baila la guerra, Selector defrecuencias, Pro-
grama en espiral, La única solución es la
venganza. Algunos miembros han realiza-
do proyectos alternativos: Iniciados, Lu-
nes de Hierro y La Coartada. Además,
han sido los impulsores de la principal
compañía independiente, Discos Radiac-
tivos Organizados (DRO).
Los Coyotes. Fernando Gilavert y Víctor
Aparicio componen el eje de una forma-
ción cambiante con casi 10 años de vida.
Son los responsables de un hallazgo defi-
nitivo: el rock latino, al que llegan en 1983
tras ser pioneros del rockabilly convencio-
nal y el psychobilly. Con 300 kilos inician la
aproximación hacia la América española y
portuguesa. Sus elepés, Mujer y sentimiento
había ningún tipo de infraestructura musi- (198) y Las calientes noches del barrio
cal para el rock, aunque sí un establishment (1987), uno acústico y electrónico el se-
de supervivientes de más de 20 años de gundo, supusieron una alternativa a los
La nueva ola tenía fracasos pop que se habían asentado en la presupuestos del rock español, que lleno
posibilidades comerciales y industria, los medios y los negocios. Natu- de complejos insiste en loar Berlín, Nueva
hubo varios intentos de ralmente, ese núcleo de poder no fue erra- York o Japón, mientras ellos reivindica-
asimilarla para la industria. dicado, y aún peor, a su lado han tomado ban lo macarra y el Tercer Mundo con or-
Quien llegó más lejos fue el posiciones los más afortunados de la movi- gullo, dignidad y talento. Sin embargo, no
productor Jorge Alvarez, que da, alzándose una barrera de intereses han conectado con el gran público.
fracasó con Sissi, y que ha ocultos y mafias satisfechas. El principian-
sabido mantener a Olé Olé. te lo tiene, pues, más crudo que nunca, y el Paco Clavel (1954). Empezó con Clavel i
Estos últimos son los flujo de nuevas ideas es escaso e irregular. Jazmín a finales de los setenta, y represen-
representantes más populares El balance es pesimista: los ídolos son po- ta la faceta camp de la nueva ola. Es un
de una línea de grupos cos y con pies de barro; en la segunda divi- hombre que no teme al ridículo: cantante
frívolos de pop electrónico y sión reina la mediocridad; pocos han po- competente y de gran cultura musical, es
vocación comercial, que dido profesionalizarse, y los últimos nom- un showman desinhibido y comunicativo.
floreció especialmente en bres no logran tener peso. Quizá sean los Su repertorio incluye adaptaciones de éxi-
Valencia (Vídeo, Betty Hombres G, con su prodigiosa populari- tos de revista-Vespa, Vespa-, sintonías
Troupe, Glamour). dad, los únicos que -aparte de la opinión de televisión Reina por un día-, canción
que merezcan sus discos- han hecho rea- española María de la 0-, pop tercer-
lidad los planteamientos de la nueva ola. mundista Marcianita- y composicio-
Algo así como el canto del cisne de un mo- nes propias llenas de guiños a sus ídolos.
vimiento que tiene en su historial nombres A pesar de todo, su carrera discográfica
como los que siguen. ha constituido un rotundo fracaso, que
evidencia la estrechez de miras de la in-
Afphaville. Grupo madrileño de la línea dustria.
culta: citaban a Nietzsche, Nijinski, Ar-
taud, Rimbaud, Godard, Lovecraft y Jim Decibelios. Aunque por sus influencias
Morrison. Grabaron con continuidad de (punk, ska) sean incluidos en el movimien-
1982 a 1984 y produjeron una buena pie- to skinhead, basta la portada de su elepé
za, el intenso Después de la derrota (1984). Vacaciones en el Prat (1986), alarde de hu-
Se separaron en 1985 por problemas per- mor inteligente y carpetovetónico, para
sonales. Su líder, José Luis Fernández ponerles por encima de eslóganes y eti-
Abel, intenta desde entonces funcionar en
solitario.
quetas. Son duros como el pedernal, ági- José María Sanz, alias Loquillo, ha
les, enérgicos y maravillosamente compe- mantenido un talante agitador en discos
tentes. Tienen otros dos elepés: Caldo de y actuaciones.
pollo (1984) y Ol (198); aunque semiprofe- que no falte nada,
sionales, son uno de los escasos grupos son los responsa-
proletarios que exhiben orgullo y concien- bles de un presti-
cia de clase sin caer en los clichés heavy. gioso sello: Gra-
baciones Acci-
Derribos Arias. Mito construido alrededor dentales.
de un excéntrico de San Sebastián, Ignacio
Poch Gasca, y una música tan delirante que Glutamato YeYé.
alucinó al público en 1981-1982 gracias a Irrespetuosos y
temas extravagantes e insólitos como fatuos, su música
Branquias bajo el agua, Vírgenes sangrantes estaba considera-
en el matadero o Tupés en crecimiento. Los da premeditada-
erróneos intentos del grupo por superar su mente ramplona,
minimalismo machacón y la esperanza de pero les salvó la
un reciclaje mayoritario les condujeron a la inteligencia casi
separación, dejando sólo un elepé, En la clarividente de
guía, en el listín (1983). En solitario, Poch que muchas veces
no ha tenido más suerte. hicieron gala. Es-
pecialistas en esa
Danza Invisible. Arrogantes, estos mala- vieja tradición
gueños con aires de nuevos románticos se bohemia que es la
ganaron el favor de la crítica con bravas burla, nadie supo
actuaciones. Desgraciadamente, el públi- a qué carta que-
co nunca compartió ese entusiasmo, y sus darse con cancio-
discos han pasado sin pena ni gloria. Bas- nes como Zorai-
ta para hacerse idea del carácter anglófilo da, La balada de
y esnobista del grupo, saber que pidieron Karen Quinlan,
a la multinacional que les fichó un adelan- Tomamos cerea-
to de 200.000 pesetas para comprar ropa les, Alicia o Todo
en Londres. En los últimos tiempos han va dabuten. Ellos,
renunciado a muchas de sus pretensiones aun después de su
y se han forjado un directo contundente. separación, si-
guen riéndose de
Elegantes. Cuarteto simpático y, a la vez, sus propios chis-
embarazoso. La naturalidad desarmante tes. A su lado,
con que imitan las cosas más prohibitivas Sindicato Malone
(R & B y soul, sobre todo) les redime. En- editaron singles
casillldos, primero, en el movimiento ingeniosos y divertidos con buenos temas
mod, y ahora entre los auténticos, la larga como Owe keh owe, Hot dudu, Sólo por ro-
experiencia que su veteranía les otorga les bar, El millonario y La resaca. Pero, tras
impide encerrarse en los lugares comunes, muchos cambios de miembros y un deses- n contraposición a lo
y han hecho algunas canciones buenas, so- perado deseo de éxito, cavaron su propia ocurrido en los años sesenta, la
bre todo en su primer elepé, Ponte ya a bai- fosa. nueva ola no generó en
lar (1984), que contenía Sal de tu cueva, La Barcelona demasiadas
calle del ritmo y Cerca de ti. Hombres G. Grandes ídolos del público propuestas con peso
más juvenil, cuyo humor, viviencias y esté- específico. Sin embargo, varios
Esclarecidos. Fueron los primeros en ha- tica representan y, a la vez, reflejan en su medios musicales han
cer música adulta frente a las ñoñerías de música. A pesar de su enorme éxito, que seguido las andanzas de un
muchos de sus vecinos de la nueva ola; tie- les ha convertido en fenómeno social, el sinfín de productos, en un
nen pequeños deslices (Pánico en la con- cuarteto sigue editando sus discos en una i ntento de consolidar una
vención de farmacéuticos; Miles, Miles, Mi- compañía poco importante, y ha sido el modernidad musical y
les), junto a grandes aciertos: Arponera y gusto del público y no las grandes campa- competir con Madrid, Vigo o el
Apostar son dos de las mejores canciones ñas de mercadotecnia lo que los ha en- País Vasco. Por el contrario,
españolas de los últimos tiempos. A mitad cumbrado. Su música graciosilla estaba existe, motivada por el éxito de
de camino entre lo existencialista y el he- inspirada inicialmente en el punk gambe- Loquillo, una tendencia
donismo yuppie, son uno de los pocos gru- rro de Siniestro Total y los Nikis, y mues- general al purismo: hay mods
pos respetables: limpios y refinados. Para tra irrefutablemente cuál ha sido la verda- (Brighton 64), rockers
dera trascendencia de este movimiento. (Aurelio y Los Vagabundos), o
Entre sus éxitos se cuentan Marta tiene un psicodélicos (Negativos),
marcapasos, Venezia, Por favor, visite nues- mientras prolifera lo
tro bar, El ataque de las chicas cocodrilo... i nclasificable e insólito
(Desechables, Klamm,
Loquillo y los Trogloditas. José María Claustrofobia).
Sanz (1961) no tiene mucho de cantante,
"LOS PLANTEAMIENTOS DEL 77 SE HAN PERDIDO Y LA GENTE QUE REIVINDICÓ
TODO ESO ESTÁ TOTALMENTE METIDA EN EL 'ESTABLISHMENT" (Loquillo)
Los Hombres G han conocido un éxito lada (1983), Recomendable (198) y Fiebre
desproporcionado para un grupo de (1987).
compañía independiente.
Nikis. Cuando salieron a la luz en 1980
eran sólo unos niños, y hacían música de
niños: letras na f, ritmos rápidos y mucha
energía saltarina. Siempre han hecho no-
tables canciones (Ernesto, Pasión por los
decibelios, Medicina nuclear), en una línea
cercana a los neoyorquinos Ramones, y
sus discos son cada vez mejores, a la vez
que su público ha aumentado. El paso de
los años, sin embargo, ha convertido en
chiste fácil lo que antes era encantador.
Orgullosos de su amateurismo, no se sabe
qué clase de futuro pueden tener, pero
mientras lo que hagan sea divertido, no les
importa ni a ellos. Elepés: Marines a pleno
sol (1985) y Submarines a pleno sol (1987).
NACHA POP
FUERTES SENSACIONES
DIEGO A. MANRIQUE
Fue el debú más prometedor de 1980.
Y no era un disco modélico, ya que el
sonido resultaba endeble a pesar de
los afanes del productor, Teddy Bau-
tista. Nacha Pop recogía la exuberan-
cia anímica del momento en piezas
como Nadie puede parar ("No te asus-
tes del futuro, / ese monstruo no ven-
drá"), pero el elepé se abría con ine-
quívocas palabras de desesperanza
("Por el día, alguien con quien no vi-
vir; / por la noche, alguien con quien
no dormir. / La tristeza en el bolsi-
llo, / la careta de cartón / esperando
que regreses, / antes de que salga el
sol"). En días de la gozosa frivolidad,
Nacha Pop hablaban de sentimientos
zarandeados, vidas taciturnas, pro-
blemas de entendimiento, horas som-
brías. Hacían música madura cuando
el nuevo pop exhibía orgulloso su acné
juvenil.
Los dos guitarristas-cantantes, An-
tonio Vega (1957) y Nacho García
Vega (1961), eran primos. Habían co-
nocido al bajista Carlos Brooking ses duros y recalan en la independiente flejar su amor por la música negra. Pe-
(1961) en el Liceo Francés, por donde DRO, donde editan el tercer álbum, ter McNamee, el ingeniero que ya pro-
pasaron algunos de los futuros locuto- Más números, otras letras (1983), disco dujo el anterior maxi, es el responsable
res de la mítica Onda Dos. Sus prime- incierto de fea portada que mantiene el de abrir el abanico sonoro. Además,
ros grupos dan lugar en 1979 a Nacha impulso del grupo con temas hirientes Nacho G. Vega se destaca como fuerza
Pop, completado al año siguiente con el de Antonio (No puedo mirar, Magia y creativa de primer orden. Empequeñe-
pulso firme de Antonio Nete Martín- precisión, Enganchado a una señal de cido por el fulgor de Antonio, Nacho
Caruana, antiguo batería del grupo re- bus) y algún acierto de Nacho (Como era el autor del material más arrogante
vivalista Zapatón. Adoran el ímpetu de hasta hoy). y alegre del grupo, pero aquí se revela
la nueva ola británica -su sueño es ser La recuperación comienza en 1984 con apabullantes masajes pasionales
producidos por Nick Lowe- y acumu- con un maxi que contiene tres temas y (Grité una noche, Nuevo plan, Sácame).
lan seguidores gracias a la difusión de dos versiones de Una décima de segun- Es este contraste entre las fuentes de
sus maquetas por la mencionada Onda do, opaca reflexión sobre el espacio y el su repertorio y las voces de sus inven-
Dos. Una actuación con los gélidos tiempo desgranada por Antonio Vega. tores lo que da impacto extra a Nacha
Siouxsie and the Banshees evidencia Vuelve a rodar la bola y son recupera- Pop.
su magnetismo, que se ha mantenido a dos por una compañía grande. Dibujos Dirigido por Carlos Narea, El mo-
lo largo de una carrera irregular: éste es animados (1985) responde a las expec- mento (1987) -contiene más de lo mis-
un grupo que despierta intensas pasio- tativas de Polydor, con una decidida mo, aunque con menos hallazgos. No
nes gracias a la polivalente ambigüe- renovación instrumental (vientos, te- faltan canciones memorables (Asustado
dad de sus textos. clados electrónicos) que les permite re- estoy, Persiguiendo sombras), pero se
Fichados por Hispavox, entran con trata de un disco inhóspito. La marcha
buen pie: Chica de ayer es una agridulce de Ñete ha dejado a Nacha Pop en trío
puñalada al corazón y su mayor éxito. (Antonio, Nacho, Carlos), más ayu-
No lo pueden repetir, y las relaciones dantes pagados.
con el sello se empañan. Buena disposi- Alimentado por los chispazos de ge-
ción, su segundo disco grande, no sale HISTORIA DEL `ROCK' nialidad del frágil Antonio Vega y la es-
hasta 1982, con surcos atormentados forzada solidez de su primo, Nacha
que refieren paranoias (Juego sucio), Pop ha seguido un camino lleno de ba-
traiciones (Atrás), desamores (Quiero PRÓXIMO CAPÍTULO ches pero regado por las canciones más
estar mejor) y retratos elípticos (Sonrisa cortantes del pop español de los ochen-
de ganador). Eclipsados por tendencias ta. Un áspero brebaje de alto octanaje
más novedosas, Nacha Pop pasan me- TECHO' emocional.
HISTORIA DEL `ROCK'
Siempre ansioso de novedades, el pop de los setenta se enca-
prichó con los sintetizadores. El posterior abaratamiento de
estos aparatos provocó algo más revolucionario: estimuló a r,
numerosos personajes a crear música. Algunos, como los `'
Devo, envolvieron sus sonidos en conceptos provocativos.
Más pragmáticos fueron los grupos británicos, que renun-
ciaron a los instrumentos convencionales y asaltaron las lis- °
tas de éxitos con canciones rutilantes y una estética fria. Ul-
travox, Thomas Dolby, Depeche Mode y Human League
(en la foto, su vocalista, Phil Oakey) eran, sin embargo, la punta del iceberg; fuera
de los grandes canales quedaron abundantes guerrilleros de la electrónica que si-
guen desarrollando planteamientos radicales.
ECHO'
dulcificaron para tentar el éxito, en años posteriores han
endurecido su Imagen y sonido, acercándose discretamente a temas
escabrosos y adoptando cierta estética Industrial. 42
"LOS SINTETIZADORES SON LOS MÁS POPULARES Y LOS MÁS GRANDES
ELEMENTOS DE LA MÚSICA CONTEMPORÁNEA" (Herble Hancock)
El sintetizador es un
I nstrumento psicoanalítico, es
un Instrumento freudiano. Es E LA
utilizaron sintetizadores, gracias a que
George Martin estaba al tanto de los ex-
perimentos que técnicos de la BBC habían
desarrollado al principio de los años se-
senta. Más tarde, los Byrds, en su álbum
parecido a los electrodos que el The notortous Byrd Brothers, procesaron
neurólogo te pone en la
cabeza para hacerte un
encefalograma, y los
INOCENCIA sus voces con un sintetizador. Y algo muy
parecido hicieron los Doors en 1968, en su
segundo álbum, Strange days. Cuando
resultados son muy parecidos.
Nos sentimos muy
A LA IMPOTENCIA Keith Emerson, de Emerson Lake and
Palmer, empezó a trabajar con Robert
satisfechos con las Moog en sintetizadores de mayor entidad,
posibilidades que el JULIAN RUIZ la era de la música techo había dado sus
sintetizador nos brinda en la Es curioso reconocer que fue Pitágoras primeros pasos. Luego, la locura.
actualidad, aunque quien advirtió los fundamentos de la músi- Tuvieron que pasar muchos años para
esperamos que se avance ca techo o electrónica. Pero es la verdad. que el público del rock estableciese sus
todavía más en ese terreno". Su estudio sobre la vibración de las cuer- conclusiones y encasillara a la música
das, por ejemplo, dominó la evolución de electrónica para bautizarla como techo.
Relf HOtter, Kraftwerk. la música teórica hasta el siglo XVII. Pero Eso ocurrió casi a finales de la década de
fue siglos más tarde cuando se crearon los setenta. Y los reyes, reinas, príncipes y
realmente los cimientos del sintetizador y, princesas fueron Kraftwerk, Yellow Ma-
en definitiva, de la música techo. glc Orchestra, Jean-Michel Jarro, Brian
En París, en 1920, Maurice Martinot, Eno, Ultravox, Human League. En la mú-
al que le llamaban loco, diseñó un teclado sica clásica, nombres como Wendy -an-
que contenía fuentes electrónicamente tes Walter- Carlos y el japonés Tomita.
controladas. En definitiva, las ondas Los reaccionarios empezaron a protes-
Martinot de 1928 y el órgano Hammond tar. Los conservadores miraban con rece-
de 1929 hay que considerarlos realmente lo. Los medrosos incluso supusieron que
como los auténticos precursores de los
sintetizadores. Pero tuvieron que pasar
30 años para que se pudiera crear un ins-
trumento que fuera tocado en tiempo real
y, sobre todo, dominable. Un instrumento
electrónico sobre el que se pudiera ejercer
un control sobre todos los parámetros de
"EL SINTETIZADOR PUEDE SONAR COMO OTRO INSTRUMENTO, PERO ES SóLO
UNA CARICATURA DEL SONIDO ORIGINAL" (Herbert von Karajan)
OH NO!
¡SON DEVO!
SERVANDO CARBALLAR
Algo así tuvo que exclamar más de un
aburrido ejecutivo discográfico al recibir
el primer material de una banda ("la ban-
da de la Devo-lución') cuyas premisas es-
capan al simple contexto de negocio musi-
cal. Esta vez la historia no comienza ni en
Liverpool, ni en Düsseldorf, ni en Los Án-
geles (aunque sí termine en esta ciudad).
La infancia de Devo transcurre en Akron
(Ohio), una ciudad industrial de EE UU,
tránsito y herencia de las grandes empre-
sas automovilísticas de Detroit; una ciu-
dad cuya economía se basa en la fabrica-
ción de llantas para que Estados Unidos
siga rodando. La ciudad ideal para la mu-
tación degenerada que es Devo.
"Are we not men?" (¿no somos noso-
tros hombres?), pregunta el dedo inquisi-
dor de Mark Mothersbaugh desde la car-
peta de su primer elepé; una pregunta que Boy, el norteamericano mutante del futu-
el embrión Devo se hace desde los pupi- ro, un subnormal lúcido, mitad niño, mi-
tres palaciegos de las aulas de la facultad tad obrero especializado. Ruedan una se-
de Medicina. Allí, entre escalpelos, guan- rie de cortos, El hombre que hizo la música, Descienden de monos
tes de plástico, disecciones y análisis, se a los que ponen una banda sonora en la comedores de cerebros. Los
conocen Mark y Jerry Casale, líderes ca- que desuellan el surf, los Rolling Stones, el miembros de Devo
rismáticos de una teoría que arrastra a sus AOR y todo lo que se les pone por delante. aparecieron en Akron (Ohio)
hermanos (Bob Mothersbaugh y Bob Ca- Estos cortos son la sensación de muchos unos años después de que la
sale), así como a un batería pequeño y festivales de aficionados en 1976. Entre bomba atómica acabara la
aparentemente enclenque, Alan Meyers. 1976-1977 graban algún material, y publi- II Guerra Mundial. Por un
A Jerry le encanta leer las convulsivas y can en su propio sello (Boojy Boy-Re- proceso de selección natural, se
desquiciantes obras de los hijos de la pata- cords) y con la distribución de la compa- conocieron y compartieron
flslca de Alfred Jerry, Breton, Tzara. $1 y ñía británica Stiff un single con dos temas l os hábitos de hacer ruido
Mark comienzan a configurar un plan gro- históricos, Jocko homo (una especie de electrónico, ver la televisión y
tesco para dominar su entorno. ¡Basta de himno histriónico y desquiciado) y Mongo- observar a todos los demás
intentar adaptarse a la naturaleza) El futu- loid, o la otra visión de la clase media-gris seres. Lo que vieron a su
ro, el presente, debe ser diferido, deglutido norteamericana. Las actuaciones de Devo alrededor era la Devo-luclón, y
y reciclado por cada cual, debe ser Devo- (dos horas de catarsis ininterrumpida, decidieron llamarse Devo.
rado, Devo-lueionado. Compran instru- donde se revuelcan en placentas plásticas Todos siguen las órdenes de
mentos electrónicos básicos con el ánimo o cunas de bebé, uniformados como los sus códigos genéticos. Son
de transmitir su experiencia personal obreros de su ciudad, moviéndose como robots suburbanos que buscan
(caucho, medicina, vanguardia) y batirla organismos que emiten -no tocan- soni- entretener las formas de vida
a rápida velocidad en una suerte de imita- dos a través de todo su cuerpo) siembran corporativas. Devo cree que la
ción del rock. Lo llaman punk científico. el escándalo. Elaboran eslóganes ("¡Reac- oposición y la rebelión son
La teoría evoluciona y asimila produc- cionar es reaccionario... Devo acciona)") obsoletas. Los más dotados
tos del american way of Iife. El padre de los ante una confusa audiencia que prefiere el sobrevivirán, pero el resto
Mothersbaugh encarna a El General, un show aséptico de los Tubes a semejante puede que también viva"
perfecto americano al que Devo reveren- explosión de sensaciones. Autodeflnlclón de Devo.
cia-caricaturiza. Mark encarna a Boojy Su versión del Satisfaction, de los Sto-
nes (vía Stiff), es un hit en las discotecas
new wave de Nueva York y Londres. Las
grandes compañías se los disputan. Se co-
menta que David Bowie quiere trabajar
con ellos. Finalmente, es el propio Eno
quien les produce, y graban en la RFA (en
los estudios de Conrad Plank, muy ligado
"EL DILEMA DE DEVO ES QUE NOS NUTRIMOS DE LAS COSAS QUE ODIAMOS, DE LA
GENTE QUE COME EN McDONALD'S O COMPRA ROPA POR LA MARCA" (J. Casale, 1982)
A pesar de su relativa
marginalidad, Devo cuentan
con numerosos seguidores.
(1978) es una bomba de relojería, y con-
tiene algunos de los cortes más histéri-
cos y palpitantes de la historia del rock
(Too much paranoias, Praying hands,
Sloopy, Uncontrollable urge). Las guita-
te, superponiendo imágenes de corales
religiosas con revueltas estudiantiles y
explosiones atómicas.
Le sigue Oh, nol It's Devol (!Oh, nol
¡Son Devol) (1982): un elepé plagado de
Así, se ha editado un dIsco rras de Bob Mothersbaugh y Bob Casale humor y pop electrónico que, por asimi-
titulado Devo-teas, donde 12 parten de una concepción espectacular y lado, suena menos radical, pero donde
grupos hacen sus particulares densa, un cruce de Led Zeppelin, MCS, los temas y las ideas brotan en cada
homenajes a los mutantes de Sex Pistola y una lavadora superautomá- surco.
Akron. Nell Young también se tica. La voz de Mark no vacila en aullar, En 1984 editan Shout, disco marcado
cuenta entre sus adeptos: su gritar, declamar, cantar, arengar unos por la nueva generación de sintetizado-
lema "mejor quemarse que textos extraídos de una visión hiperrea- res samplers que decodifican sonidos
enmohecerse" está inspirado lista de la vida cotidiana. Nunca recha- reales. Lo más destacable: la versión del
por Devo, con los que aparece zan el mundo que les rodea, la tecnolo- Are you experienced?, con un impagable
en su película Human gía y el ritmo enloquecido del estrés, vídeo donde Jimi Hendrix vuelve de la
hlghway. sino que se sienten atraídos por la doble tumba para quemar, una vez más, su gui-
vertiente de locura y grandeza de una so- tarra. Desde entonces destacan sus co-
ciedad de la que ellos son magníficos ob- laboraciones en bandas sonoras cinema-
servadores. A pesar de que el disco es un tográficas (Nueve semanas y media, La
gran éxito, no acaban de estar contentos revancha de los novatos, Doctor Detrott,
con la producción. Cambian a Los Ánge- etcétera).
les y efectúan un segundo elepé, Duty now Devo nos dejan, pues, de momento.
for the future (1979), que es una versión Seis discos de los que hacen escuela, de
sedada del anterior. Mejor sonido y te- los que podrían arrollar a todos los que
mas igualmente pertenecientes a los pro- creen que el presente del rock son nona-
líficos primeros años de su carrera. Este gésimas imitaciones de los Byrda, Neil
segundo álbum deja entrever el paso de Young y la Velvet. Una colección de ví-
una primera etapa -en la que con ins- deos, con algunas de las imágenes más
trumentos convencionales (batería, gui- sugestivas y dañinas del rock visual. Y
tarras, bajo y voz) realizan sonidos im- una muestra de cómo ideas y sonido
probables dentro de un contexto rock- pueden cohabitar sin dar lugar a despro-
hacia un segundo capítulo más pop, con pósitos pretenciosos.
un humor más ligero y optimista y un
cada vez mayor predominio de los tecla-
dos. El disco es, sin embargo, un fracaso.
Al igual que su única gira europea, reali-
zada a la par que el lanzamiento de su
tercer elepé, Freedom of choice (1980),
donde la evolución se hace más patente
"DAR A LOS EUROPEOS SINTETIZADORES FUE COMO
DAR WHISKY' A LOS INDIOS" (WIll Rlgby, de los DB's)
Marc Almond (con gorra) y Deve Bel¡ quedaba un breve prólogo punk (Laser) y
hicieron de Soft Cell una fábrica de
morbosos éxitos. un prometedor disco con maquetas de su
recién disuelto trío, Tuberway Army
Thomas Leer. Pio- (1979). En su tercer elepé, Pleasure princi-
nero junto a Ro- pie (1979), estampa ya su seudónimo (con-
bert Rental en tracción de new human); desde entonces,
maniobrar sinteti- con sus retiros, vueltas y dobles en direc-
zadores (The brid- to, lleva más de una docena de álbumes de
ge, 1979), pasa envidiable éxito internacional. Conocedor
años de oscuri- del negocio, ha puesto a sus padres al
dad alternativa frente de sus asuntos; tiene su propia com-
autofinanciada en pañía, (Numa, 1984) y cuida hábilmente el
su etiqueta, Obli- show con originales tubos fluorescentes,
que. Lo rescata palidez facial o galáctico trono móvil entre
una regrabación humos y sintetizadores. En baja en los úl-
de su International timos tiempos, recurre a colaboraciones
(1984), sugestivo con gente como Bill Sharpe (Shakatak).
viaje crítico con
decorado exótico Orchestral Manoeuvres in the Dark. El
que narra la ruta contagio saltarín de Enola Gay, nombre
del opio. Desa- del avión que arrojó la bomba de Hiroshi-
tendidos sus si- ma, o el paseo tristón de Joan of Arc eran
guientes trabajos, imprescindibles en los parques de atrac-
reaparece ahora ciones. Tenían cara de buenos chicos, fa-
como ACT, junto cilidad para los estribillos y una ternura
a Claudia Bruc- dulzona que cautivaba a toda la familia.
ken, de Propa- Melodías de siempre con envase electró-
ganda. nico: el contraste infalible de sus mejores
álbumes (Organization, 1980; Architecture
Bill Nelson. Fra and morality, 1981). Tras embriones como
casa como guitarrista espectacular con los VCL XI, Hitlers Underpanta o ID, Paul
sofisticados Be-Bob Deluxe (1974-1979), Humphreys y Andy McCluskey (multiins-
grupo entre Hendrix y Bowie. Como Red trumentistas) debutan en su Liverpool con
Soft Col¡ dieron la nota Noise, intenta atrapar la chispa del mo- un single independiente (ElecMcity, 1979) y
anómala con sus perversos mento con vano disfraz sintético. Recon- un impretencioso álbum homónimo. Al
dramas de soul-pop vertido en electrócrata solitario, tiene un poco prescinden de Winston (su equipo de
decadente. Non stop erotlc álbum de éxito (Quit dreaming and get on pregrabados), estableciéndose como cuar-
cabaret (1981), título de su the beam, 1981) en su sello, Cocteau, don- teto, sin apearse del éxito entre gratuitos
primer álbum, los definía. de sigue fabricando lujosas carrocerías de devaneos electrohercianos (Dazzle ship,
Salieron de Leeds (1979) para pop inspirado y derivativo (Roxy), con 1983), propósitos de enmienda pop (Junk
dominar las listas posterior barniz oriental. Es popular en culture) o la inercia actual.
I nternacionales con Tralted Japón y ha producido a Skids y los acríli-
love, versión de un tema de cos A Flock of Seagulls. Ultravox. Las premoniciones de Dennis
Gloria Jones, y un prolífico Leight (alias John Fox) serían cruciales.
repertorio (tres elepés y 10 New Music. Cuarteto o trío, eran obra de Integraban imagen plástica, manierismo y
singles) de notorio Impacto. Tony Mansfield. Llevaban buzos blancos y urgencia. Usaban ya sintetizadores inclu-
Dave Ball ponía las máquinas, y pintas de profesores gafosos, pero su músi- so en fases previas como el grupo Tiger
el Incontrolable Marc ca infundía pureza espacial. Emitían lim- Lily (1974). Pero su electro punk (Ultravox,
Almond, una voz emponzoñada pias atmósferas de sintetizadores (Anywhe- 1976) llegó demasiado pronto. El punk no
que rastreaba lo prohibido re, 1981). Sin embargo, las buenas críticas salía aún en titulares, y, cuando la revuelta
-)unto a los desmanes no vendieron sus tres álbumes, que co- punk estalló, ellos se sofisticaron. Dos ál-
pasionales y flamencos de su menzaron ingenuos (1979) y terminaron bumes más tarde, harto de hacerlo todo,
grupo paralelo, Marc and the barrocos (1982). Mansfield se hará más Fox se fue (1979). Midge Ure (ex Slik y
M ambas- y que continuó en rico produciendo al Captain Sensible o a Rich Kids), que andaba en el estudio con
una excéntrica carrera en los B-52's. Visage, aceptó la oferta de los tres super-
solitario, que Incluye un tema vivientes. Rearregló un viejo tema de Fox
en castellano, Cara a cara, Gary Numan. Con un esbelto tecno-glam y (Just for a moment) y lo transformó en su
firmado por El último de la buenas dosis de oportunismo, fue gran es- mayor éxito (Vienna, 1981). La receta si-
Fila. trella con sintéticas imitaciones de Bowie guió con rentables melodramas, pompa
que él mismo tituló Replicas (1979) y una engolada o despistes celtas.
magnética imagen de mutante camaleón
(clánico ejecutivo, cuero y violencia, ma-
quillaje de arroz, etcétera) que evolucio-
naba con su música. Era sólo divulgación
de ideas anteriores, pero en el momento
preciso. Su tema Are friends electric fue nú-
mero uno sin la ayuda de la BBC. Atrás
"EL 'ROCK' HA MUERTO. ME DA VERGÜ ENZA ESCUCHARA BRUCE SPRINGSTEEN,
QUE RECICLA Y RECICLA TAN SÓLO EL PASADO" (Ralf Hutter, de Kraftwerk)
HOMBRES
Y MARCAS
JULIAN RUIZ
Hay que saltar por encima de las máqui-
nas. Detrás de ellas siempre están las per-
sonas, el factor humano. En el nuevo y
apasionante mundo del electro-tecno-sam-
pling hay un margen más que suficiente de
humanidad, aunque la experiencia puede
hacer que se llegue a la creencia de que las
máquinas poseen un extraño corazón que
desemboca en la lógica temperamental.
Por eso, en esta lista, necesariamente bre-
ve, se mezclan nombres de máquinas con
personas, y hombres con marcas. Aquí es-
tán las personalidades de la era tecnoló-
gica.
No es un mundo estrictamente mascu-
lino. Laurle Anderson convulsionó al mun-
do con su O Superman en 1981, con una
secuencia vocal proveniente de un vocoder ca nunca han estado en las listas de éxitos.
que convierte la voz en sintetizador a tra-
vés del voltaje. Nacida en Chicago en
1937, es una investigadora incansable,
creadora de espectáculos multimedia
Así, Robert Moog puede ser considerado
como el auténtico padre de los sintetiza-
dores, ya que fabricó en 1964 el primer
sintetizador comercial. Monofónico, por
H ay gente en Japón que
trabaja con máquinas de
biorritmos: conectas tu pulso,
como su famoso United States, que duraba supuesto. Pero también hizo el primero
siete horas y media, o su último desafío, polifónico, su Poly Moog, y dio paso a to- el latido del corazón, a los
una película llamada Home of the bravo. dos los modernos sintetizadores. Otro movimientos de tus ojos, o la
Ha pasado del mundo de los sintetizado- apellido unido a un aparato es el de Roger respiración a un instrumento
res al mundo de los samplings con una téc- Linn, inventor de la primera batería elec- musical, y ¡estás usando tu
nica prodigiosa. Fue la gran princesa del trónica, la famosa Linn. Antes de él había cuerpo para crear sonidos¡
sampling digital Synclavier y ahora alucina cajas de ritmo; con él se demostró que una Estoy deseando que llegue el
con el sampling de los proletarios, el Akai máquina podía sustituir a un batería, con día que pueda conectar un
S-900. un sonido tan acústico como el natural y electrodo a mi cerebro para
También hay transexuales como que sólo los profesionales podían distin- que brote la música como yo la
Wendy Carlos. Con el nombre de Walter, guir la diferencia. Con el ambicioso pro- pienso".
antes de la operación de cambio de sexo, yecto de su Linn 9.000, que además de ba-
firmó los cimientos de la música tecno, su tería es secuenciador y sampling, pasó Thomas Dolby, 1982.
Switched on bach, creado casi frase a frase apuros económicos, y en la actualidad tra-
en un Moog SS, el padre de todos los sin- baja para una marca japonesa.
tetizadores. Hoy día, casi 20 años después El Fairlight es la criatura de un músico
de aquel disco, es fácil reírse de cómo fue y un ingeniero electrónico, ambos austra-
hecho, dadas las modernas síntesis por or- lianos, que, aplicando técnicas digitales,
denador, pero en 1968 fue el asombro. chips y ordenadores, crearon el prodigioso
Carlos trabajó después con Kubrick, en Fairlight CMI, el primero y más revolucio-
La naranja mecánica, y hasta para la Dis- nario sampling, capaz de grabar cualquier
ney, en Tron. En la actualidad sigue traba- sonido, incluso el de una ballena, meterlo
jando con sintetizadores y rechaza los en el ordenador, modificarlo si se quiere,
samplings. guardarlo digitalmente en memoria y to-
Muchos de los auténticos protagonis- carlo musicalmente en un teclado. Ésta es
tas de la revolución de la música electróni- la síntesis. Pero puede hacer muchas co-
sas más. El primer modelo CMI I apenas
podía capturar una muestra de un par de
segundos. Nueve años después de aquel
primer prototipo, el Fairlight CMI III es
capaz de almacenar muestras de más de
dos minutos.
Tampoco el Synclavier es una persona.
"LO MÁS IMPORTANTE EN LA MÚSICA DE HOY ES MEZCLAR LA
TECNOLOGÍA DIGITAL CON LOS SONIDOS DE SIEMPRE" (Trevor Horn)
El rock gótico (en la foto, Alien Sex roll al tener mayor audacia y oídos más fi-
Fiend) emergió en Londres gracias a
nos que las grandes compañías, ajenos a
discográficas independientes.
los rumores de la calle. Los
padres del invento pueden ser
locales de actuaciones, tien-
das de discos, revistas aventu-
reras, estudios de grabación,
aficionados devotos, renega-
dos de las compañías fuertes
o músicos laboriosos. En la
segunda mitad de los setenta
les une el deseo de dar salida
al extraordinario florecimien-
to de nuevos grupos rebeldes.
Son realistas en lo financiero
(mínimos gastos de funciona-
miento, presupuestos de gra-
bación ajustados), están en
contacto directo con su mer-
cado potencial y desean dar
un corte de mangas a sus es-
cleróticas hermanas mayores.
Tienen en su favor el hecho de
que el Reino Unido sea un te-
rritorio relativamente peque-
ño, en el que -a diferencia de
Estados Unidos- se pueden
establecer redes alternativas
de distribución de cierta efica-
cia, donde tienen enorme in-
fluencia los semanarios musicales (predis-
puestos hacia la novedad y las propuestas
descentralizadoras) y existen amplias mi-
actory es la más norías curiosas. Y dan un vigoroso revol-
enigmática de las cón al mundo musical británico.
i ndependientes británicas. Gran fiebre. Brotan iniciativas en Bel-
Fundada por Tony Wilson, un OLIAT fast (Good Vibrations), Manchester
presentador de televisión, se (Factory), Liverpool (The Zoo), Co-
ha distinguido por tácticas tan
heterodoxas como editar
SE COME A DAVID ventry (2-Tone), Glasgow (Postcard),
Edimburgo (Fast Product) o Londres
discos con bellas portadas en DIEGO A. MANRIQUE (Stiff, Rough Trade, Cherry Red, Mute).
l as que no hay textos que Ya no tienen las compañías independien- Cada una tiene su orientación musical, su
i dentifiquen al artista, o tes aquel empaque de santidad, de cruza- actitud política, sus métodos de funcio-
renunciar a la promoción da contra el corrupto establishment disco- namiento. Las hay oscurantistas, desor-
habitual para dar un toque gráfico. Reducidas a la marginalidad o ganizadas, anarquistas, altamente profe-
exclusivo a determinados convertidas involuntariamente en bancos sionalizadas, ambiciosas, eclécticas o fa-
lanzamientos. Algunos de sus de pruebas de las multinacionales, han náticas, pero su efecto acumulativo es
conceptos han inspirado a asimilado duras lecciones de economía deslumbrante. Oleadas de grupos fla-
compañías como la belga Les empresarial o se han contagiado del ansia mantes salen al mercado con ofertas iné-
Disques du Crépuscule o la de triunfo que define el momento presen- ditas. Hay margen para locuras dentro de
española Nuevos Medios. te. Sin embargo, no es posible minimizar la concepción del pop como negocio lúdi-
su aportación, sobre todo en el Reino co: se lanzan singles dobles o plásticos en-
Unido. Por las independientes han pasa- vueltos en disparatadas fundas, se juega
do luminarias como Police, U-2, Simple con el afán de los coleccionistas por te-
Minds, Elvis Costello, Adam & The nerlo todo; Cherry Red llega a comercia-
Ants, Human League, UB 40 y 100 más.
Gracias a su existencia han prosperado la
new wave, el ska, el tecno, los sonidos in-
dustriales, el punk positivo, el rock gótico,
el electro funk, el nuevo heavy metal y todo
tipo de aleaciones o resurrecciones nos-
tálgicas.
Las indies surgen como movimiento
compacto en los días del punk. Recogen el
testigo de sellos míticos (Sun, Chess, At-
lantic, Specialty) que propiciaron en los
años cincuenta la irrupción del rock and
"LAS INDEPENDIENTES DICEN QUE SON ÚNICAS, QUE SON PURAS, PERO SI
VENDEN SE DEJAN ABSORBER POR LAS GRANDES" (Dave Robinson, sello Stiff, 1984)
Morrissey (con camisa de lunares) y (bajo) y Mike Joyce (batería); con la ex-
Johnny Marr pusieron el peso de los cepción del último, militante en oscuros
Smiths para relanzar a Sandie Shaw. grupos punks, ninguno atesoraba excesiva
experiencia musical.
La atención sobre el grupo se centra
desde el inicio en Morrissey: solitario e in-
trovertido, narcisista y defensor del celi-
bato, vegetariano y exhibicionista, charla-
tán y mitómano. Contradictorio. Polémi-
co. La naturalidad y la emoción son sus
armas. Morrissey habla de soledad, inco-
municación y desengaño amoroso. Relata
en viñetas cotidianas las partes más grises
de la vida de provincias y recrea sucesos
locales teñidos de una agria ironía. Los
imaginativos y nítidos dibujos sonoros de
Marr, con su extraordinaria técnica guita-
rrística, aportan el contrapunto perfecto
para conjugar en canciones ágiles y comu-
nicativas fogonazos de pop directo, ro-
mántico y enérgico. Una regeneración en
toda regla de una brillante y casi perdida
tradición de música inglesa.
Unas sesiones radiofónicas en el pro-
grama de John Peel en la BBC convierten
a los Smiths en una banda comentada. En
1983 firman contrato con la independiente
Rough Trade y sus dos primeros singles,
Hand in glove y This charming man, les re-
portan sendos triunfos y una desmesurada
expectación. No defraudan. Su primer ál-
bum, The Smiths (1984), es una admirable
obra que encierra toda su filosofia a través
de bellísimas baladas quejumbrosas y de
briosos retales de rock vibrante y podero-
so. Sus siguientes entregas, Meat is murder
(1985) y The queen is dead (1986), lejos de
mostrarlos acomodados, los presentan
cada vez más maduros. El tan criticado
amaneramiento vocal de Morrissey se
desvanece y su garganta se descubre más
La admiración de eficaz que nunca acompañando las inago-
Morrissey por la estética y tables composiciones de Marr. Entre elepé
ciertas músicas de los y elepé, un reguero de rotundos singles que
sesenta lo llevó a recuperar en HE SMITHS, se recopilan en Haful of hollow (1984) y
1984, con éxito, a Sandie The world won't listen (1987); para el reacio
Shaw. La cantante volvió a los CEGADORAS mercado de EE UU editan un doble de
charts con tres canciones de grandes éxitos, Louder than bombs (1987).
Morrissey-Marr y el respaldo El precio de un triunfo tan indiscutible
i nstrumental de los Smiths. LUCES DEL NORTE se paga. El cuarteto se convierte en la dia-
Igualmente, Morrissey utiliza las JUAN CERVERA na favorita de un sector de crítica intransi-
cubiertas de los discos para Es poco probable que los asistentes a la gente. Son acusados en diversos momen-
dar rienda suelta a su primera actuación pública de los Smiths, tos de su carrera de pederastas, machis-
mitomanía: Terence Stamp, celebrada el 4 de octubre de 1982 en el tas, racistas y homosexuales, pero la ima-
James Dean, Jean Marais, Jose club Hacienda de Manchester, como telo- gen y creatividad de la banda no se resien-
Dallesandro, Alain Delon, neros, intuyeran que estaban presencian- te en absoluto. Si exceptuamos el corto
Truman Capote o Elvis Presley do el debú de uno de los fenómenos más abandono de Andy Rourke, sustituido
han prestado su imagen a la destacables del pop británico. temporalmente por Craig Gannon, el
música del grupo. Anterior a esta aventura, Steven Pa- cuarteto continúa cohesionado y sin fre-
trick Morrissey (voz, letras) había intenta- nar en su febril actividad. El inminente
do, sin fortuna, hacerse con un lugar en el trasvase a una multinacional (EMI) no pa-
mundo del periodismo musical. Johnny rece que vaya a rebajar el siempre alto ni-
Marr -nacido John Maher- (guitarras, vel. Luces del norte en el sombrío panora-
música) halló en Morrissey el apoyo idó- ma de los ochenta.
neo para concretar en canciones las melo-
días que surgían de su guitarra. La base
rítmica se completaría con Andy Rourke
"LIVERPOOL ES UN LUGAR DE PANDILLAS, MUY INSULAR. TODOS
NOS DESPRECIAMOS MUTUAMENTE EN BROMA" (Julian Cope)
El
tralia, Europa y su propio país. Después de nuevo al escaparate del pop con temas
de un lapso creativo en el que recargan su tan redondos como Trampolene. Sólo falta
inspiración, publican el penetrante Porcu- que sustituya a algunos majaderos que
cielo parece lleno pine (1983), disco áspero y ejemplar del normalmente ocupan los primeros pues-
cuando estás en la cuna. / La que se extraen como singles un par de can- tos de las listas para que este mundo sea
ll uvia caerá y lavará tus ciones, The cutter y The back of love, donde un poco más justo.
sueños. / Las estrellas son demuestran que han estado puliendo su El renacimiento de Liverpool, no obs-
estrellas y brillan con fuerza. / arte. Con Ocean rain, que sale al año si- tante, no hubiera sido posible sin la apor-
Ahora le escupes al cielo guiente, rebajan el impacto de su sonido y tación de propuestas más vendibles, cuya
porque está vacío. / Y hueco, tienden hacia un lirismo ingenuo que les más reciente expresión la encontramos en
y todos tus sueños han sido gana la antipatía de un sector de la crítica. Frankie goes to Hollywood. Grupos como
puestos a secar. / Las Desde entonces se han limitado a reciclar Orchestral Manoeuvres in the Dark (que
estrellas son estrellas y brillan sus canciones más conocidas en un reco- han diluido su inicial afán experimental en
tan fríamente" (Stars are pilatorio al uso, manteniéndose alejados tonadas insípidas), Dead or Alive (el circo
stars, McCulloch, Sergeant, del mundillo musical, hasta volver en el regentado por una criatura tan exuberante
Pattison, De Freitas). verano de 1987, como si no se hubieran y bizarra como Pete Bums), A Flock of
marchado, en muestra de su total confian- Seagulls (sonidos tecnocosméticos que
za en sí mismos. únicamente lograron embaucar al público
La historia del divino Julian Cope y de norteamericano) y China Crisis (quienes
su primera encarnación como cantante de no han dudado en ir transformando las
The Teardrop Explodes es bastante más enseñanzas de Bowie-Eno en Low para
compleja. Cope es un personaje excéntri- llegar a un sonido pastoral sólo apto para
co, ególatra, genial a ratos y muchas cosas hemofílicos). Un abanico de grupos y
más. Galés de nacimiento, pero estudiante nombres de muy diversa índole que en
en Liverpool, formó el grupo en el otoño conjunto han devuelto al mapa del pop la
de 1978 con Paul Simpson (guitarra), ciudad que vio nacer a los Beatles.
Mike Finkler (guitarra) y Gary Dwyer
(batería); él se encargaba del bajo. Con su
segundo single, Bouncing babies, publicado
"LA CLAVE ES QUE SONAMOS MUY HUMANOS, SIN GRANDILOCUENCIAS
DE SUPERESTRELLA NI LÁGRIMAS INTIMISTAS" (Roddy Frame)
MIRANDO
HACIA ATRÁS SIN EA
SANTI CARRILLO
Todo empezó con Colossal youth (1980), el
primer y único elepé de un trío de jóvenes
galeses de Cardiff con serios atisbos de
minimalismo en sus notas. Los hermanos
Moxham, Stuart y Philip, y la dulce Alison
Statton redujeron los esquemas musicales
de Young Marble Giants a una escueta ex-
presión: lo exiguo como garantía de crea-
ción depurada, nuevo descubrimiento en
el pop británico de los ochenta. La apari-
ción por generación espontánea de los Jó-
venes Gigantes de Mármol, radiografian-
do hipnóticamente lo más básico del pop,
es referencia obligada para la variété, los
grupos posteriores que encauzaron toda-
vía mejor este camino: pasión, pero tam-
bién distanciamiento, obsesiones particu-
lares de épocas, sonidos y artistas rescata-
dos con nostalgia y bastante buen gusto.
Sin la teórica frialdad de los Young
Marble Giants, los hermanos Moxham se
aventuraron a seguir gestando inmarchi-
tables gotas de pop con The Gist (Embrace
the herd, 1983), su nuevo proyecto: la evo-
lución de lo na f como fórmula en tren de
El
(guitarra), quien, junto a un viejo zorro del
desarrollo. Alison Statton, la cantante, jazz británico, Larry Stabbins (saxo), y a
encontró en Weekend el medio ideal para una cantante experimentada, Julie Ro-
berts, dan vida a una empresa hinchada productor Robin Millar,
desentumecer sus caricias vocales a base
de quiebros tomados del jazz, los ritmos de temperamento y compromiso: Working un músico cuya casi total
latinos y la cimbreante bossa nova. Un tex- Week. Con dos elepés ( mejor Working ceguera no le ha impedido
to en la contraportada de su elepé La va- nights, 1985, que Compañeros, 1986) de- dominar los secretos del
riété (1983) da la clave al respecto: "La va- muestran manejar más jazz por estría vi- estudio de grabación, fue el
riété, término francés empleado en la radio nilizada que sus antecesores: orquestacio- artífice fundamental de los
popular, designa a todo lo que no es rock nes fogosas, impulsos desbocados, vigor y orígenes y consolidación de
fuerte; música facturada con ánimo de di- movimiento, más robustez en las formas. l a onda jazzy. Sus producciones
versidad y profundidad". El espíritu de la Todo lo contrario a la saga Everything But para Weekend (La variété),
onda suave u onda jazzy quedaba instaura- The Girl, tierna pareja formada por Ben Working Week (Working
do. Todos en busca de un estilo, de un to- Watt y Tracey Thorn, que emprende su nights), Everything But The
que de clase. La (pretendida) exquisitez camino con una apropiación del Night and Girl (Eden y Love not money),
de planteamientos de los estilistas -segui- day, de Cole Porter. Doble afirmación: la Sade y Fine Young Cannibals
dores del Bryan Ferry de esmoquin- los referencia eterna (una garantía) y la apor- coincidieron con un momento
aleja del rock como ejercicio musical; pre- tación personal (una valiente y sedosa de esplendor de esta
fieren dirigirse hacia fusiones y mestizajes reinterpretación). Ya con tres elepés a sus revitalización de las formas
enriquecidos con la chispa de lo conocido espaldas, han ido debilitándose en sus ap- suaves. Un sonido ya
y el riesgo de la incógnita. Jazz, ecos afri- titudes al no acomodarse a su suerte ini- aceptado plenamente: son
canos u orientales, suavidades tropicales, cial e incorporar, con menor fortuna, gui- muchos los elepés de éxito
soul ocasional, swing cadencioso, tiempo tarras correosas (Love not money, 1985) y con al menos un tema de
de reggae... El cóctel dispuesto para ir sa- violines inconvenientes (Baby, the stars shi- ambiente jazz (contrabajo,
boreando posiciones en busca del carné ne bright, 1986) al relajado acierto de su saxo, batería tocada con
de artesanos-de-la-canción. primer trabajo (Eden, 1984). Ben Watt y escobillas).
Y Weekend apuntalando el primer Tracey Thorn en solitario, y ella, además,
paso en un eslabón encadenado de indivi- dentro del trío femenino Marine Girls,
duos-motores. De ahí surge Simon Booth han contribuido a extender su particular
bucolismo otoñal a través de canciones
que entroncan con la tradición de folk sin-
gers crepusculares. Talante acústico que
"CUANDO UN ARTISTA DE `FOLK' SALE A TOCAR CON SU GUITARRA PIENSA QUE
ES JAMES TAYLOR O BOB DYLAN; YO PIENSO QUE SOY THE CLASH" (Billy Bragg)
CANTERA
DE IDEAS
J. MARTA REY
La sólida infraestructura del circuito inde-
pendiente inglés, propiciado por la new
wave, fomenta una visión del pop diferente,
alternativa a la del mercado oficial, crean-
do un proverbial antagonismo entre indies
(independientes) y multinacionales. Dos
conceptos opuestos con un mismo fin:
vender discos. Sin menoscabo para artis-
tas que trabajan a gusto en la dinámica de
las grandes compañías, es en la oferta in-
die donde asoma mayor creatividad e
ideas de futuro, que las grandes rentabili-
zan muchas veces apropiándose de artis-
tas ya instalados -con el consiguiente
ahorro- utilizando la labor de las peque-
ñas como banco de cultivo.
Aunque parece existir un techo de ven-
tas, especialmente en la proyección inter-
nacional de los grupos, lo cierto es que el
engranaje indie funciona perfectamente.
Son cientos de sellos, por libre o agrupa-
dos en competentes distribuidoras. Dis-
ponen de sus propias listas de ventas pa-
ralelas, compitiendo con cifras de envidia.
Su base es el pop alternativo. Artistas y
grupos que se multiplican y renuevan en
un hervidero de estilos, fanatismos fuga- siones de Ziggy Stardust y Telegram Sam.
ces o modas excéntricas que llegan a tras- El desgaste y éxito denegado les disgregó
cender su ámbito minoritario. A su alrede- en 1983. Peter Murphy anunciaría casetes
dor surgen cultos, capillas o simple interés y, tras su efímero Dali's Car, trabaja en I circuito independiente
por la novedad, pero conforman una filo- solitario. David J. (bajo) se reveló como fue hábitat y portavoz de los
sofía de exigencia -¿autenticidad?- ante un Leonard Cohen eléctrico hasta unirse a góticos, hijastros de Siouxie
el proceso creativo del pop, presente en los Tones on Tail de As y Kevin Askins and the Banshees, que pusieron
nombres como los que siguen y docenas (batería), que, como Love and Rockets, de moda el luto, las mallas y el
más de menor suerte: inauguran el reciclaje hippie con acústicas cuero. Se exhibían en clubes
morosas y ecos de Pink Floyd. como el Batcave. Specimen
Bauhaus. Preceptores del after punk góti- eran la banda de la casa. Flesh
co, nunca vendieron muchos discos, pero BAD (Big Audio Dinamite). Escaldado del for Lulu falsificaban los
sí tremenda imagen e influencia. Daniel redentorismo tras su expulsión de Clas, sesenta con morbo glam y
Ash estrangulaba inquietantes crujidos a Mick Jones contraataca con una original afiladas guitarras. Más
su guitarra, y Peter Murphy reencarnaba mutación defunk-rock frío y disciplinas au- l óbregos y atormentados
el magnetismo andrógino de Bowie, con tómatas de sorprendente relajo caribeño. sonaban Sex Gang Children.
quien actúan en el filme The Hunger. Las Son instantáneas ácidas y excelentes me- Y Danse Society acabaron
criptas de Norhampton les conocían antes lodías que cuentan con el ingenio e ironía siendo pop. Lo mejor fue
como Craze. Pero rebautizados de cultura del cineasta y ex disc jockey del Roxy (his- Sisters of Mercy; sus
europea (1978) vendían vanguardia, aun- tórico garito punk) Don Letts, uno de los atmósferas eléctricas de
que sus discos fueran fiestas lóbregas con dos negros del quinteto. Él activa la ac- fatalismo frío no necesitaban
los fantasmas del pasado (Bowie, Bo- ción intercalando scratchs y pregrabados maquillarse ojeras. De ellos
lan...) y empacho de terror peliculero. A electrónicos, extraídos de la subculta surgirían The Mission.
su primer maxi, el truculento Bela Lugosi's audiovisual, en sus dos ascendentes ele-
dead (1979), siguieron cuatro álbumes de pés: This is B A D (1985) y N°- 10 Upping
congoja nihilista y un paquete de más me- Street (1987).
morizables sencillos, destacando sus ver-
Blow Monkeys. Para ser diferentes nacen
en la multinacional RCA, a la que Bruce
Howard (alias Dr. Robert) vende un pro-
"VOY A PONERME EN EL LADO GANADOR, ACOMODARME. / HE METIDO UN NUEVO
GOL, / VOY A CAMBIAR, / A DONDE EL DINERO MANDA" (`This is not a love song', PIL)
Jesus & Mary Chain han sido el más nales (Suráfrica, Nicaragua...). Editan
i mpactante lanzamiento del sello
i ndependiente Creation. equilibradas auscultaciones, más cerca de
los sentimientos que de las
ideologías, enviadas por co-
rreo desde Liverpool por su
letrista galés (Mike Jones), a
las que Steve Skaith (guitarra
y uno de los tres vocalistas)
pone gasa sonora de cosmo-
polita fluidez (reggae, rock,
funk, pop) desde 1983. Serían
descubiertos en Europa gra-
cias a Radio África y un sucu-
lento primer álbum, Modern ti-
mes (1985), al que Mick and
Caroline (1987) no aventaja,
aun incluyendo gemas sinuo-
sas como Nomzamo, home-
naje a Winnie Mandela.
ness. Peter Pan de la era Reagan, Michael Antiguos punks, los Beastie Boys
puede permitirse desmarcarse racialmen- triunfan en 1987 con una explosiva
te reconstruyendo su nariz, boca, pómulos mezcla de rap y heavy metal.
y cabellera en busca de facciones más
acordes con los módulos grecolatinos.
Los máximos triunfadores de los
ochenta organizan férreamente sus carre-
ras alrededor del crossover. Y aprenden de
sus errores: Prince, rechazado cerrilmente
por los seguidores de los Rolling Stones
en 1981, seduce luego al público del rock
con sus invocaciones a Jimi Hendrix, una
película cruda que sublima su agitada bio-
grafía y una política de hedonismo sexual
que contrasta vivamente con el puritanis-
mo de Jackson. Apenas concede entrevis-
tas, por aquello de la aureola enigmática,
pero sus subordinados se encargan de
deshacer mitos explicando que no es ho-
mosexual ni admite las drogas.
Para Prince, todo es trabajo. Y algo así
ocurre con Madonna. Su resuelta volun-
tad de triunfar podría llegar a espantar a
los más hambrientos chicos de Fama. No
tiene grandes recursos artísticos, pero ex-
prime hasta la última gota de su erotismo
y personalidad. Y no se entienda eso como Arthur Baker, John Jellybean Benítez, Bill
una recriminación: al menos ella es un
personaje más sugerente que Prince o Mi-
chael, encerrados en sus propias jaulas
doradas. Una chica emancipada, pero con
Laswell, François Kevorkian o John
Luongo pueden remezclar al gusto de las
pistas de baile discos confeccionados por
otros productores, revivir las fortunas dis-
El crossover de ideas
entre músicos blancos y negros
hace que un rapper como
rastros de su educación en colegio de cográficas de desorientadas estrellas del
monjas, que combina feminidad con dure- rock, dar forma monumental a los sueños Afrika Bambaata construya sus
za, romántica a la vez que interesada, ma- de humildes chicos del Bronx o grabar proclamas sobre retazos de
terialista y aventurera, tan disciplinada bajo sus propios nombres o con modestos éxitos tecno de Kraftwerk, Gary
como independiente. Dificil resistirse a su seudónimos. Ellos redefinen diariamente Numan o la Yellow Magic
poder de subyugación o al deseo de anali- los parámetros de la música de baile. Orchestra; sus vecinos de Run-
zarla despiadadamente. Es el latido del momento. Rock y funk y DMC han combinado el pulso
Madonna también es una maestra del tecno en variadas dosis. En términos gene- del Bronx con guitarras heavy.
camaleonismo musical. Debuta con insípi- rales, la dance music tiene un impacto salu- Herbie Hancock reconoce
dos trapos discotequeros, pero endurece dable al desintegrar prejuicios y falsas que su interés por el hip-hop
su envoltorio con funk cincelado por el fronteras. Efecto más que saludable para neoyorquino vino a través de
productor Nile Rodgers, sin descuidar al- los artistas que han podido evadirse de l os discos del británico Malcolm
gún achuchón melódico, recuerdos a los agobiantes categorías raciales y tomar la McLaren. Y no faltan los
grupos de chicas o pop adhesivo con estribi- autopista hacia Beverly Hills. Aunque eso plagios, algunos tan evidentes
llos en español. Nile Rodgers milita en un suponga, en muchos casos, la renuncia de como Ghostbusters (Ray
regimiento de sagaces artesanos neoyor- su individualidad a las leyes del crossover. Parker) con respecto a I want a
quinos que saben refinar los inventos del El dilema no está entre encastillarse o new drug (Huey Lewis and the
gueto para consumo masivo. Rodgers, venderse. Todos los intérpretes quieren News).
venderse lo mejor posible. El problema
está en la magnitud de la contrapartida. Y
son muchos los posibles platos de lente-
jas. Unos se degradan en clips promocio-
nales o se autoparodian en spots publicita-
rios en pro de una bebida o un vehículo.
Otros ponen su talento al servicio del cine
juvenil de los ochenta, concebido con mó-
dulos musicales.
Y nada puede sorprender: estimados
jazzmen se ponen al servicio de Sting,
mientras una sacerdotisa de la negritud
como Tina Turner abjura del soul para
vestir modelitos de rock confeccionados
por músicos británicos. Una Babel de esti-
los y ambiciones: el continente del crosso-
ver, parque tecnológico de la moderna mú-
sica de baile.
"LA MÚSICA NEGRA HA SIDO SEGUNDO VIOLÍN DEMASIADO TIEMPO, PESE A SER EL MOTOR
DEL 'POP'; MICHAEL JACKSON HA CONECTADO CON TODO EL MUNDO" (Quincy Jones)
Michael Jackson, en los años restos del hombre elefante y vivir 150 años,
ochenta, tras la operación deja pasar media década sin editar un dis-
que cambió su cara. co y cuando lo hace es una cancioncilla
vulgar de letra insustancial que titula I just
can't stop loving you. Michael Jackson es
sin duda víctima de su propio triunfo e in-
directamente de su propio talento.
Porque, no cabe duda, lo tiene. Es el
dueño de una voz personalísima, vibrante,
potente, con amplio registro, muy bien en-
trenada y con un estilo inconfundible con
el que ha sido capaz de conmover a todo
el mundo. Desde niño, su vida estuvo en-
caminada a ese éxito que llegó de una ma-
nera desmesurada.
Jackson empezó a cantar profesional-
mente a los cuatro años: su dinamismo y
grandes dotes musicales lo convirtieron
en el centro del grupo que formaba con
sus cuatro hermanos mayores, The Jack-
son 5. La familia Jackson vivía en Gary
(Indiana), ciudad llamada del pecado por-
que servía de escondite a los habitantes de
Chicago y del resto del estado, y a sus vi-
cios secretos. La madre, Katherine, con
nueve niños -cinco de ellos formaban el
grupo- era una oriunda de Alabama,
mientras su marido, Joe, provenía de Ten-
nessee. Ambos apoyaron la vocación mu-
sical de sus hijos varones para apartarles
de la calle y sus peligros en una ciudad de
vida tan poco recomendable.
El grupo ganaba todos los concursos a
los que se presentaban gracias al encanto,
desparpajo y sorprendente savoir -faire de
su pequeño líder. Ya en la mitad de los se-
senta grabaron dos singles para la marca
Steel Town Records (I'm a big boy now y
You don't have to be over 21) que son encan-
tadores, pero poco contundentes; de ahí
que no fueran éxito.
La cantante y diva negra Diana Ross
quedó prendada de los niños, y cuando les
ficha la poderosa Motown -donde real-
mente se presentaron por consejo de
Casi todos los Gladys Knight and the Pips-, actuó
hermanos Jackson han iniciado como su madrina. El primer elepé de Jac-
carreras en solitario. La más ICHAEL kie (1951), Tito (1953), Jermaine (1954),
sólida es la de Jermaine, con 11 Marlon (1957) y de Michael se llamaba
elepés y un par de clásicos Diana Ross presents The Jackson S e incluía
(Let's be young tonight y Let's
get serious) a sus espaldas; le
JACKSOH, EL ALTO su primer gran éxito, I want you back, que
había sido editado a finales de 1969 y
sigue la benjamina, Janet, con PRECIO DE LA FAMA triunfó plenamente, iniciando oficialmente
dos discos más, destacando una nueva etapa en la música negra. Adiós
el popularísimo Control, de PATRICIA GODES al entrañable primitivismo de los clásicos,
1986. También Jackie lo Ser famoso, tener éxito y triunfar son los hola a las nuevas generaciones educadas y
intentó en 1973, al igual que las objetivos de todos los entertainers, cantan- bien alimentadas.
otras dos hermanas, Latoya y tes, artistas e intérpretes. Michael Joseph Dadas las edades de sus intérpretes,
Rebbie. Incluso Randy sacó en Jackson (1958) lo ha conseguido de la ma- sus primeros discos eran un producto per-
1973 un single, How can I be nera más absoluta -40 millones de com- fecto para los adolescentes del momento,
sure. pradores de su Thriller sirven de prueba-, pero, analizados a posteriori, tienen ese sa-
pero el éxito no ha resultado demasiado bor algo amargo que deja la madurez pre-
conveniente para él. Las noticias de sus cozmente adquirida; los niños Jackson ha-
extravagancias llenan las páginas de la bían recorrido EE UU de punta a punta
prensa sensacionalista: el cantante vive
aislado del mundo en su mansión de Enci-
no (California), se empeña en adquirir los
"DICEN QUE ES `GAY': ESO ESTÁ CONTRA LA BIBLIA, CONTRA
SU RELIGIÓN Y CONTRA DIOS. MICHAEL NO ES 'GAY" (Joe Jackson, su padre).
Lejos de la típica cantante manipulada, sical de los ochenta por excelencia, un fe-
Madonna ha dirigido su carrera con nómeno de voluptuosa imagen pública. Su
determinación. voz da vida a felices temas pop con esque-
leto funky que hablan de chicas ricas, chi-
cas inmaculadas y danzarinas nocturnas
que encandilan.
Como buen productor que presume de
self--made, Madonna conjura las penurias
de su pasado en cada entrevista. De raíces
italianas y familia humilde, nació en De-
troit (1958), compartió su infancia con sie-
te hermanos, a los seis años perdió a su
madre y posteriormente aborreció a su
madrastra. Aprendiz de bailarina, se tras-
lada a Nueva York en 1978, respaldada
por su camarada Steve Bray (músico y
compositor), el cual firma canciones que
la harían fichar por Sire Records.
Lanzada como dulce discotequero,
Madonna (1983) es un correcto elepé de
piezas bailables que no consigue hacerla
despegar del todo. Experta en rodearse de
útiles compañías (su nuevo productor y
novio, el mezclador John Jellybean Bení-
tez), que sabe reemplazar a tiempo, su pri-
mer gran impacto llega con el sencillo Ho-
liday (1984). El resto consiste en dar los
pasos convenientes: reputado productor
para su nuevo álbum (Nile Rodgers y Like
a Virgin, respectivamente); fomentar una
rentable imagen de rubia-explosiva-pero-
ingenua a través de sus videoclips, y apro-
vechar su participación en un filme de
bajo presupuesto, Buscando a Susan deses-
peradamente, anunciado como catalizador
del estereotipo Madonna. La madonnama-
nía se adueña de medio planeta a lo largo
de 1985, mientras sus discos se venden a
razón de 75.000 copias diarias.
Megaestrella indiscutible, insiste en
convertir su ascenso en un evento espec-
tacular. Flirtea con Prince, Don Johnson y
David Lee Roth, pero termina casándose
con un actor de dudoso futuro (Sean
Penn), y, calculadora que es ella, ni siquie-
ra se inmuta cuando Penthouse y Playboy
publican añejos desnudos de la estrella.
A pesar de ser la artista femenina más
C uando estaba
creciendo, recuerdo que me
gustaba mi cuerpo. Ahora,
vendedora en la historia del pop, fracasa
con su siguiente película (Shangai surprise)
de un modo estrepitoso -lo suyo no es el
melodrama-, de tal manera que hasta las
ventas de su tercer elepé (True blue, 1986)
cuando publican desnudos ADONNA, se ven frenadas durante algunos meses.
míos, no me produce ningún Con el single La isla Bonita vuelve a insta-
larse en la cima de las listas de éxitos y,
sobresalto: no me avergüenzo JUGUETE CARNAL aprendida la lección, reincide en un papel
de nada de lo que he hecho.
Desde que era una niña supe RAFA CERVERA de cándida fémina envuelta en problemas
que ser chica me daba un El nombre de Madonna Louise Ciccone para su nueva incursión cinematográfica,
montón de posibilidades. Penas está unido a rimbombantes califica- Who's that girl, que la mantiene junto a la
Carecía de inhibiciones: si me tivos, se debe a respetables récords de homónima canción- en el candelero. Con
gustaba un chico, se lo ventas discográficas y es sinónimo de la más empeño que cualidades, Madonna es
planteaba directamente" consagración de una gran ambición que el prototipo de ídolo para esta década; un
triunfa sobre unas modestas cuotas de ta- fenómeno que brilla con luz propia.
lento. Sirena de cántico millonario, ninfa
que se supone la versión pop de la Monroe
o la Dietrich, Madonna es la historia mu-
" EL SEXO ES ALGO QUE TODOS COMPRENDEN. ES I LIMITADO. LO QUE
I NTENTO ES HACER CANCIONES CON DISTINTAS LECTURAS" (Prince)
LOS MÚLTIPLES
ORGANISMOS
DE PRINCE
ANTONIO DE MIGUEL
Personaje enigmático, cancerbero de sus
misterios, poseído por fiebres de sexo y re-
ligión, avaro de su intimidad, con voca-
ción de hombre-orquesta, generoso en
mecenazgos, la figura de Prince es un re-
bosante oasis de atractivos síndromes.
Imposible de equiparar a otras estrellas
negras del firmamento musical, su ascen-
sión ha sido meteórica -aún no ha cum-
plido los 30 años-, sabia combinación de
efervescentes caramelos para la galería
(Purple rain, 1984), junto a sus más radica-
les visiones porno-sonoras (Dirty mind,
1980) y unos ajustadísimos desmarques
de elite supraterrenal (Sign of the times, en la música negra. Dos años después, el
1987). Prince cuida su carrera con mano dueño del Moon Sound Studio ofrece a
férrea y mente fría, escurriéndose hábil- Prince el puesto de ayudante. Prince en-
mente de las trampas que el circo del rock contró su nueva casa: allí vivía, dormía, n torno a Prince se ha
propone a los triunfadores. Inaccesibili- trabajaba, aprendía alquimia técnica y nucleado una cohorte musical
dad personal, discos exigentes, letras es- grababa un montón de cintas con sus in- que, si bien se beneficia de su
cabrosas, y una demostrada capacidad de somnios febriles. mecenazgo y marca de
absorción/asimilación/recreación de to- Un tal Owen Husney coge varias cin- garantía, ha demostrado por
dos los estilos que confluyen en su cosmos tas, se erige en manager del joven genio y sí misma ser atracción de
sonoro: soul, tecno Punk, jazz, psicodelia, viaja a Los Ángeles para hacer una oferta calidad. El variable clan lo
pop, rhythm and blues, rock... son algunas a diversas compañías discográficas. Es han integrado The Revolution,
de las estrategias dilatorias que ejercita Warner quien le ofrece el contrato más su banda de directo; The
Prince para vencer sin ser atrapado por ventajoso, un millón de dólares por tres Time, liderados por Morris Day;
las sérpicas redes del show-biz. elepés, y libertad artística. No es normal Vanity Six y Apollonia Six;
Prince Rogers Nelson vino al mundo que a un mocoso sin éxitos le permitan Sheila E.; André Cymone y Dez
en Minneapolis (Minnesota) el 7 de junio trabajar solo: para demostrar sus mañas, Dickerson, bajista y guitarra
de 1958. Padre músico, madre cantante, le hacen pasar un examen en un estudio de de Prince, que han grabado
divorciados cuando Prince contaba siete grabación con tres productores de presti- discos en solitario, y Jimmy
años. Se va de casa cinco años después, gio (Gary Katz, Lenny Waronker, Russ Jam y Terry Lewis, antiguos
vive con unos tíos hasta que se instala en Titelman); antes de terminar la sesión, los miembros de The Time, que
el hogar de su íntimo amigo André Ander- profesionales le dan su asombrada apro- han hecho afamada carrera
son (luego apellidado Cymone). Desde bación. En abril de 1978 está a la venta el como productores-
este instante Prince se buscó la vida en lo primer álbum, For you. Al igual que en su compositores. De cuando en
que irremediablemente le bullía por sus segundo disco (Prince, 1979), todo el mate- cuando apoya a gente que no
células de piel mestiza: la música. rial está compuesto, interpretado, arregla- pertenece directamente a su
Su padre le había enseñado a tocar el do y producido por él mismo. Hasta parti- familia, caso de las Bangles o
piano y le había regalado una guitarra, que cipa en el diseño de las portadas. Juanpa- Shena Easton, con
Prince se encargó pronto de domesticar. lomo feroz y egoísta, Prince es de los po- composiciones en las que se
En lo que aún se mostraba tímido era en cos artistas que han manifestado y logra- permite el lujo del seudónimo.
cantar. Con 15 años, Prince y André for- do que el control completo de sus obras le
man su primera banda, Grand Central, re- pertenezca. Cuestión que le llevaría años
bautizada luego Champagne, en la que es- más tarde a crear su propio sello discográ-
taba otro futuro miembro del clan, el bate- fico, Paisley Park, y su empresa de pro-
ría Morris Day. Tocaban los éxitos radio- ducción, Starr Company.
fónicos y se hicieron realmente populares Prince toca en ellos un total de 27 ins-
en Minneapolis, zona carente de tradición trumentos y ambos trabajos inaugurales
constituyen su etapa más ingenua, pero
también más intuitiva, polícromo arco iris
de sus gustos por el cóctel musical más
"LO QUE ECHO EN FALTA EN LA MÚSICA `POP' ES EL GUSTO
POR EL PELIGRO, POR LA EXCITACIÓN Y EL MISTERIO" (Prince)
DEL GUETO
A LA GLORIA
PATRICIA GODES
Nunca se ha dudado que la música negra
es el origen de casi todos los géneros musi-
cales de la era del rock, pero tampoco se
ha evitado echar, siempre que la ocasión
lo permitía, tierra sobre tan evidente ver-
dad. En los sesenta y setenta, sólo los más
concienciados de entre Tos fans se acorda-
ban de valorar el peso de Chuck Berry o
Smokey Robinson sobre los Beatles y Sto-
nes. En la actualidad, la situación ha cam-
biado, los derivados del soul y el funk son
prácticamente la corriente dominante del
pop, y no sólo sus influencias, sino sus fór-
mulas y maneras se encuentran en todo
producto comercial con ambiciones.
Nunca antes la música negra tuvo tan-
ta y tan amplia repercusión, nunca fue tan
respetada, pero tampoco nunca ha sido
tan descaradamente copiada, manipulada
y mediatizada en favor del menguado ta-
lento y las cada vez mayores cuentas co- En los setenta, la música rock cayó en
rrientes de los desaprensivos. Gran parte una crisis de la que no ha logrado salir,
de los últimos éxitos pop anglosajones son cuando por culpa del punk (a nivel teórico)
y la disco-music (a nivel práctico), se pusie- ara mí, soul y música
plagios de los clásicos de Motown y Spec- negra no son necesariamente lo
tor de hace 20 años (Bananarama, Wham!, ron en duda sus valores y su superviven-
cia. Para mantenerse tuvo que recurrir a la mismo. Música negra es
Kim Wilde, Cindy Lauper), cuando no se
más creativa de las culturas musicales, la música hecha por negros, y el
hacen simple y llanamente versiones. In- soul ha de ser crudo, directo,
negroamericana. La industria del disco
cluso se estila recuperar a clásicos como con una base simple y lineal.
Curtis Mayfield o Lamont Dozier para comprendió el proceso y lo aceleró inteli-
dar vida a los mediocres discos de las star- gente y rápidamente. El resultado ha sido Creo que hoy el soul ha
un híbrido, bautizado con un nombre que desaparecido, hay un montón
lettes que les han sustituido en las prefe-
habitualmente se evita pronunciar con el de bandas que suenan igual,
rencias de los compradores. Igualmente,
mayor de los pudores, pero que, sin em- no tienen dirección, hacen
los trucos discotequeros son utilizados
bargo, es el ideal para englobar la música portadas, graban discos,
una y mil veces para captar la atención del
de los ochenta y superar las nefastas y ya pero no tienen contenido
oyente hacia cualquier mediocre canción y
desfasadas clasificaciones raciales: disco- poético". (Bobby Womack.)
los mejores productores de música negra rock.
son contratados por todo el mundo con Decir soul, funk o música negra es ya si-
ambición y falta de ideas frescas, desde nónimo de exquisitez y clase; sin embargo,
Bowie, Dylan, Springsteen o Jagger a Du-
ran Duran y quien se tercie. Todo el mun- como consecuencia de la simbiosis con el
rock, sus cualidades musicales han queda-
do graba dúos con Michael Jackson, Dia- do profundamente dañadas: quizá en bus-
na Ross o Aretha Franklin, y todo compo- ca de un mal entendido espíritu comercial,
sitor que se precie pasa canciones a Tina quizá porque las condiciones sociales han
Turner a ver si su buen oficio las salva y cambiado mucho en EE UU, ha desapare-
cuelan como geniales. cido la conciencia de negritud y ya no se
escriben, con honrosas excepciones, can-
ciones con mensaje. Por otro lado, los
adelantos en la instrumentación electróni-
ca y el abaratamiento de los nuevos me-
dios técnicos han facilitado la uniformiza-
ción de sonidos e incluso de creatividad; la
música negra está dominada por la fórmu-
la y donde antes había 10 subestilos, aho-
ra no hay más que una ingente morralla de
mediocridad en una escena que, por su
"LOS MÚSICOS DE `JAZZ' SON CREATIVAMENTE CAPACES DE TRASVASARSE HACIA
CUALQUIER LADO. EL `JAZZ' RESULTA PERJUDICADO, PERO A LA VEZ CRECE" (P. Rushen)
Rick James, pionero de la aproximación como Chakka Kahn recurre a las cancio-
entre el rock y l a música negra. nes principescas para mantenerse en las
listas. También existe un proceso de recu-
peración de clásicos; tras el éxito de Tina,
se lanza a Patti Labelle, Nona Hendryx,
los Neville Bros. y James Brown, habitual-
mente protegidos por los menos idóneos
nombres de la música blanca. Los resulta-
dos son impersonales y rutinarios, y ni las
estrellas ni sus fieles seguidores quedan
satisfechos a pesar de algunos impactos
ocasionales en el mercado.
Un síntoma de que los productos con-
temporáneos tienen poca imaginación y
menos credibilidad, es la reedición de dis-
cos de la era dorada del soul, tanto éxitos
como grabaciones perdidas. Unas veces
son las compañías originales, otras edito-
ras especializadas (Reino en Califomia,
Ace y Demon/Edsel en el Reino Unido), y
resulta altamente curioso ver a un mismo
tiempo escalar las listas a Ben E. King,
Sam Cooke y Jackie Wilson. Se recuperan
también éxitos de los setenta, como es el
caso de Real Thing, que llegan de nuevo al
número uno en el Reino Unido 10 años
después de su aparición; o de Club Nou-
veau, que recuperan el Lean on me, de Bill
Whithers. Esta situación, impensable a
principios de los setenta, es por supuesto
consecuencia de la falta de competencia
que las producciones actuales suponen.
Si exceptuamos a los geniales Womack
& Womack y otros pocos más, la música
de consumo negroamericana se ha sacrifi-
cado a sí misma por su excesiva ambición.
La tentación de un reciclaje en los merca-
dos multirraciales es fuerte para artistas,
productores y editoras. ¿Por qué confor-
marse con ser marginal si se pueden tras-
pasar las fronteras comerciales con facili-
dad? ¿Por qué permanecer en el gueto del
soul cuando se puede reciclar a nivel pop?
El
En los años de Michael Jackson, todos
sus hermanos e imitadores van a intentar Los jóvenes negros no han tenido los pro-
recoger alguna migaja de su gloria e inclu- blemas de segregación que vivieron sus
pop negro británico so su concuñado Rockwell -hijo de Berry padres y abuelos y no sienten la necesidad
ha florecido en los ochenta Gordy- logrará un éxito a su sombra. Se de ser puristas. La existencia del nuevo
probando nuevas fórmulas. consagran Madonna, Tina Turner y Prin- pop negro es una auténtica hazaña para su
Heatwave lograron gran ce en 1984 y gracias al cine se produce el raza, una sólida realidad. Si sobrevive, se
repercusión durante el reciclaje del hip-hop. Una nueva genera- le pueden exigir resultados más sustancio-
cambio de décadas, y el ción de artistas callejeros obtiene gran sos; ahora, el simple hecho de que todo el
veterano Billy Ocean ha credibilidad entre los adolescentes gracias mundo consuma música negra supone un
l ogrado convertirse en una a combinar letras rebeldes y aspecto rudo cambio social tan grande que merece la
figura internacional. Leve¡ 42 con una música tan machacona como in- pena soportar la falta de sabor de la in-
e Imagination han triunfado en tragable para los mayores. Run/D.M.C., mensa mayoría de las producciones ac-
toda Europa, a pesar de que Fat Boys, L. L. Cool J., Beastie Boys, Full tuales. a
grandes esperanzas como Light Force y sus protegidos Lisa Lisa and the
Of The World, Beggar and Co. Cult Jam y The Real Roxanne, y Force
y Linx quedasen frustradas o las Md's, son los más reconocidos. Aunque
actuales figuras, Junior, los grupos más pop, como De Barge o New
David Grant, Jackie Graham, Edition, siguen triunfando sin complica-
Haywood y Princess no ciones.
acaben de encontrarse a sí Desde Minneápolis surge una caterva
mismos. de protegidos y ex compañeros de Prince,
entre los que destacan Sheila E y la pareja
de productores Jimmy Jam-Terry Lewis, y
hasta alguien con tanta personalidad
"LO TENGO CLARO. L A CUESTIÓN AHORA ES HACER
ÉXITOS, GANAR DINERO" (Andrew Gold, de Wax, 1986)
INDIVIDUALISTAS
Y ESTRELLAS
FUGACES
SANTIAGO ALCANDA
Los que se comentan a continuación son
solistas o grupos de los ochenta que apa-
recen y desaparecen en las listas de éxi-
tos estadounidenses, que alcanzan o se
aproximan al ansiado número uno, o que
permanecen en el estado de gracia de la
popularidad o incluso en el del prestigio.
Muchos habían conocido ya tiempos di-
chosos o sencillamente mediocres en al-
guna banda de los setenta y, no querien-
do perderse en el anonimato, renovaron
sus planteamientos, su estilo, y afronta-
ron con mayor o menor suerte los nue-
vos tiempos. En todos los casos, la técni- abandonó el poderoso grupo The Raspbe-
ca más la experiencia están en sus rries, de Cleveland, su tierra natal, para
manos. iniciar su carrera en solitario en 1975. Un
año después logró su máximo éxito, All by unque los grupos
Berlín. Réplica californiana al espíritu myself, de su primer elepé. Los tres siguien- australianos suelen terminar en
tecno, con la relajación y calidez propias tes pasaron inadvertidos. Carmen hubo el Reino Unido, algunos han
del lugar. Terri Nunn, diminuta rubia de de esperar a 1984 para llamar la atención cultivado el mercado
ojos infantiles, aprovechó su sensuali- con I wanna hear it from your lips. No con- norteamericano con buena
dad para interpretar textos propios so- fundir con Phil Carmen, también cantante fortuna. Men at Work se formó
bre la música de su compañero John y guitarrista, un canadiense afincado en en 1982 y se separó en 1985,
Crawford, como Sex (I'm a ... ). Resuci- Suiza que ha resurgido en la mitad de los con tres elepés y algunos clips
tan comercialmente en 1986 con Take ochenta para la audiencia europea. memorables. El primero,
me breath away, de Giorgio Moroder, de Business as usual, fue su acierto
la película Top gun. Sheena Easton. Esta escocesa de 1959, para entrar en Estados
elegida como sujeto central de un docu- Unidos gracias a dos temas,
Stephen Bishop. Irrumpió en 1976 con Ca- mental de la BBC sobre cantantes aspi- Who can it be now? y Down
reless, grabado junto a estrellas simpati- rantes, hubo de marcharse a Estados under. Después sacaron Cargo
zantes, como el guitarrista Eric Clapton, Unidos al comprobar que su canción 9 to en 1983 y Two hearts en
Art Garfunkel o Chaka Khan. A los dos S llegó al primer puesto de las listas. Su 1985, y sus canciones y
años continuó su obra ejemplar, de exqui- éxito se extendió a Japón y Canadá e in- relaciones fueron de mal en
sita sensibilidad, con Bish, cuya portada cluso grabó baladas en castellano para el peor. El cantante Colin James
reflejó su afición al cine, confirmada por público hispano. Ganó un grammy a la Hay salió airoso de la quema y
su intervención en un par de películas de cantante femenina promesa de 1981 gra- comenzó su propio camino con
John Landis, Desmadre a la americana y cias a su interpretación del tema princi- Looking for Jack.
Granujas a todo ritmo, y por su relación pal del filme Sólo para tus ojos, de la saga
sentimental con la actriz Karen Allen. Su James Bond. En 1982, su tercer álbum,
tercer disco, Red cab to Manhattan, de Locura, dinero y música, inició la carrera
1980, contó con la ayuda de Phil Collins. descendente de una británica en Califor-
Bishop devolvió el favor al batería de Gé- nia, contrarrestada por el sugerente Su-
nesis con su canción Separate lives, tema gar walls, de Prince.
central de la película Noches de sol. Ade-
más, Bishop ha interpretado o compuesto Michael Franks (1944). Su apego inicial a
los temas principales de películas como las raíces del country, con el manejo de la
Tootsie, Síndrome de China o Desmadre a guitarra acústica y el banjo en los prime-
la americana. ros días de los setenta, se sustituye por un
espíritu jazzistico muy abierto a otras co-
Erie Carmen. Guitarrista y productor, rrientes que van desde Eric Satie a Miles
Davis o Antonio Carlos Jobim, sin perder
nunca contacto con el gusto popular. Le
da a conocer The art of tea, con The Crusa-
"LAS DISCOGRÁFICAS NORTEAMERICANAS NO TIENEN N I NG ÚN RESPETO POR NUESTRA
TRADICIÓN MUSICAL; PREFIEREN VENDER `POP' INSÍPIDO" (Huey Lewis, 1985)
Cyndi Lauper divide su tiempo entre nitivo llegó con Power of love, su número
su carrera musical y el oficio uno, tema central de Regreso alfuturo, pe-
de representante de luchadoras.
lícula de la factoría Spielberg, en la que el
ders, y no deja de propio Lewis interpretó el personaje de
perseguir la reno- profesor de Michael J. Fox.
vación, duchándo-
se de literatura tro- Cyndi Lauper (1953). Esta pequeña neo-
pical y pasional, y yorquina con cara de muñeca de porcela-
de su adoración a na grabó en 1980 como cantante de Blue
la pintura. Los sin- Angel, grupo de estilo nuevaolero, con una
tetizadores y la am- repercusión aceptable. En 1984, el sello
plificación de soni- Portrait dispuso de sus mejores medios
dos de la guitarra para descubrir una voz modélica y unas
no han sido un pro- canciones directas y contagiosas, fuertes,
blema para él, auxi- Girls just want to have fun, o tranquilas,
liado siempre por Time after time. Favorecieron su éxito sus
los mejores músi- vídeoclips y la interpretación del tema cen-
cos de sesión en tral de The goonies.
cada uno de los 10
elepés editados has- Kenny Loggins (1948). Entró en los estu-
ta 1987, incluida dios en 1972, para grabar en solitario con
una demostración la producción de Jim Messina. El álbum
de sus registros vo- Sittin'in salió finalmente como Loggins
cales en vivo. and Messina, y Kenny no grabó solo hasta
1977. Desde entonces su carrera, más cer-
Don Henley (1947). cana al gran público, ha mejorado tiempos
Formó parte de la pasados, con la edición incluso de un ál-
banda country-rock bum doble en directo que incluía su ver-
por excelencia, Ea- sión de What a fool believes, primero de
gles. Henley ya una serie de temas en comandita con Mi-
cantaba y tocaba la chael McDonald. Loggins ha frenado su
batería en el grupo ímpetu creativo con interpretaciones flo-
Shiloh. Henley fue jas de los temas principales de Footloose y
quien interpretó Top gun.
Desperado, One of
these nights y Hotel Michael McDonald. Tiene tres facetas:
California, clásicos toca los teclados, compone y, sobre
del rock estadouni todo, canta cual negro disfrazado de
dense. Su colaboración en discos ajenos blanco. McDonald, miembro eventual
en los estudios californianos es muy co- de Steely Dan, presentó una maqueta a
rriente. En 1982 publicó su primer disco Warner Records, lo que le ayudó a unir-
En los años ochenta, en solitario, 1 can't stand still, y normalizó se a los Doobie Brothers en 1976; la ca-
un buen número de actores han su dúo compositor junto al guitarrista rrera de la banda cambió rotundamente
pasado al campo del rock: Danny Kortchmar para crear temas tan y McDonald no tardó en convertirse en
dado que ya cuentan con una divertidos como Dirty laundry o Johnny el líder. Fue responsable de la estructura
imagen reconocible, can't read. En 1985, Building the perfect musical de What a fool believes, pieza co-
consideran que lo de triunfar en beast, su segundo álbum, alcanza la cifra piada repetidamente. Es fácil reconocer
la música es cosa fácil. Don de dos millones de copias vendidas sólo sus armonías vocales en discos de Chris-
Johnson (Miami vice), Bruce en Estados Unidos. El fenómeno, paralelo topher Cross, Toto, Carly Simon, Kenny
Willis (Luz de luna), Eddie al resurgir de John Fogerty, responde a la Loggins o "David Pack, primera voz de
Murphie, Chevy Chase o William agridulce nostalgia por los sesenta, puesta Ambrosia. Su carrera en solitario se ha
Katt (El gran héroe de moda por la película Reencuentro. levantado gracias a un par de dúos voca-
americano) no dudan en grabar les junto a Patti Labelle en On my own y
discos. Don Johnson había Huey Lewis and The News. Huey Lewis, James Ingram, protegido de Quincy Jo-
intervenido en elepés de Allman voz y armónica, estuvo en la banda califor- nes, en Yah mo be there, y al tema princi-
Brothers Band antes del éxito niana de country-rock Clover, que actuó en pal de Apunta, dispara y... corre, una
de la serie Corrupción en Miami, locales de Londres e intervino en discos de composición de Rod Temperton llamada
en la que Glenn Frey, Tina Elvis Costello (My aim is true) y Phil Lynott. Sweet freedom.
Turner o Fiona tampoco han Huey y el teclista Sean Hopper fundaron
vacilado en aparecer, para en 1982 Huey Lewis and The News, junto Mr. Mister. Richard Page y Steve George,
bien de sus propios discos. al guitarrista Johnny Colla, el bajista Mario voces cotizadas de los estudios california-
Cipollina y el batería Bill Gibson, proce- nos, que han llegado a colaborar con Dia-
dentes del grupo Soundhole. Influidos por na Ross, Al Jarreau, Randy Crawford o
el rock and roll de los cincuenta y las gran- Julio Iglesias, crearon el grupo Pages a
des melodías de Sam Cooke, su tercer ele-
pé, Sports, de 1984, vendió seis millones de
copias en Estados Unidos. El remate defi-
"LA MEJOR MÚSICA SE HACE ENTRE AMIGOS, Y ASTRUD GILBERTO, TOOTS
THIELEMANS, MICHAEL BRECKER Y DAVID SANBORN SON MIS AMIGOS" (Michael Franks)
Las canciones de Obús son odas a la en los albores de la década de los ochenta,
vida peligrosa, a la velocidad y a los cuando los músicos sinfónicos y del llama-
excesos. do rock urbano le vieron los dientes a la re-
conversión (luchar o morir). Y decidieron
luchar. Así, por ejemplo, Fortu (Fructuo-
so Sánchez, burgalés de 1954), el cantante
de Obús, ya había probado suerte con
Nudo -un grupo sin demasiada cuerda
que intentó alcanzar el éxito presentándo-
se al Festival de Benidorm-, Colores,
Araxes y Unión Pacific, con los que tam-
poco llegó demasiado lejos. Pero el heavy
pega fuerte en todo el mundo y Fortu se
alía con tres instrumentistas curtidos en el
género (Fernando Sánchez, Juan Luis y
Francisco Laguna) y en octubre de 1981
lanzan el primer elepé español de rock
duro con tachas en la portada.
Después de una larga década de mise-
rias y despropósitos, el rock español em-
pieza a tomar fuerza y a ganar adeptos a
su causa. Las ventas de elepés alcanzan el
oro y el platino (50.000 y 100.000 copias);
los pabellones y plazas de toros se llenan
de un público muy joven, ávido de sensa-
ciones fuertes. Obús, Leño y Barón Rojo
se convierten en los puntales del "movi-
miento de rock auténtico", como diría Ma-
El último disco de
Obús es un doble álbum que
riscal Romero, motor del sello Chapa, que
vivió eufórico el momento del triunfo des-
pués de haber luchado sin cuartel por el
éxito de sus grupos.
Sin embargo, el primer elepé de Obús
recoge el concierto que el
cuarteto madrileño dio en el XPLOSIÓN (Prepárate, 1981) es producido por Tino
pabellón deportivo del Real Casal, rey del glam, y Luis Cobos. Y eso a
Madrid en febrero de 1987. Más DE METAL muchos jevis no les cuadra. Pero Obús son
de 5.000 brazos se alzaron menos cuadriculados que sus fieles y el as-
con el puño cerrado aquella JESÚS ORDOVÁS turiano también les produce Poderoso
noche, mientras el grupo El gran público supo por primera vez del como el trueno (1982), que les confirma en
soltaba su mejor metralla monstruo cuando oyó el rugido de la fiera su puesto de líderes del género ("los que
repertorio y la cerveza corría embravecida y orgullosa, allá en la plaza más", dicen los locutores duros).
por las gargantas de los jevis. de toros de Las Ventas. Miles de cuerpos Su tercer álbum será precisamente El
Pocas veces la estructura de sudorosos llenaron el ruedo y las gradas que más (1983). Y en esta ocasión es el
hierro y cemento del del inmenso coso la noche que Obús ganó propio Mariscal Romero, con la ayuda de
polideportivo ha soportado el primer premio del IV Concurso Rock de Luis Soler, el encargado de darle el toque
tal volumen brutal. Sin haberlo Madrid (mayo de 1981). Nunca antes se internacional al plástico, grabado en Ibiza
visto, resultaría difícil había visto nada igual. El vocalista Fortu con técnicos anglosajones; el guitarrista
entender la historia suicida de anunció con tono apocalíptico que iba "a de Iron Maiden, Adrian Smith, aporta un
Obús: "Subo el volumen / estallar el Obús", y de pronto se abrieron tema para el disco. Su compañía los lanza
siempre. Una litrona / siempre. los cielos de par en par, se vio un fogonazo con un gran aparato publicitario, incluso
Globo tras globo / siempre. que dejó ciegos a los nuevaoleros, y el equi- en América del Sur. El grupo vive sus me-
Suena que atruena". po de sonido empezó a echar fuego y a vo- jores momentos.
mitar metralla. Un éxito merecido: fueron los primeros
Pero nada de esa fanfarria era nuevo en trasladar con éxito a nuestro país los es-
para las gargantas que entonaron al uníso- pectaculares montajes de las bandas anglo-
no Sólo lo hago en mi moto y otros himnos sajonas. Pero también impregnaron a esa
guerreros con los que los hijos del agobio parafernalia de un sentido del humor, una
celebraban su triunfo sobre los popis. Era humanidad y un lenguaje propio que, con la
la primera vez que los jevis, llegados de Va- estandarización y comercialización del gé-
llecas, San Blas, Vicálvaro y demás ba- nero, corre peligro de perder su gracia.
rrios y pueblos de los alrededores de Ma-
drid, triunfaban con todas las de la ley en
el concurso de Madrid. Hasta entonces,
las bandas de rock duro habían sido discri-
minadas en beneficio de los grupos pop.
Pero había llegado el momento de los jevis.
Las bandas duras españolas nacieron
"MADRID ES LA CAPITAL CON MAYOR NIVEL DE IDEAS ARTÍSTICAS Y
CREATIVAS DE EUROPA. EL ÚNICO PROBLEMA ES EL DINERO" (Miguel Bosé)
ROCK' ESPAÑOL,
A PESAR DE TODO
PATRICIA GODES
La diferencia entre la escena musical roc-
kera española y la extránjera se aprecia fá-
cilmente cuando se leen las revistas para
músicos. La pregunta %qué equipo te gus-
taría tener?", en el extranjero es, por su-
puesto, %qué equipo tienes?". Indudable-
mente, el factor económico es básico, y la
escasez de medios afecta gravemente a
nuestros jóvenes músicos, a pesar del
triunfalismo de algunos medios de comu-
nicación. También es posible que se haya
sacado de quicio, inflándolo despropor-
cionadamente, un movimiento que, por
sus orígenes y necesidades, es intrínseca-
mente humilde y minoritario. Igualmente,
hay que recordar aquí la ayuda de ayunta-
mientos y otras instituciones, que han pa-
trocinado concursos, ediciones discográfi-
cas y, sobre todo, conciertos masivos gra-
tuitos; gracias a ese circuito oficial muchos do el panorama, demostrando una mayor
grupos han logrado una estabilidad eco- comprensión del mercado que algunas
nómica. multinacionales. Chapa, filial de una com-
Desde la nueva ola, que algunos han lla- pañía establecida, ya ha cumplido 10 años Con un mercado
mado acertadamente rock de colegio, el de respaldo al rock suburbial, con triunfos abierto a los últimos
rock español ha ido, poco a poco y a veces indiscutibles. triunfadores británicos y
forzadamente, consolidándose. El balance La otra cara de la moneda está en la saturado de grupos nacionales,
es saludable si se tienen en cuenta las pe- presencia de personas que se han aprove- el rock español se plantea
nurias que sus creadores soportan. Caso chado de las circunstancias, presentando exportar sus producciones. A
distinto es el de la nueva industria del dis- productos muchas veces indefendibles; la pesar del interés causado por
co. Gracias a lo que se llamó movida inde- tentación por el estrellato se ha hecho la movida, no es posible vender
pendiente, que dio algunos frutos discográ- enorme, dado que parece muy fácil llegar a Europa, ya que se necesita
ficos interesantes allá por 1983, varias a él. Es igualmente cierto que muchas per- cantar en inglés. Por tanto,
compañías menores se han establecido, sonas con escaso interés por la música tie- Dinarama, Mecano, Hombres
ampliando el mercado y facilitando el ac- nen puestos de responsabilidad en su G, Miguel Ríos y algunos grupos
ceso hasta él. Hoy día, grabar un disco mundo, a nivel de negocios, de medios de heavy han hecho visitas a
está al alcance de cualquiera. Los resortes comunicación o entre los mismos artistas. México, Perú, Venezuela,
que permiten lograrlo han sido ya revela- El interés por lo musical se ha sustituido Argentina y otros países
dos, y el músico con inquietudes puede en ocasiones por el interés por la vida so- latinoamericanos. Parece la
dar rienda suelta a su creatividad y ver sus cial, con el consabido menoscabo para la salida lógica, vista la
frutos. En ese aspecto, la política de Dis- creatividad. A diferencia de otros países, incapacidad de las compañías
cos Radiactivos Organizados (DRO) ha aquí son muchos los grupos que se hacen para lanzar música española
sido la más radicalmente opuesta a la de famosos sin apenas haber pisado un esce- en los países vecinos,
las antiguas compañías. Su amplísimo ca- nario. Por el contrario, hay ejemplos alec- demostrada en casos como el
tálogo de producciones propias así lo con- cionadores -Los Ilegales, Kortatu, La de Lobo-hombre en París, de La
firma, al igual que su entramado de subse- Polla Records- de gente que, ignorada Unión.
llos (Tres Cipreses, Kraken, Neón Dan- por la televisión y las radios de fórmula,
za.. . ). Grabaciones Accidentales, con una han conseguido establecerse gracias al vi-
política más selectiva, y Nuevos Medios, gor y la abundancia de sus actuaciones.
con un cierto toque elitista, han enriqueci- Así, es dificil dar una visión global, ni
señalar características generales de la ac-
tividad del rock español de los ochenta. La
búsqueda de una sobrevalorada originali-
dad ha hecho que surja un intrincado dé-
dalo de subgéneros, todos ellos en compe-
tición por el favor del público. Vista la de-
solada realidad, surgen las mil y una es-
"EL MUNDO NOS ODIA PORQUE SOMOS GUAPOS. LAS CHICAS AL VERNOS
QUEDAN PRENDADAS DE MI CALVA DESLUMBRANTE" (Jorge Martínez, de Ilegales)
Rosendo, un músico cuyo carisma Rosendo. Fue líder de Leño, grupo que
reside en su sencillez musical y
personal. evolucionó hacia unos sonidos urbanos,
que son los que han sobrevivido en los dos
elepés del guitarrista en solitario (Loco por
incordiar, 1985, y Fuera de lugar, 1986).
Pretende ser una respuesta auténtica a Ra-
moncín, ha mantenido un contacto abso-
luto con la calle, entre cuyos sectores más
jóvenes es prácticamente idolatrado. Inte-
lectualmente aceptado por los teóricos,
Rosendo se alza como uno de los grandes
candidatos al superestrellato rockero es-
pañol, con su voz arrasada y temas que
buscan la identificación espiritual con su
audiencia.
Stukas. Son unos veteranísimos asturia-
nos especialistas en la linea rockera que
domina aquellas tierras. Ese arraigo del
rock and roll y el rhythm and blues, aun an-
tes de que se pusieran de moda, se nota en
paisanos, como La Banda del Tren, o veci-
nos, como Los Cardiacos de León. Stukas
son una prueba de la peculiar escena mu-
sical de aquella zona, que permite una su-
pervivencia y una profesionalidad a sus
grupos, a nivel local y sin necesidad de re-
ciclaje discográfico, algo muy dificil en el
resto de España.
chabacano, montado sobre música sim-ple, machacona y ruidosa, son los rasgos
característicos de un grupo cuyo éxito se
basa en su capacidad de sorprender. Su
pieza más coreada: Mi agüita amarilla.
Trúpita. Cantautor rockero que buscó una
vía más arriesgada e inteligente que la de
0 Sabina y sus imitadores. En vez de confor-
°> marse con añadir a su música el acompaña-
U
miento de rock convencional, Trúpita osó
trabajar con un productor comercial espe-
cializado en música terno bailable como es
ha erigido en la gran reina del kitsch con su Julián Ruiz, y lo bueno del caso es que el
versión actualizada (citas musicales de resultado fue coherente y digno, como se
Lou Reed, acentos funky) de la clásica to- demuestra en canciones como Esta noche
Dentro de la línea más nadilla española. me quiero descolgar (1984). a
i ndefinible destacan los
catalanes Claustrofobia, Pata Negra. La mixtura flamenco-rock ha
dirigidos por el inquieto Pedro sido considerada desde siempre como la
Burruezo, que reconoce en panacea para todos los males de nuestra
los surcos su admiración por el música. Formados alrededor del guitarris-
Camarón, James Brown y ta Raimundo Amador, otro colaborador
German Coppini. Otra de Kiko Veneno, Pata Negra mezclan gui-
hererodoxa sin suerte es la tarra hendrixana, blues y raíz gitana y han
cantante y guitarrista Mercedes logrado una sólida reputación entre los
Ferrer, por no hablar de conocedores, a pesar de que el gran públi-
proyectos más oscuros como co se muestra sordo ante sus discos (Pata
los donostiarras M-aK o los Negra, 1981; Rock gitano, 1984, y Guitarras
canarios Arte Moderno y Juan callejeras, 1986). Otro grupo que practica
Belda. la hibridación flamenca es Ketama, que
también pertenece a una familia de rancio
abolengo flamenco, mientras Laberinto
buscó una vía más comercial con su disco
Qué passa (1984).
"COMO VES, MI GUITARRA NO DISPARA, PERO SÉ A DÓNDE
APUNTO, AUNQUE A VECES NO VEAS LA BALA" (Kortatu)
ROCK# VASCO,
DESEO DEL CAMBIO
IÑAKI ZARATA
Aunque convertida en arma combativa
por mor de las circunstancias, la nueva
canción vasca (Laboa, Lete Lertxundi, Ar-
tola) amaba las melancolías marinas y la
placidez campestre. Lo de los conjuntos
apenas había sido un leve sarampión: con-
tra Franco todo era demasiado urgente y
la generación de los setenta no pudo en-
tretenerse en devaneos culturales forá-
neos. Cuando la historia disminuyó su
tensión, surgieron del asfalto los primeros
síntomas de adecuación a los aires que so-
plaban de allende el Cantábrico. Los Bra-
kaman de Jaime Stinus habían hecho rock
en inglés y la Orquesta Mondragón era
pura provocación escénica. Emigraban
Poch y Alejo (Derribos Arias), Rafa Bal- señala como fecha de despegue del movi-
maseda (Parálisis Permanente) o el con- miento una jornada contra un polígono de
trovertido Ángel Altolaguirre. Sin apenas l a OTAN. Se habló del rock radical vasco,
romper su cascarón, el poperío vasco ex- y la polémica etiqueta haría pronto furor. unto al estruendo
portaba cerebros. El sello pamplonés Soñua pasó de jotero a radical, la otra cara del
Abierta la espita de los nuevos tiem- punk y el cambio afectó luego a Discos efervescente rockerío vasco
pos, un caudal de sones eléctricos inundó Suicidas, IZ o Elkar. La buena nueva con- l a pone el pop guipuzcoano
la zona. Puskarra, Mogollón o UHF in- taba con un soporte empresarial discreto (Duncan Dhu, Itoiz, La Dama,
tentaron venderse como Donosti sound. La pero eficaz, más el entusiasta apoyo de Mak, La Cofradía), algunos
modernez vizcaína se apellidaba Rufus, multitud defanzines, radios libres y gaxtet- veteranos grupos vizcaínos,
Los Santos o Lavabos Iturriaga. Al incla- xes (centros juveniles), muchos de ellos bandas mods como Scooters y
sificable Ruper Ordorika y grupos como ocupados ilegalmente. el potencial rockanrolero de
Oskorri, Itoiz o Zarama les unía el uso del Mientras los incómodos Eskorbuto ofi- O. K. Corral, Refugiados, Bazar
euskera en sus mensajes. Pero a espaldas ciaban de oposición autónoma, el trío irunés Central o Dinamita Pa Los
del confiado moderneo rugía el volcán. Los Kortatu y sus panfletos skatalíticos dirigie- Pollos. Siguen en la brecha, en
primeros síntomas se detectaron en pue- ron las huestes radicales a uno de los centros estilos diferenciados, los
blos-colmena donde tardíos agrupamien- del compromiso político: Herri Batasuna. Ordorika, Oskorri o Imanol. Y al
tos punks levantaban el hacha de guerra. Había nacido la Euskadi alegre y combativa. otro lado de la frontera, los
La Euskadi del txistu y tamboril amagaba La marabunta posterior es caótica fiesta de radicales Zein Ere, KGB o
por entrar en la Europa del imperdible. frentes diversos. Hertzainak, Kortatu, Pota- Uharteko Punka relevan a los
La marea se extendió con rapidez, y se to, Baldin Bada, Korroskada y otros impor- históricos Etxart o Duhalde.
tan ritmos jamaicanos. El rock en diferentes
variantes lo fabrican Zarama, Jotakie, Be-
lladona, Tijuana y una larga lista. Por el
lado duro avanzan Barricada, Ángeles del
Infierno, Leize y otros. La revolución a tra-
vés del hardcore y similares agrupa a La Po-
lla Records, RIP, Cicatriz, BAP, Delirium y
un sinfin de siglas.
El noviazgo más escandaloso entre tra-
dición y modernidad se llama trikipunk,
mezcla de pandero-acordeón diatónica y
bronca vocal. Tarde, pero seguro, el rock
vasco asienta sus reales hasta proponerse,
siguiendo a Hertzainak, que Euskadi sea
libre y tropical, llena de negros y vagos,
porrusalda y ron, cocoteros por pinos, pi-
ratas por pescadores, el roble de Gernika
convertido en palmera y todos en bermu-
das moviendo el trasero.
"NO ME CUIDO ABSOLUTAMENTE NADA... CREO QUE HAY QUE QUEMARSE DE
ALGÚN MODO Y LO MEJOR ES QUEMARSE RÁPIDO" (Joaquín Sabina, 1984)
JOAQUÍN SABINA,
CARNE DE NEÓN
MATÍAS URIBE
Antes que Sabina lo intentó Hilario
Camacho, pero la propuesta del autor
de De paso no cuajó masivamente. Así
es que podría decirse que hemos esta-
do huérfanos de esa especie criada (y
abundante) en Estados Unidos, cual es
la del cantautor eléctrico. Aun cuando
Aute se ha visto arropado por un grupo
de rock, lo suyo no podría tomarse
como muestra de cantautor urbano,
aunque justo es reconocer que su nom-
bre y el de Serrat resucitan con más
brío que nunca en los ochenta y se
adueñan del brillo de los cantautores.
Signo inequívoco de que para la ternu-
ra siempre hubo y hay tiempo, parafra-
seando a Víctor Manuel y Ana Belén,
el otro tándem de triunfadores en la
presente década.
Caótico, bohemio insaciable, noctí-
vago, buscador de placeres, intoxicado
por la nicotina y los vapores del blues,
Joaquín Sabina, pese a la irrupción de
nuevos valores como los tres javieres político que ha colocado un cóctel mo- nocido en la capital inglesa. Intuyendo
(Bergia, Batanero y Ruibal) es el mejor lotov a las puertas de un banco, a raíz que puede arder en la misma hoguera
representante en España del cantautor del proceso de Burgos. Años de cris- que los demás, dosifica sus apariciones
eléctrico norteamericano, quien mejor pación estudiantil e insólita concien- en mítines políticos y, principalmente,
ha puesto aquí guitarras calientes a la ciación política para un estudiante de evita la calle como escenario de su mú-
voluntad poética y contestataria de los Románicas que ha pasado por los sa- sica y como andamio para ganarse la
cantautores. lesianos y es hijo de un comisario de vida. Un ejecutivo que le vio en Lon-
Sabina ha escrito deslumbrantes policía. La culpa la tendrá aquella dres le propone grabar un disco y nace
odas a la grisura de la gran ciudad, ha guitarra que, frente al disgusto fami- el elepé Inventario. Absoluta indiferen-
inmortalizado al Madrid sombrío de liar, vino a sustituir al reloj con el que cia. Pero ya pule su estilo y aguza su
las buhardillas y los soles de butano, ha tradicionalmente se premiaba en casa ingenio de cronista urbano en La Man-
pintado lienzos autobiográficos de un de los Sabina a los hijos aplicados al drágora. Ficha por CBS.
realismo y una mordacidad silbantes, finalizar su bachillerato elemental. Sale en 1981 Malas compañías, elepé
ha canonizado a toda una peculiar ga- Dura pero solvente academia. Sa- disperso pero rebosante de grandes
lería de personajes marginales, ha com- bina sobrevive en Londres tocando en momentos musicales, que le muestra
puesto melancólicas piezas al descon- la calle y en los restaurantes de lujo como cantautor distinto. En 1983 traza
suelo amoroso, tallado frisos de ironía (llega a actuar ante Liz Taylor y Geor- el mismo arco que su maestro Dylan y,
desbordante a través de algunos de los ge Harrison) y, cuando, al cabo de sie- de cantante seudoacústico, pasa a can-
personajes reaccionarios de la historia te años, regresa a España, se encuen- tautor eléctrico con Ruleta rusa. Su me-
del país y hasta se ha permitido el lujo tra con un panorama de la canción po- jor elepé hasta hoy, Juez y parte (1985),
de parodiar a su maestro Dylan. Sabi- pular efervescente, pero confuso, bien vivo lienzo sonoro de cálidos colores y
na ha roto con el esquema de cantautor distante de los modelos que él ha co- entrañables confesiones personales, así
político ofreciendo poesía urbana y como un doble álbum grabado en di-
música de calidad. recto y un especial en Televisión Espa-
Mientras a finales se los sesenta ñola en 1986, le colocan en la elipsis del
varios de sus colegas intentan alisar, éxito masivo. Con Hotel, dulce hotel,
a golpe de estrofa rebelde, las rugosi- editado en mayo de 1987, se le ve su-
dades políticas del franquismo, Joa- HISTORIA DEL `ROCK' friendo la enfermedad del triunfador
quín Sabina (Úbeda, Jaén, 1949) hace que hace discos por compromiso, por
acopio de sus mejores materiales so- PRÓXIMO CAPITULO formulario. Ha de recuperarse: el neón
noros en Londres, donde se ha refu- sigue luciendo todas las noches en la
giado tras una novia británica y hu- ciudad y son muchas historias de in-
yendo de la policía granadina, que le
busca por formar parte de un grupo REVIVALISMO fierno y purgatorio las que seguir con-
tando.
HISTORIA DEL `ROCK'
De una forma creciente, el rock contemporáneo se alimen-
ta del pillaje y reciclaje de fórmulas arcaicas: el revival
constante marca su discurrir. Entre las múltiples formas
que adquiere esta obsesión por el pasado destacan la res-
tauración del rockabilly sureño y el recurso a los inagota-
bles años sesenta. En Estados Unidos surge en la presente
década el nuevo rock norteamericano o rock de raíces, con
una desbordante propuesta de grupos y solistas de guita-
rras. Ninguno de estos artistas ha conseguido la repercu
sión de predecesores como Tom Petty (en la foto), pero plantean en conjunto
una vitalista alternativa a las tendencias homogeneizadoras de la industria del
entretenimiento.
Artistas como Chris Isaak evocan los con-ansia, que sugiere a los agoreros pro-
años cincuenta tanto en lo físico nósticos terribles sobre el estado actual de,
como en sus canciones. la creatividad musical, se nutre de muy va-
riadas circunstancias. Por un lado, el creci-
miento de la industria del ocio y la comuni-
cación ha abierto el acceso a los sonidos e
imágenes del pasado: se reeditan grabacio-
nes antiquísimas (incluyendo surcos que en
su momento pasaron inadvertidos), se con-
feccionan vídeos y programas televisivos re-
trospectivos y se investiga en páginas ama-
rillentas. El conocimiento del pasado es más
amplio que nunca, espoleado por la con-
ciencia -una herencia de los pioneros del
pop art- de que estos modelos venerables
pueden ser manipulados con diversión y
provecho. A partir de los primeros Roxy
Music (1972), manejados por un antiguo es-
tudiante de arte, se instaura un pop cargado
de guiños y referencias veladas que tiene
una doble lectura: el público nuevo disfruta
inocentemente con los clichés y estereotipos
rescatados, mientras que los espectadores
veteranos aprecian el juego de la ironía y la
recreación.
La recuperación comenzó con las distin-
tas variedades del rock and roll de los cin-
cuenta, en una época -primeros setenta-
que echaba de menos el candor y la energía
de los pioneros. Luego le tocó el turno a la
gloriosa década de los sesenta soul, surf,
beat, mod, rhythm and blues, psicodelia, gara-
je-, que actualmente ejerce una irresistible
atracción sobre artistas jóvenes que en-
cuentran confortable adoptar disfraces y
marcas de un tiempo en el que el rock estaba
en voraz expansión. También le ha llegado
el turno a los sonidos imperantes en los de-
I revival ha sido nigrados años setenta. Incluso hitos anterio-
favorecido por la industria
res (Billie Holiday, Cole Porter, Frank Sina-
discográfica y los medios de
comunicación, frecuentemente L PASADO tra) entran a formar parte del repertorio ex-
propiable por músicos audaces. Algunos
dominados por personas que
síntomas: Jim Morrison tiene hoy más imi-
vivieron aquellos sonidos en su
primera encarnación.
YA ESTA AQUÍ tadores que cuando estaba vivo, el término
rockabilly -de escasa difusión en los cin-
Mientras que los nuevos grupos DIEGO A. MANRIQUE cuenta- ha llegado a englobar otras formas
adoptan identidades Algo que no necesita el rock es un museo a del rock and roll, Bob Dylan vuelve a ser ver-
embellecidas por la distancia, lo Madame Tussaud; prácticamente, to- sioneado o el culto por los Beatles alcanza
l os controladores aceptan dos los grandes modelos estilísticos siguen niveles de saturación.
esas canciones e imágenes que teniendo presencia sobre los escenarios. Esta orgía de reivindicación abarca ca-
l es permiten revivir su En muchos casos, los protagonistas origi- sos de explotación, fotocopias reverentes,
juventud sin traumas ni nales exhiben sus menguadas energías, un parodias de sal gruesa y, en su mejor expre-
conflictos. empecinamiento comprensible: ya se sabe sión, ejercicios de robo con distanciamiento
que lo de "los viejos rockeros nunca mue- que asumen que el proceso del pop puede
ren" tiene más de supervivencia que de ser también una creación artística y que no
testimonio. Pero el mercado de la nostal- se privan de reconocer su inspiración o re-
gia es insignificante en relación con el pre- fractarla a través de prismas perversos. En
sente estado de revival. recuperación de todos sus grados el revival forma parte de la
añejas composiciones en versiones al gus- práctica diaria del rock y el pop: el pasado ya
to del momento, pastiches de sonidos clá- está aquí.
sicos (el toque Motown rara vez falta en las
listas de vendedores), el saqueo exhausti-
vo de imágenes del pasado para vestir clips
o portadas, la aparición de una caterva de
artistas barbilampiños que idolatran épo-
cas pretéritas. Abrumador.
Esta epidemia del mirando-hacia-atrás-
"AMÉRICA DIO AL MUNDO EL `ROCK AND ROLL', PERO AHORA OYE A GENTE
COMO SPANDAU BALLET. ES PATÉTICO" (Sid Griffin, Long Ryders, 1984)
EL NRA
JOSÉ MARTA REY
En los primeros ochenta, hartos de anes-
tesia (AOR) e incapaces de identificarse
con la ñoñería acrílica i mpuesta desde In-
glaterra, cientos de jovenzuelos america-
nos descubren boquiabiertos la riqueza
natural de su glorioso pasado. Se rifan vie-
jos discos de sus hermanos mayores y em-
peñan el sintetizador para comprar guita-
rras. Ya tenemos el nuevo rock americano
(NRA).
Conatos aislados, con ayuda de las
FM universitarias y actuaciones indiscri-
minadas, generan florecientes escenas
tanto en metrópolis (Los Ángeles) como
en el Sur Profundo. Con grupos amateurs
que se multiplican refrescando el panora-
ma y sellos que crecen con ellos (Enigma,
Slash), alcanza difusión internacional.
La culpa podría recaer en ingleses
como Echo & The Bunnymen o Joy Divi-
sion, primeros videntes de la vigencia clá- claración de principios: fibra tensa, mira-
sica de Jim Morrison o la Velvet Under- da seca y técnica inexorable. Instalados en
ground. Pero lo que prometía ser chispa Slash -sello relacionado con la revista
de nuevos aires se colapsa en revival más o local homónima-, el quinteto alista a Lee os Estados sureños
menos afortunado. Salvo brillantes excep- Allen (saxo de Little Richard) y mantiene brindan una exuberante
ciones como REM, la mayoría de los gru- el pulso firme (Live in London, 1983) con cosecha de NRA. Athens,
pos giran alrededor de tres grandes focos desigual inspiración, entre los devaneos núcleo universitario de Georgia,
influenciales: la herencia seráfico-silvestre de Dave Alvin (guitarra) con los X y la con apenas 60.000
(Byrds, Burritos, Love), el lado turbio fuga de Steve Berlin a Los Lobos. La tre- habitantes, cuenta con decenas
(Doors, Velvet...) y el incombustible gara- gua de 1986 permite a Phil Alvin (voz) re- de bandas. Aparte de B-52 o
je psicodélico. correr en compañía del jazzman Sun Ra la REM, surte de precursores
Es un movimiento crítico: contracultu- historia de la música negra (Unsung sto- (Pylon, Love Tractor) y caras
ra hippie y realismo punk, que vuelve a ries), mientras Dave registra Every night nuevas (OH OK, Buzz of Delight,
cambiar el sonido de la década y despierta about this time (1987). Squalls). También vecinos
incondicional fanatismo sin grandes des- son Guadalcanal Diary y los
pliegues promocionales. Pero, sobre todo, Del Fuegos. Dirigido por los hermanos rugientes Georgia Satellites.
es el movimiento frustrado. A diferencia Zanes (Dan, voz, y Warren, guitarra), el En Tejas, la temperatura sube
de su equivalente británico, el NRA no cuarteto se organiza por los colegios ma- con sonidos negroides (LeRoi
dispone de estrellas significativas. Tiene yores de Boston (1980). A través de singles Brothers, Fabulous
que conformarse con satélites de alcurnia huérfanos y posterior traspaso al sello Thunderbirds, Omar and the
que apenas cruzan el Top 50, aunque con Slash, restauran el lado más físico de la Howlers), radicales (Butthole
trayectorias tan notables como las si- tradición. Sus discos son un manual de es- Surfers), chicanos (True
guientes: tilos, vicios y virtudes del rock: guitarras Believers) o curiosidades
fieras, romanticismo viril de los Stones y (Timbuk 3).
Blasters. Precursores de primera línea, rockabilly... (Longest day, 1984) que ha ido
aparecen entre el fragor punk de Los Án- canjeando brío por intensidad contenida
geles (1978) con una sólida puesta al día cada vez más aplacada (Boston Mass,
de las raíces maltrechas del rhythm and 1985). Con Stand up (1987) se dejan crecer
blues y el rockabilly. Su cosecha propia tie- el pelo, pero no la inspiración que conti-
ne vocación de clasicismo (Marie Marie). núe el encanto anterior de I still want you.
El álbum America music (1979) es su de-
Dream Syndicate. Reclutados en Los Án-
geles por Steve Wynn, crítico musical uni-
versitario, prologan la vuelta al rock y las
guitarras -primero como Goat Deity- y
la moda de las falsificaciones. Dream
Syndicate (1982) les descubre como la más
subversiva reencarnación de la Velvet Un-
"ME GUSTABAN PISTOLS Y RAMONES, PERO TAMBIÉN LOS DB'S. EL `HARDCORE'
ES AHORA TODAS ESAS COSAS, MENOS 'HEAVY METAL" (Bob MouId, Husker Du)
El
derground, confirmada por la belleza agi- viduals, E Types), es presidente del Club
tada de Days ofavine and roses (1982), don- de Fans de Blondie y crítico en Slash
de añaden sulfuro garajista. Tenían un Magazine. Con su parecido a Marlon
country también se guitarra (Karl Precoda) empeñado en ser Brando, sus aullidos quebradizos y su
beneficia de la reactivación Neil Young, y una popularidad que crece pose de excesos (a lo Jim Morrison),
rockera. Su contagio paralela a sus problemas (la marcha de la guía al cuarteto por una tempestad de
engendra figuras bajista Kendra Smith). Medicine show egos, fugas y retornos -estancia en los
regeneracionistas como (1984) fracasa en sus miras mayoritarias Cramps de Powers- y una pionera rein-
Dwight Yoakam, un hillbilly que entre desorientación y asfixias jazzísticas. serción de blues bastardos, country, rock
triunfa en los locales Wynn, que ha producido'a grupos afines pantanoso y otros brebajes, fletados en
nuevaoleros de Los Ángeles: (True West), se alía eventualmente en tres desiguales álbumes oficiales: Fire of
planta de duro retraído y ecos Danny & Dusty (1985) con sus amigos de love (1981), Miami (1982) y Las Vegas
de Hank Williams. Frente a él, Long Ryders y Dan Stewart (Green On story (1984). Música desesperada y gui-
Steve Earle viaja de San Red). Finalmente, reinaugura un Dream tarras crudas de ineficacia comercial
Antonio a Nashville alterando Syndicate más insolvente y de mayor las- que Pierce reajusta en Europa con ma-
esquemas con voz zumosa, tre guitarrero (Out of the grey, 1986). yor control melódico en solitario (Wild-
mirada social y canciones con weed, 1985). Semiolvidado, ha reorgani-
dignidad de Bruce Fleshtones. Grupo insignia del nuevo rock zado un Gun Club con bajista japonesa.
Springsteen del género. Más de garaje, son pioneros absolutos. Mien-
puristas resultan Randy tras Nueva York se hace punk, surgen en Husker Du. Sus pintas son un desastre.
Travis o las Judds, madre e hija. 1976, de la tozudez de su líder, Peter Za- Un guitarrista de aspecto anodino, un ba-
remba, y de Keith Streng (guitarra), decidi- jista con bigote fin de siglo y un batería
dos a rehacer el Grandes Exitos de la pre- melenudo que firma las piezas más transi-
psicodelia sesentista: órganos bizqueantes, das (Sorry somehow). Pero, provenientes
riffs trogloditas y todos los clichés, glorias y del punk más brutal que se hacía en Min-
manías del género, transformados en es- neapolis, han diseñado una innovadora
pontáneas maravillas propias que ensom- autopista de implacable velocidad con
brecen a sus inspiradoras. Sin embargo, la melodías delicadas, énfasis lírico (folk-
mala suerte les persigue. Sus primeras gra- rock), versiones de Byrds y Beatles y men-
baciones sólo ven luz en single (American sajes positivos. Catarsis de dos minutos e
beat). El álbum deberá esperar cuatro años i mpacto sin respiro recogidas desde 1980
(Blast off, 1982). No venden mucho, pero
expanden la fiebre garajista. Gamberros
incurables, sus incontrolables directos pue-
den convertirse en parodia. Tras tres exce-
lentes álbumes multinacionales, han tenido
que volver a la independencia (Fleshtones
Vr. Reality, 1987).
"LLEGAMOS COMO EMBAJADORES DE AMÉRICA. PERO TENEMOS A ESE HORRIBLE
PRESIDENTE. N O QUIERO MISILES NI EN MI PATIO NI EN EUROPA" (Peter Buck,.REM)
en media docena de álbumes tan ejempla- Originarios de Nashville, Jason & The
res como Candy apple grey (1986). Traba- Scorchers dejan claro el paralelismo
jos recientes como Warehouse: songs & entre el rock y el country genuino.
stories (1987) apuntan mayor amplitud de
miras.
Los Fleshtones, una de las bandas más ground (graban tres versiones suyas), em-
festivas y veteranas del nuevo rock prenden una cruzada de canciones ágiles,
americano. mitología sureña y rock de nervio sutil:
transfusiones espirituales del pretérito
convertidas en una lección de hallazgos,
innovación y personalidad, desde su sen-
cillo Radio Europe (1980) o el inicial eco de
los Byrds (Chronic tocan, 1982) a su glorio-
so cuarto álbum (Life's rich pageant, 1986).
Ecos
INTERCONTINENTALES
JAVIER PÉREZ DE ALBÉNIZ
Países económica y culturalmente asenta-
dos, como Francia, Australia o Suecia, vie
ron cómo en la primera mitad de la década
de los ochenta decenas de jóvenes grupos
de rock surgían de sus garajes empuñando
guitarras eléctricas. Eran los hijos del punk y
la nueva ola, bandas que se alejaban dejas
estructuras clásicas ya establecidas. Musi-
calmente retrocedieron en el tiempo, absor-
biendo sonidos de los sesenta para luego
adaptarlos a su idea de lo que debe ser el
rock. De forma paralela crearon sus propios
sellos discográficos (Citadel, Big Time o
Mushroom, en Australia; Tracks on Wax y
Amigo, en Suecia; New Rose y Closer, en
Francia) y surgieron revistas especializadas a0
(la francesa Nineteen, la británica Bucket-
full of Brains y la australiana B Side), con-
virtiendo así productos teóricamente loca-
les en objeto de culto y pasión en Estados
Unidos y Europa. (1977-1981). Tomaron su relevo los No-
Siguiendo la pista a los legendarios Easy- mads, que gracias a su fuerza y a su aspecto
beats (1967-1970) y Radio Birdman (1974- se han convertido en la formación de moda
1980), en Australia han surgido nombres entre la psicodelia española. Radicalmente a música que se hizo
como los Sunny Boys, con raícen en el punk opuestos a los Nomads, los Watermelon en los años sesenta fue algo
y el rhythm and blues. Entre 1980 y 1984 lan- Men basan su poder en unas magníficas magnífico, de eso no hay
zaron tres sólidos elepés, y son objeto de un composiciones y en el buen hacer de sus duda. Pero la mayoría de
especial respeto entre los grupos de su país. tres guitarristas. Wayward Souls cuentan nuevos grupos de garaje creo
Tbe Church son conocidos en España gra- con intensas canciones y buen sonido. Por que lo entienden de forma
cias a la edición de su discografia básica. el lado pop, los Pushwangers ofrecen vibran- equivocada. Intentan sonar
Tienen en el bajista y cantante Steve Kilbey tes canciones escritas por Nome y Adolf como entonces, quieren ser
un líder claro; las limpias guitarras y la pro- Krant, cantante y guitarrista, respectiva- más de otra época que de
funda y sugerente voz hacen inconfundible mente, de la banda; los Playmates llaman la ésta, y eso no siempre es
cualquiera de sus temas. Más turbulentos atención con su primer elepé, producido por bueno. Vivimos, nos guste o
son The Saints, cuyo elepé de debú, I'm dos monstruos sagrados del rock australia- no, en los ochenta".
stranded, fue el primer elepé de rock austra- no, Álan Thorne y Rob Younger. Respecto
liano editado en España (1977). Vivirán tan- a los Sinners, los Shoutless o Tbe Stomach
to tiempo como lo haga el cerebro y único Mouths, decir que coinciden en la juven-
miembro fijo del grupo, Chris Bailey. Otros tud de sus miembros y una pasión desen-
grupos con proyección internacional son los frenada por las guitarras.
Hoodoo Gurus, respaldados por tres magní- En menor grado otros países europeos
ficos elepés, y los Lime Spiders, quinteto de han gozado del nacimiento de grupos de
guitarras apocalípticas e ideas tremenda- garaje, siendo Francia el más activo a ni-
mente claras; seis años después de grabar vel discográfico. Bandas veteranas, como
de forma independiente han fichado por Little Bob Story, Gamine o Dogs, compar-
una multinacional. ten escenarios con otras que apenas llevan
En Suecia el único grupo memorable de tres años en la carretera: Kid Pharaon, Les
rock de la década de los setenta fue Problem Boy Scouts, Surrenders o Les Thugs.
Dejando aparte a los prolíficos Milk-
shakes, los grupos británicos no tienen el
fanatismo de los anteriores. Entre los que
trabajan con base en los sonidos de los se-
senta, aparecen The Mighty Lemon Drops
y los ácidos That Petrol Emotion.
"MITIFICAMOS DEMASIADO A LOS PIONEROS: TENGO MUCHAS FILMACIONES DE
EDDIE COCHRAN, Y NO ERA LA BESTIA SALVAJE QUE IMAGINABA" (Brian Setzer)
En los discos de Marc Almond aparecen sas, excitaciones marchitas, tumores espi-
abundantes referencias a la rituales y, sobre todo, sexo en sus acepcio-
subcultura gay española. nes más abruptas.
Cuando en 1984 sobrevino la separa-
ción del dúo, a nadie le sorprendió: su lí-
der había amenazado varias veces con el
retiro, cansado de recibir duras críticas y
verse continua e inoportunamente acosa-
do por sus fans. Ya entonces navegaba su
siguiente empresa, Marc & The Mambas,
engendrada paralelamente a Soft Cell, y
con la que Almond renunciaba radical-
mente a cualquier tipo de concesión, pa-
sando a cultivar piezas intimistas y melan-
cólicas donde apenas aparecen instru-
mentos eléctricos. Nacen así discos como
Untitled (1982) y Torment & Toreros
(1983), en los que se dan cita homenajes
oscuros (Scott Walker, Jacques Brel,
Eartha Kitt, Peter Hamill, Syd Barrett,
Lou Reed), incursiones por el flamenco y
pesadillas emocionales de dificil remedio
que apenas obtienen un impacto comer-
cial mediano. A su autor no parece preo-
cuparle e insiste en investigar terrenos ce-
nagosos, a veces, con otros hijos del ago-
bio como Matt Johnson, Genesis P. Orrid-
ge, Lydia Lunch, Nick Cave o Jim Foetus.
Después de tres años de actividad, los
Mambas se transforman en The Willing
Tengo continuas batallas Sinners; el pequeño cabecilla parece inte-
con las compañías resado en proporcionar asequibilidad a su
discográficas. Me gusta que repertorio, pero los resultados no le son
sea así, aunque a la larga acaba ARC ALMOND, favorables, aun a pesar de que los popula-
convirtiéndose en algo res Bronski Beat le devuelven a los cana-
negativo: no apoyan mis discos, EL SUPERVIVIENTE les comerciales invitándole a cantar en
siempre aparece la misma uno de sus discos. Stories ofJohnny (1985)
excusa: "Es muy bueno, pero no DE SODOMA es su último intento de retomar la popula-
es lo suficientemente poppy". RAPA CERVERA ridad; sabedor de que su peculiar cabaret
Por eso me considero como un En medio del dramático proceso en el que sonoro tiene pocas posibilidades de sedu-
fugitivo del pop. Intento cientos de músicos pierden paulatinamen- cir a la masa, opta definitivamente por ha-
expresar algo más. te todo tipo de prejuicios y pudor con tal cer estrictamente lo que le apetece: experi-
de alcanzar la anhelada fama, despuntan mentar con sonidos mediterráneos, trans-
algunos casos de honesta tozudez que se cribir musicalmente a Bataille, registrar
Marc Almond, 1987. versiones de sus canciones favoritas.
mantienen fieles a sus propósitos, aunque
ello les valga perder su trono en el Olimpo Su último elepé, Mother fist and her five
del pop británico. Marc Almond (1957) es daughters, sigue reflejándole como una rara
un ejemplo latente y estimulante: saboreó avis de nerviosa sensibilidad, eternamente
los placeres del triunfo con un éxito rotun- problemático para el mojigato stablishment
do y utilizó tales privilegios para proyec- (Radio One, de la BBC, prohibe la emisión
tar sus más privadas obsesiones, estable- de sus singles con regularidad) y amante de
ciéndose a cada nuevo movimiento como referencias poco usuales en el adocenado
un artista dificil. Estaba escrito desde el territorio pop -Truman Capote, Concha
momento en que conquistó las listas de Piquer, Carmen Amaya-. Un talento nato,
medio mundo gracias a una versión elec- crispado y sorprendente que, paradójica-
trónica de Tainted love, un viejo tema soul mente, cuenta con una legión de incondicio-
que en su voz adquiría mil connotaciones nales (los gutterhearts), en su mayoría ado-
morbosas. Era en 1981 cuando Almond y lescentes, que todos los años celebran una
Dave Ball -hábil malabarista de la ciber- convención en honor a su ídolo. Lo cual no
nética- daban vida a Soft Cell, un inteli- deja de ser altamente significativo.
gente proyecto donde, bajo infalibles tru-
cos de sintetizador, habitaban historias
que otros no se atrevían a contar, libera-
das por la apasionada garganta del voca-
lista a lo largo de tres álbumes y numero-
sos sencillos de dispar aceptación, encu-
briendo sensaciones variopintas y peligro-
"TRABAJO MUCHO PORQUE LA ÚNICA FORMA DE SENTIRME VIVO ES APRENDIENDO,
CREANDO NUEVAS COSAS. ¿DE QUÉ SIRVE LA VIDA SI NO?" (T. Rundgren)
TODD RUNDGREN:
VISIÓN DE GRANDEZA
ANTONIO DE MIGUEL
Todd Rundgren magnetiza adjetivos,
ideas polare, habilidades, calidades y vir-
tuosismos. Magnetiza también chaladu-
ras de diverso calibre, casi todas plausi-
bles. Compositor, multiinstrumentista,
productor, ingeniero de sonido, videoar-
tista, osado aventurero, utópico, su carre-
ra es beatificamente inclasificable. Es de
los que derriban murallas con el verídico
soplo de la imaginación. Todd, el feo y
anémico, ha soplado sobre viejas carrozas
para devolverles su fragancia original, ha
lanzado novísimas estrellas a lo alto del Algunos de ellos, dobles, y los senci-
cosmos rockero y siempre ha hecho dia- llos, dotados de un minutaje exagerado.
bluras en todo lo que ha rozado. Soliloquios barrocos, en gama.d e arco iris
La vida de El Brujo -apodo sugerido estilístico, cobertura que se derrama des- omo productor e
por él mismo en uno de sus discos- re- de el simbolismo romántico a la más eso- i ngeniero de sonido, forman
cuerda la de los combatientes enciclope- térica apología del futurismo. Es Rund- l egión los nombres de los
distas del siglo XVIII, los de la razón uni- gren en estado puro, construyendo su ahijados de Todd Rundgren: The
versal. Esa razón y ese latido polivalente mundo egoísta porque él se basta y se so- Band, Jesse Winchester, New
que ha llevado el nombre Todd Rund bra para engendrar, gestar y alumbrar a York Dolis, Fanny, Paul
gren a su ayuntamiento figuras del sus hijos del sonido. Butterfield Blues Band, Grand
más variado espectroscopio musical con- Hermit. of mink hollow (1978), Healing Funk, Janis Joplin, Badfinger,
temporáneo. (1981), The ever popular tortured artist effect Hall & Oates, Cheap Trick,
Nació en 1948 en un barrio de Filadel- (1983) o el disco de voces solas A capella Laura Nyro, Meat Loaf, Tom
fia (Pensilvania); autodidacto en varios (1985) son nuevas muestras flagrantes de Robinson, The Tubes, Patti
instrumentos, precoz amante de la elec- su autosuficiencia creadora. En 1974, pa- Smith, Alice Cooper, Shaun
trónica más arriesgada, formó un par de ralelamente a su carrera solista, funda el Cassidy, Steve Hillage, XTC y
grupo Utopia. Tras un tiempo de caos en muchos otros. Rundgren es de
grupos adolescentes, hasta que en 1968 lo-gra cierta proyección con el cuarteto la formación, (con tres teclistas que dieron l os que creen que en la
Nazz, banda de soñadas ilusiones británi- pulso neurótico y salvaje al primer disco variedad está el gusto.
cas, con toques ya sofisticados y que dejó del grupo), Utopia quedaría cimentado en
grabados tres álbumes. Con poco más de Roger Powell (teclados), Kasim Sulton
20 años, el larguirucho Todd se convierte (bajo) y Willie Wilcox (batería), con Todd
en empecinado de sus historias solistas. a la guitarra y voz. La música de Utopia
Los dos primeros discos, Runt (1970) y almacena el mismo alto voltaje y capaci-
The bailad of Todd Rundgren (1971), son dad de desdoblamiento que su líder. En la
caligrafias sobre estructuras sencillas que docena de álbumes hasta ahora grabados,
dejan traslucir policromos deseos de lle- pueden sumergirse en los más recónditos
gar más allá, de trascender. Fichado por arcanos de la civilización egipcia (Ra,
Bearsville Records como ingeniero y pro- 1977) o realizar los más brillantes ejerci-
ductor, toma contacto con una gran varie- cios de estilo sobre los esquemas de Los
dad de artistas. Todd asimila, engulle y ar- Beatles (Deface the music, 1980). Todo es
chiva; todo cabe en su malévola turmix de posible en la cuarta dimensión utópica.
alquimista. Comienza la cadena de álbu- Hasta un laboratorio de vídeo de tres mi-
mes legendarios: Something / An yithing llones de dólares que la Utopia Founda-
(1972), A wizard-A true star (1973)„ Todd tion posee en Nueva York, y en el que
(1974), Initiation (1975). Rundgren y Powell se embelesan creando
vídeos para sus actuaciones e incluso pro-
gramas de ordenador que luego se comer-
cializan (caso de The Utopia Tablet). Pero
la herencia que en vida nos está dejando
Todd Rundgren consiste esencialmente en
horas y horas de tesoros auditivos. Algu-
nos genios son así de generosos.
"APRENDO RÁPIDO. CON VER TOCAR A ALGUIEN UNA CANCIÓN PUEDO
REPETIRLA, POR DIFÍCIL QUE SEA. COMO UN BUEN ESTUDIANTE" (Ry Cooder)
William Ackerman, descubridor de las das hace muchos años; en 1968, Paul Hom
posibilidades de la new age music a realizó el que hoy se tiene por precursor di-
través de su sello, Windham Hill. recto de este sonido: Inside the Taj Mahal,
improvisaciones de flauta realizadas en el
interior del templo indio. Brian Eno, Paul
Winter Consort, el ex guitarrista de Genesis
Anthony Phillips, Tomita o Tangerine
Dream son también antecesores directos de
la new age.
En Norteamérica, el detonante del soni-
do new age fue el hecho de que un pianista
desconocido llamado George Winston ven-
diera a partir de 1982 más de un millón de
copias de December, lo que obligó a las ca-
bezas pensantes a buscar una justificación
del hecho. En seguida se buscó un paralelis-
mo entre la new age y el fenómeno yuppie, y
se formuló todo tipo de teorías sobre el por-
qué del acceso del público a esta música. La
más extendida es la que habla, por un lado,
de estudiantes universitarios entre 18 y 25
años; por otro, de revenidos de la clásica,
asustados ante la asonancia de los contem-
poráneos, y finalmente, de los viejos aman-
tes del rock sinfónico y progresivo de finales
de los sesenta y principios de los setenta,
que han encontrado el remanso de paz
apropiado a sus ideas musicales en el eclec-
ticismo de la new age. Porque aquí cabe casi
todo: desde ese Vangelis romántico que es
el japonés Kitaro, los violines de Jerry
Goodman o Jean Luc Ponty, la guitarra
acústica del especialista en tapping Michael
Hedges -¿otro Stanley Jordan?-, los in-
ventos del teclista-trompetista Mark Isham
o la voz mil veces superpuesta de Claire
Hamill.
La tímida aparición, hace Fundamentalmente, podríamos hablar
11 años, de Windham Hill se ha de tres tendencias: grupo Windham Hill y
visto coronada por un
negocio que puede llegar en L JARDÍN DE Private Music, en Estados Unidos, y Coda
Landscape y Colors, en el Reino Unido,
1987 a los 30 millones de como independientes establecidas; las series
dólares. William Ackerman,
cofundador del sello junto a la
LA `NUEVA ERA' especiales creadas en sus catálogos por las
multinacionales y, en tercer lugar, las pe-
que entonces era su esposa y queñas compañías que florecen con la espe-
hoy, ya divorciados, la JORGE FLO ranza de poder sumarse al grupo selecto,
presidenta de la compañía, New age music es una etiqueta surgida en poniendo una etiqueta alusiva en la por-
Anne Robinson, recordará Estados Unidos. Trata de buscar un lugar tada.
con placer el día de 1975 en que para un conjunto de músicas que recorren Windham Hill es, sin duda, la cabeza del
unos cuantos amigos le espectros que van desde el jazz al folk, pa- meollo. Una hábil política comercial, muy
pagaron unos pocos dólares sando por la clásica contemporánea, la mú- i mitada por otras compañías rivales, basada
por un disco que todavía no sica cósmico-planeadora, la fusión o melo- en una imagen de marca muy definida, unida
existía. Con ese dinero grabó días más o menos pegajosas ya cercanas al a una estética impecable presidida por au-
Turtle's navel, solos de pop. Tomando la porción adecuada de todo ténticas láminas interiores que reproducen
guitarra, con la referencia ello y agitándola en la coctelera, el resultado la portada, son importantes en el vertigino-
Windham Hill 001. final se asemejará bastante a lo que la revis- so ascenso de la empresa, pero no habrían
ta americana Billboard decidió un buen día servido de mucho sin el boca-a-boca. Éste
llamar new age music. hizo posible que George Winston, pianista y
Alejada por completo del rock -a pesar músico insignia del sello, vendiera discos de
de los últimos escarceos de músicos nada una forma inesperada. Winter into spring,
sospechosos, como Joe Jackson, Carlos
Alomar (guitarra rítmica de Bowie), Albert
Lee o John Jarvis (ex teclista de Rod Ste-
wart)-, la new age music es una vía alterna-
tiva relativamente reciente, generalmente
acústica e instrumental, que emparenta de
cerca, sin embargo, con grabaciones realiza-
"LO DE LA `NUEVA ERA' NO ME GUSTA, SON SONIDOS PARA EMPAPELAR. PERO
SUPONGO QUE SUENA BIEN PARA QUIEN NO SEPA TOCAR EL PIANO" (Joe Jackson)
Autumn, sus primeros discos con Windham Andreas Vollenweider vende a través
de su arpa mágica un movimiento
Hill, alcanzaron cada uno más de medio mi-
ecologista y espiritual.
llón de copias, y December duplica de largo
esa cifra. Composiciones propias junto a es- pretenciosidad; la
pléndidas versiones de clásicos -sobre guitarra de Ste-
todo la que hace del Canon, de Pachelbel- phen Caudel, cuyo
y un ligero toque jazzy que bebe de un pau- disco Wine dark
sado y cálido clasicismo, son las claves del sea guarda cierto
éxito de George Winston. parecido estructu-
Junto a él hay otros buenos músicos en ral con el Tubular
Windham Hill que dan la compacidad nece- bells, de Mike Old-
saria al sello. Destacan los pianistas Scott field (no en vano
Cossu, el más caribeño de todos ellos, y Liz l os dos discos
Story (fugada ahora a Novus, sello creado comparten pro-
por una multinacional); los guitarristas Will ductor: Tom New-
Ackerman, Alex de Grassi (compañero de man, que a su vez
fuga de Story) y Michael Hedges, domina- ha dejado caer sus
dor de una inusual técnica llamada tapping, experimentos en
que lleva a tocar la guitarra como si de un dos discos de la
piano se tratara; el siempre imprevisible serie); la garganta
Mark Isham, a caballo entre los teclados y polifónica de Clai-
la trompeta, y autor de bandas sonoras re Hammill -her-
como Never cry wold o Mrs. Soffel y entre los mana de Peter- o
diversos dúos, sin duda la faceta más folkie los pianos de Ed-
del sello, Darol Anger y Barbara Higbie die Hardin y Das-
(violín y piano), Ira Stein y Russel Walder hiell Rae, la parte
(piano y oboe), Billy Oskay y Michael más clásica de la
O'Domnail (violín y guitarra); finalmente, el serie junto a Tim
único grupo formal del sello, Shadowfax, Cross, cuyo único
que curiosamente se autodefinen como una disco, Classic
banda de rock. Landscape, queda
Paralelamente, hay una serie de sellos autodefinido por
asociados o distribuidos por Windham Hill, el título. Colors es
entre los que destacan Lost Lake Arts, desti- una serie reciente
nado a recuperar viejas grabaciones, como que cuenta con
los dos primeros discos del guitarrista fran- pocos pero intere-
cés Pierre Bensusan, y Living Music, donde santes artistas: Pe
graba el saxofonista Paul Winter junto a su ter y Clive Sarstedt, Phil Thorton o Steve
Consort, de la que en su día surgió el grupo Parsons. Sus sonidos son una apacible mez-
Oregón, con Ralph Towner como cabeza vi- cla melódica y experimental.
sible. Andreas Vollenweider es, junto a Geor- o abrí las puertas
Private Music es el refugio del ex bajista ge Winston, la otra estrella de la new age. Es tocando conciertos de piano y
de Tangerine Dream, Peter Baumann. Es un músico suizo que ha sabido dotar a su l uego se colaron tipos, como
de un matiz claramente más experimental instrumento -arpa electroacústica- de George Winston, que creo que
que Windham Hill, pero ha encontrado rá- una serie de matices que lo alejan de las li- están engañando a la gente.
pidamente un hueco al contar con músicos neas clásicas y lo hacen único. Maneja há- Las implicaciones de su música,
ya conocidos que han tenido la oportunidad que se puede aplicar a todo el
de experimentar privadamente. Algunos de bilmente las secuencias experimentales-co-merciales y viaja a través de la música étni- concepto de Windham Hill, son
ellos son: Carlos Alomar, el guitarrista-violi- ca de Centro y Suramérica, envolviéndolo i nteresantes: se usa para
nista Jerry Goodman (Flock, Mahavishnu todo en melodías claramente distinguibles. meditar, para relajarse, para
Orchestra); Patrick O'Hearn, bajista del También creada por una multinacional, dormirse, para acompañar
grupo Missing Persons, o el teclista-violinis- la serie Master de MCA destaca por su de- conversaciones. Yo no creo que
ta Eddie Jobson (antiguo miembro de Jeth- dicación a los instrumentos de cuerda, prin- l a música sea para eso.
ro Tull, U. K. y Roxy Music). cipalmente las guitarras. Larry Carlton da Espiritualmente es erróneo: si
En el Reino Unido nacen Coda-Land- dos soberbias lecciones de guitarra acústica alguien se siente incómodo
scape, claramente a imagen y semejanza de en Alone, but Nver alone y Discovery. Con él, con el silencio, preferiría que no
Windham Hill, y Colors. La serie Landsca- Albert Lee, el dúo Acoustic Alchemy -to- l o tapara con mi música".
pe de Coda no está muy definida. Coexisten dos ellos guitarras- y el bajista Edgar Me-
sonidos tan variopintos como el del piano yer cierran el capítulo principal de cuerda. Keith Jarrett, 1983
de Rick Wakeman, alejado de su anterior Los teclados son para el exquisito John Jar-
vis y el meditativo Giles Reaves.
No están aquí todos, pero sí los más im-
portantes componentes de la new age music.
El resto se reparte por pequeñas compa-
ñías. De todo este aparente caos de estilos y
movimientos surgirá con el tiempo algo más
definible, pero eso será ya en otra era.
"EN MIS ACCESOS DE MEGALOMANÍA PIENSO QUE MIS DISCOS SON EL ORIGEN
DE LA FUSIÓN ENTRE EL `ROCK' Y LAS MÚSICAS REPETITIVAS" (John Hassel)
Mike Mainieri y Michael Brecker, del confluencia con la sonoridad del saxofo-
grupo Steps Ahead. nista Michael Brecker, pero sobre todo es
el resultado de una gira por Japón en 1980
del quinteto original, que incluía además
al bajista Eddie Gómez, el pianista Don
Grolnick y el batería Steve Gadd, y que
entonces se llamaba únicamente Steps.
Allí quedaron tres elepés grabados, y al re-
gresar a Estados Unidos tuvieron que
completar su firma porque Steps ya esta-
ba registrado, y en la sección rítmica, que
ya tenía a Peter Erskine sentado en la ba-
tería, se van relevando los pianistas, pri-
mero Eliane Elias, y después Warren Ber-
hardt, que cedía el puesto al guitarrista
Chuck Loeb. En 1985, Eddie Gómez
abandona, y le sustituyen Tom Kennedy y
Victor Bailey, hasta que, terminando a du-
ras penas una gira y la grabación de Mag-
netie, la banda se disuelve definitivamente
a finales de 1987, dejando otros tres tur-
bulentos álbumes editados en el mercado
americano. Las carreras solitarias de los
protagonistas de esta historia no han dado
hasta ahora resultados mejores.
Pero Steps Ahead no es sino la cresta
de una gran corriente musical en la que se
pueden encontrar grupos como los Ele-
ments, del bajista Mark Egan y el batería
Danny Gottlieb; Special EFX o, por cami-
nos paralelos, las experiencias de los Free
En los años ochenta, la Flight, que incorporan la música clásica a
influencia del rock en la música su fusión, e incluso los músicos que graban
de fusión es más profunda
que en los anteriores. En USION Y para la GRP o los californianos Yellow
Jackets.
consecuencia, algunos de sus GRP es el sello ideado por Dave Gru-
protagonistas actúan en
circuitos tradicionalmente
PROFUSIÓN sin y Larry Rosen, en el que militan, apar-
te del teclista Grusin, instrumentistas tan
destinados a las bandas de XABIER REKALDE singulares como los guitarristas Lee Rite-
rock, con las que comparten Si hay algún error extendido es el de con- nour o el joven Kevin Eubanks y el flautis-
también clientela e incluso siderar lafusion music de los ochenta como ta Dave Valentin. Su oferta estilística sue-
catálogo discográfico. Es el una mera prolongación del jazz-rock que le considerarse demasiado lineal y exage-
caso de Miles Davis, George se hacía en la década precedente. Acaso radamente próxima al sonido muzak, y
Benson, Al Jarreau o algunos esto sólo sea cierto aplicado a la gran pro- puede que sólo sea un desatino parcial en
grupos alternativos, como liferación de émulos del Return to forever, el caso de Ritenour. En el mismo saco se
Slickaphonics. de Chick Corea, que aún hoy siguen apa- puede meter al guitarrista de sesión por
reciendo, y en menor medida de Weather excelencia, Larry Carlton, al teclista Bob
Report, precisamente cuando ambas fór- James, y puede que hasta al saxofonista
mulas se han agotado y quienes las idea- Dave Sanborn, todos ellos en la parte téc-
ron andan buscando nuevos caminos. In- nica dotados pero escasamente inspira-
cluso el propio padrino del jazz eléctrico,
Miles Davis, se tomó un descanso para re-
gresar con un discurso rítmico renovado.
En un momento en que la Weather up-
date de Joe Zawinul no ha conseguido
otra cosa que reproducir los peores tics
estilísticos del último Weather Report,
Wayne Shorter no parece atinar con la
sección de ritmo que le conviene, y la
Chick Corea Electric Band tiene más de
virguería instrumental que de receta, apa-
recen formaciones con una propuesta ma-
dura y original, como la americana Steps
Ahead, la europea United Jazz & Rock
Ensemble o la japonesa Casiopea.
Steps Ahead es el producto de la inicia-
tiva del vibrafonista Mike Mainieri y de su
"YO CREO EN LAS MEZCLAS. ¿POR QUÉ NO EL `REGGAE-JAZZ'
O EL `JAZZ-CALYPSOT' (Courtney Pine, saxofonista británico, 1987)
Los
FRANCOTIRADORES
DIEGO A. MANRIQUE
No fue un maridaje antinatural. A mi-
tad de los sesenta comenzó el flirteo en
tre figuras del rock y compositores se-
rios. Conscientes o no de los preceden-
tes, los Beatles usaban desde 1966 téc-
nicas que eran anteriormente patrimo-
nio de los laboratorios de música expe-
rimental. En California, Frank Zappa
alternaba su rock corrosivo con piezas
orquestales, sin poder soñar que un día
algunas serían grabadas por Pierre
Boulez. De la orilla académica también
se escapaban almas curiosas. El com-
positor electrónico francés Pierre Hen-
ry utilizaba guitarras eléctricas y reali-
zó incluso un elepé con los británicos
Spooky Tooth (Ceremony, 1969). En
todas las latitudes, músicos de forma-
ción clásica entraban en grupos: Phil
Lesh, acólito de Luciano Berio, se inte-
graba en los Grateful Dead de San jazzmen, estrellas de las listas y van- nas del rock o en el onanismo de algu-
Francisco. El galés John Cale, vecino guardistas beligerantes en sus discos- nas escuelas contemporáneas. A esa
de Nueva York gracias a una beca de homenaje a Nino Rota, Thelonius tierra de nadie llegan los rayos del ví-
Leonard Bernstein, se emborrachaba Monk y Kurt Weill. O que el Kronos deo (Nan June Paik, John Sanborn, Kit
de decibelios turbios con The Velvet Quartet, consagrado a la interpreta- Fitzgerald, Robert Ashley), la danza
Underground. El alemán Holger Czu- ción de nueva música, ataque el Purple (Meredith Monk, Laura Dean), el tea-
kay, seguidor de Stockhausen, descu- haze, de Jimi Hendrix, con violines y tro (Robert Wilson). Geográficamente,
bría el rock a través de sus alumnos, de- violonchelo (David Bowie usaba esa esta zona suele situarse en Nueva
sembocando en Can. Incluso un puña- grabación para la apertura de sus con- York, que tiene, aparte de las golosinas
do de notables de la vanguardia califor- ciertos de 1987). Por no reiterar los conocidas, un presupuesto para las ar-
niana formó un quinteto de rock bajo el muchos lances de Philip Glass con ha- tes que supera al de los otros 49 Esta-
nombre de United States of America bitantes del planeta rock. dos combinados. Subvencionados o in-
(1968), insigne germen de futuras dis- Gentes recelosas pueden ver en dependientes, los músicos más testaru-
torsiones. esos gestos simples concesiones a la dos y fisgones terminan cultivando los
Los años sesenta, con sus terremo- potencia económica del mercado del prados artísticos del bajo Manhattan.
tos culturales y la voracidad por la ex- rock, aunque sería más generoso expli- Docenas de nombres propios. El
perimentación en libertad, fueron pro- carlo por coincidencias de sensibilidad, compositor-saxofonista Peter Gordon,
picios a estas aventuras (nada que ver, sincronía generacional y la fecundación cabecilla de la festiva Love of Life Or-
por cierto, con las tortillas de rock y clá- de artes, géneros y culturas que definen chestra; Simon Jeffes, otro simpático
sicos que tan populares se harían pos- al tiempo presente. El atrevimiento se excéntrico británico, cuya Penguin
teriormente). Ya en los setenta, Brian justifica con las carreras de artistas Cafe Orchestra hace gala de interna-
Eno usaba su capital pop para ejercer proteicos que rehúsan caer en las ruti- cionalismo. La aterradora vocalista
de mecenas con músicos vanguardis- Diamanda Galas. Viajeros intercultu-
tas, a la vez que introducía el veneno rales como Richard Horowitz. Más in-
conceptual de John Cage en las cabe- dividualidades evasivas: Blue Gene
zas de grupos populares. Para algunos Tyranny, John Zorn, Arto Lindsay,
compositores clarividentes, el rock Harold Budd.
ofrecía abundantes alicientes: la tecno- En las (raras) tiendas donde pue-
logía puntera, el poder de comunica- HISTORIA DEL `ROCK' den encontrarse sus discos aparecen
ción, el reencuentro con el baile. Así se por sorpresa en las estanterías de
han cruzado miles de trayectorias que,
desdeñando el esnobismo de ambos
PRóXIMO CAPÍTULO rock, jazz, clásica, new age music o
vaya usted a saber. Lo de menos es la
campos, impulsan enriquecedores tras- etiqueta: están creando universos so-
vases. El clima actual posibilita que el noros que se resisten a ser bauti-
productor Hal Willner pueda reunir a LA INDUSTRIA zados.
HISTORIA DEL `ROCK'
Aparte del valor artístico que se desee conce-
derle, el rock es indudablemente una indus-
tria. Con dos actividades principales: la in-
terpretación en directo y la grabación de la
música. Las compañías fonográficas son las
que llevan los sonidos al consumidor, previa-
mente plasmados bajo la dirección de un
productor, usando una sofisticada organiza-
ción de mercadotecnia, promoción y distri
bución. La música en vivo tiene otro entramado: managers, agentes, promotores,
circuitos de locales. Como se puede suponer, ambas vertientes se complementan,
y su buen funcionamiento resulta vital para la creatividad del artista.
la hora de la verdad para cualquier tipo de Grupos punteros, como ¡ron Ma¡den,
banda. Un ritual que, a su vez, potencia utilizan imponentes montajes
escénicos.
ventas y popularidad.
La irrupción de las discotecas a finales el programa de
de los sesenta supuso un descenso de la fiestas de figuras
música en vivo. Más que nada en lugares pop más consoli-
como España, donde el obvio ahorro entre dadas plantea la
comprar discos y pagar a un grupo, junto a polémica sobre
la falta de legislación sobre estos temas, los excesivos ca-
recluyó a los grupos de rock en festivales chés de éstos, in-
mugrientos y veladas universitarias, hasta viables para la
que la modernidad de los ochenta hizo contratación pri-
viable la apertura de salas de conciertos vada.
como Rock-Ola (Madrid) o KGB (Barce- Tal gestión se
lona). Fuera, la tradición de los pubs y pe- realiza mediante
queños locales con música, por el contra- agencias de con-
rio, se convirtió en una alternativa al rock tratación, que se
de gran cartelera. encargan de esta-
También la estrategia de actuar ha va- blecer o regatear
riado. En un tiempo, los grupos tocaban precios, exigen-
i ndiscriminadamente, especialmente cias del artista o
como animadores de fin de semana. Pero alquiler de equi-
la implantación mayoritaria del pop y la po. Pero todo
ascensión meteórica de las ventas de dis- esto no funciona-
cos llevaron a managers y compañías a ría sin la figura
promover la idea actual de giras: actuacio- clave del manager
nes consecutivas coordinadas por todo el o representante
país y el extranjero, oportunamente simul- del grupo. Él es
táneas al lanzamiento de nuevo material y quien vela por sus
que permite luego períodos de descanso intereses, previo
creativo. Por aquí, hasta bien entrados los convenido por-
ochenta, con grupos como Barón Rojo, centaje. Discute
Ilegales o Radio Futura, tal práctica siguió con la compañía
siendo el sueño inalcanzable. de discos, coordi-
Sin embargo, frente a los grandes even- na la promoción,
tos que atestan los estadios, controlados procura actuacio-
por magnates del espectáculo como el in- nes y cuida de su
glés Harvey Goldsmith, existe una sólida i magen. Puede
red alternativa de colegios mayores y clu- disponer de su
bes por los que grupos noveles pueden propia agencia de
abrirse camino a lo ancho del país. Son si- contratación o delegar en alguna de con-
tios de audiencia fiel y receptiva donde el fianza. Entre ellos hay de todo. Tipos avis-
maletín de dólares en metálico -usual pados, volcados en sus protegidos, mode-
forma de pago a grandes atracciones- se lo Brian Epstein (Beatles), aunque la ex- 1 atractivo volumen
trueca en un modesto porcentaje. Es un periencia habla más de gente sin demasia- económico del rock y la
circuito que comienza a establecerse en dos escrúpulos que medra a costa de sus exigencia de calidad y de
España sirviendo de paso a artistas meno- pupilos. Es ya un tópico: a medida que se reproducir en directo las
res extranjeros en gira. Al frente suele ha- asciende hacia la cumbre se supone que el depuradas grabaciones han
ber gente joven interesada por la música. olor a corrupción, tejemanejes y piratería fomentado el desarrollo de la
Algo que comparten con los animadores es más intenso. Hay empresas de manage- i ndustria electrónica. Docenas
culturales de los ayuntamientos. Desde la ment modélicas que creen en sus artistas y de nuevas marcas y empresas
transición, el pop forma parte de los presu- crecen con ellos. Pero igualmente se dan aparecen cada año
puestos municipales, dando oportunidad miserias sangrantes, contratos leoninos, compitiendo en ofrecer el último
a formaciones locales o nacionales que co- porcentajes ilegales e incluso drogodepen- i ngenio en luminotecnia y
mienzan a sonar, mientras la inclusión en dencias. Por último queda el personaje sonido, desde las varilights
más sufrido: el manager de carretera computadorizadas
(road-manager). Es el responsable en la (combinaciones programables
sombra de la organización o caos de giras de cortinas luminosas) a los
y actuaciones. Se ocupa de hoteles, comi- sistemas de monitores
das, horarios, atención a los medios, segu- auriculares, micrófonos e
ridad del grupo y resto del personal. Es la i nstrumentos inalámbricos e
mano derecha del manager. Supervisa el i nstalación de vídeos.
equipo. Se encarga de cobrar y controlar
los servicios exigidos, la puntualidad de
los afinadores, maquilladores y demás,
para que todo esté a punto cuando las lu-
ces del recinto se apagan.
"DE LAS COMPAÑÍAS DE DISCOS SÓLO QUIERO QUE SEPAN VENDER LO QUE HAGO,
COMO SI SE TRATARA DE DETERGENTES. ES UN PRODUCTO MÁS" (Graham Parker)
Malcolm McLaren; sus tácticas con los mente posible el sonido que el artista ofrecía
Sex Pistols revelaron los puntos en un escenario. Hasta que llegaron Les
débiles de la industria del disco. Paul y otros manitas que empezaron a jugar
con las posibilidades de magnetófonos,
mi-crófon symezcladores.Resultóque les-
tudio de grabación era en realidad otro ins-
trumento (y el más importante de todos
ellos). Un disco no tenía por qué duplicar
una actuación: se trataba de un proceso au-
tónomo, limitado únicamente por la tecno-
logía disponible y la inventiva de los impli-
cados. El punto de inflexión fue 1967: los
Beatles publicaron Sgt. Pepper's, un disco
irreproducible sobre el escenario en aquel
momento; grupos como Jefferson Airplane
confesaron que su audición les hizo retornar
al estudio, a reanudar el trabajo en cancio-
nes que ya daban por completadas.
Así, el disco se proclamaba como princi-
pal medio de expresión del rock, tanto por
los retos artísticos que suponía una graba-
ción como por la golosa plusvalía que gene-
raba. Por tanto, las discográficas se trans-
formaron en las detentadoras del poder de
la industria musical.
Esta situación dominante convierte a la
rama discográfica en el villano de la pelicula
del rock. Se denuncia su carácter casi mono-
polístico, se airea su poder homogeneizador
a nivel mundial, se recrimina su insensibili-
dad ante las músicas minoritarias, se re-
cuerda su escaso aprecio (prensajes defi-
cientes, descatalogaciones rápidas) por las
dimensiones culturales del producto que
manejan. Y surgen alternativas: artistas con
peso específico (Beatles, Rolling Stones,
Led Zeppelin, Elton John) fundan sus pro-
pias casas, proclamando su intención de ha-
cer las cosas como se deben hacer; sin em-
bargo, estas marcas se conforman final-
mente con editar los discos de los propie-
tarios. A partir de 1977, las independien-
tes surgidas del volcán del punk y la new
wave realizan una labor más contundente,
La industria de la aunque también terminan barriendo su
música es muy vulnerable. En idealismo debajo de la alfombra o deján-
los viejos tiempos ya se decía
que las máquinas de discos
ODO ESTÁ dose absorber por las grandes. Pero la ju-
gada más eficaz es posiblemente la de
estaban controladas por Malcolm McLaren. Los Sex Pistols son
gánsteres. Es fácil creerlo: se EN LOS SURCOS contratados en pocos meses por tres com-
supone que todo esto es pañías diferentes, llevándose en cada fir-
rutilante y que el éxito es algo DIEGO A. MANRIQUE ma importantes cantidades de dinero. Y
fácil. Para la gente, este tipo El concierto es sólo la punta del iceberg. Se esto ocurre en público, con McLaren re-
de éxito siempre debe estar trata de la parte más visible de la actividad calcando las lecciones: las discográficas
asociado con negocios del rock Y la más mitificada por público y pueden ser utilizadas si se pulsa la cuerda
sucios. La verdad es que aquí músicos: se supone que equivale al taurino de su inseguridad ante el temor de perder
no ocurre ni la décima parte momento de la verdad, que posee cualidades el tren de la actualidad. El quid de la cues-
de lo que pasa en otras mágicas que redimen todo lo que le rodea tión: tener una posición de fuerza -o fin-
empresas respetables que se (locales desagradables, violencia, rutina, ex- girla- para lograr que el imperio de la
cotizan en la bolsa".. plotación). Pero el rock se cristaliza en dis- música grabada esté al servicio del artista,
cos. Discos realizados en estudios de graba- y no al revés.
Godard Lleberson, ción (ya se sabe que los elepés en directo
presidente de CBS, 1973 suelen ser concesiones contractuales, argu-
cias para tapar sequías creativas).
Antes de la llegada del rock and roff (y
durante sus primeros años), el ideal de una
grabación era que reprodujese lo más fiel-
"UNA DISCOGRÁFICA NECESITA GENTE CREATIVA Y CON SENTIDO COMERCIAL.
DE OTRO MODO, DESAPARECE" (Chris Wright, Chrysalis, 1982)
Un estudio
de grabación.
L #S CLAVES DE LA
MÚSICA GRABADA
JOSÉ MARTA CÁMARA
Entre los conceptos que conviene aclarar
cuando se habla de compañías de discos está
la denominación en sí misma. Desde la
frontera tecnológica actual, cualquiera pue-
de preguntarse por qué diablos los soportes
fonográficos al uso, todos, incluyen en su
esencia funcional la necesidad de girar alre-
dedor de algo (con harta frecuencia a veloci-
dad sospechosa). La respuesta es tan simple
como esperanzadora: en el momento pre-
sente son aún estos soportes especializados
en el almacenamiento y reproducción de da-
tos los que garantizan una mejor relación
coste-eficacia para el cumplimiento de su
función.
En un próximo futuro, las nuevas gene-
raciones de soportes informáticos, con po-
tentísimas capacidades de memoria, accesi-
bilidad instantánea, precios altamente com-
El
petitivos, tamaños más reducidos y dura- sionar la comunicación social con sus erro-
ción indefinida, salvo destrucción premedi- res o aciertos,. a las compañías de música
tada, darán lugar a la próxima revolución de grabada les ha sido asignado, además, el pa-
los soportes musicales. Éstos dejarán de gi- pel de villano. Abandonarse a esta dialécti- papel de un
rar, cediendo el incómodo papel a los elec- ca parece irrespetuosa pérdida de tiempo y ejecutivo discográfico es
trones, y el único ruido de fondo perceptible estúpida contemplación de ombligos sin in- l ocalizar a los artistas
durante la reproducción será el de mister terés. Ya se encarga la sociedad de sacudir- emergentes, amamantarlos
Edison revolviéndose en su tumba. se de encima a quienes no cumplen eficaz- (lograr que tengan el
Desde que el famoso inventor grabó por mente su función y generar alternativas. productor, el agente y el
primera vez el sonido en forma susceptible Sean electrones en orgía natural o plásti- manager adecuados) y luego
de reproducción en un cilindro recubierto cos con vocación derviche en día de santo lanzarlos. Hay que conocer los
de negro de humo hasta el chip pronostica- patrón, la música que transportan es el re- i ngredientes que hacen de
do, la gama de soportes utilizados por las sultado de la creación intelectual e indus- una música algo excitante y ser
compañías de discos ha sido y será muy am- trial de quienes la generan. Salvo yuppies en capaz de oler el potencial del
plia para el cumplimiento de una misma estado terminal, nadie compraría soportes éxito comercial. Es peligroso
función: la grabación, reproducción y difu- sin contenido por muy última tecnología ser demasiado avanzado,
sión de música Salvo resignarse a una defi- que representen. Al comprar un soporte pero es aún más desastroso el ir
nición incorrecta, es momento de revisar la grabado se adquiere la facultad de acceso a retrasado con respecto al
misma y adoptar la correcta: compañías de la música que contiene. Al disfrute de un tiempo presente".
música grabada. bien creado por alguien. Alguien que debe
A través de la grabación susceptible de ser remunerado por quienes usufructúan Clive Davis, director de CBS
reproducción masiva y eficaz, el papel bási- en cualquier forma ese bien. Sólo los cíni- y fundador de Arista, 1974
co de una compañía de música grabada es el cos irredentos se atreverían a defender
de detectar el talento y contribuir a su difu- que el creador desarrolle su función sin la
sión. Que en ese proceso se utilicen unos u correspondiente remuneración y recono-
otros métodos tecnológicos es irrelevante cimiento social.
en relación a la función primigenia. Pero mientras los saltos cuánticos en la
Tradicionalmente, como ocurre con to- tecnología anuncian un futuro aún más pro-
das las instituciones en posición de distor- metedor para el uso y el disfrute de la músi-
ca grabada, el desfase legal propiciado por
tan espectaculares avances técnicos amena-
za con el expolio de los creadores y propie-
tarios del hecho sustantivo. Sólo a través
del restablecimiento del equilibrio perdido
entre los derechos de los creadores y pro-
pietarios de la música grabada y las nuevas
"PRETENDEMOS CREAR ARTE, PERO COMO SOMOS EMPRESAS CAPITALISTAS,
BUSCAMOS EL MÍNIMO COMÚN DENOMINADOR" (Jerry Wexler, WEA, 1976)
En el gráfico,
los diferentes pasos de una
producción discográfica.
dio de un artis-
ta vendedor en
Estados Uni-
LAS LABORES dos ronda los
48 millones de
Lo
un día -caso del primer álbum de los y músicos. Y una tercera está destinada a
Beatles-; en la actualidad se puede tar- la tecnología: alquiler de instrumentos y
dar incluso años -caso del último álbum efectos de grabación. primero, lo más
de Michael Jackson. El productor es el alquimista que com- i mportante para un productor,
Tanto George Martin como Quincy Jo- bina estas tres partidas. Su magia y cono- es hallar y trabajar con un
nes -tal vez los más famosos producto- cimientos constituyen una química que artista que le gusta y en el que
res del mundo- coinciden en señalar que trata de mezclar el arte y la técnica con cree. Igualmente, el material
el futuro de un disco depende de la fe in- naturalidad. Es a veces también el epicen- debe ser el adecuado: el
quebrantable del productor con el artista tro de la fiebre creadora del artista y la productor debe estar
a producir. Existen dos caminos por don- ambición mercantilista de la compañía convencido de que las
de puede llegar la fe. El primero es el más discográfica. De su equilibrio depende la canciones encajan
directo. El productor recibe una maqueta producción de un buen disco. perfectamente con el artista. El
del artista y convence a una casa de discos Como en el cine es el director, el produc- productor también debe
para que el artista pueda grabar. El segun- tor es el responsable del editaje final, de la tener el tacto o la diplomacia
do camino es que el director artístico de mezcla final. Todavía hay tres procesos más para lograr que prevalezca su
una compañía encuentre al artista y elija antes de la publicación del producto. Tres opinión sin que eso resulte
al productor ideal. En cualquiera de los procesos que no están incluidos en el presu- demasiado obvio.
dos casos se llega al compromiso de un puesto del productor. Uno es técnico y tiene Finalmente, el productor tiene
presupuesto de grabación. Presupuesto que ver con el desarrollo del producto. Es que desarrollar la habilidad
que, en el caso de un artista español, dificil decir, corte de acetato para la matriz del de convertir una idea en sonido,
es que llegue a los 10 millones de pesetas, disco, cinta master para la casete y ahora usando su imaginación al
incluso en el caso del artista más vende- también cinta digital para la fabricación del máximo".
dor. Por el contrario, el presupuesto me- compactdisc. El segundo proceso es la crea-
ción de la imagen del artista y la portada. Y George Martin, productor de
el tercero, cada día más decisivo, la merca- l os Beatles, 1983.
dotecnia del producto. Al final, el productor
y la producción de un disco se debaten entre
la materia y el espíritu.
tos en ese tipo de trabajo. Las cancio- Bruce Springeteen (en la foto, con
Southelde Johnny) es un enamorado de las
nes legendarias, en versiones originales jam sessions en pequeños Iocales.
o adaptadas (incluso con un nuevo tex-
to ad hoc), son muy apreciadas en de-
terminadas campañas. También can-
ciones (Up, up and away, I'd like to teach
the world to sing) que nacieron como jin-
gles y que posteriormente se reciclaron
en discos de éxito.
jukebox Máquina que reproduce dis-
cos entre una amplia selección previo
pago de una cantidad. El nombre pro-
viene de Juke (taberna en las zonas ru-
rales del sur estadounidense) y box(lit
eralmente, caja, pero también piano
en la jerga deljazz). Introducidas en los
años treinta, han ido perdiendo acepta-
ción a causa de la abundancia de música grabada en la vida cotidiana; tiene
descendencia audiovisual en el video-
Jukebox, que ofrece vídeo-clips. En Es-
paña se conoce como máquina de dis-
cos, denominación bastante más pro-
saica que sinfonola, término ya en de-
suso.
nio del rock and roll; a partir de enton- Tras la muerte de Jimi Hendrix, editaron
ces se han establecido leyes que in- discos en los que sus acompañantes se
sustituyeron por músicos mediante overdubs.
tentan atajar esos intercambios, aun-
que la inmensidad de aquel territorio
y la oferta desbordante de novedades
haga que la payola siga viva (la única
diferencia es que las discográficas en-
comiendan el trabajo sucio a promo-
cioneros independientes). En otros
países la payola se ha institucionali-
zado, ocultándose piadosamente
como contrato de publicidad o cesión
de derechos.
das las incidencias que se puedan pro- Los cueros (Instrumenta de percusion
con parches tensados) dan el toque tropical
ducir, con la ayuda de numerosos su- a les grabaciones. En la foto, R. McDonald.
bordinados si la gira tiene dimensiones
importantes.
Roadie. Miembro del equipo técnico de
un grupo en gira; en España se le deno-
mina pipa. Los hay de diferentes tipos:
afinadores, carpinteros, electricistas,
montadores, expertos en luces o sonido. Cuando el equipo es excesivamente
voluminoso, cuentan con la ayuda de
negros, cuadrilla de carga y descarga
que proporciona cl promotor.
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Capítulo 14 Capítulo 27 Capítulo 40
R olling Stones `Jazz-rock' `New wave USA'
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