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Existen detalles que escapan a la vista en un paseo por Palacio Nacional.

En el segundo piso, en los dinteles de las puertas que, ahora encierran


recintos expositivos, se encuentran relieves antropomorfos en cantera
que engaando a la vista parecieran primates que sonren al paso del
tiempo y de los visitantes. Esas figuras son en realidad leones.
La iconografa de ese mamfero felino es una de las ms representadas a
lo largo de la historia, pues se ha convertido en el portador de valores
tales como el poder, la fuerza, el valor, la realeza y la dignidad. Ya sea
en contextos seculares y religiosos, desde el medioevo, es el animal
guardin por antonomasia.
Por otro lado, la forma leonina es tambin un recurso constante en la
simbologa poltica y la emblemtica guerrera, ya que complementa la
imagen del poder, con lo que se convierte en un atributo de personajes,
instituciones, linajes y territorios, entre otros.
En ocasiones, los leones son plasmados con cierta imprecisin que
genera confusiones. Su representacin es sometida a una estilizacin
que lo aleja de la realidad: su cuerpo se deforma, su melena se reduce,
se hipertrofia, en fin, sufre alteraciones que se derivan por diversos
factores: la ausencia de un modelo real, el artista abstrae la imagen o le
falta pericia. Por influencia de los gustos lujosos es frecuente encontrar
su imagen en parejas afrontadas a un elemento que acta como eje de
simetra.
Su presencia en Palacio Nacional se debe a que el len forma parte del
escudo de armas de Len y Castilla, smbolo del dominio espaol en
tierras americanas.

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