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La leccin del palo borracho

La vanguardia estival ya ha arreciado con su mordiente ferocidad. Las


plantas litoraleas empiezan a ceder en su insistencia por mostrar sus flores.
El aire caliente ya no sube: aprieta y ahoga a cuanto ser vivo y no vivo
encuentra sobre la manta de polvo que le pelea sus derechos al ro y a su
descendencia. El agua clida se infiltra sin refrescar por arroyos, baados y
lagunas.
Los colores se van recostando sobre el verde cansado y barroso. Entonces,
cuando la belleza de Flora parece quemada y vencida, desde un cuerpo
obeso y pinchudo comienza a sonrer el palo borracho.
l se ha quedado firme y ha derrotado al esto. Entre sus hojas poco
atractivas comienzan a verse ahora unas flores que nada tienen que envidiar
a las majestuosas orqudeas ni a las afamadas rosas. Lo mismo que aplast
a sus hermanos vegetales a l lo ha nutrido y lo fortalecido.
El palo borracho s que sabe convertir la adversidad en belleza.
Viviana Hack
Febrero de 2017

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