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Prudencia y sentido comun en tiempos liquidos
Ifiaki Murua*
Reflexiones desde la practica cotidiana para moverse
"como pez en el agua’ en el mar de las redes sociales.
PRESENTACION
iguiendo una metafora que em-
pleo con clerta frecuencia (Murua,
2008), cabe apuntar que también
soy nadador y navegante en las
redes sociales. Y, tras no pocas
singladuras, he llegado a la con-
clusion de que una de las claves que podemos
utiizar a modo de salvavidas en estos mares es el
sentido comin. Asi, en este breve articulo trataré
de ofrecer algunas pistas desde mi experiencia
personal, valiéndome de un recurso relacionado
con el sentido comin que he mencionado y la
ssabiduria popular como son los refranes. En otras
palabras, espero poder comunicar algunas ideas
para que quien se sumerja ande "como pez en
fl agua’, en vez de que la experiencia “quede en
‘agua de borrajas’ 0 que la persona “cuando vaya
a por agua salga escaldada’. Porque, se cuente
lo que se cuente sobre estos entomos, siempre
queda aquello de que “nunca digas de esta agua
no beberé’.
ALGO TIENE EL AGUA
CUANDO LA BENDICEN
YY es que aunque el cambio es rapido, incluso
vertiginoso en no pocas ocasiones en estos tiem-
pos que se han caracterizado como liquidos (Bau-
‘man, 2006) parece irrefutable la importancia que
hhan tomado las redes sociales en cuanto a los
sos que se hacen de Internet, tal y como podemos
concluir de la lectura de Lenhart et altri (2010) por
ejemplo,
En esta misma linea, otro aspecto que puede
llamar la atencion es que en el plazo de tan sélo
dos afios un informe como Forrester (Bernoff,
2010) haya incluido una nueva categoria de usua-
rios, llamados “conversadores” (‘conversationa-
lists’ on ta version original) caracterizados como
aquéllos que participan en Twitter’ 0 actualizan su
perfllen las redes sociales. En este mismo informe,
Fefiréndose a Espana, se cifra en un 24% a los
“participates” ("joiners") personas que tienen un
perfil en una red social o visitan este tipo de sitios
Web. Si bien es cierto que esta significativamente
or debajo del porcentaje en el resto de paises
estudiados, no deja de suponer que una de cada
cuatro personas usuarias tiene elaborado de algin
‘modo su perfil y entra en las citadas redes, por-
Centaje que ademas llega al 50% si nos referimos
a la franja de edad entre 18 y 24 afios. Los datos
varian al alza si nos fjamos en la Segunda Oleada
del Observatorio de Redes Sociales (The Cocktail
Analisys, 2010); cifran en un 55% el numero de
usuarios entre 16 y 45 afios que accede a diario
{una red social 0 comunidad en linea, porcentaje
que llega hasta el 80% sila frecuencia se amplia
hasta semanal, siendo tan s6lo un 7% quienes de-
claran no haber accedido en ninguna ocasién.
19De este modo, cabria considerar que se ha
cextendido una opinién de! tipo "hay que estar" entre
{quienes ya no son tan jovenes, 0 de via de social
{zacibn, poco menos que imprescindible, entre los y
las adolescentes en los paises con cierto nivel de
desarrollo; qué no decir de empresas, organismos
¥ colectivos varios. Nas ain, ese rvido y confusion
‘umenta en la medida que no siempre queda claro
Qué queremos decir con redes sociales. Y es que
Si entendemos que nos referimos a la integracion
de aplicaciones y servicios en un tnico sitio Web
se complica el asunto, mas an cuando proliferan
sitios Web que van ampliando los servicios que
inicialmente ofrecian y permiten seguir a otras
personas dadas de alta, enviarles mensajes, for-
mar grupos etc.; pienso, por citar algunos casos,
fen Box.net (lmacenamiento de archivos), Flicks?
(fotografias y videos) o Slideshare* (presentacio-
hes en un principio, hoy admite archivos de mas
formatos}, Twitter mismo es considerado como red
por no pocas personas, aunque segin uno de sus
Creadores es un sistema de comunicacién (Mufioz.
y Riveiro, 2009),
No obstante, ese debate excede el objetivo det
presente articulo. Para mi propésito basta sefialar,
ese a las objeciones que pueden ponerse a los
Batos obtenidos (Meradio, 2010), que una red so-
cial como Facebook® ocupa el segundo lugar en
Esparia tras Google en cuanto a trafico 0 cantidad
de visitas y Tuent” figura en el octavo, a tenor de
la informacion aportada por la web Alexa’. En de-
fintiva, que también podria haber comenzado este
‘apartado con aquello de que “cuando el rio suena,
agua lleva’
AGUA QUE NO HAS DE BEBER,
DEJALA CORRER
¥ es que pese a todo ese “ruido’, esas sensa-
clones y suposiciones que citaba con anterioridad,
‘considero que lo realmente importante es tener
Claros nuestros objetivas, por qué y para qué es-
tar y participar en una red social, Casi todos ellos
‘me parecen respetables, siempre y cuando no se
incurra en faisedad y engafio, por supuesto. Volve-
remos a esta cuestion més adelante.
Se puede objetar que no existe un solo tipo de
red, pero no deja de ser cierto que nada ni nadie
‘Tor (titan).
20
c&P
ros obliga, en principio, a participar en alguna,
Es innegable la existencia de redes sociales de
distintos tipos, mas generalistas o mas enfocadas
2 la actividad profesional o a un interés comin,
queéllas que estan casi vedadas a ciertas franjas,
de edad por estar consideradas como espacio
de jévenes u otras con un abanico de usuarios
mas ampli. Por lo tanto, a la hora de optar por
tina opcién determinada, reilero la idea de que
Convencria considerar lo que esperamos y preten=
demos en nuestra participacion. Es mas, sino nos
interesa participar, sino vemos claro el poraué, @
ni juicio no merece la pena estar por estar, 0 por
neta moda... aunque nos incluyan en ese grupo
rminoritario de personas usuarias que nunca ha
accedide a una red social
AGUA Y NIEVE EXCESIVA,
NO DEJAN CRIATURA VIVA
Una vez tomada le decision de participar en
tuna red social, sea del tipo que sea, como quiera
{que “quien en agua no se metié no se ahogo’, con-
viene tomar algin tipo de “precaucién’ mas.
lo realmente importante
es tener claros
nuestros objetivos, por qué
y para qué estar y participar
en una red social”
Uno de los peligras que a modo de tsunami
pueden aparecer en estos mares es el de infoxica-
Gién, ese nuevo modo de intoxicacién provocado
por la falta de tiempo para digerir toda la informa-
Gidn que recibimos, concepto acuriado por Alfons
Cornelia (Fumero, Roca y S4ez; 2007: 14)
Debemos ser conscientes que con las interco-
nexiones entre sitios Web, aplicaciones diversas y
la posibilidad de derivar los avisos de todo tipo a
hhuestro buzin de correo electrénico, el riesgo de
desbordamiento es ciertamente considerable; po-
dia llagar a convertirse en una tarea poco menos
que titanica conseguir distinguir entre lo impor-
tante y lo accesorio,
Coincido, por tanto, con Genis Roca (20098)
cuando sefiala que “las redes sociales han dado
tun peso excesivo al dato cuantitativo y han contr-
buido a generar una jerarquia absurda basada en
cl tamano’, Yo soy de los que abogo por la calidad
mas que ia cantidad y lo cierto que no sé qué
pueden aportar cientos y cientos de “contactos".
{de personas con las que no tenemos en realidad
‘contacto de ningan tipo, No es casualidad que a
modo de refran moderno esté extendida esa frase
de “eres mas falso que un amigo en Facebook’.cap
eee Aa]
AGUA PASADA
NO MUEVE MOLINO
Relacionado con ese peligro de infoxicacién,
puede producirse una falta de respuesta a quien
ha contactado en una determinada red a través
de las distintas vias que se le offecen. Asi, ese
silencio, aunque s6lo sea demora, podria provocar
efectos no deseados, incluso contrarios para los
propésites al formar parte de una red social.
Bion sabemos, ademas, que 2 pesar de que el
intervalo de tiempo considerado como prudencial