LA VIDA ESPIRITUAL DEL LDER

TAREA 1

Ricardo Barragn Albo

En nuestras iglesias se predica con frecuencia malas noticias en lugar de las buenas noticias
del evangelio. Nuestra tendencia es de aceptar a Cristo de una forma y vivir la vida
cristiana de otra forma. De aceptar a Cristo por Gracia y vivir la vida cristiana por esfuerzo
humano. De principio a fin (tanto la santificacin como la justificacin), toda la vida
cristiana es obra de Dios. La salvacin es un regalo de Dios que no merecemos, y no
podemos producir por esfuerzo propio. El evangelio, no es solamente para el inconverso.
No es solamente para la persona que no conoce a Cristo. El evangelio es para ti y para m.
El evangelio nos transforma a travs de toda nuestra vida cristiana. Hay una garanta de
triunfo cuando se predica el evangelio an y cuando la persona que escucha el mensaje lo
rechaza, por que cuando tu compartes/predicas el evangelio eres transformado.
Uno de los secretos mejor guardados hoy entre los cristianos es que Jess lo pag todo,
absolutamente todo. l no slo compr nuestro perdn en cuanto a los pecados y tambin a
nuestra entrada al cielo, sino que adems compr toda bendicin y toda respuesta posible a
nuestras oraciones, todo esto sin excepcin alguna. La experiencia cristiana total se resume
en tres frases: justificacin, santificacin y glorificacin. La deuda total del cristiano ya ha
sido pagada por Cristo y no existe posibilidad de volverse a endeudar. La vida cristiana, de
comienzo a fin, se vive basndose en la gracia de Dios a favor de nosotros por medio de
Cristo.
La clave del reavivamiento y la renovacin espiritual continua y profunda es el continuo
redescubrimiento del evangelio. El evangelio es: Eres ms pecador e imperfecto de lo que
jams te imaginaste, sin embargo, al mismo tiempo puedes ser ms aceptado y amado de lo
que jams esperaste, porque Jesucristo vivi y muri en tu lugar. La justificacin es
crucificada entre dos errores opuestos: legalismo y antinomianismo. Sin un conocimiento
de nuestro pecado extremo, el pago de la cruz parece trivial y no transforma, pero sin el
conocimiento de la vida y muerte de Cristo el conocimiento del pecado nos aplastara