Está en la página 1de 12
TEU Y ded ZOl-ol PAIDOS CONTEXTOS: 11D. | Bg Sw omar ot 100 mas ded a or pels err ey oe in 16, MiAouct tps mtr Ce cdo nee ROGER-POL DROIT LAETICA EXPLICADA A TODO EL MUNDO PAIDOSWp Zt ompepin & souorcafe‘SANDHYNAINN ‘oun sowoe OU 8 sox50l 398 2f4}80U £9 ON rdsu pours wns oe ore, SER ewan pate en ca apenas EE ap a Enc a om Sin is acta Seas roc aunts apo ag np sao sod mony mi 9 open, "pct or ood sabe eae 22 Lasmica ExpiteapA A roD0 #1 MUNDO de policentrismo o de estructura en archipiélago, que ha supuesto una explosién de valores, y de maneras de apreciar qué esté bien y qué est mal. Dada esta pluralidad de morales, la reflexién reda, como indagacion, necesa- siamente ha de ser més activa. E incluso se vuel- ve indispensable en la medida en que, en una sociedad en vias de globalizacién, hay que elabo- rat formas de coexistencia de distintos sistemas de valores que en otros tiempos no se conocfan ¥ que muy ocasionalmente tenian Ia oportuni- dad de oponerse en la vida diaria. No vivimos ‘iniea capaz de 1do y de controlarlo todo. De ahora encontrar frente a pun- dliversos criterios. El de- o actual consiste en hacer que conve at equilibrarlos, en proponer soluciones ‘que puedan suscitar un consenso 0, en todo caso, un acuerdo aceptable para todos. En este sentido, podrfamos decir que Ja nueva tarea de la ética consiste, de algiin modo, en organizar la vida comin de las diferentes morales. —Para conseguirlo, babré que conocerlas, imagino Por supuesto, En todo easo, al menos es nece- satio haber comprendido las principales actitudes que se registran en. nuestras sociedades, Y para ello, todavia nos queda un teecho por delante caPiTULO 2 Un Ambito sin fronteras En definitiva, cde qué e ocupa la ética? De nuestras aeciones! De nuestras ocupa: ciones de cada dia, pero tambien de las grandes decisiones que tomamos en momentos deter- minados de nuestra vida. Pero esta respuesta zo esta completa, pues también es preciso espe cificar de qué modo concreto la ética considera ‘nuestros hechos y nuestros gestos més diversos. Porque hay numerosas maneras de examinar nuestro comportamiento... Por ejemplo, desde el punto de vista de la energia muscular em- pleada (leer esta pagina quema menos calorfas, -vista de las motivaciones psi- ta lecture jersa), tam jue por el esfuerzo fisico, oa bien rendimiento igo desde el punto de vista -ngo anb of ‘uaig pp uarsinb sopeoxp p> 4 yeurs :wlopered niso seAesqns 2 BISON ap SAIUE A OfSIS ‘sew 9¢j “419984 opand anb 109d op» » of 1zofour of! ““p19s «oad» asa anb pepres! U9 sourestind wiumgoud visa sowsovy ye ‘on ‘ose 21so 9 ‘o1aqo sq ‘OULp s29eq ap UO_UDILT e] 10d ‘© orpo p sod opesindiusy ‘ezueduen vosng aonb 1d vp a8 riunsaid wso ‘oydurato 40g. 2Iqpsodus fy BUN $9 ON “AzeIoE “eta a0ad e[ ap aunreuodwos tied of 3208y EHP -od ang)?» :eiundard 9s usindye anb awursowy -quaigp paso anb wiopIsuoD aueB vf ap vHOKEUT epanb oj $9 aiduiats oN “somosou sopor vied our “sur of s1uatP1vs909U $9 OU «1OfouD» 989 ob so 458509 se] voyjduso9 anb Oo] oxag ‘Is “OOY Ip eoofout of aaong soussuanb axduioys anb oso vryitdis?— “agree ogep omg? e329" ogap ang?» :ssuonsoN> sop 309 9p SUpvAHDp souorKopar ap orm{t09 [P open aire 9 wo yangoad mp “o[duts Anat upiquiey “eisondsor vaanu wun 3990130 2) fod sou onsiy “xesauRU Jof>ur Y{ apr ZeMOE 99 sowerunerd ap soufep vounu ‘pepry vad gy ‘sojdusfo sounsyP o[9s Gos SoIs> A, « svra:nous Nts ox NO ‘OARRUBSp sompe onsonu ap exoy ef & esp pp afBopp ayqs80d 89 18 0 ‘Saysnno sou omuorustayns gn & soueoaped sopup -susrayue gab sevoduar us ‘ousanar pf an8aqjanb w aerodlso sourogap 1s soureiunBa1d souraspod ‘souvpus aqy“sei9]00 o soSruw ‘sopeBay ‘Soxp ed sonsond ¥ ‘soffy sonsonu w pepyan vyfanbe ‘0 8389 11/p ope o OuANg s9 1s soUTBIONSAND ap mopar apqprayoad $9 © sofrure sozofous sonsonu 2p 30] kepavng anb Avy 1s souresunBoxd sou »pe aq] ‘anisesop un operoaosd vy & sen eun oypoy ey anb out ye sweep anb key 1s ‘unbyus sow ou biog “xenon 2p a 1p soured ap soap sou ob "Mp4 auzyuvoo gondsny won ss3U0DUD ee _zonzqumodiane eorsond ypioge np vob B Sprp sop onbop son = nO? oppuee xi 2 ovod opasonbyres swouemos ofa “yo ox 00, Gundy seuojpiodord pond ond huge pu otonbed on zooms) conupuoae ann ocaryvavoriaxavonseT $e, 26 ENICA EXPLICADA A TODO EL re es que ellos se equivocan de bien. Por lo tanto, segtin Sécrates, no cxiste una voluntad enteramente negativa: no podemos querer el mal por el mal. Parece que se elige el mal, pero en realidad se quiere el bien. El problema es que se confunden, se equivocan de bien. —De todos modos, parece algo curioso ‘A primera vista, sin duda, Lo que por ahora debemos recordar es que, detrés de nuestras s cotidianas, por banales que puedan parecer, surgen muchas preguntas. Como telén de fondo, nos planteamos muchas reflexiones que resultan necesarias para saber cémo debe- mos actu. ‘Ya se trate de clecciones simples 0 de deci- siones fundamentales, sobre todo sentimentales © politi c ~en asociaciones, empresas, 0 en in tiruciones—, cada vez resulta més pertinente este interrogante ético. Ademés, el campo de la éti- cca no termina ‘mucho mis vasto, ya que la ética concieme también a las decisiones de la Jide iotemacional, como son la guerra yla paz, 0 la lucha contra las desigualdades entre los pai- ses del mundo. , Podemos incluso ampliar la lista, dado que existe, ademés, una dimensién ética en las ac. ciones destinadas al mantenimiento de los equi- librios naturales, como la preservacién de las vs aemiro st enonrenas 27 condiciones de vida de las fururas generaciones, 0 remediar los estragos contra el planeta. Como ves, el mbito de los interrogantes éticos no tie- ne fronteras. Lo encontramos por todas partes, en todos los sectores de las actividades buma- nas, individuales 0 colectivas. —Entonces, en todos estos dmbitos la ética deberié proporcionarnos respuestas para actuar, eno? éDebe decimnos cimo hemos de actuar? No exactamente. Es, a la vez, més sencillo y mas sutil. Porque no se trata simplemente de saber qué debemos decidir dentro de quince minutos, en funcién de la que nos encontremos. Se en nombre de qué vamos ugar de otra, cuales son los valores que vamos @ tener en cuenta, y qué criterios rigen nuestra de- cisién. La cuestién fundamental no es qué deci- sign vamos a tomar, sino entender en funcidn de qué asumimos 0 rechazamos una solucién entre dos —o entre cuatro, cinco 0 diez— posibilida- des que se presentan. Dicho de otro modo, la ética no es tna acti- vidad préctica donde basta con aplicar unas eglas de manera mecénica, También es preciso que reflexionemos sobre lo que justfica esas reglas, sobre qué se basar las alternativas que se ‘nos oftecen antes de tomar una decisién, sobre el punto de partida que adoptamos, los méco- mpANpUL ‘SOW 1H 10d ojos soureni9e ¥>t ppeu souistu somosou ved someni3e Ow -ojsense sensonu ug pep PyZeNb auuweg anb lof ose sey ‘oauaumongzad opspunita seq Of “Ig opduaole un opuszuodoud &opso popippes wa? ‘jut P auso}ou0d au ops viouazsode 149 anb Bp O84 ‘opunno “weg opipuoius 24 Of ra ppp wed owisyurn v sean -noyed wan s0 oszy es0n10 $0] v eIs2ye ou nb S99 “iq? “poprueumy ev ojspour ouwo> sagax}0 nb 0] 8 oszy “osoduren un vas axquioy jo anb soi 1 ‘opnuss aso ug “opppows un optis%9350 euossod apnexy ousnbod m wor sedumen x souroqgp sopot onb & t2jq sso O89 anb sa1918s _sedarisy 19984 anb £64, OpuSIoNp S89 “uren soavtj optency> :SoUsu! 0 s¥Utr o20. oprpuodsss epiqey 2] anaes “ “SuETBa|> Ty» “OSL up gnmur anb ‘ortreg jneg-uvof s9ouery o7Os9p “Ig P 104 ‘opos axqos “eprpuayep ary vopr ms ‘ojppour ap s1pads9 wun ‘sv-zem 90 op oypay orsut [2 s0d ‘sono so] » opuariod -o1d Sosa ‘sejungoud sepeyseurap oBey ur ou 1s osnppuy “susuppumnbeur “«restisd ule zena9e ap uofsoxdur w] ous opens osnppuy O29} opua!s oniis osg e084 anb Avy onb ox anb of oF] ‘vpew sousw v] o 4oleui yf sema9e ap wiouvUE pisuoo enbsod so ‘eno op 9a us w90 “ews ppvuniuiaiop wun ap sem98 OpHep of 1S 059 anand sosipog?— von wuM opuasnzisuos sous ‘oDIONb us osnpput ‘wesuad wis osnppuy “spurp soy v wonp ‘409 ap OPPPou Un opua7Daxzo souTEIsD UDIquIEL ‘s0s98 so] soureuaap uls ‘susumprdes sounp “pop opurno ‘sesuad v sourouoiep UIs sourem ze ‘opuens ‘pupreas gy ‘a1usumLTes990U Om ‘ON, 22019 9p saBuvu 70 sous2004 of 2¢ stouuvaupuodsa ‘onmponis ap soutons>0 opuna ‘onb os2 voyfiuSi9? aesuad 9 Soussund wuts souozs “pB2p sous 53000 sogonus ‘Bunga wg — i089 opos ueoyrisal anb “ausigo sowszanb onb sope yoyad ua zouod sourszanb anb sop seu Soy cana oooLy vavortaxs vous) a. istencia personal), elijo al hombre (decido, en realidad, en titimo extre- ‘mo, para la humanidad entera)», —iMe parece bastante exagerado! Por supuesto, es un razonamiento extremo. Pero es una manera de explicar que nunca esta- ‘mos completamente solos. Las elecciones que Bacemos, aunque parezean egos, afectan a —Sin embargo, sidecido, por eiemplo, ocupar anes de mir en rina sn precsparme demds, jno puede decirse que esté ofrecien- do ningtin modelo! we oe ‘Pignsalo ua poco mas! —¢El qué? Lo que acabas de decir. Creo que estis con fundido, sin darte cuenta, Estés diciendo, si no me equivoco, que queddndose en casa y vivien- do de manera egoista, sin compartir nada con nadie, no ‘cst proponiendo un ejemplo a na- ic, y por lo tanto, menos que nadie a la huma- nidad. ¢Es eso? a hum un guar sts RONTERAS 3 que vivir para si Ia mejor manera de salir adelante. Es lbgico... Entonces, no es menos légico llegar ala con- clusién de que, al pensar eso, ests proponien- do como modelo para la humanidad Ia vida egoista y el «sdlvese quien pueda»... Y asf he- mos vuelto a la casilla de salida: puedes elegir ser egoista, tanto como ser altruista, viv tus intereses nada mas u ocup: Pero cada ver, en realidad, I Jo estés proponiendo alos demas. —;Vale! ;Abora lo he entendido! Eso quiere decir que ef héroe o el trator, el bueno y el malo, estén diciendo cada uno, a través de sus actos, ebay que ser un béroes, «bay que ser un traidor», etc. Efectivamente, Si actuamos de la manera que ‘consideramos mejor (con independencia de cxél sea esa manera), estamos planteando una regla de ‘conducta, estamos utilizando un criterio para de- cidit. El problema es que la mayoria de las veces ‘no nos damos cuenta. Podsfamos decir que la éti- ca consiste en realizar el esfucrzo de deducir esas reglas y e308 criterios. Es preguntaise cules son las reglas porlas que nos regimos, y con qué ctite- ros valoramos las actuaciones de otras personas. ‘soused supoi uo & s0por vexed avuoweos wees oj onb sopra separ 90 raropod js & sayessoarun auousyeyo3 SOIT 1s 0 sosqnduyy Uoashxe 1s osrurunsexd Fo wis9 sar ap suod FoN19 Bf asqos uOPKaar F[ nb seuraigord soy Snug Zo ap yENxD 91 souopsnjaues 9nd? eeououede eum sy? “so1gootr pepiyear pun 2p wien as anb sop o> auaing? "seuoRoe ap odp opeuruiep un «sve “ong? ows IwOYED UD Opyonse ap axusUNEIL -piaodso soueys> soueuunt, $9795 soj sopor anb seepOUT HOS =8 onsonu tr "1o1d arp? ensonu euodur ou ‘iafnus 0 auquioy sour os 15 Te “SouraURY soe sojuyND EUOdUIT ON pious »[ 9p epnied ap oud pp exoprsuos o| oDUaTY ofoso[y fo 2PuOP “wUIYD ua owsTUNSE souEN “woot orf “Tesroaqun X eunaeur ouBUIOLEY UN ap. bien 9s anb soared ‘«uoisedusoo» o (zaneyusd -sesmyqn9 se] & seoody se] Suppor vseIARNE ‘ODO -o4 vj ap uaSieur |e asi owuaTUBUDS aise “UC ple isea8sep vy 30d 2yuouMaUYIUOdse asranout yoo & SouBANY $9195 SO] B AIT] aM «ugzPIOD ‘SoJ0S01y S01 10d sopeuos BL OpEIAIO BY, Dan Y “SBURROIA us00u09 ou epne vy sezfUERIO Bxed OroUIP ns 0 oduiop ns uadaqo anb seuosiod se “eyep “Hos Buape> wun wz[EIO 9¢ ‘sosv> so3s9 UG bun ‘vunsqueq vun ‘ugpepunur vi ‘orownsza1 un ‘emer anb off sq epsei8s0p ap odn unSipe warns anb soppouoassp ¥ sa110908 © opesnduy siuaye 28 ‘optmur > opos ‘orsnfur so opuens spur ome ‘ou. v ‘soupeu sns ap sofo soj a1ue sopeursose uvas sourt soy anb uo1q soared 9f appa v ‘soumunY ‘ug gon» ¢] ap aiuany ‘o1m o] 10d 'f ssuoDOu seypip ap aruary vonayine e| wzopeameu vy se? ‘our ap & ‘Waid 2p souo1pou sey opE>taqes uy “BIoApuOD 9p separ sns sourstur soy opttels0y ops wey $21q, $0] ‘qo fo 30d “9? em vaseq anb exaueus ap ‘sarqunor] so 8 esp tn ze, ] $0138 & soyp un oynunOy seT? eupPBIOGyD un 9p o1onpoud uos 0 seprusstas Gos suo ov sensonu uvanuro9p anb se[far seq? ggnb 9p asquiou ug? gyeur gis anb 0] & uaig ps9 anb of 9ppep upinb? -quneo [OP [euY Je OpEaaT sou o1 3 caica BxPLtcADA A OBO BL MUNDO —L¥ por qué no habrian de ser universales esas reglas? Porque, al mismo tiempo, const existe una gran variedad de reglas de esas reglasdificren o cambian segiin las €pocas, las civilizaciones, los grupos sociales, las creen: cas, Lo que es considerado ebueno» en un deter. minado lugary en un determinado tiempo tal vez sea condenado en otro tiempo y en otro lugar -Significa es0 que todo es relativo? Algunos ac tos que en la actualidad a la mayorfa de nosotros nos horrorizan, como el canibalisn de muerte, por poner leraban actos nobles, val Llevarse a los abuelitos, ya muy ancianos, de noche, en medio de una intensa nevad de cualquier vivienda o refugio y abando: alli,es un comportamiento que juzgamos crimi- n paliativos. En la sociedad tradicional de Jos esquimales era, al contrario, un gesta de pie- dad, de respeto, una accién moral que permitia al grupo sobrevivir al dejar de alimentar varias ‘bocas intitiles, Podtiamos da conclusién ya la ‘opuestas han sido consideradas alguna vez legiti- thas Todavia hoy, muchas veces basta cou ome le pais para que un mismo actosea juzgado de manera diferente. Hoy en dia coexiste todo y su contrario. Lo que aquf es ético, allé no lo es yala inversa. La verdad de ayer se ha revelado hoy como un error, —<¥ entonces? Si siempre fuese asf, todo serfa selativo. Las normas y las reglas dependerian tinicamente del lugar y de la época en la que cada persona vive. ‘Nos encontrariamos entonces en el caso exacta- ‘mente inverso del anterior: no habria nada uni- versal, todo dependeria del momento o del lugar en que nos situésemos. En ese caso, deberfamos renunciar a buscar la verdad de la ética, ya que bastarfa con informarnos sobre las costumbres del lugar en el que nos encontramos. Y también por definicién, no serian ni mejores ni peores que cualquier otras. —Sin embargo, se-ve un denominador contin, eno? Podemos afirmar que existen algunas ceglas generales. Por ejemplo, respetar la dignidad hu- mana, no humillar o maltratar, son exigencias que consideramos inseparables de la ética. No obstante, siempre se podré responder que son nuestra» certezas, y «nuestras» maneras de ver, que proyectamos sobre la totalidad de ta historia y de las vva, veremos entonces que determinados puntos clave de nuestros conceptos —como dignidad, srofour arate v wap -nke onb sofia: se[ mroqepp op Ben 2s ‘wpuvisut mun[p ug ‘seUAEp Anu sexouvW ap SO an -up GedoEar a8 aNb A ‘so]dnyar wos someame sazes soy anb woo 39a anb 2uDp wang UOROYS! | ap o9ppnu [g “syuDp so] ¥ oredsos Jp UD VSG ‘38 ‘Opuo} [p Ui “susnyNo se] sepor syuoUMNoEE up “eno PUNO] wun Ofeg ‘SOUIENUOOUD BO ap vfiay ey pure][ 28 amb of se «uosarory sou and yzeisnd sou ou anb of soxi0 Soy v 292K] ON “oup z20e4 ou ap ‘reoppntiod ou ap wen 2 Sepnée ap osnpur selue eure ap SoIUY “ :ua1q 0 “«gsazofout st] wos s9uO1 de ang? sniungaid uamse opuenc ‘o1uasasd sotto: soumpgap anb jedrourd o1nd pp s9 2531 “spuap soy 40> souoDeps sensant 2p uopouny uo SMUDMIE[OS UarsTK@ S018 nb vi ‘soon sburpiqozd soropypz9a sespuon oF yasano se1s9 ap uastzou Te ‘ozo ezed 0 pnyes my ered osreSau0 ‘soprequno1d 22 ‘ose> [p wiony 259 1g Zoos sasziama $0 IS OUISIUE B BUY [eur O LaIG sEAIDE TeOyTURIS pod ane)? “soon sewpjqord spur uxyraruE|a of anb [ps9 ais “opesstosue ajqisod aoared our ‘onuxa & a[duis ‘upuios 1opeurmousp rourd un soummosng Is ox>q “ou ‘o1uauIEpeuMOyy eugponyos ky ou? ‘sooK0}]— | $epo1 uD 38 LABrIcA sepxteApA.A ToDO Ht. MONDO feren og “BsjosoIy B] ap HoHD Ly & vorSHS BL ap “oqo Jeiow Bf & wsoIsy[2s josou seDUAIaPP se] A UNIOD Uo sorUNd SO anb souisuat oxausisg “sequIE Ua esofosopyf so} ap 2490 2 tug7? gopunuu pop souoxbyau soy us]? ese2ig sepmait “29 soptundl $j snuzuaouta sowapod apuocy?— seyosoyy & souoriyax anu. € omLavo “uaa 8 souteA Of outsTur wos ‘ousng— eseauaqseinssog pnb uo? c2feyorpig 989 2004 28 sopeuetoui gnb Wy?— “alejootsq [> owoo sas v ouDqA wproyde eoHD wp seiqeped vj op opnuas sofout jo ua OMT J tog wooied ‘reqoad ‘e1waauy osaid sy “hruypp 4 vast, ugfonpos eun dey vounu “wpesry opp P| up ‘anbiog “SouOpETDEA & soagnan 23 opnusw v “worsnosIp ¥] A Uopcagar vf aiueApoUT ogo 8 vagy] 9s uppaeidepe wy ‘sazeonsed soe javorixavousv3 OF

También podría gustarte