Desde la aurora digo Bonjour, a ti, infinidad de secretos que con la primera

mirada has conquistado este cuerpo, lo que me sorprende ya que nunca paso por
mi mente la idea desquiciada de amar a alguien con solo las puertas de su alma.
Adonis que conquistaste a ms de una mujer con tu encanto, te pido que me
ames, pido el privilegio de ser todo y a la vez nada, pido que me acompaes por
esta montaa rusa a la que llamamos vida.
Reviv. Es ridculo pero pas y fue gracias a ti, aunque en el fondo sabia que si te
acercabas a mi era en realidad causa de deseos efmeros de tu oscuro corazn,
viajeros que solo iban de paso, hago nfasis viajeras, lamento decirlo pero es la
verdad; aunque no quiero recalcar lo malo, aun.
Quedaras en mi recuerdo como un ser supremo y yo como una simple mortal, que
no puede evitar pensar en ti: porte, esplendor, grandeza, todo Tu; que cuando
llorando estaba, ese recuerdo volva a m, al igual que tu olor acariciando mi
rostro, volando como tomos en una infinidad, provocando que el universo
conspire contra m y que la noche escriba de ti, que el da me muestre lo que
haces y que el atardecer lea en quien te has convertido.
Con solo tu mirada, con solo tu palabra, con solo tu voz estoy rendida, enamorada,
demente e ilusionada. Esa mirada asesina que me clava una daga una y otra vez
hasta ver el fin en mis ojos, que derramando lagrimas te piden que lo ames,
poderosa palabra que posees puede desarmar y puede cambiar hasta el ms
mnimo rayo de bondad, me puede atrapar y esa voz, melifluo que recorre mi
mente, mi piel y mi alma, cada letra, slaba, acento, son mi fe, mi religin, en cada
una creo con fervor como el encarcelado que desea libertad, esa voz manantial
celestial que refresca mi sed, pero de repente silencio absoluto, mis sentidos no te
perciben, no escucho tu voz, tu corazn, tu respiracin, lo que me mantena viva
ahora ,e destruye, lenta y dolorosamente, llueven recuerdos que nunca volvern a
ser, que inundan mi rostro y mi corazn, ambos fatigados de tanto luchar por algo
tan intil como revivirte.

Debo dejarte ir, pero a pesar de todo has sido lo peor y lo mejor de mi vida, me
diste la fuerza y el valor que necesitaba. Ahora me doy cuenta de que la nica
verdad que conoca no era ms que un fantasma, un medio para un fin,
simplemente T.

Con mi ms sincera y afectiva aversin,

Aura.