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Titulo: Proyector de luna, La generacion del 27 y el eine
Autor(es): Luis Miguel Femandez,
Fonte: Anates de la Literatura Espaiola Contemporénea. 26.2 (Spring 2001) 9220
Tipo de documento: Article
Copyright: COPYRIGHT 2001 Society of Spanish and Spanish American Studies
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Texto completo.
Dentro del conjunto todavia escaso de estudios que toman como objeto de su investigacién el asedio a las relaciones entre el
cine y la literatura no cabe duda de que la vineulacién de la Generacién del 27 con el Séptimo Arte ocupa un lugar de
primerisima importancia por la cantidad y calidad de los mismos. Desde los pioneros y mas relevantes de todos estos trabajos,
los de C.B. Morris y A. Sanchez Vidal, hasta los mis puntuales de R. Utrera, J. Urrutia, J. Talens, A. Monegal y V. Sénch
Biosca, por citar inicamente los mas valiosos de entre los pertenecientes a esta parcela del conocimiento, se han venido
sucediendo a lo largo de las dos dltimas décadas del siglo XX un buen niimero de aproximaciones a los diferentes autores de
esta generaci6n, sin parangén con la atencién prestada a otras épocas de nuestra historia literaria, Por ello, pareceria dificil a
empresa de volver a abordar el citado asunto con pretensiones de novedad. Y, sin embargo, tal hecho se da en el libro de Romain
Gabe,
Aunque dividido en trece capitulos, este libro consta en realidad de tres grandes partes. La primera aborda el contexto y la
irrupcién de las ideas vanguardistas desde la segunda década del siglo XX, tanto en Madrid como en Barcelona, y no sélo en el,
mbito literario sino también en el iconografico, destacando en este sentido la receptividad cultural barcelonesa y las primeras
experiencias cinematograticas vanguardistas en la ciudad catalana, asi como la presencia en Madrid de Ramén Gémez de la
Sema y de! ultraismo, que van a defender, sobre todo el segundo, la aproximacién de los escritores al cine; y todo esto en un
clima de radicalismo como el que impregnaba a dos de los més conocidos jovenes de la Residencia de Estudiantes, Salvador
Dali y Luis Bu‘tuel, Del conjunto de propuestas de este bloque las més novedosas residen en la constatacién de dichos
experimentos vanguardistas catalanes (Ios "films pict6ricos" de Charchoune, hoy desaparecidos, o los poemas visuales de Junoy,
por ejemplo), y en el intento de dilucidar los enigmas que pesan sobre los varios guiones que Gomez de la Semna hizo en su
‘momento para Bufuel y que nunca se convirtieron en filmes,
La segunda parte, formada por los capitulos que van del quinto al décimo, se centra en el anélisis del interés por el cine
mostrado por un buen ntimero de estos escritores y, a la inversa, en el de los magros resultados filmicos de la vanguardia
espafiola
Apropiadamente denominada por Luis Gomez Mesa como generacidn del eine y los deportes, el grupo de aftistas que la integran,
mostraron en mayor o menor medida su entusiasmo por el cine a Lo largo de los afios veinte, durante el periodo dlgide del cine
‘mudo, un entusiasmo que en muchos casos se enfié con la Ilegada del sonoro pero que en otros se transformé en abierta
colaboracién con el nuevo arte durante la etapa republicana, la postguerra y el exilio (como lo demuestran, ademas de la figura
emblemitica de Bufiuel, Jardiel Poncela, Edgar Neville, Max Aub y Manuel Altolaguirre, entre otros). Dicho interés se plasmé
cn primer lugar en sus textos, especialmente en un repertorio tematico alusivo a géneros, t6picos, situaciones y actores
procedentes del cine comico norteamericano en su mayor parte, en el intento de aprehender el estatuto perceptivo, attistico y
social del nuevo arte, y en el deseo de imitar en sus poemas 0 novelas algunos de los rasgos caracteristicos del lenguaje filmico
Pero también lo observamos en sus manifestaciones verbales, sobre todo en las contenidas en las encuestas y criticas de La
Gaceta Literaria, y en actividades como las de las sesiones de cine de la Residencia de Estudiantes y del Cineclub Espafiol, que,
conducidos por Bufuel, les permitié descubrir el cine mas innovador de Europa y Estados Unidos. Toda esta labor de La Gaceta
Literaria y del Cineclub es minuciosamente detallada y analizada por primera vez, merced al vaciado de los articulos
cinematogrificos y les peliculas citadas por la revista de Giménez Caballero, y a la descripcién de las veintiuna sesiones del
Cineclub
Pero mayor enjundia para el lector, por més novedosa, tiene la parte que se refiere a la produccién cinematografica de la
vanguardia espaitola, que, con la excepcién de Bufiuel, apenas dejé rastro alguno. El porqué de esa "vanguardia sin cine" es lo
que Gubem estudia en el capitulo séptimo, uno de los mas valiosos del libro, en el cual se dedica a rastrear las rarezas filmicas
credas por dicha vanguardia, que dio lugar a obras como Madrid en el aflo 2000, de Manuel Noriega, e Historia de un duro, de
Sabino Antonio Micén, hoy perdidas, asi como a la figura de Nemesio M. Sobrevila, autor de dos peliculas de discutible
adscripcién vanguardista,Al Hollywood madrilefio y El sexto sentido, Del filme de Mien, sin duda el mas proximo a la
vanguardia de entre todos los citados, se nos oftece por primera vez un detallado découpage
Por iltimo, en los tres capitulos finales, Gubem analiza los dos filmes mas relevantes del surrealismo, Un perro andaluz y La
Edad de Oro, a los que considera "un producto del imaginario generado en la jubilosa convivencia de la Residencia de
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Estudiantes, en cuya formalizacién desempefio Pepin Bello un papel fundamental” (393), 2 la vez que subraya la importaneia de
Dali, casi a la par de la de Bufuel; y se detiene, asimismo, en Esencia de verbena de Giménez Caballero y en Viaje a la luna de
Garcia Lorea, frutos ambos, aunque muy dispares, de esa misma vanguardia,
De lo anterior se deduce que la principal aportacién del libro reside en el enfoque de conjunto sobre tal periodo, de manera que
no sélo se atiene a la practica mas habitual de estudiar la actitud de los escritores frente al cine, sino que, en ocasiones
recuperando viejos trabajos del propio autor y en otras aportando nuevos datos, nos offece un amplisimo panorama de la época
y de su produccién artistica, ensanchando notablemente la vision que hasta el presente teniamos acerca de la misma. ¥ todo ello
aderezado con una abundante bibliografia, en muchos casos--como acurre con las publicaciones del periodo—utilizada por vez
primera, Esa vision reafirma algunas cosas ya conocidas, como la parca y tardia teorizacién sobre el cine producida en esta
&poca.o la heterogeneidad en el comportamiento de los escritores a la hora de encararse con él (¢1 mucho interés mostrado por
Lorca, Alberti, Cemuda y algunos novelistas como Ayala, Espina y Arconada, ademas de los ya mencionados Gémez de la
Sema, Dali y Bu‘iuel, frente a la ms tibia actitud del resto de los poetas), pero nos descubre otras nuevas, como esa tendencia al
equilibrio que les lleva a aceptar al mismo tiempo a una parte de! cine ajustado al Modelo de Representacién Institucional, el
norteamericano fundamentalmente, y a aquel otro europeo que, como el expresionismo alemén, el cine ruso, o el francés de
vanguardia, renunciaban a ese tipo de narratividad y se oponian al MRI; equilibrio que, por otra parte, es una de las sefias de
identidad de esta generacién.
Una reflexién se desprende, asimismo, de la lectura de este libro y de otros trabajos que lo han precedido, pero en el que
nninguno se ha detenido por no ser ése su objeto principal: si, como afirmaba Esteban de Salazar Chapela en 1928, el cine, a
diferencia de la literatura, era una "leccién de cosas" en cuanto que nos mostraba los objetos en su verdad desnuda, y si, tal como
Dali defendia con su "Santa Objetividad," s6lo podiamos fiamos del documental porque no manipulaba la realidad, ,qué
diferencia a esta posicién "objetivista—proxima a la de la Neue Sachlichkeit alemana (Nueva Objetividad) y al Cine-Ojo de
Vertov de esos mismos afos--de otras anteriores como las mantenidas por Pardo Bazan al hablar de la "resurreccién de la
historia" provocada por el cine, o las de Valle-Inclan cuando rechazaba en 1921 los argumentos en beneficio de la objetividad
de la camara’, cy que las diferencia de otras posteriores como las que ya desde los aflos treinta va a mantener Cesare Zavattini,
uno de los padres de! neorealismo italiano y participe él también de las ideas de vanguardia?, Dicho de otra manera: ,qué es lo
que hay de continuidad y qué de innovacién en ciertas ideas de esta generacién con respecto alo anterior y posterior? {no se
deberia empezar ya a establecer las tendencias y movimientos de duracién mediana o larga que subyacen en las posiciones de
Jos miembros integrantes de un determinado periodo para ver lo que hay en ellos de realmente novedoso?
Poco es, en cambio, lo que cabe reprocharle a Gubem y de un alcance muy limitado. Si acaso el que a la hora de referirse a
ciertos autores no haya tenido en cuenta una valoracién mas ajustada de su produccién o falte la mencién a las aproximaciones
al cine de algunos otros. En el caso de Altolaguirre, ademas de no aludira su participacién como actor en un filme de su
hermano Federico ni a la amistad con Buster Keaton y Norma Talmadge--que si se le atribuye a José Ma Hinojosa, apenas se
repara en la mayor parte de su actividad en el exilio como productor, guionista y director, habiendo sido, sin embargo, uno de
los miembros de esta generacién que més peliculas realiz6, en el de Jardie! Poncela no se dice nada de sus Celuloides rancios,
que aunque de poco valor filmico silo tienen como muestra de su aproximacién a la vanguardia; y lampoco se menciona a
Rafuel Dieste, del que sabemos que hizo varios guiones y escribié algin articulo sobre las relaciones entre el cine y el teatro
Disicnto, por otra parte, de la idea de una notable influencia del cine en estos autores en cuanto al traslado de determinados
procedimientos cinematograficos a sus textos de ereacién--no lo hago, en cambio, con aquella otra que implica una percepeién
de la realidad influenciada por la visualidad cinematogrifica, que si se dio en ellos, algo que desde el libro de C, B. Morris se
ha convertido en una constante que quiza deba ser cuestionada, la escasez de los testimonios aducidos (los mismos de siempre:
os poemas "Cinematégrafo" de Garfias y "Cinematica" de Aleixandre, y poco més, amén de Cazador en el alba de Ayala)
‘muestra mas bien lo contrario de lo que se pretende y relativiza mucho el alcance de dicha presencia, Como el autor demuestra a
Io largo de su libro ésta iba por otros derroteros,
En definitiva, un trabajo éste del que no se podra prescindir en estudios venideros sobre la época y la Generacién del 27, y de
consulta indispensable para quienes pretendan utilizarlo como punto de partida en nuevas investigaciones sobre el lenguaje
poético y visual de estos autores o sobre esas tendencias de mas larga duracién que los trascienden.
Femandez, Luis Miguel
CitagHo da fonte (MLA 7* edigo)
Femandez, Luis Miguel. "Proyector de luna, La generacion del 27 y el eine.” Anales de la Literatura Espaitola Contemporinea
26.2 (2001): 220. Academic OneFile, Web. 22 July 2015.
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