Esto dice el Santo y verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre y ninguno

cierra,
y
que
cierra
y
ninguno
abre.
Yo conozco tus obras, he aqu, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual nadie
puede cerrar; porque, aunque tienes poca fuerza, haz guardado mi palabra y no has
negado mi nombre.
Apocalipsis 3:7,8
La puerta, es un medio que nos permite entrar o salir, cuando abrimos la puerta de
nuestro hogar, invitamos a compartir, ofrecemos una oportunidad para que otros conozcan
nuestra intimidad.
Cuando se abren puertas, se abren oportunidades para conocer personas o nuevas
experiencias. Pero cuando se cierran puertas se niegan las oportunidades.
Abrimos la puerta cuando tenemos confianza; la cerramos cuando tenemos
desconfianza.
Dios, producto del pecado de la humanidad cerr la puerta del reino de los cielos. Sin
embargo, el manifestaba su poder para anunciar la llegada de un hombre que abrira esa
puerta y dejar salir su amor a travs de su gracia.
Como hombres, producto de nuestro orgullo cerramos la puerta de nuestra alma. La
cerramos con muchos candados porque desconfiamos de los hombres, de las mujeres, de
Dios
Juan 3:16,17: Porque de tal manera am Dios al mundo, que ha dado a su hijo unignito
para que todo aquel que en el crea no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envo
Dios a su hijo a condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por el.