Santiago Caruoso, un ilustrador maldito que discute a travs de su

obra
Sus pinturas sugieren, discuten e invitan a sumergirnos en un mundo donde
el sentir y el pensar buscan un mismo camino. Es uno de los artistas
simbolistas ms importantes en Latinoamerica, consagrado en el exterior.
Santiago nos abre las puertas de sus casa en Don Bosco y nos cuenta un
poco acerca su vida y cmo la misma surca un camino a travs de sus obras.
Por Alejandra Martinez
Santiago naci en Quilmes. Tiene 34 aos y la pregunta acerca de su
vocacin jams se la haba plantiado en su vida. Dibuj desde muy chico.
Copiaba dibujos de historietas, de revistas e incluso dibujos que le hacian
sus padres. Eso en la niez. Los aos pasaron y llegada la adolescencia
comienzaron a surgir las tipicas preguntas que a todos alguna vez nos
aquejaron "Yo me acuerdo que estaba por terminar el secundario y
pensaba ... Qu voy hacer? Estaba claro que iba dibujar! Qu iba a
estudiar? No tenia ni idea! Habia gente que me deca: " Vos tens que hacer
diseo grfico, porque el diseo, porque blah" y uno no sabia si quiera qu
era el diseo grfico! Hoy se sabe. Le pregunto a mi tia y sabe qu es el
diseo grfico! ( lo dice entre risas) Antes el diseo grfico estaba en las
cosas, pero no haba un poderio de la imagen tan zarpado me parece a mi,
como hoy tenes piezas editoriales que
se pueden producir de manera independiente incluso."
Qu hacer de tu vida despus de la escuela no es algo que escape a muchos
de nosotros, pero para Santiago signific una busqueda que iba ms all de
buscar algo de lo qu vivir. Su padre, contador, lo incentivaba en el dibujo
aunque Santiago en el secundario apost a una orientiacin contable, " en
una especie de desicion nefasta. Por suerte no me dediqu a eso" dice,
riendo por lo bajo, mientras tomabamos caf entre varios proyectos entre los
cuales est trabajando, para exponer ac en Buenos Aires y encargos para el
exterior.
Estudi un tiempo en la Escuela de Bellas Artes de Quilmes pero una falta de
inters y entendimiento con la institucin hicieron que abandonara la carrera
al poco tiempo. No buscaba ser profesor en una escuela, buscaba
herramientas con las cuales poder desarrollarse y poder volcar sobre sus
obras. Pero chocaba. Su estilo, apuntaba a ilustraciones e historietas