Está en la página 1de 318
SEGUNDA PARTE PROCESOS DE DINAMICA EXTERIOR (EXODINAMICA) CAPITULO HI NOCIONES ELEMENTALES SOBRE LA ATMOSFERA Los procesos geolégicos que se verifican sobre la superficie de la ‘Tierra estan relacionados con la presencia de la atmésiera, la mas externa de las geosferas. El limite inferior de fa atmésfera lo constituye Ja superficie de Ja litosfera y de la hidrosfera, aunque de hecho, el aire penetra en el interior de éstas, ocupando las oquedades grandes y pequefias de la litosfera o disolviéndose en las aguas de los mares y océanos. La atmésfera est constituida por una mezcla de distintos gases cuya composiciéa y proporciones varian con la altura. lin su parte inmediata a la superficie terrestre, consta esencialmente de nitrd- geno (unos 78%) y oxigeno (unos 21%). Los demas gases representan apenas un 1%, correspondiondo 0,93% al Ar, y 0,03% al COs. En capas mds alias se observa wna disminucién del porcentaje de oxigeno y un aumento del porcentaje de nitrégeno. A una altura de 30 a 100 km aproximadamente, aparecen en la almésfera cl helio y el hidrégeno, disrninuyendo sensiblemente la cantidad de gases pesados, tales come el argon y cl anhidrido carbénieo. No obstante, en la composicion del aire prevalecen on todas las alturas el nitré- geno y el oxigeno, hecho que se explica por el continuo proceso de mezcla del aire. Ex el seno de la atmésfera se pueden destacar tres capas concén- tricas: la tropesfera (emdvil») adyacente a la litosfora; encima de ésta, Ja estratosiera (daminar) y, finalmente, Ja ionosfera. Las capas de la atmésfera que mayor interés presentan para la Geologia son las inferiores, 0 sea la troposfora. Troposjera. 1] espesor medio de la troposfera os de 10 a 44 km, llegando a elevarse hasta 147 km encima del ecuador y bajando hasta 8 km sobre los polos. la troposfera se caracteriza por la variabilidad del poreontaje de humedad; la movilidad de las masas aéreas, tanto en sentido vertical como horizontal; la disminucién gradual de la temperatura con Ja altura, llegando a represontar 0,5 a 0,6° por cada 4100 m, 4G Capitulo T11, Nociones elemenioles sobre lu atmésfera debido a lo cual Ja temperatura ev el Smite superior de la Lroposte encima del ecuador Wega hasta —80” C. Et promedio de temperatura en las capas altas de la troposfera es igual a —55° C. El contenido de humedad en la troposfera es variable, ya conden- sdndose hasta preducit precipitaciones Hiquidas o nivosas, ya desapa- reciendo casi totalmente. Se distinguen la humedad absoluta y la relativa del aire. Por humedad absoluta se entiende la clasticidad del vapor acnoso p. sente en ef aire en cl momento considerado, por Aumedad relative, la razon entre la clastividad del vapor acuoso realmente presente en el aire y la del yapor neeosario para la saturacién de igual volu- men de sire a igual temperatura. La humedad absoluta se mide por ta altura de la columna de mereurio en milimetros. La cantidad de vapor acuoso que el aire puede contener cfectivamente varia ampliamente en funcién de Ja temperatura. Asi, a 0° C, un metro ctbico de aire puede contener 4,8 g de vapor; a 30’C la cantidad de vapor llega a 30,4 g. De este modo, cuanto még elevada sea Ja temperatura del airc, tanto mayar sera la cantidad de humedad que aquél podré absorber. La humedad absolula m4xima del aire se observa en las regio- neg ecuatoriales, donde alcanza 20 mm y mas; la minima, en los desiertos y zonas de intenso frio. En la Siberia nordoriental, por ejemplo, la humedad absoluta disminuye hasta llegar, en ocasiones, a 0,03 mm. La humedad absoluta alcanza su maximo durante la estacion cdlida, mientras que la humedad relativa, por el contrario, lo alcanza en la época fria del aio. Composicién del aire. De entre los gases que inlegran ¢] aire. le corresponde al oxigeno un papel muy importante en los procesos vitales. Tanto un aumento como una disminucién de la cantidad de oxigeno con relacién a la normal, resulta penoso para el organis— mo: en el primero de los casos, en el organismo se accleran los proce- sos de oxidacién (combustion), y en el segundo, se tornan demasiado- lentos, haciendo imposible Ja vespiracién. La presencia del oxigeno libro en el aire se supone debida en grado considerable a la actividad vilal de las plantas verdes que, mediante el proceso de fotosintesis, descomponen el gas carbénico en carbono—material de construccién del cuerpo de las plantas--y en oxigeno, el cual es despedido al aire. El nitrogeno desempefia, en este caso, un papel de disolvente de) oxigeno, representande un medio neutro con Tespecto al organismiv- viviente. . El contenido de anhidrido carbénico en el aire es algo mas varia- ble que el de oxigeno y nitrégeno. El anhidrido carbénice es aportado- a la atmésfera por los voleanes y Jas fuentes minerales y también como resultado de la combustién do sustancias que contienen carho- no, la descomposicién de organismos, la respiracién, etc. De los Noetones elementales sobre la atmésfera 47 gases del aire es el mis pesado, de aqui que en las eapas inferiores de la troposfera el Acido cacbénico se hace presente en cantidades- considerablemente mayores que en las superiores. La distribucién del acido carbénico depende asimismo de las condiciones locales. Encima de los océanos, en las regiones polares y en lugares escasa- mente poblados, el aire no contiene mucho acido carbénico. En cambio, en la proximidad de los volcanes activos, en Jas ciudades y regiones industriales, la cantidad de dcido carbénico aumenta casi. el doble con relacién a la normal. El anhfdrido carbénico desempeiia un papel importante. Es el material hasico para la alimentacién de las plantas clorofilicas, sirviendo asimismo de regulador de temperatura, ya que deja pasar libremente Ia radiacion térmica que llega del Sol a la Tierra, conden- sa el calor y lo devuelve muy Ientamente. Si el anhidrido carbénico desapareeiera del airc, la temperatura media anual sobre la Tierra hajaria. Si, en cambio, el contenido de anhidride carhénico awmen- tara el doble con relacién al actual, la temperatura se elevaria en 4°. La atmésfora contiene también vapores de agua provenientes de la evaporacién en la superficie de los mares y continentes. El papel del vapor de agua es muy importante: sn condensacién da origen a las nubes y precipitaciones; ademas, la teansformacién del vapor acuoso viene acompafada de absorcién o desprendimionto de grandes cantidades de calov. Todos estos procesos inciden sobre las reaeciones dindmicas del modo correspondiente. Et oxigeno, el dcido carbénico y cl agua son los agentes princi- pales de la meteorizacién quimica de las rocas, por medio de los cuales se operan los procesos de oxidacidn, hidratacién, disolucién y otros, tan ampliamente difundidos en la superficie de la Tierra, En el airc siempre est presente, en mayor o menor cantidad, el polvo cuyo origen es muy variado. El polvo puede subir a los aires por efecto del viento que arranca de la superficie terrestre finas particulas de sustancias minerales, 0 como resultado da pul- verizacién por el viento de salpicaduras de aguas marinas, las que, al evaporarse, dejan en cl aire particulas de cloruro sddico. El polvo se hace presente en el aire también como resultado de Ja combustidn de la madera, carb6n, cte., de las caidas de meteoritos sobre la ‘Tierra y, finalmente, de las erupciones volcAnicas. Un cm? de aire contienge como promedio, 250 000 finisimas particulas pulviformes. La pre- sencia de polvo en la atmésfera disminuye la transparencia del aire y debilita en cierlo grado la energia de los rayos solares que penetran hasta la superficie terrestre a través de la atmésfera. Las mismas particulas de polvo, siendo centros de condensacién de los vapores acuoses, contribuyen a la formacién de la niebla y las nubes y, finalmente, a las precipitaciones atmosféricas. La cantidad de 48 Capitulo 111, Nociones elementates sobre ta atmésfera particulas de polvo contenidas en Ja atmésfera disminuyo bruscamen- te a medida quo aumenta la altura. La mayor cantidad de polvo se halla en Jas capas de aire que se desplazan junto a la superficie de la Tierra. Movimientos del aire. La atmésfera se halla sometida a la aceién directa de la radiacién solar. La energia radiante de} Sol es absorbida ep mayor o menor grado por cada una de las geosfetas,—la atmdsfera entre ellas,—y el calor solar se transforma en cvergia térmica. La transformacién de la energia sobre la Tierra es un proceso complejo que depende de una serie do factores de cardcter tanto general como Jocal, Un factor importante que influye sobre los fenémenos térmi- cos es el Angulo de incidoncia de Jos rayos solares sobre las distintas partes de la superficie terrestre, Angulo que depends tanto de la forma de la Tierra y su ro! n diurna, como do la situacién de la Tierra on su 6rbita. Se hallan relacionadas con la distribucién del calor en la atmésfeta las corrientes de aire que favorecen el inlercam- bio térmico entre las latitudes allas y bajas de la Tierra (movimicn- tos horizontales) y entre las capas altas y hajas de la troposfera (movimientos verticales). El desplazamiento del aire en la superficie de la Tierra se explica principalmente por la diferencia de la presiéa atmoslérica en distintos lugares. El aire se desplaza desde las regi nes de alta presién a las de baja presiéa. La presién, a su vez, es relacionada con la tomperatura. En consecuencia, las masag aéreas se hallan somotidas a influjos siempre renovadas, y el movimiento del aire no se interrumpe nunca. Debido a distintas causas, la dife- vencia de la presién atmosidrica sc mantiene en forma permanente entre puntos aistados de la superficie de la Tierra, persistiendo por tanto los movimicntos continues del aire, La intensidad de estos movimientos depende del gradiente de presién atmosférica. Como ¢s nolorio, la presién de la columna de aire atmosiérico sobre la superficie terrestre es equilibrada por la columna de mer- curio del mismo didmetro, siendo la altura de esta dlvima igual a 760 mm al nivel del mar en Ja latitud de 45°. Es la prosién baro- métrica normal de la atmésfera. Esta presién disminuye con la alti- tud porque disminuye la maga aérea de la columna. Hasta ta altura -absoluta de 100 m, la presién disminuye 1 mm cada 11 m aproximada- mente, ya la altura de 2000m, cada 15 m. La presién correspondicate a estos niveles de altura es de 600 y 300 mm respectivamente. La presién de aire se mide en bares (un bar equivale a 4 000 000 de dinas por 4 cm? y corresponde a 750,41 mm de Ja columna de mer- curio), o en milibares (0,001 de bar). ‘La distribucién de la prosién en la atmésfera para una porcion -de tiempo determinada, se representa sobre un mapa goografico por modio de Ineas que unen los puntos de igual presién de aire. Esas Ifneas se denominan isebaras. Noelones elementales sobre la atmésfera 49 La causa principal de las variaciones de la presién atmosférica reside en un calentamiento desigual de la superficie terrestre. Al calentarse, el aire se expande, disminuyendo su peso por unidad de volamen, y tiende a elevarse sobre la superficie terrestre. Pero, al subir a una gran altura, el aire se enfria, se torna mds pesado y vuclve a descender hacia la tierra. De este modo se origina la circulacién vertical que abarca una capa de aire no superior a los 17 km (altura m4&xima de la troposfera). Simultfneamente, se produce también el desplazamiento horizontal del aire desde las zonas de alta presién a las de baja. Este desplazamiento es tanto mas répido cuanto mayor es la diferencia de las presionos. Los movi- mientos horizontales del aire suelen abarcar grandes. extensiones y si tcopiezan con algin obstaculo—como ser las cordilleras que cicrran el paso a la corrieate aérea,—son acompafiados de movimien- tos verticales. La circulacién global de la atmésfera presenta una gran com- plejidad. Influye sobre ella la forma de la Tierra, la rotacién diurna de la Tierra, su movimiento anual alrededor del Sol, la distribucién de los mares y continentes y otros factores. iia la distribucién de los vientos sobre la Tierra se observa un definido cardcter zonal. En la zona ecuatorial donde predominan elevadas temperaturas y bajas presiones, son preponderantes los movimientos ascendentes: es la llamada zona de calmas ecuatoriales. La diferencia de las presiones reinantes en las zonas ecuatorial y subtropical (m4ximo de presién o alta barométrica subtropical) produce una continua corriente de aire que se dirige desde las regio- nes subtropicales hacia el ecuador, conocida bajo el nombre de viento alisio, En eb hemisferio boreal, los alisios no soplan de norte a sur, sino de nordeste hacia el sudoeste; on el austral, no sopian de sur a norte, sino del sudeste al noroeste, dobido al efecto desviador de la rotacién de la Tierra. Hay vientos que soplan en direccién contraria, los denominados contraalisios, Se originan en capas superiores de la atmdsfora, a una altura de 2,5 a 3 km, donde el aire caliente que asciende sobre al ecuador esta forzado a dirigirse lateralmente, hacia el norte y el sur. Los contraalisios son desviados por efacto de ta rotacién de la Tier, a la derecha en el hemisferio boreal y a la izquierda en el austral. Ademas de los alisios y contraalisios que se caracterizan por una constancia excepcional, se conocen vientos que soplan en forma pertbdiea: los monzones, las brisas y los vientos de montafia y de valle. Los mongones estén relacionados con las diferencias estacionales de temperatura entre los continentes y las cuencas hidricas. Al producirse en invierno un fuerte enfriamiento de la tierra firme, el 41005, 50 Capitnle TEL. Noctones elemtentales subre ba atndsfera f a t Worle € Agete worcesre: ‘ Sudoeste Se se {ve ‘ f ve eo | Bite. ™ presién ®. S —wAYY & e tg Norteste aur | 4 Fig. 3. Exquemas de un cicléa ql) y anticiclén (11) en el hemisferio norte este Sudeste monzén sopla desde la costa hacia el mar, y al calontarse la costa en verano, sopla del mar hacia tierra. Los monzones tipicos son fre- euentes en Jndia, (nsulindia, Africa oriental, Australia y otras regiones. Las brisas se oviginan en los litorales de los mares y lagos, asi como de los grandes rios, por efecto de un ecalentamiento desigual do la tierra firme y del agua, Durante el dia, cuando la superficie litoral se calienta mas que el agua, Ja presién sobre aquélla dismi- nuyé y el viento sopla desde la cuenca hidrica (brisa marina). Do noche, ¢! cuadro se invierte y el viento sopla desde tierra hacia las aguas {brisa de tierra), Las hrisas se hacen presontes cn las costas de los mares Baltico, Caspio, Negro y otros. Cabe sefialar también log vientos de monfaria y de valle, que de dia corren desde los valles hacia las cimas montafiosas intensamente calentadas, y de noche descienden de las cumbres a los valles, hacia Yos lugares de temperatura mas elevada. Son conocidos agimismo los movimientos cickénicos de aire: los ciclones y anticiclones. Se caracterizan por movimientos en torbelling, en plano, de enormes masas aéreas. En los ciclones, ol aire se mueve en el sentido contrario al de las agujas de roloj, en torno a wn-contro que también se desplaza y en que se observa el minimo de presién. En los anticiclones, las masas acres giran a favor de las agujas do celoj, origindndose el m&ximo de presién en el centro. Asi, pues, los ciclones se caracterizan por un aumento gradual de presién partiondo del centro hacia afuora, y los anticiclones, por wha disminucién de presién desde el. centro hacia las partes margi- nales (fig. 8). - Nociones elementales sobre ta atmésfera 5A Gan frecuencia los movimientos ciclénicos adquieren una gran velocidad de traslacién. Un ciclén que se mueve con una velocidad de 50 a 70 m/seg (190 a 260 km/hora), al pasar sobre el mar, pro- duce un enorme oleaje y desplazamiento de colosales masas de agua. Por ejemplo, los ciclones que avanzan desde el oeste sobre el golfo de Finlandia originan un empuje de aguas en la parte oriental del golfo, su estacionamiento e incluso una corriente inversa del rio Nevé, provocando inundaciones. Desde la fundacién de Leningrado (4703) hasta los tiempos actuales, se han registrado en esa ciudad mas de 3800 inundaciones. Las mds violentas se observaron en 4777 (con una crecida de 3,3 m), en 1824 (3,88 m), en 1924 (3,82 m). Con tamafias crecidas quedaban sumergidos hasta 65 km? del territorio urbano. Una de esas inundaciones ha sido descrita por A. Pushkin en su poema «EI Jinete de bronce». En las zonas tropicales, vientos ciclénicos de una fuerza des- comunal son capaces de levantar y transportar a distancias conside- rables objetos de bastante peso. Asi, en la isla de Barbados, en. 4831, un trozo de plomo de unos 65 kg fue transportado a una dis- tancia de 500 metros; a una distancia algo menor fue arrastrado un bloque de plomo de unos 180 kg. En la misma isla, en 1870, un huracén destrozé todo un fortin de piedra, lanzando a grandes dis- Fig. 9. Un paraje proximo a Ia est, Sjodnia, después de un huracin 52 Capttulo FI, Noctones elementales sobre la atmésfera tancias pesados cafiones, genle y ganado. El huracén de 1935, en Florida, arrancé de las vias seis vagones de pasajeros. En Jas regiones templadas, los ciclones se mueven con velocida- des algo menores, pero también suelen alcanzar una fuerza conside- rable. Una vez fue observada una ¢lluvias insdlita durante una fuerte tempestad acompafiada de huracin y granizo, en las cerca- nias de la aldea de Meschery (regién de Gorky): Novian del ciclo monedas de plata, kopeks de los siglos XII—X-VI. Al parecer, el ciclén pasé sobre un lugar en qué se hallaba enterrado a poca pro- fundidad un tesore antiguo, arrebatando a su paso las ligeras obleas de plata (sogan V. Kalesnik). Violentos huracanes en la region moscovita han causado, en ocasiones, graves daiios en edificios y bosques. As{, por ejemplo, el fuerte hutacdn quo soplé en 1958 en la region de la estacién Sjod- nia, abareé una franja de cerca de un kilémetro de anchura y varios kilémetros de longitud, en la que dejd rotos o descuajades drboles do gran tamaiio (fig. 9) y arcancados los techos de varios edificios que sufrieron también otros dafios, Precipitaciones atmosféricas, Como resultado de la condensacién del vapor acuoso presente en la atmésfera, en torno a los denomina- dos nicleos de condensacién constituidos por particulas de polvo que flotan en la tropesfera, se forman Jas nubes. Si éstas constan de gotitas de igual tamafio, con carga eléctrica homénima, tienen jgual temperatura y se mueven de idéntico modo, no producen pre- cipitaciones. Pero, al variar cualquiera de estos factores, el equi- librio en Ja nube se altora y comienza la precipitacién, La cantidad de precipitaciones producidas en periodos determi- nados se mide por el espesor (en milimetros) de la capa acuosa que se formaria sobre la superficie terrestre si el agua no se infiltrara en el suelo, no se evaporata ni fluyera hacia las depresiones del terreno. Para Moset, por ej., esta cifra es igual a 586 mm, vale decir, que el agua precipitada durante un afio cubriria todo el territorio urbano con una capa acuosa de 586 mm de espesor. Las precipitaciones se distribuyen muy desigualmente on la superficie terrestre. Bn algunas regiones son escasisimas: en los deslertos que circundan el mar de Aral, por ej., sucede qué las pre- eipitaciones faltan casi por completo durante todo el afio: su pro- medio anual no’ pasa de los. 150 6 200 mm. Son sumamante escasas las precipitaciones on el desierto de Tar (India), sobre el cual las masas aéreas cofrende sur a norte, del océano hacia las montaiias, sin regarlo con lluvias. Pero las mismas masas aéreas, al tropozar con lag vertientes de las precordilleras del Himalaya, producen ltuvias copfosisimas. En Ia cuenca del Indo, la cantidad annal de precipitaciones excede los 12500 mm, y esa diferencia se observa en un trecho de tan sélo 400 km. Noetones elementales sobre la atmésfera 53 En el territorio de la URSS se observa el siguiente cuadro gcneral en la distribucién de las precipitaciones. En las régiones litorales del Baltico, las precipitaciones son abundantes. Hacia los Urales y la Ianura del Caspio, Ia cantidad do precipitaciones disminuye paulatinamente, partiendo de 700 mm en las costas bdlticas para llegar a 200 mm en Ja regidn del Caspio. En el litoral del mar Negro. el promedio anual de las precipitaciones pasa, en algunos puntos, de los 2000 mm, para disminvir dentro ya de la [lanura precaspiana (la de Kura-Arax) hasta 150 6 200 mm. Los ciclones del Pacifico traen grandes masas de aire himedo a las costas del Extremo Oriente. Alli, al tropezar con las cadenas montafiosas, las precipitaciones se agotan rdpidamente, y més alld, en la Siberia Oriental, se vuelven. escasas, obserydndose una cantidad aproximadamente igual que en los desiertos dol Asia Central, Resulta, pues, que las regiones prea- ralicas y la de Verjoiansk reciben una eantidad sensiblemente igual de precipitaciones, pese a la diferencia tajante de sus climas. Bn una regién y en un momento dados, la temperatura del aire, la presién, la bumedad relativa y absoluta varfan con bastante rapidez. Este estado transicional de la atmésfera recihe el nombre general de «tiempo». El] tiempo es el estado de los factores climaticos en una regién y un momento dados. En un mismo momento, el tiempo puede variar mucho de un lugar a otro, En un mismo lugar, e] tiempo cambia, con frecuencia, en el transcurso de unas horas. A diferencia de ello, si tomamos el estado promedio de los factores climaéticos de muchos ajios, tendremos la nocién de clima: el clima de una regién determinada es la sucesién regular de los procesos meteorolégicos, supeditada a las condiciones geograficas y cxpre- sada por el régimen de tiempo a lo largo de muchos aiios. Los climas son mas estables que el tiempo, pero también sufren variaciones a lo largo de extensos periodos, Los principales factores que determinan un clima son: la lati- tud del Jugar, la distribuci6n de Ias aguas y tierras, el relieve du la tierra firme, las caracteristicas de la masa aérea predominante del lugar, la cubierta vegetal y, finalmente, la actividad del hombre, quien modifica la cubierta vegetal y los suclos, edifica grandes ciudades, crea embalses, transforma la naturaleza. Las principales zonag climaticas del globo terrestre son: ecuatorial, tropical, sub- tropical, templada y iria o polar. La accién de Ja atmésfera en su parte inferior ejerce una infiuen- cia considerable sobre la evolucién de los procesos geolégicos que tienen lugar en Ia parte superficial de la corteza terrestre. Ein cler- tos casos, los agentes atmosféricos constituyen el factor decisive en la destruccién de las rocas y en el modelado;del relicve continental. CAPITULO IV LOS PROCESOS DE METEORIZACION § 1. GENERALIDADES SOBRE LOS PROCESOS DE METEORIZACION Se designan con el término «metecrizacién»* los procesos de desintegracién mecdnica y descomposicién quimica de los minerales y rocas, originados por las variaciones de temporatura, la accion del agua, oxigeno, acide carbénico y organismos. En la parte supe- rior de la corteza terrestre, donde tiene lugar wna intensa accidn reciproca de las rocas y la atmésfora, hidrosfera y biosfera, las rocas sufren notables y variadas alteraciones en su composicién y estructura. La parte preponderante do las rocas ha sido originada bajo condiciones termodinamicas especificas, en las profundidades de la Tierra, en las zonas de actividad magmitica y de procesos metamérficos, o bien en el fondo marina, Al quedar expuestas en la superficie terrestre, Jas rocas se encuentran en un ambiente fisico- quimico nueva, se tornan incstables y ompiezan a desintegrarse por la accién de diversos factores. Esla alteracién de las rocas se opera de diversos modos. En unos casos, se reduce a la desagregacién de la roca en fragmentos de diferentes tamafios y aun en los minerales individuales que la integran. En otros casos se observa, en cambio, una transformacién radical de minerales y rocas, por influjo de una serie do agentes quimicos, dando lugar a minerales nuevos, total- mente distintos de los primitivos. Atondicndo a Jos factores que acttian sobre las rocas, y a los resultados de esta accién, los procesos de meteorizacién so dividen, de un modo algo arbitrario, en dos clases: 1) meteorizacton féstca, 2) meteorizacién quimica. Ambas clases de meteorizacién se hallan estrechamente ligadas entye si, acthan conjunta y simultimeamente, vasiando sélo la intensidad con que se manifiesta cada una de ellas, pues depende del clima, relieve, duracién del proceso, composicién de las rocas y otros factores. in . pyence godlogos latinoamericanos utilizan el término «intemperismon . del T.). Meteortzacién fistca 55 § 2. METEORIZACION FISICA La meteorizacién fisica es originada por diversos factores, pero el papel decisive lo desempefan aquéllos que originan el movimiento mecanico de las particulas de la roca. Esto conduce a Ja ruptura de la coherencia entre los elementos integrantes de la roca. De scuerdo a la indole del factor operante, el proceso de destruccién de las rocas por meteorizacién fisica tiene un cardcter particular en cada caso. En unos casos, e! movimiento se origina en el geno de la roca sin que intervengan agentes mecanicos externos. Tal és el caso de la alieracién del volumen de las partes integrantes de la roca por efecto de los cambios de temperatura. Este fenémeno se puede deno- minar meteorizacién térmica. En otros casos, la desintegracién de Jas rocas se opera por la accién niccdnica de agentes externos, tales como fa accién de cuiia del agua en trance de congelarse, los cris- tales en crecimicnto, el sistema de raices de los Arboles, otc. Este fenédmeno se puede lamar meteorizacién mecdnica. La meteorizacién térmica es la mas difundida y opera por influjo de Jas variaciones de temperatura, causantes de un desigual calen- tamiento y enfciamiento de las rocas. Por efecto de las variaciones de temperatura, los granos de minerales que forman las rocas son sometidos a dilataciones y contraceiones sucesivas. Dehido a la lentitud con que el calor penetra en et intecior do la roca, la oxpan- sion provocada por el calor actia con mayor efecto en las partes superficiales que cn Jas interiores. De idéntica manera actia el cufriamionto. La eontraecién de las rocas ocasionada por el enfria- miento nocturno, al progresar de la superficie en profundidad, se enicenta con la dilatacién remanente del calentamiento diurno, lo cual contribuye mas atin al desmorenamiento de la roca. Como resul- tado, se observa con frecucncia la aparicién de grictas o fisuras para- Jelas a la superficie de los bloques y la exfoliacién {descamacién) de éstog (fig. 10). Las rocas pueden ser constituidas por varios minerales (rocas compuestas o poliminerales) o por uno solo (tocas simples o mono- mineralos). Las mas afectadas por la aceién de la meteorizacién térmica son las rocas poliminerales. Los distintos minerales que intogran tales vocas tienen un coeficiente de dilatacién cubica o volumétriea desigual (tabla 3), y de aqui que sea distinto su grado de deformacién por efecto de los cambios de Lemperatura. LE eooficiente de dilatacién lineal de los minerales varia, aun tratdudose de uz mismo mineral, on funcién de la direecién de la dilatacién en el seno del cristal en que se hace Ia medicion. La diferencia de los cocficientes de dilataciéu de distintos mine- rales da lugar a que Ja aceién prolongada de las variaciones de tempe- yatura rompa la cohereneia entre los granos de lus minerales en la Bi Cagitals IV. bes proceso de meteortzneida Fig. 10. Disgregacién de las rocas y extoliaciés roca, y ésta se resquebraje y se parla en trozos separados. El misino proceso se verifica en las rocas simples (mdrmol, cnarcita, caliza, arenisca), debido a la anisotropia de los cristales de los minerales integrantes, TABLA 3 Coeficiente de dilatacién e: de algunos minerales (segdn ey Coeficiente de dilstacion Mineral uruta Cuarzo 0,000310 Ortoctasa 0.000.470 Anfibol (0,000 284 Calcita 0,000 200 EI coeficiente de dilatacién lineal en los cristales de cvarzo y cal- cita, en la direceién perpendicular al eje ternario, excede casi 2 veces Meteorizacién fiskea 57 el mismo coeficiente en la direceién paralela al eje ternario (tabla 4). En consecuencia, los cambios de temperatura dan origen a tensiones logalizadas, aun en rocas monominerales, provocando, con el tiempo, su destruccién, TABLA & Se ‘Tomperatura Coeficiente en °C de dliatactén tineat Mineral Caloila jj L8 20 25,02 10-8 Caleita | L8 20 55x 40-¢ Cuarzo || L? 20 7.5% 1078 Cuarzo 1 Le 20 43,7 x10-6 Influye asimismo sobre la intensidad del proceso de meteoriza~ cién térmica la diferencia en los colores de las rocas, Las rocas expuestas a la accién directa de los rayos solares se calientan mucho mas intensamente que el aire circundante, pero las rocas y minera- les de color oscuro se calientan de un modo particularmente intenso. Por esta raz6n, las rocas abigarradas se desmoronan mas répidamen- te que las monocromas. La velocidad de meteorizacién esta influida asimismo por ef tamaiio de los granos minerales. Las rocas de grano grueso se desinte- gran con mayor rapidez que las de grano fino. En la meteorizacién térmica, los cambios diurnos de temperatura tienen una importancia primordial: son ellos, precisamente, los. que producen el maximo efecto. Los cambios estacionales ejercen un influjo mucho menor. La moteorizacién térmica se observa en casi todas las zonas climaticas, pero alcanza Su mdxima intensidad en las regioncs que sé caracterizan por contrasies violentos de temperaturas, sequedad del aire y ausencia o escaso desarrollo de la cubierta vegetal, factor que suaviza en general las variaciones de temperatura en el suelo. La insolacién* se manifiesta con una fuerza singular en los. desiertos, (ue se caTacterizan por una cantidad infima de precipita- ciones (que no pasa de los 200 6 250 mm por afio), escasa nubosidad, bruscos cambios de temperatura con amplitudes diurnas que alcan- zan 40 650° C y mas, y una enorme escasez de humedad, La humedad relativa puede descender allf, en verano, hasta un 10%, y en ocasio- nes, hasta un 26 3%. En semejantes condiciones, las rocas se calien- tan muy intensamente de dia por la accién de los rayos solares (hasta * Insolacién es la iluminacién de la superficie de Ia Tierra por los rayos solares; la magnitud de insolacién es 1a cantidad de luz y calor que recibe del Sol una unidad de superficie on una unidad do tiempo: 58 Capfiulo TV. Los proceses de meteorizacién temporaturas considcrablerente superiores a la del aire ambiente), y de noche, en cambio, se enfrian fuertemente. Tal sucede en el desietto de Karakum con su clima continental oxtremo: en pleno verano, con una temperatura del aire de unos 40° C, las arenas que forman la superficie del desierto se ealientan de dia hasta 70 u 80° C, enfridudose por la noche hasta —10°C y atin menos. Segtin la expresién del académico V. Obruchey, la parte meri- dional del Asia Central donde abundan arenas méviles y desiertos pedregosos, se transforma en los dias de verano en un ¢horno incan- descentes. La superficie de las rocas se calienta hasta 60 6 70° G, siendo imposible sostener en las manos trozos separados de roca. din un clima seco y cdlido, la destruccién de las rocas es favore- cida asimismo pov las Muvias que, si bien poco frecuentes, suclen tener el cardcter de aguaceros, El rapido enfriamiento de las rocas provocado por las lluvias ocasiona una contraccién desigual de los mi- nerales que las integran y ol fraccionamiento de las rocas en trozos. La metcorizacién térmica opera con suma intensidad también en las daderas abruptas de altas montanas, donde cl aire es mas trans- parente y la insolacién mas intensa que en las llanuras adyacentes. Los detritos rocosos originados por la meteorizacién son arrastrados ‘dcilmente laderas abajo por efecto de la gravedad, dejando la super- ficie de las laderas desnuda y expuesta a una desintegracién ulte- rior, De este modo se van acuroulando al pie de las laderas monta- fiosas y en la parte inferior de éstas, los detritos ea talud quo alean- zan en ocasiones un espesor y extensidn considerables (fig. 14, A y B); en algunos lugares se forman contiauos apilamientos cadti- cos de fragmentos rocosos (xcaes de bloques). El material detritico proveniente del desmoronamiento de las rocas vivas, arrastrado laderas abajo por efecto de la gravedad y acumulado al pie de Ja ladera, se denomina depésito coluvial. Bl proceso de destruccién de las rocas y el arrastre del material detri- tico a regiones mds bajas se llama denudacién. Pertencce asimisino a los procesos de denudacidn la accién destructora de los ios, mares, viento y otros factores exdgenos, o sea el conjunto de los procesos de destruccién y de arrastre. Los procesos de meteorizacién actGan con mayor rapidez cuando las recas presentan un fuerte agrictamiento. Las grietas o fisuras de jas rocas pueden ser de diferente origen: las primarias o endocinéticas, relacionadas con Jas circunstancias de formacién de las rocas, y las seeundarias o exocinéticas, originadas, por movimientos tecténicos y otras causas, prescindiendo do la metcorizacién. Las grietas pri- marias en las rocas sedimentarias comprenden, por ej., las de estra- tificacién, que separan una capa de la otra; en las rocas magmaticas, las grietas de retraccién producidas al reducirse el volumen de la Meteorizaciin fistea 5% squema de un cone detritice y estructura de un talud detritico: Fig. 1 b, detritos en talud sistema propio de fisuras crizan por una fragm LF Daubréw ace distin- 19) propuesto par el caide en desuso en ta UL cla * EL térming «di a fines del sigh pasado, cidn entre las dos elases de grietas. (N. del 'T.). 60 Capitulo TV. Los procesos de meteorizaciin Fig. 12. Disyuncién columnar del basalto diforme (fig. 13); algunas de las diabasas, por su exfoliacién esfe- toidal (fig. 14). En las rocas magmaticas vivas sin meteorizar, las fisuras son poco pronunciadas, formando las rocas macizos compactos, Al actuar la meteorizacién, empiezan a pronunciarse marcadamente las fisuras de disyuncién segén las cuales Ja roca se desagrega ini- cialmente; los bloques asi formados son sometidos a continuacién a una ulterior fragmentacién y desmenuzamiento por efecto de las variaciones de temperatura. Las grietas de origen tecténico y las de estratificacién se van ensanchando también por accién de la meteorizacién, hasta ocasio- mar una desagregacién total de las partes de la roca. Cuanto mas tupida es Ia red de grietas, con tanto mayor eficacia actiian los pro- cesos de meteorizacién. La meteorizacién mecénica es un proceso en que la desintegracién de las rocas se opera por la accién mecdnica de los agentes externos, tales como el agua en trance de congelarse, las raices de las plantas, la cristalizacién de las sales, etc. El agente destructor de rocas que actia con particular intensidad y rapidez es el agua, Cuando el agua queda confinada en las grietas y los poros de las rocas donde luego se congela, experimenta una dilatacién de un 10 a 11%, ejer- Fig. 13. Disyuncién almohadiforme del granito 62 Captiulo IV. Los procesos de meteorizacién ciendo una enorme presién sobre las superficies fisurales (de hasta yarios cientos de kilogramos por cm*). Una fuerza semejante vence faécilmente la resistencia a la rotura de las rocas, y éstas se parten en {ron0s separados. Este fenémeno suele Ilamarse «disgregacién gla- cial», Son condiciones necesarias para su accién: 1) presencia de poros y grietas en las rocas; 2) presencia del agua y 3) condiciones de tem- peratura adecuadas. Adquiere su mAxima intensidad cuando son frecuentes los cambios de temperatura vecinos al punto de congela- cién del agua: en altas latitudes polares y subpolares, asi como en regiones montafiosas, especialmente mds arriba del limite de las nieves perpetuas, donde suelen contemplarse con frecuencia enormes extensiones cubiertas de escombros rocosos de variados tamaiios,— los «mares de piedra», «riadas de piedras», ete.,—originadas por Ja adisgregacién glacial». Ejerce asimismo una accién demoledora en las rocas la cristuli- zacién de las sales en las grietas capilares. Este fenémeno actiia con particular eficacia en regiones de clima drido donde, al calen- tarse fuertemente durante el dia, el agua presente en las grietas capi- Jares es atrafda hacia la superficie y evaporada, dejando cristali- zadas las sales que llevaba disueltas. Bajo el empuje de los cristales en crecimiento, las grietas capilares se van abriendo y aumentando Fig. 14. Disyuncién esferoidal

También podría gustarte