Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
sistema algortmico para responder a sus interlocutores, nos vemos inclinados a pensar que
de hecho no sabe mandarn. As, no podramos predicar inteligencia de una mquina
nicamente porque al interactuar con nosotros pareciera mostrar un comportamiento
inteligente. Sin embargo, al aceptar este contraejemplo al test de Turing, estaramos
implcitamente aceptando que la inteligencia no debe predicarse de las personas (la
habitacin en el contraejemplo) sino de alguna parte de ellas (sea su cerebro o sus estados
neuronales, la persona dentro de la habitacin en el contraejemplo) dejando de lado sus dems
partes considerndolas insignificantes en lo concerniente a su capacidad de ser inteligente. A
mi parecer, los estados mentales de alguien estn necesariamente vinculados con la totalidad
de su persona, por as decirlo, de modo que cada parte de su configuracin fsica asimismo
como el contexto en el que est inmerso (y esto sin mencionar nuestro propio contexto como
jueces para estar hablando de inteligencia) son de vital importancia para que podamos
predicar de ella que es inteligente. De modo que, si bien no considero que debamos aceptar
el test de Turing por su carcter funcionalista, la respuesta que da Searle tampoco nos aporta
mucha claridad en este asunto.