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El Padre Ángel Considera
El Padre Ángel Considera
recaudatoria de la Iglesia
El asturiano, que ayer presentó un libro sobre su labor en su ONG, cree que la Iglesia «no
necesita demostrar que es solidaria» Criticó la beatificación de los mártires «que cayeron por
venganza»
El presidente de Mensajeros de la Paz, el padre Ángel, arremetió ayer contra la Iglesia por
varios frentes. Lo hizo durante la presentación en Madrid del libro 'El padre Ángel. Mensajero
de la Paz', del periodista Jesús Bastante. El asturiano tomó la palabra y empezó por considerar
una «indignidad» la campaña publicitaria lanzada por la Conferencia Episcopal Española el día
anterior para aumentar el porcentaje de contribuyentes que marcan la casilla de la Iglesia en
su Declaración de la Renta.
«Si es para sacar dinero es una indignidad», afirmó rotundo para aclarar después que «la
Iglesia no necesita hacer una campaña para demostrar que es solidaria ni para que crean en
ella» y añadió que «tampoco necesita que se publicite que cuenta con 170 hospitales o 70
diócesis porque la gente lo sabe».
El presidente de Mensajeros de la Paz fue más allá. También se mostró optimista ante la
posibilidad de que las mujeres puedan ser ordenadas sacerdotes durante el pontificado de
Benedicto XVI. Y es que, según destacó, este Papa «valora mucho a la mujer». «Creo que en
cuatro o cinco años veremos a mujeres sacerdotisas», apuntó. Y aprovechó para censurar
incluso el celibato: «Es una barbaridad tan grande como una catedral». El cura también dijo
sentirse «a gusto rezando en una mezquita o en una iglesia católica», porque «no hay
salvación sólo en la Iglesia Católica».
'El Padre Ángel. Mensajero de la Paz' recoge las anécdotas, las historias y el trabajo del
sacerdote para sacar adelante su ONG, desde su fundación en 1962 en Asturias. También
revela sus relaciones con los políticos y famosos para conseguir financiación. Entre la clase
política, el sacerdote no duda en definir al ex presidente Felipe González como «el mejor» y a
José María Aznar como «un hombre bueno».