Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Basilea III; en términos de requisitos de capital para las entidades financieras. Básicamente, se
pretende mejorar los ratios de capital de las entidades financieras al alza para evitar crisis
financieras como la actuales.
En teoría, esta regulación suena muy bien; en la práctica,la regulación sólo va a plasmar en una
norma la situación actual en la que desde un TIER1 (capital más reservas) obligatorio del 2% se
pretende fijar en un 7% en un horizonte temporal 2013-2018 con una implantación gradual.
Respecto al TIER2 (TIER más las participaciones preferentes que la entidad tenga emitidas), no
se fijan condiciones especiales. ¿Qué mejora esta nueva norma de regulación financiera? A
efectos prácticos, nada.
Nada, puesto que la mayoría de entidades financieras que operan actualmente tiene un TIER1
en la horquilla 6%-9%. Recordemos que los tests del estrés exigian un mínimo del 6% y que
sólo algunas cajas de ahorros estaban por debajo de este baremo. En este sentido, que los bancos
tengan como obligatorio un capital que actualmente mantienen como norma de gestión es una
cuestión completamente menor.
A efectos prácticos, esta regulación no elimina las dudas sobre solvencia, dado que el sistema
financiero se derrumbaría como un castillo de naipes si la morosidad supera un 13% ni tampoco
garantiza la solvencia y capacidad de devolución de los activos ¿Alguien recuerda la quiebra de
Lehman y las hipotecas Ninja? Pues eso, muchas reuniones con contenido nulo.