historia y se convierte en
mito. {Quién no recuerda
1a maravillosa fibula sobre Ia multiplica
cin de los granos de trigo? Todo es prehis-
toria hasta la Edad Media y aiin se desco-
noce el camino que recorrié para entrar a
Europa.
{Acaso los griegos conocieron el juego
‘en Egipto, lo transmitieron a Roma y asi
el ajedrez’seria una contribucién cultural
mis del Imperio? {0 es cierta la historia
popular que sostiene que los arabes intro-
dujeron el ajedrez a Europa cuando entra-
ron a Espafia en 711? Los arabes conocie-
ron el juego en Persia, mientras que estos lo
importaron de la India. Sin embargo, nu-
‘merosas cronicas tienden a sugerir que en
Francia conocian al ajedrez antes de la lle-
gada de los invasores musulmanes. Entre
otras costumbres, solian arrojarse a la ca:
bbeza las pesadas piezas (de piedra) cuando
dian o ante otra provocacion. La confu-
sign aumenta con la etimologia. Parece que
“ajedrez”, segin el idioma, es un vocablo
que puede pertenecer al arabe, persa, grie-
g0 0 latin.
El ajedrez de la Edad Media es el primo
hhermano del juego contemporaneo. El rey,
la torre y el caballo se movian con la mis
rma gracia que sus descendientes, pero la
ddama y el alfil se caracterizaban por sutor-
peza y hacian lento el juego.
El alfferza, que mas tarde cambiaria de
sexo y se convertiria en una dama guerrera,
era un pobre tullido, apenas mejor que el
desprestigiado peén. Caminaba un timido
pasito en diagonal. En cuanto al alfl, tam-
bién movia en diagonal, con Ia salvedad
que siempre saltaba dos casillas. Los peo-
‘es no disponian del paso doble en su posi-
cién original. El contacto con el enemigo
tardaba en producirse. Con justa razén los
‘entendidos en Ia materia se burlaban de un
mecanismo tan sofisticado como el enro-
que para poner en seguridad ai rey. {No
existia peligro alguno! Aunque en forma
‘gradual se ensayé el desplazamiento del rey
| origen de ajedret se per
EB de entre las tinieblas de In
ajedrez
Kenneth Frey
Z Lacreacion del ajedrez
moderno
dos casillas en una sola jugada, acompaiia-
do de su alfferz
Fiel refleo de Ia historia, ef ajedrez fue
arrastrado por los vertiginosos cambios
‘que caracterizaron al Renacimiento y ad-
Quirié un extraordinario dinamismo. Bl alf-
ferez, por un fenémeno que es interesante
estudiar, se transformé en dama; los alfles
‘comenzaron a recorrer las diagonales a su
antojo. El equilibrio del juego se trastorné
‘con la presencia de estas nuevas poderosas
fuerzas, Se hizo necesario encontrar un re-
fugio répido y seguro para el rey, que su-
cumbia con demasiada frecuencia en el
centro del tablero, Surgié el enroque en dos
‘movimientos (se colocaba al rey junto a la
torre y en la siguiente jugada la torre salta-
tba encima del rey). Al poco tiempo se gene-
ralizé la costumbre de enrocar en una sola
jugada. Los peones subieron de categoria y
se les permitid el doble paso. El contacto
brutal con el enemigo enriquecié el juego.
Las combinaciones. se hicieron violentas
“A Ia rabiosa”, la lamaban los italianos.
La idea légica de la captura al paso com.
pleté la obra y alli estaba, recién nacida
hhace 500 afios, una de las creaciones impe-
recederas de la humanidad. {Cuantos pue-
bios, cudntas personas unieron sus inteli-
gencias, cudntos afos transcurrieron desde
el primer instante en que un hombre vio un
cuadrado y comenz6 a jugar con ella?
Uno de los grandes misterios es la meta-
morfosis del alferez.
Una teoria de! Dr. Silbermann expuesta
en “Geschichte des Schachs” dedicada a
historia del ajedrez parece descabellada
pero merece seria consideracién. El sostie-
nie que la influencia de Juana de Arco expli-
ca el fenémeno. En la primera mitad del si-
slo XV, Carlos VII era el heredero legiti-
‘mo del trono de Francia, pero faltaba su
consagracién y debia soportar la rivalidad
de Enrique VI, reconocido como el rey en
Paris y en el norte de Francia, Los ingleses
‘cupaban un extenso territorio en el pais.
Era la Guerra de los Cien Afios. Todo era
miseria, pillaje, asesinatos. Carlos VII, inte-
ligente pero débil, sdjeto a terrores enfermi
20s, desprovisto de cuslidades guerrer
Janguidecia en Poitiers cuando al pais le ur-
gia una mano enérgica. La milagrosa apari-
cin de una campesina de 16 afos, Juana
de Arco, escribié una de las paginas mis
‘emotivas de la historia. Su fe y su convic-
cién le ganaron numerosos_partidarios.
Convencié a Carlos VII, partié con su au
torizacion expuls6 a los ingle-
ses que asediaban la ciudad. Renacia a es-
peranza y el valor del pueblo entero. Ape-
‘as tres meses mas tarde, impulsado por
Juana, Carlos VIT riprendia el peligroso
viaje a Reims para su ceremonia de consa-
sracién como rey. Comenzaba la recupera-
cin y la unin de Francia. Dos aos des-
pués, Juana de Arco era quemada viva por
los ingleses
En el ajedrez, los aficionados (quizé un
solo genio creador) tomaron como modelo
4 esta valiente y admirada amazona que
abri6 el camino a un rey débil y huidizo.
Existen muchas coincidencias que parecen
confirmar esta influencia histérica sobre el
ajedrez. El alfferez se convirtié en la dama
en la segunda mitad del siglo XV, lo que
concuerda bien en el tiempo historico. El
célebre Manuscrito de Gottinga, que es el
primer tratado de ajedrez. modero, es ori
ginario precisamente de Francia, segin la
‘opinion de muchos expertos en la materia.
Von der Lasa, el célebre historisdor y
maestro de ajedrez del siglo pasado, afirmé
ue el Manuscrito de Gottinga proviene de
la corte de Lorena, en Nancy. Lorena es la
patria de Juana de Arco.
La obra inmortal de Lucena, “Repeti-
cién de amores e arte de axedrés, con 101
Juegos de partido”, impreso en Salamanca
en 1497, tambien menciona al ajedrez nue-
vo. El autor acompai a su padre, embaja-
dor espafol,en sus viajes a Francia e Italia
y pudo contaminarse del ajedrer modemno.
‘odos los paises aceptaron el nuevo mo-
vimiento del alferez, sin excepcién, Dos
paises rechazaron la palabra “dama”: Ru-
sia, donde la gloria de Juana de Arco pene-
tratia con lentitud, no veia motivo para
cambiar el nombre antiguo, e Inglaterra
que escogié el vocablo “Queen” (Reina).