Está en la página 1de 1

c 

 


Había una vez un cerdito y un perrito que no se ponían de acuerdo para


jugar. El cerdito por ser muy rechoncho era muy tímido para jugar, por otro
lado el perrito tenía un estado físico muy atlético y era algo engreído. El
perrito le dijo al Cerdito que pasara por el aro, sin embargo este tuvo
dificultades y el perrito se burlo. Lo que ocasiono que el Cerdito se sintiera
triste y abandonó el juego.

El perrito al quedarse solo reflexiono y se dio cuenta que necesitaba a su


amigo el cerdito para divertirse y que no era bueno burlarse de los amigos,
así que fue a pedirle excusas al cerdito y lo invito a jugar para mejorar su
estado físico a parte de divertirse. Desde entonces los dos amigos juegan
mucho y el cerdito ha mejorado su estado físico. Y colorín colorado este
Cerdito se ha adelgazado.

También podría gustarte