Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Con lo anterior, vemos, cómo la Ciencia es un proceso y un acto humano que válida el
desarrollo o progreso de las sociedades, y a su vez permite una transformación
dependiendo de su utilidad. Actualmente la Ciencia se considera una gran industria, y
como toda industria requiere de un mercado que compre, y unos clientes a los que se
les pueda vender “productos científicos”. Por otro lado, la ciencia coexiste gracias a las
personas que la desarrollan y practican, los científicos, pero a su vez estos necesitan a
veces de grandes inversiones de capital para llevar a cabo sus investigaciones. Se crea
entonces, una cadena de dependencia cuyo motor es el hombre y cuyo accionar lo
realiza también el hombre. Sin embargo, hay una falla en esta cadena, y reside en las
empresas productoras. Podríamos pensar que en un sistema de este tipo lo que
interesa no es solucionar los problemas de la gente, sino la reproducción de un
mercado que cobra vida propia, subordinando las voluntades de los hombres a su
requerimiento. En el caso de la ciencia aplicada resulta claro que la investigación por
parte de los científicos no es libre sino dirigida. "La investigación científica siempre se
halla condicionada, sea básica o aplicada, directa o indirectamente, explícita o
implícitamente, por mucho que les pese a aquellos científicos que prefieren vivir en la
ilusión de un saber inmaculado"1.
Hundido de tal modo en los valores elementales, el conocimiento vulgar no puede evolucionar.
No
puede abandonar su empirismo primero. Se tienen más respuestas que preguntas. El
conocimiento
vulgar tiene respuestas para todo. Claramente se ve en el ejemplo elegido: si la varilla de resinas
lanza chispas al menor frotamiento, es que está llena de fuego. ¿Por qué asombrarse ante este
nuevo fenómeno? ¿Acaso desde tiempos inmemoriales no se hacen antorchas con resina? Y esas
chispas no son solamente de luz fría, pues sus chispas calientes, que pueden inflamar el agua de
vida, el agua de fuego. Todas estas observaciones, en el empírico estilo del siglo XVIII, prueban
la
continuidad de la experiencia común y la experiencia científica. El fenómeno que al principio
nos
sorprendía pronto no será más que un ejemplo de la circulación del fuego por toda la naturaleza
de
la vida misma. Como dice Pott, empleando la docta palabra flogisto pero pensando en la palabra
vulgar, en la palabra fuego: “La extensión de esta sustancia (el flogisto) es tan amplia como el
universo; se encuentra expandida por toda la naturaleza, aunque en combinaciones muy
diferentes”.
Así, no hay intuiciones más generales que las intuiciones ingenuas. Las intuiciones ingenuas lo
explican todo.
Por otra parte, la fisica natural tiene, por supuesto, su microfísica. Ella misma estima que el
fuego
El verdadero hecho intelectual del futuro está en el diseño del conocimiento. Y cuanto más
significativa sea la manera en que la fuerza productiva se vuelva inteligencia, más deberán
converger
ciencia y cultura.DIGITAL