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- De la vida feliz se puede empezar, quizás de millones de maneras posibles.

Yo

preferiría la más sencilla de ellas.

Cada individuo tiene su manera de llegar a la felicidad como muy bien lo explica San

Agustín en su breve historia “De la vida feliz”, en la deduce de una manera muy

metafórica y lógica pero a su vez muy cierta en todos sus aspectos. Cada ser

construye su propio camino para llegar a la felicidad de acuerdo a lo que desea y

vive día a día. San Agustín dice que existen tres clases de navegantes para llegar a

la filosofía o la felicidad. El primero de ellos que pacientemente lleva su vida con

tranquilidad y al pasar de los años con poco esfuerzo, y actos de sabiduría inspiran a

los demás al camino de la filosofía y la serenidad.

Luego tenemos al que se aleja de su patria, engañado por la belleza de las cosas en

la vida, impulsados por las cosas frívolas y vacías de la vida son empujados cada vez

mas lejos de toda filosofía y felicidad real en la vida, hasta tal punto donde están

en lo más profundo de aquel abismo, consumidos por los placeres y deleites carnales

que no alimentan el espíritu. Allí pocos son los que se dan cuenta del verdadero

camino y logran salir hasta llegar al camino de la felicidad verdadera. A su vez

tenemos a los que por infortunios de sus vidas pierden sus fortunas y todo bien

material que poseían, al no saber qué hacer son conducidos a los libros y al camino

de la filosofía para así poder conseguir su felicidad verdadera a través de un

camino lleno de bienes espirituales y no materiales.

Aparte existe la tercera clase de hombres que azotados siempre por la vida se van

dando cuenta poco a poco del camino verdadero a seguir siguiendo lentamente sin

nunca detenerse, a veces con contratiempos de la vida y con miedo a perderse por
ese largo camino. También estos en muchas oportunidades son llevados a la felicidad

verdadera por los errores que ellos cometen aprendiendo siempre de los mismos

para no perderse nunca más por ese camino y llegar seguros a su objetivo.

Siempre de una u otra manera cada hombre es llevado a la felicidad verdadera de

acuerdo a todo lo que haya aprendido por su camino de la vida, lo que la fortuna le

tenga preparado o no. Todos debemos llegar al mismo lugar o al menos ese es el

objetivo de muchos en este breve camino de la vida, siempre evitando todos

aquellos valores negativos que solo nos perjudican y nos alejan de la completa

felicidad.

San Agustín se identifica mucho con el tercer tipo de marinero que va en busca de

la felicidad, a sus 19 años estudio en la academia de retorica un libro de Cicerón

intitulado Hortensius, lo inspiro tanto que desde entonces se entrego de tal manera

a la filosofía que entrego su vida por completo a ella, aunque no se libero de todos

los pecados y deseos de la vida, más un tiempo después se libero de todos aquellos

males que lo acarreaban pudiendo seguir su camino sin miedo alguno, siempre

buscando su felicidad basada en toda verdad que el creyera correcta y justa para

seguir.

El 13 de noviembre San Agustín para festejar su cumpleaños reunió a sus más

cercanos familiares y discípulos para una pequeña disputa sobre la vida feliz, él

quería conocer las opiniones de cada uno usando equilibradamente la parte

emocional con la parte racional del individuo para llegar a la conclusión más

filosófica posible.
- ¿Os parece evidente que estamos constituidos de alma y cuerpo?

Todos afirmaron, estamos de acuerdo en que el ser humano está constituido por

estas 2 cosas fundamentales el alma y el cuerpo, sin ellas no podría existir la vida

como la conocemos a pesar de sus diferentes expresiones en este mundo.

- Luego pregunto ¿por cuál de ellos se procuran los alimentos?

Los alimentos es todo aquello que nos mantiene con vida, lo que sustenta el

desarrollo del individuo. Existen 2 tipos de alimentos, el alimento del cuerpo y la del

alma. Si alimentas uno pero descuidas el otro existirá siempre un desequilibrio que

no es bueno en lo absoluto. El alimento del cuerpo es aquel que consiste en todo

aquello que comemos para mantener el cuerpo físico saludable, pero el del alma es

toda aquella experiencia, lectura o aprendizaje que tenemos en esta vida. Sin el

alimento del alma seriamos seres vacios, sin importar lo mucho que alimentemos el

cuerpo será vacio, por eso debemos alimentar el alma con verdades y sentimientos

que nos caracterizan como seres humanos.

Más tarde pregunto ¿Queremos todos nosotros ser felices?

Todos respondieron afirmativamente, entonces ¿es feliz el que no posee cuanto

apetece? No.

Entonces ¿es feliz el que posee cuanto apetece? Nunca serán felices aquellos que

como objetivo sea conseguir solo males, en cambio todo aquel que apetezca bienes y

los consiga será feliz. Pero solo aquel hombre que posea bienes no perecederos será

realmente feliz ya que todo bien material está dispuesto a perderse en cualquier

momento por infortunio y esto nos llevaría a la desdicha.


Luego pregunto ¿es feliz aquel que posee a Dios?

Todos respondieron afirmativamente ya que él es la única verdad que absoluta que

poseemos afirmo San Agustín, apoyado por todos los reunidos esa noche.

Comentario Personal:

Aunque para ser feliz no es necesario poseer a dios ya que eso sería seguir un

camino religioso, este te llevaría siempre por una buena vida siempre tratan de ser

mejores personas y de conseguir una cultura de paz y tolerancia con las demás

personas. Pero la verdad absoluta radica en siempre buscar lo que queríamos,

proponernos objetivos y lograrlos, pero con mucho cuidado en la forma de

conseguirlos ya que el fin no justifica los medios de ninguna manera. La felicidad no

radica en ser felices todo el tiempo, sino en aprender a llevar tanto los momentos

tristes como cada detalle hermoso que nos regale la vida con paciencia, tolerancia y

amor. De ello vivimos cada día y por ende debemos aprender de cada cosa que nos

regale esta vida para llegar siempre a conseguir una verdad, algo en que creer y

luchar por el hasta conseguirlo.

La felicidad por mas que se posea o no Dios, está siempre en la búsqueda de todo

bien y más aun, en búsqueda y lucha por la verdad.


República Bolivariana de Venezuela

Universidad de los Andes

Mérida, Febrero 2010

La vida feliz

Juan Andrés Vivas Contreras

C.I 20.431.975

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