Dentro de la aldea global empresarial cualquier organización debe seguir muchos
pasos para lograr la excelencia, siendo entre de ellos la integración corporativa, estructura, recursos físicos y humanos; así como todos aquellos rasgos característicos que permitan a la empresa desarrollarse plenamente dentro de una sociedad.
Las empresas se estructuran bajo parámetros o estándares organizativos en donde se
conjugan el recurso humano y la ejecución de las actividades a través de planes de acción estratégicos que se caracterizan por el manejo de políticas idóneas de control y la toma de decisiones que deberán ser acertadas si se desea alcanzar el éxito. Para ello se deberá tener como objetivo fundamental la obtención del mayor rendimiento de las operaciones con el uso adecuado de los recursos disponibles, siendo primordial e indispensable la implementación de controles y evaluaciones de los procedimientos a fin de determinar constantemente la situación real de la empresa, muy útil a la hora de tomar decisiones efectivas.