LA ALABANZA a Dios es, principalmente, un acto de gratitud por todo lo que

Dios hace, pero ms an, porque l es digno de ella. Alabar a Dios implica un
acto de reconocimiento de su grandeza y seoro, as como de lo excelso,
nico, admirable y grandioso que es l. Es un aspecto de la adoracin, en cual
se rinde honor a Dios (2Cr. 7:3). Producto de la alegra santa (Sal 9:1-2; 63:5;
100). La alabanza se expresa a veces con canticos, msica y danzas (2 Cr. 7:6;
Sal 28:7; 40:3; 95:1-2; 149:1-3; 150)
Al alabarle, proclamamos sus poderosos hechos, sus maravillas, su grandeza,
su poder y su gloria. Le ensalzamos, enaltecemos, honramos, glorificamos y
exaltamos con admiracin y gratitud; recordamos victorias pasadas y
declaramos triunfos futuros. Cuando le alabamos, declaramos tambin lo que
dice su Palabra acerca de l mismo: lo grande, Todopoderoso, omnipotente,
misericordioso, soberano, altsimo, benevolente y clemente que l es.
Dios exige la alabanza (Sal 50:14; Ap. 19:5) y es digno de ella (2 S 22:4; Sal
48:1; 145:3) porque es nico (2 Cr. 6:14-15; Sal 113) bueno (Sal 106:1; Jer.
33:11) grande (1 Cr 16:25-26; Sal 150:2) poderoso (1 Cr. 29:11-13; Sal 21:13)
misericordioso (2 Cr 20:21; sal 57:9) y justo (Dn. 4:37; Sal 7:17).
La alabanza surge espontanea frente a los milagros de Dios (Lc. 18:43; Hch
3:8). La alabanza ocupara eternamente al pueblo de Dios (sal 30:12; 79:13;
84:4).
LA ADORACIN implica mucho ms que alabarle. Es un encuentro profundo
con el Seor, con su Persona Divina. Culto o reverencia que se rinde a dios por
sus obras (Sal 92:15) y por ser quien es (Sal 100:1-4). Se expresa mediante
oracin (Gn. 12:8; Neh 9) sacrificio (Gn. 8:20) ofrenda (Gn. 4:3-4; 1 S 1:3; Dt
26:10; 1 Cr. 16:29) alabanza ( 2 Cr. 7:3; Sal 29:1-2; 86:9; 138:1-2) canto (Sal
66:4) meditacin (Sal 63:5-6) temor (Sal 96:9) ayuno (Neh 9:1-3; Lc 2:37) fiesta
y accin de gracias (2 cr. 30:21-22).