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Sin ttulo

Guillermo Samperio
El amor enciende el corazn y apaga la luz.

Una carta de amor descansa en un cajn,


mojada por una lgrima que destie el
sueo de lo que pudo ser y no fue.

CRUCE
Arturo Prez Reverte
Cruzaba la calle cuando comprendi que no
le importaba llegar al otro lado.

Cuento indigenista
Humm, yo no echaria mentiras tan cerquita del Sior de Chalma...
Pero eso no es nada. Lotro ao se le meti al endino quesque ser
deputao; entonces si nos triba a los mazahuas muy consentiditos. Que
Tanilo Santos puaqui, que Tanilo Santos puac... Yo, buen baboso, le
arrim harta gente... Millones, pa ques ms que la verd! Habia que
ver esa plaza de Atlacomulco llena de burros y de cristianos... Mucho

pulque, buena barbacoa, hartas tortillotas de maiz pinto. Camiones y


carretas a los pueblos pacarriar a la raza; nos embriag bonito y nos dio
de tragar hasta que se nos hizo bueno, lo que sea hay que decirse...
Pero hi noms que le sale otro candidato, a ese le decia el PRI, y naiden
en todo el plan lo conocia... Pero de todas maneras a don Donatito ni los
guesos le tronaron. Luego que pas la cosa, don Donatito echaba lumbre
por las orejas viera ust noms! Y lleno de muina nos mand en
rialada. Ganamos a pata pa los ranchos... En el mero Cerrito quemado
nos agarr un aguacero que qu le cuento a ust... y desde entonces
don Donatito no siacuerda de sus majes, si no es pa trasquilar la
borregada... Dice que la Revolucin y que la Revolucin y que el
pobretariado nacional y quesque el Sinarquismo, y al son de su
arguende no sabe ms que atornillarnos por donde puede... Ahista lo
que pas en Tlacotep... don Donatito se les meti al rancho de Endh,
sac a los inditos quesque phacer colonos a los ricos del pueblo... Claro
que l se ech al pico los potreros mejorcitos, al son de ques amigo de
los probes, de esos probes que andan pidiendo limosna ahoy en el
mercado de Tlacotep, noms por culpa de don Donatito...

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