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CIENCIA - POLITICA - SOCIEDAD EI discurso politico Lenguajes y acontecimientos Eliseo Verén - Leonor Artuch - Maria Magdalena Chirico - Emilio de Ipola - Noemi Goldman - M. Inés Gonzalez Bombal - Oscar Landi ¥ HACHETTE BL DISCURSO POLITICO nian de la riqueza potencial y de la fecunda dispersion del dominio de andlisis de las significaciones sociales. 'No obstante, ni esa riqueza es simple acumulacién de lo heterogéneo ni esa GispersiOn es andrquica mis alli de ilusorias ~e indeseables~ unanimidades. Une a los autores la conviccién de la necesidad de desarrollar nuevas perspec tivas tebricas y_ metodolbgicas en dicho dominio de andlisis, superando los limites de aquellos enfoques de los fenémenos de significacién centrados ex: clusivamente en Jo lingistico 0 en los “‘contenidos”, e incapaces de dar cuenta de Ia dimensién enunciativa puesta en juego en toda prictica discursiva ni de las complejas relaciones entre produccién y recepeién del sentido. LA PALABRA ADVERSATIVA, Observaciones sobre la enunciacién politica Eliseo Veron. LAS DIFICULTADES Por razones histéricas, el discurso politico ha sido uno de los primeros objetos de estudio abordados por quienes buscaban abrir el camino de! aniliss, del discurso, en particular en Francia. Desde entonces, cierto niimero de tra- bajos han sido publicados; globalmente, el ands lexiol6gico aparece como 4a orientacion metodolégica dominante.* Estd claro que el hablar de discurso politico supone necesariamente que ‘existen discursos que no son politicos: dicho de otro modo, la nocién de dis- euro politico presupone, de manera explicita o implicita, ciertas hipétesis sobre una tigologn de deus soils, Ahora bien, e iguaimente claro que avia, El trabajo sobre el discurso politico se ha Tbs ge do coves tntuciouee con feruradi co ¥ & partir de una identificacién de sentido comin, como por ejemplo a que consiste en analizar como ‘discurso politico” textos producidos por | deres 0 por partidos politicos (De Gaulle, Mitterrand, el partido comunista, Peron, ete.) Este modo de proceder podri ser tachado de circular, puesto que el té ‘mino a definir forma parte de la definicién; es dificil, sin embargo, en el estado actual de nuestros conocimientos sobre el funcionamiento de los discursos sociales, imaginar otro procedimiento que el que consiste en asociar de una 1 Ver en particular varie ameras especles de revsts: “Le dscours politique” Langages (Ne 23, septiembre 1971), "Typologie du discours politique”, Langages ‘41, marzo 1976), “Analyse lngustique du discous jaurésien”, Langages (N° 52, snbie 1978), "Linguistique ot socite", Langue Francaise (N*'9, febser0 1971); sngae et histoire”, Langue Francaise (N* 15, septembre 1972); “Analyse de dis: ‘cour et linguistique générale”, Langages (NSS, eptiombre 1979); "Processus discur Sifvet structures léxieales. Le Congres de Metz (1979) du parti socialise”, Lansoges (8°71, soptiombre 1983). 2 La mayorla de los uabajos ctudos en nota (1) ticnen una dimension lexicoldgic. Ver fambign: Jean-Marie Coteret et René Moreau, Le vocabulaire du général de Gaulle, Paris, Preses de_la Fondation Nationale des Sciences Politiques, 1969; Gers, Le langage des socialites, Paris, Stanké, 1979, y dos nimeros de ‘Mots, Paris, Preses de la Fondation Nationale dos Sciences Politiques: N° 9, octubr 1984; “Analyse du discoure: Mote dans Phistoire” y N* 10, marzo 1985: “Le nous politique” 13 BL DISCURSO POLITICO manera general ol concepto de “discurso politico’ a Ia producci6n discursiva explicitamentearticulada a las instituciones del Estado, Conviene sin embargo subrayar el hecho de que la crcularidad en cvestién ¢s selativa: para identificar nvestro_presunto objeto (el “dscurso politico’), Tiacemos intervenr las instiuciones politics: el concepto de ‘politic’, como se ve, cliliea dos instancas diferentes, por un lado dscurgos, por el otro ine titueiones. Dado que una teoria de los disoursos sociales parte del supuesto ‘de que las unidades de andisis sgnificativas, en lo que hace al discus, deben ‘estar asociadas a condiciones sociales de producai6n mas o menos estables, parece logico situarse dentro del marco de contextos institucionales fécilmente ‘entifiablesy, sobre todo, respecto de Js. cusles exsten desarolios tebricos abundantes, como es el caso del sistema politico en las sociedades democrs- ticas. AP mismo tiempo, lo que nos interesa es hacer progresar Ia teorfa del discus. Y, desde este punto de vista, yo dirfa que lo esencial no es tanto el ppunto de partida cuanto el resultado. El resultado depende de la’ manera de llevar adelante el anilisis: debemos estar en condiciones de transformar la cat- sorizacinintuitivaincial, y Hegado el caso, cbandonarla. Y, aeste respecto, a cuestion decisiva es la siguente: jen qué medida ef andliss de los dscurtos asociados a estructuns institucionales determinadas (en este €a50, el aparato del Estado) permite-comprender mejor los mecanisios de dichas institucio- nes, su naturaleza y sus transformaciones? Todo indica que hay niveles de funcionamiento de los procesos politicos a los que solo podemos acseder a travls del ands Bl digeuesa TL andlisis de los discursos sociales estd apenas en sus comienzos. Pero lo poco que hemos avanzado basta ya para damos una idea de la complejidad de Tos objetos que tratamos de deseribir, complejidad que expliea las dificul- tades con que se enfrenta todo esfuerzo por constivuir una tipologa La eancterizacién de ‘aos niveles al mismo ipo Tn primer lugar lo que se trata de conceptuaizar no os nunca un discurso, sino un(campo discursive, Dicho de Otra manera: nuestro objetivo Noes cons: truir una tipologia de discusos, sino una tipologia de juegos de discuso. Desde un pingpio nts venos confontdos al ands de proctos de verano En segundo lugar, y en conseeuencia, la definicién de-un “tipo” supone ia Jefinicion de-una serie de variantes del mismo, que no son otra cosa que dif tepias_ dentro_del_mismo juego, La definicién general del “tipo” supone la definicién de un “nicleo” invarante y de un sistema de variaciones, sin 1o cual la descripcion de las relaviones inter discusivas dentro del campo ent cuestion es imposible. aos En tercer lugar, la descripein de intercambios discursivos implica que tra- 3 Desde un punto de visia metodolépico, es Ia “demostraciin” que hemos querido ‘er en: Sia Sg y Esco Veron, Primo mere, Buenos Airs Eto Leas, LA PALABRA ADVERSATIVA bajamos en dlacron‘a: los intereambios ocurren en el empo. Y wna misma haute tarta To largo de tempo, Por fo tanto, aun ent plano de Te cara ferlzaciOn de una estrategia dscursiva, se nos planta el misino problema de d- ferenciar un “ncleo” inveriante y un sistema de variciones cols En cuarto lugar, lo diferentes modos de manifestacion de un cierto “tipo” de discurso no pueden ser dejados de lador Tor aiscursos sociales aparecen ta térializados en soportes significantes que determinan las condiciones de su cit- Culacfon: la esceitura de la prensa, la oralidad de Ia radio, la imagen televisiva Es evidente que.no.pademos analizar de Ja misma manera Tos discursos polit co que aparecen en esos diferentes medios, et Tr dein de wn ip” sopone pts desergin de miles et seg, de posse de intrambi,S-vaoner eS TED HD tde'un proveso discursivo, de modificaciones de las estrategias seg cl soporte Sigaifinnte- Ea cada nivel de ands, & necesario disponer de eiterios que per- fritan distinguir los iavarantes de las variciones. ‘Ya través de est maraia de niveles que se inter-determinan, es preciso diferenciar lo esencial de lo accesorio, lo que es especifico del discurso politico dae ete docs leselomantos que consttuyen. el “nOcea”™ Cal ‘que constituyen a" juego dweursive politico, de_aquellos elementos que pueden en icho juego, pero que aparecen también en otros juegos de discurso que no son a poli ach ea ee Girt iicultad (que no esta tltima) deriva del hecho de que Ios campos a ee Goma permnents Sento dea oceda: ay i ‘teraccién entre jnegns de discurso. Es probable, por ejemplo, que el periodista Ge presenta el noticiaco de television no esiéjugando al mismo juego que ol TMder politico que es entrevistado dentro del noticiasio. ;Cémo trazar las fronteras ente los “tipos” (vale decir, entre los juegos)? Cémo dar cuenta a fa vez de la especificidad de cada “tipo” y de la manera en que los juegos s© “contaminan” unos a otros? sta lista —incompleta— de ificultades bastard tal vez para explicar por_ ‘qué tna tipologia tedrica de los discursos sociales 3 hace esperar y para gene espero. una cierta indulgencia ante todo iniento (como. Sur nel lector asi To espero una ciertaindulgencia ante todo intento (como cl presente) de aventurarse en el terreng incierto del “discurso politico ‘Como Chomsky To ha dicho en repotidas oportunidades la intuicin es un arma fundamental para el progreso del conocimiento: ser “‘cientffico” no im- Dien negate uilizr Is inuiciOn como punto de partida; Io esencial es Ia Forma qb daremos i inuicin ine “tea” al que a someteeros, de modo tal que a partir de un cierto momento ella no sea mas neceseria der, actualmente, a la intuicibn que nos lleva a hablar de “discurso politico ‘RES DESTINATARIOS PARA UN ENUNCIADOR ‘Hay un primer problema sobre el cual se llamé la atencién desde los prime ros trabajos a proposito del discurso potitico, que tiene que ver con uno de los 1s f)_ Para nosotros, en cambio, hablar de ‘enunciador’ implica una modeliza BL DISCURSO POLITICO aspectos fundamentales de Ia intuiin de la que hablamos. Es evidente que 1 campo discursivo de lo politico implica enfrentamiento,relacién con un ene- ‘igo, lucha entre enunciadores, Se a hablado, en este sentido, de fa dimension — polémica del politic.’ La enunciacién politica parece inseparable Ge a construecion de un adversari. Tr camclerseaplanien problemas relatos a Jot mecaniamos de I equi ne our poli in mfnimo de preciin tncioliic os equ neces, Desde nero punto de vista, la enunciacin corresponde a un nivel de andlisis del funciona- Tonto deur Ex comecuenc ‘i juicio es necesarioentonoes citar toda perspectiva empirista de Ta enunciaci6n, como por ejemplo la que aparece en los trabajos de Oswald Ductot: “Llamaré "enunciacion’ el hecho mismo de que el emu sido prodcido, el acontecimiento histérico constituido por la apa icin del enunciado”.* ci6n abstracte que permite el “anclaje” de Tas operaciones discursvay a de las cuales 3¢_construye, en cl discutso, la “imagen” del que habla, Para designar el acontecimniento singular que es la produesi6n de un enunciado 0 una suoesion de enunciados, hablaremos de acto de enunciac Ta cuestién del adversaro significa que todo acto én, supone necesariamente_que_exisien otros actos de enui eso posi bles, opuestos al propio, En cierto modo, Todo acto de enunciacion politica @ la vez es una réplica y supone (o anticipa) una replica. Metatéricamente, podemos decir que fodo diseurso politico esté habitado por un Otro negs. tivo, Pero, como todo discurso, el discuiso politico tambié positive, aquél al que el discutso esté dirigido. En consecuencia, de lo que se trata en defiitiva es de una suerte de desdoblamiento que se sitiia en la desti- nacion. Podemos decir que el iméginario politico suponie no menos de dos ‘Gestinatarios: un destinatario positive y un destinatario negativo. El discurso Politico seditige a ambos a! mismo tiempo. Conviene subrayar que esta hipotesis no tiene mayor interés salvo que se insista en su pretension de especificidad. Esta pretensién implica que la bipé- tesis solo se aplica al discurso politico, Vale decir que otros tipos de discurso 4 Of por siemplo L. Guespin, “Problématique des travaux sur le discours politique”, Langage’, 23:324, 1971. 5 Oswald: Ducrot, “Andis pragmiticos” en Bl decir » lo dicho, Buenos Aires, H chette, 1980. Respecto del concepta de enuneiacian como modelo anaitio abatrac- “Conditions e'énonciaton et prat- re", en: Sophie Fisher y Joan-lacguer Franckel (eds), Lingulstque, ‘monelation_ Aspects et détermination, Paris, Editions de "Ecole des Hautes Etudes en Sciences Sociales, 1983, pas. 51? 1A PALABRA ADVERSATIVA (Cl discurso de la informactén, la publicidad, el discurso cientifico, ete.) no pre sentan este disociacién estructural que presupone la construcci6n simmltinea de un destinatario positivo y un destinatario negitivo. Por otro lado, considerada en sf misma la hipdtesis es demasiado genera Lo interesante es desir las dstimas modaliaer syn or eiles# SORE truyen el Otro positivo y el Otro negativo: éte es un primer especto que per- rite diferenciar unas de otras las estratepias discursivas que se afrontan en el campo politico en una situacién dada. En otro lugar hemos intentado analizar en detalle e1 modo especifico en que el Otto positive y el Otro negativo apare- ‘en en el discurso del general Peron. Al construr su destinatario postivo y su destinatario negativo, el enuncia- dor politico entra en relacin con ambos, El lazo con el primero feposa en lo” ue podemos lamar la creeicia presupesta El destinatario positivo es o3a pic qui corre ogy pais de snus as ‘qe adhere eos isms valores y peri 1s nisioy Dbjetivos que elenun ‘ciador: ef destinatario positivo es antes jo. Hablaremos, & su caso, de prodestinarario, La relacion entre el enunciador y el prodesti= natario cobra, en el discurso politico, la forma caracteristica de una entidad que Mamatemos colectivo de idennificacion. El colectivo de identificacion se cexpresa en el : inclusivo. es EL destinatario negativo esté, por supuesto, exclude del colectivo de iden- tifeaGion: esta exclusion es la definicion misma del destinatario nozativo, AT Garena importnea en el curso politico. Entre Jos diez trios mis fe hontemente utlizados por el general De Gaull, identificados por medio del isis lexicolopico, los siete primeros correspondian a este tipo de entidades: ‘ip Francia’, ‘el pais’, "a repablica’, ‘el estado’, ‘el mundo’, “el pueblo’, “la 18 A PALABRA ADVERSATIVA nacién’.* Cieitas fragmentaciones son posibles; se pueden encontrar, por ejemplo, expresiones como ‘el pais esté dividido’, 4) Ciertas formas nominalizadss que el enunciador utiliza pare rtmar sus argumentos. Se tata de expresiones que adquieren una cierta autonomia semantica respecto del contexto discursivo, que funcionan como “formulas” relativamente alas, Por ejemplo: “el cambio sin riesgos’ (en el discurso gi cardiano, durante I eampafa presidencial francesa de 1974); la participacion’ (en el discurso del general De Gaulle de un cierto periodo): ‘a ota politica’ (en el discurso del candideto Frangois Mitterrand durante la elecciOn pres: dencal francesa de 1981). Con valor negativo: ‘el desorden’, la decadencia’ 1a funcién espevfica de estas ontidades es de posoer mn valor metafinioo (de substitucién) respecto del confunto de la docttina de un enunciador.o una posicién polities, ya sea Gon valor positive Gila férmula simbotia la pro posicion del enunciador) o negativo (si representa Ta posicion de un contrades- tisutarioy- Ta Tendencia a Ta autonomila de estas entidades respecto del contex- {0 discursivo es reforzada por el hecho de que se las utiliza habitualmente como _ “slogans” en la publicidad (afiches) durante las campafas electorales. (3))Formas nominales que, diferencia de las precedentes, poscen un poder “nexpllcativo, son verdaderos operadores de interpretacidn: su utilzacién supone lun efecto inmediato de inteligiblidad por parte al menos del prodestinatatio, {Un efemplo tipico actual es: ‘la ensis'. Un ejemplo celebre es: “el imperiaismo Estas diferentes especies do entidades intervienen tento en Ja construccién, el enunciador (que va a establecer relaciones con unes u otras) cuanto en la construcci6n de los destinstarios, Lo interesante os Subrayar que poseen dife- rentes propiedades “Iosicas” que determinan lo que podrfamos llamar “eyes, de composicion”. Srel enunciador, por ejemplo, construye un paradestinatanio, es decir, un destinatario susceptible de escuchar y comprender, destinatatio posible de sus argumentos, utiizaré para designario un colectivo enumerable: “Ios ciudadanos, ‘los argentinos’ (‘os argentins saben bien que....). El contra- destinatario (vale decir, el destinatario imposible, sordo eirmpenetiable, que el enunciador construye como excluido del circuito de la comunicacién), seré designado con frecuencia bajo la forma de un colectivo singular y masivo: ‘la derecha’, ‘la reaccién’. ae En el plano del enunciado,-el segundo nivel fundamental es el de los com: onentes. Este nivel opera como articulacién-entte- la enunci ion, puesto que los componentes definen las modalidades a través de las cuales al enunciador-construye.su-red de claioncs-conlas entidades del imaginari. Designs eat omponei deserbina_ diction gowaatco e Interelativo, Hay que" entender estos Componentes no como elementos aia 8 Jean-Marie Cotteet y René Moreau, Le vocabulaire du général de Gaulle, op. eit 19 1 pISCURSO POLITICO rntuales, sino comoCfonay del TBcua5? Hl discurso politico ce cheje pranentemeate esa. cunt "70735", ps las figuras que s bu (Gren cot van son diferentes segin as posciones de enuniacion ii coo police, Elenunciador se marcard més o menos explictamente en oe adreoo as mdalizaciones dominantes en cada componente; es entidades Jal nwpinario podrin aparecer bajo diferentes formas en cada componente; ‘eodestinatato,e1 contradestintaro y el paradestinatario tendrin uno v otro Ge Tos componentes como lug dos y aislables, p El componente (descriptivo ) EI componente descriptive ex aqul en que el enundador politico dria Ia constataeton: balance de una situacién, En la “zona” descriptiva del discurs politics, predominan los verbos en presente del indicativo, El componente des- Giptivo comporta con frecuencia # a vez una lectura del pasado y-una lectura de a situacion actual. SSoVie aqui un ejemplo fuertemente marcado, de manera implicta, por el contradestinatario: “BI pais, después de estos dieciocho aftos de inestabilidad gubernamen- tal y desorden administrativo, ha quedado como si hubiera sufrido une Catéstrofe, con eu economia y ei finanzas comprometidas, su paz amena- {ada y su estado social en una depresion sin precedentes, Con el agregado ‘Ge_que las perspectivas para el futuro inmediato son cada dis peores” (J. D, Peron, mensaje desde Madrid, 1972) 1a lectura del pasado y a lectura del prosont se articulan una a Ja otra por ig del fantasia del saber colectivo (que reenvia al nosotros’ de identifies: Gn 0 4 otfo-colectiva-mis aimplio como la Patria o la Nacién), 0 bien a través do la imagen del propio snunciador en tanto Lider, fuente dela eoherencia y ‘dela racionalidad de estas lecturas de I historia proxims "He aqut un fragmento en el cual el meta-colectivo Francia es utilizado como objeto de la descripein, el enunciador insertindose como conclusion, feomo anclaje en el tiempo presente: “Francia, pese a les dificultades que durante cierto tiempo han podido ‘magullarla y debilitarla, desempena un rol considerable en esta evolucion. Esto resulte sin duda de las posiciones que su politica, su econom{a, su cultura, su fuerza, le habjan hecho adquirir en todas partes del mundo. (C...) Pero ello resulta, también y sobre todo, de la naturaleza de su genio ‘que ha hecho de ella, en todos los tiempos, un fermento y un campeon Ge la liberacion del hombre. A pesar de las tensiones que ha sufrido nuestra accion en este dominio, hemos vuelto a nuestra linea general” (Charles dde Gaulle, conferencia de prensa del 31-1-64). Considerado en sf mismo, por supuesto, el componente descriptivo esté_ presente en otros discursos sociales, es dominante, por ejemplo, en eT discurso 1A PALABRA ADVERSATIVA de is informacion.? Pero la diferencia entre el discurso de la informaci6n y el discurso politico reside en el hecho de que en el primero el enunciados aparece como mediador‘testigo, mientras-que el enn ‘const : ‘mismo como Tusnte rumeroses modalizaiones aprecistvas (etaluacones) que articulan la des stipeién, " a "Es por supuesto en el componente descriptivo que encontramos los meca- aoe ee Tanto el componente descriptivo como el didéctico corresponden a la rmodalidad del saber, Pero a diferencia del componente descriptivo, el compo- nente didéctico no es del orden de la constatacién, A través del componente Aidéctico, el enunciador politico no evalia_una situaciin, sino que,enuncia un principio general no deseribe-una coyun o-que ‘una verdad universal En la “zona didéctica del discurso politico, [as marcas de Ja subjetividad del enunciador son mucho menos frecuentes: los principios se enuncian en el plano intemporal dela verdad. He aqui un fragmento did: ep focaiado en un elifcecon ngativa de un contradestinataro no iden tifieado: “Los gobiernos modemos, . . han dejado de ser problemas politicos pa- ra pasar a ser problemas sociales. El que gobiemme hoy con eriterio tnica- mente politico, iré iremediablemente al fracaso” WU. D. Perén, 4-8-44). El siguiente fragmento concierne un principio que pone en escena unt meta- colectivo definido como enunciador, y el enunciador mismo del texto, que se posiciona como prodestinatario privilegiado del meta-colectivo: “Una eleccién no es solamente un modo de elegir entre los candidatos Es también una circunstancia en la cual el pais entero exprosa un mensaje 2 sus dirigentes” (Valéry Giscard d'Estaing, declaracion del 22-3-78). componentipresrintivo \ Este componente entreteje lo que en el diseuso politio es del orden del dber, del onlen de la necesidad deontologica. Dicha necosidad aparece, natu-— eee eet eee ee eee # es Aires, Editorial Gedisa, 1983. i Ag hee hMabo pea aren a epee 2 {EL DISCURSO POLITICO a ralmente, comismbisy st enucador puede sin embargo marcare explicit juente como fuente expresiva de la regia deontolégica enunciada, como er el ‘Sgurente fragmento: sneitero que es mecosai, revert el proceso centrpeto de conc ace ter que oe ha dado ens ltmas décadas en nuesto pals, (5) Leeman dela partion dhe andr co ua mor Geese a gestbn, de tl fora que ene a deciony su ejeeulon 70 ‘tise ca una enorme cadena de insancas que diten auya tal eee. CRatt Alfons, alooucon sobre ef proyecto de tala de la Ghptl Fedeata Veda, 13480) = enunciado de a ela puede también cobra forme den principio personal, sin que-el enuneiador busque artiularse explicitamente a la legiimi= ‘de i rela en cuestiOn, Esta “distancia” entre ef enunciador y Ta regla que 1 enuncia, aparece reforzada en el ejemplo siguiente a causa de I f6rmala con- dicional: “g) se quiere que se desarrolle una vida asociativa susceptible de ampliar el campo de la democracia, es indispensable que las asociaciones obren con plena independéncia de los poderes piblicos, de los sindicatos y de los par- tidos” (Francois Mitterrand, Tei et maintenant, 1980). En situaci6n de campafa electoral, es el componente preserptvo el que concentra om ioe de intrpclacon orientadas ha cl prodestinatario y & parsdestinatario component progamétco | En este componente s© manifesta el pso de os fantaina del futuro en ¢] aiscuso. politico: es aqui que el hombre politico promete, anuncia, s€ com- promete. El componente programitico se caracteriza por el predominio de las formas verbales en infiniti y, naturalmente, en futuro; el infinitive puede jemplazado por sominslizaciones. EI componente programitico es del orden del poder hacer. "He aquf un ejemplo caracterizado por el us0 insistente de mominalizacio- nes, y eonstruido en tomo de la oposicién entre el enunciador y el contrades- tinatario, con una fuerte acentuacion del colectivo de identificacién: “;Qué haces? gPermanecer prudentemente en una actitud de indeter- rminacion artistica, haciendo creer que se podria dar a todo el mundo sin quitarle nada a nadie? (.. .) Nosotros decimos: fuerte aumento de los bajos Silarios y aumento degresivo por encima; mantenimiento del nivel de ingre- 505 para la capa superior de los verdaderos asalariados (...) educcion cada vez mas marcada de los ingresos que se sitfan en un nivel todavia mis ele- vado" (Georges Marchais, secretario del partido Comunista francés, Infor. ‘me al Comite Central, 12-1-81), LA PALABRA ADVERSATIVA ESTRATEGIAS DISCURSIVAS Enunciar una palabra politica consiste entonces en situarse a si mismo y en situar tres tipos de destinatarios diferentes, por medio de constataciones, ex- plicaciones, prescripciones y promesas, respecto de las entidades del imagina Tio: por un lado respecto de aquellas entidades con las cuales el enunciador busca construir una relacién —los metacolectivos— y por otro respecto de la entidad que funda le legtimidad de Ia toma de palabra el colectivo de ident ficacion. Dentro del campo politico en un momento dado, dos estratepias vas podrén ser diferentes Scenpbiabd Aas = on términos de Ja relacién del enunciador con los metacolectivos singulares (Qa Nacion, La Patria, ete.); Si — en términos de la relacion del. ivo de identificacion; — en términos de las tucci6n de los destinatarios; — en términos del peso y del rol des pefiado por los tres tipos de di sos, en el contexto de cada componen en.términos de las modalidades.de articulacion de los componentes entre sf y del peso reativo de eada uno cS Ta Esta lista —incomplets— puede en todo caso orientar una exploracion des- tinada a caracterizar estrategias politicas discursivas. Lo més probable es que, en_una situacion dada, dos estrategias discursivas dentro del campo politico difieran en todes estas dimensiones l mismo tiempo. He tratado de dar una primera forma a la “intuicibn” que nos leva a ha- blar de ‘discurso politico’ como un tipo -de_discurso social caractcrizado por

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