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Oso Grande, oso Mediano y oso Pequeo vivan en una casa del bosque.

Una maana, despus


de hacerse una sopa, salieron a esperar a que se enfriara. Mientras paseaban, lleg una nia a su
casa. Se llamaba Ricitos de Oro y si hubiera sido una nia temerosa no habra entrado; pero era
curiosa. Vio la sopa y prob la de oso Grande, pero estaba muy caliente. Prob la de oso Mediano,
pero la encontr fra. Prob por ltimo la de oso Pequeo; le gust y se la comi toda.
"Ahora quiero descansar", pens Ricitos de Oro al ver tres sillones. Entr en el silln de oso
Grande perfectamente, pero se sent tan fuerte que lo rompi. Ricitos de Oro subi entonces al
segundo piso, donde estaban las recmaras. Quera dormir. La cama grande era muy alta y la
mediana muy baja. La pequea era la que le serva, as que Ricitos de Oro se meti entre las
sbanas y se qued dormida.
Cuando volvieron los tres osos y vieron aquel desorden, se enojaron muchsimo. Empezaron a
gritar los tres a la vez:
-Quin ha probado mi sopa?
-Quin ha roto mi silln?
-Quin se ha acostado en mi cama?
Oso Pequeo vio entonces a Ricitos de Oro dormida y dijo: Alguien se ha metido en mi cama! En
ese momento la nia se despert. Vio a los tres osos, se asust y escap por la ventana. A Ricitos
de Oro no se le ocurri volver por all, y,' en adelante, tuvo ms cuidado con las cosas que haca.

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