Está en la página 1de 6
ae EMOS por JORGE. LUIS BORGES Un cease de une plate, no eemnasiad le jo de ese vieja y softada Patera de cx chilleros y lmacenes tosaclos. Unas diez ‘0 quince personas esperan poder ver, air «Borges. Saben, sahemos, que of suele prestaise amablentente a esteVipo de en- crentros. Aun ast hay cierfaimpaciencia, tuna comptensible expectacién: EL Gran Fahulador hablard le ss cnentos. Se par ticipacién en esta informal reunién de to que en Buenas Aires se Hanna weer lite: ravio, habia silo concertada la manana Fain de Elisa N, Calor anterior, con absolutasencitie, mientras Borges desaytnaba: eEntonces paso ir cogerlo a las sicte, Borges.» «itty bien, ‘alas sleten. No hace falta seguir detenin- dose en ésa humildad: «no hay winguma «* razdn para que wn hombre sea famdso» dird esa misina tarde al refprtse « Uto- pin de nn hombre que esti cansaddo, se- sin dl, su propia utopia, Pero quiz st va 4a le pena resaltar es incuestionable Jornia de'ser de Rorges: el ser como se piensa, fo cunt uos sumierge en toynidgico de.su presencia, y nas induce a reer que estamos delaute de uno de sus persona- jes 0, en cualquier caso a ta dude: «¥o vivo, yo me dejo vivir, para que Borges ‘pueda tramar su literatura y esa lteratu- 10 me justifica(..) No sé cual de los dos scribe estas paginas». Quizds no impor- te cual; quiads, frente a una personalidad como la suye sélo sea posible pewetrar Jantsticamente en su inagotable univer- s0 de repeticiones, de espejos; de ltera- ‘vas. Fuinuos fortuitas invitados y hemos creido que esta charla-conferencia podia Ser wit nuevo acercaniento a su figura, ‘neve tal ver sea més acertailo pensar, como lo hace su bidgrafo Marcos R. Bar natin, que «Borges es uno de esos casos de escritor gigante ante el que toda apro- aimacin resulta insuficienten. Con bas- (ae puatualidad, alrededor de las siete y meet, Borges atraviesatasalita, se ins- fala detrds le wna pequena mesa de ma: cera, saluda, pide agua, bromea acerca det famaita del vaso y comienza, ‘Acaban de informarie que wy 2 hablar sobre ins cucaos. Uses quid ls conorcan ior «qe, ya que yo ose ect wa very he te tao deolvidarls, para desma he pa sada ios, cami tal ver algun de ste des haya edo alin certo mo, digas, wn pat de wees, cosa que nome ha ocurtido am Pero «aco que paves hablar soe mis cuenns, sks paere que metecen ated. Voy aaa Ue «ol alo y hugo me start conversa con sstees qe posblemente, asin psibement, sin deri en enseianne nich casas ya que ye no eo, ealisiamente al ein de Egat “Alan Poe, que el ate, la eeracin de sii sea aa operacidn intelectual. Yo creo que es me jor quet escrito inervenga fo mens sible en sola, Esto puede parecer asombros; snes: Dargo wo la, tod caso stata tede fa dct clisiea. Lo vemos en l pritera nea —yo wo greg de La lade de Howe £0, que ems el sin fn cesar de er inns: «Canta, Musa, la ela de Aques. Es ‘ect, mero, os siegs que Hamantas Ho- nec sabl,sablan, que epoca oe lento, ued pct fl posi scat el amanucnse de algo se ignore y « ‘su iloogla se lamaba a Musa, Fn cai los libres peter bab dl esprit, y nucsin sricololacontemporduea, qe no soc de x cesvablea, dela subconceni, lincnaiente ‘olectivo,o algo asl Pro, enfin, f,importante ‘el hecho de que el escitor es un amanuense, €recibe ago y ni de comnicaco, lo quer tbe no son exactamenie certs palabras enn cier- {o orden, como quecian ls hebrees, que pensa- ‘banque cada saa del texto haba sdo prefijada, 'No, nosotios ceemos en algo mucho mis vago ‘que es0, pero en cualquier caso en recibir algo. «tl ie» ‘Voy atratar entonces de recordar un cuento mio, FEstaba dudando mietas wetralan y me scorde de un cuento que no sts ustedes han edo; se Mama Et Zahir. Voy econdar como llegu yo a Ia conespiin de es cento, Uso palabra vou to» entzecomillas ya que no ss Joes 0 qué es, ‘pero fin, o em de los géneros es lo de me. nos, Coce erin que no hay aero; yo creo que sf, que los hay en el sentido de que hay una ex ‘peclatvaen elector, Si una persona le un cenio, lo ee de un modo distinto de su modo de ler ‘ando busca un anteulo en una encclopeia © ‘cand lee un age, o cand Ie vn poem {Los textos puedo ser ditintos pero cambian segin elector, inl expecalva. Quien Ie wn ‘cunio sabe o espera ler alga que lo cistaiga de su vida coidiana, que o aga entrar en un mun do no dire fantastico —umy ambiciosn es la palabra pero st lgerameate distnto del mun dd de las expeiencas conn Alora Wego a El Zahir y, ya que estamos eve amigos, voy @ contalescSmio se-me cewtrié ese ‘certo. No recuerdo a fecha en la que esrb ese ‘cuenta, que yo era decor del Biblioteca Na onal, que etd situada ene Sur de Buenos Altes, ‘cerca de la iglesia de La Concepcién, conazco bien ‘se barrio. Mi punto de partida fue wa palabra, a palabra que usamos cast todos los das dlaunos vena de lo misteroso que hay en ela (a vo que das las palabras son misterisas; pense cenlapulaa inovidobl, unforgeable ening. Me detuve, no sé por qué, ya que babla odo esa palabra miles de veces, casino pasa un da en que tn Tolga: pense qué rao sera si hubiera algo qu realmente no puéramos olvidar. Qué rato seria si uber, en fo que Hamam realidad ‘cosa, un objeto —,por qué, no? — que fuera real inolvidable. a Ese fue mi punto de paid, bastante absinc to pobre; pensar enel posible sei de es pa lata of, lida, fiteramente foldable, unr. ‘eable, unvergasselch, inauviable, una consideracin bastante pobre, como-usedes han vist, En sepuida pensé ques hay algo inolvida- ‘Me, ese algo debe ser connin, ya que si tuvidra- ‘mos una quimera por ejemplo, un monstruo con tues caberas, (una cabera veo que de eabra, otra Estar enamorado ¢s percibir lo que de iinico hay en eadn persona QuiMERA 7 Creo que jolecemos de muchos errares: nie de ellos es La fama a az «le serpent ea cren ie de perio, no estoy se: to, lo eco aviams cstamene De mona que 1 abr nigun geacla ene cen coma nia, con un quimera, con wn unicorn ines viables; no tenia qe ser algo may coms. AL rena em ese alga comin pews, creo que ine: ‘latent en una moneda, ya qe se aca mi esp miles y miles de moneda tas exactamen ‘inal. Todas com epider, «con tv ese com cts palabras convencionaes. (Qué taro sev si niet wna moneda, una: svela peda entre esos illones de ones, ve Iuerainolvidable. ¥ pensé en una moneda que hoa ha desapsecd, una moneda de wea ee favo, una moneda pal a as lr, igual alam. neds de cincn 0 af de die, wn noc mis gran de; qué ars enie as millones, teal de one aca pore Esta, po un de fas ‘eae estado, hier nee fuera viable. Dea sgl idea na noida mo nla de vente centavos. No si existe ai Jos nnnisnfticne le coecconay ene alg sor, neo en fin, no pensé en eso en aque tie po. enséen nna moneda ue para lo fines dle nce tena que ser inode; es decir: una persona que fa verano pela pensar en ofr Livego me enconteé ante la segunda ercera Aifievtad.. he pevid l ewenta. ;Por qué esa mowed iba 2s nose? El eto no ace: tata ilea, yo tenia qe preparar In inoidaili- dad de mi moneda y para eso conveniasuponer nesta emoxional en quien ta ve habia ce in- sinmar fa acura, ya quee ema de mi cuenta es steam qe e parece aa locura oa la obsesin. FEntonees pens, coma pens Elgar Allan oe ado esribid su justamente Famous poe CCuerva, en ta muerte hermosa, Poe se pregouts a quiénpodtiaimpresionar fa nmerte de esd am jet. y ded que tenia que ipresionare a alguien ese enamorado de ella, De a lege aiden de wna mje, de quien yo estoy enamo: radi, que mere, x0 estoy desesperado ‘Un aoujer poco mémara En ese no ubiea sido ei quia detasa- do fcil, que esa jer fera como la pedi Lgo- nor de. Pero no decid mostrar a esa fee den nnd sac, mostrar el smo de ie 1 olvidar fa moneda de inte centavos komo tm pace ren: tds fg amores S04 pen cain os ve desde fuer Fetonces, on hgar de hablar de able el {ove splendor, fa convert co una nner bafante Arvial, un poco rica, venida &aienos tam poco demasindo finda maging esa suai que se a elas veces: un homie enamorado de ma anyjer que sabe por un fad que no dive sinella yal mismo tempo sade que es ce 10 cs especialmente memorable, digames, pias sade para sus primas, para a mca, aval cestorera, para las ames: sin embargo, para pees es nica, | so meleva aoa ies, Ta idea de que quizis toda persona sea tinica, y que nosotros nb vea- 1mos lo inca de esa persona haba en far de ella. Yo he psa alga ver que esto: sda en fa, sino fjmonas auc ent Naturaerd, © en Dins (Deus sive Natura, dela Shino) Join ‘portant el canta y no Ia calla. Po que * soared ser human sino en cada oj, enc hot wie, aqve por eso Dies ofa Naturalera eea ii Hones de hormigs; ange dec millenes de hor- aniac sf, no hay millones de hrmigas, hay millones eres muy diferentes, pera deren Gi i ess os mos em, innales? ints il ie eed let moradevefherciir Yo que dernico hay en cada persona eso nico que no puede comunicarse sal- ‘por meio de hiptboleso de metéfods. En toncesporanosupener ques me, poco rile patos, poco rea para quien est enamorado de ell, esa mer niere.¥hegs t= remote eorn Yo eee par dl vero te Fa exquina pst en a lesa de a Concepcidn, ‘uma lesia nn demasiado famosa demasiado palin, y luego al hombre que despus el ve- Jos va tomar un gindado aun aac, Ppa, cel cami le dan ama moneda y diving cen sega que hay ale en ella —hice que tera raya para sting de as otras Evel mo eda, e314 my pmocionado por fa west de ba ‘ase, pero al vera ya icra a olvidare deca, cpcra a pensar en tz mone Ya tenemos el ‘jeto magico para el cuenta. Lego vienen Jos suerfugis del narra para ibrase de esa que ‘sabe que cs na obsesin, Hay diverse suber- fugios: uno de ellos es perder la moneda, La Ie sa entonces, a otro alacén que queda on pace lejos, fs enrega eu el cambio, rata de no fijarse ‘en qué esquina es ev almacén, per eso no sir se para nada porque él sigue pensando en kn oneda, Luce Hepa aextemos un poco absuidos. Por ciempl, compra wa ba stern con San Jor cycldiagin, lacramina con una lap, rata de tensa en ella yolvidatse dela moneda de vente ‘ents ya peri para sempre, pero no logia hacerlo, Hacia el final del cuento el hombre va cvloqueciend pero piensa que es misma obse: sin puede salvarla Es decir, hab un momento ‘vel cual ya el universa bab desaparecdo, el univers sed est moneda de vine centavos. Ea aqui prodvje un pequeio efecio ltravi~ el, Rowges, esard loco, no sabrd que cs Tonges. Yano sev otra cosa que el espectador ddeesapenida moneda inolvdable ¥ conclu con «sta fase dbidamente litera, es decir, faa ««Quizas deiras de la Inoweda esté Dios, Es de- «its uno 9 una sla cosa, esa cosa sinca es a soluta, ay otras episodio que he olvidad, qui ds algun de ustedes los recede. AL final, a pwede dont, sue con It moneda, no pyede eta moneda se interpave ct el texto y cast no puede hablar sino de wa modo mecanico, por que realmente esté pasando en la moneda, asl concluye cl cuento bro de arena» Dien, ee cuento perience a una serie de cua {os, eu fa que hay obietos mégicos que paren peices al principio ceo son maldcones, st cae que est cargados de horror. Recueil otro vento que esencialmente sel mismo y que esd «mi sgjor libro, ses que yo pueda hablar de jor libeos, EF libro de Arena Yael tal es mejor que El Zahir, ceo que 2ahic quire decir algo asi como mavavilloso,excepciol. En este 280, pens anes que nada en elo: Eira de cena, wn libso imposible, ya que no puede 5 nero ini Ish ibis de atena, se digieraran, Lo Vibro de arena porque const den ito de paginas. iba tiene ef mero de fa ave ‘ano ms que el pesuiblesimero de a arena, Un hombre adquiere ee libro y como tiene un ‘veo infinite paginas, no puede abv ise ds seces ta insina Este bo podsta haber sido un gran libro de aspect iluste; per fa misma dea que me lewd 4 una moneda de vente centavos en el primer ento, me condo aun fio mal impreso, con {oxpesilastacionesy escrito en wn idioma des- conocido, Necesitab eso para el prestigi dt bro, y lo llamé Holy rit —escrtura sagrada—, Inescritura sagrada de una reign desconocida El hombre fo adquiere, piensa que tiene un libro liico, pero Wego avert o terrible de un libro sin primera pagina (ya ques biera wna prime +a gina habrla una tina). En cualquier parte carla que €abra el iro, babré siempre algunas ‘inas entre aquélaen la que are yl apa. libro no tiene nada de particular, pero acaba por infunle horror y€lopta por perder y to Ihace en la Biblioteca Nacional. lel ee gar en especial porque conozco bin ta Biblioteca ‘As, fencinos el mismo argumento: un objeto imigico que realnjnie encera horror. Pero antes yo habla esrito otro cuento titula do Thin, Uqhar, Orbis Tec, 1 que idioma cortesponde. Posiblemente a una lengua germanica. Unbar sugire algo ardbign, no se sabe Pero de Sevier Vtlhonrot Quimenn 9 alg asiticn. ¥ nego, dos palabras elaraente Inna: Orbis Tris, mundo exer, La idea era Yo he sido sempre lecoe de encilopesig reo ‘ue es uno de los gros literarios que pefiero ‘ora de aan modo offece todo de manera sr- ‘prendente. Recuerdo que sliaconcnrrit ala Di- ‘ioteea Nacional con mi padre; yo era demasia- «do timid para per wo libro entoncessacaba DIECISTAS CONS PARA QUIEN QUIER: / " i th edit reo ale ide ei ‘Borges lia i.e et a a MW pial i el ae a ine el tea ths DS ae ui i " Wats 06 6 ul Jue joo is i a tb ‘ Ha uk nal Bo fo let 6 Lt pete dine vei Bl trai