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Ha aPeser A ew Anioploies det miedo cualquiera que no sea como nosotros. Monstruos, fantasmas, locos, sombras que se apoderan de nuestros peotes suefis, que encaman dimensiones de la aleetidad que nos estremecen, a la vez que nos hacen sentir cle forma privilegiada el calor de nuestra propia sién humana. ‘Agradecemos a todos | lez Eee ee eet a pene seno de su acreditado catélogo. Y a las VAMPIROS Y SACAMANTECAS? DIETA BLANDA PARA COMENSALES TiMIDOS* José Manvet Paprosa Universidad de Alealé Nuestro ALIMENTO Y EL ALIMENTO pe Los otros E modo de comer no es solo un rasgo de personalidad (indi- vidual) sino también —y ello acaso en mayor medida— una warca de identidad (colectiva). Desde Ia antigiiedad més remota, habitos alimenticios de cada individuo han estado regidos por ‘ura gastronémica de la comunidad, y las representaciones cada pueblo elaboraba de si mismo y de los demas pueblos fan mucho que ver con el modo de comer regular o tipico (0 que era percibido como tal) de Jos unos y de las otros. trdnsito de lo crudoa lo covido, que se desarvollé al ritmo 16 el proceso de desarrollo de la cultura, silo que es Bueno para {culo ha sido redactado en ol marco del proyecto d de Educacién y Jun2006-06393; y como actividad x Anodes del meds Goody’) marcan, fica, ccondmit como a comunidades, también es cierto que lo que Ch hha lamado comida para pensar («foad for thought») es un factor que luye poder Ja propia ident yeh qué compan fo come, depende de las costumbres ueza y poder del grupo étnico al que pertenece. Uno de los modos la comida que consumen y de la comida que no consumen los vecinos, yviceversa. ‘Nacuralmence, una dsparidad tan obvia, visible y fundamental entre <1 comportamiento de dos grupos énicos como es I diferencia en los ad de chise ; ; expen: le su grupo vecino, del que se erce, aertada o desacertadamente, imentos diferentes, eabuados apodos cbmicos de los grupos éinicos derivan a menudo de un alimento bribe, dsr o simplemente carci que eee que 2 Todos ests nombres y conceptosremiten alos siguientes autozesy obras, cisions ya para ente relaciones entre alimentacén y culturs: Claude Lévi-Strauss, Le era et le cuit (Lo crud y lo ence, 1964): Lévi-Strauss, Lorigine des manne: de ‘able (Borgen de las manenas de mesa, 1968); Marvin Hants, Good to Eat Rides of Food and Calsre (Bueno para coms Jack Goody, 1982 Cooking, Cuine 4nd Clas: A Study in Comparative Scilegy( Covina, scuiine clase estuia de scio~ logtacomprada, 1982). De todos ellos hay traduccién en espafol. Broéeera, ercétera, etcétera, Ala exter que ofrece Davies dde apodos y de chistes (de expresiones de lo que se denomina ‘humor é:nieo) que aplican unos pueblos a (0 contra) o7ras, de acuet= con los habitos alimenticios que perciben (o que exageran, 0 imaginan) en los demés pueblos, podrfan afiaditse muchos empezando por las nada amables ni inocentes burlas que, centre los cristianos, se han aplicado a To largo de los siglos a los {os o a los musulmanes por su rechazo a comer carne de cerdo beber (los mustlmanes) bebidas alcohélicas. Bromas € invec- tivas en cierto modo simérieas, sin duda, a las que judfos y musul- ‘manes han reservado para los cristianos a costa de stt costumbre de comer cerdo 0 de consumir alcohol. MazzcLas BAJO SOSPECHA Y MEZCLAS NN GARANT{A: SALCHICHAS COMICAS, PANES SAGRADOS Desarrolla también el libro de Davies una brillante argumentacién, tomo a la curiosa oposicién que puede establecerse entre las sal- ichas (alimento cémaico, despreciado, que sale habitualmente mal- pan (alimento serio, incluso El proceso de forma natural Davies, Edbnie Humor around the World: A Comparative Indianapolis: Indiana University Pres, 1997), p. 276 Anospooge de indo animal clara. La forma de asalchicha queda arbtrariament de en ana piza que tiene una forma pan, a diferencia, pongamos, de sacha cued de ote modo cancipao deo anfgenes hums que en forma de grano 0 degradado, a veces horrible, el alimento que se presenta informe, ambiguo, en mez- clas, masas o papillas escasamente En realidad, casi toda gastronomia es mezcla de ingredien- tes, Pero mientras estos no se diluyan en una pasta que no se sepa bien Io que es, no hay problema, Ahora bien: cuando en la mez~ cla queda borrado el rasteo de los ingredientes, ocultos sus ort- genes, imposibilitado su reconocimiento, manipuladas s chosamente sus etiquetas, empiezan los problemas... culturales, sobre todo. cernibles. MEZCLAS HORRIBLES: HAMBURGUESAS CON SEMEN, MENUS CON CARNE HUMANA ‘Todo esto se trasluce muy bien en el muy bajo prestigio gastroném 0 que suelen tener las hamburguesas (0120 alimento sin forma ni tex- ‘4 Traduzco de Davies, Fulnic Humor around the Warld,p. 276. SNCAMIANTECAS! DIFTA HLANDA nan COMENSAIAS TIMEDOS ra claras, cuyos ingredientes son sometidos a un agresivo proceso cclesnaturalizaci6n) que se sirven en los restaurantes de comida répi- O een el descrédito que suc afectar al menti de los restaurantes sta (ademas de la calidad y la frescura) de s No debe extrafias, por tanto, que corran de boca en boca las leyendas y los sumores de este repugnante tenor: ia mientras esperaba mi umno en una tienda de c de 1988. Un adolescente le decia a otro: i rgalando todos esos cupones de ‘Tampa, Florida, en agSabes por qué el ‘Whopper gratis? La empresa es familiares para que vengan como inmigrancesilegales’ e-gras PRANCES: MASA MEZCLADA cen cualquier caso, que el valor intrinseco de idad mayor o menor en la elabora- influyen a veces también en la considera- cluso del que se presenta como amal- del producto fin social del aliment gama informe. 5 Jan Harold Br libro de las leyenda urbana. Demasiado eno ‘para ser eto, cead. M. Berategui (Barcelona: Alba, 2002), vol I p. 27. osé Manuel Pedrosa, La autocsopia fenzasma y otis lyendas urbana epafolas Péginas de Bspuma, 2004) p. 25 eo) ee Aninopleie del rede Es cierto que la masa cérnica de la salchicha es una pasta abun- dante, barata, indiscriminada, igual quc la del paté vulgar o a del con higado de oca 0 de pato, monstruosamente engordado, luego extirpado, triturado, condimentado y mezclado) es una materia A tara, costosa, que exige un complejisimo proceso de clabor cin que comienza con la seleccién y la cuidadosa alimentacién de cas y de patos dos semanas antes de su sacifci. 3s, controles de calidad funciona una legis en corno a la elaboracién y a las denomina- cdades de eae Su pres ede sonoro nombre (foie-gras), 0 como el del tipo de recipiente, mds pequefio, més sofisticado y mis caro que el plistico que enfunda groseramente los paqueres de salehi que las latas del falso faie-gnas que se despachan en los supermercados de barrio. Estrategias, en definitiva, para desmezelar, para artancar de la ‘masa, para rescatar del caos, un alimento que no es, al fin y al cabo, ‘més que una pasta informe de higados grasientos de oca y de paro. 2 LA OBSESION POR EL ALIMENTO NO MEZCLADO: LA matzd JUDIA, LA HOSTIA CRISTIANA o singular, realzan y el valor de umn alimento (aunque proceda de w es algo que se puede entender mejor la luz de paralelos tan ional- de la celebracién eucaristica La matzdes un tipo de pan dcimo, sin levadura (lo que le apar- ya del habitual pan fermentado), que solo puede ser claborado a de trigo, de cebada, de espel igredientes que, en las celebraciones de Pascua, no pueden dos con un fin distinto que el de elaborar la matzd. La ‘iocho minutos. especie de pan dcimo, La hostia de fa eucati yya forma y tamafio depende de cada tradicién, pero que solo iede ser utilizada durante la celebracién eucaristica. Si antes de consagracién la hostia es tratada con respeu ia consagrada Jbrante es reverencialmente custodiada en un sagrario en que es 0 de adoracién. Sobre la mated y sobre la hostia pesan, pues, una setie de nor- ue tienden a emanciparlas de a singularizarlas, a aparta )blecerlas para que destaquen por encima de cualquier otto ali- La matzdy la hostia no son, para los practicantes de la ‘cuando se pone sobre la mesa de la Pascua judia, o cuando el sacer- areca dote (y solo él) realiza la consagracién en la misa y conv tia, de acuerdo con la creencia cristiana, en Ja carne de tes eran tenidos por simple pan dcimo, 0 por simple vino, pasan a ser considerados, durante el tito crucial de la consagracién y de la comunién —una especie de cocinadoy de degus- tacién en torno a una mesa, con mantel, servilletas, oficiante y comen- sales—, un alimento absolutamente singular, catismitico, sin par Nacidos de la masa, pasan a ser lo contrario: un alimento rigu- rosamente tinico. ALIMENTO MEZCLADO CON SANGRE, EXCREMENTO Y VOMITO: LAS MUERTES De ATILA ¥ pe VourarrE Frente al prestigio de todos estas alimentos tan elaboradas, can indi- vidualicades, tan ritualmente cocinadas, esti la sospecha que suele recaer sobre los formes, bastardos, de origen no bien sobre las masas picadas o trituradas, y sobre los purés y papillas, por mas que, a veces, se les aplique el nombre atenuante de cremas. La mala prensa de los alimentos excesivamente revueltos y mezclados es, desde luego, muy anterior i intes chinos que en las tiltimas ne, En 1956, cl hoy muy olvidado pensador Salvador de Madariaga publicé un ensayo estupendo, Retrato de un hombre de pie, cuya tesis cra que el ser humano logré emanciparse de la animalidad cuando comenzé a ponerse en pie y alcanz6 a contemplar la linea del hori- zonte; cuando dentro de su campo de visién y de accién quedaron alimentos distintos de los que antes habia tenido que obtener del suelos ys sobre todo, cuando pudlo, por fin, separar su alimento de su propio excremento, y dejar de comerlos mezclados, tal y como siyivos_—_ 33 las vacas 0 los cerdos (las vacas eran cl punto de compara~ cde Madariaga). Agudo razonamiento, que la historia, as pruebas y ejemplos. lo de este mismo libro, Tas afficciones que Anchanchu ocasiona deben ser tratadss con la més rma premura posible por los especalistas rituales aymaras, yatiis y “amakanis (ernnde Jusrez, 20042). Lavoracidad del Anchanchu cons tye el bocado més apre- cl altiplano, encre ellos, Recuérdese, a este respecto, la sentencia biblica “Como perro ve au vémito / ast el necio zepite sus sandeces» (Proverbios que San Pedro, en su Segunda Carta (22) amplid de esta wera: «Se cumple en ellos la verdad de aquel proverbio: El perro tuelioa comer lo que habla vomitado y La puerca lavada, vuelve revolearse en el cienos'. Y ténganse en cuenta también las muy rpretaciones que las diversas corrientes y ble), ya sea de otigen liquid o sido, aunque nose haya asentado en el est iogafla de Gerardo Fernindes Judrer que leva la fscinacin del Anchanchuen el Aeiplano ayma- ra de Bol 8 La Santa Biblia (Madi: Ediciones Paulina, 1988) pp. 770 y 1428. rmago, y también el wimito del Ictante, El gue dela boot del durminte (es deine lui comsisura dels labios cuando se esti dur smiendo) cs puro. El gilases impuro, ted ello en virtud del Aadizen el que ef Proera (6.8) dij Sac de stole sobreviene so wrnitoo le sube Por la gargenta alin liquid proveniente del eimago, que interumpa el Sabie realizar el Whi. Sobre a floma(bitlgan) y k saliva mcacala con ss la lama sale pura, nezcla, € puta, pero si sake mercada con alimentoy el alimen- to prevalece es impurs si se iguala por separado: sl alimento vomitado es incontenible, el conjunto es impu- a ee eee salves puro predomina a sangeo se gualan, es impuro, aun cuando no scaincontenble, Lo que rumian ls animales esimpuro, ya sea poco 0 mucho, Salguica vomia varias vos, yen each ito noalcanzael grado de impuro, al ser poca cantidad, la rpeticin lo hace impuro. os males han definido el vémio como el alimento que es sado por dl exesmago tras haber asentado en dl, yo han decara rossisu condi de alimeneo ha desepa un sabor amargo, Por su parte, para ells el galas (que ese iquido Sao ee nae eaters el caricter de residvo (no basta su acidez). Considetan vimito todo que representa estar pendiente de dl, en cualquier cizcuns- 1ento no se asienca en el estmago, y esto en el caso de que se es seguro que ha llegado al estémago. Sise duda de esto shimo, «aqua de la boca del durmiente si esté mezclado con bills y es malolien- te, pero se disculpa al que cs aquejado de ello de forma erdnica,‘Tambisn 8 impuro el alimento que rumian los animales. para ellos, el vimito y el gélasson impuros sn entrar ‘Téngase en cuenta, ademés, que, en el siglo vt de la era cris- tiana, el historiador godo Jordanes, en De origine actibuique 3. { SACAMANTECAS: DIBTA RLASDA Pana COMENSALES 1iMIDOS Getarum, habla dado cuen iendo iadores menos cidos, de la medida del cardcter bestial del inhumano Atila iando aseguré que habfa muerto ahogado en una mezcla inmun- da de vino con su propia sangre: Enel momento de su muerte, Atl, seggin cuenta el hstoriador Prisco, aca baba de unre en matrimonio con una joven muy hermosa llamada Idico, despues de haber tenido ya innumerables esposas, como es costumbre cntze fos de su raza, Durante el banquete de bodas e puso excesivamente con- tento y, abrumado por la somnolencia que le procucia el vino, se fue ala cama y se qued6 dormido boca arriba. Entonces la sangre que sola bro ws conducto habitual trodujo por la garganta y lo abog6. trey, que habia conseguido la vietora en tanta batalla, avo un final vergonzoso y perecié vietima de su propia borrachera. Parecido descrédito (falsa ¢ injustamente publicitado por sus olerantes enemigos) pesé durante mucho tiempo, con el sesgo rentada para escarmiento ck bre la muerte del audaz librepensador Voltaire, segiin evocaba todavia Gustave Flaubert en su inmortal Madame Bovary: ce dias, en al sermén, de co ual murié devorando sus exerementos, co ra: La Purera (Thing). Lec Ciencias del ar (eu). Der ed, G, Palacios (Madeids Cited, reed. 2002), 1s Gustave Flaubert, Mademe Bewar _Anopolait de nics Moral ideas siembran (0 se dice ico) dentro una ‘comunidad, la comunidad (0 sus historiadores, 0 sus ponde blandiendo contza cl Y una de las formas més brutales que se pueden imaginar del caos cs, sin duda, la de la muerte por ahogamiento en una mezcla sangre, vémito y excremento. MANERAS DE MESA HUMANAS, MANERAS DE COMER BESTIAL: GEDEGN, LA COMADREJA Y EL CHACAL No solo la mezcla i con los von iminada de la comida con la propia sangre, (0s 0 con los excrementos ha sido tradicionalmente teni- da como un atentado contra Ia condicién humana y como un retro- cceso al estatus de las bestias inmundas que comen mezckindolo todo. La necesidad de diferenciacién neta, cl: del modo de alimentarse las personas y del fas bestias, ha dado lugar a muchas mas creencias y relatos, que bus- can trazar fronteras entre la buena cocina y las buenas maneras de ‘mesa, tenidas por éticas y legitimadas por los usos sociales, y otto ipo de cocina y de maneras de mesa, propias de ofres de inferior condicién ética, cultural y social, que se hallarian peligrosamente cercanos a las maneras de comer de los animales. 7. que describe cémo Gedeén selecciond como soldados a aquellos que no se artodillaron hasta el suelo para beber, segiin hacen las bes- Yavé dijo a Gede6n: «Todavia es demasiada gente. Hazlos bajar al aguas yo los probaré, El que yo te diga: Este todo el sus tropas al agua, y Yavé le dijo: eTodos los que lame el agua de su ‘1 agua con para beber. Entonces dijo Yavé a Gedess hombres que han lamido el agua os libraré y pondré a Madién en tus 5 dems se vayan cada Uno a su casio" a Esopo (ca. siglo vit a , que muestra cémo los irrenunciables habitos alimenticios de la comadreja que quiso vivi aca ji frodita Enamorada una comadeeja de un joven muy apuesto, pidié a Afiod que la metamorfosease en mujer. La diosa se compadecié de su pasién 1a hermosa muchacha, y asf que cl ndujo a su casa. Estaban de su estado presente, se levanté de la cam y s¢ én con la intencién de com dovolvi6 su antigua naturaleza, reeds 2009.70 va Salad Bide de Bap eo Bidens dela Pea Mad reed. 2001), Fibulas nim, 50. Véase, sobre las versiones internacionales de ‘So Jout Manu edo cL besa mtorr er ov ua ula de Faopos un reo del. Calle ¢ Din yt eueneo earl, Onis (2009 pp 49-60. Aniaplois de ied no es buena idea que lo huma- aly el alimento anden mezclados. Cada cosa tequiere su cuadricula dentro de una estricta clasific de esa preciosa fibul males humanizados que es The Jungle Book (El libro de la selva) de Rudyard Kipling, que establece netas diferencias entre el muy escaso prestigi social (en sintonfa con el que suelen tener todos los animales carrofieros, que mezclan al mento con basura, con desperdicio, con excrement que todo lo devora sin remilgos, y la fama atistoc ablaba era el chacal (Fabaqui, el lameplaco lesprecian a Tabaqui porque anda siempre entedando de un lado a otto, metiendo chismes, comiendo y pedazns de enero de los montones de basura que hay en las calles de los pueblos”. y los lobos en CANIBALISMO Y VAMPIRISMO: EL yo DEVORA AL yo, 20 el doble Devons a1. doble? Como todos estos ejemplos (entre muchisimos més que podrfa- mos aducir) se encargan de demostrat, Jas maneras de mesa clasifican ética, cultural y ctiben al comensal al grupo nuestro. al de /os otras, integran o dis- criminan, reivindican o denuestan. De acuerdo, todo ello, con as que patecen ser de acepracién pricticamente uni- comida debe servir para hacer més claro, més compren- ible y mas clasificable el mundo, para definir mejor la posicién ‘nuestra y la posicién del otro en dl, para no andar mezclando lo 35 Radar Kipling, ib deer gene ad RD, Pes (Madi: Aliana, 1nOS Y SACAMANTECAS: DIETA RLANDA PARA COMENEALES TiMIDOE 29) 1c debe estar (cultural y socialmente) separado. Para evitar el en definitiva. Es por eso que el humano no debe comer la carne (cayendo mo) de otto humano, porqu mbinacién inaceptable del yo con el yo. Del mismo modo que debe confundir su ali i mentos, ni con sus Yomitos, porque volveria a incurrir en un repugnante del yo con el yo, y en un acercamiento in de animal que lo come todo mezclado, Es por eso también que el ales, ni a ingerit comidas cuyos ingredientes y formula se len mezclados de manera confusa, sin garantias suficientes que “Todo eso separa de la sy clasifica ef mundo) y acerca a la condi caéticamente el alimento con el excrement 1e entra con lo que sale del cuerpo, que no tiene conciencia inte- lectiva del mundo). Reciuétdese que algunos pucblos afiaden a estas normas y tabti- jento bastante general, otros de indole més parti- fos practicantes tienen prohibido (por la Tora y por cluso regalar o vender (a gentiles) dar como alimento a los animales Iquier mezcla de leche y de carne. Del mismo modo que los de cumy que los musulmanes no deben bebidas alcohélicas, o que innu- seblos de todo el mundo tienen en el centro de su sis- sma de cteencias el respeto de tabiies y de restricciones alimenta- ias de lo mas diverso, la mayoria relativos a alimentos que no wados periodos penitenciales, m2 z __Antopleiat del vee regular 0 que no deben mezclar con sino también cultural, puesto que tanto el vam- piro como el vampirizado pertenecen a la misma especie de los humanos, y se rel al comido y al comensal, aporta su sangre o su grasa cor- n la bebe o la devora, in, esa ambigitedad, ese ener al enemigo (: que te devora) dentro de la propia especie (que es como decir dentro de la propia casa) cs su rasgo mis inquietante, Porque siempre ser muchisimo mejor que te intente devorar un ogro del tipo de Polifemo, enorme, monstruoso, vociferante, escandalo- samente llamativo y reconocible, que no que te devore o te vam- pi in pres iso algiin vecino, cuando menos te lo cspetes. EL ogro y el monstruo no son humanos, y no ti su favor el factor sorpresas ef vampiro o el sacamantecas s{ son humanos, y sf tienen ese factor a su favor. Al monstruo le delatan su voza- Gn, sus torpes moyimientos, su hedor o las llamaradas que arro- ja por sus fauces; al vampiro, si acaso, una sombta fugaz, un suave aletco en la noche, unos colmillos algo exagerados; al sacaman- tecas ningtin rasgo externo, porque goza del mismo aspecto que nosotros. El ogro o el monstruo son un ofro ex frente al que es Ficil comar precauciones; el vampi ‘mantecas son de los nuestros, son compatieros de especie, y ademas imidos, escurridizos, miméticos con el entorno. Son nuestros dobles. Y el miedo, el horror al able, al yo excesivamente parecido al ot, carente de sccretos con respecto a los demés, no conrnsanns nhMEDOS \Vautrinos ¥ stcasaNTEeas: DIETA nLanDA pana ComBNsALES THMEDOS ‘Eloco con doble personal tico a st mismo, el homosexual que se empareja con otra persona de su a que se acerea a alguien de al vivo en el mundo de los muertos Gillano 0 supethéroe) dorado de una segund : Aa iene ater ol bee ona ec as aveces no sficentemente dife- rio delos que emanan voces de cra renciadas de las de sus genitores... hasta los clones q inquietan a todos y plantean intersogantes desde el punto de medic ca, $0 a fa cultura de muchos pueblos y tradiciones hat: considerado insuficiente o inadecuadamente indiferenciados o separedos delos que ddcbecian ser sus otrr naturales. Bllo les ha marcado de forma especial las més, de forma negativa, pero alg cin frente a esa inquictant da, el rumor, co EL VAMPIRO ES UN MUERTO, EL SACAMANTECAS ESTA VIVO Un ripido pero necesario excurso, al llegar a este punto, para esta- blecer una distincién, sutl pero erucial, entre el vampiro y el saca- ‘mantecas: el vampiro es un muerto, el sacamantecas esté vivo. Los ‘vampitros, como los fanasmas, son otto caso de dable conflictivo y protagonista de tan- tas creencias y relatos que sobra cualquier comenta identidad aunque se siguen hablando, s hnacfan cuando estab: ales, no se sumen por completo en el so lo que les hace especialmente turbadores, amenazan- tes, peligroses, para Jos humanos que quedan aqut”. El vampiro es un doble de un humano que alguna vez existi6. Dricula, por ejemplo, es un doble de Vlad Tepes. Peto el saca- mantecas no ¢s, yin doble, Escé tan vivo como nosotros vive como nosotres, pasea por donde nosotros: pucde ser cualquiera de nosotros. Es, por eso, un enemigo al que s muy dificil reconocer, desenmascarar y, desde luego, neutralizar © vencer, Cierto que el vampiro tiene también una extraordinaria capa- cidad mimética. Aunque sea un p to saludablemen todo en el caso de las vary gante. 17 Pedros, La ligiea dl evento», p. 264 ¥ SACAMANTECAS: DIETA BLANDA paRA CoMENSALES thpos __33, jonalmente campesino tiene arraigo la leyen- Bino Jue maneja un Fino ‘ 1 La cual fe bebe fa sangre caliente wen el corazdn de su v4 Yen la escena final de The fearless vampire killers (EL eee ce bos la her- ven rescatada de a fo 9 un beso de amor o, es ya una vampira, Y ‘vampirico, Ella, aung arti de ese beso, , porque la cimara se encarga z del spechoso de los dientes, de la extrafia cslumbrante mujer-vampira en el cuello de st ecesita disfrazarse de vivo, porque esti v La (CASI) INVISIBILIDAD DEL SACAMANTECAS aque el sacamantecas tenga el color y el aspecto que tienen los ;pariencia sea la de un humano normal y corrien- vos el qui te Plath, Geognafa del mito y Ua lyenda chiens Santiago: Nascimento, PON sate TO a ota nte o cualquier vecino, difi- y su desenmasearamiento, Sus vic- los nifios (sangre de calidad supe demos), que saldrian sin duda corriendo despa alin coche dec ‘Aunque os digan Pues ya sabes, a los crios de los pueblos, pues en seguida a enga- farlos con un caramelo, coche, eh? Que tal le han sacado las mantecas. Que eso, que hay los mantexy No solo se paseaban a sus anchas los sacamantecas por las calles dela populosa Madeid, acecho de cualquier nifio. Cualquicr puc- nadora Maria Sovorto Vidi (nacida (Navarra), en agosto de 192), fe entrevistada en C el Pedeosa, Vasitinos ¥ shcSMASTECAS: DIETA BLAND PARA COMENEALES 749005 35 de que cuando alguna persona campo, porque tenian lugar raptos de nifios para extracts la san- srs. :Vampirismo? En pueblos de Navarra como Torralba del Rio o como Anefn, los mantequullerasse decia que eran como los gitanos, como los ban- 10s, como los bandidos, como los maquis.. Cualquier punto de ymparacién era bueno si permitia identificarlos (aunque fuera tan joseramente) con alguien de fuera de la comunidad, y no de la id misma, Refugiarse en el argumento de que procedfan fiuera salvaba la paz interna. Si ra dentto, si podia {qué mantecas tenfamos e jLos mantequi Enormemente interesante es esta cancién narraciva vulgar (de las que se difundian en eoplas de ciego) que fue registrada en el pue- blo leonés de Villaverde de la Abadia en 1989: 20 Michel Ferrer Clapés, Cents, eeencasy sradicionts de Tbiea (Ibiza: [edicién del at La narradora Maria Carmen Carlos Oyén (nacidla en 1939), Fue entrevisada en. taba del Rio, en agoeeo de 1995, por José Manuel Pedeos, (nacida en 1938), Fue entevistada en Ancin, en judo, seores, un momento, por favor, uceso de dolor ia de-un nino desgraciado, le la sangre, cruelmente asesinaron, muy educado y sumiso, lo eeataban igual que si fuera hij. intiuno de diciembre lo mandaron a un recado a San Martino de Alijo, y el nifio no ha regresado. ‘Aténitos se quedaron sin poder hablar palabra, contemplando de dolor aquells horrible desgracia, la la justicia, en lugar se presenta y descolgando el eadiver empiczan las diligencias. Ahora escucharén ustedes el parte faculeativo, Jo que han hecho unos salvajes con un inocente nifo. Su cu pues la sangre le quitaron al Con atencién yeuidado examina yen la garganta tenia. un trozo de trapo vie pues para que no gritara, ala fuerza se lo han puesto los criminales autores de este macabro suceso. ‘Todos quedan aterrados contemplando esta escena, yee terror se apodera de aquella humilde aldes Cuando este pobre nifio para su casa venta, sy le sacaron la vida. tuna euerda lo ataron para hacer ver ala gente ie €l mismo se ahorcara._y ast no pagar su muerte. ropes dll mies Con la sangre inocente, los sin que hasta ahora se sepa quiénes fueron los La autoridad, asombrada, —recomienda a los paisanos que con los nifios y niias eben de tenet cuidado, porque estos chupasangres son gentes sin cor y se valen de los nifios para lograr su intenci6n. Desde ese dia los pueblos estén atemorizados yen tomo a ese El pinico y y todos, de boca en bocs, comentan esta de Ta autoridad sin descanso _procura a los sin que hasta ahora pudiera dar con esos chupasangres™ Sin dejar rastro, O dejando solo el rastro de sus crimenes. Y el de la sospecha, Asi es como tienen la costumbre de esfumarse, muchas veces, Jos sacamantecas. En Madrid, en los pueblos de Orense y de Leén, 0 en Ia Colombia literaria del gran narrador cdo Vallejo; en cualquier sitio: paba El Chupasangre— alli en Manrique tuvo mi abuclo una casa que yo conoct, pero de la que no recuerdo EL MUNDO BAJO SOSPECHA: Caos EN LA ALIMENTACIGN, CAOS EN LA COMUNIDAD Suando un ogro o un monstruo devoran a alguien, el mundo pier- 24 Fernando Vall, La Vingen dele Scaros (Madrid: Alfaguara, 2 ed, 1998), p10. 38 Aniropleges del miedo dad, Pero no pierde la armonta ni el equilibrio internos. Mas bien al revés: el miedo a un enemigo externo, bien visible, bien reco ocible, refuerza las relaciones de solidaridad, fortalece los meca- nismos de respuesta colectiva frente a la amenaza Cuando un sacamantecas que se sospecha que vi entre nosotros mata a un humano y se esfuma sin dejar rastro, el mundo pierde un humano, pero la comunidad pierde también la armonia entre sus miembros. Al miedo se le afiade la pesada carga dela sospecha, que es mucho mas perturbadora y mucho més disol- confianza cesta inquierante leyenda sobre ladzones de sangre apenas entrevistos y habilmente enquistados en donde més dafio pueden hacer: dentro de la comunidad: ‘La niia deapareida en el monte ynaptadd por un brajera de los que roban la sangre de los nos ‘otra hermana mfa que se murié, Me To conté mi mamé, porque eso ass. Enconces mi mama vivia en un monte, que era de cafaverales de oa lo. Entonces, dice mi mamé que entre los dos caRaver prima ya mi hermana, Entonces, ice que se perdi, una de ellas se perdi, y estuvo tres dlas perdi No sé si serd verdé. Eso me lo cuenta mi mamé, y die mi mam que al eabo de tres dias apareci6. Dice que la buscaron por coldols los lugares, porque cogieron a todos los que vivian allf para buscar a La muchacha, y no la encontra- Vavtrinos ¥ SNGAMANEECAS: DIETA BLANDA PARA COMENSALES 1 30 ron. A los tres dias ella apareci6, Dicen que esos tres dias ella apareci6 y desde entonces ella, bueno, yo no sé sies verdad, peso dice mi mama que se la habia Hewao un beujero de &sos para hacer no sé qué cosa, por- no’, de toda la gente que hombres que vivian ali, Entonces mi identificaba a la persona que era que ia caminaba, pero ella de un sefor, ella se impresionaba, cada vee que ella se paraba al | pero no decia nada, nunca dijo que era él, ni nada. nn que ese hombre er Dice mi mamé que eso era en el mes de diciembre, no sé si ustedes cen el mes de diciembre tienen que cnidar a los muchachos porque se bre siempre se ha robao a lo ‘coraz6n, paltal cogerles la sangre. [dalia M.] En los tiempos de Batista, era un dictador que era mu un Carrascosa, «Leyenda cubanas de prodig Populares Revista Hleorinica 3 (mayo-2gosto 2008) s veces con los médicos, o con los cooperan- tes de las ONG, 0 con los estudiantes. Algunas, y abi empieza ya todo a tomar tintes perturbadores, con fe como nas0tr0s>, con nasotras mismos, sobre todo si el sujeto sospechoso es de los que van o vienen a la ciudad, 0 de los contacto con ella o con sus Lo peor llega, sin em en actitud sospechosa (y cada uno lo que desea entender) mano, un icra que sea visto iende por actitud sospechosa ieda estigmatizado, Cualquiera: un her- io, 92, est expuesto a que le impongan Ia temible familiar (y zquién 1no es familiar de todos los demas en esos pueblos2), cuando puedo sefalespectfica sn jes de Ia altridad aparente, sea el caso de los sacerdores, médicos o representantes de ONG y nos Y SACANANTECAS: BIETA BLANDA PARA COMENSALES 7isD0S 41 porque ya los kherisrs no se diferencian de la poblacidn a la que vie- timan: «Es gente quien lo hace como nosotros, no gringos; gente como nosotros» (Adolfo Maman En la actualidad no sélo sospechosos de y los gieras que Ia sospecha se ha fal sobre idad que parecen puestas jos al entorno de las ciudades los campesinos que se comportan al modo de dad y que hacen piiblica ostentacién de dinero, sin que se les reco- nnozca actividad remunerada alguna son serios candidatos a ser eco- nocidos como th lidad, el bharisr esta asentadlo en el eno de las propias, tan sospechas sobre tal 0 cual persona o familia a ‘cuyos miembros se ha encontrado en actitud sospechosa de noche, por los caminos. Laacusacién de ser Phariiriesulta traumética para el afecrado, at 4 pesar de que no se pueda probar ni demoserar nada en su contra. El , a buen seguro, serios problemas de articulacién ue tenga que aban- - Resulea tan grave se en manos de abogads sin escripulos en los nlicleos urbanos para conseguir algin papel oficial donde se acre No faltan casos documentados de ajusticiamiento de personas de las que se crefa que eran bharisris. En estos casos con la complicidad de toda la comunidad, el euerpo del supuesto Aha- risiries quemado y sus eenizas aventadas en todas direcciones", 26 Geranlo Femnindex jusrer, Kharisvis en accin: cuerpo, persona y models méidicos ene Abtiplana de Bol Pu: circa, 2008) pp. ig eee ese = ____Anospeegt del eds EL MEDICO QUE ROBA LA SANGRE EL médico es uno de nosotros, es el bro (cualificado) de nues- tarnos sangre, m« , reoonstituyentes, energias; de insuflarnos vida para que siga adelante la vida de la comunidad y de sus miem- bros. Sien ver dea eso se dedica a robar nuestra sangre, nuestra grasa, no cabe duda de que algo va mal, de que algo marcha completamente al revés, en el corazén de nuestra comunidad. De que dejan de funcionar las estrategias clasificatorias en un nivel abso- Jutamence crucial de nuestro mundo social y cultural. pueblo, hermosa. bien, Ia daban de Bueno, la daban de comer mejor que ellos, bueno, una mara~ Pero la chica iba de vez en cuando, bueno, no sé si dos veces al mes, 0 no sé cusindo, iba su padre, que venfa a vender cosas del pue- laventaa vi chica, Y la decta: Pues qué raro, si te dan tan bien de comer, geimo es que estés tan..2 Cada vez que te veo, los colores los has perdido, zeh? —Si es que sera la capital, padre! Pero sf que es verdad que me sien- we como precisa se marché otra vez el padee, uy bien. Y dice: si me tratan bien, que tod las noches, incluso antes de un vaso de leche caliente y todo. La sefiora y ya ests. Yla chica la segulan Vasirinos ¥ sueasonerues: DIETS BLANDA ana COMENSALES-ThMIDO$ 4B Entonces el padre de a chica, que era de pueblo, pero no era tonto, —Pues es que me encuentro muy mal, cada dia no tengo fuerza. Y al, Entonces, la muchacha, pues _Efectivamente, euando ya a pasado la media noche y fo que le habla pasado por la noche. autoridades. ¥ claro, ny conocido, de macho renombre, y que oye, quc cso no se podia deit asf como asTotal, que efectivamente, la mish 7 si fue a un poll Fo 6 no sé dnde, y esa noche los cgi in agent. Porque todas las noches, no, sauna ver ala semana, 0 algo asi. Los cogieron in raganti y sacndola la sangre. Y el fo se ponia bien. iro, qué ‘esti estupendamente, cada ver es mis coloradi ‘Algo patecido, sucedide en Madrid, pero contado por otra per~ sona: Ya una criada también, a otra criada también, que habia ido de Burgos a Madeid, y dice que todas las noches le Ievaba la sefora un vaso de 47 Relao registra a una mujer de Madeid, en abil de 1997, poe José Manuel Pedros i —_Avonpeagat del iodo pues se le hacia raro. Y se quedaba dormi lo que pasaba por la noche. Y enconted WY no te enteras de nada de lo que pasa? —Yo na me entero de nada caso es que cada ver estay mis. # Una mujer del rats ene do hace tres afos, en Sevilla, ence sar con la sangre a un anciano sacerdote que el mal de San Lizaro. Esto comprueba lo extendida que se hal supersticin®. ‘Todo esto sucedié en Lima: Hace cuatro afos, en el Pert hubo muchas no dico, de doctores que mandaban a secuestrat a nifios de gente pobre, y selos levaban. A los tres dias, cuatro dias, una semana como mucho, lammaban a los padres y les decan dénde estaba su hijo. Los dejaban en as incluso en el perié- 2) fte entrevstada en Gana & ro de 1995, por José Manuel Pedros, 29 Alejandro Guichot y Sierra, Superstiione: populares andaluca, ed. S, Rodeiguer Becerra (Sevilla: Editoriales Andaluzas Unidas, 1986), aim. 220, \Vaupinos ¥ SACAMANTEEAS: OLETA BLANDA paNA Commits rfssiDOs 45 tun bareanco mirando el mat ver a su hijo, los encontraban ei sin ojos. A otro nfo le encont habian quitado un rf, Era una mafia todo eso, Algunos padres ponian Ja denuncia a la poliefa. ¥ cuando iban a cass, encontraban un sobre ‘con dinero, porque parece que los pagaban”. ‘Y esto recordaba Fernando Vallejo que sucedia de ver.en cuan- sn Medellin (Colombia): 2Yor iELLos? Fin la hermosisima pelicula Central da Brasil (Bxacitn Central de Brasil, 1998), de Walter Salles, el huérfano protag ina banda de traficantes de nifios, El rumor anénim vecha dicha en vor baja, la acusacién que pende entre la duda y el aba a los miembros de esa banda como ladrones resolvia el enig- ina: el nifio es liberado de su encierro por a misma mujer la arze~ ventida Dora, que lo habfa vendido, y a sus secuestradores solo se les ve patalear enfadados ¢ intentar recuperarlo sin éxito. {Cémo erat las cares de los captores? Un hombre y una mujer vulgarmente desalifiados como cualquier otro de los que tran- sitan por el submundo social que refleja la pelicula, Dos personas lquiera indistinguibles de los denis. zLadrones de 6reanos? sQuién podrla esa seguro? ;Porque lo afirme el rumor! zNo podtfan set traficanees de mano de obra esclava? :Quién puede estar ‘ JoJosé Manuel Pedrosa, sUna coleccign de leyendasurbanas de Lima (Peni), Revista de Flore 20 (999), pp. 132140, 1 29. Annapolis del mide seguro de algo? Y, ademés, zno habja sido Dot habfa vendido antes al nifio? gNo estd expu 50 cualquiera de nosotros, al p de comportarse en algin 2Bxisten fronteras seguras En este perturbador cuadro (Los eocineros peligrasas, de 1896) Ensor, que se conserva en una coleccidn particular, zno aspectos inquietantemente parecidos los comensales y los 0 ms repugnantes los comensales, a dos de los cuales se les puede contemplar vomitando sobre sus propios platos? Pues para quien no esté al tanto de los cédigos secretos de Ja obra: los comensales representan, segtin quiso el pintor, alos cri- ticos de arte, y Los comiclos alos artistas ctiticados: el propio Enson, en lugar de honor. Pero, ano es, quien ha escrito este articulo que finaliza ahora lector, un licerario? No ha sido tambien sometido a escru- P eR » CviSiNigy antas veces, por otros crticos? {No ha actuado algunas veces comensal y ottas veces como comida? {No son, muchos de eratura o de la cultura, gs que len estas paginas, criticos de la fesores que examinan, gourmets que cada dia se pronuncian, con ‘exigencia, sobre el gusto de lo que hacen los demés? :Y no han sido in, alguna ve2, ctiticados? ¢Cémo debemos clasificarnos snces? ;Como nosotros o como ello? Somos comensales, somos ida, somos las dos cosas al tiempo? LIOGRAFLA nvand, Jan Harold (2002). El frbudess libro dels leyendasurbamas, Demasials ‘bueno para ser cier, rad. M. Berasteguis 2 vols, Barcelona: Alba. . Cuz (2006). «Leyendas eubanas de prodigios, espiicus y apa- recidos», Culéunts Populare. Revista Hlectrinice 2 (mayo-agosto 2006). hpi /ww.culeuraspopulares.ony/textos2/articulos/carrascosa htm Giencias del lam (FIQUD). Derecho musulindn segiin las cuatro escuela sine ‘fe, 2008, heel wwe wanesandaluces.oryfeiencias! tle Games, Guticrre (2005). Hl Vietoriah ed. Rafael Belerin Llavador. Madrid: Taurus, reed. (4997). Hithnic Humor aro the World: A Comparative loomington-Indianapolis: Indiana University Pres. ‘Fabulas de Fupo, Vida de Bupo, ed. Pedro Biienas dela Pei. dex Judrez, Gerardo (2008). Kharisiris en accién: cuerpo, persona y modelo médico en el Altiplano de Bolivia, La Paz; CIPCA. Feméndes,Jures, Gerardo eerores de agosto: la fascinacién del “Anchanchn en al Altiplano aymara de Bolivian, en Antropologlas del miedo. Vampires, sacamantecas, enterrados vives y otnts pesadillas de la nazi, eds. Getardo Femnénder Jusrez y José Manuel Pedrosa. Madrid: Calabar Ferrer Clapés, Michel (1981). Centos, ereenciar tradiciones de Thiza. Woivat [edicién del autor). ber, Gustave (2002). Madame Bovary, ed. G. Palacios. Madrid: Cétedea eboa, Alicia (1992). 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Fl acto de destapar una sepultura puede resultar una sorpresa agradable —un fragante olor que certifica la santidad del difunto— pero también propiciar el hallazgo de los restos de un cuerpo que ha pasado sus tiltimos momentos tratando de escapar de ella, miedo a ser enterrado vivo y su puesta en préctica per nnecen a la comy de la cultura funeraria en su sentido rel sgi0s0 mds amplio, pero también son asuntos fecundos en la lite- ratura cientifica, la antropologfa y la narrativa. Estas tres éreas definen algo mis que una teoria de la muerte, un conjunto de 1 +To some people the idea of being buried alive by mistake is the most uncanny ing ofall. And yee psycho-analyss has taught us thar this terfying phantasy is only a transformation of another phantasy which had originally nothing trrif- fic by a certain lasciviousness —the phantasy, nce» (The Uncanny, pp. 366-7),

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