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|_A PROTECCION INTERAMERICANA DE LOS DERECHOS HUMANOS: UNA MARCHA DE MEDIO SIGLO’ Dr, Sergio Garcia Ramirez" MEXICO + Version escrita ce a ponencis “La ptetacién interamerieana de los derechos tumnanos: una marcha de medio siglo presenlada el 24 de enero de 2006 dentro del Seminar] Sistema interamericano de Froteccin de los ‘Derechos Huranos su reperesién en los erdenesjuldcos nacionales ofganizado pola Suprema Cote de Justicia de a Nacon la Cote Irteramaticara de Derechos Huranos. La iniormacson se encuentra ctualizada por el avo 4-00 agosto de 2008, Nacié en Guadalajara, Jalico,y eld esti superiors ona Facultad de Orch dela Universidad Nac ‘AutSnama de Meco; obtvo la cenciatura con mencionhonorfca en 1963 y el coctorad con mencin Magra Cum {aude en 1971, mencidn que se oor96 per primera vez para el doctorado en derecho en la Universidad Nacional ‘utérema de Méion Es profesor iat ]enla Facultad de Derecho ¢ Invest gadrTitda nal Insite de Invesbgaciones Sutgcas oe la propia Universidad Nacional Autonoma de México. Es Invesigador Nacional Eméfto en ot Sst [Navioal de Investgadores. Fue itegrane de Ia ta de Gabiero de la UNAM. Fue fundacer y presierte dela dutta de Gobierno del isto Nacional de Ceneias Perales, Insttuclin que le coi el grado de Doctor Honans ‘Cause fe tla de a Procuraduia General de la Republica de 19822 198, cri e! Centro Penitencaio ue Juez ‘el Trbunal para menctes dl Estado de Mexico; Subirector General de Gobiero dela Secretaria de Gobernacé: Procurador General de Justicia del Disttay Terrtoros Federale; Subsecretrio del Patimonio Nacional Subsecre- ‘arn de Gobernacén: Director dela Carel Prevenivay Presidente dela Comision Técnica de Reciusorcs dol Distrito Federal Tambien se deserpend cama Secretar dol Tabaj yPreison Socal. Fue Presidente dela Acadia Mencana {Ge Clencas Penaes; Presidente del Gent enlcano de Escriresy auor de imumerables libros yarculos. En la ‘actualidad es Juez da Cote Intramericsna de Derechos Huranos, dels que fue Presidents. Erive sus numarosos Taro se cueran Los Derectos Huenasy el Dtecho Peel, Proceso Pena y Detects Humans, Los Osechos Huma rcs y a uisciecitn Interemerican, La Jurisprudarca dela Corte Inieramericane de Devechas Humanos, La Cote Penal niracionel, La alorma Penel de 197, El Ariolo 18 Conshtuciona: Prsén Preventva, Ssteme Pentencario |yeneresinactores, La Impiebidad en e Drecto Penal Mexican, La Pisin. Jusiia Penal Recuso Tino. Fel Ge Lecumbern, Legistecion Pentenclaria y Careccional Comentada, Deics en Materia de Estupeacteies yPsicotc- Bice yeas pubsicacones mas ‘Sumario: |. introducoién. N. Sistema Interamericana de Derechos Humanos. Il. Convencion ‘Americana sobre Derechos Humanos 0 Pact de San Jasé de Costa Rica, IV La Corte nteramericana y sus resoluciones. Breve panorémica. |. INTRODUCCION espetable sefior Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Naci6n y del Consejo de la Judicetura Federal, y ademés apreciado amigo, sefiora y sefiores ministios de la Suprema Corte de Justicia de la Naoién, sefior vicepresidente del Instituto Interamericano de Derechos Humanos, sefior director del Insltuto Interamericano de Dere- hos Humanos, seforas, sefiares, amigos todos: celebro poder parlicipar en este encuentio {que entiendo muy significativ, que marca un punto de inflexién en las reflexions del Sistema Interamericano de Proteccién de los Derechos Humanos, y que vincula més estrechamente todavia a este Tribunal Interamericano de Derechos Humanos con el Poder Judicial de la Federacién, del Estado mexicano; al hacerlo, con agrado y emocién, no puedo olvidar que en mi concurren dos circunstancias muy gratas: a que explica mi presencia en esta tribuna como Presidente de la Corte Interamericana, pero, ademas, y de manera destacada, la que explica mi presencia en este pais como ciudadano mexicano, abogado colega y amigo de ustedes, en muchas lides del orden jurisdiccional y también en muchas tareas académicas, " 12 dL ssteua ntzanvencao oe RDrSCWN BE LS ERECHES MLMANDS¥ SU AERC Ls ORDERS WURDIGS MACONALES Participan en este seminario, que es en rigor un curso organizado por distintas institu- ciones, varios organismas cuya vinculacién es imoortante por la materia que los rige, y ante todo la Suprema Corte de Justicia de la Nacion Mexicana, por acuerdo de los sefiores ministos. Agradezco a usted, sefior Presidente, y a ustedes, sefiores minists, su acuerdo favorable para la realizacion de este seminar Participa también la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el marco de las excelentes relaciones que guarda con las Cortes Constitucio- rales del continente americano y del convenio que de tiempo atrés suscribié y que se esté ejecutando con la Suprema Corte de Justicia de la Nacién; asimismo, también es relevante la participacién, como una pieza indispensable én el sistema de difusion de esta materia, del Instituto Interamericano de Derechos Humanos, pieza clave en la investigacion y fa ensefienza, Este curso se sustenta sobre diversas premisas que lo explican, que lo justifican y que se encuentran implictes 0 explicitas en su denominacién. Por una parte, destaco la existencia cde normas y mecios internos para la tutela de los derechos humanas en los planos nacionales, particularmente en este caso en el plano mexicano, y especialmente me refiero, desde luego, al juicio de empero, insitucién de la que todas nos sentimos ufanos, orgullosos, como otras (generaciones de mexicanos lo han estado y seguramente muchas mas lo estaran. Por otra parte, sefialo también la existencia de normas y medias internacionales de tutela de los derechos humanos, que no tienen la pretension ni podian teneria en ningun caso de relever o sustiuir alos organisms y a los procedimientos nacionales, sino solamente de actuar en forma complementaria y subsidiaria, reconociendo que la tarea primordial compete a la justicia domestica Asimismo, debo ponderar, entre las premisas a las que me estoy refiriendo, la reper- usin del orden tutelarintemactonal en el orden tutelar interno, Una repercusion cada vez mas acentuada, que se vio primero en el plano europeo y ahora se contemipla crecientemente en «al plano americano; una repercusidn que incide sobre los textos constitucionales de muchos paises da América Latina, y también sobre los ordenamientos internos que repercute sobre la jurisdiccién nacional, como lo acrecita la jurisprudencia de numerosas cortes supremas y tribunales constitucionales, y que @ su vez repercuten igualmente en las pollticas publicas A ROTEGON WTERAWERCAN DELO RECS FUMES MARCHA DE MEDD GLO 13 yen la gestion poltico-administrativa interna, Se ha tendido, pues, un puente que permite un trénsito cada vez mas eficiente y fluido entre el orden juridico internacional y el orden juridico nacional, bajo la comin preocupacién que los vincula e identifica para proteger Conjuntamente los derechos fundamentales del ser humano, todo ello expresado en la consolidacion de las normas y los medios internacionales en sendos sistemas: uno de cardcter universal, cuya construccién comenzé hace més de medio siglo, y otro de caracter regional, Patticularmente nos vamos a referir al Sistema Interamericano de Derechos Humanos, que es una obra compartida, una obra colectiva que se ha vendo erigiendo en el continente americana a lo largo ya de varias décadas I. SISTEMA INTERAMERICANO DE DERECHOS HUMANOS: Una vision simplista de lo que seria el Sistema Interamericano harla pensar que éste se integra solamente con una Comision y con una Corte lnteramericanas de tutela de los derechos humanos; esta vision me parece sencilla, esquematica y desde luego insuficiente, El Sistema Interamericano de Proteccién de los Derechos Humanos es eso y mucho mas que eso. Vale la ppena que nos alengamos, y ojala que en e! desarrollo de este curso ello quede de manitiesto, ‘a un concepio integral ¢ integrador que tome en cuenta los fundamentos del conjunto, los instrumentos, e! movimiento de ese conjunto y el proyecto hacia el que se dirge. El proyecto que cito se instele sobre convicciones compartidas, convicciones huma- ristas, un credo y una militancia en favor de los derechos fundamentales del ser humano y de la vision del derecho como custadio de valores y bienes fundamentals. Es un credo compertido en la democracia y espectficamente en los derechos humanos, que se instala también sobre un corpus juris que se ha venido construyendo, ya lo decia, a lo largo de varios arios en ruestro continente; corpus juris del que forman parte la Carta de la Organizacién de los Estados Americanos, la Declaracién Americana de los Derechos y Deberes de! Hombre, de 4948, la Convencion Americana, de 1969, que seré objeto de estudio en uestras futuras exposiciones y los protocolos que fan complementado los dstintos Ambitos especticas de esta Convencién, uno de ellos para la abolicion, afortunadamente y en defintiva, de la pena de 114 eussteuameren can oF OTEOOON ELS ERE MANOS YS REERCUSIN€LOS ODES URES HANES muerte, y el otfo para el establecimiento y vigencia efectiva de los derechos economicos, sociales y culturales; los convenios regionales que se han multiplicado paulatinamente, que atienden ala lucha en contra de fendmenos tan indeseables como la tortura, la desaparicién forzada, la discriminacién de la mujer; los estatutos y reglamentos de los 6rganos internacio- nales de tulela de los derechos humanos, que tienen valor y son derecho internacional miltiples declaraciones, recomendaciones, acuerdos y esténdares internacionales -como solemos denominarios- y, finalmente, la jurisprudencia del Tribunal Interamericano y los criterios de la Comision Interamericana. Todo esto y mas seguramente compone ese corpus juris que se desprende de las convicciones compartidas, y que sustenta ls tareas de tutela en el Sistema Interamericano de los Derechos Humanos. Piezas fundamentales de este sisterna son, ante todo, y quisiera subrayarlo de entrada: los Estados nacionales. Es en estos Estados, que tienen sus propias decisiones poitioas fundamentales, donde se destaca centralmente la proteccin del alto valor que representa fl ser humano, donde nace la lucha en favor de los derechos humanos, donde ésta se desartolla, consolida y alcanza sus victorias decisivas, También lo es la Organizacién de los Estados Americanos, que no podria tener un fin més alto, mas elevado como organiza- cién que el que tienen los Estados que la integran, y ese fin se halla expreso en las grandes declaraciones de finales del siglo XVIII: la tutela de los derechos fundamentales del ser fhumano. ¥ por iltimo citaria también a la sociedad civil, es decir, alos pueblos de nuestras repdiblicas y a sus instituciones, quienes han venido impulsado y acompaftands la lucha en favor de los derechos humanos a lo largo de muchos aftos. También mencionaré 4 los protagonistas emergentes, eficientes, diligentes del Sistema Interamericano: al mundo ‘académico y en éste el Instituto Interamericano de Derechos Humanos, asimismo, @ los comuni- cadores sociales y al ombudsman, que también debe buscar y encontrar su acomado en e! ‘amplio marco del Sistema Interammericano y la tutela internacional de los derectos humanos. Il CONVENCION AMERICANA SOBRE DERECHOS HUMANOS 0 PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA Hablo ahora, amigas y amigos, en nombre de la Corte Interamericana, organismo que inicio sus actividades al amparo de la Convencién Americana 0 Pacto de San José hace poco mores WEUMERCAME OE LOS DERECHOS HUMANE UR AROMA De EDI SLO. 15 més de 25 aos; un organism jurisdiccional que, recientemente ha celeborado sus bodas de plata, La pieza esencial, la pieza definitoria ~como en su momento lo dio el gran jurista René Cassin- fue la Convencion Americana sobre Derechos Humanos, suscrita en 1969 en San José, con atribuciones normativas, administrativas, pero particularmente ~y estas las destaco-, de cardcier jursciccional, tanto a través de su competencia contenciosa como de su capacidad para absolver consultas a través de opiniones, y de sus tareas preventivas en cuanto a violacidn de los derechos humanos, y ejecutivas de sus propias resoluciones, En el curso de su todavia breve y corta vida, la Corte Iteramericana ha atendido, ha resuelto, 19 opiniones consultivas, dos de las cuales, entre las mas recientes, se emitieron 1 solictud del Estado mexicano. Figuran como opiniones sobresalientes, todas importantes en los trabajos de esta especialidad cumplides por la Corte Interamericana, 139 sentencias con las cuales se han resuelto 68 casos -que muchos denominan paradigmaticos-, en los que se ha asentado la jurisprudencia interamericana sobre derechos humanos, multiples medidas provisionales destinadas a cauteler, a tutelar los derechos humanos y evitar la violacion de éstos. También es importante hacer notar, este es un dato significativo y poco conocido, que no menos de la cuarta parte de los asuntos llevados por la via contenciosa ante la Corte han tenido solucion a través del allanamiento de los Estados a los sefialamientos de hecho y de derecho del demandante: la Comision Interemericana, Allanamiento total en algunos casos -los menos-, parcial en otros muchos, que sin embargo marcan un camino dde buena voluntad, de buena fe para una mejor solucién de los contlctos. Tenemos setenta 1 tantos casos en trite 0 supervisién de cumplimiento, y hemos logrado afortunadamente mejorar el ritmo en el despacho de los pronunciemientos y lograr que sean éstos cada vez mas numerosos, habida cuenta del niimeto cteciente de planteamientos, de demandas que se someten a consideracion de le Corte, IV. LA CORTE INTERAMERICANA Y SUS RESOLUCIONES. BREVE PANORAMICA No deja de ser interesante, creo yo, para un piblico como el que hoy me hace e! honor de fescucharme, conocer cudles son aquellos preceptos o aquellos derechos sobre los que se 116. eLssreua merauen cane PRO1ECON 95 Ls ERED HAs YS AEERCSIN LO OOERES URIS KATENALES ha emitido el mayor ndmero de resoluciones en casos contenciosos, declarando que ha habido violacion de as normas de la Convencién Americana. En primer término, la Corte Interamericana ha estimado que hubo violacién de derechos y libertades en 62 casos; que hubo también violacion de garantias juciciales en 49 casos: trasgresién de lo que llamamos el debido proceso, que seré materia de alguna charla préxima; que en 47 casos hubo vulnetacidn del sistema de proteccién judicial, es decir, del sistema de garantias que brinda proteccién por la via jurisdiccional a los derechos fundamentales reconocidos por la Convencién Americana ‘© en las Constituciones nacionales; 41, en donde s@ viol6 la integridad personal; 34, la libertad personal; 29, el derecho a la vida. Han sido menos frecuentes las transgresiones de otra naturaleza Enlos titimos aiios, sin que desaparezcan las violaciones de corte tradicional, de perfil tradicional propias de cier‘a etapa del desarrollo o subdesarrollo de la tutela de los derechos humanos, en muchos de nuestros palses se han presentado temas diferentes, temas que corresponden a una etapa distinta en la que van apareciendo poco a poca los plantearientos sobre derechos econémicos, derechos sociales, derechos culturales, acerca de los cuales la Corte Interamericana ha comenzado a pronunciarse. Estas son algunas cifras que podrian ayudarnos 2 ilustrar lo anterior, y sobre todo para conocer Jo que es la Corte Interamericana hoy dia. EI nimero de asuntos que atiende es relativamente reducido, consecuente con su capacidad de despacho, pero ademas concurre la citcunstancia de que, como decia, el primer frente de batalla no esta en el Tribune! Interna- onal, sino en las jurisdicciones nacionales, Las ctras relativamente cortas a las que me he referido refiejan e! hecho, el hecho afortunado de que la inmensa mayoria de los contlictos ‘que tienen que ver con violacion de los derechos humanas o de garantias se ven y se resuelven ante las instancias nacionales, como es dabido que ocurra y como se espera que suceda invariablemente México ha tenido una posicién propia frente a la Convencion Americana y al Sistema Internacional de Tutela de os Derechos Humanos, una posicién alimentada por circunstancias de cardcter historico que nutrieron su postura en los eneventros internacionales en los que roe WIRAUERIOMA DELO EREDHOS HOMAROS: UA MARCA EDI NGLO_ 17 se disefié el sistem; por ejemplo en la Conferencia de San José, en un primer momento el Estadio mexicano observe a cierta distancia, dirfarnos cautelosa distancia, la idea de cons- tui, de crear una Corte Interamericana, Con el tiempo esta posicién, que como digo obedecia a determinadas tradiciones estimables y comprensibles, de cardcter historico, se ha ido moditicand. Asi, México recibié ampliamente el derecha internacional de los derechos humanos en 1981, affo clave para nuestra materia, puesto que en ese ato, México acogié los pactos interna- cionales de Naciones Unidas y la Convencién Americane sobre Derechos Humanos, incoroo- randolos a su torrente normativo al amparo de la Constitucién Federal. México también se aproximé al sistema de la justicia internacional a través de la presencia en la Corte Interamericana de jueces de nacionalidad mexicana, que no repre: sentan en la Corte al Estado mexicano, pero cuya nacionalidad es significativa. También se aproximé a través de la salcitud de dos opiniones consulivas: una de ellas sobre e! derecho ala informacién acerca de la asistencia consular a detenidos extranjeros, y otra sobre condl- cién juridica y derechos de trabsjedores migrantes indocumentados. Dos cuestiones de gran relevancia en la experiencia internacional de nuestra Repdblice. ‘Asimismo, México reconoci6, en diciembre de 1998, con la aprobacién del Senado de la Repdblica, la competencia contenciosa de la Corte Interamericana; yal reconocerla, acento someterse a su jurisdiccion cuando se hicleran demandes en su contra por quien las suele hacer: la Comision Interamericana de Derechos Humanos, a propésito de suovestas 0 reales violaciones. A partir de ese momento México ha conocido de algunas medidas provisionales, y ha llegado tambien a la Corte algun caso contencioso de su competencia. En itimas techas, como ustedes saben, México ha dado pasos adicionales en el ambito de las jurisdiociones internacionales. Lo hizo al constitvise como Estado demandante de los Estados Unidos de América ante la Corte Internacional de Justicia, hace relativamente poco tiempo, en un asunto muy sonado, muy relevante: el caso ‘Avena’, que involuoraba a ss EUNSe2N De HDT DE LOS REO MANOS YEU RFERUSIN EN LOS RUENES LUNDA WHCINLES numerosos conciudadanos que fueron condenados a muerte en los Estados Unidos de América, sin que se les hublese reconocido su derecho a recibir asistencia consular. Final- mente, México ha reformado su Constitucién General, para incorporar en ella la posibliidad de brindar colaboracion ala Corte Penal internacional en los casos de su competencia, sistema ‘en el que ya patticioan un centenar de Estados de la comunidad juridica internacional. Ese ha sido el rumbo que ha estimado pertinente la nacién mexicana, en todo caso el Estado mexi- ano, desde aquel momento inical de cierta lejanta, hasta esle de franca y clara eproximacion. \Veremos seguramente, en los dias por venir, muchos aspectos especiticos de ésta, que yo suelo calficar como una larga marcha, una marcha de medio siglo, y podremos cono- cer en el coloquio que vamos a emprender las particularidades de esa larga marcha y de las soluciones del presente. De nueva cuenta, sefir Presidente, seftores ministros, agradezco a esta Suprema Corte de Justicia de la Nacién, por la que siento un gran respeto, tanta simpatia, tanta estimacién personal y profesional, el don de su hospitalidad, de su deferencia para la Corte Interamericana. Quienes somos participantes en la Corte Interamericana, varios a ser también partcipantes en este seminario con la hospitalidad de esta casa sefiorial: lo es por sus caracteristcas arquitecténicas, pero sobre todo por su aportacion dignisima a la causa de la cultura juridica en México Muchas gracias,

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