10
15
Y, SI es preciso, 10s Jueces
Da lo mismo que los afectados sean cien mil o quinientos mil, Es igual que representen el 2
6 3 por ciento del total de jévenes entre 15 y 24 afios La anorexia es una enfermedad que provoca
Ia alarma social y que amenaza con ser la mas estipida de 1as epidemias del siglo XX.
Aunque los tiltimos datos de la Consejeria de Sanidad de Madrid y del Insalud seftalan que
en Los tiltimos aftos se han estabilizado los ingresos por anorexia, Ia delgada linea roja que separa la
bbitsqueda del ideal de belleza de la tragedia devastadora obliga a intensificar las lineas de alarma y
a actuar en diversos frentes.
El primero es la edueacién. Familias y colegios tienen que actuar unidos ante un problema
que sélo puede solucionarse si se ataca precozmente especialmente cuando, por falta de
informacién, no se reconocen comportamientos y actitudes que acabarén en un problema de
enomne gravedad. La salud es una disciplina que debe potenciarse en los centros educativos.
EI segundo es Ia accién social. Desde el Ministerio de Sanidad y las instancias interesadas
hay que investigar las causas y las consecuencias del problema para reducitlo al minimo. Es
nacesaria una presién social sobre las televisiones, piiblicas y privadas, para que no den cabida en
sus programas a quienes defienden, prommeven 0 imponen modelos de belleza que incitan a la
anorexia. Lo mismo cabe decir de diseftadores, publicistas y anunciantes. Por ultimo, 1a formacién
de profesionales sanitarios y sociosanitarios y la dotacién de servicios médicos especializados
parece impreseindible
Y, finalmente, queda el recurso a la accién judicial. Desde hace tiempo, un juaz de
Bareelona, a peticién de las familias, ordena el intemamiento de muchachas cuyas vidas se
encuentran en peligro. Simulténeamente se ha denunciado en Madrid el crecimiento de las
familias que eluden cuidar a personas incapaces y cuyo patrimonio administra la Agencia para la
Tutela de Adultos, dependiente de la Consejeria de Sanidad y Asuntos Sociales Estamos ante
problemas sociales que reclaman, cuando es imprescindible, la actuacién de 1a Administracién
de Justicia. No hablamos de problemas alimentarios, sino de una autodestruccién inconsciente,
Enrique Lépez Francos, en La Razén, 28 de marzo de 1999. p. 4510
15
20
PESQUISAS
Maruja Torres
Cada tanto (en realidad, muy a menudo) aparecen en los periédicos noticias
cientificas (0 asi se presentan) segtin las cuales acaba de descubrirse esto y lo otro:
un avance en el conocimiento de qué somos y qué nos pasa, tal como suele deducirse
del triunfalista redactado. Leo, hace un par de dias, que un equipo del Instituto
Nacional de Diabetes (supongo que de Estados Unidos: la noticia, de agencia, viene
fechada en Washington) ha conseguide localizar en el cerebro humano, mediante un
escéner perfeccionado capaz de realizar un mapa inédito de la actividad de dicho
rgano, las sefiales del hambre y de la saciedad_
No me pregunten cémo funciona, pero el caso es que parece que el
descubrimiento podria ayudarnos a eliminar el hambre: fascinante perspectiva que,
aplicada con la ternura habitual con que el ser humano suele comportarse con sus
semejantes, permitiria que pueblos enteros murieran de hambre sintiéndose saciados
y sin darle el cofiazo al Primer Mundo.
No entiendo que quienes dedican tan admirables esfuerzos a estudiamnos la
cocorota no se hayan empefiado, todavia, en intentar localizar la zona donde tenemos
emplazados la percepcién del nacionalismo y el embrién del militarismo. Si a mi me
dijeran, por ejemplo, que es en el hipotélamo donde més probabilidades tengo de que
se me desarrolle un acusado sentido de excepcionalidad y superioridad respecto a los
nacidos de otra tierra, 0 que es en el télamo donde nace el impulso de que se me
ponga la carne de gallina ante una marcha guerrera... Por decirlo con franqueza,
querides, me hacia yo misma una lobotomia, ahora mismo, con el abrecartas y las
tijeras de las ufias, y con una botella de whisky a modo de anestésico.
Pero ahi les tienen. Averiguando cositas para volvernos delgados. En vez de
hacer algo para que seamos cuerdos.
(El Pais, 15 de abril de 1999, Pag. 72)10
15
20
25
Socorro
Una nifia de diez afios, escocesa o asi, ha escrito un libro titulado Ayuda,
esperanza y felicidad, que es una guia para sobrevivir al divorcio de los padres. Nos
parece muy bien, pero aguardamos ansiosos que una compafiera suya publique un
manual de autoayuda para los hijos de los matrimonios estables, que son los grandes
olvidados. éCémo se sobrevive a una pareja que se quiere? El libro tendria un éxito
enorme en estos dias de paz navidefia en las que las familias homologades llegan a las
manos por un quitame alla esas pajas. Ahora resulta que los hijos de los divorciados
no sélo tienen dos casas, dos regalos y ocho abuelos, sino que disfrutan de una
literatura especifica para ellos y su problematica.
Urge la puesta en marcha de una biblioteca que nos ayude a afrontar las
situaciones normales. Ya sabemos cémo se combate el cancer, la depresi6n, la ruina
econémica. Hemos averiguado como se espanta la mala suerte, cémo se aprende
inglés en tres semanas, como se deja de fumar en dos sesiones. Hemos ido a la Luna,
a Marte, hemos inventado la hamburguesa. Quiere decirse que lo dificil esta
practicamente hecho. Ahora necesitamos asistencia para hacer frente a lo de todos los
dias. Cémo no desesperarse, por ejemplo, en una lista de espera de la Seguridad
Social, como asumir una hipoteca de 40 afios, cémo sobrevivir a un contrato basura,
cémo pagar un alquiler de 1.000 euros con un sueldo de 800, incluso cémo divorciarse
con dos salarios que parecen medio.
Muchos crios no podradn disfrutar del libro de Lobby Rees, la nifia escocesa de la
primera linea, porque sus papas carecen de medios para irse cada uno por su lado.
éHay derecho a eso? éHay derecho a que no exista una sola guia espiritual para los
més de ocho millones de nifios esclavos que hay en el mundo? Por favor, ayidennos a
combatir lo cotidiano: la esclavitud infantil, las hambrunas masivas, el trafico de
armas, la tortura deslocalizada. Expliquennos como se defiende uno de personas
corrientes como Bush, como Blair, como Rouco Varela, como Schearzeneager. No
tiene sentido que hayamos descubierto el antidoto contra el mal de ojo, que no existe,
y todavia no tengamos un remedio contra la malaria. Hagan algo.
Juan José Nillas. El Pais. viernes 16 de diciembre de 2005