Está en la página 1de 11
6 LIBRO il, CAPITULO 1 cien monedas de oro, y que se la prometimos yo, Antonino, Aquiles y Cornelio Dio: habria’ que’ decir que ia deuda se halla repartida pro rata entre los cuatro deudores, porque no aparece en Ia slipulatio asi con- Clulda ninguna cllusuta que indique se trata de obligacion de solidum '. Por tanto, en el caso de las obligaciones conjuntas, tanto el crédito como la deuda se hallan distribuidos pro partibus virilibus, que dicen las fuentes, entre varios. sujetos: ‘acreedores, en el caso activo; y deudores, en el pasivo. Obligaciones indivisibles ‘Para determinar si una obligacién es divisible o indivisible, se hace necesario ante todas cosas fijarse en el cardcter y en el matiz propio de la prestacién que constituye su fondo y contenido. Si éste importa una materia divisible, 0 lo que vale lo mismo, tal que pueda fraccionarse en varias porciones, cada una de las cuales conserve la naturaleza del todo y a la vez un valor econémico-social, proporcional a ese todo: la obli- gacidn serd divisible, y se descompondra en tantas obliga- Ciones parciales 0, por mejor decir, simples, cuantos fue- ren los acreedores 0 los deudores, segiin la’ diversidad de los casos. Sirva para aclaracién de lo que precede el siguiente ejempio: Cayo, quien debe a Ticio la suma de mil sester- cios, muere dejando dos herederos. Dichos herederos 3, debe- ran pagar la deuda del testador por partes iguales, es decir, quinientos sestercios cada uno de ellos. La deuda del tes tador que pasé a sus herederos, tenia por objeto una pres- tacién divisible. Por el contrario, si la prestacién no puede fraccionarse a la manera antes indicada, la obligacién sera y deberd llamarse indivisible y una para todos, en cuanto cualquiera de los acreedores 0 deudores que en ella figuren, podré exigirla o debera cumplirla, respectivamente, por ‘entero. Tal es el caso de la obligacién cuyo fondo y contenido propios se hallan constituidos por la prestacién de un esclavo, de un caballo o de una piedra preciosa. 1 Es el caso de 1a obligacion parcial con varios sujetos pasivos 2 Digs, van ty Vip a0 BD, Envy 1 3; liens, como’ Io Suponemos, partisipan de la herencia eequo ire: segin el mismo derecho, DEFINICION ¥ DIVISION DE LAS OBLIGACIONES 7 4—Por regla general, las obligaciones que tienen por objeto un dare: dar, son divisibles, puesto que la propiedad, y lo mismo se diga—proporciones guardadas— de otros, derechos reales, puede, como es a todos manifiesto, implicar varias cuotas partes, las cuales, atendidos su naturaleza y su valor econémico-social, sean proporcionales al todo. Al revés, las obligaciones que tienen por objeto un facere 0 un non facere: hacer 0 no hacer algo en beneficio del titular, son, al menos por lo comin, indivisibles, como quiera que las acciones y omisiones de los hombres no son, por lo regular, susceptibles de fraccionarse, en el sentido que se acaba de exponer. Un cuadro, por ejemplo, se podra pintar o no pintar. Pero no se puede hablar de’ sus fracciones, como se habla en el caso de la obligacién con materia divisible: porque el cuadro, una vez concluido, es, si se toma cuenta con su naturaleza y con su valor econdmico-social, algo muy dis- tinto de lo que son todos los actos preparatorios. En oca- siones, es el iiltimo retoque lo que constituye, en definitiva, el valor y el mérito por ventura mdximos y excepcionales de la obra de arte. Con todo, hay ciertos actos del hombre, en los cuales si caben fracciones social y econdmicamente proporciona- les al todo. En estos casos, el facere constituiria, sin embargo de lo antes dicho, una obligacién indivisible. Sirva, para confirmarlo, el ejemplo de quien se halla obligado, en virtud de un contrato, a levantar veinte casas 0 a construir mil metros de muro al rededor de un fundo ristico Las prestaciones indivisibles no pueden exigirse, por parte del acreedor, ni cumplirse, por parte del deudor, sélo parcialmente. En esto consiste, sobre todo, el matiz propio y el cardcter practico de dichas obligaciones. Silos deudores Son varios, el acreedor podra exigir a cualquiera de ellos la prestacién integra, salvo siempre su derecho de regreso © recurso contra los otros deudores. Por manera idéntica, si los acreedores son varios, cualquiera de ellos podra recla mar todo el crédito, aunque siempre con la obligacién no solo natural, sino también civil de dar garantias suficientes al deudor de que no serd requerido a nueva prestacién por 8 LIBRO Il, CAPITULO 1 parte de los otros, y con la de atender a las reclamacio- nes justas de los acreedores, que tienen derecho para pedir la cuota parte del crédito que les corresponde. Si por causa de incumplimiento en ta prestacién cuyo objeto es indivisible, el juez legare a pronunciar, después de oidas y ponderadas con diligencia las alegaciones y prue- bas, senfencia de condena pecuniaria contra el tinico deu- dor, ésta deberd dividirse, naturalmente, de tal suerte que a cada uno de los varios acreedores se le asigne una parte proporcional al monto de su derecho. Debe también tenerse mucha cuenta con que la indivisé bilidad de las obligaciones, en cuanto tal, no produce relacién juridica de solidaridad entre los diferentes deudores o acree- dores. Por tal motivo, los diversos modos de extinguir deudas, que favorecieren por ventura a uno o varios de Jos deudores, no producirdn efectos liberatorios, ante la ley, respecto de los otros acreedores: cosa ésta que se verifica y acttia siempre, como pronto lo veremos, en el caso de Solidaridad. Veamos ahora en un caso concreto y particular, la idea que tenian formada en torno a la obligacién divisible € indivisible los grandes jurisconsultos de la época impe- rial cldsica: Si pecunia in sacculo signato deposita sit, ef unus ex heredibus ius gut deposuit veniat repetens, quemadmodum ei satisfiat videndum est. Promenda pecunia est vel coram practore vel intervententibus hores- lis personis et exsolvenda pro parte hereditaria. Sed et si resignetur, non contra legem depositi fie, cum vel practore auctore vel hanestis persons Intervenientious hoe evéniet: restduo vel apud eu remanente, si hoc voluerit ~sigilis videlicet prius ei Impressis vel a practore vel’ ab his coram quibas signacula remota sunt vel, si hoc’ reeusaverit, in aede depo- hnendo. Sed si res Sunt, quae dividi non posstint, omnes’ debebit tradere Satisdatione idonea a ‘petitore ef praestanda in foc, quod supra eius partem est: satisdatione autem non iatervenienle rent in aede deponi et omni actione depositarium liberart: Esto es ': cuando. alguien deposita Cierta cosa en las manos de otro, eaben dos hipdtesis. Silo que se depo- sito fue una suma de dinero, 0 en términos ‘mas generales, algiin bien divisible, debera entregarsele a los diversos acreedores. la’ cubta parte que les corresponda 2. En cambio, si el objeto en deposito es de aque- lls que no pueden fraccionarse, entonces el depositario tendrd 1a oDli= 1 Prescindimos aqui de las solemnidades y formas que deben obser- varse en el deposito, las cuales se exponen en este pasaje con detalles y por Imenores, que mo hacen a nlesiro propsatto, 2 Aqui tenemos el caso de una obligacién divisible. DEFINICION Y DIVISION DE LAS OBLIGACIONES. 19 particulares de ta obligacion, para averiguar si hay 0 n0 lugar, y en qué grado y medida, al derecto de regreso 0 recurso, asi entre 0s Ue dores como entre log acreedores, Es decir que la segunda proposicién, 0 sea, que no existe derecho de recurso 0 regreso, cuando no hay vinculo de SOCIEDAD entre los varios deudores 0 acreedores, no fluye en buena exégesis de las palabras del jurisconsulto romano. Una tercera sentencia, que pudiéramos llamar media entre las dos precedentes, patrocina el sabio profesor de la Universidad de Bruselas Charles Maynz, en los siguien- tes términos: La cuestién sobre el derecho de regreso 0 recurso. en las ob gaciones solidarias, tanto activas como pasivas, no es. susceptible. de Fecibir una respuesia adecuada, por la sencilla razon de que mo existe culo alguno. de causalidad entre los conceptos “de. solldaridad en cuanto tal y de recurso 9 no recurso contra los otros én el caso de (as obligaciones solidarias. La'solidaridad, atendido. su concepto: generico y abstracto, no importa derecho alguro de. regres 0 recurso. ni se apone a él: la solucion del problema juridico en que. nos ‘seupamos, epende de las relaciones particulaces 'y concretas que medien entre los codeudores 0 coacreedores, independientemente de la ‘eircunstaneta de solidaridad, relaciones. que pueden variar segin los adjuntos y cit. cunstancias del aso". Diversas especies de obligaciones por razén del objeto de las mismas 7—Aunque en esta materia _pudiéramos extendernos mucho, bastard con todo —por motivos de brevedad, y para no incurrir en ta longitud y amplitud propias de una obra fundamental— que nos fijemos en la exposicién de las obligaciones: a) alternativas, b) genéricas, c) ilicitas, que son las que presentan mds ‘dificultad, y al propio tiempo mayor interés para los juristas modernos 2) Obligaciones alternativas—Las obligaciones alternativas se contraponen a las obligaciones llamadas simples, y se actia el concepto de las mismas cuando el 1 Charles Maynz, Bléménts de Droit Romain, vo. t, pig. 186 2 Puede verse sobre esta Importante materia el. Corse df Isttazioni di Diritto Romano dei Profesor de lak. Universita di Catania, B. Biondi, cap. 2, Figure Specialt di Obbligaztont, pags. 88 y sigs. 20 LIBRO Il, CAPITULO 1 reas debendi 0 el promittens no se vincula a determinada prestacién, sino a una entre varias, que deberd fijarse a la libre eleccién suya 0 del reus credendi o stipulans, segin la variedad de los casos. Asi, por ejemplo, habré obliga- cién alternativa, si Ticio se obligé en virtud de un contrato verbal o de un testamento, a entregar, en tal dia y en tal lugar, a Cayo el objeto Ao el objeto 8. La formula de que se valian los jurisconsultos roma- nos para indicar esta clase de obligaciones, era en su fondo y substancia la siguiente: plures res sunt in obliga- tione, sed una tantum in solutione: la obligacién comprende varias cosas, pero el deudor quedard libre con el pago de una sola. Hemos dicho en su fondo y substancia, porque las palabras textuales que refiere el jurisconsulto Julio Paulo en su Liber decimus quaestionum, son éstas: Quia utraque res ad obligationem ponitur, non ad solutionem: Se ponen dos o varias cosas para la obligacién, mas no para el pago '. No se debe confundir la obligatio alternativa con la facultas alternativa. Porque en este ultimo caso una res est ‘on tantum in solutione, veram etiam in obligatione: No s6lo el pago, sino también {a obligacién comprende una cosa; aunque al propio tiempo se le concede al reus debendi © promittens la facultad para librarse por medio de otra presiacion que, en el aprecio econémico-social, se equipara, sobre poco mas o menos, a la primera. La principal consecuencia practica que se infiere de la distincién entre los dos conceptos es, que si una de las pres- taciones llega a hacerse imposible por caso fortuito, la obli- gatio alternativa subsist, por cuanto se concentra en la Otra o en las otras; mientras que en el caso de las obli- gaciones con facultas alternativa, si la praestatio una viene a hacerse imposible, por razén de caso fortuito, el deudor queda enteramente libre EI ejemplo tipico de la facultas alternativa lo tenemos en los dafios y perjuicios causados a terceros por perso- nas sujetas ala potestas patria 0 potestas dominica del 1 Dig., xiv, 1, 128. DEFINICION Y DIVISION DE LAS OBLIGACIONES 21 pater familias 0 del dominus, respectivamente: quienes, segiin Ja regia general que en su lugar se expone y demuestra, tenian que resarcirlos, pero siempre con la facultas alter. nativa de entregar el individuo causante de los dafios y perjuicios en reterencia al poder de la persona damnificada: noxae deditio, 0 también datio in noxa. Si los dafios y perjuicios causados al tercero por un esclavo 0 por un jilius familias ascendian, por ejemplo, a mil sestercios, el dominus o el pater familias venian obli- gados, de suyo y en linea de principio, a pagar dicha suma al damnificado; pero con todo se les otorgaba en las leyes la facultas alternativa, para poder librarse de su obligacién eniregando el autor de los daiios y perjuicios a la persona damnificada, para que ésta se indemnizara con el producto del trabajo y servicios de aquél, contra todos los dafios y perjuicios que le ocasioné la noxa o el delito en referencia, Tampoco se debe confundir 1a obligatio alternativa con cierta figura comprendida en el marco de las obligaciones sub conditione. Se trata del caso en que siendo varias las praestationes in obligatione, aunque solo una in solutione, pertenecia el ius eligendi: el derecho de escoger, no al deu- dor ni al acreedor, sino a un tercero, Entonces, si éste 0 no queria 0 no podia, por cualquier motivo, ejercitar st derecho, la obligacién era nula ante las leyes, yen su virtud nada debia el promittens. Item, las obligaciones en referencia no pasaban a los deudores, si una de las partes moria antes que el tercero hubiese hecho uso del ius eligendi; mientras por el contrario 1a obligatio alternativa si se trasmitia a los herederos, con su correspondiente ius eligendi, tanto activa como pasivamente. 12—Ias eligendi: El derecho de escoger. I) En los casos de obligacidn alternativa, el derecho de escoger una prestacién entre las varias, sefialadas tan sdlo de manera inde- terminada, correspondia al reus debendi, siempre que nada especial se hubiese pactado sobre este particular, requirién- dose en todo caso convencién especial de las partes, para que el ius electionis pudiese recaer en la persona del reus credendi. Pero tanto en un caso como en otto, el derecho de escoger entre las varias prestaciones, ora fuese su titular 2 LIBRO Il, CAPITULO 1 el reus debendi, ora el reus credendi, formaba, segiin decia- mos hace poco, parte esencial de la relacién juridica, en estudio; y por este motivo pasaba junto con ella a los here- deros del primero o del segundo. 2) Cuando el ius electionis pertenecia al reus debendi y se hiciera imposible el cumplimiento de una de las varias prestaciones, por caso fortuito, la obligacién hasta entonces alternativa se convertia en simple, con’ simplicidad absoluta 0 relativa, segtin los casos: lo cual significa que el deudor quedaba obligado a cumplir la otra o las otras prestaciones atin posibles, conforme fuesen una o varias las remanentes. Si la imposibilidad en cuestién era motivada por dolo © culpa det reus credendi, al reus debendi se le reconocia el derecho para reclamar la compensacin de los dajios y perjuicios que de ello se le originaran; porque podia muy bien acontecer que la prestacién remanente fuera superior, atendido su valor econémico-social, a la prestacién ya eli- minada por dolo o culpa det acreedor ' Hasta aqui las normas del Derecho Imperial Clasico sobre el ius eligendi en el caso de las obligaciones alter- nativas, El Derecho Justinianeo introdujo en esta parte varia~ ciones muy notables, que pueden resumirse de la siguiente manera: a) Si llegaba a perecer por caso fortuito uno de los varios objetos que constituian el fondo de la obligacién alternativa, el reus debendi podia librarse pagando su valor. Sea el ejempio de una stipulatio, en cuya virtud el reus debendi 0 promittens tuviera la obligacién de entregar al reus credendi 0 stipulans el esclavo Estico, que valia diez mil sestercios, 0 el esclavo Pénfilo, cuyo ‘precio en buen mercado ascendia a veinte mil. : Mas, si la prestacién se hubiese hecho imposible por dolo o culpa del propio reus debendi, tal facultad se le reco- nocia tinicamente para el caso de que no resultara perju- dicado con ello en sus intereses econdmicos el acreedor. Sea el ejemplo de la stipulatio relacionada con la entrega 1 Dig., 1%, 2, 85, DEFINICION ¥ DIVISION DE LAS OBLIGACIONES. 23 de dos esclavos, cada uno de los cuales valiera diez mil sestercios. Si se hacia imposible la unica prestacién remanente sin dolo ni culpa por parte del reus debendi, cuando las otras se hubiesen hecho imposibles por dolo o culpa suyos, enton- ces, con arreglo al Derecho Imperial Clasico, la obligacién alternativa se resolvia o extingula por completo e ipso faclo. Pero Justiniano, mas en armonia con los postulados ‘de la justicia y equidad naturales, establecié que el reus debendi pudiera ‘en tales casos ser obligado ante los tribunales por medio de la actio doli, a resarcir todos los dafos y per- juicios causados por su inicuo proceder, al reus credendi! 5) Cuando el derecho de escoger perteneciera al reus credendi 0 stipulans, y llegara a hacerse imposible una de las varias prestaciones: ‘si esto acontecia por caso fortuito, la obligacién se trasformaba en simple, con simplicidad abso- lutao relativa, a la manera antes ‘explicada. Empero si sucedia esto mismo por dolo o culpa del propio reus cre- dendi, entonces: Segtin unos, podia éste reclamar la otra prestacién, © una de las otras ain subsistentes, segiin la diversidad de los casos; advirtiendo que el reus debendi tenia a su turno en tal caso el derecho para exigir el id quod interest, © sea, la indemnizacién por concepto de tos dafios y per. juicios, siempre que la primera le hubiese sido menos costosa. Segtin otros, nada podia reclamar el reus credendi, toda vez que al hacer imposible, por dolo o culpa suyos, una de las varias prestaciones in obligatione, se presumia con grave y s6lido fundamento que la escogié quasi in solu- tione en vez de las otras. Por iiltimo, si la imposibilidad de una de las varias prestaciones tuvo su razén de ser en el dofo o culpa del reus debendi, podia el reus credendi exigir, a su libre eleccién, © el cumplimiento de la prestacién tinica o de una de lag varias atin remanentes, o también el id quod interest, por juzgar mds ventajoso para si, desde el angulo econémico 1 Dig. XLvt, 3, 97; Silvio Petozzi, Istituziont di Diritto Romano, vol. ty 126, nota primera, 24 LIBRO III, CAPITULO t y del interés, el cumplimiento de la primera prestacién dolosa © culpablemente eliminada por el reus debendi’. 13—Se discute en torno al hecho que hacia definitive y por ende irrevocable la escogencia de una entre las varias prestaciones. En otros términos, se desea fijar si, y hasta qué punto, subsistia el derecho de cambiar la eleccidn, una vez Hevada a término: izs variandi, de que nos hablan los intérpretes. Para dar solucién cumplida a este problema juridico, es necesario, ante todas cosas, distinguir varias hipdtesis, tomando en cuenta al propio tiempo el modo peculiar como se constituyé el titulo 0 sea el fundamento de la obliga- cién alternativa. En el legatum per damnationem ?, cuyo contenido impor- tara una obligacién alternativa, por ejemplo en esta forma: Stichum aut Pamphilum, utrum heres meus volet Titio dato: Mi heredero dard a Ticio uno de los esclavos, o Estico © Panfilo: bastaba la simple declaracién del heres institu- fus para que la escogencia infer plures praestationes se considerara definitiva e irrevocable *, He aqui cémo se expresa a este respecto el juriscon- to Salvio Juliano en su Liber trigesimus tertius Digestorum: Stichum aut Pamphilium, utram heres meus volet Titio dato. St dixerit heres Stichum se velle'dare, Sticho mortuo liberabitur. Cum autere semel dixerit heres wtrum dare velit, mutare sententiam non: potert: El testador ordend a su heredero que entregara a Ticlo uno de sus dos escla~ vos, Estico © Panfilo. Ahora ‘bien, sivel heredero declara que quiere entregarle a Estico, una vez muerto éste, quedard libre, En cambio, tan Bronio como hicieré la eleceién entre lob dos, no podrd hacer ningin En el caso de la stipulatio alternativa con el derecho de escoger en favor del creditor, habia que subdistinguir. Si en la redaccién de la stipulatio figuraba la formula sacra 1 Silvio Perozzi, 1. c, nota segunda 2 Del legado y de sus varias clases tratard el libro. que le dedicaremos mas tarde et este mismo. volumen al derecho sucesorio. Pot alora baste saber ue el legado era per damnationem cuando el heres institutus recibia del testador el encargo de poner este o aguel valor” determinado en las manos y poder del legatario, de suerte que éste, por virtud del testamento, Tuese acreedor con un ius ad rena contra'el heredero. 3 Dig., xxx, 8, 9 4 iden DEFINICION Y DIVISION DE LAS OBLIGACIONES 25 mental quem voluero: a quien quisiere, la eleccién una vez hecha no se podia revocar. A la inversa, si se empled la formula también sacramental si volam: si’ querré, se permi- tia la variacién: ius concedebatur variandi. Fuera de estos casos, la eleccién se juzgaba definitiva e irrevocable, no con la simple declaracidn: escojo ésta 0 aguélla entre las varias prestaciones, sino con él cumpli- miento efectivo de una de ellas. Por tanto, antes de que la praestatio semel electa hubiese sido de facto exsequutioni mandata, era licito cambiarla, a menos que la hubiese aceptado la contraparte. En este caso la obligacién, con arreglo a las prescripciones del ius civile, continuaba siendo alternativa, pero el deudor que tuviera interés en evitar se levara a’ término la variatio electionis, podia oponer ante los tribunales la exceptio pacti contra el acreedor empefiado en proceder alternativamente; exceptio que, aun cuando fuera contrario a las normas establecidas en el ius civile, tenia, con todo, el respaldo y favor ampli- simos por parte de los pretores '. El cumplimiento s6lo parcial de la praestatio no impor taba, en su concepto juridico, eleccién definitiva e irrevo- cable. Y asi, el promittens que debia al stipulans 0 el siervo Estico o diez monedas de oro, y le pagé cinco, estaba en su derecho para entregarle el ‘siervo Estico reclamandole, al propio tiempo, la restitucién de las cinco monedas *. 14 b) Obligaciones genéricas—Llimanse obliga- ciones genéricas aquéllas cuyo objeto no se determina indi- vidualmente, sino tan s6lo declarando el género —filoséfi- camente mejor se diria especie— a que pertenecen; por ejemplo, un caballo, un esclavo, o una finca. La obligacién genérica tiene su_parentesco con la obli- gacidn alfernativa, por cuanto en ninguna de las dos se determina de manera precisa el objeto propio de la obliga- cidn. Su diferencia consiste en que los objetos que cons- tituyen Ia obligacién alfernativa se determinan individual- mente, pertenezcan 0 no al mismo género: por ejemplo, este 1 Die 2 Bi 14, 21, 6, 6, 26, 13, 26 LIBRO I, CAPITULO 1 siervo, aquel caballo 0 aquella casa. Lo cual no sucede en la obligacién genérica, pues aqui la determinacién recae en el género, en cuanto comprende verios individuos, no deter- mindndose ninguno de ellos en particular: por ejemplo, un siervo, un caballo o un fundo riistico. Por lo que concierne a la ejecucién de las obligacio- nes genéricas: 1) Salvo pacto en contrario, el Derecho Imperial Clasico ordenaba que el reus debendi pudiera librarse dando el peor de los objetos comprendidos dentro del género, si la facul- tad de elegir le pertenecia a él, de acuerdo con el princi- pio universal en esta materia, 2) Por el contrario, en tiempo de los principes Seve- ros —193 a 235 de nuestra éra— se establecid que cuando la facultad de elegir pertenecia, por excepcidn, al reus cre- dendi, no pudiera éste escoger el mejor de los objetos, slo genéricamente determinados, a menos que dicha facultad se Te hubiese concedido in terminis y de manera expresa en €l acto mismo de constituirse la obligacién '. 3) Una vez hecha la eleccién del objeto, la obligacién genérica se concentraba en él, con arreglo a lo que diji- mos antes: de forma que si perecia, por cualquier caso for- tuito, Ia pérdida era en todo caso para el acreedor. 15 c) Obligaciones ilicitas—Empecemos por tras- cribir el siguiente pasaje de las Pandectas: Generaliter novimus tarpes,stipulationes nullius esse moment veluti si quis homicidium vel sacrifegium se Juturum promittat: Podemos alt= maf en términos generales que las estipulaciones.torpes o illeltas son nulas on nulidad absolula. Asi, por ejemplo, seria pertectaniente inva- Tido et compromiso que asumiera un individeo de Hlevar a realidad un homicidio 0 un saerilegio 2 Emilio Papiniano aplica la doctrina general que se acaba de exponer, al caso concreto y particular de los tes- tamentos contrarios a la ley: Filius, qui fut in potestate, sub conditione seriptus heres, quam senatus aitt principes improbant, testamentum infirmat patris, est con ditio nom esset it eius potestate,'Nam quae facta laedunt pietatem, existi- ‘mationem, verecundiam nostram et, ut generaliter dixerint, contra bonos

También podría gustarte