GUA DE EJERCICIOS DE NARRADORES

Reconozca en los siguientes ejemplos los tipos de narradores.

1) Desde aquel da nuestros momentos amorosos fueron ms alejados.
2) La primavera es la estacin del ao ms romntica y peligrosa a la vez, pens la
jovencita antes de escribir en su diario.
3) En el camino polvoriento, lleno de animales sueltos y alocados, corran unos
deportistas para encontrar el tesoro escondido
4) Antes del amanecer, el seor se levant y sali a trotar como de costumbre, luego
sinti una molestia en su lado izquierdo, su mdico le advirti que no poda
ejercitarse
5) En medio del patio estaban todos los estudiantes, vestidos de gala, con hermosos
peinados las nias y elegantes corbatas los varones.
6) Estbamos todos juntos cuando repentinamente Armando sali a buscar algo
indeterminado, volvi de madrugada, feliz sin decir nada.
7) La lluvia fra caa sobre mi cabello, me molest en un principio, luego me sent
regocijada.
8) Los computadores del establecimiento educacional, se encuentran en perfectas
condiciones, a pesar de que algunos estudiantes pretenden romperlos.
9) Nunca necesit reconocer sus errores, pens el padre cuando recordaba a su hijo.
10) Pensaba todas las noches en aquella situacin grave que le aproblemaba.
11) Diez das haban pasado desde que tuvo lugar aquella penosa conferencia. No
sintindome capaz de cumplir con los deseos de mi padre sobre la nueva especie de
trato. (Mara, J. Isaacs)
12) La luna, que a acababa de elevarse, llena y grande, bajo un cielo profundo, sobre
los montes, iluminaba las faldas de las montaas. (Mara, Jorge Isaacs)
13) Emilia estaba sufriendo. Su hombre pareca ms hurao y sombro que de
costumbre. Dorma mal. (Llampo de sangre, Oscar Castro)
14) Era la poca de exmenes y yo tena que estudiar ms de lo que costumbre
(Demian, H. Hesse).
15) No tena muchas ideas pero trabajaba. Sonrea con sus largos dientes y sus
descarnados labios. No era un gran personaje pero haba tomado parte en grandes
manifestaciones de masas. (Sombras contra el muro, Manuel Rojas)
16) El nio, perdido ya el recuerdo del que se fue cuando l tena tres o cuatro aos,
mira al sealado como a los dems. (Sombras contra el muro, Manuel Rojas)
17) Su cabeza giraba repasando el contorno de aquel panorama y sus ojos brillaban
intensamente, como la nica cosa viva en su cara reseca: (Llampo de sangre, Oscar
Castro)

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