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Transmisi6én de sefiales entre células EX registro fsil sugiere que hace 3.5 mil millones de afios ya existfan sofisticados or- sganismos unicelulares parecicios alas bacterias actuales, pero que al parecer fueron necesarios otros 2.5 mil millones de afios para que apareciera el primer organismo pluricelular (véase Figura 1-17). :Por qué la pluricelularidad tard tanto en evol- cionar? Aunque no podemos conocer la respuesta parece que esta cuestién est re- lacionada con la necesidad de los orgnismos pluricelulares de elaborar sefiales que permitieran a sus eélulas comunicarse entre si, de forma que pudieran coor nar su comportamiento en beneficio del organismo como un todo. Las sefiales in- tercelulares, interpretadas por complejas maquinarias de la célula que responde a elas, permite a cada célula determinar su posicién y su papel especializado en el cuerpo y, por ejemplo, asegurar que cada célula se divida tinicamente cuando sus vecinas dicten que ello puede ser posible. La importancia de estos “controles socia~ Jes” sobre la division celular se hace aparente cuando el control falla, dando lugar a ‘un cdincer, que habitualmente mata el organismo pluricelular. ‘A medida que vamos disponiendo de técnicas sofisticadas y potentes que nos permiten estudiar las*células y los mecanismos que utilizan para comuni carse entre sf, lentamente vamos comprendiendo los procesos de senalizacién que utilizan los eucariotas superiores. Una célula animal contiene un elaborado sistema de proteinas que le permite responder a sefiales que provienen de otras células. El sistema incluye proteinas receptoras de la superficie celular, protei- nas receptoras intracelulares, proteina quinasas, proteina fosfatasas, proteinas que unen GTP y el enorme numero de proteinas intracelulares con las que inter- actian estas proteinas de serial. En este capitulo discutimos en primer lugar los principios generales de la seftalizacién intercelular. En las dos secciones siguien- ies consideramos las dos principales familias de proteinas receptoras de la super- ficie celular, y como generan sefales intracelulares. A continuacién examinamos de qué forma las células se adaptan continuamente para responder de forma ser sible a pequefios cambios de concentracién de moléculas sefial extracelulaes nalmente consideramos una analogia de las redes neuronales, basada en los or- denadores, que nos proporciona sugerencias sobre la forma en que trabajan las complejas redes de sefiales intracetulares. Principios generales de la sefializaci6n celular! Casi con toda seguridad los mecanismos que permiten a una célula influir en el comportamiento de otra célula ya existfan en el mundo de los organismos unice- ™m™ ay SeNaL cetuta DIANA, 82001 receptor lulares mucho antes de que los organismos pluricelulares aparecieran sobre la Tierra. Algunas evidencias de ello provienen de estudios realizados en eucariotas uunicelulares actuales, como las levaduras. A pesar de que normalmente estas cé- lulas levan una vida independiente, pueden comunicarse entre si, y cada una de ellas puede influir en la proliferacién de otra, en preparacién del acoplamiento sexual. En la levaclura de gemaciin Saccharomyces cerevisiae, por ejemplo, cuan- do un individuo haploide est4 preparado para el acoplamiento, segtega un pépti do denominado factor de acoplamiento que constituye una senal para que las cé: lulas cuyo tipo de acoplamiento es el contrario dejen de proliferar y se preparen para la conjugacién; la fusion de dos células haploides de tipo de acoplamiento contrario produce una célula diploide, la cual entonces puede sufrir una meiosis, y esporular, generando células haploides con una nueva dotacién de genes. Estudios sobre levaduras mutantes que son incapaces de acoplarse han per- mitido identificar muchas proteinas que son necesarias para este proceso de se- fializaci6n, Estas proteinas forman una red de sefializacién que incluye recepto- tes de superficie celular, proteinas que unen GTP y proteina quinasas, cada una de las cuales tiene parientes cercanos entre las proteinas que participan en la se- fializaci6n de las células animales. Sin embargo, a través de la duplicacién géni- cay de la divergencia, los sistemas de sefializaci6n de los animales se han vuelto mucho més elaborados que los de las levaduras. Las moléculas seal extracelulares son reconocidas por receptores espeeificos de la superficie o del interior de las células diana® Mientras que las eétulas de levadura se comunican entre ellas para acoplarse, se: cretando diversos tipos de pequenios péptidos, las células de los animales superio- res se comunican mediante centenares de tipos de moléculas sefial, incluyendo protefnas, pequefios péptidos, aminodcidos, nuclestidos, esteroides, retinoides, derivados de Acidos grasos, e incluso gases disueltos como el Gxido nitrico y el monxido de carbono. La mayoria de estas moléculas sefial estan secretadas por las aélulas senal mediante exocitosis (véase Capftulo 13). Otras se liberan por difu- si6n a través de la membrana plasmatica y s6lo influyen en las células que estén en contacto con la célula senalizadora (Figura 15-1). Sea cual sea la naturaleza de la molécula seftal, la célula diana responde me- diante una proteina especifica denominada receptor. Se une especificamente a la molécula sefial, y entonces inicia una respuesta en la célula diana, Muchas de las moléculas sefial extracelulares acttian a concentraciones muy bajas (tipica- mente <10-*M), y los receptores que las reconocen usualmente se unen a ellas con una elevada afinidad (constante de afinidad K, > 10° litros/mol; véase Figura 3-9), En la mayorfa dle los casos los receptores son proteinas transmembrana de 772 Capitulo 15 :Transmisién de sefiales entre células Figura 15-1 Sefalizacién intercelular cen animales, Se ilustran dos sistemas a través de los que las células animales rocapord ‘momigrana plasmitice suparfcle. motdcula sons! Risrotiies pequesa motécula Jona nisrtobies receptor intracelilr Figura 15-2 Las moléculas seal cextracelulares se unen a receptores de In superficie celular oa receptores intracelulares. La mayoria de las ‘moléculas senal son hidroflicas, por lo ‘que son incapaces de atravesar directamente la membrana plasmatica; en lugar de ello, se unen a receptores de la superficie dela cétula los cuales, a su vez, generan tuna 0 varias senales en el interior de la célula diana. Porelcontrario, algunas pequerias moléculas senaldifunden a ‘raves de la membrana plasmatiea y se ‘unen a receptores situados en el interior dela célula diana -en el citosol en el micleo (como se observa en la figura), Muchas de estas pequefias ‘moléculas senal son hidrof6bicas y casi insolubles en soluciones acuosas; por ello, son transportadas a través det torrente sanguineo y de otros fluidos extracelulares, unidas a proteinas tansportadoras, de las que han de disoclarse antes de entrar a la célula diana, las superficie de las células diana; cuando se unen a una molécula sefal extrace- lular (un ligando) se vuelven activos, de forma que generan una cascada de sefia~ les intracelulares que alteran el comportamiento de la céhila, En algunos casos, sin embargo, los receptores estan situados en el interior de la célula diana, y et li- gando sefial entra a Ja célula para activarlos: estas moléculas sefial, por lo tanto, han de ser suficientemente pequefias e hidrofobieas para poder difundir a través dela membrana plasmatica (Figura 15-2). En este capftulo nos centraremos fundamentalmente en el estudio de la co- municacién entre células animales mediada por sehales quimicas segregadas. Este énfasis refleja el estado actual de conocimientos sobre el tema: las moléculas segregadas son mucho mds faciles de estudiar que las moléculas unidas a mem- brana, por lo que conocemos muchos mas detalles de su actuaciGn. La seftaliza- cidn dependiente de contacto, via moléculas unidas a membrana, es mucho mas dificil de estudiar y por ello mucho peor conocida, pero es de crucial importancia especialmente durante el desarrollo y en la respuesta inmune; como veremos mas adelante, la base molecular de este sistema de comunicacién puede ser simi- Jara la de la seftalizacidn a distancia, Las moléculas secretadas median tres formas de seftalizacion: la paracrina, la sindptica y la endocrina? Las moléculas seftal que segrega una eélula pueden ser transportadas a largas distancias para que actien sobre células diana muy alejadas, o pueden actuar como mediadores locales afectando tinicamente las células del ambiente inme- diato de la célula sefial. Este tltimo proceso se denomina seftalizacién paracri- na (Figura 15-34), Para que las sefiales paracrinas solamente afecten a las célu- las diana més cercanas, es necesario que las moléculas seftal segregadas no puedan difundir mucho; por esta raz6n habitualmente son captadas répidamen- te por las eélulas diana vecinas, destruidas por enzimas extracelulares 0 inmovi- lizadas por la matriz.extracelular. Para un organismo pluricelular, grande y complejo, la seNalizacién de corto alcance no es suficiente para coordinar el comportamiento de sus células. Por ello han evolucionado conjuntos de células especializadas en la seftalizacion en- tre partes del cuerpo muy separadas entre sf, Las mas sofisticadas de ellas son Jas células nerviosas, o neuronas, las cuales tipicamente emiten largas prolonga- ciones (axones) que entran en contacto con c¢lulas diana alejadas. Cuando es activada por sefiales del ambiente o de otras células nerviosas, la neurona envia impulsos eléctricos (potenciales de accién) a lo largo de su ax6n; cuando uno de estos impulsos llega al terminal nervioso, en el extremo del ax6n, estimula al ter- minal para que segregue una seal quimica denominada neurotransmisor. El terminal nervioso entra en contacto con su cétula diana a través de uniones ce- lulares especiales denominadas sinapsis quimicas, las cuales parecen estar dise- fpadas para asegurar que el neurotransmisor sea liberado sobre la membrana postsinaptica de la célula diana, répida y especificamente (Figura 15-3B). Este PARACRINA en] ou fa @ = S oft nova mene — ra Principios generales de la sefializacién celular Figura 15-3 Tres formas de ‘sefalizacién mediadas por moléculas ‘segregadas. En las sefializaciones paracrina, sinaptica y endocrina se utilizan muchos tipos iguales de rmoléculas sefal Las diferencias cruciales radican en la velocidad yen la selectividad con las que son liberadas as sefialesa sus eétulas diana. 773 Figura 15-4 Contraste entre las sefializacién endocrina y la singptica. Las ‘clus enxlocrinas las células nerviosas actian conjuntamente ‘oordinando las diversas actividades de los miles de millones de células de ‘un animal superior. Las eélulas endocrinas segregan a la circulacién muchos tipos diferentes de hormonas, para senalizar células diana especiticas, Las, células diana tienen receptores que se unen especificamente alas hormonas, de forma que tienen que “atrapar” del liquido extracelular las hormonas ‘adecuadas, En la sefalizacion sinptica, por el contrario, a especificidad reside en los contactos entre las prolongaciones nerviosas y las células nerviosas determinadas que sefalizan: habitualmente sélo la célula diana {que se halla en contacto sindptico con la céhula nerviosa esta expuesta al neurotransmisor liberado por el terminal nervioso (a pesar de que algunos neurotransmisores actian de una manera paracrina como mediadores Jocales que infTuyen sobre muchas células diana en una ciertadrea). Mientras que diferentes células endocrinas han de utilizar diferentes hormonas para conseguir comunicarse especificamente con sus eélulas diana, muchas Célula nerviosas pueden utilizar el mismo neurotransmisory, a pesar de ello, comunicarse también de una forma especifica, proceso de sefializacién sinéptica se trata en detalle en el Capitulo 11, por lo {que no seré considerado aqui. Las otras células sefial especializadas que controtan el comportamiento del organismo como un todo son las eélulas endocrinas, Segregan sus moléculas se- ‘al, denominadas hormonas, en el torrente sanguineo (de un animal) o en la savia (de tuna planta), los cuales transportan la seftal hasta las células diana distribuidas ampliamente por todo el cuerpo (Figura 15-3C). En la Figura 15-4 se contrastan los diferentes sistemas a través de los cuales las células endocrinas y las células ner- viosas coordinan el comportamiento celular en los animales. Como la senalizacién endocrina depende de la difusién y del flujo sangui- neo, es relativamente lenta, Las células nerviosas, por el contrario, pueden al- canzar una velocidad y una precision mucho mas elevadas. Pueden transmitir informaci6n a grandes distancias mediante impulsos eléctricos que transportan Ja sefial a lo largo de las prolongaciones nerviosas, a velocidades de hasta 100 ‘metros por segundo. Una vez liberado por un terminal nervioso, un neurotrans- misor difunde no mas de 100 nm de la célula diana, un proceso que dura menos de un milisegundo, Otra diferencia entre la transmisién endocrina y la sindptica es que, mientras que las hormonas se diluyen enormemente en la sangre citcu- Jante y en el liquide intersticial, por lo que han de poder actuar a concentracio- nes muy bajas (tipicamente <10*M), los neurotransmisores se diluyen mucho menos, pudiendo llegar a alcanzar concentraciones locales altas. Por ejemplo, la concentraci6n del neurotransmisor acetilcolina en la hendidura sinaptica de tuna uni6n neuromuscular activa es de alrededor de 5x 10M. Por lo tanto, en la seftalizaci6n sindptica los receptores de los neurotransmisores tienen una afini dad relativamente baja para sus ligandos, lo cual significa que el neurotransmi- sor puiede disociarse rapidamente del receptor, con lo que acaba la respuesta. (Los neurotransmisores son répidamente retirados de la hendidura sinaptica, tanto por enzimas hidroliticas especificas como por proteinas de membrana que {ransportan especificamente el neurotransmisor, bombedndolo de nuevo hacia el erminal nervioso o hacia las células gliales vecinas.) La sefializacién autocrina puede coordinar decisiones de grupos de células idénticas ‘Todas las formas de seftalizacién que hemos descrito permiten a un tipo celular influir sobre otto tipo celular. Sin embargo, mediante el mismo mecanismo las cé- lulas pueden enviar sefales a otras células del mismo tipo, de lo que se deduce ‘que pueden enviarse incluso sefiales a ellas mismas. En una sefializacién de este tipo, denominada autocrina, una célula segrega moléculas seal que pueden 774 Capttulo 15: Transmisién de sefiales entre células S erelacion anuines 1B) SERAUIZACION SINAPTICA vorasoflas dons o¢,® LUNA SOLA CELULA SERAL EN UN GRUPO DE CELULAS SENAL FECIBE UNA SENAL AUTOCRINA IDENTICAS, CADA CELULA RECIBE UNA MAS DEBI 'SENAL AUTOCRINA MAYOR Unirse a receptores de la propia célula. Durante el desarrollo, por ejemplo, cuando ‘una célula ha sido dirigida a una etapa determinada de diferenciacién, puede co ‘menzar a segregar sefiales autocrinas que refuercen esta decisién de desarrollo. La sefalizacién autocrina es més efectiva cuando se lleva a cabo simultinea- ‘mente por varias células vecinas de! mismo tipo, por lo que puede utilizarse para estimular a grupos de células idénticas para que tomen las mismas decisiones de desarrollo (Figura 15-5). Asf, se cree que la sefializaci6n autocrina constituye un, posible mecanismo sobre el que se basa el “efecto comunitario” observado en las primeras etapas del desarrollo, segiin el cual un grupo de células idénticas puede responder a sefales que inducen diferenciacién mientras que una célula, aislada no puede hacerlo, Pero, la sefalizacién autocrina no se produce s6lo durante el desarrollo. Los elcosanoides son moléculas sefial que a menudo actiian de una forma autocrina cen los mamfferos maduros, Estos derivados de Acidos grasos estan sintetizados por células de todos los tejidos de mamifero. Se sintetizan continuamente en la membrana plasmética y st liberan al exterior celular, donde son répidamente de- ¢gradados por enzimas del medio extracelular. Sintetizados a partir de precursores (principalmente de deido araquidénico) liberados a partir de los fosfolipidos de la membrana celular mediante la accién de fosfolipasas (Figura 15-6), tienen una gran variedad de actividades biol6gicas; por ejemplo influyen sobre la contrac cin del missculo liso y la agregacién de las plaquetas y participan en las respues- YY" festotipide de ‘membrana § NN INOW x tivo aguanigs (VA COOH ee = i ee ° congciniret GeSeeet aes “ i Principios generales de la sefializacién celular Figura 15-5 Sefializact6n autocrina. Un grupo de células idénticas produce ‘oncentraciones de molécula serial ‘més elevadas que una eélula sola. Figura 15-6 La sntests de un, eicosanoid. Los eicosanoides son Continuamente sintetzados en las ‘membranas, a partirde cadenas de ficidos grasos de 20 carbonos que contengan, al menos, tres dobles enlaces, como se muestra en (A) para el caso dela sintess de prostaglandina PGE, Hl subindice se refiere alos dos dobles enlaces carbono-carbono situados fuera del anillo de PGE,, Fxisten cuatro clases principales de eicosanoids “as prostaglandlinas las prostaciclinas, los tromboxanos y los leucoirienos-y todas elas estén sintetizadas a partir del dcido araquidnico. La sintesis de todas ellas, ‘excepto delosleucotrienos, se produce porlaaccidn de la ciloaxigenasa; la sintesis de los leucotrienos se produce porlaaccién dela liparigenasa (8). Estas etapas biosintéticas son diana de luna gran eantidad de drogas terapesiticas, ya que los eicosanoides son importantes en procesos de dolor, Slebre einflamacién, Por ejemplo, las hormonas cortcoesteroideas, como el cortisol, inhiben a actividad de ia fosfolipasa dela primera etapa dea sitesi de eicosanoides, porlo que son ampliamente utlzades clinicamente para tratar enfermedades inflamatorias 1o infecciosas, como son algunas, formas de artis, Por el contrarlo, ddrogas antinflamatorias no esteroideas, ‘como la aspirina el bupofrén, bloquean a primera etapa de xdacién, catalizada porla cilooxigenasa. Algunas prostaglandinas producidas en ‘grandes cantidades en el dtero en el ‘momento del parto y que estimulan la ‘contraccién del muisculo liso uterino, se utilizan para inducir abortos. ido araquirico prostapiandlinas loucotionoe prosacielinas tromboxenc 715 tas inflamatorias y febriles. Cuando las células se activan por dafo tisular 0 por algiin tipo de senales quimicas, se incrementa la velocidad de sintesis de ecosa- noides; el incremento resultante de los niveles locales de eicosanoides iniluye tanto sobre las células que los sintetizan como sobre sus vecinas inmediatas. Las uniones comunicantes permiten que la informacién de sefializacién sea compartida por las células vecinas' tra via para coordinar las actividades de las células vecinas consiste en las unio- nes comunteantes 0 de tipo gap. Se trata de uniones especializadas célula-célula ‘que pueden formarse entre membranas plasmaticas situadas en estrecho contac- to, y que conectan directamente los citoplasmas de las eélulas que unen, a través de estrechos canales llenos de agua (véase Figura 19-15). Los canales permiten el intercambio de pequefias moléculas sefial intracelulares (mediadores intracelula- res}, como el Ca” yel AMP ciclico, pero no el de macromoléculas como protefnas ¥ dcidos nucleicos. Asf pues, las c¢lulas conectadas por uniones de tipo gap pue- den comunicarse entre ellas directamente, sin tener la dificultad de la barrera ‘que supone la presencia de las membranas plasmaiticas (Figura 15~ Como se discute en el Capitulo 19, el patrén de distribucién de las conexio- nes comunicantes en tn telido puede ponerse de manifiesto tanto eléctricamen- te, con electrodos intracelulares, como visualmente, tras la microinyeecién de colorantes solubles en agua. Estudios de este tipo indican que las células de un embridn en desarrollo forman y deshacen untones comunicantes siguiendo pa- ‘trones especificos y muy interesantes, lo cual sugiere que estas uniones juegan un importante papel en los procesos de sefializacidn que tienen lugar entre estas céhulas. Puede sospecharse que, como en el caso de la sefializacién autocrina descrita con anterioridad, las uniones comunicantes colaboran en la coordina- cin del comportamiento de las células vecinas de tipo similar. Sin embargo, no sabemos qué pequefias moléculas en particular son importantes transportado- res de sefiales a través de las uniones comunicantes; tampoco se ha definido con precision cual es la funcién precisa de la comunicacién a través de las uniones de tipo gap en el desarrollo animal. Cada célula esté programada para responder a combinaciones especificas de moléculas sefial® Cualquier célula dada de un organismo pluricelular esté expuesta a muchas ~quizds cientos- sefiales diferentes de su entorno. Estas se?iales pueden ser solu- bles, estar unidas a la matriz extracelular o estar unidas a la superficie de las eé- lulas vecinas, y pueden actuar en varios millones de combinaciones posibles. La Célula responderd a esta selectividad de babel, de acuerdo con su cardcter espe- cffico adquirido mediante la progresiva especializacién celular, en el curso del desarrollo. Ast pues, una eélula puede estar programada para responder a un conjunto de sefiales, dferencisndose, a otro conjunto de sefales, proliferando, y aun tercer grupo de sefales, desarrollando algunas funciones especializadas. La mayoria de las células de los animales superiores, sin embargo, estén programadas para depender de un grupo especifico de sefiales simplemente para sobrevivir: cuando son deprivadas de las seftales adecuadas (por ejemplo, cen una placa de cultivo), las cétulas inician un programa suicidla y se autodestru- yen -un proceso denominado muerte celular programada, que se discute mas extensamente en el Capftulo 21 (Figura 15-8). Diferentes tipos de células requie~ ren diferentes conjuntos de seftales de supervivencia, y por ello su localizacion std restringida a diferentes ambientes en el cuerpo. Debido a que generalmente las moléculas seftal actian en combinaciones de elas, un animal puede controlar el comportamiento de sus células de una manera altamente especifica, utilizando una diversidad limitada de tales molé- culas: cientos de moléculas seal pueden utilizarse en millones de combinacio- nes diferentes, 776 Capitulo 15: Transmisi6n de sefiales entre células Figura 15-7 Seftalizacién a través de tuniones comunicantes. Las células {que estén conectadas por uniones comunicantes comparten las peqiteftas moléculas, incluidas las pequettas moléculas sefal intracelulares, por lo que pueden respondera sefiales extracelulares de luna forma coordinada. Diferentes células pueden responder de forma diferente ala misma sefial quimica® La manera especifica en que una cétula reacciona con su entomno, varia, en pri- ‘mer lugar, de acuerdo con el conjunto de protesnas receptoras que posee la célu- lay a través de las que detecta un conjunto particular de todas las seniales que le son asequibles y, en segundo lugar, de acuerdo con la maquinaria intracelular através de la cual la célula integra e interpreta la informacién que recibe. Ast, a menudo una misma molécula sefial tiene efectos diferentes sobre células diana diferentes. Por ejemplo, el neurotransmisor acetilcolina estimula la concentra- cién de las células del miisculo esquelético pero disminuye la frecuencia y la fuerza de contraccién de las células musculares del coraz6n, Bllo es debido a que las proteinas receptoras de acetilcolina de las células musculares esqueléticas son diferentes de las de las fibras musculares del coraz6n. Sin embargo, no siem- pre son las diferencias entre los receptores lo que explica las diferencias de efec- tos, En muchos casos la misma molécula senal se une a proteinas receptoras idénticas y produce respuestas muy diferentes en diferentes tipos de células dia- na, lo cual refleja diferencias en a maquinaria enzimdtica a la que estén acopla- dos los receptores (Figura 15-9). La concentracién de una molécula puede ajustarse répidamente sélo si la vida media de la molécula es corta® Es natural pensar en los sistemas de sefalizacién en términos de los cambios que se producen cuando se libera una sefial. Pero también resulta importante considerar qué ocurre cuando se elimina una senal. Durante el desarrollo a me~ nudo sefiales transitorias producen efectos duraderos: pueden desencadenar un cambio que persiste indefinidamente, através de mecanismos de memoria celu- Jar como los discutidos en los Capitulos 9 y 21. Sin embargo, en la mayoria de los casos, especialmente en los tejidos adultos, la respuesta se desvanece cuando cesa una sefial. La seftal actia sobre un sistema de moléculas que estén en conti- ‘Una misma molécula seftal puede inducir respuestas en eélulas diana diferentes. En algunos casos, ello es debido a que Ja molécula sefal se une a proteiinas receptoras diferentes, tal como se ihistra en (A) y(B). En otros casos, la molécula sehal se une a proteinas receptoras idénticas pero éstas activan respuestas diferentes en células diferentes, tal como seilustra en (B)y (C). En todos los casos mostrados aqui la moléeula seftal es la aceticotina (D). Principfos generales de Ia seftalizacién celular Figura 15-8 Sefalizacién combinatoria, Cada tipo de edula presenta un conjunto dereceptores que le permite responder a un conjunto correspondiente de moléculas sefial producidas por otras cchulas,Varias de estas moléculas seni acttian de forma combinada, rgulando ‘el comportamiento delacélula. Comose ‘muestra aqul, muchas odulasrequieren multiples sens (fechas verdes) para sobrevivirysenalesadicionales lechas ‘rojas) pata prolifera; si se depriva alas ‘fhulas ce todas esas seals inician un programa de muerte celular. (A) bra muscular esqueltica CONTRACCION (8) ora muscular cardiaca : -* : RELAJACION {0 oblula socretora on) ecm -4G- SECRECION. (cette ° at, nyc—l-o-—ch, ony bn, 77 one 10min i : 40min i : 200 min a 24 6 8 w tinuton desu ccna vl mints deaps de ee veloidad do Sinovataye dainsido enn fadorde 10 ‘Senay aumento on ato do 10 ww nuo recambio, de forma que cuando la sefial cesa el reemplazamiento de las moléculas viejas por moléculas nuevas borra las trazas de su accién. De ello se deduce que la velocidad de la reaccién para eliminar los efectos de la seftal de- pende de la velocidad del recambio de las moléculas a las que afecta la seal. Puede no resultar tan obvio que esta velocidad de recambio también determine la prontitud de la respuesta cuando la sefial se activa. Consideremos por ejemplo dos moléculas intracelulares X e Y, y que ambas se mantienen normalmente a una concentracién de 1000 moléculas por célula. La molécula X tiene una velocidad de recambio baja: es sintetizada y degradada a.una velocidad de 10 moléculas por segundo, de forma que cada molécula tiene una vida media de 100 segundos. A su vez, la molécula Y se recambia 10 veces mas répidamente: es sintetizada y degradada a una velocidad de 100 moléculas por segundo, de forma que cada molécula tiene una vida media de 10 segundos. Si una sefial que actia sobre la célula incrementa 10 veces las velocidades de sintesis tanto de X como de Y sin alterar las vidas medias, al final del primer se- gundo la concentracién de Y se habré inerementado unas 900 moléculas en cada célula (10 x 100 - 100) mientras que la concentraci6n de X s6lo se habra inere~ mentado 90 moléculas por célula. De hecho, después de que su velocidad de sintesis haya aumentado o disminuido abruptamente, el tiempo necesario para que una molécula llegue a medio camino entre su concentracién antigua y su nueva concentracién de equilibrio es igual a su vida media -es decir, es igual al tiempo que seria necesario para que su concentracién bajara a la mitad si se pa- rara completamente su sintesis (Figura 15-10), El mismo principio se aplica tanto a proteinas como a pequenias moléculas, y tanto a moléculas del espacio extracelular como intracelulares. Muchas protef- nas intracelulares que son degradadas répidamente tienen vidas medias cortas algunas de ellas sobreviven menos de 10 minutos; en la mayorfa de los casos se trata de protefnas cuyo papel regulador es clave, y cuyas concentraciones celula- res estén reguladas rdpidamente mediante cambios en la velocidad de su sinte- sis, De la misma forma, cualquier modificacién covalente de una proteina, que tenga lugar como parte de un proceso de rapido de sefializacién -habitualmente Ja adicién de un grupo fosfato a una cadena lateral de un aminoacido- ha de ser climinada continuamente a una gran velocidad para hacer posible tal sefializa- 778 Capitulo 15: Transmisi6n de sefiales entre células Figura 15-10 La importancia de un recambio répido. La figura muestra predicciones de las velocidades relativas de cambio de las concentraciones intracelulares de ‘moléculas que tienen diferentes velocidades de recambio, cuando sus velocidadies de sintesis disminuyen (A) ‘oaumentan (B) repentinamente en un factor de 10. En ambos casos la concentracién de las moléculas que normalmente son degradadas répidamente en la célula (lineas rojas) cambia rapidamente mientras que la concentracién de las moléeulas que normalmente son degradladas mé Tentamente (lineas verdes) cambia proporcionalmente mas despacio, Los ntimeros (en azu) del lado derecho de las grificas son las vidas medias aasumnidas para cada una de las diferentes moléeulas, cin, Més adelante discutimos en detalle algunos de estos procesos moleculares, para el caso de procesos de sefializacién que trabajan via receptores de superfi- cie celular. Sin embargo, los principios se aplican de forma general, como ilus- tran los siguientes ejemplos. El gas 6xido nftrico acttia como una sefial, uniéndose directamente a una enzima en el interior de la célula diana’ Appesar de que la mayoria de las seftales extracelulares estén mediadas por molé- caulas hidroiflicas que se unen a receptores situados en la superficie de la mem- brana de la célula diana, algunas moléculas sefal son suficientemente hidrof6bi- cas y/o suficientemente pequefias para atravesar facilmente la membrana de la célula diana; una vez en el interior, regulan directamente la actividad o la especi- ficidad de una proteina intracelular. Un ejemplo remarcable lo constituye el gas PROTEINA IVHIBiD0RA FOSFORILADA INKIBE CAPROTEINA FOSPATASA, 794 Capitulo 15: Transmisi6n de sefiales entre células rentes formas. Todas las células eucariotas tienen en su membrana plasmética tuna ATPasa que utiliza la energia de la hidrélisis del ATP para bombear Ca’ ha- cia el exterior del citosol. Las eélulas tales como las musculares y las nerviosas, que utilizan de forma intensa el sistema de senalizacidn del Ca’, disponen en su membrana plasmética de otra bomba de Ca” adicional, que acopla el eflujo de Ca** a un influjo de Na’. Este intercambiador Ca*-Na* tiene una afinidad por el Ca relativamente baja, por lo cual tinicamente acttia de forma eficiente cuando los niveles citoplasmticos de Ca’ aumentan 10 veces por encima de sus valores hormales, tal como ocurre después de que una célula nerviosa o una célula mus- cular hayan sido estimuladas repetidamente. En la membrana de ER existe otra bomba que también desempefa un papel importante en el mantenimiento de ‘una concentracién baja de Ca* en el citosok: esta ATPasa dependiente de Ca’ permite al ER captar grandes cantidades de Ca del citosol, en contra del gra- diente de concentracién y aunque los niveles de Ca’* en el citosol sean bajos. Habitualmente, la concentracién de Ca® libre en el citosol varia desde 107 M cuando Ia estula esta en reposo, hasta alrededor de 5 x 10° M cuando esté ac- tivada por una senal extracelular. Sin embargo, cuando la célula esta dafiada y Sipuje macstra un ques de low no puede extraer Ca’ del citosol de forma eficiente, la concentracion. de Ca jnecanismos principales a eaves de los puede aumentar de forma peligrosa (>10* M), En estas circunstancias, comienza Gales la célula mantiene may bajas @ actuar una bomba de Ca" de baja actividad pero gran capacidad, situada en la Jas eoncentraciones de Ca en cl ‘membrana interna de la mitocondria, y utiliza el gradiente electroquimico gene- _citoso,en contra declevadas rado a través de esta membrana durante las etapas de transferencia de electro- __concentraciones de Ca’ en el uid nes de la fosforilacién oxidativa, para extraer Ca del citosol importindolo ala extracelular. £1 Ca" es bombeado itocondria. En la Figura 15-27 se resume este mecanismo. activamente deste el citoso al exterior de la cétula (A) yal interior de ER (B). ‘dems, en laeélulaexisten varios E1Ca* acttia como un mensajero intracelular ubicuo"® tipos de mokéculas que unen Calibre. Lapineraevidencia deta de que Cacia como un mediadrinraceuar [2HOmdcanbn pede proviene de un experimento realizado en 1947, que demostré que la inyeccién Pern osiyiohacede ome elcone intracelular de una pequena cantidad de Ca" provoca la contraccidn de las fi- Pardo jos niveles de Ca" son. bras musculares esqueléticas. Recientemente se ha puesto claramente de mani-_extremadamente altos -habitualmente flesto que el Ca** actiia como un mensajero intracelular en una amplia gama de como resultado de uma alteracidn de la respuestas celulares, entre las que se pueden destacara secrecién y la prolifera- eélula. ‘membrana plasesticn Figura 15-27 Controlesde la cancentracién citosdlica de Ca. El ee Hi painnere fie SefializaciGn via receptores de superficie celular asociados a protefnas G 795 smombrana plastic polarzada membrana plasmatien despoarizada ‘canal de Ca fagulado por ‘ola abvorto Feceptora ‘nostot tsfostato cién celular, Se han definido dos procesos en la sefalizacién por Ca, uno de ellos utilizado principalmente por células con actividad eléctrica (excitables) y el ‘tro utilizado por casi todas las células eucariotas. EI primero de estos procesos ha sido particularmente bien estudiado en las eélulas nerviosas, en las cuales la despolarizacién de la membrana plasmética provoca un influjo de Ca al inte- rior del terminal nervioso inicidndose la secrecién de un neurotransmisor; el Ga entra a través de canales regulados por voltaje que se abren cuando la membrana plasmatica del terminal nervioso se despolariza por un potencial de accidn que llega hasta el terminal (véase Figura 11-34). En el segundo proceso, que es ubicuo, la unién de moléculas senal extracelulares a receptores de super- ficie celular provoca la liberacién de Ca® del ER; los acontecimientos que ocu- rren en la superficie celular estén acoplados a la apertura de los canales de Ca» del ER a través de otra molécula mensajera intracelular, el inositol trisfosfato (Fi- ‘gura 15-28), como discutiremos después. Algunos receptores relacionados con proteinas G activan el proceso de sefializacién de fosfolfpidos de inositol activando la fosfolipasa C-B” En 1953 se sugitié por primera ver que los fosfolipidos de inositol (fosfoinositi- dos) desemperian un cierto papel en la transduccidn de la sefial extracelular, ‘cuando se descubri6 que algunas moléculas sefal extracelulares estimulan la in- ‘corporacion de fosfato radiactivo a fosfatidilinositol (PI, de phosphatidylinosi- tol), una clase minoritaria de fosfolipidas de las membranas celulares. Mas tarde se descubtié que esta incorporacién se produce por la degradacién y posterior sintesis de fosfolipidos de inositol. Se encontré que los fosfolipides de inositol mas importantes en la transduccién de la sefial son dos derivados fosforilados del PI, el PI-fosfato (PIP, de Pl-phosphate y el PI-bisfosfato (PIP). Se cree que ambos compuestos se hallan localizados principalmente en la cara interna de la membrana plasmatica (Figura 15-29). A pesar de que en las membranas de las céulas animales el PIP, es menos abundante que el Pl, es la hidrdlisis de PIP, la que es realmente importante en el proceso de sefializacién. La cadena de acontecimientos que lleva a la rotura de PIP,, empieza con la unién de una molécula sefial a un receptor unido a la proteina G de la membra- na plasmética, Se ha demostrado que més de 25 receptores de superficie diferen- tes utilizan esta via de transduccidn; en la Tabla 15-2 se presentan varios ejem- 796 Capitulo 15: Transmisi6n de sefales entre eélulas Figura 15-28 Dos procesos comunes através delos cuales el Ca puede entrar en el citosol en respuesta a sefiales extracelulares. Fn (A) el Ca® entra aun terminal nervioso desde el fuido extracelular a través de canales de Ca? regulades por voltaje, cuando Jamembrana del terminal nervioso es, despolarizada por un potencial de acci6n. En (B),la unidn de una ‘molécula sefal extracelular a un recepror de superficie celular genera inositol trsfosfato, el cual estimula la liberacién de Ca desde l ER, $ mae amy ie pwd 9 WE I cae Prainass -0-P=0 plos de respuestas mediadas de esta forma. Los detalles del proceso de activa- cidn no son tan bien conocidos como los del AMP ciclico, pero existen eviden- cias crecientes de que en la membrana plasmatica acttia el mismo tipo de meca- nismo constituido por varias etapas. Un receptor activado estimula a una proteina G denominada G, la cual, a su ver, activa una fosfolipasa C especifica de Josfoinositoles, denominada fosfolipasa C-8, En menos de un segundo, esta en- zima degrada el PIP, generando dos productos: inositol trisfasfato y diacilglicerol (Figura 15-30}. En este punto, el proceso de sefalizacién se bifurca en dos ra- mas. Ambas moléculas juegan papeles cruciales en la sefializacién celular, por lo que las consideraremos por separado, El inositol trisfosfato (IP,) acopla la activacion del receptor con la liberacion de Ca* del ER El inositol trisfosfato (IP,) producido por la hidrdlisis de PIP, es una pequefia molécula hidrosoluble que se libera de la membrana plasmatica y difunde ripi- damente por todo el citosol. Aly libera Ca" del ER unigndose a carsales liberado- res de Ce sensibles a IP, de la membrana del ER. Los canales son estructural- ‘Tabla 15-2 Algunas respuestas celulares mediadas por receptores unidos a rote{nas G, acoplados al proceso de sefializacién de los fosfol(pidos de inositol Tefido diana Molécula senal Respuesta principal Higado ‘vasopresina degradacion del lucogeno Pancreas acetileolina seerecién de amilasa ‘Maseulo liso acetilcolina contraecién Colula cebada antigeno seerecién de histamina Plaquetas sanguine trombina agregacion Sefializacién via receptores de superficie celular asociados a proteinas G Figura 15-29 Los fosfolipidos de inositol (fosfoinositidos). Los fosfoinositidos (PIPy PIP.) se pproducen por fosforilacion del fosfatidilinositol (Pf). A pesar de que los tres fosfolipidos de inositol pueden Udegradarse en el proceso de respuesta ‘una seal, la degradacisn mis: esla de PIP, pesar de que es el ‘menos abundante, ya que constituye ‘menos del 10% del total de lipidos ‘de inositol y menos del 1% del total de {osfolipides. o 8 OH ACTIVALA " disniaray — Pearce fostolipasa C-p) ee ert eee ae res oe ‘mente similares a los canales de liberacién de Ga’ (receptores de rianodina) del reticulo sarcoplasmitico de las células musculares, los cuales liberan el Ca* que desencadena el proceso de contraccién muscular (véase Figura 16-92). Ambos. ‘tipos de canales estén regulados por retroalimentacién positiva, ya que el Ca**li- berado puede unirse a los canales incrementando atin mds la iberacién de Ca’. Ello hace que la liberacién de Ca’* ocurra de una manera repentina, tipo "todo 0 nada”, En muchas eélulas incluyendo las células musculares, se encuentran am- bos tipos de canales liberadores de Ca Para acabar la respuesta inicial de Ca actian dos mecanismos: (1) el IP, es répidamente desfosforilado (y ast inactivado) mediante fosfatasas especificas, y 2) el Ca’ que entra en el citosol es répidamente bombeado hacia el exterior, principalmente hacia el exterior de la célula. ‘Sin embargo no todo el IP, es desfosforilado: algunas moléculas son fosfori- Jadas hasta 1,3,4,5-tetraquisfosfato (IP), el cual puede mediar respuestas lentas pero mas prolongadas en la eélula o facilitar la recuperacién de las reservas in- ‘tracelulares de Ca’ a partir del fluido extracelular. La enzima que cataliza la pro- ducci6n de IP, se activa por un incremento de la concentracion citosdlica de Ce inducida por IP, lo cual constituye una forma de retroalimentacién negati- va de los niveles de IP,. Amenudo las oscilaciones de Ca** prolongan la respuesta inicial de Ca** inducida por IP, Cuando se utilizan indicadores fluorescentes sensibles a Ca’, como la aecuorina, 0 fura-2 (se discute en el Capitulo 4) para estudiar las variaciones de los niveles citosdlicos de Ca°* en células individuales en las que se ha activado el proceso de sefializacién de fosfolipidos de inositol, a menudo se observa que la seftal inicial de Ca* se propaga como una ola a través del citosol desde una zona localizada 798 Capitulo 15: Transmisién de sefiales entre células Figura 15-30. Hidedlisis de PIP, La hhidrlisis de PIP, produce dos ‘mediadores intracelulares: el inositol trisfosfato (IP), el cual difunde a través del citosol y provoca laliberacién de Ca desde el ER, el diacilgicerol, que permanece en la membrana y colabora ena activaci6n dela enzima proteina quinasa C (véase mas adelante}. AL ‘menos existen tres clases de fosfolipasas C-B, 7 y8-yesla de clase Bla que se activa por receptores tunidos a proteina G. Més adelante ‘veremos que la clase yes activada por otra clase de receptores, denominados receptores tirosina quinasa, que activan el proceso de sehlizacion de {osfolipidos de inositol sin ninguna proteina G intermediaria. concentraciones de vasopresina 04 eM 060M 90M an | 00 loan om) 400) 200) a a a a aT) tiempo (minutos) de la célula, Ademés, a menudo el ineremento transitorio inicial de la concentra- cin de Ca* viene seguido por series de “espigas’ de concentracién de Ca, cada una de las cuales tarda en producirse del orden de segundos o minutos; es- tas oscilaciones de Ca pueden persistir mientras los receptores se mantengan activados en la superficie de la célula (Figura 15-31). EI mecanismo responsable de la propagacién de las olas de Ca y de la ge~ neracién de las oscilaciones no es conocido con certeza, a pesar de que se han propuesto una gran cantidad de modelos para explicarlo. En la mayorta de estos ‘modelos tanto la propagacién como las oscilaciones dependen de una retroali- ‘mentacién positiva, en la que el Ca** activa su propia liberacién produciendo ‘una espiga de Ca’ del “todo o nada’. Los modelos se diferencian entre sf princ! palmente en considerar si el Ca* acta directamente sobre los canales de libera- cidn de Ca’* del ER estimulando su propia liberacién, o bien si actia indirecta: ‘mente incrementando la actividad de la fosfolipasa C, generando asf oleadas de IP, que, a su ve7, inducirfan oleadas de liberacién de Ca” EI significado biol6gico de las oscilaciones de Ca también es incierto. A menudo su frecuencia depende de las concentracién del ligando sefial extra- celular (Figura 15-31) y puede, en principio, traducirse a respuesta celular de- pendiente de frecuencia. En células de la hipéfisis secretoras de hormona, por ejemplo, la estimulacién por una molécula sefal extracelular induce espigas repetidas de Ca’, cada una de las cuales est4 asociada con un pulso de secre- cién de hormona. Se ha sugerido que este hecho puede maximizar la secrecién impidiendo los efectos téxicos de un incremento sostenido de la concentra ign citosélica de Ca. El diacilglicerol activa la protefna quinasa C (quinasa C)* Al mismo tiempo que el IP, producido por la hidrélisis del PIP, inerementa la con- centracién de Ca’ en el citosol, el otro producto de hidrélisis ~et diacilglicero ejerce efectos bastantes diferentes. Tiene dos papeles funcionales potenciales, En primer lugar, puede ser posteriormente degradado, liberando dcido araquidénico que puede actuar como mensajero o ser utilizaco en la s{ntesis de eicosanoides {véase Figura 15-6); En segundo lugar, y mucho mas importante, activa una protef- na serina/treonina quinasa que fosforila varias proteinas de la célula diana, Sefializaci6n via receptores de superficie celular asociados a protefnas G Figura 15-31 Induectén de oscilaciones de Ca en una célula hepdtiea por vasopresina. Lacéiula fue cargada con la proteina sensible a Ca*, aecuorina, ya continuacién fue expuesta a concentraciones crecientes de ‘vasopresina. Notese que la frecuencia de las espigas de Ca" aumenta a ‘medida que aumenta la concentracin de vasopresina, pero que la amplitud de las espigas no se ve afectada, (Adaptado de N.M. Woods, K:S.R. Cuthbertson y PH. Cobbold, Nature 319:600-602, 1986. © 1986 Macmillan Magazines Ltd.) La enzima activada por el diacilglicerol se denomina protefna quinasa C (quinasa G0 PKC de Protein Kinase C), debido a que es dependiente de Ca. Se ‘cree que el incremento inicial de la concentracion citosdlica de Ca inducido por IP, altera la quinasa C, traslocéndola de la cara citosélica de la membrana plasmética a la cara citoplasmitica. Se activa por la combinacién de Ca", diacil- slicerol y el fosfolipido de membrana cargado negativamente, fosfatidilserina. De las ocho o més isoformas diferentes de la quinasa C en mamiferos, al menos cuatro son activadas por diacilgliceral Como el diacilglicerol producido iniciaimente por la rotura de PIP, es répi- damente metabolizado, no puede mantener la actividad de la quinasa C como serfa necesario para obtener respuestas mantenidas como la proliferacién o la diferenciacién. La activacién prolongada de la quinasa G depende de una segun- da ola de produccién de diacilglicerol catalizada por fosfolipasas que rompen el fosfolipido principal de la membrana fosfatidilcolina, No se conoce cémo resul- tan activadas estas fosfolipasas que actiian retrasadas. ‘Cuando la quinasa C es activada fosforila residuos determinados de serina o de treonina de proteinas diana, las cuales varian en funcién del tipo de célula de ‘que se trate. Las mayores concentraciones de quinasa C se han encontrado en el cerebro, donde (entre otras cosas) fosforila canales iGnicos de las eélulas net sas alterando sus propiedades y, por lo tanto, variando la excitabilidad de las membrana plasmatica de las células nerviosas. En muchas células la activacién de la quinasa C incrementa la transcripeién de determinados genes. Se conocen por lo menos dos procesos. En uno de ellos, la qui nasa Cactiva una cascada de protefnias quinasa que conduce ala fosforilacién, y ac- tivacién, de una proteina reguladora de genes unica a DNA; en el otro proceso, la activacion de la quinasa C conduce a la fosforilacién de una proteina inhibidora,li- berando asf una proteina citoplasmitica reguladora de genes que puede migrar al niicleo y estimular la transcripcidn especifica de determinados genes (Figura 15-32). UINASA CINAETVA ‘QUINASA CAcHVA [MENBRANA PLASMATICA ew ¢ Nt entosen TWEIES SRE ea bea 2 a cm 0 ante aN — — lugar de. Fegien unions Godiicante Nowe 800 Capitulo 15: Transmisién de sefiales entre células Figura 15-32. Dos procesos intracelulares mediante los ‘cuales Ia quinasa C aetiva puede activarla transcripcidn espeeffica de determinados genes. En uno de ellos (flechas rojas, la ‘quinasa Cactiva una cascada de fostorilaciones que cconduce a lafosforilacién de ‘una proteina quinasa clave, denominada MAP quinasa (Ge discute mas adelante), la cual, asu vez, fosforilay activa la protefna reguladora de genes Elk-1, Elk-1 se halla lunida @cortas secuencias de DNA (denominadas elementos de respuesta serica, ‘SRE, de Serum Response Elements) en asociacién eon otra proteina de unin al DNA (denominada factor de respuesia sérica, SRF, de Serum Response Facton). En lotro proceso (fechas verdes) Ia activacion de la quinasa C conduce ala fosforilacién de Ix-B, la cual libera la proteina reguladara de genes NF-xB de forma que ahora puede migrar hasta el uicleo yal activarla transctipeién de determinados genes, fostotipasa Cis i =e ey iva eee ey protelna Gy sctveds ct ‘ators defer Aiactcoro ESPACIO EXTRACELULAR, MEMBRANA PLASMATICA j= meee LIBERA ca? FOSFORILA PROTEINAS DEL RETICULO ‘CELULARES ENDOPLASMATICO end ermet see saute cae iris cell ae cod ear cie ae ecetes eet fralizacién de fosfolipidos de inositol. Como se indica en la figura, cada rama del proceso puede ser mimetizada mediante la adicién a células intactas de agentes, farmacolégicos especificos . Los efectos de IP, pueden set mimetizados utilizan- do un iondforo de Ga’, como el A23187 0 la ionomicina, Ios cuales permiten que el Ca® entre al citosol desde el Iiquido extracelular (se discute en el Capitulo 11). Los efectos del diacilglicerol se pueden mimetizar por ésteres de forbol, produc- tos vegetales que se unen ala quinasa Cy la activan directamente. Utilizando es- tos reactivos, se ha podido demostrar que, a menudo, las dos ramas del proceso, colaboran produciendo una respuesta celular completa. Por ejemplo, algunas ti- pos celulares pueden ser estimulados a proliferar en cultivo cuando son tratados con iondforos de calcio y con un activador de la quinasa C, pero no si se tratan con uno solo de ambos reactivos. La calmodulina es un receptor intracelular de Ca** ubicuo™ Habitualmente la concentracién de Ca** libre en el citoplasma es < 107 M y ge- neralmente no aumenta por encima de 6% 10° M, incluso aunque la célula esté activada por un influjo de Ca’. Asi, cualquiera que sea la estructura de la célula que acti directamente como diana para la regulacién dependiente de Ca®* de- berd tener una constante de afinidad (K,) para el Ca” de unos 10° litros/mol. Ademas, como la concentracién de Mg* en el citosol es relativamente constante {alrededor de 10° M), estos lugares de unién al Ga’ deberan presentar una se- lectividad para el Ca® sobre el Mg’ de unas 1000 veces como minimo. Se cono- cen varias proteinas que unen Ca’, que cumplen estos requisitos. La primera proteina de este tipo que se descubris es la troponina C de tas células del muisculo esquelético; en el Capitulo 16 se discute el papel de esta pro- tefna en la contraceién muscular. En todas las células animales y vegetales en ‘que se ha estudiado, se ha encontrado otra proteina que une Ca’, estrechamen- te relacionada con la troponina C, denominada calmodulina. Una célula animal ‘pica contiene mas de 10° moléculas de calmodulina, lo cual significa aproxima- damente el 1% de la masa total de protefna de la célula, La calmodulina acta como un receptor intracelular polivalente de Ca’ que media la mayorfa de los procesos regulados por Ca®-. Se trata de una cadena polipeptidica altamente conservada, de unos 150 residuos de aminodcido, con cuatro lugares de unién con una alta afinidad para el Ca’. Cuando une calcio, la calmodulina sufre un importante cambio de conformacién (Figura 15-344), Sefializaci6n via receptores de superticie celular asociados a proteinas G Figura 15-33. Las dos ramas del proceso de los fosfolipidos de inositol. Elreceptor, una vez activado, se une a ‘una proteina G trimérica especifica {G,) haciendo que la subunidad «se disocie y active la fosfolipasa C- a ‘cual rompe el PIP, generando IP, y iacilglicerol. El diacilglicerol junto ‘con el Ca que lleva unido ycon fosfatidilserina-no se muestra en el dibujo), activa la quinasa C. Tanto la fosfolipasa C-B como la quinasaC son ‘enzimas solubles en agua que, al ‘activarse, se translocan desde el citosol ‘hasta la cara interna dela membrana plasmatica. Los efectos deIP, pueden ‘ser minetizados experimentalmente ‘en células intactas mediante el ‘tratamiento con ionéforos de Ca -ientras que los efectos del dliacilglicerol pueden ser mimetizados ‘mediante el tratamiento con éateres de forbol, los cuales se unen a a quinasa Cactivndola, 801 cat HN Ha aN coo 2nm Wooc Nie ‘coon ‘coon cy “ La activacién alostérica de la calmodulina por el Ca es anéloga a la activa- ion alostérica de la quinasa A por el AMP ciclico, con la diferencia de que el complejo Ca**-calmodulina no tiene actividad enzimatica sino que acttia unién- dose a otras proteinas. En algunos casos, la calmodulina acttia como una sub- unidad reguladora permanente de un complejo enzimético, pero en la mayoria de los casos la unién del Ca’ induce a la calmodulina a unirse a varias proteinas diana de la célula, alterando su actividad. Cuando el complejo Ca*-calmodulina se une a su proteina diana puede sufrir un cambio de conformacion posterior mucho més importante (Figura 15-34B), De entre las proteinas diana reguladas por el complejo Ca’-calmodulina, va- Fias de ellas son enzimas o proteinas de transporte a través de la membrana, En muchas eélulas, por ejemplo, el complejo Ca*-calmodulina se une, activando, la Ca*-ATPasa de la membrana plasmtica, la cual bombea Ca’* hacia el exterior de la célula. Asf, sila concentracién de Ca* en el citosol aumenta, la bomba se ac va, lo cual contribuye a que los niveles citosélicos de Ca’ vuelvan a los valores normales. Sin embargo, la mayor parte de los efectos del complejo Ca’*-calmodu- lina son mas directos y estén mediados por proteina quinasas dependientes de Cee*-calmodulina, En las células animales la mayorfa de acciones del Ca®* se producen a través de proteina quinasas dependientes de Ca**-calmodulina (quinasas CaM)** Lamayoria de los efectos de Ca® en las células animales estén mediados por fos- forilaciones de proteinas catalizadas por una familia de protefna quinasas de- pendientes de Ca*'-calmodulina (quinasas CaM). Estas quinasas fosforilan resi- duos de serina o de treonina de determinadas proteinas y, como en el caso del AMP ciclico, la respuesta de una célula diana a un incremento de la concentra- cin de Ca* libre en el citosol depende del tipo de quinasas CaM reguladas de que disponga la célula. Las primeras quinasas CaM que se descubrieron -la qui- nasa de la cadena ligera de la miosina, que activa la contraccién del miisculo liso, y la fosforilasa quinasa, que activa la degradacion del glucégeno- presentan tuna especificidad de substrato muy alta. Mas recientemente, sin embargo, se hhan identificado algunas quinasas CaM con una especificidad més amplia, y que parecen ser las responsables de mediar muchas de las acciones del Ca? en las ccélulas animales. ‘ejemplo mejor estudiado de una quinasa “multifuncional” Ca'*-calmodu- lina es la quinasa-CaM I, que se encuentra en todas las células animales pero 802 Capitulo 15 : Transmisién de sefiales entre células Figura 15-34 Estructura del complejo Ca"-calmodulina, basada sobre studios de difraccién de rayosXy de resonaneia magnétiea nuclear (NMI, de Nuclear Magnetic Resonance). (A) Lamolécula parece una “pesa de gimnasia’, con dos cabezas globulares conectadas mediante una larga hélice ‘Gexpuesta. Cada una de las dos cabezas tiene dos dominios de unién al Ca®, cada uno de los cuales esté ‘constituldo por un lazo de 12 residuos de aminoécidos en el que algunas ceadenas laterales de deido aspdctico y de écido glutémico forman enlaces ‘6nicos con el Ca’. Los dos lugares de union al Ca* del extremo carboxilo terminal dela molécula tienen una afinidad por el Ca® diez veces superior ala del extremo amino terminal. En solucién la molécula es flexible, ‘mostrando un abanico de formas, desde formas extendidas (como la de la figura) hasta formas més compactas, {B) Cambios estructurales det ‘complejo Ca®-calmodulina que ‘curren cuando éste se une a una proteina diana (en este ejemplo, un ‘péptido que contiene un dominio de uunidn para Ca®-calmodulina de una proteina quinasa dependiente de Ca ‘calmodulina fla quinasa de la cadena ligera de la miosina, tratada mas adelante). Nétese que el complejo Ca?-calmodulina se dobla como una “navaja de bolsillo” abrazando al péptido. (A, basado en datos de cristalograffa de rayos X de Y.S. Babu et al, Nature 315:37-40, 1985, © 1985 Macmillan Magazines Ltd; B, basado en datos de cristalografia de rayos X de WE. Quiocho, Science 257:1251-1255, 1992, y en datos de NMR de M. Ikura et Al, Science 256:632-638, 1992. © the AAAS) dominio innivicor P, tesinase_) JcooH ou, MNAEIVOR (50-90% ACTIVO} dominio > catalen sca ‘almodulina a? caimodutina cat utofosorcion especialmente enriquecida en el sistema nervioso. Constituye hasta el 2% de la masa total de proteina en algunas regiones del cerebro, altamente concentradas en sinapsis, Por ejemplo, cuando las neuronas que utilizan catecolaminas (dopa- mina, noradrenalina o adrenalina) como neurotransmisores) son activadas, el influjo de Ca* a través de canales de Ca® regulados en sus membranas plasmai cas induce a la eélula a segregar su neurotransmisor. El influjo de Ca también hhace que la quinasa CaM I se fosforile, activindose, y activando a la tirasina h droxilasa, la cual es la enzima reguladora de flujo de la sintesis de catecolami: nas, De esta forma, cuando la célula se activa se estimula tanto la secrecion como la sintesis del neurotransmisor. La quinasa CaM II tiene una propiedad destacable: puede actuar como un dispositivo de memoria molecular, colocandose en un estado activo cuando es expuesta a Ca*-calmodulina y permaneciendo activa incluso después de que la concentracién de Ca® haya bajado, Elo es debido a que la quinasa se fosforila a ella misma (un proceso denominado autofosforilacién), tal como fosforila a otras protefnas celulares cuando es activada por Ca’-calmodulina. En su estado auto- fosforilado la enzima permanece activa en ausencia de Ca®, prolongando asf la duraci6n de la actividad de la quinasa después de que acabe la seial inicial acti- vvadora de Ca”; la actividad se mantiene hasta que las fosfatasas abaten la activi- dad autofosforilativa de la enzima, inhibiéndola (Figura 15-35). Debido a estas propiedades, la activacién de la quinasa CaM UI puede ser utilizada como una memoria traza de un pulso de Ca** anterior, y al parecer jue~ a un importante papel en algunos tipos de memoria y de aprendizaje del siste- ‘ma nervioso de los vertebrados. Ratones mutantes que carecen de la subunidad especifica de cerebro que se ilustra en la Figura 15-35 tienen defectos especificos cen su capacidad de recordar la localizacién de un objeto ~es decir, de aprendiza- je espacial. Los procesos de Ca’* y de AMP ciclico interaccionan entre sf Los procesos de sefializacion a través de calcio y de AMP cfclico interaccionan en diversos niveles en la jerarqufa de control. En primer lugar, los niveles citos6- Seftalizaci6n via receptores de superficie celular asociados a protefnas G Figura 15-38 Activuctén dela 4quinasa CaM Il La enzima es un complejo proteico de unas 12 subunidades. as subunilades son de cuatro tipos homéiogos (, 8,19 8. que seexpresan en diferentes ipos celulares en proporciones diferentes. Enla figura se presenta tnicamente Ja subunidad a (en gris, que se ‘expresa s6lo en el cerebro. En ausencia ‘de Ca*-calmodulina ia enzima es Inaetiva como consecuencia de una interaceidn entze el dominio inhibidor ¥7del dominio ctaitico. La unién de Ca"-calmodulinaalterala conformacién dela proteina, permitiendo que el dominio catalitico {osforile el dominio inhibidor de subunidades vecinas del complejo ast ‘como otras protefnas de la lula (no se muestran), La autofosforlacién del complejo enzimatieo (por fosfrilaciin mutua de sus subunidades) prolonga la actividad de la enzima de dos ‘maneras: (1) atrapa el complejo Ca-calmodulina unido, de forma que no sedisacia del complejo enzimatico hhasta que os niveles citosblicos de Ca® vuelven alls valores basales, unos 10 segundos después (no se muestra (2) eonvierte la enzima en una forma independiente de Ca ‘uinasa se mantiene acti después de que el complejo ‘Ca®-calmodulina se disocie de ela 1a actividad continua hasta que el proceso de autofosforilacion es contrarestado por una proteina fosfatasa 803 licos de Ca* y de AMP cfclico pueden influirse respectivamente. Por ejemplo, al- ugar activo gunas formas de las enzimas pueden sintetizar y degradar AMP celico -la adenil shy: ciclasa y la fosfodiesterasa respectivamente- estan reguladas por complejas Ca calmodulina. De forma inversa, la quinasa & puede fosforilar algunos canales y bombas de Ca, modificando su actividad; por ejemplo, la quinasa A fosforila el receptor de IP, del ER, lo cual puede inhibir o activar la liberacién de Ca* induci- da por IP,, dependiendo del tipo celular. En segundo lugar, las enzimas regula- das directamente por Ga’ y por AMP ciclico pueden influirse mutuamente. Por ejemplo, algunas quinasas CaM son fosforiladas por la quinasa A. En tercer lugar, estas enzimas pueden tener efectos interactivos sobre las mismas moléculas dia- nna del metabolismo. Asf, frecuentemente la quinasa A y la quinasa CaM fosfor Jan lugares diferentes de la misma proteina la cual, por lo tanto, esté regulada Figura 15-36 Lafosforilasa quinasa. tanto por el AMP ciclico como por el Ca*; la proteina reguladora del gen CREB, —_Dibujo muy esquematico que muestra de la que hemos tratado anteriormente (véase pag 793), constituye un ejemplo es cuatro subunidades d's enzima ene de misclo de mamifero. Come ejemplo de eémo pueden interactuar el Ca y al AMP cicico, consi- Swbunidadypresenala actividad deremos la fosforilasa quinasa del misculo esquelético, cuyo papel en la degra-Shunidadesay py lasubnied la dacién de glucégeno ya hemos explicado. Esta quinasa fosforila la glucdgeno Caimodalina) median la regulacin de fosforilasa, la cual cataliza la degradacién del glucégeno (véase Figura 15-25). Se jg enzima por AMP cielico y por Ct # trata de una enzima formada por cuatro subunidades aunque tan s6lo una de espectivamente. Ecompleio } Sg SkEs Lew On Renn ie rae a a ee | ten que el complejo enzimatico sea activado por AMP ciclico y por Cat. Las cua- tro subunidades se designan como a, B, vy 6. La subunidad yes la que presenta ' la actividad catalitica; la subunidad 8 es la calmodulina y es la principal respon- ; sable de la dependencia de la enzima por el Ca’. Las subunidades oy B son las dianas de la regulacién por el AMP cfclico, siendo ambas fosforiladas por la qui- nasa A (Figura 15-36). ; La misma sefal de Ca® que inicia la contraccién muscular también asegura a que exista suficiente cantidad de glucosa que aporte la energfa necesaria para la Contraccién. Fl gran influjo de Ca’ al interior del citosol (se discute en el Capitu- lo 16) altera la conformacion de la subunidad de calmodulina de la fosforilasa quinasa, incrementando su actividad quinasa, con lo que se incrementa la velo- Cidad de degradacién de ghucégeno varios centenares de veces. Ademés, el influ- jo de Ca* también activa dos quinasas CaM que fosforilan (inhibiéndola) la ghu- geno sintasa, con lo que se inhibe la sintesis de glucogeno, Por el contrario, las fosforilaciones de la quinasa A inducidas por la adrenalina que hemos descrito ajustan el metabolismo de la eélula muscular anticipiindose al incremento de la 4 demanda energética permitiendo a la enzima ser activada cuando existen me- nos iones calcio unidos a la calmodulina, con lo que la enzima se hace mas sen- sible al Cae subunidad tation cate galmoduiina : : 4 lugar fosfriados por auinaea A Algunas protefnas G triméricas regulan directamente canales idnicos” Las proteinas G triméricas no actiian exclusivamente regulando la actividad de enzimas y alterando la concentracién de nuclestidos ciclicos o de Ca* en el cito- sol. En algunos casos activan o inactivan directamente eanales inicos de la membrana plasmética de la célula diana, alterando asi su permeabilidad ionica y, porlo tanto, la excitabilidad de la membrana. Por ejemplo, la acetilcolina ada por el nervio vago reduce tanto la frecuencia como la fuerza de la contrac cidn de la célula muscular del corazén. El efecto est mediado por una clase es- pecia! de receptores de acetilcolina que activan la proteina G inhibidora G,, dela que hemos tratado previamente. (Estos receptores, que pueden ser activados por el alcaloide de hongos muscarina, se denominan receptores muscarinicos de acetilcotina para distinguirlos de otros receptores, muy diferentes a éstos, deno- minados receptores nicotinicos de acetilcolina, que son receptores relacionados con canales iGnicos de las c¢lulas del muisculo esquelético y de células nerviosas {que pueden ser activadas por nicotina.) Una ver. activada, la subunidad a de G, Serie Bg 804 Capitulo 15 : Transmisi6n de sefiales entre células bigger agrnomerrg rrr Pree cere al ae citos rmodifcsdos lula de eostén calvin axon ~ o no s6lo inhibe la adenil ciclasa (como hemos descrito previamente) sino que también abre directamente canales de k* de la membrana plasmatica de la célu. Ja muscular. La apertura de estos canales de K* hace que la célula sea mas dificil de despolarizar, lo cual contribuye al efecto inhibidor de la acetilcolina sobre el corazén. Otras proteinas G triméricas regulan la actividad de canales iénicos de una forma menos directa, bien regulando la fosforilacién de canales (mediante, por ‘ejemplo, la quinasa A, la quinasa C 0 la quinasa CaM) o bien causando la pro- duccién o la destruccién de nuclestidos ciclicos que activan 0 inactivan directa- ‘mente canales iénicos. Estos eanales inicos regulados por nucleotides juegan un papel crucial en los procesos de la visisn y de la olfacci6n. La olfacci6n yla visién dependen de receptores asociados a proteinas G y de canales iénicos regulados por nuclestidos cfclicos™ Los humanos podemos distinguir mas de 10 000 olores diferentes (odorants), los cuales son detectados por neuronas con receptores olfativos especializados en el revestimiento de la nariz, Estas células reconocen odorantes mediante re- ceptores olfativos relacionados con una proteina G especifica, que se presentan en la superficie de cilios modificados que sobresalen de las células (Figura 15- 37), Muchos de estos receptores actian a través de AMP efclico; cuando son esti- mulados por la unién del odorante, activan una proteina G trimérica olfativa es- pectfica (Gy), la cual, a su vez, activa la adenil ciclasa; el incremento resultante de los niveles de AMP ciclico abre canales catiénicos regulados por AMP ctclico, lo cual permite que se produzca un influjo de Na’ que despolariza la célula e ini- cia un impulso nervioso que viaja a lo largo del axén, hasta el cerebro. Otros re-~ ceptores olfativos actiian a través del proceso de fosfolipidos de inositol y cana- les de Ca’ regulados por IP, de la membrana plasmética, pero respecto a st mecanismo de transduccidn existe todavia poca informacion, Se cree que existen centenares de receptores olfativos diferentes; cada uno esta codificado por un gen diferente y reconoce odorantes diferentes, pero todos ellos pertenecen a la superfamilia de receptores asociados a proteinas G. A pesar de que sabemos que cada célula olfativa responde a un conjunto determinado de odorantes, no esté claro si cada célula contiene tinicamente un tipo de recep- tor que reconoce toda la serie de odorantes a los que la célula es sensible o si cada célula contiene un juego de receptores, cada uno de los cuales es espectfico de un solo odorante. Los receptores relacionados con proteinas ( también me- dian algunas formas de deteccién de sabor, pero respecto a ello se conoce toda- via muy poca cosa. Los canales iGnicos regulados por nucledtidos cfclicos también participan cn la transduccién de sefales en la visidn de los vertebrados, pero el nucledtido crucial en este caso es el GMP efelico (Figura 15-38) en lugar de ser el AMP cfcli- Sefializaci6n via receptores de superficie celular asociados a protefnas G Figura 15-37 Receptores de neuronas olfativas. (A) Dibulo esquemdtico det epitelioolfativo de la narz, El receptor ‘lfativo de las neuronas poseen clios moalificacios que se proyectan desde la superficie del epitelio y contienen los roceptores olfativos yia maquinaria para la transducei6n de la seftal El axon, que se extiende desde el extremo ‘opuesto de la neurona receptora, ‘conduce las sefales eléctricas hasta el ‘cerebro cuando la eélula es activada por un odorante. Las celulas basales actian como células madre, produciendo nuevas neuronas receptoras durante toda la vida. (B) Electronmicrografia de barrido de cillos dela superficie de una neuron olfativa (B, de F.E. Morrison y ROM, Costanzo, Comp. Neurol. 297: 1-13, 1990 © Wiley-Liss, Inc) Figura 15-38 EI GMP efelico. 805 0. Como el AMP cfclico, las concentraciones celulares de GMP cfelico estén controladas por una répida velocidad de sintesis (por la guanilato ciclasa) y una rapida degradacién (porla fosfodiesterasa de GMP ciclico) En la transducci6n visual, la activacién de los receptores esté producida por la Tuz, y conduce a una disminucién, en lugar de un incremento, de los niveles del nucledtido cielico. El proceso se ha estudiado especialmente bien en el caso de la respuesta a la luz de los fotorreceptores en forma de bast6n (bastones) de la retina de los vertebrados, Los bastones son tesponsables de la visién mono- cromitica con luz tenue, mientras que los fotorreceptores en forma de cono (co- 7nos) son responsables de la visién cromética con luz brillante. Un fotorreceptor en forma de bastén es una célula altamente especializada con un segmento ex- terior y otro interior, un cuerpo celular y una regién sinaptica a través de la cual el bastén pasa una senal quimica a una célula nerviosa retiniana, la cual trans- fiere la sefial alo largo del proceso visual (Figura 15-39), Elaparato fototransdue- tor se halla en el segmento exterior, que contiene discos apilados, cada uno de los cuales esta formado por una especie de saco de membrana en la que se ha- lian embebidas las moléculas fotosensibles de rodopsina. La membrana plas- matica que rodea el segmento exterior contiene canales de Na‘ regulados por GMP ciclico, Estos canales de Nat se mantienen abiertos en la oscuridad me- diante moléculas de GMP ciclico unidas al canal. Paradéjicamente, la luz no causa una despolarizaci6n de la membrana plasmaitica (que podria estimular la sefializaci6n sindptica) sino una hiperpolarizacién de la membrana plasmatica (que inhibe la sefial sinaptica), porque la activacién de las moléculas de rodopsi- na por la luz en la membrana de los discos conduce a que los canales de Na’ de la membrana circundante se cierren (Pigura 15-40). ‘Como hemos indicado anteriormente, la rodopsina es una molécula trans- membrana que atraviesa la membrana siete veces, homéloga de otros miembros de la familia de receptores asociados a proteinas G y, como sus primas, actia a través de una proteina G trimérica. Sin embargo, la sefial activadora extracelular no es una molécula sino un fot6n de luz. Cada molécula de rodopsina contiene elcroméforo, 11-cts retinal, unido covalentemente, el cual se isomeriza east ins tantdneamente a todo-trans retinal cuando absorbe un solo fotén. La isomeriza- in altera la conformacién del retinal, induciendo un cambio de conformacién ind lento en la proteina (opsina). Entonces, la protein aetivaca se une a la pro- teina G timérica eransducina (G,) haciendo que la subunidad « (c,) se disocie y active una fosfodiesterasa de GMP cfclico, la cual hidroliza el GMP ciclico, de forma que los niveles de GMP ciclico del citosol disminuyen. Como consecuen- cia de ello, el GMP eiclico se disocia de los canales de Na* de la membrana plas- ‘matica, permitiendo que se cierren. De esta forma la sefial pasa de la membrana de los discos a la membrana plasmética, y la sefial luminosa se transforma en tuna seftaleléctrica Los canales de Na* también son permeables al Ca’, de forma que cuando se clerran el influjo normal de calcio se inhibe, haciendo que la concentracién, de Ca* en el citosol disminuya: esta disminucion estimula a la guanilato cicla sa, la cual sintetiza GMP efclico recuperando los niveles y haciendo que la célu- Ja rapidamente recobre el estado en el que estaba antes de que la luz la activara. La activacién de la guanilato ciclasa por la disminucién de los niveles de Ca esta mediada por una proteina sensible al Ca’ denominada recoverina la cual, contrariamente a la calmodulina, es inactiva cuando se halla unida a Ca y ac- tiva cuando esté libre de Ca; estimula la ciclasa cuando los niveles de Ca son bajos tras la respuesta a la luz, Este mecanismo dependiente de Ca’ es de im- portancia crucial, en dos aspectos. En primer lugar, permite al fotorreceptor re- vertir rapidamente hasta su estado de reposo, tipico de la oscuridad, tras un flash de luz, haciendo posible que el fotorreceptor pueda ser sensible a la corta ‘duracién del flash, fn segundo lugar, contribuye a permitir que el fotorreceptor se adapte, disminuyendb la intensidad de la respuesta cuando se expone a la luz continuamente. Como explicaremos més adelante, la adaptacién significa que la célula receptora puede acttiar como un detector sensible a cambios de la 806 Capitulo 15 : Transmisi6n de sefiales entre células Plasmon segment Singptico Figura 15-39 Dibujo de una eélula fotorreceptora en bastén. En el segmento exterior existen unos 1000 discos; las membranas de cada disco no se allan conectadas ala ‘membrana plasmtica, ee redo on 2 activa me onerer canals de Ne analog de Na aoe Be seameno sua cota wane peaks ee me Tere sna cad cans Sisetonte 3 intensidad del estimulo en un enormemente amplio abanico de niveles basales de estimulaci6n, En la Tabla 15-3 se recogen datos de las principales proteinas G tratadas en este capitulo, Las sefiales extracelulares son notablemente amplificadas mediante la utilizacién de mensajeros intracelulares y de cascadas enzimaticas” A pesar de diferencias en detalles moleculares, todos los sistemas sefalizadores, iniciados por receptores dependientes de proteinas G comparten ciertas carac- teristicas y estn gobernados por principios generales similares. Todos ellos, por ejemplo, dependen de complejas cascadas o inician cadenas de mensajeros in- (racelulares. A diferencia de lo que ocurre con sistemas de sefalizacién mas di- rectos utilizados por los receptores intracelulares discutidos antes y por recepto- res relacionados con canales iGnicos, tratados en el Capitulo 11, las cascadas catalfticas de mediadores intracelulares proporcionan numerosas oportunida- «des de amplificar y de regular las respuestas a sefiales extracelulares. En la casca- da de la transduccién visual que acabamos de describir, por ejemplo, una sola molécula de rodopsina activada cataliza la activaciGn de cientos de moléculas de {ransducina a una velocidad de unas 1000 moléculas de transducina por segun- do, Cada molécula de transducina activada activa una molécula de fosiodieste- rasa de GMP ciclico, cada una de las cuales hidroliza unas 4000 moléculas de GMP cictico por segundo, Esta cascada catalitica se mantiene durante aproxima- damente un segundo, produciendo la hidrélisis de mas de 10° moléculas de GMP cfclico por cada cuanto de luz.absorbida, que cierra transitoriamente cen- tenares de canales de Na* de la membrana plasmética (Figura 15-41). De forma similar, cuando una molécula sefial extracelular se une a un re- ceptor que indirectamente activa la adenil ciclasa via protefna G,, cada proteina receptora puede activar muchas moléculas de proteina G,, cada una de las cua- les puede activar a una molécula de adenil ciclasa. Como cada molécula de G, permanece activa durante algunos segundos antes de hidrolizar su GTP unido, Sefializacién via receptores de superficie celular asociados a protefnas G Figura 15-40 La respuesta alaluz de ‘una eélula fotorreceptora en bastén. Los fotones son absorbidos por las ‘moléculas de rocopsina situadas en los discos del segmento exterior. Flo ‘determina que los canales de Na’ de la ‘membrana plasmitica se cierren, 0 cual hiperpolariza la membrana y reduce la velocidad de liberacién del neurotransmisor desde la region sinaptica. Debido a que el neurotransmisor actiainhibiendo muchas de las neuronas retinlanas ticas, la kaminacién frena la inhibicidn y, de esta forma, de hecho, Jas activa. Tabla 15-3 Las principales familias de proteinas G triméricas* Algunos miembros Subunidades Modificado por Familia delafamilia Funciones toxina bacteriana I Gq 05 activa adentl ciclasa: colérica activa activa canales de Ca Ga O activa adenil ciclasaen _colérica activa neuronas sensoriales alolfato mG a inhibe adenil ciclasa: pertisiea inhibe activa canales de K” G a activa canales de K*; pertisica inhibe Inactiva canales de Ca; activa fosfolipasa C-, G a activa fosfodiesterasade _colérica activa (ransducina) GMP cfelico en foto- y rreceptores en bastinde —_pertisica inhibe vertebrado 1m _ a, activa fosfolipasa C-B * Las familias se determinan por la relacion entre las secuencias de aminodcldos de las subuni- {dads «. Unicamente se presentan ejemplos seleccionados. En mamferos se han desctito unas 20 subunidades a y al menos 4 subunidades By 7 subunidades puede mantener activa a la ciclasa a la que se halla unida durante algunos se- gundos, de forma que la ciclasa puede catalizar la conversion de un gran nime- ro de moléculas de ATP a AMP ciclico (Figura 15-42). Un tipo de amplificacién como éste se presenta en la ruta de los fosfol{pidos de inositol. Como resultado de ella, una sefal extraceluilar a concentracién nanomolar (10 M) induce a me- nudo concentraciones micromolares (10'* M) de un segundo mensajero intrace- lular como el AMP ciclico o el Ca*, Estas moléculas acttian como efectores alos- téricos activando enzimas determinadas, por lo que una tinica molécula seftal extracelular puede provocar la alteraciGn de varios miles de moléculas en la cé- lula diana. Ademés, cada una de las protesnas reguladoras de la cadena de pro- ceesos que se han activado puede ser una diana independiente de la regulacién, tal como ocurre por ejemplo en la cascada metabdlica que produce la degrada- ion del glucdgeno en las fibras del muisculo esquelético Estas cascadas metabolicas explosivas han de estar reguladas por mecanis- ‘mos muy eficientes y sensibles. Por consiguiente, no resulta sorprendente que las células presenten mecanismos eficaces para la degradacion répida del AMP ciclico y para el amortiguamiento y secuestro del Ca’, asf como para la inactiva- ccidn de las enzimas que responden y para las proteinas transportadoras, una vez se han activado. Todo esto es claramente esencial para parar la respuesta y para definir el estado estacionario a partir del cual la célula ha de responder. Como hemos visto antes (véase pag. 777), en general la respuesta a la estimula- cin puede ser frenada répidamente tnicamente si los mecanismos también son répidos. Las eélulas pueden responder de forma stibita a incrementos graduales de la concentracién de una sefal extracelular® Algunas respuestas celulares a ligandos de sefalizacién aumentan gradualmen- te de forma proporcional a la concentracién del ligando. La respuesta primaria a las hormonas esteroideas (véase Figura 15-13) sigue a menudo este patron, posiblemente porque cada receptor hormonal une una sola molécula de hor- mona, y cada secuencia de DNA de reconocimiento especffico de un gen que responde a las hormonas esteroideas acttia de forma independiente, A medida 808 Capitulo 15 :‘Transmisién de sefiales entre cétulas seecittes 10% ! i — Figura 15-41 Amplificacién dela ‘cascada eatalitiea Induclda por a luz, ‘enbastones de vertebrados, Las flechas divergentes indican las etapas cen las que se produce amplificacién, una motécute de roteina roooptora Tigende seal ae cada proteina receptor stivada ~ ‘subunidad ade ‘isles liber une subunidad & ave unde aster una motes de acre ty ‘Ser lee durante un periods aden Setienpe prolongode a) salveda ‘elses actvada genera ‘muchas molaculas de cAMP fas moculas de caMP actven la quinass © | ainsa A coda maléoulade quinasa A puedo tostonr, actvando, ‘muchos cops de Gnaima que aumenta la concentracién de la hormona, la concentracién de los comple- jos hormona-receptor aumenta de forma proporcional, y también aumenta pro- Porcionalmente el numero de complejos unidos a secuencias especificas de re- conocimiento de los genes que responden; asf pues, la célula responde de una ‘manera lineal. Sin embargo, otras respuestas a ligandos de senalizacién empiezan de ma- nnera mas stibita cuando aumenta la concentracién lel ligando. Algunas de ellas pueden ocurrir incluso de una forma que casi es del “todo o nada’, siendo inde- tectable por debajo de una concentracién umbral de ligando y aumentando has- ta un maximo en cuanto esta concentracién umbral se sobrepasa. Algunos facto- tes de crecimiento, por ejemplo, actiian como sefiales de todo o nada indicando alas células que deben empezar a replicar su DNA como preludio de una divi- sin celular. ;Cudl puede ser la base molecular de una respuesta abrupta como sta, casi amodo de interruptor, ante una sefial gradual ? Un posible mecanismo para escalonar la respuesta consiste en que para que se produzca la respuesta haga falta que a. una macromolécula diana se le una ‘una molécula o un complejo intracelular. Por ejemplo, en algunas respuestas Sefializacién via receptores de superficie celular asociados a proteinas G Figura 15-42 Amplificacién en una cascada cataltica inducida por un ligando. La primera etapa de amplificacién requiere que el ligando seftal permanezca unido al receptor el tdempo necesario para que el receptor active varias moléculas G, ;en muchos ‘casos el ligando se disoeiara muy lentamente para que se produzca esta, amplificacién. Sears de recoptores activados Figura 15-43 Respuesta que resentan las eéhilas del ovidueto de salina ante la estimutacién por la hormona esteroidea estradiol. Una vez activados los receptores de estradiol activan la transeripcion de varios genes diferentes. La grfica ‘muestra las curvas dosis-respuesta para dos de estos genes, que codifican, Jas protefnas del huevo conalbiimina uno y ovoalinimina el otro, La cinética lineal de respuesta para la conalbrimina indiea que cada ‘molécula de receptor activado que se tune al gen della conalbimina ‘nerementa la actividad del gen en la ‘misma cantidad, Por el conttario, el retraso Seguido del abrupto incremento en la cinética de respuesta ppara la ovoalbimina sugiere que para Iniciar Ia transcripcidn de este gen se le hhan de unir simultaneamence mas de tun receptor activade (en este caso son 2 receptores). (Adaptado de ER. ‘Mulvihill y R.D. Palmicer,f. Biol. Chem. 252:2060-2068, 1977.) 809 4 3 e % de mnie sctivacion de ° 08: 10 15 20 conoentracion relative de moléculas de efector ducidas por hormonas esteroideas parece que han de unirse simulténeamente més de un complejo hormona-receptor a una secuencia de DNA especifica de reconocimiento para conseguir activar un gen determinado, Como resultado de ello, la activacidn del gen empieza de forma més abrupta que si fuera suficiente Ja unién de un solo complejo para producir esta activacién (Figura 15-43). Un mecanismo similar a éste acta en las activaciones mediadas por la quinasa A y por la calmodulina, como hemos discutido antes. Por ejemplo, se han de unir dos 0 mas iones Ca* para conseguir que la calmodulina adopte su conformacién activa; como resultado de ello, se produce un incremento de eincuenta veces en la activacidn del proceso cuando la concentracién de Ca* tan solo se ineremen- ta diez veces. Este tipo de respuestas son tanto mas abruptas cuanto mayor sea el ntimero de moléculas que cooperan, de forma que si el ntimero es suficiente- mente elevado se pueden conseguir respuestas cercanas al “todo o nada” (Figu- ras 15-44 y 15-49). ‘También se consiguen respuestas subitas cuando un ligando activa a una enzima y al mismo tiempo inhibe otra enzima que cataliza la reaccién opuesta a Ja de la primera enzima. Ya hemos hablado de un ejemplo de este habitual siste- ma de regulacion en la estimulacién de la degradacién del ghucogeno en las cé~ lulas det mtisculo esquelético, en las cuales un incremento en la concentracién intracelular de AMP cfctico activa la fosforilasa quinasa ¢ inhibe la accion opues- tade la fosfoproteina fosfatasa, Este mecanismo puede producir respuestas muy abruptas, pero en todo caso ligeramente graduales de acuerdo con la variacién de la eoncentracion del ligando sefal. Sin embargo, existe otro mecanismo por el cual una célula puede responder de forma “todo 0 nada” de modo que en cuanto la sefial sobrepasa un valor umbral se produce una respuesta répida y maxima, Todas las respuestas “todo o nada” de este tipo dependen generalmente de la retroalimentacién posi- ‘iva. Por este mecanismo, las células nerviosas y musculares generan potenciales de accidn siguiendo la ley del “todo 0 nada”, en respuesta a neurotransmisores (Ge discute en el Capitulo 11). La activacién de los receptores de acetilcolina en una unién neuromuscular, por ejemplo, abre los canales catiGnicos de la mem- brana plasindtica de la eélula muscular. £1 resultado de ello es un influjo neto de Nat que despolariza localmente la membrana plasmatica, Esto hace que los ea nales de Na’ controlados por voltae situados en esta regién de la membrana se abran, produciendo un nuevo influjo de Na’, el cual despolariza atin més la Figura 15-44 Cinétieas de activacién, ‘en funci6n dela concentracién de la molécula sefial. Las curvas muestran ‘emo se incrementa la pendiente dela, respuesta a medida que se incrementa ‘elniimero de moléculas de efector que ‘se han de unir simultdneamente para activar una macromolécula diana. Las ‘curvas dela grfea son las que cabe ‘esperar sila activacién necesitarala tunién simulténea de 1, 2,80 16 moléculas de efector, respectivamente, ‘subunidador proteicas Higande Inactive sonal "St Figura 15-45 Un po de mecanismo de sefializaci6n del que eabe esperar ‘que presente una respuesta subita, ‘Aqué se requiere la unién de ocho ‘moléculas de un ligando senial sobre ‘un complejo proteico para activarlo: ka capacidad de las subunidades para ensamblarse formando el complejo activo depende del cambio alostérico de conformacién que sufre cada ‘subunidad cuando se une a su ligand. La union de un ligando formando un ‘complejo de este tipo es generalmente un proceso cooperativo, que genera una respuesta escalonada cuando ‘cambia la concentracién del ligando, ‘como se explica en el Capitulo 5, Abalas concentraciones del ligando, ‘eLnimero de complejos activos se incrementaré suibitamente en proporeién a la octava potencia dela ‘concentracién del ligando, rizaci6n inicial excede un cierto umbral, esta retroalimentaci6n positiva tiene un. do asi una espiga de Ca* tipo “todo o nada”. El efecto de algunas sefiales puede ser recordado por la célula®" Eno peas es prods Un mecanismo de aceleraci6n por retroalimentacién positiva puede establecer- Swisaniiga se entre proteinas seal que en hugar de ser canalesidnicos presenten actividad ee | enzimatica, Supongamos por ejemplo que un ligando sefal determinado activa mate tuna enzima localizada a mitad de la cadena de acontecimientos que transmiten la seftal, y que dos o mas moléculas del producto de esta reaccién enzimatica se linen ala enzima activndola atin mas (Figura 15-46) La conseeuencia seré que ssn en ausencia del ligando se producira una velocidad muy pequena de sintesis del producto enzimitico, y que esta velocidad aumentara muy lentamente cuando e aumente la concentracién del ligando hasta que, aun determinado valorumbral (yoy pe pos | de concentracién del ligando, se formara suficiente cantidad de producto para Moleeauas oe. coca activar la enzima, estableciéndose entonces un sistema de autoaceleracién. En PRODUCTO DE LA ENZIMA tonces, la concentracién del producto enzimatico aumentara saibitamente hasta el nivel mas alto posible. De esta forma, la eélula puede traducir una variacién gradual de la concentracién de un ligando senal en un cambio de tipo. “interrup- puesta de tipo “todo o nada’ en la célula Este tipo de mecanismo tiene una importante propiedad que lo hace inuti- e ’ lizable para determinados propésitos y tinicamente util para otros. Si un siste- ma como éste ha sido activado aumentando la concentracion del ligando sefial Figura 15-46 Un mecanismo de por encima del umbral, generalmente permanecerd activo cuando la sefal — “retroalimentacién positiva vuelva a deseender por debajo del valor umbrak: en lugar de reflejar flelmente _acelerante’. La unign intl del los niveles reales de seal en cada momento, este sistema de respuesta tiene ligendo snl activa a enzima para memoria, Ya hemos discutido el ejemplo de la CaM quinasa II, la cual es activa- generar un producto, el cual se une ala da por Ca*-calmodulina a autofosforilarse y a fosforilar otras proteinas. La Proplaenzim, inrementado alin mas autofosforilacién mantiene activa la quinasa cuando los niveles de Ca‘ ya han ctividad enzimatica, vuelto a la normalidad y el complejo Ca**-calmodulina se ha disociado de la en- ima (véase Figura 15-35). También puede actuar un mecanismo de autoactiva- | cion de memoria mas abajo en un proceso de senalizaci6n, a nivel de la trans- cripeién génica, Por ejemplo, la sefal que desencadena la determinacién de la . fibra muscular activa una serie proteinas reguladoras de genes especificos de célula muscular que estimulan tanto la transcripcin de estos mismos genes como de otros genes que producen muchas otras proteinas de célula muscular (véase pag. 475). Resumen Los receptores asociados con proteinas G activan 0 inactivan indirectamente enzi- ‘mas unidas a la membrana plasmdtica 0 canales iénicos, a través de proteinas re- guladoras G triméricas (proteinas G), que se inactivan a sf mismas mediante la hi- drélisis del GTP que evan unido. Algunos receptores asociados a proteinas G ‘activan 0 inactivan la adenil ciclasa, alterando ast la concentracién intracelular del mediador intracelular AMP eictico. Otros activan una fosfolipasa C especifica de fosfolipidos de inositol (la fosfolipasa C-), la cual hidroliza el fosfatidilinositol bisfosfato (PIP,) generando dos mediadores intracelulares -el inositol trisfosfato (P,), que libera Ca’* desde el ER incrementando ast la concentracién de Ca* en el itosol, y el diactiglicerol, que permanece en a membrana plasmdtica y activa la ‘quinasa C. Un incremento de los niveles de AMP ciclico o de Ca afecta la célula es- Sefalizacién via receptores de superficie celular asociados a protefnas G air | timulando ta quinasa A y la quinasa CaM, respectivamente. La quinasa G, la qui- nasa A y la quinasa CaM fosforilan proteinas diana determinadas sobre residuos de serina y de treonina, aiterando la actividad de estas proteinas. Cada tipo de cé- lula tiene conjuntos caracteristicos de proteinas diana que son reguladas de esta forma, lo cual permite a ta célula presentar su respuesta propia y caracteristica a ‘cambios de los nivelesintracelulares de AMP clelico 0 de Ca libre. A través de las cascadas mediadas por ef AMP cielico 0 por el Ce, las respuestas a las seiales ex- tracelulares pueden ser enormemente amplificadas. Las diferentes respuestas mediadas por estos receptores son rdpldamentefrena- dda cuando el ligando seal extracelular es eiminado, Ello es debido a que las protet- nas G se autoinactivan hidrolizando el GTP que evan unido, el IP, es rdpidamente desfosforilado mediante una fosfatasa (0 fosforilado por una quinasa), el diacilgli- cerotes ripidamente degradado, los nucledtides cclicas son rapidamente hidroliza- dos por una fosfodiesterasa, el Ca es répidamente bombeado hacia fuera del cito- sol y las proteinas son répidamente desfosforiladas por protefna fosfatasas. El continuo y répido recambio de estos mediadores intracelulares hace posible que se roduzca un rapido incremento de sus concentraciones cuando las células respon- den a sehales extracelulares. Ademds, las células pueden utilizar la cooperatividad y la retroatimentacién positiva para hacer que sus respuestas sean mas sitbitas. Sefializacién via receptores de superficie celular asociados a enzimas Como los receptores asociados a protefnas G, los receptores asociados a enzi- ‘mes son proteinas transmembrana cuyo dominio de unién al ligando se halla sobre la superficie exterior de la membrana plasmatica. En lugar de tener un do- inio citosélico que se asocia a una protefna G trimérica, sus dominios citosli- vitica asociada o estén asociados directamente a una enzima, Mientras que los receptores asociados a proteinas G atraviesan sie- te veces la membrana, habitualmente cada subunidad de los receptores cataliti- cos a atraviesan una sola ver. isten cinco clases conocidas de receptores asociados a enzimas: (1) el re- ceptor guanilaro ciclasa, que catalizan la produccién de GMP ciclico en el cito- sol; (2) los receptores tirosina quinasa, que fosforilan determinados residuos de tirosina de un pequeno grupo de proteinas sefial intracelulares; (3) los receprores asociaclos a tirosina quinasas, que estan asociados a proteinas que tienen activi- dad tirosina quinasa; (4) los receptores tirosina fosfatasa, que eliminan grupos fosfato de residuos de tirosina de determinadas proteinas seftal intracelulares, y (©) los receprores serinaltreonina quinasa, que fosforilan determinados residuos serina o treonina de algunas proteinas intracelulares, Empezaremos nuestra discusién con el receptor guanilato ciclasa. Los receptores guanilato ciclasa generan GMP cfclico directamente”* Los péptidos natriuréticos atriales (ANP, de Atrial Natriuretic Peptides) constitu- yen una familia de hormonas peptidicas, muy relacionadlas entre sf, que son se~ {gregadas por células musculares del atrium del corazén cuando se incrementa la presin de la sangre, Los ANP estimulan el rin para que segregue Na” y agua e inducen a las células musculares lisas de las paredes de los vasos sanguineos a que se relajen. Ambos efectos tienden a disminuir la presion sanguinea. El re- ceptor de ANP que media estas respuestas se halla presente en las células del ri- fidn y en las células de la musculatura lisa de los vasos sanguineos; se trata de luna proteina que atraviesa una sola vez la membrana plasmatica, que tiene un lugar extracelular de unién a ANP y un dominio intracelular con actividad guani lato ciclasa. La unién de ANP activa la ciclasa para producit GMP ciclico, el cual, a su ver, se une y activa una proteina quinasa dependiente de GMP cfclico (qui- nasa G), la cual fosforila determinadas proteinas sobre residuos de serina 0 treo- 812 Capitulo 15: Transmisién de sefiales entre células dominio seman ‘una inmunogto dominio membra ‘crrosor Plesmatice dominio ragién troaina Inaortada ‘winass ena quinass receptor ‘Tecapior de receptor | receptor SECE “inulin, SoNCE | ‘defGe receptor receptor receptor dolget depbcr, — devecr domnesr nina, Asi, los reeeptores guanilato eiclasa utilizan el GMP ciclico como media- dor intracelular de la misma forma que algunos receptores asociados con protef- nas G utilizan el AMP ciclico, con la diferencia de que la unidn entre el ligando y la actividad ciclasa se produce directamente en lugar de suceder via una protef- nna G trimérica, ‘A pesar de que conocemos relativamente pocos receptores que pertenezcan a la familia guanilato ciclasa, muchos receptores conocidos pertenecen a la fa~ milia firasina quinasa, de la que trataremos a continuacién, Los receptores para la mayorfa de los factores de crecimiento son protefnas transmembrana que presentan actividad protefna tirosina quinasa especifica® La primera protesna receptora que se reconocis que presentaba actividad protef- na tirosina quinasa especifica (en 1982) fue el receptor para el factor de creci- ‘miento epidérmico (EGF, de Epidermal Growth Factor). El EGF es una pequefia proteina (53 residuos de aminodcido) que estimula la proliferacién de las células epidérmicas y de una gran variedad de otros tipos celulares. Su receptor es una proteina transmembrana, que atraviesa la membrana una sola vez, de unos 1200 residuos de aminodcido y que presenta una larga zona extracelular glucosilada. que se une a EGF. Cuando el EGE se une a esta porcién, se activa un dominio in- tracelular con actividad tirosina quinasa. Una ver aetivado, el receptor transfiere tun grupo fosfato del ATP a determinadas cadenas laterales de tirosina, tanto de la propia proteina receptora como de otras proteinas celulares determinadas. Muchos otros receptores para factores de crecimiento y diferenciacién también son receptores tirosina quinasa. Entre ellos, cabe destacat los receptores para el Jactor de crecimiento derivado de las plaquetas (PDGF, de Platelet-Derived Growth Factor, para los factores de crecimiento de los fibroblastos (FGF, de Fibroblast Growth Factors), para el factor de crecimiento de los hepatocitos (HGE, de Hepa- ‘tocyte Growth Factor), para el factor de crecimiento-1 para insulina y compuestos ‘andlogos (IGF-1, de Insulin, insulinlike Growth Factor-1), para el factor de ereci- ‘miento neuronal (NGF, de Nerve Growth Factor), para el factor de crecimiento vascular endotelial (VEGF, de Vascular Endothelial Growth Factor) y para el fac~ tor estimulador de la formacién de colonias de macréfagos (M-CSF, de Macropha- ge Colony Stimulating Factor), todos los cuales son proteinas. Como se muestra en Ja Figura 19-47, la familia de receptores con actividad tirosina quinasa puede subdividirse en un determinado niimero de subfamilias estructurales; en cada ‘Sefializaci6n via receptores de superficie celular asociados a enzima Figura 15-47 Sels subfamilias de receplores Urasina quinasa. Solamente se indican uno 0 dos ‘miembros de cada subfamilia. Novese que en algunas subfamilias el dominio tirosina quinasa se halla interrumpido por una “regién insertada en la quinasa”, No se conoce el significado funcional de los dominios ricos ten elsteina y de los dominios semejantes a una inmunoglobulina, 813 a caso los receptores se fosforilan a s{ mismos para iniciar la cascada de sefializa- cin intracelular. {De qué forma la unién de una proteina especifica del dominio extracelular de un receptor tirosina quinasa activa el dominio catalitico que se halla situado al otro lado de la membrana plasmitica? Resulta dificil de imaginar que un cam- bio de conformacién pueda propagarse a través de la bicapa lipidica a través de una hélice « sencilla que atraviesa la membrana. El problema quedo resuelto cuando se demostré que la unién de un ligando hace que el receptor de EGF for- ‘me dimeros, lo cual permite a los dos dominios citoplasmaticos fosforilarse uno al otro sobre varios residuos tirosina, Esta fosforilacién cruzada se denomina auto- Josforilacién porque se produce dentro del receptor dimérico. En el caso de los receptores de PDGF el ligando es un dimero que reacciona con dos receptores a la vez. Figura 15-48). EI EGF, por el contrario, es un monémero que al parecer induce un cambio de conformacién en el dominio extracelular de su receptor, lo cual induce la dimerizacién del receptor. Se cree que la dimerizacién del recep- tor es un mecanismo general de la activacion de los receptores asociados a enzi- ‘ma que tienen un tinico dominio transmembrana. La dimerizacién del receptor puede utilizarse experimentalmente para inac- tivar especificamente determinados receptores, en un intento de determinar su importancia en una respuesta celular particular. La estrategia supone la trans- feccién de células con un DNA que codifica una forma mutante de un receptor tirosina quinasa que dimeriza normalmente pero que tiene un dominio quinasa inactivo, Cuando se coexpresan a elevado nivel con receptores normales, los re- ceptores mutantes actian de una manera dominante negativa (véase Figura 7- 44), inhabilitando los receptores normales al formar dimeros inactivos con ellos. Los procesos de sefializacién desencadenados por los receptores de EGF, PDGF y de FGF se han analizado con gran detalle. En cada caso las tirosinas de autofosforilacion se utilizan como lugares de unin, de alta afinidad, para protet- nas sefial intracelulares de la célula diana, Cada una de estas proteinas se une a diferentes lugares fosforilados del receptor activado, reconociendo ademas de la fosfotirosina, determinadas caracteristicas del entorno de la cadena polipeptidi- ca. Una vez.se han unido al receptor, muchas dle estas proteinas resultan fosfori ladas sobre tirosinas, y asi son activadas, De esta forma se cree que la autofosfo- rilacién en tirosinas acta como una especie de interruptor que desencadena el ensamblaje transitorio de un complejo sefial intracelular, el eual libera la sefal al interior de la e¢tula, Los receptores de insulina y de IGF-1 acttian de tna forma ligeramente dife- rente. En primer lugar, dado que los receptores son tetrameros (véase Figura 15- 47), se cree que la unidn del igando no induce una dimerizacidn sino una inter- accién alostérica entre las dos mitades del receptor. En segundo lugar, la union de insulina hace que el receptor fosforile su dominio catalitico, el cual activa la capacidad de fosforilar otra protein (denominada substrato-1 det receptor de in: sulina 0 IRS-1, de Insulin Receptor Substrate-1} sobre multiples tirosinas. Las fos- fotirosinas de IRS-1 acttian como lugares de unién de alta afinidad para el aco. plamiento y activacidn de proteinas sefial intracelulares, muchas de las cuales también se unen directamente a ottos receptores tirosina quinasa activados. 814 Capitulo 15: Transmision de seftales entre células Figura 15-48 Factor de crecimiento derivado de las plaquetas (PDGF). (A) Estructura dimérica de a proteina, com las regiones de union al receptor sombreadas en amarillo. El dimero se ‘mantiene por res enlaces disulfuro {mo se muestran). (B) Debidoa que PDGF es un dimero con dos lugares de union, puede unirse a dos receptores adyacentes, iniciando asf el proceso de sefializacion intracelular, FLfactor de crecimiento neuronal (NGF), como las demas proteinas de la familia de las nneurotrofinas (discutida en el Capitulo 21), también acta como dimeros que ‘entrecruzan sus tirosina quinasas. ‘wceptor ‘membrana plasmstics 749 dominio 781 roc 77 divide wom 3 dominio SH2 dominio SH ia omiio de unin paralofonfotresing Geun sminowede NH; COOH «c) ® Los residuos tirosina fosforilados son reconocidos por proteinas con dominios SH2” Se ha encontrado una coleccién completa de proteinas senal intracelulares que se ‘unen a las fosfotirosinas de receptores tiosina quinasa activados. Algunas de estas proteinas -una proteina activadora de una GTPasa (GAP, de GTPase-Activating, Protein”), la fosfolipasa C-y (PLC-y. de phospholipase C-p y las protetna tirosina ‘quinasas no receptoras, semejantes a Sro-tienen tunciones més 0 menos conoci- das, como veremos en las proximas paginas. La fosfolipasa C-y, por ejemplo, actiia, de la misma forma que la fosfolipasa C-B, activando el proceso de sefializacién de los fosfolipidos de inositol, del que hemos tratado anteriormente en conexién con la senalizacién via proteinas G. Otras proteinas que se unen a receptores tirosina 4quinasa activados constituyen un misterio, La enzima fosfatiilinositol 3-quinasa (P13-quinasa), por ejemplo, patece ser importante en la regulacién de la prolifera- ion celular; st accién inmediata es fosforilar el anillo de inositol del fosfatidlino- sitol en la posicién 3 (véase Figura 15-29), pero las funciones de los fosfoinos{tidos especiales generados de esta forma son desconocidas. A pesar de que las proteinas seftal intracelulares que se unen @ residuos de fos- fotirosina de receptores activados tirosina quinasa (y a IRS-1) tienen estructuras y funciones muy variadas, habitualmente comparten dos dominios no cataliticos al- tamente conservados, denominados SH2 y SH3 por regiones homélogas Sre2y 3 , ya que encontraron por primera vez en la protefna Src (famosa por su papel en el estudio de céncer, como se diseute en el Capitulo 24). Los dominios $H2 recono- cen tirosinas fosforiladas y permiten a las proteinas que los presentan unirse a los receptores tirosina quinasa activados asi como a otras proteinas sefal intracelula- res que hayan sido fosforiladas transitoriamente sobre tirosinas (Figura 15-49). La Seftalizacin via receptores de superficie celular asociados a enzimas Figura 15-49 Unién de proteinas seftal intracelulares que contienen ‘SH2, aun receptor activado de PDGF. (al Dibujo esquemtico de un receptor ‘de PDGF mostrando cinco lugares de autofosforilaciin en trosinas, res en Jaregién insertada en la quinasa y ‘einco en la cola carboxilo termins ‘estos higares se unen las tres protetnas seal que se indican a su tzquierda. (Existen otros dos lugares de autofosforilacion en tirosinas det receptor, que no se indican en el dibujo, localizados entre el dominio {que atraviesa la membrana y el principio del dominio quinasa, que actiian como lugares de unién para tirosina quinasas no receptoras semejantes a Ste.) Los nuimeros de la derecha indican las posiciones de las tirosinas en la cadena polipeptidica, Tstos lugares de unidn han sido identificados utilizando la tecnologia del DNA recombinante para mutar determinadas proteinas del receptor: Ja mutaci6n de as trosinas 1009 y 1021, por ejemplo, impide la unién ya activacin de PLC-y, de forma que la activacion del receptor no estimula el proceso de sefializacin de fosfolipidos de inositol Se indica la localizacién de Jos dominios SH2 (en rojo) y SH3 (en azul) en las tres proveinas senal (B) Estructura tridimensional de un dominio $H2, determinada por cristalografia de rayos X. En amarillo a la detecha, se muestra el bolsillo para la fosfotirosina y en amarillo ala Jzquierda se muestra un bolsilo de unt6n especffiea a una cadena lateral de un aminodcido, (C) El dominio SH2 5 un modiulo compacto que puede ser insertado en casi cualquier sitio de una proteina sin aterar nel plegamiento nila funcidn de dicha protefna. Debido a que cada dominio tiene diferentes lugares de unién que reconocen fosfotirosinas y eterminadas cadenas laterales de “aminoacids, los diferentes dominios ‘SH2 reconocen fosforirosinas en et contexto de diferentes secuencias de ‘aminodcidos flanqueantes. (B, basado cen datos de G. Waksman etal, Cell "72:1-20, 1998. © Cell Press.) 815 funcién del dominio SH3 es menos clata, pero parece ser que se une a otras protei- nas celulares. Los estudios sobre tna clase de pequefias proteinas “adaptadoras” que sola- ‘mente constan de un dominio SH2 y otro SH3 han permitido sugerir que el do. minio SH3 debe tener una funcién de union, Estas pequentas proteinas SH adap- tadoras no presentan actividad catalftica intrinseca y actian acoplando proteinas fosforiladas en tirosinas, como los receptores tirosina quinasa activa- dos, con otras protefas que no tienen dominios SH2 0 SH3 propios. Una de es- tas proteinas SH adaptadoras, denominada Sem-5, fue descubierta a través de estudios genéticos en el gusano nematodo C. elegans, como se discute en el Ca- pitulo 21, Determinadas mutaciones en el gen sem-5 bloquean el proceso de se- fializacién que parte desde varios receptores tirosina quinasa y tiene profundos efectos sobre el desarrollo del gusano. Los procesos de sefializacién son bloquea- dos con la misma efectividad por mutaciones que afectan al dominio SH2 0 a cualquiera de los dos dominios SH3 de la molécula, lo cual sugiere que ambos dominios SH3 son necesarios para unir un componente sefial del proceso (véase Figura 15-53). De hecho, parece que en la mayoria de las células animales se ha: lan presentes proteinas homologas a Sem-5, y existen evidencias tanto genéti- cas como bioquimicas de que estas protefnas acoplan los receptores proteina quinasa activados con Ras, la importante proteina del proceso de sefializacién, sobre la que volveremos enseguida. Las protefnas Ras constituyen un eslab6n crucial ena cascada intracelular de sefializacién activada por receptores protefna quinasa’* Las proteinas Ras pertenecen a la gran superfamilia Ras de GTPasas monoméri- cas, que también contiene otras dos superfamilias: (1) las proteinas Rho y Rac, implicadas en la trarismisién de sefiales desde receptores de la superficie celular hasta el citoesqueleto de actina (discutidas en el Capitulo 16), y (2) la familia Rab, implicada en la regulacién del trafico del transporte intracelular de vesicu- Jas (discutidas en el Capftulo 13). Como casi todas estas proteinas GTPasa mo- rnomeéricas, las proteinas Ras contienen un grupo fenil, unido covalentemente, {que participa en el anclaje de la proteina a la membrana, en este caso a la cara citoplasmatica de la membrana plasmatica donde actia esta proteina Las protefnas Ras participan en la transmisiGn de sefiales desde receptores tirosina quinase hasta el micleo, estimulando la proliferacién o la diferenciacion celular. Si se inhibe la funcién de Ras mediante la microinyeccién de anticuer- os anti-Ras o mediante formas mutantes dominantes negativas de Ras, deja de producirse la respuesta de proliferacién o de diferenciacién normalmente indu- ida por receptores proteina quinasa activados; contrariamente, si un mutante hiperactivo de proteina Ras es introducido en una cétula, el efecto sobre la proli- feraci6n o la dilerenciacién es habitualmente el mismo que el inducido por la unién de un ligando a los receptores de la superticie celular. De hecho, las protef- nas Ras fueron descubiertas como los productos hiperactivos de genes ras mu- tantes, que producen céncer al romper los controles normales sobre la prolifera- ign y la diferenciaci6n; alrededor del 30% de los ednceres humanos presentan estas mutaciones en un gen ras. ‘Como otras GTPasas monoméricas y las proteinas G triméricas, las protei- nas Ras acttian como interruptores, alternando entre dos estados conformacio- nales diferentes -activo cuando nen GTP (véase Figura 15-18) ¢ inactivo cuan- do unen GDP. Ras hidroliza GTP al menos 100 veces mds lentamente que la subunidad c de la proteina G trimérica estimuladora G, de la que hemos tratado anteriormente, y debido a que en el citosol las concentraciones de GTP son unas, 10 veces mas altas que las de GDP, en ausencia de otros estimulos, mientras el GTP se halla unido @ ella Ras permanece constantemente activa, Sin embargo, en la célula existen clos clases de proteinas sefal que regulan la actividad de Ras influyendo en la transicidn entre el estado activo y el inactivo. Las proteinas ac- 816 Capitulo 15:Transmision de sefales entre eélulas INACTIVA dh a Sy el ri 71 tivadoras de GTPasa (GAP, de GTPase-Activating Proteins) incrementan la velo- ‘idad de hidrélisis del GTP unido a Ras, de forma que la inactivan. Estos regula- dores negativos estén compensados por las protefnas liberadoras de nucleéti- dos de guanina (GNRP, de Guanine Nucleotide Releasing Proteins), las cuales estimulan el intercambio de los nucledtidos unidos estimulando la pérdida de GDP ya posterior captacion de GTP del citosol; asi, tienden a activar Ras (Figura 15-50). En principio, pues, los receptores tirosina quinasa pueden activar Ras ac- tivando una GNRP o inhibiendo una GAP. Los receptores tirosina quinasa acti vados se unen a GAP directamente, como hemos dicho antes, y se unen a GNRP s6lo indirectamente, como discutiremos después. Sin embargo, es la unién indi- recta a GNRP la que habitualmente es la responsable de conducir a la proteina Rasa su estado activo, unido a GIP. Las proteinas Ras y las proteinas que regulan la actividad de Ras han sido muy conservadas durante la evolucién; anélisis genéticos realizados en Drosop- hila y en C. elegans han proporcionado los primeros indicios sobre como los re- ‘ceptores tirosina quinasa activan Ras. Han sido particularmente informativos 1os estudios sobre el desarrollo de la célula fotorreceptora del ojo de Drosophila. Una protefna SH adaptadora acopla los receptores tirosina quinasa con Ras: evidencias que provienen del desarrollo del ojo de Drosophila® El ojo compuesto de Drosophila esta formado por unas 800 unidades idénti- ‘cas denominadas omatidios, cada una de las cuales esta formada por 8 células fotorreceptoras (RI-R8) y 12 células accesorias (Figura 15-51). El ojo se desarrolla ‘a partir de una lémina epitelial simple, y las cétulas que forman cada omatidio son reclutadas desde toda la limina a través de una secuencia fija mediante una serie de interacciones célula-cétula. Empezando con el desarrollo de R8, cada célula diferenciada induce a su célula vecina inmediata, hasta este momento no ‘comprometida, a adoptar un destino y a ensamblarse de una manera especial en el desarrollo del omatidio (Figura 15-52). HI desarrollo del fotorreceptor R7, necesario para la deteccién de la luz ul- travioleta, ha sido estudiado més intensamente, empezando en 1976 con la des- cripcidn de una mosca mutante denominada sevenless (sev, de “sin el siete”) en la que el tinico defecto observado es que R7 no se desarrolla. Estos mutantes son faciles de seleccionar sobre la base de su ceguera a la lu ultravioleta. El gen sev fue aislado y se observé que codifica un receptor tirosina quinasa que se expresa en las células precursoras de R7. Posteriores andlisis genéticos de mutantes en. Jos que se halla bloqueado el desarrollo de R7 pero en los que la proteina R7 no esté afectada, levaron a ta identificacién del gen bride-of-sevenless (boss, 0 “compafiero de seveniless”), que codifica el ligando de la proteina receptora Sev. Seftalizacién via receptores de superficie celular asociados a enzimas Figura 15-50 Regulacién dela actividad Ras. Las proteinas activadoras de GTPasa (GAP) inactivan Ras al estimularlas a que hidrolizen el GTP que llevan unido. Las proteinas liberadoras de nucledtidos de guanina (GNRP) activan Ras al estimularias a que liberen el GDP que levan unido; dado que la concentracién de GTP en el citosol es 10 veces mayor que la de GDP, Ras tendré tendencia a unir GTP ‘cuando se haya liberado de su GDP. En ceélulas de mamifero se han ‘dentificado hasta ahora dos GAP reguladoras de Ras (Ras GAP) -p120%" y neurofibromina (denominada ast porque est codificada por el gen que se halla mutado en la mayoria de la ‘enfermedad humana comin Hamada neurofibromatosis, asociada con tumores de los nervios).A pesar de que las dos Ras GAP se expresan deforma ubicua, parece que en los diferentes tipos celulares una de las dos domina ‘al mantenerla mayoria de las proteinas Ras (~95%) en su estado inactivo, unido a GDP. Figura 15-51 Electronmicrografia de bbarrido de un ojo compuesto de Drosophila. Fl ojo esté compuesto de tunas 800 unidades idénticas (omatidios), cada una de las cuales tiene una lente independiente que cenfoca la luz sobre las ocho eélulas fotorreceptoras de su base, (Por ccortesfa de Ernst Hafen.) 817 Boss es una proteina que atraviesa 7 veces la membrana, que exclusivamente se ‘expres en la superficie de la célula adyacente R8, y que cuando se une a una Sev la activa induciendo a la célula precursora de R7 a diferenciarse en un fotorre- ceptor R7. La proteina Sev tambien se expresa en algunas otras células precurso- tas del omatidio en desarrollo, pero ninguna de estas células entran en contacto con R8, por lo que la proteina Sev no es aetivada y las células no se diferencian a fotorreceptores R7. A pesar de que puede sospecharse que los organismos pluri- celulates hacen un uso muy extendido de ligandos senial unidos a la superficie celular como Boss, tales moléculas han sido muy dificiles de identificar y carac- terizar mediante técnicas bioquimicas tipicas. La identificacién de Boss ilustra el poder de las aproximaciones genéticas. Ha resultado més dificil identificar los componentes del proceso intracelt- lar de sefializacion activado por Sev en la célula precursora de R7 que el receptor © st ligando, debido a que estos componentes son utilizados por eélulas de una gran cantidad de drganos en desarrollo ademas del ojo, y las mutaciones que inactivan el proceso son letales. Sin embargo, algunas de estas mutaciones son letales unicamente cuando estén afectadas ambas copias del gen, por lo que pueden mantenerse en animales heterozigotos que presentan una copia del gen mutante ya otta normal. Aistando estos mutantes asi como utilizando otras es- trateglas genéticas, se han podido identificar algunos genes que codifican pro- teinas de seftalizacién intracelulat. Uno de ellos codifica la proteina Ras. Mien- tras que las moseas en las que ambas copias del gen ras estén inactivadas por ‘mutacin mueren, las que presentan tinicamente una copia inactivada sobrevi- ven aunque carecen de R7. Contrariamente, si uno de los genes ras se hace hi- peractivo mediante mutacin, R7 se desarrolla incluso en mutantes en los que tanto sev’ como boss son inactivos. Asi pues, la activaci6n de Ras parece ser nece- saria y suficiente para inducir la diferenciacién de R7. Un segundo gen, el lama- do hijo-de-seventess (sos, de "son-of-sevenless”) codifica una protefna liberadora de nuclestidos de guanina (GNRP), que es necesaria para que el receptor tirosi- nna quinasa Sev active a Ras. Un tercer gen codifica una proteina semejante a Sem-5 denominada Drk (de downstream of receptor kinases, “mds adelante de Jos receptores quinasa") que acopla el receptor Sev a la proteina Sos; el dominio ‘SH2 de Drk se une a Sey, activandola, mientras que parece que los dos dominios SHS se unen @ Sos. Un cuarto gen codifica una proteina activadora de GTPasa (GAP). Si este gen es inactivado, R7 se desarrolla incluso aunque sev haya sido inactivado, probablemente porque Ras es hiperactivo cuando GAP no lo inhibe (Figura 15-53). En este sistema de seftalizacién, sin embargo, y en muchos otros sistemas estudiados, la activacion de Ras por receptores tirosina quinasa depen de de la activacion de GNRP mas que de la inactivacion de GaP. Una vez activada, Ras transmite la seftal activando una cascada de fosforila- cin serina/treonina, que esté altamente conservada en las células eucariotas, ‘desde las levaduras hasta los humanos, Un componente crucial en esta cascada es un nuevo tipo de protefna quinasa denominado MAP-quinasa, que conside- raremos.a continuacién, Ras activa una cascada de fosforilaciones serina/treonina que activa la MAP-quinasa’* Las fosforilaciones en tirosina y la activacién de Ras, estimuladas por receptores quinasa de la superficie citoplasmatica de la membrana plasmatica, tienen una vida muy corta: las fosforilaciones son revertidas répidamente por proteina tiro- sina fosfatasas especificas (discutidas més adelante), y Ras cuando esta activa se ‘nactiva a si misma hidrolizando el GTP que tiene unido, a GDP. Para poder esti- 818 Capftulo 15: Transmisi6n de sefiales entre eélulas Figura 15-52 Ensamblaje de las ceélulas de un fotorreceptor en un ‘omatidio en desarrollo de Drosophila. Dibujo esquematico del reclutamiento secuencial de fotorreceptores, empezando con R8 y acabando con R7, que es la ilima cdlula fotorreceptora que se desarrolla, alo cirosou, > a mombransh ples rroso1. inhibin ‘de GAP ular las c¢lulas para proliferar 0 para diferenciarse, estos cortos eventos senal hhan de convertirse en eventos més duraderos que puedan mantener la sefial y transmitirla hacia el mticleo. El sistema de transmisién esta formado por miilti- ples cascadas de fosforilacién en serinas/treoninas, que interacttian entre si, las ‘cuales son procesos mas duraderos que las fosforilaciones en tirosinas, En estas cascadas participan muchas serina/treonina quinasas, pero una familia que contiene al menos cinco miembros parece desempefiar un papel especialmente importante -las proteina quinasas activadas por mitégenos (MAP, de Mitogen Activated Proteins) (también denominadas quinasas reguladas por sefales extra- celulares, (ERK, de Extracellular Signal Regulated Kinases)). Estas quinasas son activadas por una gran variedad de sefiales inductoras de proliferacién y dife- renciaci6n celular, algunas de las cuales activan receptores tirosina quinasa mientras que otras activan receptores asociados con proteinas G. Una caracteristica extraordinaria de las MAP-quinasas es que para que se produzca sit activacién completa hace falta que se fosforilen sobre una treonina Yy sobre una tirosina que en la proteina se hallan separadas por un solo amino- ‘icido. La protefna quinasa que cataliza ambas fosforilaciones se denomina ‘MAP-quinasa-quinasa. Los requerimientos de fosforilacién sobre tirosina y treo- nina aseguran que MAP-quinasa se mantenga inactiva mientras no se active es- pecificamente la MAP-quinasa-quinasa, cuyos tnicos substratos conocidos son lay MAP-quinasas. A su vez, la MAP-quinasa-quinasa se activa por fosforilacién en serinas/treoninas catalizada por una MAP-quinasa-quinasa-quinasa, que al parecer se activa por unién a Ras activa (Figura 15-54). ‘Cuando MAP-quinasa se halla activada, transmite sefales fosforilando va- rias proteinas celulares, incluyendo otras proteina quinasas y proteinas regula- doras de genes. A menudo, en cuestién de minutos después de que la célula haya sido estimulada por un factor de crecimiento, se activa la transcripcion de tun conjunto de genes tempranos inmediatos. Un complejo proteico que desem- pefta un importante papel en esta activacién de la transcripeién es el complejo discutido anteriormente formado por el factor de respuesta sérica (SRF, de Se- rum Response Factor) y Eik-1. El complejo se halla unido constitutivamente a tuna sectencia determinada de DNA (el elemento de respuesta sérica) que se ha- lla en la regi6n reguladora de un gen denominado fos y de otros genes (véase Fi- gura 15-32). Ademés, las MAP-quinasas pueden fosforilar la proteina Jun, que se combina con la proteina recién formada Fos formando una proteina activa regu- ladora de genes denominada AP-1. Entonces, esta proteina AP-1 activa otros ge- Seftalizacién via receptores de superficie celular asociadas a enzimas Figura 15-53 Procesos de seftalizaci6n celular tempranos en el desarrollo de R7. La activacién del receptor tiosina quinasa Sev dela superficie de la célula precursora de R7 por la protefna Boss de la superficie de [RB esta acoplada con la activacién de Ja proteina liberadora de nucleétidos de guanina Sos, a través de a pequenia proteina adaptadora SH, Drk. Drk reconoce una determinada trosina autofosforilada de la proteina Sev ‘mediante un dominio SH2 e interact on Sos mediante des dominios SH, Sos estimula la proteina inactiva Ras para climinar el GDP que tiene uni idoy asia captar GTP, lo cual activaa Ras para transmitirla senal siguiendo el ‘curso del proceso de sefalizacién, pesar de que no se muestra aqui, R a as se halla unida ala cara citosolica dela ‘membrana plasmitica, Se cree qu ‘Sev activa tambien inhibe GAP, la cual podria, caso de estar activa, ccontrarrestarlafuncién de Sos cestimulando a Ras para hidrolizar e1 GTP que llevara unido, ina Parece que el acoplamiento del receptor trosina quinass con Ras ‘ocurte a través del mismo mecanis ‘queen las células de mamitero, ivindose, a9 membrana plasmatica nes, aunque no se conoce con total exactitud cual es el papel que desemperia en 1a proliferacién celular. Ta quinasa C también puede fosforilar Jun y, como se ilustra en la Figura 15- 54, puede activar la MAP-quinasa-quinasa-quinasa, de forma que tanto Jun como MAP-quinasa-quinasa-quinasa constituyen ejemplos de puntos de inte- gracion donde convergen varios procesos de sefalizacién. La actividad de los receptores asociados a tirosina quinasa depende de tirosina quinasas que no son receptores*” Muchas de las protefnas receptoras de la superficie celular que han sido aisladas yy caracterizadas no encajan en ninguna de las familias principales de receptores ue hemos descrito hasta aqui: no estén asociadas a canales inicos ni a proter- nas G, y carecen de dominio cataltico evidente. Este gran y heterogéneo surtido de receptores incluye receptores para la mayoria de los mediadores locales (de- nominados citoquinas) que regulan la proliferacién y diferenciacién en el siste- ‘ma hematopoyético, as{ como receptores para algunas hormonas (por ejemplo, hormona de crecimiento y prolactina) y los receptores especificos de antigenos de los linfocitos T y B. Muchos de los teceptores de esta categoria trabajan a tra- vés de tirosina quinasas asociadas que fosforilan varias proteinas diana cuando el receptor se une a su ligando, La mayoria de las quinasas asociadas con estos receptores asociados a tirosina quinasa son miembros de la bien caracterizada Jamilia Sre de proteina tirosina quinasas no receptoras mencionadas anterior ‘mente, o de la recientemente descrita familia Janus también de proteina tirosi- na quinasas no receptoras. Se cree que estos receptores acttian casi de la misma forma que los receptores tirosina quinasa, excepto en que su dominio quinasa esta codificado por otro gen y se halla asociado no covalentemente con la cade- na polipeptidica del receptor. Como los receptores tirosina quinasa, parece que a menudo en su activacién participa una dimerizacién del receptor inducida por elligando (Figura 15-58). 820 Capftulo 15 : Transmisién de sefiales entre células Figura 15-54 Cascada de fosforilaciones serina/treonina activada por Ras y quinasa C. Enel proceso activado por receptores tirosina quinasaa través de Ras, a menudo MAP-quinasa-quinasa- ‘quinasa es una serina treonina quinasa denominada Raf, que al parecer se activa por la unin de una Ras activada. En el proceso activado por receptores asociados a proteinas Ga través de quinasa C, MAP-quinasa- 1 ‘quinasa-quinasa puede ser tanto Raf ‘como otra protefna serina/treonina ‘quinasa. En levaduras y en todos los animales en que se ha estudiado, se ha ‘encontrado una cascada de {osforilaciones serina/treonina ‘semejante a ésta, en la que participan protefnas relacionadas estructural y funcionalmente con éstas. Estas ‘cascadas de fosforilacion integean y amplifican senales que provienen de diferentes estimulos extracelulares, Los receptores tirosina quinasa, ‘también pueden activar un proceso de sefializacion més directo hacia el nuicleo mediante lafosforilacion. directa de proteinas reguladoras de ‘genes, que asi se activan, que ccontienen dominios SH2. En mamiferos existen al menos ocho miembros de la familia Sre de protet na tirosina quinasas no receptoras: Src, Yes, Fr, Fyn, Lck, Lyn, Hck y Blk. Contie~ nen dominios SH2 y SH3 y todos ellos se hallan localizados en la cara citoplas- matica de la membrana plasmética, unidos a ella en parte a través de su interaccién con protefnas receptoras transmembrana y en parte por st unin covalente a cadenas lip{dicas. Varios miembros de la familia se hallan asociados con diferentes receptores y fosforilan de forma solapada distintos juegos de pro teinas diana. Por ejemplo, Lyn, Fyn y Lek se hallan asociadas a diferentes juegos de receptores en los linfocitos. Todos los miembros de la familia Src tirosina qui- nasa se activan cuando un ligando extracelular se une a una protefna receptora adecuada. Los miembros de esta familia Sre quinasa pueden asociarse tanto a recepto- res que no tienen actividad tirosina quinasa intrinseca como a receptores que si Ja tienen. En varias eélulas no-linfoeiticas, por ejemplo, Fyn se une via su domi- nio SH2 a receptores PDGE activados, los cuales fosforilan a Fyn en residuos ti- rosina, activando asf su actividad quinasa. Por ello no resulta sorprendente que Jos receptores tirosina quinasa y los receptores de la familia Src de receptores asociados a actividad tirosina quinasa, en algunos casos activen los mismos pro- ccesos de sefializa ‘De mucha menos informacién disponemos sobre la familia Janus de protef- na tirosina quinasas no receptoras, que incluye JAK1, JAK2 y Tyk2. Participan en. la sefializacién a partir de varios receptores asociados a tirosina quinasa, inelu- yendo los de hormona de crecimiento, prolactina y varias citoquinas que actéan sobre células hematopayéticas (se discuten en el Capitulo 22). En muchos receptores asociados a tirosina quinasa, la unién del ligando ge- nera el ensamblaje de dos o mas subunidades receptoras transmembrana dife- rentes. Un ejemplo de ello, bien estudiado, es el receptor para interleucina-2 (-2), un mediador local segregado por los linfocitos T que estimula la prolife- racién de los linfocitos (se discute en el Capitulo 23). El receptor IL-2 esté com- puesto de tres cadenas polipeptidicas (« B y 7, que al parecer se ensamblan des- pués de que el igando se una a un complejo receptor funcional, como se ilustra ena Figura 15-56, Algunos receptores son protefna tirosina fosfatasas® Como hemos mencionado previamente, los residuos de tirosina que son fosfori- lados por proteina tirosina quinasas son rapidamente desfosforilados por protef- na tirosina fosfatasas. Desde el punto de vista estructural, estas enzimas no es- tn relacionadas con las proteina serina/treonina fosfatasas de las que hemos tratado antes, y inicamente eliminan un grupo fosfato de determinados grupos fosfotirosina de determinados tipos de proteinas. Estas fosfatasas se encuentran tanto en formas solubles como unidas a membrana, y de ellas existen muchas mis variedades que de serina/treonina fosfatasas. Su elevada especificidad ase- {gura que las fosforilaciones en tirosina tengan una vida media muy corta y que el nivel de fosforilacién en tirosinas que presentan las células en reposo sea muy @ HE RENEE AHH oan ctveda Sefializaci6n via receptores de superficie celular asociados a enzimas Figura 15-55 Estructura ‘tridimensional dela hormona de ‘erecimiento humana unidaasu receptor. La hormona (en rojo) seha tunido, entreeruzéndolos, a dos receptores idénticos (uno se muestra fen verde y lotro en azul), formando ‘un receptor homodimero. (No podia. preverse en absoluto que un ligando monomérico como la hormona de | ‘crecimiento pudiera unirse, | centrecruzéndolos, a dos receptores, ya ‘que ello supone que los dos receptores, idénticos han de reconocer 20nas diferentes de la hormona)) Se cree que Ja dimerizacién inducida porla unién | de un ligando une los dominios citoplasmaticos de las das proteinas receptoras transmembrana de un solo paso. Ello, a su vez, activa una tirosina ‘quinasa no receptora (no se muestra). Las estructuras mostradas aquf han sido determinadas por estudios de cristalografia de rayos X de complejos formadas entre la hormona y los, dominios extracelulares del receptor producidos por la tecnologia del DNA recombinante. (De AM. deVos, M. Ultrech y A.A. Kossiako, Science 255:306-312, 1992. © the AAAS), Figura 15-56 Ensamblaje inducido por ligando en un receptor IL-2. Parece que launién de baja afinidad de 1-2 lacadena adesencadena et ensamblaje del receptor heterotrimérieo, de ata afnidad, e cual entonces se une, activéndola, ala tirosina quinasa Ick, interaccionando conellaa través dela cola ‘toplasmatica de la subunidad bajo. Las proteina titosina fosfatasas no acttian simplemente revertiendo conti- nuamente el efecto de las proteina tirosina quinasas, sino que pueden estar re- guladas y desempefiar funciones especificas en la sefializacién celular, asi como ‘enel control del ciclo celular (se discute en el Capitulo 17) Un importante ejemplo de protesna tirosina fosfatasa regulada es la protetna CD45, que se encuentra sobre la superficie de los linfocitos y juega un papel ‘esencial en la activaciGn tanto de los infocitos B como de los linfocitos T por an- {igenos extrafios. CD49 es una glucoproteina que atraviesa la membrana una sola ver, cuyo dominio tirosina fosfatasa se halla expuesto sobre la cara citoplas- ‘matica de la membrana plasmética. Cuando se activa por la reaccidn de un anti- ‘cuerpo extracelular (su ligando normal no es conocido), su dominio catalitico se activa eliminando grupos fosfato de residuos de tirosina de determinadas pro- teinas diana de la célula, Se cree que una de estas proteinas es la tirosina quina- sa Lok mencionada anteriormente. Cuando es desfosforilada por CD45, Lek se activa fosforilando otras proteinas de la célula, La utilizacién de oncogenes que provocan céncer ha permitido identificar muchos componentes del proceso de sefializacién de los receptores tirosina quinasa® Normalmente, las células de los animales superiores se dividen dnicamente cuando son estimuladas por factores de crecimiento, producidos por otras célu- Jas y que habitualmente actian uniéndose a receptores tirosina quinasa. Las cé- lulas cancerosas proliferan excesivamente principalmente porque, como resul- tado de mutaciones acumuladas, son capaces de dividirse sin ser estimuladas por otras células, por lo que no se hallan sujetas al control “social” normal de la proliferacién celular (se discute en el Capitulo 17). No es sorprendente que mi chas de estas mutaciones afecten a genes que codifican proteinas que participan en los procesos de sen 1 utilizados por los receptores tirosina quinasa. De hecho, muchos de los genes que codifican las proteinas seftal discutidas en esta seccidn, incluyendo Ras, Src (y los otros miembros de la familia Src), Raf, Fos y Jun, fueron identificadas por primera vez como formas mutantes en ceélulas can- ccerosas 0 en virus tumorales productores de cancer. Como se discute en el Ca tulo 24, los genes mutantes se denominaron oncogenes antes de que se com- prendiera st origen a partir de genes normales; por ello, a los genes normales habitualmente se les denomina proto-oncogenes. En principio podria esperarse que cualquier mutacin que provocara la pro- duccién de una proteina anormalmente activa de cualquier paso del proceso de sefializacién que va desde el factor de crecimiento hasta el nticleo pudiera pro- ducir cdncer al estimular a la célula a proliferar en ausencia de las sefiales extra- celulares apropiadas. Las evidencias de que disponemos corroboran esta idea. El ‘oncogén sis, por ejemplo, codifica un forma funcionalmente activa de PDGF que se expresa de forma inadecuada; las células que presentan el oncogén sis y tam- bien expresan receptores para PGE, continuamente se autoestimulan a prolife rar. El oncogén erbB codifica una forma truncada del receptor de EGF que tiene un dominio intracelular tirosina quinasa que se halla activo continuamente; las c¢lulas que expresan este oncogén se comportan como si estuvieran estimula- das continuamente a proliferar por un factor de crecimiento. Las eélulas se com- portan de una forma similar a como lo harfan si hubieran estado infectadas por un virus que transportara el oncogén v-src, que codifica una forma constitutiva- mente activa de la proteina tirosina quinasa Src, o como si expresara un onco- gén ras, que codifica una forma anormal de una proteina Ras que no puede inactivarse a si misma ya que ha perdido la capacidad de hidrolizar GTP. De for- ‘ma similar, las células proliferan de forma anormal si expresan un oncogén que codifica una forma constitutivamente activa de una proteina reguladora de un. gen activado por factores de crecimiento, como Jun o Fos. Los estudios sobre oncogenes de este tipo no s6lo han iluminado los mecanismos moleculares que estén en la base del céncer, sino que también han descubierto muchas proteinas 822 Capitulo 15: Transmisién de sefiales entre células desconocidas de los procesos de sefalizacién activados por factores de creci- miento. Algunas hormonas que estimulan sus células diana a proliferar se unen a re- ceptores asociados a proteinas G en lugar de unirse a receptores tirosina quina- sa. Por ejemplo, el factor liberador de hormona de crecimiento (GHF, de Growth Hormone Releasing Factor) estimula las cétulas secretoras de hormona de creci- miento de la gléndula hip6fisis a proliferar; GHE se une a los receptores de GHE que activan la adenil ciclasa a través de una proteina G estimuladora G,. El inere- ‘mento resultante de los niveles de AMP efclico induce a las células de la hip6fisis a dividirse. Como era de esperar, las mutaciones del gen o, que inactivan la acti- vidad GTPasa de la subunidad « de G, (y por lo tanto hacen que la proteina esté activa de forma constitutiva) producen un oncogén que se halla frecuentemente en los tumores humanos de hipéfisis. Las protefnas de la superfamilia TGF-B activan receptores que son proteina serina/treonina quinasas” Los factores-f transformantes del crecimiento (TGF-B, de Transforming Growth Factors-B) constituyen una familia de mediadores locales que regulan la prolife- raci6n y otras funciones de la mayoria de tipos celulares de los vertebrados. Los cinco miembros de la familia (TGF-B1 al 5) son proteinas de estructuras y fun- iones similares. Sus efectos sobre las células son variados. Dependiendo del tipo celular, pueden suprimir la protiferacién, estimular la sintesis de matriz ex- {racelular, estimular la formacién del hueso y atraer células por quimiotaxis. Los TGF-B son sintetizados como largos precursores y secretados como complejos Inactivos que més tarde son activados por procesamiento proteolitico. Algunas otras proteinas sefial extracelulares estan estructuralmente relacio- nadas con los TGF-. Entre ellas, encontramos las activinas, que juegan tn papel importante en la induccién del mesodermo en el desarrollo de los vertebrados (se discute en el Capitulo 21), ylas proteinas de morfogénesis del hueso, que esti- mulan la formacién del hueso. En conjunto, estas proteinas constituyen la su- erfamilia TGF-B. Recientemente se han clonado y secuenciado los cDNA que codifican algu- hos receptores de miembros de esta superfamilia. Estos receptores son protet ‘nas que atraviesan una vez la membrana y con dominios serina/treonina quina- sa sobre la cara citosdlica de la membrana plasmética. Se trata de los primeros receptores serina/treonina quinasa que se han identificaco, y todavia conoce- ‘mos muy poca cosa acerca de los procesos de sefalizacion que ellos activan. En la Figura 15-57 se resumen algunas de las proteina quinasas especfficas de tirosina o especificas de serina/treonina de que hemos tratado en este capf- tulo, El receptor transmembrana Notch media la inhil mediante un mecanismo desconocido" icién lateral La clase de receptores de superficie celular asociados a enzimas es grande y va- riada, Incluye, ademas de los que ya hemos considerado, las integrinas, que se lunen a componentes de la matriz extracelular. Como se discute en el Capitulo 19, estas proteinas transmembrana no solo unen células a la matriz a través de contactos focales sino que también generan senales intracelulares en estos luga- res de unién, probablemente desencadenando el ensamblaje de un complejo se~ fhal intracelular(véase Figura 17-42). El mecanismo de sefializaci6n utilizado por algunas proteinas receptoras es todavia tan desconocido que resulta dificil clasificar tales receptores. Un ejem- plo importante de ello 1o constituye la proteina de Drasophila Notch. Como se explica en el Capitulo 21, esta protefna transmembrana que la atraviesa una sola ‘vez juega un papel crucial en las interacciones céhula-célula que controlan el de- licado patrén de diversificacién celular durante el desarrollo de la mosca. Tipi- Sefializaci6n via receptores de superficie celular asociados a enzimas Nib Ni crrosot Ni Ne Ny 8 Hooc coon | receptor ‘cooH COOH deinsutina COOH OOM captor Se receptor ¢ POGF ‘seer 00H coon ve ‘veaniokdie J eae ql f i; ff obo 4 & fa if : emt fe saff oS2cancronaensat sate Re OT Ni NH Nie | | | oon ‘COOH coon COOH camente, una eélula que carece de Notch no responde a la inhibicidn lateral-se- hiales inhibidoras que provienen de sus vecinas inmediatas y que normalmente harfan que se diferenciara siguiendo un camino diferente a ellas. En un embri6n normal de mosca, por ejemplo, un precursor de célula nerviosa inhibe a sus ve~ as para impedir que también se transformen en cétulas nerviosas, por lo que dichas células se transforman en células epiteliales; en mutantes Notch esta in- hibicién no se produce y todas las células se transforman en células nerviosas. ‘Como en el caso de la protefna Sev de la que hemos tratado anteriormente, Notch se activa al unirse no a moléculas sefial solubles sino a protefnas que se presentan sobre la superficie de las células adyacentes. Aunque se conoce la se- ‘cuencia de Notch y se han identificado algunas de las proteinas del proceso de se- falizacién, mediante analisis genéticos, todavia no esté claro de qué forma Notch transmite la sefial al interior de la célula. Otras protefnas semejantes a Notch tam- bién desempeiian papeles importantes en el desarrollo de los vertebrados, pero ‘en estos casos, los mecanismos que participan en los procesos de sefializacién también resultan un misterio, Resumen Se conocen cinco clases de receptores asociados a enzimas: (1) receptores guanilato ciclasa transmembrana, que generan GMP ciclico directamente; (2) receptores tiro- sina fosfatasa, que ellminan fosfatos de cadenas laterales de fosfotirosina de deter- ‘minadas protetnas; (3) receptores serina/treonina quinasa transmembrana, que anaden un grupo fosfato a cadenas laterales de serina o de treonina de protetnas 824 Capitulo 15: Transmisién de sefiales entre eétulas Figura 15-57 Algumas de las protefna ‘quinasas discutidas en este capftulo. Se muestra el tamatioylalocalzacion de sus dominios eataliticos en verde ‘xcuro). En cada easo el dominio cataltco es de unos 250 residuos de aminoécidos de longitud. Todos estos dominios tienen una secuencia similar, lo cual sugiere que todos ellos hhan evolucionado a partir de una 4quinasa primordial comuin. Notese ‘que todas las tirosina quinasas mostradas se hallan unidas ala membrana plasmética, mientras que a mayoria dela serina/treonina

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