Ensefiar lengua
DER) CCRC Sd6.4, Comprensién lectora
= Leer es comprender 193
= Tipos de lectura 197
= Perfil del buen lector. "201
= Modelo de comprensién lector 203
- Microhabilidades moses 206
+ Diddctica rome “208
Consideraciones previas "208
‘Técnicas y recursos para la comprensién “209
Defectos de la lectura 282
Planificacién de la comprensién ...
Evaluacién ...
~ Para leer més.
Leer es comprender
La lectura es uno de los aprendizajes més importantes, indiscutidos
\discutibles, que proporciona la escolarizacién. Desde tiempos
pretéritos, cuando la capacidad de descifrar simbolos era calificada de
‘asi mégice, hasta la actualidad, la alfebetizacién se ha considerado
siempre una capacidad imprescindible. A finales del siglo XX es
précticamente imposible imaginar a alguien que no sepa leer, que
pueda sobrevivir en la selva de papel escrito que genera cualquier
Sociedad letrada occidental. ;Son tantas las cosas obligatorias que
solamente se pueden hacer leyendo y escribiendo! Burocracia, leyes,
trabajo, ocio, vivienda, etc.
La alfabetizacidn es la puerta de entrada a la cultura escrita y a todo
Jo que ella comporta: una cierta e importante socializaci6n, conoci-
mientos e informaciones de todo tipo, etc. La lectura es un instrumen-
to potentisimo de aprendizaje: leyendo libros, periddicos o papeles
podemos aprender cualquiera de las disciplinas del saber humano.
Pero, ademas, la adquisicién del cédigo escrito implica el desarrollo
de capacidades cognitivas superiores: la reflexién, el espititu critico,
Ta conciencia, etc. Quien aprende a leer eficientemente y lo hace con
‘constancia desarrolla, en parte, su pensamiento. Por eso, en definitiva,
fa lectura se convierte en un aprendizaje transcendental para la
escolarizacion y para el crecimiento intelectual de la persona. Aspec-
193,194
tos como el éxito 0 el fracaso escolar, la preparacién técnica para
acceder al mundo del trabajo, el grado de autonomia y desenvoltura
personales, etc. se relacionan directamente con las capacicades de la
lectura. Las expresiones que designan este hecho y que se utilizan a
‘menudo en la escuela y en los manuales pedagégicos son: aprender @
leer, leer para aprender y aprender a aprender con la lectura,
Pero a pesar de la importancia de la lectura, todavia hay mucha
gente que no sabe leer ni escribir. Solamente en el estado espafol,
segiin cita Isabel Solé (1992), los escandalosos indices de analfabetis-
‘mo (1.300.000 personas; 4,18% de los adultos) y de analfabetismo
funcional (10 millones de adultos escolarizados) deberian avergonzar-
nos, si —como se prentende— vivimos en una sociedad moderna,
igualitaria y democratica. ;Y ya no digamos lo ocurre en otras socie:
dades, en las del llamado Tercer Mundo!
Este titimo dato de analfabetismo funcional es el mas delicado y
alarmante. Mientras la escolarizacién obligatoria se generaliza y se
prolonga, mientras cada vez hay menos nifios y ninas fuera de la
escuela, las estadisticas y las previsiones de los expertos pronostican
‘un incremento de los analfabetos funcionales, es decir, de las personas
que a pesar de haber aprendido a leer y escribir no saben ni puecien
utilizar estas habilidades para defenderse en la vida diaria. Los diez
millones citados anteriormente hacen referencia, mayoritariamente, a
adultos de entre 18 y 35 afios que poseen el certificado escolar,
Y bien: jedmo puede ser que personas que han cursado EGB 0
Primaria, que han obtenido el certificado escolar, no puedan compren-
der ni hacerse entender por escrito a la hora de la verdad? {Es que
‘ocho afios de escolarizacién no sirven para conseguir este objetivo?
Algo falla en este circulo... y nunca seran los alumnos, las personas,
‘que deben considerarse como victimas mas que como culpables.
Una causa esencial de este fracaso, entre otras, es en el tratamiento
didactico que la lectura ha recibido tradicionalmente en la escuela. A
pesar de constituir un objetivo de primer orden, la ensefianza de la
lectura queda confinada al area de lenguaje, a los primeros afios
escolares y a una metodologia analitica y mecénica que obtiene unos
resultados —como minimo— cuestionables. Detengémonos a reflexio-
nar sobre este tema.
En primer ugar, la concepcién de la lectura que subconscientemente
ha transmitido la escuela tradicional es limitadisima. De una forma
explicita, nos ha instruido en las microhabilidades més superficiales
y primarias, que son las que ha considerado importantes, es decir: dis-
‘riminar la forma de las letras, establecer la correspondencia entre s0-nides ¥ grafias, leer palabra por palabra, pronunciar las palabras co-
ee eeute entender todas las palabras de cada texto, ete En cambio,
ber leera la velocidad adecuada, comprender el texto a divenee vinn,
les inferir significados desconocidos, ec. Y hay que tener en enenla que
ea nlcdecr tiandolo todo... ¥ lo que se cree que no lo es: leer notes,
publicidad, informes, redacciones de alumnos, cartas que estas coat,
Piendo, etc; leerlos deprisa, saltindonos muchisimas palabras, sac
Uinlat y retroceder en el texto, buscar solamente lo que nos inrenay
diejat que queden cosas por entender, leer de pie, sentades ee af
autobis, en el metro, ete.
En tercer lugar, los nifios empiezan a descifrar letras en el Parvuc
Pino ¥ consolidan el eédigo escrito durante los primerus ance do
Primaria. Se espera que a final de esta etapa lean con cierta autora,
¥ fier. En las zestantesdreas del curriculum (Sociales, Matemetnns
‘eorla, que la lectura ya estd adquirida y no se vuelve a insistir en olin
Geletrear, silabear, comprender palabras y frases aisladas, te: Ninng
{nines pasan la mayor parte del tiempo oralizando fragmentos eoere
C991 eapaeBtimlento del maetro. Solé (1992), y Colomer y Camps
GeuD exponen que, con pocas variaciones, la’secuencia digacths
pica y t6pica de ensenanza de la lectura es la siguiente:
1. El maestro escoge una lectura del libro de texto.
2 Un alumno lee un fragmento, mientras el resto sigue la lectura
en su libro,
3. Si comete algiin error de oralizacién, el maestro lo corrige
directamente 0 delega en otro alumno,
‘4. Lina vez oralizado el texto, el maestro formula preguntas sobre
4a lectura, que los alumnos contestan individuelmene
5. Bjercicios de gramética a partir del texto,
195196
Para experimentar lo que pueden sentir y aprender los alumnos
con una actividad como la anterior, os proponemos este ejercicio de
McDowell (1984), que reproduce las mismas condiciones. Intentad
leer en voz alta el fragmento, como si fuérais el alumno designado por
el maestro, y después responded a las preguntas de comprensién.
Lectura
Plot ro yo pedrf en el catén. Soeré un ban cote, El graso estaba
santamente linendo. No lo drinié. Una Para jocia y un Pari joci
estaban plinando a mi endidor. Estaban gribblando atamente. Yo
¢groti al Pari y a la Para fotnamente. No goffrieron nu platién. Na el
hini yo no putre licrerlo, Yo lindré vala. Possri fobanamente,
Preguntas
eDénde pedié el escritor Plot 10?
{Drinis al graso?
2Quién estaba plinando a su endidor?
dstaban gribblando atamente o sapamente?
iLindrié o no?
Encontraréis la solucién correcta a las preguntas al final de este
capitulo, Si las habéis respondido, lo més probable es que las hayais,
acertado todas, a pesar de no haber entendido absolutamente nada del
texto. [Hay que tener en cuenta que no hay nada que comprender,
Porque el texto es falso: se trata de un conjunto de palabras inventadas
y sin sentido, algunas de las cuales calcan la morfologia castellana
(atamente, endidor, etc.) con un grupo de palabras gramaticales (yo, un,
«i, ete), que son las que podemos suponer que comprenderian todos
Jos alumnos Gy también las que, al fin y al cabo, permiten responder
on éxito las preguntas de comprensién})]
Y bien, zqué hemos aprendido con este eercicio? Hemos practica-
do la lectura en voz alta. A lo mejor nos ha costado pronunciar las
palabras dificiles que leemos por primera vez, ¢ incluso podemos
habernos equivocado, pero en ese caso el maestro nos habria corregi-
do. El hecho de haber podido responder a todas las preguntas de-
muestra capacidad de observacién y un buen entrenamiento en la
mecanica de responder a preguntas cerradas, pero de ningdn modo se
puede deducir que hayamos comprendido el texto, ni las palabras
importantes, ni siquiera la estructura sintéctica de la frase.