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Revista de | rat Comparapo unr kart) Sociedades "Numero coordinado por Hécrox Ateoxia y Horacio Rorrstaw Fundadores POM eee rr rt LAS SOCIEDADES EN EL PERU por CARLOS A. Soro Coacutta! y Dante: Ectatz Moreno? Sumanto Sistema de constituciin de sociedad, I, Inlrodussién, 2, Las ateratvas ocietarias, 2. La sociedad andnima ordnara. 22. La sociedad andnima cerada, 23. La socledad andnima abies. 2.4. La sociedad colectiva, 2S. Le sociedad en ‘omandita simple. 2.6, La sociedad en comandita por neciones 27. La sociedad ‘comercial de responsabilidad fimitads, 28. La sociedad civil ordinati. 2.9. La sociedad civil de responsabilidad limitada, I. Sociedades unipersonales. .Ierouc= cin. 2.La empresa individual de responsabilidad linitads, 3, La unipersonalidad societria, I. Sosiedsdesextranjeras, |, Inrodyecion, 2 Fl otorgamiento del poder ane el e6nsul peruano. 3. Flotorgamieno del poder ante una autoridad competente eetranjera. 4. Cuestiones comunss al viorgamlento de poder 8, La inscipeibn del poder. 6 Las sucursles TV. Sociedadesirepulres, 1. Sistema de cons tucidn de sociedades 1, Inroduceién En el Per, segun la legislacién vigente y en atencién, al principio constitucional de pluralismo econémico (art. 60 de la Constitucion Politica de 1993), el Estado reconoce que nuestra economia se sustenta " Abomndo ¥ Atbit, Miembro del Estudio MuBia, Ramirez, Pétez-Toiman & LLuna-Vietoria Abogados. Director Ejecutivo de ly Revista Pomsana de Artitaje, Pro= fesor de Derecho en la Universidad de Limo, Profesor visitamte de los Posgrados on Derecho de Datos y Derecho de la Empresa en la Universidad Nacional det Litoral de Santa Fe, Argentina. Emaik:eseto@@munizlaw com. P Ahogado, Presidente de Fehai2 Estudio de Abogados. Miembro asociado del Instituto Peruano de Derecho Mercantil, Catedritico del Diploma de Postado en Derecho de la Empresa de In Pontificia Universidad Ctlice del Peri. Web page wat echaiz.com, e-mail: daniel@echaiz.com. 185 Docrrina en la coexistencia de diversas formas de propiedad y de empresa. En este sentido, existe una amplia gama de posibilidades para la organi- zacién corporativa, mas aiin si se parte de la distincién entre la orga- nizacion individual y la colectiva. Dentro de este contexto, el esquema de organizacién individual puede manifestarse a través de: el empresario unipersonal (conocido como el tipico comerciante), que es una persona natural cuya activi- dad se encuentra regulada por el Cédigo de Comercio (Ley de fecha 15-2-1902); y la empresa individual de responsabilidad limitada, que ‘es una persona juridica cuya actuacién est contemplada en la Ley de la Empresa Individual de Responsabilidad Limitada (Decreto Ley 21,621 de fecha 14-9-76). Por el contrario, si se opta por un esquema de organizacién colectiva existen hasta cinco posibilidades: la asociacién, el comité y la funda- cidn’, reguladas por el Cédigo Civil (Decreto Legislative 295 de fecha 24-7-84); la cooperativa, consagrada en el Texto Unico Ordenado de la Ley General de Cooperativas (Decreto Supremo 074-90-TR de fecha 7-1-91), y el diversificado abanico de tipos societarios que regula la Ley General de Sociedades (Ley 26.887 de fecha 5-12-97), dentro de los cuales encontramos: la sociedad anénima (ordinaria, cerrada y abier- ta), la sociedad comercial de responsabilidad limitada, la sociedad en comandita (simple y por acciones), la sociedad colectiva y la sociedad civil (ordinaria y de responsabilidad limitada). Respecto de la evolucién historica de la normatividad peruana en materia societaria hay que anotar brevemente que, con fecha 27 de julio de 1966, se expidié la Ley de Sociedades Mercantiles, aprobada mediante ley 16.123, la misma que era concordante con el entonces vigente Cédigo Civil de 1936. Casi 20 afios después, se promulgé la Ley General de Sociedades a través del Decreto Legislative 311 de 1984, siendo modificada posteriormente por el Decreto Supremo 003- 85-JUS del 13 de mayo de 1985, el cual dio origen al Texto Unico Concordado de la Ley General de Sociedades; ambos dispositivos le- gales repitieron casi en su totalidad lo que ya se habia esbozado en 1966. 3 Aunque, dependiende de la constitueién, la Fundacion también podria ubicarse cen el esquema de organizacién individ 156 Las socimDaDes en et. Pa dad sovietaria en el Peri continua ‘ ert continuaba rigiéndose or una lesislacin cuya antgiedad superaia Tor 28 shan have -venido en obsoleta por los constantes cambios normativos’ y eco- nmicos* que se experimentaron. En este escenara fue publicnde Resolucién Ministerial 424-94-1US, mediante la cual se pombe snc Gomision para elborr ol Antprosecto de a Ley General ge Soc ndes; el resultado dl trabajo de dicha Comision fue ie acne General de Sociedades®. ee seta Lay EI desarrollo evoltivo de! modelo soviet P clo sovitario gener que en Ia ace tualidad sea eoncebido como “un instramento uridice reconocide fag Su eficieme organizacion y tan permeable y Nexble cone aan ee utilizada en cualquier proyecto empresa, para que sen la teen ae una empresa, tenga 0 no fines de lucro”’. En eite sentido, “hay acuerdo ente Tos tatadists t . ente Tos tatadists en que el nico del concepto de sociedad esta formado por tres elementos fade, tales: origen negoval,existencia de un in comin y conrbecten oe todos los Socios a su realizacién”*. En efecto, podemos definir a la Sociedad como “cualquier asociaién voluncaria digs ls corsccs cin de una finalidad comin mediante la contrbucion de todos oa ir CRMbUMeR GON un nuevo Cig Civil detado en 1984, e eal eves (a enca dau atcesor a repuacion narmatvaSelescedad eal he aie sonata: aimiamo, te sanconaon dor noevr eos sonal oe 1993, son jos cuore intodujo tna modern conecion de tenes cn a ire mercado, fname Ia cas de Ton fe Schone a a broduccn legisla orentacs a ramaver le enone a ae verso concepos, tales como Ia seguride jurdics, el comatoey, eae Jel mercado, a jguldad de oportunidad, la libertad de empresa, Ie ibne eee ola — ‘Subsidiaria del Estado, entre otros, ms 2 "Tan slo considers el frtmeno Ge Ta glbalirciéneconémicy nereado de valores y el desarrollo empresarial ‘st ei Lot “Kllciin y rapruaenia Form Coon Ealogal ae Forum Casa oral, Tilo S006 9 ae 2 Nid: BEAUMONT CALLIRGOS, Ricardo, Conentarior la Le, Gerecat ee ees, ee ee p. 27. fee “ Igo y MENENDEZ, Aurcio, Curso de Derecho Mercani, * 4, Civitas, Madrid, 1999, «I, p. 430. Ge WEEN Beco Wha UiRIA-y MENENDEZ, 0 it, p30 137 Doermna, 2. Las alternativas societarias ‘Como mencionamos anteriormente, nuestra actual legislacién so- cictaria contempla un diversificado abanico de posibilidades para cons- tituir sociedades, el mismo que desarrollaremos en sus principales ca- racterfsticas, 2.1. La sociedad anénima ordinaria Como anota Francesco Galgano, la sociedad anénima es el prototipo de.la.categoria de las sociedades de capitales y se ha constituido en la figura societaria tipica del capitalismo moderno!. Se caracteriza Por,ser: “a) sociedad capitalista, constituida inruito pecunia, en la que en principio apenas juegan ni interesan las condiciones personales de og socios, sino la participacién que cada uno tenga en el capital social, que habra de integrarse precisamente por las aportaciones de aquellos: b) sociedad por acciones, en la que el capital habra de estar necesa tiamente en partes alicuotas denominadas acciones, que confieren a su titular la condicién de socio; c) sociedad de responsabilidad limitada, gn el,sentido de que el socio se obliga a aportar a la sociedad ef importe de las acciones que haya suscrito, respondiendo frente a ella del incumplimiento de esa obligacién, pero sin responsabilidad personal alguna por las deudas sociales, por lo que los acreedores sociales no pueden, en ningtin caso, dirigir sus acciones contra los socios para Ia satisfaccién de sus créditos”" Nuestra Ley General de Sociedades le confiere, sin lugar a dudas, la maxima atencién pues de los cinco Libros que conforman su es- ‘twuctura normativa, el Libro IT esta dedicado exelusivamente a la “So- ciedad: Anonima”, mientras que el Libro III lo esté a las “Otras formas societarias”. A. partir del esquema originario de la sociedad anénima se cons- truyeron dos figuras especiales: la sociedad anénima cerrada y la so- ciedad anénima abierta. En tal sentido, actualmente es posible adoptar alguna de esas dos formas especiales 0 asumir simplemente la estructura 18. Vid. GALGANO, Francesco, Derecho Comercial, Temis, Santa Fe de Bogoti, 1999, vol. I, p. 36. "Vid URIA y MENENDEZ, ob. cit., p. 769. 158 LAS SocIEDADES HN #1. Pend: tipica de la sociedad anénima que la Ley General de Sociedades iden- tifica como tal, pero que en la priictica es conocida como “sociedad andnima ordinaria” 0 "sociedad anénima comin”. La sociedad anénima ordinaria', identificada por la sigla SAy es a modalidad societaria tradicional y se encuentra recogida por la max yoria de legislaciones del mundo, bien sea con esa denominacién on otra como por ejemplo Ia sociedad por acciones. Bs una sociedad capitalista y como tal, en ella prima el innutto ‘ecunice, nace de forma voluntaria ya que los propios fundadores som quienes optan por esta alternativa societaria, aunque debe mencionarse ue existen supuestos en los que se crea por imperio de la ley, como cen el caso de los bancos, los que por disposicién del articulo 12 dé Ja Ley General del Sistema Financiero y del Sistema de Seguros y Organica de la Superintendencia de Banca y Seguros (Ley 26.702, de fecha 6-12-96) s6lo pueden constituirse como sociedades anénimas. EI niimero minimo de socios que se requiere para constituir una sociedad es de dos, de acuerdo a Ia regla general contenida en. el articulo 4° de la Ley General de Sociedades; no existe un numero méximo de socios pues uno de los objetivos de dicha norma es lograr luna mayor atomizacién del capital social : Asimismo, la sociedad anénima cuenta eon una denominacién social © nombre de fantasia cuya funcién consiste en identificar a las socie- dades capitalistas, sin que sea necesario que aquélla se forme con el nombre de los socios. Y es que, “la anonimatividad de Ia sociedad anénima proviene de la ausencia de raz6n social y de la legitima au- torizacién para llevar un nombre [...] Existe completa libertad”, Por otro lado, uno de los principales atractivos de esta forma so- cietaria es que la responsabilidad de los accionistas se limita a sus aportes. Esta es la caracteristica fundamental que ha propiciado e| desarrollo de la sociedad andnima a lo largo de los siglos y a pivel ‘mundial. | fi, TORRES MORALES, Carlos, La sociedad anénima, en Tra de Derecho Mercantil, Instituto Peruano de Derecho Mercantil y Editorial Gaceta Juridica, Lita, 2003, tf ps. 319. 361. ¥ Wid. BEAUMONT CALLIRGOS, ob. cit, p. 156 DocrRina El capital social se encuentra representado en acciones, las mismas que, de acuerdo a la Ley de Titulos Valores (Ley 27.287 de fecha 7-6-2000), califican como titulos valores y como tales estn destinados a circular en ¢l mercado, constituyendo uno mis de los atractivos de la sociedad anénima. Dichas acciones, por cierto, pueden ser inscritas en el Registra Piblico det Mercado de Valores (alcance facultativo). La estructura de organizacién corporativa de la sociedad anénim se sustenta sobre tres pilates: la junta de socios (para las “grandes decisiones”), el dicectotio (para {a “administracion general”) y la ge~ rencia (para la “administracién diaria”) 2.2. La sociedad anénima cerrada La figura de la sociedad anénima cerrada", identificada por las siglas SAC, fue propuesta por la Comisién Redactora del Anteproyecto de la Ley General de Sociedsdes!’ en reemplazo de la sociedad co- mercial de responsabilidad linitada. Sin embargo, posteriormente la ComisiGn Revisora del Anteproyecto decidié mantener esta tltima fi- gura, por lo que hoy en dia conviven en la Ley General de Sociedades dos modelos societarios pricticamente idénticos, cuya tinica diferencia es la representacién del capital social mediante acciones en un caso (la sociedad anénima cerrada) y mediante participaciones en el otro (a sociedad comercial de responsabilidad limitada). Al igual que todos los tipos societarios, ef nimero minimo de socios legalmente exigido es de dos y el maximo se restringe a 20 socios; ello debido a la naturaleza precisamente cerrada de este tipo de so- ciedades en las que prima el intuito persone, techo que ta convierte en una atractiva posibilidad para las empresas familiares. También cuenta con una denominacién social y 1a responsabilidad de los socios se limita a sus aportes. Merece destacarse, por un lado, que este tipo de sociedad no puede inscribir sus acciones en el Registro Publioo del Mercado de Valores (alcance prohibitive) y, por otro, que cuenta con un directorio facul- 4 Vid. BEAUMONT CALLIRGOS, ob. cits ps. 462 a 478. | Mas conocida como la Comisién Normand, en alusiOn a su presidente Enrique Normand Syacks, 160, LAS SOCIEDADES EN EL PERO tativo, esto es, no obligatorio pues si se careciera de él, el gerente general asumiria las funciones que a éste le corresponderian. 2.3. La sociedad anénima abierta La sociedad anénima abierta'®, identificada por las siglas SAA, tiene como antecedente inmediato a la sociedad de accionariado di- fundido que, aunque ya existia en nuestro pais, no estaba regulada por la Ley General de Sociedades, sino por la Ley del Mercado de Valores. Este tipo societario suele utilizarse cuando el nimero minimo de socios es de 750, aunque también podria constituirse contando con un niimero menor de accionistas, lo que no resultaria del todo recomenda- ble, sobre todo para sociedades con capital social masificado, las que mayoritariamente optan por cotizar sus acciones en la Bolsa de Valores. Como en los supuestos anteriores, la sociedad anénima abierta cuen- ta con una denominacién social que permite identificarla y diferenciarla del resto de sociedades; sus socios tienen responsabilidad limitada y su capital social esté representado en acciones. Se debe tener en cuenta que “el objetivo de sus accionistas es asegurarse una inversién rentable, para lo cual resulta indispensable la movilidad del capital, la profesionalidad de la administracion y el control de una forma de inversién que se considera publica”. En este sentido, este tipo societario esté orientado a la transaccin abierta de sus acciones en el mereado bursatil, y en consecuencia, éstas no deben tener ninguna carga, pues ello atentaria contra el trafico eficiente, rapido, dinémico y seguro'*. En efecto, las acciones de este tipo de sociedad deben inscribirse de manera obligatoria en el Registro Publico del Mercado de Valores. Una vez inscritas, dichas acciones y su comercializacién pasan a estar bajo control directo de un organismo estatal, la Comisién Nacional Supervisora de Empresas y Valores (CO- NASEV). ' Para revisar una interesante doctrina precursors eff. ECHECOPAR REY, Luis, La sociedad anénima: familiar y abierta, en Revista Peruana de Derecho de ta Em: ppresa, Asesorandina, Lima, 2002, Afio XVM, N° 54, ps. 177 a 197. Vid. ELIAS LAROZA, Enrique, Ley General de Sociedades Comentada, Normas Legales, Trjillo, 1998, p. $09. “Vid. BEAUMONT CALLIRGOS, ob. cit, p. 519, 161 Docraina a 2.4. La sociedad colectiva Actualmente, la sociedad colectiva se encuentra en desuso pues Posee caracteristicas poco atractivas para quien pretenda integrarse como socio. Se define como una “sociedad externa que tiene por objeto la ex- Plotacion de una actividad mercantil bajo una razén social unificada ¥ en la que todos los socios responden de manera ilimitada’"”, Sus notas configurativas son: “a) propésito de lucro; b) el régimen de responsabilidad solidaria de sus miembros, y c) el ejercicio de la actividad bajo un nombre propio”, EI niimero de socios que se exige como minimo es de dos y, al igual que en otras formas societarias, no existe un limite maximo. Cuenta con una razén social © nombre que identifica a este tipo de sociedades personalistas y que esté integrado por el nombre de todos, algunos © uno de los socios, seguido por las siglas SC. Los socios asumen responsabilidad solidaria (el acreedor puede actuar contra to dos, algunos 0 uno de ellos) e ilimitada (no hay responsabilidad limi ada, como en la sociedad anénima)"! ya que la administracion de 1a sociedad corresponde separada ¢ individualmente a cada uno de ellos. El capital social esta representado por participaciones que no cons. tituyen titulos valores y, por ende, no se transmiten con la misma facilidad con que lo hacen las acciones. A diferencia de la mayoria de sociedades en las que la regla general es el plazo indefinido, la sociedad colectiva tiene un plazo fijo de duracién y si se quiere pro. rrogar éste, se necesita del acuerdo undnime de los socios. Dicho acter. do también sera necesario para realizar modificaciones al pacto social, decidir la transferencia de participaciones, etc. Vid. URIA y MENENDEZ, ob. cit. p. 575. 3 Vid. BEAUMONT CALLIRGOS, ob, cit, p, 539. 2 Este grado de responsabilidad, segiin Joaqui Seo aesPemde personal e ilimitadamente de las deudas sociales: es decir, su respons aR a esté limitada a su aportacién, ni a una determinada suma de garertie™ S, Joaquin, Curso de Derecho Mercantil, Temis, Bogota, 1987, rimpre, sidn de la séptima edicién, t. II, p. 119. 162 LAS SOCIEDADES EN Et PERC es soca on et Pa 25. La sociedad en comandita simple ;,L# sociedad comanditaria, es como se ha dicho con acierto, una sociedad colectiva con un injerto capitaista, Las caracteristicas genes rales del tipo se resumen en tres notas: "2) La primera nos indica que es sociedad personalista, es decir, una sociedad cuya organizacién resulta en buena medida depen. lente de las condiciones y vicisitudes personales de los soci tanto colectivos como comanditarios, "P) La sociedad comanditaria se nos presenta, en segundo lugar, como sociedad externa, que gira en el tréfico bajo una razon Social unificada [...] no puede configurarse como mera relacién obligatoria entre los socios ni articular su patrimonio sobre la base de una comunidad pro-indiviso, “e) La sociedad comanditaria es, en fin, sociedad mercantil, en el sentido que constituye un tipo formado historicamente en aten- cién a las exigencias de la actividad comercial e industrial y codificado en el Derecho Mercantil de Sociedades””? ‘La sociedad en comandita simple, identificada por las siglas S. en Ces otra de las formas societarias que ha caido en desuso por su complejidad ya que diferencia entre sus socios a los que tienen la Condicién de colectivos de los que tienen la condicién de comanditarios, A ello se suma que su capital social esté representado en participa. Glones, las que al no ealificar como titulos valores, encuentran impe. dimentos para transferirse libremente en el mercado de valores. Cuenta con una razén social integrada por el nombre de los socios colectivos precisamente a efectos de establecer la diferencia en el ine: tamiento de la responsabilidad societaria. Ast, la responsabilidad es solidaria e ilimitada tratindose de los socios colectives y limitada al aporte traténdose de los socios comanditarios, Por regla general, la administracién corresponde a 10s socios co- lectivos, y la transmisién de las participaciones difiere segtin el tipo de socio que la esté efectuando, pues si la realiza un socio colectivo se requiere la unanimidad de los socios colectivos y la mayoria absoluta ® Hid. URIA y MENENDEZ, ob. cit, p. 706. 163 Doctena de los socios comanditarios, mientras que si la efecttia un socio co- manditario es necesaria la mayoria absoluta de fos socios colectives y Ia mayorla absoluta de los socios comanditarios. 2.6. La sociedad en comandita por acciones Es una sociedad de capitales y, en particular, una variante de la sociedad anénima; por ello se le aplican, siempre que sean compatibles, as normas relativas a la sociedad anénima”® La sociedad en comandita por acciones, identificada por tas siglas S. en C. por A., est construida sobre el esquema de la sociedad en ‘comandita simple, por lo que comparte caracteristicas semejantes y adolece de los mismos defectos que ella. En palabras de Fernindez de la Gandara, “el modelo de operacién previsto en la comanditaria por acciones opera mas bien con fSrmulas de organizacién a través de las cuales se satisfacen los intereses de los intervinientes con un simple mecanismo de aportacién-participa- cidn, Todos son accionistas y todos pueden, en calidad de tales, acceder al desempefio de la funcién gestora”™. Deben resaltarse tan s6lo dos cuestiones. Por un lado, su capital social esta representado por acciones y, por otro, la transmisién de acciones que efectita ¢) socio comanditario es libre (careciendo de reglas establecidas en la Ley General de Sociedades). 2.7. La sociedad comercial de responsabilidad limitada La sociedad comercial de responsabilidad limitada “se estructuré sobre la base de sociedades personalistas en as que predomina el intuito persone y el affectio societatis, limiténdose la res- ponsabilidad de los socios a su aporte, rasgo caracteristico de ta so- ciedad de capitales. Es decir, recogié elementos de [as formas socie- tarias que habjan existido hasta esa época, para dar origen a un nuevo tipo, con caracteristicas tanto personalistas como capitalistas”™. % Fid. GALGANO, ob. cit, p. 181. 24 FERNANDEZ DE LA GANDARA, Luis, La sociedad comanditaria por accio- nes, en Comentario at Régimen Legal de las Socledades Mercaniies, ditigide pos Usia, Rodrigo; Menéndez, Aurelig y Oliveneia, Manuel, Civitas, Madrid, 1992, XIII, p. 45. Wid, BLIAS LAROZA, ob. cit, p. S75. 168 LAS SOCIEDADES EN HL Pent En la legislaci6n societaria del Peni, Ia sociedad comercial de res- Ponsabilidad limitada*, identificada por las sighas SRL, debié nalmente ser reemplazada dentro de la Ley General de Sociedades por la sociedad anénima cerrada, pero finalmente subsistié en el texto normativo, por lo que actualmente puede apreciérsele como Ia version preliminar de la sociedad anénima cerrada. Cuenta con un minimo de dos y tiene como méximo veinte socios, ¥ constituye —por su naturaleza cerrada— la alternativa tradicional de las empresas familiares. El capital social de la sociedad comercial de responsabilidad limi- tada esta representado en participaciones, lo que la diferencia primor- dialmente de la sociedad anénima cerrada; respecio de la responsabi- lidad de los socios es preciso seftalar que “son los socios los que responden en forma limitada hasta el monto, importe o valor de lo que aportaron 0 se comprometicron a aportar; la sociedad, en tanto Persona juridica 0 ente, tiene responsabilidad ilimitada, responde ab- solutamente y sin limitacién alguna, con todo su patrimonio presente y futuro, que incluye, entre otros, el valor que pueda asignarse a su establecimiento, a su clientela y fama mercantil, la maquinaria y el mobiliario, sus contratos de trabajo, su know how, prestigio, lemas comerciales, nombres comerciales, disefios, patentes, marcas y otros signos distintivos e intangibles”, Los socios gozan ademas del derecho de suscripcién preferente para que tengan la posibilidad de mantener su participacién porcentual, evitando la dilucién del capital social. 2.8. La sociedad civil ordinaria La sociedad civil ordinaria, identificada por las siglas S. Civil, es una sociedad de carécter personalista pues en ella prima el intuito Persone. Se constituye para un fin comiin de cardcter econémico que se realiza mediante el ejercicio personal de una profesién, oficio, pe- Ticia, préctica u otro tipo de actividades personales por alguno, algunos 3 Cir. ECHAIZ MORENO, Daniel, La sociedad comercial de responsabilidad Uumitada a ta tue de ta tegislacion peruana, en Revista del Derecho Comercial y de ax Obligaciones, Depalma, Buenos Aites, 2003, N° 203, ps, 733 a 751. 37 Vid. BEAUMONT CALLIRGOS, ob. cit, p. 561. 165 Docraina © todos los socios. Lo que la diferencia de los otros tipos societarios es la primacia del elemento personal sobre el elemento capital. La jurisprudencia nacional ha seftalado que “en este tipo de socie- dades hay dos elementos fundamentales: el elemento personal basado en la confianza [...] y la no especulacién mereantil; las personas se unen en consideracién a las cualidades personales de sus miembros Para obtener una ganancia derivada del esfuerzo directo que ellas rea- lizan (fin econémico), como sucede por ejemplo en el caso de las sociedades de profesionales..."2* Cuenta con dos socios como minimo y carece de un limite maximo. Asimismo, tiene una razén social y su capital social esta representado en participaciones para cuya transmisién se requiere el consentimiento de los socios. Merece destacarse que los socios responden por las deudas sociales en forma personal y subsidiaria, pues gozan del beneficio de excusién, el cual permite al socio demandado exigir la previa excusién de su Patrimonio social, es decir, que no puede ser compelido al pago por el acreedor sin que previamente éste no se haya dirigido contra los bienes de la sociedad, pudiendo ademas sefialar al acreedor los bienes de la sociedad con los cuales puede lograr el pago de sus acreencias. Los socios responden segiin lo acordado en el pacto social o, en su defecto, de manera proporcional a sus aportes. Asi, cuando no sea Suficiente el patrimonio de la sociedad para responder por las deudas de ésta, se le podré exigir a cada socio una proporcién de la deuda impaga, conforme aparezca en el pacto social celebrado entre ellos relativo a la participacién de cada uno en las pérdidas. A falta de tal estipulacién, responderdn en proporcién a sus aportes; en este caso no existe Solidaridad entre los socios respecto de las deudas sociales. 2.9. La sociedad civil de responsabilidad limitada La sociedad civil de responsabilidad limitada, identificada por las Siglas S. Civil de RL, est4 construida normativamente sobre la estruc- tura de la sociedad civil ordinaria, por lo que sélo difiere de ella en 2 Vid OSORIO RUIZ, Zaid, Jurisprudencia Comercial, 1* ed, Gaceta Juridica, Lima, 2000, p, 485, 166 LAS SOCIEDADES EN EL PERO dos aspectos: por un lado, tiene un mimero maximo de socios que es de 30 y, por otto, los socios no responden personalmente por las obli- gaciones sociales, ya que su responsabilidad se limita al aporte que hayan efectuado. La Ley establece que es obligatorio que los nombres de alguno, algunos o todos los socios se incluyan en la razén social, seguido de las palabras Sociedad Civil (o su expresién abreviada S. Civil), © Sociedad Civil de Responsabilidad Limitada (0 su expresion abre- viada S. Civil de RL) a efectos de establecer deslindes de responsa- bilidad. II, Sociedades unipersonales L. Introdueci6n La sociedad implica, por definicién, la reunién de dos o més per~ sonas pues de existir un solo titular, mal podria hablarse de sociedad ¥, menos atin, de socio, Las alternativas tipicas para la organizacién empresarial son la sociedad (en el modelo colectivo) y la empresa individual (en e! modelo precisamente individual). La legislacién pe- ruana se adscribe a dicha tendencia y regula a la sociedad en la Ley General de Sociedades y a la empresa individual de responsabilidad limitada en la Ley de la Empresa Individual de Responsabilidad Li- mitada. 2. La empresa individual de responsabilidad limitada La empresa individual de responsabilidad limitada, identificada por las siglas EIRL, fue concebida con la finalidad de desarrollar y pro- mover la pequefia empresa privada y contribuir a Ia generacién de empleo. Dentro de sus principales caracteristicas y ventajas se puede mencionar que sélo se requiere la voluntad de una persona natural ipara darle vida, lo que la diferencia de las sociedades reguladas en la Ley General de Sociedades, ya abordadas en lineas anteriores, dado ‘gue estas illtimas necesitan como minimo la concurrencia de dos per- ‘sonas para constituirse. Este modelo de organizacién corporativa permite al titular de la 1s7 Docremsa ee misma, limitar la responsabilidad de su patrimonio en el negocio 0 actividad que pretenda iniciar. En efecto, cualquier persona con énimo de iniciar un negocio puede hacerlo a través de la constitucién de una empresa individual de responsabilidad limitada. De esta forma, el titular Puede determinar previamente qué monto se encuentra dispuesto a arriesgar e invertir en una actividad en particular, EI patrimonio que el titular destine a la ereacién de la empresa i dividual de responsabilidad limitada seré considerado como un patti- monio auténomo y distinto del que posea el titular, el mismo que una ‘ez inserito pasaré a formar parte de la nueva persona juridica. 3. La unipersonalidad societaria El articulo 4° de la Ley General de Sociedades prescribe: “La so- Ciedad se constituye cuando menos por dos socios”. El postulado tras- cripto constituye la regla general y, como tal, admite algunas excep- ciones. Ello sucede, por ejemplo, con las subsidiarias de las empresas del sistema financiero, las sociedades agentes de bolsa y las empresas del Estado que, de acuerdo a la Ley General del Sistema Financiero ¥ del Sistema de Seguros y Organica de la Superintendencia de Banca y Seguros (art. 36, inc. 3*), el Texto Unico Ordenado de la Ley del Mercado de Valores (Decreto Supremo 93-2002 de fecha 11-6-2002, art. 201) y la Ley de la Actividad Empresarial del Estado (Ley 24.948 de fecha 2-12-88, art. 7°) respectivamente, se constituyen como socie. dades andnimas sin exigirseles el requisito de la pluralidad de socios. Por lo demas, son estos los casos que, atendiendo al articulo 363 de la Ley General de Sociedades, pueden generar una fusidn simple si ‘es que Ia matriz decide fusionarse con su filial, cuyo tinico titular es precisamente dicha matriz. Empero, ademas de estos supuestos ciertamente excepcionales, cabe Preguntarse si es posible 0, en todo caso, pertinente, la existencia de Sociedades que cuenten con un solo titular. Esta inquietud adquiere mayor relevancia dado que varias legislaciones admiten expresamente 4a figura de la “sociedad unipersonal”, tipo societario que tiene un solo titular y que estructurado sobre el esquema de organizacion in. idual, asume la regulacién societaria, Son ejemplos de ello la so. 168 LAS SOCTEDADES EN EL PER ciedad de fundacién unipersonal (Alemania); Ia sociedad de respon- sabilidad limitada unipersonal (Italia); la empresa unipersonal (Colom- bia), y la sociedad unipersonal de responsabilidad limitada (Francia, Espafia®, Dinamarca, Holanda, Portugal, Bélgica y Luxemburgo). En principio, en el Peri no es posible Ia existencia de sociedades con un solo titular, a menos que nos encontremos en alguno de los supuestos excepcionales ya resefiados. Ello encuentra justificativo, por un lado, en la exigencia de Ia pluralidad de socios, estipulada en el citado articulo 4° de la Ley General de Sociedades y, por otro lado, en el efecto juridico que se le atribuye a la pérdida de dicha pluralidad, esto ¢s, la disolucién de Ia sociedad si es que no se recompone aquella pluralidad en el plazo de 6 meses, segiin prescribe el artfculo 407, inciso 6° de la misma norma societaria, ee Sin embargo, ello no impide que fécticamente exista una con un solo titular, circunstancia apreciada muy especialmente, por ejemplo, tratindose de multinacionales que ingresan al mercado pe- nano, En efecto, nada obsta para que una sociedad tenga dos socios con Ia siguiente distribucién poreentual: el mayoritario con 99,99% y el minoritario con 0,01% y la casuistica asi lo demuestra. En la préctica, éstas son sociedades con un solo titular, mas atin cuando el receptor de aquella reducida participacién accionaria, entregada en ciertas oca- siones hasta de manera gratuita por la matriz, suele ser el gerente general, el abogado 0 alguna otra persona de confianza vinculada a lla, oe puede legarse a situaciones atin mas extremas, aunque dentro del marco de la legalidad. Asi por ejemplo, una persona natural podria ss inhi ls Co oe sara eee tei So cameman peer eae Se arisely ect eset pes eet pelicans ne hae ten age Eeraner seer ens iene ai bit lina Semone (osname ing. dirigido por: Uria, Rodrigo; Menéndez, Aurelio y Olivencia, Manuel, Civitas, Madrid, 169 Docransa LAS SOCIRDADES EN BL Pua optar por constituir una empresa individual de responsabilidad limitada de Ia cual seria, obviamente, su tinico titular y, contando con dicha personalidad juridica, podria posteriormente constituir una sociedad, Puesto que “ia sociedad se constituye cuando menos por dos socios, que pueden ser personas naturales 0 jurfdicas”, atendiendo a lo que dispone el articulo 4° de la Ley General de Sociedades. Dado que, Juridicamente, la persona natural difiere de la persona juridica, aun cuando el titular de esta diltima sea aquélla, en la practica estaremos ante una sociedad conformada por un solo titular. Entonces, ante la interrogante de si en el Pent es posible que existan © no sociedades con un solo socio, debe emitirse la siguiente respuesta: formalmente, no; realmente, sf. Definitivamente, ée no fue el pro- Pésito del legislador cuando elaboté el texto de nuestra Ley General de Sociedades, pero es incuestionable que la realidad supera la pre- visin legislativa y pueden presentarse situaciones como las descritas, ciertamente legales, aunque cuestionables atendiendo al espritu de Ia ley, IIL. Sociedades extranjeras 1. Introduccion Las sociedades extranjeras o no domiciliadas en el Perit pueden actuar en el pais a través de representantes 0 apoderados designados ara realizar determinadas operaciones 0 tramites, asi como para sus- cribir diversos contratos segiin las necesidades de dicha sociedad. La Resolucién 200-2001-SUNARP/SN de fecha 27 de julio de 2001 es la norma encargada de regular la inscripcién de poderes otorpados or sociedades 0 sucursales establecidas en el extranjero. Para Ia ins- cripcién registral, ante el Registro de Personas Juridicas, de los poderes otorgados por sociedades extranjeras, se establecen dos mecanismos en los articulos 165 a 169 de la Resolucién: primero, el otorgamiento °° Para mayor informacién eff. ECHAIZ MORENO, Daniel, Propuestas para una reforma de la legislacién societaria en el Peri, en Revista Universitas, Facultad de Ciencias Juridicas de la Pontificia Universidad Javeriana, Bogoté, 2005, N° 110, ps. 191 0 223, 170 del poder ante el cénsul peruano y, segundo, el otorgamiento del poder ante una autoridad competente extranjera”. 2, Elotorgamiento del poder ante el consul peruano Si el poder se otorga directamente ante el cénsul peruano def lugar del domicilio de la persona juridica no domiciliada, en 1a escritura piiblica se debe acreditar la capacidad, la identidad y Ia facultad del fepresentante de la persona juridica que comparece para otorgar cl poder, la misma que, posteriormente, seri remitida al Peri para st presentacién al Ministerio de Relaciones Exteriores (ef cual certifica la firma del cénsul peruano) y, finalmente, sera presentada ante los Registros Pablicos para la inscripeién del nombramiento respective. ‘Adicionalmente, es necesario acompafiar un certificado de vigencia de la sociedad otorgante u otro instrumento equivalente expedido por ‘utoridad compeiente en el pals de origen de la sociedad, debiéndose legalizar la firma de Ja persona que suscribe dicho certificado de vi- gencia ante el cénsul peruano. Este documento ademas deber ser presentada ante el Ministerio de Relaciones Exteriores con el fin de certificar dicha firma. Es menester indicar que, segin la legislacién peruana, no se requiere la aceptacion del poder pata sv inscripeién. inalmente, si el certificado de vigencia se encontrara redactado en idioma extranjero, debera ser traducido en el Peri por un traductor oficial debidamente colegiado. 3. Elotorgamiento del poder ante una autoridad competente extranjera La otra alternativa, en caso de no concurrir ante el cénsul peruano, es la de otorgar el poder ante una autoridad competente extranjera, En tal supuesto, debers adjumarse el cevtificado de vigencia al que ye nos habiamos referido, el mismo que debera cumplit con las forma- lidades y requisites mencionados. 2 Para un interesante enfogue sobre un tépico cuyo ratanients superaia el presente informe eft. COLLANTES GONZALEZ, Jorge Luis, Proteceiin diplomatica, el nexo de ia naciomalidad » figuras soeietarias, wn. Estudios de Derecho Societario, Libro Homenaje a Enrique Elias Laroza, Normas Legales, Tryjillo, 2005, ps. 177 a 198, 7 Docraina, ee Adicionalmente, se deberin presentar los siguientes documentos: ~ Primero, la declaracién jurada o la certificacién expedida por un Tepresentante legal de la sociedad extranjera que cumpla las fun. ciones de fedatario 0 equivalente, en el sentido de que el otorgante del poder se encuentra debidamente facultado para actuar como Tepresentante de aquélla y otorgar poderes a su nombre en los {érminos establecidos en el titulo materia de inscripcién, de acuer. do con el estatuto de la sociedad y las leyes del pais en que dicha sociedad fue constituida; ~ Segundo, la certificacién de la autoridad o funcionario extranjero competente de que el otorgante se encuentra debidamente facul. tado, de acuerdo con las normas estatutarias de Ia sociedad ex. tranjera y leyes del pais en que dicha sociedad fue constituida, Para actuar como representante de ésta y otorgar poderes a su nombre, en los términos establecidos en el titulo materia de ins. cripcién; 0, ~ Tercero, otro documento con validez juridica que acredite el con- tenido de algunas de las declaraciones seftaladas en los acdpites primero o segundo, 4. Cuestiones comunes al otorgamiento de poder Las declaraciones juradas y certificaciones deberdn consignar los nombres completos de los declarantes y sus domicilios. Asimismo, se Tequiere que las firmas de quienes brindan las declaraciones juradas © las certificaciones estén legalizadas ante notario, eénsul peruano o autoridad extranjera competente. 5. La inscripcién del poder El procedimiento para la inscripeién de poder otorgado por una Sociedad extranjera reconoce los siguientes pasos: 1) La elaboracién del poder, sefialando el nombre del o los apo- derados que se designan, as{ como las facultades que se lee otorgan™, 2 Bin caso el poder se otorgue ante el cinsul peruano se clevaré a escrtura pblica Im LAS SOCIEDADES EN EL PERO as sortase 2) Debe recabarse el certificado de vigencia de la sociedad otorgante wotro documento equivalente, legalizando la firma de la persona que lo suscribe ante el cénsul peruano, 3) Debe recabarse, en caso sea necesario, alguna de las declara- ciones juradas a las que nos referimos en el punto 4, 4) Cuando los documentos antes mencionados lleguen al Peri, de- berdn legalizarse ante e] Ministerio de Relaciones Exteriores, 5) De encontrarse que alguno de los documentos esté redactado en idioma extranjero, deberd traducirse al idioma espafiol por un traductor oficial. 6) Debe levarse a cabo la inscripcién en los Registros Piblicos, 6. Las sucursales La Ley General de Sociedades establece que las sociedades cons tituidas en el Pert asi como aquellas constituidas en el extranjero pueden contar con sucursales u oficinas en otros lugares del pais, siem- pre y cuando no exista estipulacién expresa en contrario en el estatuto © pacto social E! articulo 396 del referido dispositivo juridico define a Ja sucursal como todo establecimiento secundario a través del cual una sociedad desarrolla, en lugar distinto a su domicilio, determinadas actividades comprendidas dentro de su objeto social. En este orden de ideas, sus principales caracteristicas son las siguientes: ~ Carece de personeria juridica independiente de su principal (max tri). ~ Esté dotada de representacién legal permanente, ~ Goza de autonomia de gestion en el ambito de las actividades que 1a principal le asigna Tratindose de sucursales constituidas por sociedades extranjeras, el acuerdo debe ser adoptado por el érgano social competente de la sociedad extranjera o matriz y debe indicar: ~ El capital social que se le asigna a la sucursal para el giro de una vex elaborado el texto definitive se prosede a su suscripcién defiitva por el representante de In sociedad otorgante constituda en el extranjero debidamente sere- ita, is Docrava sus actividades en el pafs, pese a que el mismo no se considera como un patrimonio distinto al de la matriz, La declaracién de que tales actividades estan comprendidas dentro de su objeto social = La designacién de por lo menos un representante legal perma- nente en el pais. ~ El lugar de domicilio de la sucursal. ~ Su sometimiento a las leyes peruanas, entre otras cuestiones. Respecto de la designacién del representante legal permanente de la sucursal, éste ejercerd las funciones del gerente general y gozara de sus atribuciones. Dado que la sucursal es un establecimiento secundario y dependiente de su matriz, ésta tiene absoluto y directo control sobre la adminis- tracién y gestiGn de aquella, No obstante, Ia Ley General de Sociedades otorga a la sucursal autonomifa de gestion en el ambito de las actividades que le sean asignadas por la principal, Ia misma que se encuentra en directa relacién a las facultades que la principal pueda conferir al re- bresentante de la sucursal nacional y, por consiguiente, puede ser amplia © restringida. Bajo este orden de ideas, las sociedades extranjeras pue- den actuar en el Perd, de forma directa, por medio de una sueursal; sin embargo, hay que tener en consideracién que la sociedad extranjera ~en calidad de sociedad principal o matriz~ responde por las obliga- cciones de su sucursal, de modo tal que la principal resultaria responsable or las obligaciones tributarias, laborales y contractuales que pudiese asumir la sucursal nacional en el desarrollo de sus operaciones", Sociedades irregulares En doctrina suele diferenciarse entre las sociedades de hecho, es decir, aquellas que actian en el mercado sin haberse constituido como tales, y que por lo tanto carecen de personalidad juridica ya que no han cumplido con la inscripcién registral de su constitucién, aun cuando } Ello impone una mayor carga administrativa a la labor de control y monitoreo de las actividades de la sucursl, pues expone a a principal por los acos negligentes en los que pudiesen incurrr los funcionariot y trabajadores de su sucursal. 174 Las socirpapes EN FL Prt! revelan Ia existencia de un contrato de sociedad, y las sociedades irre- gulares © aquellas que si se constituyeron pero que, en el camino de su desarrollo como tales, perdieron Ia regularidad, Nuestra Ley General de Sociedades contempla ambas modalidades bajo el nombre de “sociedades irregulares”. Asi, en su articulo 423 estipula: “es irregular la sociedad que no se ha constituido e inscrito conforme a esta ley o la situacién de hecho que resulta de que dos o ‘mAs personas aetiian de manera manifiesta en sociedad sin haberla constituido ¢ inscrito”, supuestos tipicos de lo que suele llamarse como “sociedad de hecho”, Dicho articulo 423 contempla otros casos que, en doctrina, calificarian también como supuestos de “sociedades de hecho”: Cuando transcurren 60 dias desde que los socios fundadores han firmado el pacto social sin haber solicitado el otorgamiento de Ja eseritura pablica de constitucion. ~ Cuando transeurren 30 dias desde que la asamblea designé al 0 los firmantes para otorgat la escritura piiblica sin que éstos hayan solicitado su otorgamiento. ~ Cuando transeurren mas de 30 dias desde que se otorgé la es critura pablica de constitucién, sin que se haya solicitado su inscripcién en et Registra ~ Cuando transcurren 30 dias desde que quedé firme la denegatoria a la inscripeisn formulada por el Registro. Finalmente, encontramos dos supuestos que, en doctrina, eonstitui- ian “sociedades irregulares propiamente dichas”: ~ Cuando la sociedad se ha transformado sin observar las dispo- siciones de esta ley, y ~ cuando la sociedad continiia en actividad no obstante haber in- currido en alguna causal de disolucién prevista en la ley, el pacto social 0 el estatuto. En referencia a este titimo punto, el articulo 407 de la Ley General & Sociedades contempla las siguientes causales de disolucién: 1) El veneimiento del plazo de duracién, que opera de pleno de- recho, salvo si previamente se aprucba e inseribe Ia prorroga en el Registro; v5 Docraiva 2) Ia conclusion de su objeto, la no realizacién de su objeto uci un periodo prolongado o Ia imposibilidad manifiesta de reali- zarlos 3) la continuada inactividad de Ia junta general; sea nterioe jidas que reduzcan el patrimonio neto a cantidad i 0 tae parte del capital social pagado, salvo que sean fa sarcidas © gue ef capital social pagado sea aumentado o reduc’ ‘en cuantia suficiente; 5) el acuerdo de a junta de acreedores, adoptado de conformidad con Ja ley de fa materia, 0 la quiebra; ; 6) Ia falta de pluralidad de socios, si en el témino de seis meses dicha pluralidad no ¢s reconstituida; 7) Ia resolucién adoptada por la Corte Suprema, conforme al ar- ticulo 410 de la Ley General de Sociedades; 8) ef acuerdo de fa junta general, sin mediar causa legal o estat % coauile ofra causa establecida en la ley o prevista en el pacto, social, en el estatuto social o en convenio de los socios registrado ante la sociedad. + por bin cnn jora un caso de irregularidad por incur de aucientiny Stplar en actividad. £1 arieulo 4 dele Ley Genera de Sociedades prescribe que “la sociedad se constituye cuanda menos or dos socios", Io que consttuye la tegla general. La misma norma citada sostiene al finalizar st primer pérafo que “si Ia sociedad pierde ta pluralidad minima de socios y ella no se reeonstituye en un plazo de seis meses, se disuelve de pleno derecho a} término de ese laze" Por su parte, el articule 407, inciso 6” dela Ley General de Sociedades contempla como una de las eausales de disolucién de la soviedad la “alta de pluralidad de socios sien el término de seis meses die pluralidad no es reconstituida”. Ademds, de acuerdo a nuestra legis- lacién societaria, a la disoluci6n te sigue ta liquidacién y, finalmente, la extingién de la sociedad, Como mencionamos, el articulo 423 de la Ley General de Socie~ dades pretend lepslr Ia sociedad regular pero termina pronuncin- dose respecto de la sociedad de hecho (aquella que opera sin hat 176. LAS SOCIEDADES EN Ex. PERO $$ ___ 1 soctepapes en ex Puno constituido legalmente) y de In sociedad irregular propiamente dicha (aquella que, habiéndose constituido legalmente, sigue operando des- puts de haber sufrido algin incidente en el camino que le hace perder {a condicién de regular). Precisamente, una de las causales de irregu- laridad, prevista en el inciso 6° del articulo 407 de la Ley General de Sociedades, se presenta “cuando continia en actividad, no obstante haber incurrido en causal de disolucién prevista en la ley, el pacto social o el estatuto”. El paso siguiente a la irregularidad, parafraseando el articulo 426 de la Ley General de Sociedades, es, alternativamente, la regularizacién 0 la disolucién de la sociedad, la que es solicitada or los socios, los acreedores de los socios, los acreedores de la sociedad © los administradores. Hasta este punto, podemos extraer las siguientes conclusiones: 1) La sociedad requiere, por regla general, de dos socios como minimo. 2) Si se pierde Ia pluralidad existe un plazo de seis meses para recomponerla a través de la bisqueda de un nuevo socio. 3) Vencido el plazo y no recompuesta aquella pluralidad, la sociedad incurre en causal de disolucién y, por ende, debe disolverse, liquidarse y extinguirse 4) Si la sociedad sigue operando se convierte en imegular, 5) Ante la condicion de irregular de la sociedad caben dos posi- bilidades: regularizarla (es decir, hacerla pasar de irregular a re- gular recomponiendo la pluralidad de socios) 0 disolverla (lo cual conlleva a su liquidacién y extincién). Llegamos asi a la cuestién controvertida, Nuestra legislacién so- cietaria refiere contradictoriemente, por un lado, que el efecto de la pérdida de Ia pluralidad de socios y su no recomposicién en el plazo legal es la disolucién de pleno derecho (art. 4°, primer pérrafo in fine de la Ley General de Sociedades) y, por otro lado, que ante la misma situacién el efecto es la disolucién (art. 407, inc, 6° de la Ley General de Sociedades). La disolucién de pleno derecho es, como su nombre lo indica, ab- soluta (ipso jure) y no admite ninguna excepeién, de forma tal que ante ella, la sociedad debe disolverse. Por e! contrario; la disolucién, 7 Dacraina lata y sin ningtin agregado, es relativa porque permite que se ingrese en el terreno de Ia sociedad irregular que admite tanto la disolucién como la regularizacién. En consecuencia, el asunto controvertide es si una sociedad que ha perdido la pluralidad de socios, no la ha re- compuesto en los seis meses siguientes y sigue operando, {puede re- gularizarse incorporando un nuevo socio o sélo le queda el camino de la disolucidn? Asi tenemos que, dentro del mismo cuerpo legal, subsisfen dos disposiciones: una que prescribe la disolucion de pleno derecho y otra que hace lo propio con la simple disolucién. Contamos, asimismo, con dos herramientas de hermenéutica juridica, la interpre- tacién Titeral y la sistematica, que ofrecen argumentos a favor de una y otra posicién. De acuerdo a Ia interpretacién literal apreciamos que 1a expresin “aisolucién de pleno derecho” no admite contravencién y, por consi- guiente, tampoco que, via acuerdo entre Ios socios, se regularice una situacién que esté “herida de muerte” por mandato legal; en tal orden de ideas, ja posterior alusion a la simple disolucién debiera entenderse en aquel sentido: como una disolucién de pleno derecho. Por el con- terpretando sisteméticamente la norma, diremos que ambos dispositivos legates se ubican dentro de la Ley General de Sociedades, pero la segunda (aquella que propugna la simple disolucién) es la especifica porque se refiere precisamente a la disolucién de la sociedad, mientras que la primera (aqueila que lege la disolucién de pleno de- recho) se encuentra dentro del contexto de las “reglas [generales] apli- cables a todas las sociedades”. Entre ambas tesis, esta Giltima parece set la menos convincente, En efecto, poco puede alegarse ante una expresién tan lacénica como “disolucién de pleno derecho”. Por ello, creemos que no queda otro camino que la disolucién, siendo inviable, en las circunstancias ex- puestas anteriormente, Ia regularizacién de la sociedad con Ia incor- poracidn de un nuevo socio después de haber vencido el plazo legal para recuperar la pluralidad. Claro esti que nada impide que, durante a etapa de liquidacién, la sociedad se transforme, fusione 0 escinda, en aplicacion de las estipulaciones contenidas en los articulos 342, 364 y 388 de Ia propia Ley General de Sociedades, respectivamente, Entonces, en una situacion préctica, la sociedad que perdié la pluralidad 178 LAS SOCIEDADES EN EL. PERG de socios y que pretende recomponerla después de haber 1 sets 2 meses, solo podria haceto si esque se diuelve ” liguida de form tal que durant I liguidacién, por ejemplo, adapta otra forme Lo expuesto, que constituye nuestra respuesta legal ante la nan as sn ee a mi 2 cr er een Sr trario, dejamos asentada nuestra diserepancia. Y es que el lesislador debe comprender que el Derecho Mercantil es una disciplina juridiea especialmente permeable porque regula las cuestiones comerciales que Se nutren, mds que otras, de la propia realidad. Como manifestabs Enrique Normand Sparks, “el Derecho Mercantil no e¢ un Dereche de sanciones, sino un Derecho de consecuencias”. Siendo ello avi como firmemente lo creemos, el legislador debié prever que la falta de recomposicién de la pluralidad de socios en el plazo legal conlleva a la disolucién y que la continuidad de actividad implica la iregularidad que subsume dos posiblesaltemativas: la regularizacion 0 la diso- Pasemos a otra cuestin: el intento del legislador de er causal de dsolucin y, por consiguent, evitar la iveeuinded oe he Sociedades que continuaban en actividad, En efecto, con fecha 3 de febrero de 2005 se presents el Proyecto de Ley 12.341/2004-CR con el propésito de prorrogar la suspensién de 10s articulos 176, 220 3 407, inciso 4° de la Ley General de Sociedades hasta el 31 de diciembre e 2007. Tal iniciatva legislative encontraba justiicacién, segun se afirmaba en la presentacién de la norma, en que la puesta en vigencia de dichos articulos™ acarrearia la disolucién o declaracion deinsol, veneia de una cuantiosa cantidad de sociedades, Sucede que Ia Ley General de Sociedades, vigente desde el I° de enero de 1998, dispuso en su octava disposicion transitaria la suspen, sin de sus articulos 176 (obligaciones por pérdidas), 220 (reduceion obligatoria por pérdidas) y 407, inciso 4 (disolueién por pérdidas) hasta el 31 de diciembre de 1999, Posteriores dispositivos legales pro. >Los gus, por ie, han sido objeto desucesives pmo de texto secetario files de 199% Peon iacnlaremcietae 19 Docraa —_IT SS rrogaron Ia suspensién, llegando asi hasta la Ley 28.233 que extendid la prorroga hasta el 31 de diciembre de 2004. Por ende, después de mas de siete afios, ya no se trataba de una “disposicién transitoria”™ sino, por el contrario, de una “disposicién recurrente”, Los articulos ya mencionados fueron concebidos como mecanismos de proteccién del capital social y, por consiguiente, se tornaba necesaria su entrada en vigencia, a efectos de cumplir con los propésitos de la Ley General de Sociedades. Si se considera que la vigencia de esas hormas es perjudicial para el mercado por la supuesta disolucién o declaracién de insolvencia de un niimero elevado de sociedades, habria. que derogarlas en vez de suspender reiteradamente su vigencia. Por Jo demas, una masiva disolucién 0 declaracién de insolvencia de so Ciedades significaria mas bien Ia depuracién del mercado, quedando S6lo aquellas sociedades que realmente cuentan con un capital social suficiente para responder por sus acreencias, Con el proyecto de ley en mencidn se pretendié otorgar proteccién 8 las sociedades; sin embargo, es claro que la supervivencia de una Sociedad descapitalizada no es real, sino slo artificial y, por otro lado, que una medida de esta naturaleza?’ desconoce que éxisten otros in. tereses igualmente atendibles como son aquellos pertenecientes a los acreedores. Felizmente, dicho proyecto legislativo no prosperd y, ac~ tualmente, aquellos articulos ya se encuentran plenamente vigentes pues el plazo maximo de suspensin vencié el 31 de diciembre de 2004, por lo que en sentido estricto, la propuesta contenida en el pro- Yecto (de fecha 3-2-2005) no pretendia una prorroga de la suspension, sino més bien una nueva suspensién. La realidad nos ha demostrado que fue mayor Ia alarma que lo realmente acontecido; en efecto, durante todo el tiempo en que las normas aludidas han estado vigentes, es decir, desde noviembre de 2005, no ha habido noticias de graves crisis empresariales en el mer, cado, como se temia. No olvidemos, que una ley s6lo tiene la fuerza que se le da a partir de su estricta observancia, la que se ve afectada cuando una norma que se promulga auspiciosamente en su momento €S posteriormente suspendida en su vigencia. 3 Nos referimos a la prémoga. 180 Las SOCIEDADES PN EL Pent Es soci nv et Pet La problemética que procuré atender el proyecto de ley analizado fue aparente y, por ende, la regulacién legal que se ofrecta resulté inadecuada. Los articulos 176, 220 y 407, inciso 4° de la Ley General de Sociedades hoy se encuentran en vigor, como corresponde; por ello resulta equivoco discutir nuevas suspensiones relativas a su vigencia

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