Topologa amorosa Deslic la elipse de mis labios por la lnea infinita de tu espalda, mientras mis manos sosegaban la turgencia

de tus senos, arrancndote un ltimo gemidorecost mi cabeza junto a la tuya y contempl el teorema de tus ojos verdes. Nuestro espacio entr en un inestable reposo. - Geometra... somos geometra pura. !usurre en tus incautos odos "ue me devolvieron un eco silencioso. #nredado en los rizomas de tu cabellera... - Que misteriosa resulta esta oquedad del pensamiento que sobreviene al orgasmo, el nico instante en vida donde nuestra presunta identidad queda borrada... - Mmmh! As que te ha perdido en la no singularidad, anda, levanta esa !igura, ac"rcate a m # te recordar" quien eres$ $n fractal. %&ora lo s, lo recuerdo, no soy 'somos(, siendo los principios iguales resulta tan obvio, tan inmanente como la felicidad misma a"u est, sin embargo nos empecinamos en trazar todos estos segmentos a travs del tiempotu cuerpo y el mo poliedros esbozados en el caos. - %&e ha !i'ado c(mo !ormamos )ngulos imposibles*. - +... )as paralelas se acarician cuando nadie las mira - ,ierra tus o'os # obrar" un milagro$ - -o e.iste un punto de mi humana super!icie que te quede a ti prohibido. +era absurdo que limitara los movimientos de tus hermosos v"rtices$ - /ecorrer" entonces el permetro de tus piernas$ y delinear con mis dedos el triangulo de tus secretos. #stamos inscritos en una esfera, nuestros sinuosos sentimientos y nuestros innumerables razonamientos nos trajeron a este sitio. - %0uede una ilusi(n rodar eternamente* - -o lo s", depende del plano en que se mueva$ - 1e'a de resistirte que pronto nos encontrar)n *ace falta un beso analtico para clausurar las palabras y retornar al deseo.

+ 1emasiado tarde, les escucho #a. +abes bien que el mundo es oblicuo # no permite nuestro entrecru amiento$ -+i, lo s"2 pero somos un solo punto en el universo # el volumen de nuestro apetito es ilimitado$ - -os volveremos a encontrar en otra direcci(n, recuerda "ue nuestros vectores son libres, la espera no ser) en vano. - %3mpe aremos entonces un nuevo v(rtice* - 3s nuestro destino, despu"s de todo, el amor no es euclidiano$