Está en la página 1de 1

Oh, laica Navidad

Cristina Losada
El fundamentalista laico ve un rbol de Navidad en una plaza y sospecha que su pas est a un cuarto de hora de convertirse en una teocracia. Pero si observa que se ha instalado un Beln en el Ayuntamiento de su pueblo, entonces est seguro de que faltan dos telediarios para que se declare la Yihad catlica. Ese Torquemada vigila por ello que no se profane la condicin secular del Estado con algn smbolo o acto religioso, y cualquier detalle excita su celo. Un crucifijo que quede en una escuela pblica, una Biblia all donde se jura un cargo, un funeral de Estado en una iglesia, un festival de villancicos en un instituto y, cmo no, una felicitacin de Navidad del presidente del Congreso. En la izquierda acusan al christmas que envi, en un tuit, Jess Posada de infringir la separacin entre la esfera secular y la religiosa. Pero, odos los diputados molestos, yo tengo mis dudas. Es la imagen de la Natividad la que transgrede ese principio o lo conculca cualquier felicitacin navidea? Por ejemplo, no s si una tarjeta con un Papa Noel gordinfln y sonrosado, con su trineo y sus renos, amenaza la separacin entre la Iglesia y el Estado, o si slo lo hace la que lleva un Nacimiento. Como los belenes son una tradicin catlica, igual tienen ms peligro entre nosotros por lo que dijo el diputado Coscubiela: esas figuritas que parecen inocentes son un reclamo subliminal del nacionalcatolicismo de Franco. Y eso viene de atrs, que el primer pesebre lo mont San Francisco de Ass en una caverna. Espero que los diputados determinen si una cabalgata de los Reyes Magos organizada por un municipio es una intromisin religiosa en la vida pblica que ofende a los no creyentes. Aunque lo que han de definir, para aclarar las cosas de una vez por todas, es si la Navidad debe celebrarse. Porque uno se puede sumar a la fiesta sin compartir la creencia, pero el origen y el motivo de la tradicin no tienen vuelta de hoja: se celebra el nacimiento de Jesucristo. Una Navidad laica es un oxmoron, y la izquierda plural y la singular han de reclamar su supresin. Ni vacaciones de Navidad, ni paga de Navidad, ni cenas de Navidad, ni lotera de Navidad, ni regalos, ni adornos ni felicitaciones. Pidan la abolicin de la Navidad, y los de Coscubiela la del caganer, esa figura de obvias connotaciones freudianas por la que sienten tanta fascinacin los nacionalistas de todos los partidos en Catalua.

También podría gustarte