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Sin embargo siento el fro. Aunque me lo prometiste no consigo reconocer el terror en su rostro inerte.

Pobre desilusin que me mueve slo al punto de la ya experimentada abulia. La continuidad de las decepciones permite al cuerpo parecer inmune pero el alma, como un leproso, de va despedazando a un ritmo del que no se percata, hasta que ya el tiempo ha transformado la indiferencia en rencor, en un aborrecimiento tan cruento que no se compara con la anterior apata que era tan slo una apariencia, un engao. Aunque me lo prometiste no grit de dolor, el llanto no fue escandaloso ni daba seas de deberse a una tortura feroz. Tal vez no fue suficiente pero la inexperiencia unida al entusiasmo del novato no permite pensar claramente y hace actuar de forma impulsiva; por lo que todo acab en slo minutos y mis sentidos anhelantes se petrificaron ante el fin de su vida. Pero mi ser ya acostumbrado a la decepcin no sufri tanto el impacto de las promesas imposibles de cumplir. Sin embargo despierta la fe el recuerdo nostlgico de su ser burbujeante derramando chorros de alma que dan tibieza a mi pies y al suelo que los rodean.

Chi non dorme Mi fa morir. Penso. Le ombre e le nuvole ci possano di fronte a me e chiari colori aparescono dalinterno duna pietra. Le finestre si aprono e cuasi si rompono, el vento non era forte ma cerano tante anime cattive. Il fumo caldo apre i miei ochi. E poi? Non vedo pi la sedia ne anche la luce sull banqueto, Soltanto vedo figure noiose e abrumate. Sento un po di dolore sopra i miei ochi per non malo cio mi alzo e il mio cuore mi rompe il peto, agitato il corpo ma i pensieri calmi e come unola vengono e si apartano della mia imaginazione. Per un secondo sento che sono morta per un secolo e cuando ritorno a me sento che tutta la notte pasata cos presto come un lampeggiamento.

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