Está en la página 1de 254
CM cUCmecCc Mama ClmuC lai Picea suc Decals CCC UCE MCAT Gy 10jo al Plan, Maestro! ts ‘Angela Sylvestre i ‘Con la paticipacién del Rectsol de Enda América Latina -Reciclaje Solidario~ afho *e Maria Victoria Bojacd P. - Coordinadora Federico Parra Hinojosa ~ Profesional ‘Alexander Antolinez - Promotor Enidadlesy rgamizaciones vinculadas al proceso: ‘Organizaciones de Recicladores: Asociacién, meee Se ‘Asociacién de Recicladores de Prado Veraniego, ‘Asociacién de Recicladores “La Carbonera” é = Unidad Ejecutiva de Servicios Paiblicos - UESP = Consorcios prestadores del servicio de asco: Ciudad Limpia, Aseo Capital, Corpoaseo Total, Lime — Comunidades residenciales: Colina Campestre, Urbanizacién La Arboleda, sector residencial Suba Compartir. = Policfa Comunitaria de Suba = Grupo de Trabajo “Interactuar”: Unidad de Mediation y Conciliacién de Subs, lideres sociales del sector Colina Campestre, Policfa Comunitaria de Suba, Empresa prestadora de Aseo Ciudad, Limpia, Misién Bogoté y Enda A.L. — Centros comerciales: Bulevar Niza, Portoalegre, Subazar, Centro Suba. — Pontificia Universidad Javeriana, Facultad de Psicologia, pasantias en Psicologia Social La presente publicacién es parte del Proyecto Reciclaje Solidario, Primera Fase, cofinanciado por el Ecofondo. Disefto, diagramacién y coordinacién editorial: Luisa Marfa Navas Federico Parra - Enda ALL. Decoracién de una pared interior de una vivienda en el asentamiento de recicladores de la Carbonera 2000 Bogoté, D.C. - 2004 Impreso en Editorial Bochica Ltda. Prélogo Una caracterizacién del reciclaje popular Los recicladores populares 3Cémo Ilamarlos? 3Qué lugar ocupan en el circuito del reciclaje? Los desequilibrios en el circuito sCuédntos son los recicladores populares? Clasificaciones del reciclaje + El reciclaje'solidario Suba, puerta de entrada del reciclaje soljdario Los recicladores del reciclajé solidario’en Suba' La cartografia social Zonas, rutas, puntos y relaciones Generacion de mapas e interpretacién Uso del espacio y marco conceptual del tetritorio Compromisos entre recicladores y actores estratégicos Primera aproximacién al Plan Maestro Actores estratégicos en el reciclaje solidario Categorizacién y caracterizacién Fuentes de generacién de residuos reciclables Mediadores Cooperantes Actores de influencia Acciones realizadas Mirada a la caracterizaci6n Concertacién de la propuesta indice 17 21 21 22 22 3 28 37 39 5 52 58 59 69 74 89 89 1 1Ojo al Plan, Maestro! Propuesta pedagdgica 99 Propuesta operativa 103 Resultados y conclusiones 109 Linea de vida del reciclaje solidario 109 Obligatoriedad de la separacién en la fuente m1 Separaci6n en la fuente, herramienta de doble filo 13 Campafias de capacitaci6n 5 El servicio de aseo y el Plan Maestro para el Manejo Integral de Residuos Sélidos en Bogota 121 Evolucién del servicio de aseo de Bogoté, 1989-1999 124 Creacién de la Edis e introduccién del cobro de la tarifa de aseo. 124 Hacia la privatizacion de la prestacién del servicio de aseo:,1989.- 1994 129 Dominio del sector privado mages 141 EI Plan Maestro para el Manejo Integral de Residuos Sélidos en Bogota 166 Definicién de abjetivos y estrategias 166 Reciclaje, componente del servicio piblico de aseo, 174 Redistribucién de la tarifa de aseo, en el Plan Maestro 178 EI Plan Maestro y el mejoramiento del sistema de reciclaje 189 Los supuestos implicitos del sistema mejorado de reciclaje 192 Conclusiones sobre el Plan Maestro 219 Tarifa de aseo, en perspectiva Principales lecciones de los tiltimos 10 afios - Resumen 235 Derivadas de la época de la Edis 235 Derivadas del proceso de privatizaci6n 237 Resumen y recomendaciones finales eS 240 Sintesis de las conclusiones y recomendaciones 242 Otras recomendaciones 245 Referencias bibliograficas 250 Prélogo Cuando en 1993 Enda América Latina publicé su investigacién “Los circuites’ del reciclaje popular en la ciudad de Bogota”, tenia la certeza de estar proponiendo unamirada innovadora sobre el mariejo de las basuras; se introducian alli elementos que, por muchos afios, $e convertirian en la tnica fuente de informacién'sébre el tema en la ciudad, mas alld de los informes y andlisis econémicos del Distrito. Algu- nos de ellos fueron: . Lanocién de “circuitos de reciclaje",referida‘a la diferenciacién clara'de dos: circuites que operan con sus respectivas légicas. El primero, epicentro delimercado de los residuos y su transformacién, negocio privado dela in- dustria y el comercio, que en aquel'entonces imponia las reglas del juego'en términos productivos, de tarifas, de voliimenes y destinos; el segundo; la recolecciémde residuos realizada para su supervivencia»por la»poblacién recicladora, y la comercializacién de los mismos através de bodegueros;e intermediarios, pasando por centros deacopio’y Ilegando’ finalmente a la industria transformadora, operacién que; como puede observarse, consti- tufa el-vinculo entre la economia formal’y:la‘llamada:economia informal. La nocién de “reciclaje popular”, referida ‘a los'diversos actores de la cade- na del reciclaje informal, y especialmente a la poblacién conocida como 10jo al Plan, Maestro! “recicladora", invisibilizada en su accién econémica, en su aporte ambiental ala ciudad, en su condicién de trabajadora; poblacién discriminada y estig- matizada por el conjunto de la sociedad y a la vez ejerciendo un of icio util, mas “ilegitimo" e “ilegal". La investigacién ofrecié una caracterizacién so- cial, econémica y cultural de esta poblacién y se arriesgé, por primera vez, a hacer un estimativo del nimero de recicladores que podria tener la ciudad para aquel momento. Se trataba de la primera experiencia de una investigacién.en-que la propia pobla- cién recicladora participaba, indagdndose.a_si:misma.y.adentréndose en el andlisis desu entorno mediato e inmediato. Era también una investigacién.que incursionaba en la historia-del reciclaje popular en la ciudad y:sus.raices.o0%) eons Una nueva investigacién de Enda profundizaria en el conocimiento:del-neciclaje y de su poblacién: “La légica economica del reciclaje popular”, en que se verificé cudn imbricados estan los dos circuitos, el,informalyy el formal, hasta dénde llega la interdependencia y de qué manera se:produce el.desequilibrio-y la injusticia hacia el oficio y hacia su poblacion, especialmente porque los materiales comercializados porlos bodegueros y reutilizados y/o transfonmados por la industria, ante el pro- pésitode racionalizacién, reducciénde.costos y lucro, desconocen financieramente la labor-de recoleccién y seleccién del.reciclaje:popular;. de igual manera, por pro- veer ala industria de materiales a costos mucho mds.bajos que:si tuviese que obtenerlos en :mercades de materias.primas ino utilizadas. Ademds; por haber implementado histéricamente el pago por volimen de materiales recuperados, mds no un pago por el trabajo realizado, lo que habria de generar una “cultura” de competencia e individualismo, asi como una Iégica de inmediatez, del “dia a dia", aspectos que dificultan la organizacién de la poblacién y contribuyen, atin mds, a su atomizacién. Prélogo Sinduda, atin es precaria la valoracién del aporte ambiental del reciclaje popular a la.ciudad por parte de:muy amplios sectores de la sociedad e incluso de la.adminis- tracién distrital; De hecho, la “Gestién Ambiental" es una nocién relativamente nueva'en el contexto urbano y queda atin un camino por recorrer: es asumida en la mayorfa de los casos como el conjunto de politicas y disposiciones operativas alre- dedor del manejo de basuras y del espacio ptiblico, asi como a la recuperacién, conservacién-proteccién y defensa de ecosistemas.. Las propuestas referidas a la conectividad urbano rural y, mds alld, a la ciudad-regién, mds que atender al aporte social, econémico, ecolégico y ambiental; enfatizan en un.ordenamiento, territorial en-la Idgica de la rentabilidad y la competitividad a partir de la interconexién-de miltiples sistemas, para -un.mundo supeditado a Jos;tratados.de libre comercio, entre, ellos-el, Alca,\en que recursos naturales, energéticos, territorios y conoci- miento devienen en mercancias para el escenario globalizador. La participacién no constituye. atin un-componente:fundamental de la-gestiénam= biental urbana: se la,piensa:como una presencia formal cuantitativa en escenarios establecidos, en dondesla, calidad de: dicha participacién: cobra:poca.importancia; indudablemente, un avance es el-impulso comunitario de mecanismos.legales:tales como accién de tutela, accién popular; accién de cumplimiento, etc. Laparticipacién ambiental, -y.en general la llamada “participacién ciudadana”- no. esté pensada para sectores empresariales, industria, comercio, sector financiero, inmobiliario; etc:, élites que histéricamente gozan-de espacios directos de concertacién, incidenciay decision. i La incidencia en politicas ptiblicas es -sin duda- un reto actual: pero existe el riesgo de no entender ‘a iniciativa de muy amplios sectores de poblacién como participacién, si no.estd asociada aestos vinculos formales con las administracio- nes-distrital:o local, en donde estaria la base de su “legitimacién". La apropiacién y 10jo al Plan, Maestro! transformacién territorial que desarrollan comunidades enteras:en bisqueda de su supervivencia, o de la realizacién de sus derechos, o del cambio de las relaciones existentes en términos econémicos, politicos, culturales y-ambientales, estd lejos de ser pensada y aceptada como participacién, como formas autogestionarias que han configurado la ciudad de hoy. El conjunto de estas expresiones, impulsado por los movimientos sociales como “resistencia”, y legitimado desde la perspectiva de la lucha por la equidad, la justi- cia, la democracia, tampoco lo es. Enda y otras organizaciones, en su biisqueda en el campo de la gestién ambiental comunitaria, la caracterizan como “construccién so- cial y ambientalmente sostenible del territorio" y la legitiman por derecho propio, atin cuando ‘su pretensién no sea, exclusiva o necesariamente,la-incidencia en poli- ticas pablicas. Debemos hoy reflexionar sobre este quehacer de la participacién de sectores'po- pulares en otro sentido, por demds: la marginalidad de las propuestas y de la inci- dencia, la restriccién puntual al entorno, los alcances precarios en la: mirada de ciudad, el:abordaje de lo sectorial: aqui surgen las preguntas por los escenarios de dicha participacién, las instancias y los mecanismos establecidos, que conducen a presentar de manera fragmentada la‘totalidad, e inducen a respuestas igualmente fragmentadas; también caben los cuestionamientos por la decisién’politica de go- bernantes y sociedad para hacer real una auténtica participacién, desde la destina- cién de los recursos para la informacién y la formacién, hasta la construccién de metodologias, la adecuacién de espacios, etc. Eboficio ambiental del reciclaje popular, como actividad econémica, es parte del conjunto de:las mencionadas acciones de autogestién y supervivencia, que no son validadas econémica ysocialmente. El-reciclaje popular se ejerce por razones de Prologo profunda exclusién del modelo econémico impuesto: no es escogido por razones de rentabilidad, afinidad profesional o mucho menos por placer. Sectores de pobla- cién cada vez mds pauperizados o en desplazamiento forzado, ante la carencia de oportunidades, son arrojados al reciclaje popular, que se constituye en la ultima posibilidad de trabajo legal, lo que no significa la realizacién de un trabajo en condiciones de dignidad. Ante el espejismo generalizado del reciclaje como un ne- gocio prometedor por su rentabilidad, es preciso sefialar que solo lo es cuando es parte del engranaje formal del mercado, cuando se cuenta con la informacién, con los capitales necesarios y con las disposiciones legales para que lo sea, como hoy sucede en la ciudad de Bogotd con el impulso del Plan Maestro para el Manejo Integral de los Residuos Sélidos (en adelante PMMIRS) y sus mecanismos cada vez mds precisos en el Sistema Operativo de Reciclaje (SOR), tal como lo intenta de- mostrar la presente investigacién. El aporte del reciclaje popular es, sin duda, reconocido por el PMMIRS y descono- cido por el Programa Distrital de Reciclaje. La presente investigacién da cuenta de su papel ambiental: la recuperacién de 592 toneladas diarias de materiales reciclables, lo que es de suma importancia, si se tiene en cuenta que en un dia Ilegan 5.500 toneladas de desechos al relleno sanitario Dofia Juana; también supone un aporte econdmico, al ahorrarle a la administracién distrital inversién en recolec- cién, transporte y adecuacién de espacio en el sitio de disposicién final; también es un aporte a la ciudad, en términos de vislumbrar estrategias de sostenibilidad. Tras una corta historia‘en el manejo del servicio de aseo en Bogota, iniciada en 1958 con la creacién de la EDIS (Empresa Distrital de Servicios Publicos), pasan- do por el proceso de privatizacién del servicio, hecho que se consolida entre 1989 y 1994, no se menciona el reciclaje como parte del servicio de aseo; ello sucede hasta la formulacién del propio PMMIRS en el afio 2000, y es considerado como la iOjo al Plan, Maestro! actividad compuesta por la recoleccién y el transporte de los desechos, de los escombros y el barrido de las calles. No obstante, el reciclaje popular hace parte de la historia de la ciudad desde los afios 40, bajo diversas modalidades. Los hitos en Ia historia del servicio de aseo estan marcados por sucesivas crisis en el dmbito sanitario y financiero: la primera, que conduce a la liquidacién de la EDIS, en que la valoracién de la politica tarifaria de la empresa evidencia una erogacién desproporcionada para la administracién distrital, mientras la pésima calidad del servicio obliga al Alcalde Mayor de Bogoté a expedir el decreto 888, de octubre de 1988, declarando una emergencia social y de servicios en la ciudad, por el “mal estado de higiene urbana». La evaluacién de costos y calidad del servicio se consti- tuyen en la justificacién del proceso privatizador que da ingreso a los consorcios Lime, Ciudad Limpia, Aseo Capital, que amplian el parque industrial del servicio, la cobertura en la ciudad y aumentan el monto de las tarifas a los usuarios. La segunda crisis, consolidada ya la privatizacién en manos de 4 consorcios, se expre- sa en el derrumbe de basura en el relleno sanitario Dofia Juana en 1997, obligando a la administracién distrital'a trazar una politica’para el manejo de los residuos de la ciudad y el establecimiento de un sistema para tal efecto, lo que da paso al PPMIRS. En efecto, en 1998 'el Distrito Capital abre una licitacién para el desarrollo de una investigacién que formule propuestas concretas: en diciembre de 2000, la organiza- cién contratada, Unidn Fichtner/Cydep, entrega a la Unidad Ejecutiva de Servicios Puiblicos, UESP, las recomendaciones finales para la puesta en funcionamiento del Plan Maestro. Este propone 6 estrategias centrales para que, en un lapso de 15 afios, ‘se asegure la reduccién progresiva de basuras que lleguen a Dofia Juana. Como una de las 6 estrategias, el Plan Maestro incorpora activamente el reciclaje, pues del total de la reduccidn, se espera que éste aporte el 68%: ademds, es Prélogo presentado como aspecto esencial para el manejo integral de los desechos de la ciudad, como componente del servicio ptiblico de aseo. Sin embargo, el reciclaje asi entendido dista mucho del ejercicio del reciclaje popular y profundiza la tendencia privatizadora que lo excluye: una ldgica en donde este oficio artesanal, sin tecnolo- gias de punta, sin consideraciones sobre eficiencia, eficacia y competitividad, no cabe en esta nocién de sostenibilidad, restringida a la rentabilidad, Esta exclusién se ha plasmado de manera concreta en las sucesivas disposiciones legales referidas ala temdtica, opuestas a una participacién del reciclaje popular con las mismas.oportunidades, garantias y condiciones operativas de que gozan los consorcios privados que prestan el servicio de aseo y los operadores del relleno sanitario, privilegiados por dichas disposiciones del Distrito Capital. Luego de més de tres afios de la promulgacién del PMMIRS, la exclusién de la poblacién recicladora es. un hecho en la practica, tanto por:los aspectos sefialados como por las condicio- nes mismas de'vulnerabilidad de esta-poblacién. La presente publicacion es el resultado de una, eae ag: realizada en el marco del proyecto “Reciclaje Solidario”, financiado por Ecofondo. El equipo de Enda América Latina en general, y especialmente Maria Victoria Bojacé, Federico Pa- rra y. Alexander Antolinez, quienes llevaron a feliz. término eliproyecto, se propo- nen profundizar en el conocimiento de a poblacién-recicladora y de-las.asociacio- nes que hicieron parte del proceso, de manera.especial en.la localidad de Suba, asi como de otros actores: conocer los hdbitos de.consumo y de desecho, e! uso del espacio y la apropiacién del territorio, aspectos legislatives y otros elementos de gran interés. Se trata de un andlisis del funcionamiento del reciclaje en una reali- dad localizada. Sea esta la oportunidad de agradecer a las asociaciones de recicladores por su participacién constante, sus aportes y lecciones. De igual ma- nera, al Ecofondo por su apoyo permanente y su interés por contribuir al desarrollo de temas como éste, de gran importancia para la gestién ambiental urbana. + 1Ojo al Plan, Maestro! Ademéds, la investigacién se propone: Profundizar en el conocimiento sobre la complejidad de formas.en que se realiza la labor del reciclaje; ello supone ampliar la caracterizacién de la poblacién recicladora desde una perspectiva econémica y antropolégica. Este aspecto en particular fue trabajado por el antropdlogo Federico Parra. Documentar el impacto de la privatizacién sobre la actividad del reciclaje de los tltimos diez afios, lo que constituye un esfuerzo de compilacién y socializacién de la evolucién del servicio de aseo en Bogotd, que hasta el presente se encontraba en documentos dispersos. Emprender la compleja tarea de evaluar los planteamientos del Plan Maes- tro, dado que la puesta en funcionamiento de sus recomendaciones cambia sustancialmente el futuro del reciclaje, especialmente en la medida en que se reglamenta quiénes, cémo y con qué se debe realizar esta actividad. Presentar un andlisis econémico y financiero del Plan Maestro para el Ma- nejo de los Residuos Sédlidos y su impacto para la poblacidn recicladora, los riesgos y potenciales oportunidades econémicas, politicas, sociales y am- bientales. Una apuesta aqui es la construccién de propuestas no desde la situacién de marginalizacién de la poblacién recicladora, sino desde una mirada de los derechos establecidés para sectores de riesgo compara- tivos. Estos aspectos fueron trabajados con rigurosidad por Angela Silvestre, econo- mista, quien presenta aqui su mirada, en su mayoria coincidente con la de Enda, de gran compromiso con la poblacién recicladora y el tema del reciclaje. Cada uno de | & Pogo los temas fue ampliamente discutido con el equipo de Enday con las y los recicladores, en sesiones de verificacién, intercambio y debate. Deseamos expresar nuestros agradecimientos a Angela por su aporte y ensefianzas. Enda Colombia sigue acompafiando a la poblacién recicladora en su busqueda de inclusién en el manejo de los residuos en la ciudad, en la construccién de un lugar propio, digno y proactivo en el panorama urbano. Nuevas propuestas e investigacio- nes estdn en curso, actualizan el panorama y constituyen insumos para la formula- cién de politicas ptiblicas en la temética, hoy de vital importancia en la dimension ambiental urbana. Pilar Trujillo Uribe - Directora General ENDA AMERICA LATINA-COLOMBIA Una caracterizacion ROR coer mu nti e ls ea) Una caracterizacién del reciclaje popular El reciclaje, como actividad econdmica, es un circuito en el que circula y se transforma el mate- rial reciclable desde que se desecha y en el que sus protagonistas son actores que tienen unas caracteristicas, una funci6n y una retribucién determinada y diferenciada. Estos actores son en términos generales recicladores, bodegueros, intermediarios, centros de acopio, industrias transformadoras (véase figura 1). En el circuito de reciclaje se presentan dos sectores econémicos, diferenciados por el reconoci- miento social y por la legitimidad en términos laborales. El sector formal y el sector informal del reciclaje. En el sector informal se inscriben aquellos actores y procesos laborales realizados como economia informal y que por tanto viven el desconacimiento y la ilegitimidad desde la normatividad laboral. El sector formal en contraposicién, se refiere a los actores y espacias del circuito de reciclaje que gozan de reconocimiento y de legitimidad en la normatividad laboral. Es el caso de las iniciativas privadas que realizan la recolecci6n de materiales reciclables, algunas bodegas e intermediarios y la industria transformadora. En este documento hablamos mis que de reciclaje informal, de reciclaje popular, pues queremos dar una mirada mas amplia, en términos de su historia, la dimensién de sus aportes, las formas gue adquiere su labor y su relacién con la ciudad, sin desconocer que una de las caracteristicas del reciclaje popular es que se inscribe en el sector informal del reciclaje!. En las siguientes paginas se pretende contribuir al conocimiento del complejo escenario del reéiclaje popular, que ha prestado un importante servicio a la ciudad, al recuperar desde hace mas de 50 afios los materiales reciclables que la mayoria de habitantes de la ciudad, como productores de "Al respecto, es importante aclarar que también el Plan Maestro para el Manejo Integral de Residuos Sélidos en Bogotd se refiere al reciclaje popular, aunque lo hace en términos bésicamente econémicos. Hablamos de reciclaje popular, pues queremos dar una mirada amplia, en términos de su historia, la dimensi6n de sus aportes, las formas que. adquiere su labor y su relaci6n con la ciudad. El reciclaje popular ha prestado un importante servicio a la ciudad, al recuperar desde hace mds de 50 aftos los materiales reciclables de la basura. {Ojo al Plan, Maestro! desechos que somos, mezclamos con la basura, Hoy se sabe que recuperan diariamente 592 toneladas de materiales reciclables (véase cuadro 30). Con ello, a. El Distrito se ahorra una inversién mayor en recolecci6n y transporte de 592 toneladas diarias de material desechado y la adecuacién de un ntimero determinado de metros cubicos de relleno sanitario. b. El trabajo de los recicladores provee a la industria un importante porcentaje de materias primas a un costo més bajo que lo que adquieren en el mercado de materias primas sin usar. ¢. Gracias al trabajo de los recicladores populares, la industria consume menos recursos natu- rales y se ahorra energia en su transformacién. Anualmente, en Colombia se recuperan 500 mil toneladas de papel y de cart6n que evitan la destruccién de 10 millones de drboles. Por cada tonelada de papel y carton recuperados se dejan de talar 20 arboles y se ahorran 200 litros de agua. Producir vidrio a partir de vidrio re¢iclado arroja un ahorro del 44% de energia y una tonélada de vidrio reciclado ahorra 1.200 kilos de arena. E! uso de material reciclable de aluminio ahorra un 90% de energ(a y el uso de papel reciclable ahorra un 25% de energia [periddico El Tiempo, novi we de 1999). d. Mas de 250 mil personas en Colombia viven del reciclaje. En Bogoté hay alrededor de 13 mil recicladores y el ntimero est en aumento permanente. Es decir, el reciclaje es una labor que genera fuentes de empleo. Los recicladores populares, que se calculan en cerca de 13 mil, no obstante el aporte que realizan como agentes productivos y ambientales, como creadores de empleo, viven en condiciones que en nada compensan ese aporte. Es fundamental comprender que este reciclaje es una importante opci6n de autogestién y, en el caso de muchas personas, la dltima oportunidad digna para respon- der a sus necesidades bdsicas y a las de sus familias? y sin embargo, la sociedad desconoce en muchas formas todas estas particularidades y bondades del reciclaje popular en nuestro pais. 2 La agudizacién de la crisis econémica ha generado una reduccién dramética en oportunidades de em- pleo y una tasa de desempleo en el pafs que se estima de las més altas en Latinoamérica. Eso, sumado al fenémeno de desplazamiento forzoso de miles de personas por el conflicto armado, hace que el reciclaje popular cobre vital importancia como actividad amortiguadora de tales circunstancias. Una caracterizacién del reciclaje popul Los recicladores populares 3Cémo Ilamarlos? A la hora de definir a los trabajadores que recuperan y seleccionan desechos, el término reciclador es inexacto. Si nos remitimos a su labor especifica, deberfan llamarse recuperadoreso recolectores de material reciclable. Sin embargo, su labor, que incluye actividades como esculcar en las bolsas de basura, clasificar y transportar los materiales reciclables para su posterior venta, representa la columna vertebral del circuito de reciclaje. Por ello, es justo llamarles recicladores. Ademés, ellos mismos se nombran asf, de manera que se constituye en la denominacién més extendida?. Los recicladores inician el proceso examinando canecas y bolsas de basura en viviendas, oficinas, bancos, almacenes e industrias; luego recuperan el papel blanco (que ellos llaman archivo); vi- drio, cartén, pléstico, latas, chatarra y en general todo objeto o material que puedan poner a Circular en los circuitos de reciclaje. sPero, quiénes son los recicladores populares? Parece una pregunta que facilmente puede contes- tar cualquier habitante en la ciudad, quien por su vivencia puede decir que se trata de aquellas personas que circulan y habitan en la calle, dedicadas a la extracciGn de torres de cartén de las bolsas de basura, que luego depositan en un carro hecho de madera y con ruedas de viejas balineras. Sin embargo, una observacién mas detenida revela la multiplicidad de formas en la que estas personas realizan su labor, lo que implica también una gran heterogeneidad. Aqui se proponen algunas clasificaciones, que tienen diferentes puntos de partida: el grado de organizacién, la permanencia y experiencia de los recicladores, la complejidad tecnologica de los vehiculos,y la organizacién social que se requiere y otros. Todo esto incluye también una decisién sobre la dignificacién del reciclador, que en relacién con el lenguaje aboga por superar denominaciones estigmatizantes como la de basuriegos o desechables. Son miiltiples las formas en las que los recicladores populares realizan su labor. La actividad del reciclador, efectivamente, es rentable, pero lo es en primer lugar para la industria y seguidamente para los intermediarios que compran y venden el material reciclable. Ojo al Plan, Maestro! Qué lugar ocupan en el circuito del reciclaje? Como se ha visto ya, el circuito del reciclaje es una secuencia de actividades en la que hay actores y cuyo objeto es la reutilizacién de! material reciclable, obtenido de los desechos. Se pueden nombrar 5 actividades principales: recuperaci6n, selecci6n, transferencia (transporte y otros), comercializacién y aprovechamiento. En la figura 1 se representa la circulacién del material reciclable, en los circuitos de reciclaje en Bogota. En especial, la recuperacién y la selecci6n, labores que realizan los recicladores populares, son, como se dijo anteriormente, la columna vertebral del circuito de reciclaje y sin embargo, de su labor se lucran los comercializadores y la industria, pero no los mismos recicladores, es decir, hay tun notorio desequilibrio en la distribucién del ingreso, dentro del circuito del reciclaje. Los desequilibrios en el circuito Algunas personas afirman que si la actividad del reciclador no fuese rentable, sencillamente no existiria. Etectivamente, es rentable, pero lo es en primer lugar para la industria y seguidamente para los intermediarios que compran y venden el material reciclable. Hoy en dfa, los recicladores recuperan y transportan materiales reciclables, que luego venden a tun intermediario, quien tiene la capacidad de acopiarlos y posteriormente venderlos a las indus- trias. La industria compra materiales reciclables solo porque con ello tiene la posibilidad de redu- ir sus costos de produccién. Sin embargo, un costo de produccién més bajo para la industria no implica que los precios ofrecidos de los materiales reciclables cubran los costos de recolecci6n, especialmente, los costos laborales de la actividad. Es decir, lo que el reciclador recibe por la venta del material reciclable no equivale a los esfuerzos de identificacién, separacién, seleccién y acarreo del mismo. a La industria fija los precios de los materiales reciclables de acuerdo con sus necesidades. Los intermediarios acomodan los precios de compra al reciclador, de acuerdo con los volimenes que estén en capacidad de manejar. El reciclador vende diariamente, por lo general, pues no maneja voltimenes, situacién que hace que no tenga capacidad de negociacién. Ademés, parece que el mercado del reciclaje ha entrado en una permanente sobreoferta de material. Una caracterizacién del reciclaje Figura 1. Circuitos de reciclaje en Bogota Recicladores populares Residuos domiciliarios 592 toneladasvia >] Bodegas deta industria Grandes productores| 960 toneladas/dia Productos Consumidores <- distribucién © | {Ojo al Plan, Maestro! La situaci6n de los recicladores es en cierta forma andloga a la que enfrentan los campesinos del pais, en cuyo caso es comén que no se considere el tiempo de trabajo invertido, en las cuentas sobre las perdidas o ganancias generadas por la cosecha. La realidad del mercado libre del reciclaje demuestra que el valor econémico por kilo de material reciclable recuperado es demasiado bajo e inestable, como para permitir un desarrollo empresa- rial e institucional de los recicladores, en el que haya capacidad de gestion y de planeacién y con el que se pueda: a. Ofrecer mejores precios y condiciones de trabajo para los recicladores. b. Tener mejor capacidad de negociacién con la industria. Para hacerlo, se requiere de la estabilidad financiera ajena al mercado libre de comercializaci6n, tema que se abordard con mayor detalle en la tercera, parte de este documento)’. Seguin el Plan Maestro para el Manejo Integral de Residuos Sélidos en Bogotd, en Bogota hay entre 800 y 1.000 bodegas, que forman el puente entre los agentes de selecci6n y transporte de los materiales reciclables y la industria y la mayor parte de esas bodegas se concentra en unas pocas zonas de la ciudad, por lo general, las de bajo estrato socioeconémico [Uesp, Fichtner/Cydep 2000a, anexo 5-1, p. 11]. Las bodegas se clasifican segtin su tamafio, en: menores (20 metros cuadrados de 4rea y 2 tonela- das de capacidad de almacenamiento), medianas (de 21 a 100 metros cuadrados de drea y 10 toneladas de capacidad de acopio) y grandes (mas de 100 metros cuadrados de drea y mas de 10 toneladas de capacidad de acopio). De acuerdo con los datos de la Asociacién de Recicladores de Bogot4, ARB, reportados en los documentos del Plan Maestro, las organizaciones de recicladores son propietarias de un maximo de 18 bodegas. Esto implica que solo 2% del poder de comercializacién reside directamente en los recicladores, especificamente, en el sector organizado de los recicladores. + Enel reciclaje popular existen hoy modelos de organizacién asociativos 0 cooperativos, que no son propiamente empresas, como se dice, con capacidad de gestion y de planeacién. Una caracterizacién del reciclaje popular Los grupos de recicladores organizados insisten en que hay una distincién cualitativa entre recicladores y bodegueros © intermediarios, distincién que consiste en que los intermediarios sostienen su actividad de comercializacién en el trabajo del reciclador. Incluso, afirman que para muchos recicladores independientes, el intermediario es una figura paternalista que matiza las relaciones de explotacién por medio de varios servicios como el préstamo y el apadrinamiento. Lo anterior advierte sobre los riesgos de incluir en un mismo nivel a recicladores e intermediarios. 3Cuantos son los recicladores populares? En 1993, Enda hizo un primer intento por calcular el ntmero de personas dedicadas a la actividad de reciclaje [Gonzalez y otros 1993). Una de las condiciones para hacer ese célculo era la disper- sién de la poblacién recicladora, ante lo que se formulé una metodologia para hacer un célculo aproximado del nimero de recicladores, mediante extrapolacién. En ese momento no-era tan importante establecer las formas en las que se ejerce el reciclaje, tanto como el ntimero de recicladores. Para comenzar, se supuso que todos los recicladores tenian que acudir por lo menos a una bodega de comercializaci6n, para vender sus materiales. Bajo este supuesto, Enda realizé un censo de las bodegas de comercializacién de material reciclable. Con este censo se establecié que existfa un minimo de 350 y un maximo de 520 bodegas en la ciudad. “Aplicando a esta cifra un promedio de 15 recuperadores ‘pertenecientes’ a cada bodega, se estim6 el numero de recuperadores popu- lares de Bogoté en un rango de 6.700 a 8.000 |...” en 1993 [Gonzalez y otras 1993, p. 45]. Luego, otro estudio presenté la cifra aproximada de 13 mil recicladores en la ciudad de Bogota IU. de los Andes y otros 2000}, para 1999, lo que representa un incremento de 62%, con respecto a los datos de 1993 y un aumento anual de 10%, en relacién con las cifras entregadas en 1993 por Enda. El cuadro 1 compara.en forma desagregada los resultados de los estudios de 1993 'y de 1999. Entre 1993 y 1999, el ndmero de recicladores populares crecié en cerca de 62%. iOjo al Plan, Maestro! Cuadro 1. Numero de recicladores por asociacion 0 cooperativa No. recicladores % vertical Ref. Nombre de Ia asociacion o de la cooperativa 1993 1999 1993 1999 1 Afiliada a la ARB Cooperativa de Recicladores Rescatar 60 7 Cooperativa de Recicladores EI Triunfo, Santa Fe 30 | 114 Cooperativa de Recicladores Progresar 40 4 Nueva Granada 50 Asociacién de Recicladores de Chia 20 Cooperativa de Recicladores EI Porvenir 40 58 Fundacién de Recicladores Revivir . La Nueva Cultura, Mértires 25 20 Asociacién Britalia 15 de Recicladores de Chapinero 160 Asociacién de Recicladores Las Marias, Bosa 70 Asociacién de Recicladotes Sosa, Las vegas 35 Comunidad de Recicladores la Carbonera, Suba 73 Corporacién de Recicladores Pedro Leén Trabuchi, Puente Aranda 24 Asociacién de Recicladores de Suba 52 Asociacién de Recicladores Rafael Uribe Uribe 40 Asociacién de Recicladores Luz Verde de Usaquén 93 Asociacién de Recicladores Asodig 7 Asociacin de Recicladores de Usme : 64 Comunidad de Recicladores Prado Veraniego, Suba 51 Asociacién de Recicladores Amantra Comuneros 46 Recicladores de Tunjuelito 90 Otros recicladores afiliados 251 Subtotal recicladores organizados afiliados a la ARB 280' | 1,379 4% 11%)

También podría gustarte