DE LOS CIELOS BAJÓ A LA

TIERRA
JESUCRISTO, MI SEÑOR;
EL ORDENÓ LAS COSAS
EN MATEO VEINTICUATRO.
ERA PARA ESTOS TIEMPOS
LA PROFECÍA DE DIOS
QUE HOY SE CUMPLIÓ:
¡MIRAD, CUÁNTOS TORMENTOS!
 AL ESTALLAR LOS CAÑONES
MANDADOS POR EL DIABLO,
VOLANDO LOS AVIONES
DEJAN CAER SUS RAYOS.
HACIENDO CUMPLIR LO QUE
DIJO:
“HABRÁ GUERRA Y FALSOS
CRISTOS”
GUARDAOS USTEDES, MIS HIJOS,
QUE NADIE OS ENGAÑE.
SUFREN LOS PUEBLOS EL MAL,
EL HAMBRE Y LA MISERIA;
MUEREN GRANDES Y CHICOS,
LOS HOMBRES SIN CORAZÓN.
PASAN BANDADAS DE AVIONES
SEMBRANDO ALLÍ EL TERROR;
LOS HOMBRES SIN DIRECCIÓN
DEJAN CAER LA MUERTE.
LOS HOMBRES SE OLVIDARON
QUE EL VIEJO MANDAMIENTO
DIJO: NO MATARÁS.
“AMAOS UNOS A LOS OTROS”,
JESÚS DIJO, NI LUCHÓ
NI NUNCA MATÓ;
SÓLO LA ESPADA DE SU BOCA
COMBATIÓ A LOS HOMBRES.