Está en la página 1de 20

10 estrellas más cercanas a la Tierra

La Tierra un pequeño planeta del sistema solar, ubicado en un extremo de la galaxia


Vía Láctea, planeta propicio para la vida, nuestro planeta y un hermoso planeta.
La Tierra un punto ínfimo en el infinito espacio exterior, donde las distancias y las
proporciones, exceden de nuestros cálculos terrenos y de nuestro entendimiento, pues
tanta bastedad, nos sobrepasa, aún hoy día con los avances de las ciencias del
cosmos.

Como no estamos solos en el universo, en esta ocasión hemos enumerado las diez
estrellas que se encuentran más cercanas a nuestro planeta azul.
1.- SOL
Es una estrella del tipo espectral G2, que se encuentra en el centro del
Sistema Solar. Por sí sola representa el 98,6 % de la masa del Sistema
Solar. La distancia media de la Tierra al sol es de 149.600.000
kilómetros y su luz recorre esta distancia en 8 minutos 19 segundos. La
energía del Sol en forma de luz solar, sustenta a casi todas las formas
de vida de la Tierra, así mismo determina su clima y meteorología.
A pesar de ser una estrella mediana, es la única que se puede apreciar
a simple vista.

El Sol, es nuestra estrella, la más cercana y la que sustenta nuestra vida


en este planeta nuestro, por lo que para nosotros es la más importante
del universo, pues sin ella se terminaría la vida en la Terra.
2.- ALFA CENTAURI
Alfa Centauri, también conocido como Rigil Kent, es el sistema estelar más
cercano a la tierra, considerado desde la antigüedad como una sola estrella y
con gran importancia mitológica, la más brillante de la constelación de
Centauro. Se trata de un sistema trinário, formado por tres estrellas, Alfa
Centauri A, Alfa Centauri B, y Próxima Centauri. El sistema también contiene
un planeta del tamo similar a la Tierra, que orbita a Alfa Centauri B, lo que le
hace el exoplaneta más cercano a la Tierra.
Alfa Centauri, se encuentra a 4,37 años luz. Serian las más cercanas a la
Tierra después de nuestro sol.
3.- ESTRELLA DE BARNARD
Se encuentra en la constelación de Ofiuco y es demasiado tenue para ser
observada sin telescopio. Alrededor de ella orbitan varios planetas gaseosos. Es
una estrella antigua, pero experimenta llamaradas como las estrella fulgurantes.
Se encuentra a 5,98 años luz y es la segunda después de Alfa Centauri, más
próxima a la Tierra.
4.- WOLF 359
Es la tercera estrella más cercana, después del sistema estelar Alfa Centauri y la estrella de Barnard, a
parte el sol. Se encuentra en la constelación de Leo y es totalmente invisible al ojo humano sin ayuda de la
óptica. Es una enana roja, estrella fulgurante y que en ocasiones aumenta su brillo de forma drástica, por lo
que se la denomina también estrella variable.
Se encuentra a una distancia de 7,8 años luz. Como curiosidad, aparece en la serie Star Trek, como
escenario de una importante batalla.
5.- LALANDE 21185
Es la quinta estrella más cercana a la Tierra, no es visible a simple vista, aunque
sí con cualquier telescopio pequeño. Se la localiza en el rincón surestes de la
constelación de la Osa Mayor. Es una enana roja y tiene una masa y un
diámetro algo menor de la mitad del Sol.
Lalande 21185 se encuentra a unos 8,31 años luz y dentro de 20.000 años, se
encontrara a 4,7 años luz de la Tierra.
6.- SIRIO
Es el nombre propio de la estrella Alfa Canis Maioris, la más brillante de todo el cielo nocturno visto
desde la Tierra, situada en la constelación del hemisferio de celeste sur Canis Mior. Es un sistema
binario, compuesto por Sirio A, una estrella blanca y Sirio B, una enana blanca, irregularidades en
sus orbitas han sugerido la presencia de otra estrella, una enana roja, lo que le haría un sistema
trinário ,Situada a unos 8,6 años luz, la haría la sexta estrella más cercana. Es muy conocida
desde la antigüedad, por ejemplo en el antiguo Egipto, marcaba la época de las inundaciones del
Nilo.
7.-LUYTEN 726-8
Es el séptimo sistema solar más cercano, situado a 8,73 años luz de distancia.
Se trata de un sistema binario, compuesto por Luyten 726-8 A, estrella del tipo
fulgurante, también llamada BL Ceti y Luyten 726-B, también una estrella
fulgurante, así mismo llamada UV Ceti.
Aunque se ha postulado la existencia de dos planetas mayores que Júpiter,
orbitando a Luyten 726-8 A, no se ha demostrado esto, ni la presencia de una
enana marrón.
8.- ROSS 154
Es actualmente la octava estrella
más cercana a una distancia de
9.68 años luz. No es visible a
simple vista. Se encuentra en la
constelación de Sagitario. Es una
estrella del tipo enana roja y su
masa no supera el 17% de la
masa de nuestro sol. Su velocidad
de rotación, indica que es una
estrella joven.
Es a su vez una estrella
fulgurante, también conocida por
su condición de variable como
V1213 Sagittarii.
9.- ROSS 248
Es la novena estrella más cercana. Se
encuentra en la Constelación de
Andrómeda. No es observable a simple
vista. Se encuentra a 10,30 años luz, pero
dentro de 37.100 años estará a 3,03 años
luz de la Tierra, siendo la estrella más
próxima.
Ross 248, es una enana roja de tipo
espectral M6.0V. Así mismo es una estrella
variable del tipo BY Draconis, por lo que
recibe el nombre en cuanto variable de HH
Andromedae. Se intuye la presencia de
una acompañante aun no detectada.
10.- EPSILON ERIDANI
Es la decima y última de nuestra lista
de estrellas más cercanas. Se
encuentra en la constelación de
Eridanus y está a unos 10,5 años luz
de la Tierra. Es la tercera más
próxima visible a simple vista.
Es una estrella espectral de tipo K2,
muy parecida al sol. Es una estrella
joven de unos 600 millones de años,
cuando nuestro sol tiene unos 4.600
millones de años.
Estas son las diez estrellas más
cercanas a la Tierra de nuestra lista,
pero solo en nuestra Galaxia hay
millones y en el universo millones de
galaxias, lo que nos da un pequeño
atisbo de la inmensidad del universo
y lo insignificante de nuestro planeta
en él, que seria como una mota de
polvo. Pero es un hermoso planeta y
es en el que habitamos la raza
humana, por lo que deberíamos
cuidarlo como un tesoro, pues es
nuestra casa
La estrella más alejada de la tierra
Esta lista incluye todas las estrellas y enanas marrones conocidas
(incluidas las subenanas marrones) situadas a menos de 5,0 parsecs
(16,3 años luz) del Sistema Solar. Hasta ahora se han encontrado 76
objetos de este tipo, de los cuales sólo nueve son lo suficientemente
brillantes en luz visible como para alcanzar o superar el brillo más tenue
para ser visibles a simple vista desde la Tierra, 6,5 de magnitud
aparente[1]. Las estrellas y (sub-)enanas marrones se mueven
actualmente a través de o con nubes interestelares como la Nube
Interestelar Local y la Nube G, todas las cuales están, junto con el grupo
móvil más cercano y no visible de la Osa Mayor o el cúmulo estelar
visible más cercano, las Híades, dentro de la Burbuja Local. En el
contexto galáctico, la Burbuja Local es una pequeña parte, a diferencia
del más amplio Cinturón de Gould, del Brazo de Orión, que contiene la
mayoría de las estrellas visibles sin ayuda.
Los 76 objetos conocidos actualmente están unidos en 54 sistemas
estelares. El sistema más cercano es Alfa Centauri, y Próxima Centauri
es la estrella del sistema más cercana, a 4,25 años luz de la Tierra. El
más brillante de estos sistemas, así como el más brillante en el cielo
nocturno de la Tierra, es Sirio. De la población de objetos actualmente
conocidos, 61 son estrellas de la secuencia principal, siendo 50 enanas
rojas y las 13 restantes de mayor masa. Además, los astrónomos han
encontrado cuatro enanas blancas (núcleos colapsados
extremadamente densos que permanecen después de que estrellas
como nuestro Sol hayan agotado todo el hidrógeno fusionable en su
núcleo y se hayan desprendido lentamente de sus capas exteriores),
así como 10 enanas marrones y la más cercana y única subenana
marrón WISE 0855-0714 (un objeto de masa planetaria, no lo
suficientemente masivo como para fusionar hidrógeno, por lo que
también es el planeta rebelde más cercano conocido
Cómo se llama la trayectoria que siguen los planetas para dar la
vuelta al sol
En mecánica celeste, una órbita es la trayectoria curva de un
objeto[1] como la trayectoria de un planeta alrededor de una estrella,
o de un satélite natural alrededor de un planeta, o de un satélite
artificial alrededor de un objeto o posición en el espacio como un
planeta, una luna, un asteroide o un punto de Lagrange. En un átomo,
los electrones siguen trayectorias curvas similares, u órbitas,
alrededor de un núcleo. Normalmente, la órbita se refiere a una
trayectoria que se repite regularmente, aunque también puede
referirse a una trayectoria no repetitiva. En una aproximación
cercana, los planetas y satélites siguen órbitas elípticas, con el centro
de masa orbitando en un punto focal de la elipse,[2] tal y como
describen las leyes de Kepler sobre el movimiento planetario.
Para la mayoría de las situaciones, el movimiento orbital se
aproxima adecuadamente mediante la mecánica
newtoniana, que explica la gravedad como una fuerza que
obedece a una ley de la inversa del cuadrado[3]. Sin
embargo, la teoría general de la relatividad de Albert
Einstein, que explica que la gravedad se debe a la curvatura
del espaciotiempo, con órbitas que siguen geodésicas,
proporciona un cálculo y una comprensión más precisos de
la mecánica exacta del movimiento orbital.
Qué forma tiene la trayectoria de un planeta alrededor del sol
Este artículo trata sobre los movimientos retrógrados de los cuerpos
celestes respecto a un objeto gravitatorio central. Para el movimiento
aparente visto desde un punto de vista particular, véase Movimiento
retrógrado aparente.
El movimiento retrógrado en astronomía es, en general, el movimiento
orbital o de rotación de un objeto en la dirección opuesta a la rotación
de su primario, es decir, el objeto central (figura de la derecha).
También puededescribir otros movimientos, como la precesión o la
nutación del eje de rotación de un objeto. El movimiento retrógrado o
directo es un movimiento más normal en la misma dirección en la que
gira el primario. Sin embargo, «retrógrado» y «prógrado» también
pueden referirse a un objeto distinto del primario si así se describe. El
sentido de la rotación viene determinado por un marco de referencia
inercial, como las estrellas fijas lejanas.
En el Sistema Solar, las órbitas alrededor del Sol de todos los planetas y
la mayoría de los demás objetos, excepto muchos cometas, son
prógradas. Orbitan alrededor del Sol en la misma dirección en la que el
Sol gira sobre su eje, que es en sentido contrario a las agujas del reloj
cuando se observa desde arriba del polo norte del Sol. Excepto Venus y
Urano, las rotaciones planetarias también son prógradas. La mayoría de
los satélites naturales tienen órbitas retrógradas alrededor de sus
planetas. Los satélites prógrados de Urano orbitan en la dirección de
rotación de Urano, que es retrógrada respecto al Sol. Casi todos los
satélites regulares están bloqueados por la marea y, por tanto, tienen una
rotación retrógrada. Los satélites retrógrados son generalmente
pequeños y distantes de sus planetas, excepto el satélite Tritón de
Neptuno, que es grande y está cerca. Se cree que todos los satélites
retrógrados se formaron por separado antes de ser capturados por sus
planetas.
Clasificación de la trayectoria hiperbólica y la excentricidad de
la órbita
Obviamente, cuando los científicos comenzaron a pensar en cómo
se forman los sistemas planetarios, empezaron por considerar el
único ejemplo que teníamos antes de 1995: nuestro propio sistema
solar. Cuando observamos nuestro sistema solar en el sentido
«moderno», tal y como lo definieron Copérnico y Kepler, vemos
inmediatamente varios patrones interesantes:
La pregunta que podemos plantear es: ¿en qué medida estos
patrones aparentemente sorprendentes son universales y nos
dicen algo sobre la formación de los sistemas planetarios, y en qué
medida son resultado de procesos aleatorios, en los que otros
sistemas planetarios mostrarán detalles completamente diferentes?
Empecemos por los puntos 3, 4 y 5. Estos puntos parecen estar
explicados por la idea de que la nube inicial de la que se formó el
sistema solar tenía una ligera rotación (momento angular no nulo).
Recordemos que el momento angular no puede ser destruido, por
lo que cualquier momento angular inicial hará que la protoestrella
rote cada vez más rápidamente al colapsar. Esta misma rotación
hará que las partes exteriores de la nube formen un disco, y los
planetas que se formen dentro de ese disco tendrán órbitas
circulares y estarán todos en el mismo plano (el plano del disco).
Así, esta única idea parece explicar los tres puntos 3-5 (excepto
Mercurio y Plutón), y podríamos esperar que todos los sistemas
solares tengan planetas que orbiten en la misma dirección.

También podría gustarte