comienza el movimiento de electrones y se da inicio al proceso de corrosión electroquímica, formando herrumbre. Por otra parte, el acero al carbono, reacciona con el oxígeno generando óxidos de hierro que incrementan su volumen a medida que la oxidación continúa. La sal marina se lleva por la lluvia a decenas de kilómetros tierra adentro. El viento es capaz de transportar las gotas de agua y cloruros durante decenas o cientos de metros. Las lejías (hipoclorito sódico) pueden dañar el acero si se encuentran muy concentrados o permanecen en contacto con la superficie durante mucho tiempo. El ácido producirán corrosión y el acero se deteriorará lentamente. Con el acero corroído, pueden hacer que el acero se surque o se deforme. Un óxido básico es un compuesto iónico, que se forma cuando el oxígeno se combina con un metal. La combustión es la reacción de oxidación de una sustancia combustible (gas natural) al combinarse con una sustancia oxidante denominada comburente (oxígeno). Los metales y el hierro en particular se encuentran en la corteza terrestre en forma de minerales, Los metales tienen la tendencia del metal a volver a su condición original (Oxido o sal). El acero, cuyo mineral de origen es el hierro en forma de óxidos, no es ajeno a esta situación y está, como se sabe, expuesto