• La inversión inicial: Apostar por las fuentes renovables supone un gran
movimiento de dinero y la rentabilidad no suele llegar a corto plazo, por lo que requiere un colchón que no todas las empresas se puede permitir. • El espacio necesario para empezar a desarrollarlas. Dependiendo de la fuente que requieran, necesitan de un gran espacio para poder desarrollarse (es el caso por ejemplo de los paneles solares, de los que se necesitan una cantidad considerable si se quiere generar una alta energía eléctrica). • La disponibilidad de las energías renovables. No siempre se dispone de ellas y se debe esperar que haya suficiente almacenamiento. Esto tiene una estrecha relación con el hecho de que están comenzado a ser cada vez más populares. Energía Solar La energía solar es una energía renovable, obtenida a partir de la radiación del Sol. La radiación solar que alcanza la Tierra ha sido aprovechada por el ser humano desde la antigüedad, mediante diferentes tecnologías que han ido evolucionando. Es una energía totalmente limpia y rentable a largo plazo, además que es muy silenciosa y muy generosa con el ambiente. Energía geotérmica La energía geotérmica es una energía renovable que se obtiene mediante el aprovechamiento del calor del interior de la Tierra que se transmite a través de las rocas calientes o reservorios por conducción y convección, dando origen a los sistemas geotérmicos. Es muy rentable económica y energéticamente, produce residuos muy pequeños o mínimos y no requiere un gran espacio para las plantas. Lo malo es que puede generar microsismos, contamina el agua con amoniaco o arsénico y deteriora el paisaje donde se encuentra la planta.