Los azules estaban integrados por una serie de individuales de
corte liberal, quienes dieron al partido unos principios opuestos a la tradición política dominicana. Estos principios estaban inspirados en los procesos de cambio y transformación que se daban en los países de Europa y en los Estados Unidos.
Los azules rechazaban intentos de anexión o protectorado de
potencias extranjeras. A pesar de tener una ideología diferente a la del Partido Rojo, los azules incurrieron en el caudillismo, endeudamiento y mal manejo del erario público.