Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
se llaman virtudes teologales o virtudes teológicas los hábitos que Dios infunde en la inteligencia y en la voluntad
del hombre para ordenar sus acciones a Dios mismo. Tradicionalmente se cuentan tres: la fe, la esperanza y la
caridad Junto a estas, suelen citarse como complemento en el ámbito de las llamadas virtudes infusas a las virtudes
cardinales Comencemos por la fe. La Fe es creer lo que no vemos porque alguien nos lo ha dicho; es adherirnos a otro;
es entrar en contacto personal con otro. Y este otro no puede ser en nuestro caso, sino Dios, mediante Cristo y la
Iglesia. Esta virtud teologal nos es infundida por medio del bautismo. La liturgia nos lo recuerda ese día. "¿Que pides
de la Iglesia de Dios?". La Fe. Y la Fe ¿Para que te sirve?
Las virtudes teologales han influido algunos
aspectos de la literatura cristiana. En San
Manuel Bueno mártir de Miguel de unamuno
ESPERANZA
FE
La fe infunde la esperanza. La esperanza es la
La fe es creer en Dios y confiar en su
espera confiante en el cumplimiento de un
revelación. Esto supone, por lo tanto, la
determinado horizonte que, en el caso de la
apertura espiritual necesaria para poder
teología cristiana, se refiere al cumplimiento de
reconocer la manifestación de Dios en la vida las promesas de Jesús: el reino de los cielos y
cotidiana y en la comunidad de creyentes, la vida eterna, en función de lo cual el cristiano
esto es, en la Iglesia. se conduce espiritualmente.