CAPITULO 4

David y su conocimiento
de la autoridad
 “Y dijo a sus “Dijo además David: Vive
hombres: Jehová Jehová, que si Jehová no lo “Y le dijo David:
me guarde de hiriere, o su día llegue para ¿Cómo no
hacer tal cosa que muera, o descendiendo tuviste temor de
contra mi señor, el en batalla perezca, guárdeme extender tu mano
ungido de Jehová, Jehová de extender mi mano para matar al
que yo extienda mi contra el ungido de Jehová. ungido de
mano contra él; Pero toma ahora la lanza que Jehová?”
porque es el está a su cabecera, y la vasija 2 Samuel 1:14
ungido de de agua, y vámonos.”
Jehová.” 1 Samuel 26:10-11
1 Samuel 24:6

2
*No fue al precio de la
rebelión que David se
encaminó al trono

Como Saúl pecó, el Señor lo rechazó y

ungió a David. Sin embargo, David era
todavía un hombre que estaba bajo la
autoridad de Saúl.
3
 Una vez que Dios hubiera puesto
a Saúl por rey y a David bajo la
autoridad de Saúl, David habría
tenido que pagar el precio de la
rebelión si hubiera llegado al
trono matando a Saúl. Habría
tenido que convertirse en rebelde.

4
 *La obediencia es
superior A LA OBRA
Si los hombres han de
servir a Dios, la sujeción
a la autoridad es una
necesidad absoluta. La
consagración no cubre el
pecado de la rebelión.

5
La sumisión a la autoridad no
consiste en someterse a una persona,
sino en someterse a la unción que
está sobre esa persona, la unción que
vino sobre ella cuando Dios la
ordenó como autoridad.

6
*David mantuvo la autoridad de
Dios
David prefería ser
obediente a Dios y
mantener la autoridad de
Dios antes que salvar su
propia vida.
7
Porque David mantuvo la autoridad de Dios,
él lo reconoció como un hombre según su
corazón.

Es absolutamente
imprescindible que nos
sometamos a la autoridad
ANTES DE EJERCER
AUTORIDAD.

8
DEBEMOS SOMETERNOS
A LA AUTORIDAD
DE DIOS
EN NUESTRO CORAZÓN ANTES QUE LA
IGLESIA PUEDA SER BENDECIDA.
9