Provincias –como Rosas- sus seguidores se sentían representados por ellos a diferencia del resto de la élite. El conocimiento de la gente, su carisma, muestra de valor de mando y combate así como la demostración de valores masculinos” eran elementos que garantizaban su liderazgo” (Di Meglio, 2012) Yo me llamo Juana Peña y tengo por vanidad, que sepan todos que soy negrita muy federal. Negrita que en los tambores ocupo el primer lugar, Y que todos me abren cancha cuando yo salgo a bailar. Solo por Don Juan Manuel han de morir y matar, y después por los demás, mandame mi general. "Ya has visto lo que vale la amistad de los pobres y por ello cuanto importa sostenerla y no perder medios para atraer y cautivar voluntades. No cortes pues sus correspondencias. Escríbeles con frecuencia: mándales cualquier regalo, sin que te duela gastar en esto. Digo lo mismo respecto de las Madres y mujeres de los pardos y morenos que son fieles. No repares, repito, en visitar a las que lo merezcan y llevarlas a tus distracciones rurales, como también en socorrerlas con lo que puedas en sus desgracias". (Carta de Rosas a su esposa. Di Meglio, 2012)