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Análisis de los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) en una

Unidad de Salud Mental Comunitaria


Vega, A., Amor, G., Villena, A., Hurtado, M., Gómez, C.
UGC de Salud Mental del HRU de Málaga
Los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) han alcanzado una especial relevancia en las últimas décadas, tanto por su
creciente incidencia como por la gravedad de la sintomatología y resistencia al tratamiento, especialmente entre mujeres
adolescentes de las sociedades occidentales (Peláez, Labrador y Raich, 2004). En población general, las tasas de prevalencia
oscilan del 0,2% al 0,8% (Echeburúa, E., y Marañón, I., 2001); siendo del 1-2% en la AN y del 2-3% en la BN en el caso de
chicas adolescentes (Chinchilla, 1995; Toro, 1996; De la Puente y Gómez, 1998). Según los datos del Plan Integral de Salud
Mental de Andalucía, un 1,49% de las personas atendidas en las Unidades de Salud Mental Comunitarias (USMC) fueron
diagnosticadas de síndromes del comportamiento asociados con alteraciones fisiológicas y factores físicos (SSPA, 2008).
Objetivos Método
 Estudiar la frecuencia de personas con diagnóstico Se seleccionaron todos los pacientes con
de TCA (anorexia, bulimia, TCA atípico y general, diagnóstico de TCA (n= 53) de un total de 5171 usuarios
trastorno por atracón y obesidad) que fueron atendidos durante el 2013 en la USMC El Limonar
atendidas en una USMC en el año 2013. (Málaga).
 Analizar la distribución por género, la edad y el Se realiza análisis descriptivos de los datos en las
número de consultas. variables género, edad y número de consultas.

Resultados
Nº medio de Mujeres Hombres Edad
consultas media
Anorexia 2,18 11 0 35,73
Bulimia 3,2 9 1 40,30
TCA general 3,76 25 1 30,62
TCA atípico 3 2 0 46,50
T. Atracón 4,5 2 0 34
Obesidad 1,5 1 1 43
Total 3,24 94,4% 5,6% 34,70

Tabla 1. Número de consultas medio, distribución por género y


edad media de TCA Figura 1. Frecuencia de los TCA
 Las personas con TCA suponen un 1,02% del total de los usuarios que acudieron a la USMC en el año 2013.

Conclusiones
 A pesar del aumento de la prevalencia de los TCA apuntado por diferentes estudios, el número de casos que fueron
tratados en esta USMC en el año 2013 representa un porcentaje mínimo frente al resto de los trastornos mentales y la
edad media de los pacientes es mayor a lo esperado.
 Esto podría deberse a que la UGC cuenta entre su cartera de servicios con un programa específico para el
tratamiento de los TCA, donde son derivados los casos más graves, disminuyendo así el número de usuarios que
reciben un seguimiento por parte de nuestro servicio.
 Por otro lado, en la mayoría de los casos de mujeres adolescentes se presenta como un conjunto de síntomas
subclínicos, que normalmente no son suficientes para el diagnóstico del trastorno, y cuyo pronóstico con un
seguimiento a corto plazo tiende a la normalización del cuadro.
 Finalmente, el perfil clínico de los usuarios con TCA, por su frecuente comorbilidad con los trastornos de la
personalidad (límite, histriónico,…), complica el diagnóstico y tratamiento del mismo, siendo este último diagnóstico
el más orientativo acerca de cómo abordar el caso, de una manera más general, y considerándose el TCA un síntoma
más del trastorno de la personalidad, que mejorará en la medida en que lo hagan el resto de los síntomas.
 De cara a futuras investigaciones, es importante tener en cuenta que el diagnóstico de estos trastornos no son
mutuamente excluyentes, por lo que el doble diagnóstico puede resultar útil a la hora de orientar el abordaje
psicofarmacológico y terapéutico de estos pacientes.

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