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TEMA
CARACTERÍSTICAS TEÓRICAS PREDOMINANTES EN TRABAJO SOCIAL
PRESENTADO A
FELINDA GAMBOA
SEMESTRE – GRUPO
I - 1B
CARACTERISTICAS TEORICAS
PREDOMAINANTES EN TRABAJO SOCIAL
• ES interesante comprender el desarrollo mismo del Trabajo Social, su origen, sus modelos y
sus utopías; pero es trascendental detectar el fondo característico tendencial de la profesión en
marcada como disciplina universal y como que hacer de un espacio, de un tiempo y de unas
circunstancias e intereses definidos.
• Examinar, por ejemplo, la asimilación y reproducción teórica del trabajo Social, nos conduce a
conclusiones explicativas de su parasitismo conceptual y a la ansiedad de búsqueda creadora.
• De igual manera racionalizar el origen y desenvolvimiento del Trabajo Social en Estados
Unidos y Europa definido por su carácter asistencial, en comparación con la adaptación de un
Trabaja Social exógeno, a la realidad de América Latina, nos orienta a la necesidad del enfoque
histórico y de ahí, obtener las características y tendencias necesarias que nos posibiliten
trascender el quehacer del Trabajador Social.
• En este sentido, pretendemos hacer una breve referencia a las características del trabajo Social
de manera generalizadora, para luego hacer una presentación sucinta de las tendencias prevale
Clientes en América Latina, y desentrañar en líneas generales el desarrollo que ha tenido la
profesión en nuestro medio y el camino por recorrer en su devenir científico creador .
TRABAJ0 SOCIAL PRAGMATICO FUNCIONALISTA
El origen del Trabajo Social es eminentemente pragmático, el Cual se complementa con las
influencias de las ciencias sociales en el campo de las doctrinas funcionalistas, humanistas,
positivistas y estructuralistas.
Este estado pre-científico. del Trabajo Social continúa ligado a su empirismo actual, alimentado
por las nuevas corrientes del pensamiento social determinadas por las concepciones dominantes
del neopositivismo, el estructural-funcionalismo, el existencialismo y el materialismo metafísico.
Es natural su origen, como lo fue el de la medicina, por ejemplo, Cuyas raíces se remontan a los
curanderos y los brujos de la tribu o el de la economía en el trueque de productos agrícolas o
manufacturados artesanalmente.
El Trabajo Social como profesión, encuentra sus antecedentes en la división social de los
poseedores de los medios de producción y los desposeídos. Los primeros adquieren un carácter
de benefactores y los segundos un carácter de beneficiarios de servicios asistenciales,
Dadivas transformadas en limosna, socorro, hospitalidad, caridad, beneficencia, filantropía,
auxilios, pensiones y servicios.
• como compensación surgen los Apóstoles de la Caridad para Contribuir con su trabajo voluntario al aliento y
esperanza del indigente.
• Así surge el Trabajo Social, en el presente siglo con un profundo sentido pragmático que se fusiono
posteriormente con el humanismo, el positivismo y el funcionalismo como guías teóricas en cargados de
facilitar el obrar Asistencial del Trabajador Social preocupado por ejecutar políticas y programas diseñados sin
su intervención. Al Trabajador Social no le correspondía conocer la verdad, solo actuar, para ocultar el
trasfondo de los intereses económicos, Sociales, políticos y religiosos prevaleciente.
• ¿El obrar, por el obrar, o el hacer el bien sin mirar a quien o por qué?, determinó la primera fase profesional
destinada a adaptar los inadaptados con correctivos rehabilitadores, suministrados como dádivas de salvación.
• “El humanismo propuso la idea de que el hombre es fundamentalmente bueno y que la vida debe ser
comprendida como desarrollo de esa bondad, mientras la ciencia proporciona para ese desarrollo.
• El Trabajo Social asimila, el humanismo que plantea atención material sin la esperanza en un Dios redentor. La
humildad, el sentimiento y la comprensión la acción práctica del hombre.
• Los principios del humanismo basados en la vida material, la felicidad humana, la buena moral, la fraternidad,
la compasión, la preocupación por los demás, el altruismo, el servicio al prójimo libertad y la bondad se
internalizaron en los agentes profesionales del Trabajo Social, preocupad os en el hacer cosas por hacerlas sin
intentar conocer críticamente el medio al cual vendían su fuerza de trabajo calificada.
• El pragmatismo: como metodología profesional para ayudar a resolver problemas de
adaptación a la vida cotidiana, influyó notoriamente en la práctica profesional como
experiencia generadora de nuevos hechos sin el razonamiento y teorización
necesarios.
• El humanismo: como filosofía, el pragmatismo como método y el postismo com0
concepción dominante de las ciencias, orientaron la fase pre-científica del Trabajador
Social.
• El positivismo: le enseñó al Trabajador Social, a conocer el comportamiento de la
sociedad y controlar sus desequilibrios atentatorios del statu quo dominante.
Adquiere un carácter de controlador social, que sumado a su contenido paliativo y
paternalista va a cumplir su función de correctivo preventivo para mantener la
estabilidad del sistema de desigualdades sociales.
La asimilación del positivismo en la formación del Trabajador Social, es inherente a su actuar, frente
a los estados problemáticos mediante estudios y soluciones parciales independientes de los
fenómenos colaterales de tipo económico, político, cultural e históricos.
El pragmatismo de los primeros años del presente sigl0, en Trabajo Social, dio paso obligado a la
teoría positivista impregnada en las ciencias sociales, de las cuales se nutre porque la manipulación
práctica de las cosas no puede adelantar mucho ni largo tiempo sin una c0mprensión de aquello con
lo cual se trabaja y de los procesos que intervienen en las mismas.
Este paso lo da Trabajo Social a finales de la década del 1970, en el llamado proceso de re
conceptualización, precedido por la teórica de las ciencias sociales, inspiradas en el funcionalismo y
el estructuralismo, que originan la formación de los agentes del cambio formal.
La búsqueda de que todo funcione en armonía, para la consecución de unos mismos fines
estructurales, produce la necesidad de explicar un fenómeno social por sus causas eficientes al
sistema. Es decir, por la función que cada fenómeno o problema social cumple en la sociedad y la
forma función de superarlo para lograr el equilibrio global.
• Es decir, que cada institución desempeña una función particular, unida al fortalecimiento
funcional, el sistema social denominado unidad funcional.
• El Trabajador Social cumple también una función social específica: mantener el equilibrio social
mediante, la administración de servicios asistenciales que funcionan como agentes reguladores y
controladores del malestar social.
• Frente a las disfuncionalidades, trabajador Social debe buscar una reciprocidad entre el individuo
problema y el sistema de Asistencia para corresponder a los intereses prevalecientes.
• El funcionalismo racionalizó los programas asistenciales de la sociedad moderna, instrumentalizó
el actuar del Trabajador Social y fortaleció las tendencias conservadoras de la Sociedad capitalista.
• Al lado del funcionalismo surge el estructuralismo que le permite al Trabajo Social actualizar su
accionar dentro de la sociedad Subdesarrollada o en vía de desarrollo, encausadas hacia la
modernización y el desarrollo equilibrado.
• El Trabajador Social se constituye en un agente de cambio, promotor de las modificaciones
institucionales, requeridas para una mayor participación social dentro de la estructura funcional.
• El cambio formal de un estado de marginalidad a uno de participación controlada, induce al
Trabajador Social a implantar soluciones de arriba hacia abajo, buscando que sean las mismas
personas las que Solucionen sus problemas de acuerdo a las funciones asignadas socialmente. La
comunidad debe solucionar sus propios problemas de acuerdo a los patrones de cambio institucional.
• EL Trabajador Social bajo su investidura de agente de cambio, actúa como elemento inserto en la
problemática para introyectar pautas modificadoras de la participación popular que vienen de afuera
hacia adentro. Es decir, de la política institucional, hacia las personas, grupos, comunidades u
organizaciones afectadas por diferentes afecciones sociales. No es el cambio sociogestionario, surgido
de las necesidades reales de la población para soluciones estructurales. Es el cambio de forma no de
contenido.
• Hasta aquí el pragmatismo, el humanismo, el positivismo, el funcionalismo y el estructuralismo le
impedían al Trabajo Social conocer y actuar científicamente en nuestra realidad, alimentando un
actuar enajenador, definido por la correlación influyente de los modelos de las ciencias sociales
tomados como guías-mito encubriendo la búsqueda de identidad profesional que permitiera la
formulación de contenidos genuinos en el campo del saber científico.
TRABAJO SOCIAL EN EL DEVENIR CIENTIFICO