• Puede que muchas veces te veas saturado por la cantidad de
tareas que se te acumulan en el día a día y no sepas por dónde empezar. 1.- ORGANIZATE 1.1. Haz una lista de cosas por hacer
Las listas son la herramienta de productividad más simple
• Anota tareas concretas.
• Cada tarea tiene un objetivo. ¿qué es lo que ocurrirá cuando esta tarea esté acabada? • Divide las tareas grandes. • Actualizar la lista una vez al día 1.2 Clasifica y asigna prioridades
• Siempre hay tareas más importantes o urgentes que otras.
1.3. Planifica el día
• Es importante elegir qué tareas vas a hacer cada
día. Así te obligas a ponerte objetivos y cumplirlos.
• Intenta no sobreplanificar y ser realista. Deja
tiempo para imprevistos.
• Puedes revisar la lista al final del día para decidir
qué tareas importantes hacer al día siguiente. 1.4. Metas y recompensas • Ponte metas que te mantengan motivado. Si te concentras puedes cumplirlas, no te rindas hasta que las completes.
• Si cumples tus objetivos diarios o semanales,
como una motivación extra, ponte recompensas. 1.5. Aprende y mejora diariamente
• Anota lo que funcionó y lo que no para mejorar la próxima vez.
2. CONCÉNTRATE
• 2.1. Elimina las distracciones mientras trabajas
2.2. Céntrate en una cosa a la vez
• Hacer varias cosas a la vez no es productivo
2.3. Mantén tu casa y tu área de trabajo ordenada 2.4. Analiza tus horas más productivas 3. CUÍDATE 3.1. Duerme suficiente
3.2. Levántate temprano y aprovecha el día
3.3. Come alimentos
saludables
3.4. Haz pequeños descansos
4. SIMPLIFICA
• La productividad no consiste sólo en hacer más cosas, sino