Psicología de las personas con habilidades diferentes

El síndrome de Down en la
vida adulta.

PRESENTADO POR:
• Contreras Roque, Gianina (N00069498)
• Gonzales Margarito, Dayana (N00087526)
• Villacorta Herrán, Kathleen (N00160530)
 REFLEXIÓN

“Recuerda que nada es

imposible , hasta que
alguien nos dice que lo
es.”
 ¿A QUÉ ADULTO NOS REFERIMOS?

 El adulto de más de 40-50 años, con

presencia de un declive en su capacidad
cognitiva y en su conducta.

 El adulto con claras manifestaciones de

demencia tipo Alzheimer.

 El adulto que no manifiesta declive personal,

pero que no ha sido preparado para
desarrollar autonomía y autosuficiencia.

 El adulto que ha sido preparado y que

empieza a ver realizada la posesión de su
autonomía.
¿COMO ES SU
VIDA  Las personas con síndrome de Down, como cualquier otra
SEXUAL? persona, tienen deseo sexual. Quizá tienen una sexualidad un
poco más infantil y hay muy pocos que lleguen al coito, pero si
uno de los dos miembros de la pareja no tiene esta
discapacidad, sí se pueden dar embarazos no deseados.
TRASTORNOS MÉDICOS COMUNES

 Pérdida sensorial.
 Hipertiroidismo.
 Apnea obstructiva del sueño.
 Osteoartritis.
 Inestabilidad atloaxoidea.
 Problemas de la columna cervical.
 Osteoporosis.
 Enfermedad celíaca.
 Enfermedad de Alzheimer.
 BIENESTAR EMOCIONAL Y
PSIQUIÁTRICO.
 Existe un mayor riesgo de presentar
trastornos de salud mental como depresión,
ansiedad, trastorno obsesivo compulsivo y
alteraciones del comportamiento.

 Debe investigarse cualquier cambio

repentino o abrupto en el estado de ánimo y
los patrones de conducta.

 Se recomienda evaluación médica

exhaustiva para buscar cualquier trastorno
físico o médico nuevo que pueda ser
tratado.
ESPERANZA DE VIDA

 Ha aumentado notablemente de los 25 años como media

hace 30 años, a situarse en los 60 en la actualidad.
 Tienen un envejecimiento precoz debido a una serie de
causas relacionadas con los genes del cromosoma 21 que se
encuentra triplicado, que es lo que caracteriza precisamente
al síndrome de Down (por ello se llama también 'trisomía
21'). Además, algunas personas, con independencia de este
envejecimiento precoz, desarrollan la enfermedad de
Alzheimer, en la que está presente la característica
demencia.
 REALIDAD DE ENVEJECIMIENTO
-Los adultos con síndrome de Down pasan por un
“envejecimiento acelerado”, tienen ciertos problemas
y características físicas comunes en los adultos que
envejecen de forma normal pero que les ocurren antes
que a la población general.
-No se sabe bien cuál es el motivo de esto, pero en
gran medida está relacionado con los genes del
cromosoma 21 que están asociados al proceso de
envejecimiento.
-En general, la experiencia del envejecimiento
acelerado puede verse desde el punto de vista médico,
físico y funcional las personas con síndrome de Down
parecen “perder energía” una vez que se acercan al
final de los 40 o principios de los 50.
 LA CONEXIÓN ENTRE LA ENFERMEDAD DE
ALZHEIMER Y EL SÍNDROME DE DOWN
El cromosoma 21 desempeña un papel
fundamental en la relación entre el síndrome de
Down y la enfermedad de Alzheimer ya que
porta un gen que produce una de las principales
proteínas que intervienen en los cambios que se
producen en el cerebro a causa del Alzheimer.
Además, los científicos han localizado varios
genes en el cromosoma 21 que participan en el
proceso de envejecimiento y que contribuyen al
aumento del riesgo de la enfermedad Alzheimer.
 EL DESARROLLO DE LA ENFERMEDAD DE
ALZHEIMER
-Pérdida de memoria a corto plazo (dificultad para recordar
acontecimientos recientes, aprender y recordar nombres y hacer la
misma pregunta varias veces o contar la misma historia
repetidamente)
- Dificultad para aprender y recordar información nueva
- Cambios en el lenguaje expresivo (dificultades para encontrar
palabras, vocabulario más reducido, frases más cortas, discurso
menos espontáneo)
-Cambios en el lenguaje receptivo (dificultades para entender el
lenguaje y las instrucciones verbales)
- Empeora la capacidad para planificar y secuenciar tareas
familiares.
-Cambios de conducta y cambios de personalidad.
 CONCLUSIÓN
La calidad de vida del adulto será igual a la calidad de
vida de su formación desde la cuna.
Una buena familia no nace, se hace a partir del desarrollo
de una serie de virtudes que ha de desarrollar, por sí
misma y recurriendo a apoyos ofrecidos por especialistas.
Aceptar a la persona con discapacidad y mostrarse
dispuesto a que alcance su desarrollo en la vida adulta
exige resiliencia, formación y humildad.