Ética social cristiana

Capítulo 2. El trabajo

Autor: Dean Brackley, SJ

Esquema-síntesis: Valentín Menéndez,
 El trabajo es la realidad que ocupa la mayor
parte de nuestra vida.
Introducción
Es el lugar de nuestra realización personal y
también de nuestro servicio a la familia y a
la comunidad.
Por un lado el trabajo puede convertirse en
campo de injusticia y explotación.
Por otro el trabajo puede llegar a ser una
gran posibilidad de dignificación personal
y de construcción del mundo.
Por eso la falta de trabajo, o la incapa-cidad
para él, nos parecen aflicciones y problemas
muy serios en nuestra vida.
 1.
El trabajo
en la Biblia
1. El trabajo en el Antiguo Testamento
Dios que crea el mundo, trabaja y descansa: (Gén
1-2,3). El ser humano es creado a imagen y
semejanza de Dios, por lo tanto, con capacidad de
creación, y al mismo tiempo encargado de
administrar y cuidar la creación (Gén 1,26-30).
En Gén 2,4-17 hay otra tradición bíblica que
presenta al ser humano como encargado por Dios
del jardín de la creación. Dios mismo encarga al
ser humano cuidarlo.
Al entrar en la tierra prometida se le promete al
pueblo que si obedece a Dios prosperará el trabajo
de sus manos (Dt 11,10-17; Is 65,21-23).
1. 1.1. La dureza del trabajo

Por el egoísmo y el pecado del ser huma-

no, el trabajo se hace más duro y deshu-
manizante (Gen 3,17-19).
Los profetas advierten que la infidelidad a
Dios lleva a no gozar del fruto del trabajo
(Am 5,11).
Los libros de la sabiduría también hablan
de un trabajo duro, que quién sabe quién lo
heredará y qué fruto tendrá (Ec 1,3.13).
1. 1.2. Explotación e injusticia
El Éxodo describe el maltrato de los hebreos
en Egipto, cuyas quejas atraen la ira de Dios
(Éx 1,8-13; 3,7-10).
Con la ley del Sinaí se intenta superar la in-
justicia de Egipto (Dt 24,14-15).
Los profetas denuncian los abusos como en
Jer 22,13.
Los judíos pobres, que no podían pagar sus
deudas, se convertían en esclavos (Lev
19,20-22).
Ver también las denuncias de Amós 2,6.
1. 1.3. La pereza
trae la desgracia
Es un mensaje permanente de
los libros sapienciales.
1.4. Confianza en Dios
y descanso
Dios, que descansó, manda
descansar de un trabajo que
produce fatiga; de ahí la
institución del sábado.
El que trabaja debe aceptar sus
límites y reconocer que Dios
ayuda a quienes confían en él: la
torre de Babel (Gen 11,1-9).
Dios quiere que el trabajo
humanice, aun en medio de un
mundo injusto.
2. El trabajo en el Nuevo Testamento

2.1. Ideal del trabajo

El NT añade el matiz de que el trabajo, aunque sea humilde, tiene un gran
valor, pues Dios mismo, cuando se hizo hombre, dedicó a él la mayor parte de
su vida: Jesús es hijo de artesano y se pasa la mayor parte de su vida
ejerciendo esa
labor.
Toda la vida, y todo el trabajo puede
ser un culto agradable ofrecido a Dios
(Rom 12,1).
Somos todos seguidores de Jesús que no
vino para ser servido sino para servir
(Mc 10,45).
2. 2.2. La dureza del trabajo

Este tema tiene poco eco en el evangelio.

Curiosamente no se condena la esclavitud y se
pide que los esclavos obedezcan a sus amos,
pero para complacer a Dios, el único Señor.
Supone un mundo caduco, que pronto pasará, y
que, cuando Jesús vuelva, lo hará todo nuevo.
Pero en este tiempo los amos deben tratar a los
esclavos como hermanos que son: Flm 8-21; Gál
3,28.
2. 2.3. La explotación y la
injusticia
El NT también tiene denuncias
proféticas fuertes: Sant 5,1-5.
El trabajador merece su salario
(Lc 10,7).
2.4. La pereza y el
espíritu de trabajo
El mensaje de la parábola de los
talentos es claro (Mt 25,14-30).
Pablo trabajaba para ayudar a
los necesitados y no ser gravoso
a los demás (Hch 20,33).
Critica a los que, esperando la
pronta venida de Jesús, habían
dejado de trabajar (2Tes 3,6-12);
por eso dice que “el que no tra-
baja, que no coma”.
2. 2.5. Confianza en el Padre

Jesús acentúa que en medio de las

dificultades de la vida no vivamos
angustiados (Mt 6,25-34).
La justicia del Reino significa dar
prioridad al compartir sobre el
producir para uno solo.
Santiago advierte a los que
sueñan con enriquecerse
Sant 12,13-15; Lc 12,18.
 Mencionaremos
varios documentos
de la Iglesia pero
2. aunque son docu-
mentos muy ricos,
Documentos de señalaremos solo
algunos aspectos del
la DSI sobre el trabajo que apare-ce
trabajo en estos textos.
La lectura personal
de ellos mostrará
toda su riqueza.
1. 1.1. Gaudium et Spes del
Vaticano II (1965)
Señala tres temas claves
respecto al trabajo:
La prioridad del trabajo sobre los
otros elementos de la vida
económica (capital…),
La remuneración justa y familiar
del trabajo, y
La participación activa en la
empresa.
(Leer las pág. 37-38 del libro de
texto).
1.2. Mater et Magistra de
Juan XXIII (1961)
Desarrolla más el tema de la
participación activa de los
trabajadores en la empresa.
Se preocupa particularmente de
la dignificación del trabajo
agrícola. (Pág. 38-40).
1. 1.4. Doc. Santo Domingo
1.3. Doc. Medellín (1968) (1992)

Señala la importancia de la Habla de un deterioro de la

sindicalización obrera, y se situación de los trabajadores y
preocupa de la precaria el crecimiento del desempleo.
situación de los campesinos e (Pág. 43 del libro de texto).
indígenas. (Pág. 40-42 del
texto).
Recordar que Medellín es como
la aplicación del Vaticano II a la
realidad latinoamericana.
1. 1.5. Laborem Exercens 1.6. Centesimus annus de
de Juan Pablo II (1981) Juan Pablo II (1991)

Ve en el trabajo el tema clave del Plantea los nuevos desafíos des-

problema social en las sociedades pués de la caída de los gobiernos
industrializadas. comunistas de la Europa oriental.
Es la encíclica que más largamen-te Leer pág. 56-58.
trata el tema del trabajo.
Habla también de los sindicatos.
No hay que olvidar que 8 años después
son los sindicatos polacos los que
hacen saltar el régimen comunista
soviético en Europa del Este.
(Leer las pág. 44-56 del libro de texto).