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CICLO: OCTAVO
INTEGRANTES:
La tabla 4 indica que, cuando se aleja el centro del SEV del plano de contacto a distancia d25
h,, el error de interpretación resulta aceptable (hasta + 5%). Pero éste aumenta con rapidez al
acercarse el centro del SEV al plano de contacto: hasta f 15 a f25% en la zona de valores
pequeños de la recistividad p, y hasta f 10 a & 50% en la zona de mayor resistividad.
Curvas de SEV e interpretación de las mismas para el caso de límite de
separación de los medios inclinado
En el ábaco GP-2 se tienen las curvas de SEV de dos capas para el caso en que la
superficie de separación entre ellas es paralela a la superficie exterior. En la
práctica esta situación se encuentra muy raramente. Habitualmente, los sondeos
eléctricos verticales se realizan sobre medios que poseen el límite de separación
inclinado. Tan sólo para facilitar la interpretación se supone que estos límites son
horizontales en cada punto de SEV.
Por ello es de interés práctico el estudio de las variaciones de la resistividad
aparente en un sondeo eléctrico de dos capas con límite de separación inclinado.
La solución teórica de este caso ha sido daqf por L. M. Al'pin y A. N. Tijonov. Las
curvas calculadas por las fórmulas de Al'pin están recogidas en una colección de
ábacos de tres capas editada por un grupo de geofísicos estatales (GSGT) en el
año 1941 y en el libro de V. N. Dajnov.
La profundidad sumergida de la parte horizontal del modelo
variaba de 1 a 3 cm. Los electrodos de corriente (AB, hasta
50 y 80 cm.) estaban alineados paralelamente a las aristas
de las dos caras.
De las condiciones de cálculo de los ábacos NZL (p, = 00) a
las condiciones de estas experiencias existe tal diferencia de
que en estas Últimas la línea de contacto no aflora en
superficie
El estudio de los errores cometidos al interpretar las curvas de SEV de dos capas realizado
sobre límite de separación inclinado, como si la estratificación en cada punto de SEV fuera
horizontal, nos conduce a lo siguiente :
1.9) Los valores de p2/p1obtenidos son sensiblemente más bajos que los verdaderos. Los errores
aumentan al mismo tiempo que p2/p1, y sobre todo con el valor del ángulo de inclinación a
Los errores en la determinación de la profundidad del plano de separación, en todos los casos,
tienen signo negativo (las profundidades resultan disminuidas); como era de esperar, los errores, a
igualdad de las restantes condiciones, crecen al aumentar el ángulo de inclinación
En el valor del error, influye no sólo el ángulo a, sino también la relación p2/p1; para un mismo
ángulo a, los errores disminuyen al hacerlo p,/p,. Esta influencia es menos visible al aumentar
Para p2/p1 = ∞, el orden del valor relativo de error en la determinación de h, corresponde con el
valor de a. Así, para a=22O30' el error es de casi 20%; para a!=45O es de un 41%, etc. Esto permite,
en el caso de conocer el valor del ángulo de inclinación del plano de separación y para p2= ∞,
valorar de antemano el orden de magnitud del error, al utilizar en la interpretación de las curvas de
SEV el ábaco normal de dos capas.
Si en los resultados de la interpretación de las curvas de SEV mediante el ábaco normal de dos
capas se considera, no la profundidad h medida en la vertical a la superficie, sino la h' medida en
una perpendicular al plano de separación inclinado, entonces los errores relativos de profundidad
son sensiblemente menores que en el primer caso.
Si las curvas de SEV, para un corte de dos capas con plano de separación inclinado se
interpretan mediante los ábacos NZL o NZL', sin conocer de antemano el ángulo de buzamiento
a, entonces sobre los errores del valor de la profundidad del horizonte de apoyo al utilizar en la
interpretación las curvas de estos ábacos, se puede decir lo siguiente:
Si reunimos todas las curvas de los ábacos NZLO, calculadas para a! = 90°, y las completamos
con las gráficas calculadas para este mismo caso para valores de p2/pl < 1, obtendremos un
ábaco que no se diferencia del denominado CV-2s (fig. 38), que se incluye en la colección.
El ábaco CV-2s corresponde a las curvas de sondeo con alineación de electrodos A6 paralela al
contacto vertical de dos medios. La rama ascendente de las curvas, para p2/p1 > 1, tiende
suavemente a determinados valores asintóticos p < p2 (por ejemplo, en caso de p2/pl = 00 este
valor es igual tan sólo a 2 pl). Para p,/pl p, (por ejemplo, para p2 = 0,Ol p,, ahora el aspecto de las
curvas teóricas de SEV en el caso de límite vertical de separación de dos medios con. alineación
de electrodos perpendicular a este contacto.
El ábaco (CV-3s) de curvas calculadas de SEV corresponde a medios con diferentes
relaciones p,/p,, mayores y menores que la unidad (fig. 39). En el eje de abscisas aquí, como
en los ábacos NZL’, se tienen los valores AB/2d, siendo d la distancia desde el centro del
dispositivo a la línea de afloramiento del plano de contacto.
Las curvas de este ábaco son bastante parecidas entre sí, a pesar de la gran diferencia de
valores de p,/p, (desde 1.5 a 00 y desde O a 0.8). Ello confirma la impresión previa de que la
resistividad pz no influye demasiado en este caso en los valores de la resistividad aparente.
El contacto vertical empieza a influir visiblemente en la gráfica, haciendo crecer la
resistividad aparente (para p,/p, > 1) o haciendo descender su valor (para p2/p1 < 1) cuando
AB/2 es del orden de 0,5 d. El valor más alto (para p2/p1 > 1) o más bajo (para p2/p, < 1) de
p/p, se obtiene al pasar el electrodo de alimentación por la línea de afloramiento del plano de
separación (AW2d = 1). Con p2 = 00, el valor máximo de p/p, es del orden de 1.45 y el
mínimo, para p2 = O, del orden de 64 0,55. Al aumentar la separación del dispositivo
electródico, el valor de p se aproxima asintóticamente a p,.
Al interpretar curvas de SEV correspondientes a este caso se puede, por la situación del
máximo (o mínimo) en la gráfica, juzgar sobre la presencia de un contacto vertical de las
rocas y el lugar de afloramiento del mismo sobre el terreno. 6 ;; 2- 3- Para poner de
manifiesto claramente cómo se diferencien las curvas de SEV realizadas en un mismo punto,
con alineaciones perpendiculares y paralelas a la línea de afloramiento del plano vertical de
separación de los medios, se han dibujado en la figura 40 las curvas, sacadas de los
correspondientes ábacos, para los valores extremos de P,/Pl (Oo Y 0).
EJEMPLOS DE LOS ÁBACOS DE CURVAS DE SEV DE DOS
CAPAS
Los ábacos de curvas de SEV de dos capas se pueden utilizar no sólo para determinar la profundidad del
horizonte de apoyo, sino también para resolver otros problemas prácticos relacionados con la exploración
eléctrica del corte de dos capas. Supongamos que se quiere calcular la variación de la resistividad
aparente p obtenida por perfilaje, con dispositivo AMNB de separación prefijada, si, en caso de ser
constantes los valores p, y p1 el espesor de la primera capa crece desde un extremo a otro de la línea
investigada. Esta situación se encuentra, por ejemplo, cuando se presenta una subida gradual del relieve
en el terreno que exploramos. Supongamos que en tres puntos consecutivos de la línea del perfil (fig. 41)
El espesor de la primera capa h,, en unidades relativas, es de h' = 1; h, = 3; h,
resistividad ec entre la primera y segunda capa también permanece constante, pJp, = 9.
Supongamos que el perfilaje se realiza con dispositivo AMNB, con AB/2=20h1 y MN
suficientemente pequeño.
INTERPRETACIÓN CUALITATIVA DE CURVAS DE SEV DE DOS CAPAS
En la exploración eléctrica del corte de dos capas y mediante el proceso de interpretación cualitativa
de las curvas de SEV se pueden formar perfiles y mapas de resistividades p1 y p2, de resistividades
aparentes para una o varias distribuciones A6 y de conductancias longitudinales totales S (si el
horizonte de apoyo tiene resistividad infinita). En este caso de p2=oo, como sabemos, el valor de la
resistividad aparente, indicado por la rama derecha asintótica es siendo p, y h, la resistividad y
espesor de la primera capa. Por consiguiente, en los mapas de resistividad aparente a las zonas de
valores altos de p, para p, constante, corresponderán terrenos en que el horizonte de apoyo se
acerca a la superficie y, al .contrario, a una disminución de 6 corresponde un aumento de h,, es
decir, el hundimiento del horizonte de apoyo. Examinado el ábaco de dos capas, se puede concluir
que esto ocurre en todos los casos en que pz>pl. El mismo ábaco indica que, para p2 < p,, las zonas
de valor alto de 6 corresponden a regiones en que el sustrato está más profundo. Estas indicaciones
son válidas siempre que los parámetros p, y p2 no varíen. Si el valor de cualquiera de estos
parámetros o los dos varían, entonces las variaciones de p, para AB fijo, no corresponderán a las
variaciones de la profundidad del horizonte de apoyo. En este caso, se puede llegar a una
interpretación falsa de los mapas y perfiles de resistividades aparentes. Para evitar esto, es Útil
hacer perfiles y mapas de iguales valores de p1 y p2.
INTERPRETACIÓN CUALITATIVA DE CURVAS DE SEV DE DOS CAPAS
GRACIAS!!!